Disclaimer: Nada de lo que reconozcan me pertenece.

Nota: Antes que nada, y dado que me lo están preguntando constantemente. Sí señores y señoras, los niños de Lourdes Malfoy son hijos de Harry Potter, el por que es necesario ponerlos, saldrá más adelante (son parte primordial de la historia), el por que Harry no sabe ni de la existencia de la chica y mucho menos de los niños, tmb saldrá más adelante. No desesperen! Y gracias por leer!


There is always a bit of hope

Rising on our children

They are the future, the reality.

And there is sometimes a thing we can do

To help the others to live better than us


Lunes. Cerca de las siete de la tarde. Hora en que el sol se oculta.

El sol estaba en el horizonte, faltando pocos minutos para que se ocultase y, sin embargo, él estaba ahí, dentro de la casa de acampar por órdenes directas de sí mismo. Dentro de poco llegarían los vampiros. Sentía que por sus venas corría la adrenalina, esa emoción que sentía por conocer a alguien que no fuera Andylas, Gandielo, Azur, vaya, alguien que no perteneciera a los Soul On Liberty. Aunque no sabía como actuar con ellos y eso lo ponía de cierta manera nervioso. Landy le había dicho que no tenía razón para estar nervioso y que estaba siendo exagerado; Azur le dijo que los vampiros eran, de cierta forma, muy fríos a primera vista y que no debía mostrar signos de nerviosismo; Magog le aconsejo que mejor mantuviera su distancia y esperara a que ellos le hablaran. Y ahora estaba sentado dentro de la tienda que compartía con Magog.

Y sí uno asomaba su cabeza fuera de la casa de acampar, podía ver que había más, alrededor de unas 17 tiendas de acampar poblaban el claro, ahora alumbrado por las dos pequeñas fogatas que ardían suavemente y la Luna y sus amantes, las estrellas. Harry aún recordaba como el problema que se creo cuando se comenzaron a armar las tiendas. Vaiou, Andylas y Magog se empeñaban en levantar un dedo, decir un hechizo y que la casa quedara armada mediante magia. Por otro lado, Landy y Azur se convencían de que debían de hacerlo de forma manual para que fuera más divertido (es decir, sin magia) mientras Harry se dedicaba a preparar los desayunos. Y fue tan grande el problema que los adultos se la pasaron discutiendo y al final, después de que Harry terminara al desayuno, fue él quien tuvo que armar las tiendas solo. Cabe decir que, para cuando los Liberty llegaron a una conclusión, Harry ya estaba levantando la última tienda y estaba exhausto. Se tomo tres horas de siesta para reponer energías dado que había armado las casas de acampar de forma manual. Y Landy se negó a dirigirle la palabra por que según ella, le había quitado su ilusión de armar las tiendas y, con ella, se había ido la ilusión de vivir. Claro esta, el joven Potter no la tomo en cuenta. Se despertó tiempo después para recibir consejos sobre como tratar a los jóvenes vampiros y decidir que era mejor quedarse en la tienda de acampar por lo que restaba de la semana. Aunque Vaiou insistía en que era mejor que se comenzara a relacionar con sus futuros compañeros. Y ahora…

… Ahora podía escuchar claramente la voz de Landy y Andylas discutiendo por quien sabe Dios que cosa y como Magog intentaba callarlas ganándose insultos por parte de Landy.

-'¡Ya cállense las dos¡Me tiene harto de sus infantiles discusiones!'- Harry sonrío ante la frase que pronuncio Magog. Era en momentos como esos que agradecía estar fuera del alcance del ángel.

-'¿Y a ti quien te esta diciendo que escuches o intervengas¿¡Eh¡Imitación barata de ser vivo con alas de plástico que parecen de pollo!'- Y ahí iba Landy. Por supuesto, Andylas no se quedaba atrás.

-'¡Ya déjalo¡Si él quiere intervenir que intervenga¡Tú no eres nadie para mandarle o decirle que hacer y que no, vampiro!'-Harry negó con la cabeza. Siempre le calmaba de algún modo oír como se peleaban esos tres. A veces se le figuraba que escuchaba a varios niños pelear por una paleta.

Una cabeza se asomo por la entrada de la tienda. Harry sonrío y Vaiou entro.

-'Veo que te divierte escucharlos pelear, Iany'- Harry no pudo detener una pequeña risa que luchaba por escapar. –'Pero no es bueno que te quedes aquí adentro; ven, vayamos a ver como Azur les lanza un hechizo silenciador al trío peleonero.'- y dicho esto, Harry salió de la tienda olvidando por completo la llegada de los Vampiros y sin notar que el ángel, el hada y la vampiro ya no peleaban. Cual fue su sorpresa que al voltear a ver a Landy, Andylas y Magog con la esperanza de verlos pelear se encontró con varias personas de su edad. Todos pálidos, vestidos con trajes de cuero negro, el forro interior de las capas era de un verde oscuro. Contó con la vista cuantos eran y descubrió que eran alrededor de 26 gentes. Muchos de ellos no habían reparado en tanto su presencia como la de Vaiou.

Azur y Andylas buscaron con la mirada a su Líder y lo vieron a un lado de Harry. El medio elfo, sonriendo, les hizo una seña para que se acercaran. Vaiou asintió y empujo levemente a Harry para que caminara y éste, tragando saliva discretamente, comenzó a caminar despacio. Sus verdes ojos no se movían del grupo de jóvenes.

Magog y Landy se presentaban ante los estudiantes. Sus jóvenes caras frías e indiferentes. Y para cuando Vaiou y Harry llegaron a donde ellos, Azur y Andylas comenzaron a presentarse.

Landy y Magog se acercaron discretamente hasta donde estaban el elfo y Harry.

-'¿Y donde quedo el "Mejor me quedo dentro de la tienda, Landy"?'- pregunto la vampiro una vez estuvo lo suficientemente cerca del niño-que-vivió.

-'¡Oh, Cállate!'- exclamo por lo bajo fulminándola con la mirada. Y ahora que se ponía analizarlo, para cuando Vaiou entro a la tienda Magog, Andylas y Landy habían dejado de discutir y Vaiou había insistido en que estuviera en el recibimiento… Oh, joder. Vaiou le había jugado sucio para sacarlo de la tienda. Mierda.

-'Y detrás de ustedes pueden ver a Vaiou, Líder de los Soul On Liberty'- Harry salió a tiempo de sus pensamientos para oír como Azur decía esta última línea de su pequeño e improvisado discurso.

Los jóvenes se voltearon para ver a el que sería su futuro líder y vieron con cierto asombro y curiosidad que había un joven más ahí.

-'Buenas Noches, jóvenes'- comenzó Vaiou. Los alumnos lo miraron pero no dejaban de lanzarle miradas discretas y curiosas a Harry. Antes de partir les habían dicho que serían los primeros en llegar; entonces ¿Dónde entraba ese joven? No era elfo y no tenía la misma aura que tiene un ángel o demonio. Su cara no denotaba cansancio y no olía a Licántropo. Tampoco olía a sal y descartaron el hecho de que fuera tritón. Sus ojos no tenían el brillo característico de un Hada. Y, lógicamente, no era vampiro. –'Les doy la bienvenida al bosque Natierón. Y como Azur dijo, Mi nombre es Vaiou y líder de los Soul On Liberty.'- observo con cierta satisfacción como Harry buscaba una manera de salir de ahí y como los jóvenes le miraban curiosos, perdiendo sus mascaras de frialdad. –'Y el joven aquí a mi lado es Harry Potter, perteneciente a… la raza humana'- Harry encontró a una luciérnaga que pasaba por ahí muy interesante mientras los jóvenes abrían sus ojos al máximo. –'El también será parte del alumnado cuando las clases hayan empezado ¿Entendido?'- los vampiros asintieron sorprendidos. –'Muy bien. Creo están cansados, jóvenes. Lo mejor será que se retiren a dormir ya.'- Harry agradeció internamente que Vaiou los mandara a dormir; los ojos de los chicos no se despegaban de él. –'La tiendas de acampar que ocuparan son aquellas de color verde oscuro. La primera tienda es para las chicas y la otra para lo chicos.'- Y con esto, todos se fueron a dormir. No antes de que una joven de cabellos rubios se acercara al joven mago y le diera un beso de buenas noches susurrándole al oído que era muy guapo, dejándolo desconcertado y con las mejillas ardiendo mientras Landy reía a mandíbula abierta por lo desvergonzada que era la joven.


Sus verdes ojos recorrieron la larga calle ¿Cómo es que estaba ahí¿No se suponía que debería de estar en la tienda de acampar intentando conciliar el sueño? Abrió la boca sorprendido al ver el Número cuatro de esa calle. Era Privet Drive.

Unos gritos lo sacaron de su mente. La gente corriendo asustada y llena de terror. Harry vio con asombro y miedo como varios Mortífagos aparecían y comenzaban a lanzar maldiciones imperdonables y hechizos de magia negra a diestra y siniestra. La gente caía al suelo chillando de dolor bajo los efectos de la Cruciatus; otros, bajo la Imperius asesinaban a sus familias y amigos más cercanos. Al cabo de un rato, toda la calle estaba cubierta de sangre. De los buzones escurrían a chorros la sangre y en el cielo se podía ver la Marca Tenebrosa, brillante y terrorífica.

Harry se tuvo que tragar las ganas de vomitar al ver brazos, piernas, dedos, manos, anatomías del cuerpo separados de éste. Inclusive vio como una mujer era asesinada por su marido, la mujer tenía el cuerpo lleno de mordidas, desnuda; el cuello lo tenía destrozado –cortesía del marido con la ayuda de un pica hielos- y parecía que los dedos se los había arrancado a mordidas.

Caminaba y veía a lo largo de la calle el peor de los escenarios que hubiese visto nunca. Su vista se nublo cuando llego frente a la casa en la que paso su infancia. Su cuerpo se negaba a entrar pero su mente le exigía pasar por el marco de la puerta destrozada.

-'Así que aquí estas, Harry'- siseó una voz impregnada de odio –'Y yo que pensé que el vejete ese amante de los muggles te tenía mejor cuidado'- Los ojos de Harry ardieron con ira y temor; los ojos rojos lo miraron divertidos.

El silencio fue lo que le contesto.

-'¿No dices nada, mi niño?'- replico Voldemort con desdén, remarcando el 'mi niño'. Harry cerró los ojos y, trago saliva, intentando controlarse. –'Vamos, Harry. ¿No me dirás que no les deseabas la muerte a esos asquerosos muggles¿Eh?'- Harry solo hizo una mueca, intentando no refutar sus palabras. –'Dicen por ahí "El que calla, otorga" Potter'-

-'Y yo no sabía que fueras lo suficientemente inteligente como para grabarte un dicho muggle, Tom'- gruño Harry con evidente sarcasmo.

-'Niño Insolente. Aprenderás a no burlarte de tus mayores'- Harry vio con cierto temor como le apuntaba con su varita. –'Crucio'- y en lo único en lo que el joven mago pensó fue en el dolor que su Némesis le infligía.


-'¡Harry¡Harry¡Despierta!'- Azur sacudía al joven intentando que este despertara pero, mientras tanto, solo podía verlo convulsionarse en el suelo como si le estuviera dando algún ataque. –'¡Abre los ojos, Harry!'- El mago revelo dos obres verdes de golpe. Su respiración era agitada y temblaba furiosamente. Vio como Azur y Landy lo miraban preocupados. Landy se acerco y le ayudo sentarse en la improvisada cama. Harry creyó estar soñando cuando vio que los ojos de la vampiro estaban llenos de lágrimas. Sintiendo que lo examinaban, levanto la miraba y sus ojos se toparon con los grises de Azur.

La puerta de la tienda se abrió y Magog entro cargando un botiquín de primeros auxilios seguido de cerca por Vaiou. Andylas se había quedado afuera para calmar a los jóvenes.

Eran cerca de las tres de la madrugada. Azur se había levantado hacia unos minutos para salir un rato a ver las estrellas a causa de que desde pequeño dormía menos de seis horas seguidas cuando escucho que un grito agudo rompía el pacifico silencio; busco el lugar del que provenía la tienda y se encontró con que era la que ocupaban el mago y el ángel.

Se dirigió raudo y veloz al lugar. Vaiou, Landy, Andylas y unos que otros jóvenes vampiro habían salido de sus tiendas para enterarse de quien gritaba y por que. Azur se topo con Magog que salía corriendo de la tienda rumbo a la casa de acampar que ocupaban Vaiou y Azur. Magog se había negado rotundamente a dormir en otra tienda en donde no durmiera el mago Potter. Así, pues, estaría al tanto de su paciente (Vaiou habióse insistido en que Harry ya no necesitaba cuidados, que después de 3 meses estaba en perfecto estado. Magog solo lo silencio que una mirada gélida).

Azur entro a la tienda y vio a Harry convulsionándose y cómo este caía de sopetón en el suelo, dañándose el brazo izquierdo. Sintió que alguien entraba. Ni se preocupo en revisar quien era. Tomo al Harry convulsionante entre sus brazos.

-'¿Qué tiene?'- escuchó una voz temblorosa que murmuraba en su oído. Landy observaba a Harry con sus ojos verdes oscuros. Y Azur se sorprendió de verla tan vulnerable y tan frágil. Preocupada y temerosa.

-'No sé'- se oyó decir. Su voz le pareció distante. Y una convulsión más ruda y violenta de Harry hizo que regresara su vista al joven que luchaba entre sus brazos.

Hizo varios intentos por despertarlo hasta que al final, cuando Magog y Vaiou entraron a la tienda, abrió sus ojos de golpe.

(I)

Harry miro a todos lados, desesperado. La cicatriz le dolía y sentía que la cabeza estaba a punto de partírsele en dos. Sus ojos se toparon con una Landy llorosa, un Azur asustado, un Magog desesperado y un Vaiou que lo miraba curioso.

-'¿Por que te esta sangrando la cicatriz, Harry?'- cuestiono Azur desconcertado. Harry se llevo de inmediato una mano a la frente, al lugar de la cicatriz y sintió húmedo. La retiro inmediatamente y sus ojos se agudizaron al verla llena de sangre… su sangre.

-'¿Cómo te encuentras, Harry?'- Magog comenzó a sacar varios tipos de medicina y potajes.

Harry lo miro, con una gruesa capa de sudor frío bajando por su frente hasta llegar a su barbilla, la cara completamente llena de sangre. Aún estaba fresco el miedo y el dolor que había sentido cuando Voldemort le lanzó la Cruciatus. Rezó internamente por que los Dursley estuvieran a salvo, pero el dolor de la cicatriz decía otra cosa… decía lo contrario.

Entre Azur y Landy le ayudaron a sentarse en su improvisada cama. Magog comenzó su chequeo médico. Vaiou salió de la tienda por que los vampiros se comenzaron a inquietar en exceso. Olían el miedo, el terror y la angustia de Harry. Y eso, en vez de calmarlos, los inestabilizaba. Vaiou al fin alcanzo la tienda (que estaba una tienda más a la derecha) en donde Andylas estaba teniendo una ligera discusión con un joven de cabellos color paja.

-'Tranquilos'- fue lo primero que dijo al llegar. Andylas dejo de discutir con el chico y le ordeno que fuera a dentro de la tienda para poder hablar con Vaiou y enterarse de que fue lo que sucedió. –'El que grito fue Harry y Magog ya lo está atendiendo. Al parecer tuvo un sueño muy vivido que altero sus nervios'- Le guiño un ojo al joven y este entro a la carpa, pues se había rehusado a entrar hasta no saber que fue lo que paso.

El chico de cabellos color paja entro y una oleada de jóvenes se abalanzo sobre él. Todos pálidos; todos curiosos. Los chicos querían saber de quien provenía ese olor.

El joven suspiro.

-'El Humano'- dijo a sus atentos compañeros. –'Al parecer hubo algo que lo provoco; lo más seguro fue una pesadilla o algo por el estilo'- Los demás se miraron entre sí confundidos.

-'¿Estás seguro, Kalin?'- pregunto otro joven. Kalin asintió. Miro a su entrono. Los demás lo miraban extrañados y Kalin comprendió el por que: No sabían nada de este humano (si es que el señor Vaiou tenía razón en que lo era) pero a todos les había incomodado su mirada cuando lo presentaron, aunque estuviera tímido y con vergüenza. Sus ojos mostraban una madurez que no debía de tener a esa edad, también eran de un verde extraño. Y pudo recordar perfectamente el color de sus ojos cuando Jacine se acerco a darle el beso antes de retirarse a dormir. Eran de un verde brilloso, como una esmeralda, pero tenía reflejos rojos y negros e inclusive plateados. Jacine le había dicho que se sintió incomoda de haberle dado el beso, por que su mirada, aunque tímida, desconcertada y vergonzosa, le había producido escalofríos por toda la espina dorsal.

Definitivamente, en ese humano habitaba un extraño pasado, y había algo oculto en él, que tal vez ni el mismo supiera.

Una cabeza se asomo por la entrada de la carpa seguida de varias más. Kalin se dio cuanta de esto y sonrío. Vampiras. Siempre querían estar metidas en todo. Les hizo una seña para que entraran en silencio pues al parecer Vaiou y Andylas seguían afuera discutiendo. No los oía, claro, pero los podía oler.

-'¿Qué pasó?'- pregunto una joven. Kalin suspiro y les dijo lo mismo que a sus compañeros auque tuvo que repetirla carias veces más por que las jóvenes no entendían.

-'¿Nos quieres dar a entender que una pesadilla lo puso en ese estado?'- pregunto incrédula Jacine al final. Las demás chicas solo se miraron entre sí asintiendo al comentario de su compañera y líder. Mientras los chicos negaban con la cabeza. ¿Qué las vampiras no podían captar las cosas a la primera?

-'Sí, Jacine, eso quiero darte a entender. Espero que es a lo que tullamos cerebro lo capte ¿Comprendes?'- pregunto Kalin sarcástico.

Jacine no se digno a contestar eso y le dirigió una mirada indignada. Algunos rieron con disimulo.

-'Bueno'- hablo Hartuna intentando desviarlos del tema. –'¿Y que piensan sobre él?'-

-'Qué es muy guapo'- contestaron varias chicas y chicos a coro. Kalin y el que se encontraba a la izquierda se pasaron la palma de la mano por toda la cara. A veces podían ser tan inmaduros.

-'No se refiere a eso'- dijo Kalin.-'¿Qué piensan de él en el sentido de carácter?'- se volvió a preguntar especificando la cuestión.

Una risa burlona se escapo de los labios de un joven alto y delgado sus cabellos rubios le tapaban sus ojos violetas.

-'Dime, Kalin ¿Cómo esperas que te respondamos esa pregunta si tan solo lo hemos visto durante menos de quince minutos y el hecho de que el no hablo?'- pregunto con sorna y los varios que se encontraban a su alrededor asintieron apoyando su pregunta.

Kalin frunció el ceño. Había olvidado ese pequeño detalle. Y estando a punto de contestarle una mata de pelo negro desordenado se asomo.

-'Tía Landy'- exclamo una de las chicas haciendo que la aludida frunciera el entrecejo. La muchacha la iba a abrazar pero al ver su mirada se detuvo a unos cuantos pasos.-'Emm ¿Tía Landy?'- Landy entro de llano a la tienda y los miro a todos. Y ciertamente no se había esperado ver a las chicas ahí. –'¿Qué pasa, tía Landy?'- pregunto extrañada. Landy dejo de fruncir y levanto una ceja con elegancia.

-'¿Qué que me pasa, adorada sobrina?'- repitió la pregunta Landy con una sonrisa macabra y cínica. La joven solo la vio asustada. Cuando Landy tenía esa sonrisa no se auguraba nada bueno. –'Me pasa que esta es la tienda de chicos y tu y tus compañeras están metidas en donde no les corresponde'- Las chicas rieron nerviosamente y salieron de la tienda como alma que lleva el diablo. Landy solo sonrío perversamente. Volteo a mirar a los chicos.-'Muy bien, señores. Si van a estar despiertos no hagan mucho ruido, Harry todavía esta inquieto y necesita tranquilidad y ustedes van a estar en la llegada de los elfos'- protestas por parte de la juventud-'Me vale un pepinillo si quieren o no. No es opción, es orden. Ahora, o se duermen o no hagan tanto ruido'- Así pues, Landy salió para irse a su tienda.

Mientras se acostaba, no puedo evitar recordar a Harry y el estado en el que se encontraba.

Flash Back

Después de que Vaiou hubiese salido, toda la tienda estaba en silencio. Azur y Landy se dedicaban a ver preocupados como Magog atendía al joven mago.

Harry no había dicho nada, pese a las insistencias de Azur y Landy. Magog habióse silenciado con un hechizo para que no hablaran, pues era así como se dedicaban únicamente a ver la escena en silencio. Unos cuantos minutos más y Harry tenía al cara limpia y los ojos apagados. Magog les levanto el hechizo a los dos y se dedicaron a observarlo pidiendo una explicación. Al ver que no iba a decir nada, Azur se acerco y le abrazo con cariño paternal. Esto fue la bomba. Harry comenzó a llorar, pues el abrazo le había recordado con quien había pasado su infancia y, por consecuente, lo que había soñado.

Landy se dedicaba a ver de lejos la escena dado que no sabía que hacer o decir. No le habían tocado ese tipo de situaciones a ella, y siendo fría y sarcástica, esto la desestabilizaba al cien por ciento. Observo y escucho en silencio como Azur le iba sacando de poco a poco a Harry lo que desbarato los nervios; oyó, asombrada, lo que había soñado. No que supiera muchas cosas sobre el muchacho, claro, pero sabía por boca de Magog que se había intentado suicidar y para llegar a ese nivel de desesperación le debió pasar algo realmente trágico y doloroso. Al final, cuando Azur le pregunto quien era el mago que lo torturo, Harry le respondió en un siseo que su nombre era Tom Marvolo Riddle pero se hacía llamar Lord Voldemort pero después de ahí no quiso pronunciar nada sobre como lo conocía o por que le hacía eso. Observo con una ligera mueca en los labios como Azur le decía que se volviera a dormir y como Magog lo tapaba y le lanzaba un hechizo para dormir sin tener que soñar. Salió de la tienda en silencio sin darse cuenta que Azur la miraba con un brillo extraño en sus ojos.

Fin flash Back


There are tears

And nothing you can do…

It's supposed you will help me

To fin the correct path

And lead me to a Final Dream

Don't leave me here

Where all is darkness and loneliness