CAPITULO 19
TE QUIERO CON TODA EL ALMA
Hemos llegado.-anuncio William mientras Candice asentía, se bajaron del auto y ella se estiro con gusto.
¿Tienes hambre?-
Un poco, pero mejor caminemos para ir viendo el lugar.-respondió ella sonriente tomo su cámara porque deseaba tomar algunas postales así que tomo la cálida mano de William para seguir por la costera.
La rubia se sintió agradecida de haberse puesto pantalón porque la brisa fresca le helaba un poco, caminaron sin decir nada uno junto al otro lo que había pasado la noche anterior les estaba lanzando a una nueva aventura.
Estuve pensando, ¿Cuánto tiempo te quedaras acá?-El rubio quien tomaba su mano sabía que ella tenía sus dudas y en cierta parte el también.
Te he de confesar que aún no se.-Ella solo suspiro.-Se supone que he venido por una oferta relacionada para la promoción de los lugares turísticos en Australia.
Son los promocionales que me habías comentado.-el asintió mirándole de reojo.
Si son de la empresa, lo cierto es que se dio la oportunidad encontré un socio y bueno nos pusimos a trabajar las cosas parecen funcionar…sin embargo sé que tal vez sea más práctico para mi regresar a Sídney.-
Candice no sabía que pensar porque si entre ellos las cosas estaba funcionando muy naturalmente, pero tarde que temprano o Albert tendría que tomar la decisión de quedarse o regresar por sus negocios.
Siéndote honesto esto me pone un poco intranquilo porque estaba totalmente concentrado en la publicidad y bueno ahora siento que mi prioridad ha cambiado.-le miro a los ojos haciendo que la rubia se ruborizaba y le miro desde la misma forma, él se inclinó para besarla tiernamente en los labios.-No sé qué pase, pero lo único que deseo es que estés a mi lado.
Tengo el mismo deseo que tú. -Respondió ella acariciando su mejilla mientras le sonreía. -¿Quieres ser mi modelo?
¿De qué hablas?-contesto juguetón
Vamos se mi modelo, quiero tomar unas fotos pero no hay gente acá.-El negó soltando su mano mientras la rubia divertida tomaba su cámara para fotografiarlo rápidamente entre negativa y risas.
Obtuvo algunas fotografías muy buenas del rubio quien le abrazaba mientras miraba las fotos riéndose de lo que estaba haciendo, la verdad es que se sentía muy cómodo con ella entre sus brazos y ahora mismo pensar en regresar a Australia le costaba un poco de trabajo…lo que menos deseaba era estar sin Candice a su lado.
¿Qué tienes?-le pregunto Archivald a su esposa mientras ella solo revolvía la taza frente a ella.-¿Te sientes mal?-
No, estoy perfectamente bien.-
¿Estas segura?-ella asintió mientras su esposo se sentó frente a ella con el desayuno servido.-Cuéntame que esta maquinando esa cabeza tuya.
Estoy preocupada por Candice.-soltó mientras su esposo solo miraba el plato con el desayuno lo cierto es que él estaba confundido porque cuando les miro besándose y después se enteró que era el ex marido pues le hizo tener muchas dudas…no podría negar que el tipo no le caía nada bien y a pesar de que era ya pasado pues le resultaba absurdo que estuvieran juntos de nuevo.
Ella es una adulta independiente que sabe lo que hace.-Annie rodo los ojos.-Creo que más bien es que tú eres demasiado chismosa y lo que quieres es hacer cotilla.
¿Yo cotilla?-el asintió.-Me ofendes.
Come que se enfría, cuando ella quiera hablarte de lo que pasa en su vida lo sabrás…no antes.-comento Archie.
Creo que no lo hará en estos momentos.-rio pícaramente.
En ocasiones me pregunto.-
¿Cómo me case con esta pervertida?-ella rio mientras el rodaba los ojos y la pelinegra se acercaba para besarlo.-Amo el anal tanto como tú.
Las mejillas del castaño se ruborizaron intensamente, pues Annie era una mujer de una mente muy abierta y de espíritu libre…a pesar de eso esas confesiones en el café de la mañana solían destantearle un poco.
¿Desayunamos?-comento serio y avergonzado de tal afirmación.
Desayunamos.-contesto la pelinegra sonriente, había logrado hacer que su esposo se escandalizara desde temprano…pero si definitivamente tenía una larga charla con su amiga.
Patricia estaba mirando el televisor mientras su hijo dormía a su lado.-¿Quieres waffles para desayunar?.-
Si está bien.-comento la castaña acariciando la espalda de su bebe.
Sabes había pensado que tal vez deberíamos de ir a visitar a Candice a Nueva York para estas fiestas decembrinas.
¿Estás seguro de esto?-ella enarco una ceja pues ahora con dos hijos pequeños la logística se complicaba un poco.-Si cuando vamos a casa de tus padres salir es un caos.
Pero siempre será un caos cuando vayamos a cualquier parte y merecemos salir, ya me imagino en año nuevo en Times Square.-Paty negó.
Absolutamente no amor, hará un frio terrible y además no creo que sea buena idea llegar a invadir la privacidad de tu hermana con los niños.-
Por dios esposa, te has vuelto una amargada.-ella comenzó a reír.-En que momento nos perdimos.
Vamos Stear no estés de melodramático, mejor pregúntale a ella cuales serán sus planes y tal vez lo pase en algún país del extranjero.
Lo sé, con su trabajo se la pasa viajando…en ocasiones envidio su vida pero después me doy cuenta que regresa a su casa y está sola.-
Ya encontrara al indicado, ya lo veras.-
En algún momento pensé que lo había encontrado y pues me equivoque.-dijo el mientras su esposa palmeaba el sillón para que se sentara a su lado.
Alguna vez has pensando que te encontraras tal vez con William y pues no sé, si se diera la oportunidad de que hablaran…-el castaño cruzo los brazos.- ¿Existiría alguna posibilidad de arreglar las cosas?-
Definitivamente y rotundamente no.-dijo tan seguro.
¿En serio?, estas tan dolido y despechado con el.-la castaña comenzó a reír mientras su esposo le miraba con enfado.-Pareces una novia quedada.
Mira Patricia, yo…-él se quedó callado.-Nunca pensé que esto pasara y me sentí muy decepcionado de su comportamiento con mi hermana, bueno sé que ella también pudo evitar esto en algún momento pero no creo que yo pueda tener una relación con él.
No te creo.-le dijo ella.-Sé que eres un malote por fuera pero por dentro tienes corazón de pollo.
En este caso no esposa, es diferente porque yo le dije que no hiciera mal las cosas con ella y lo hizo.-contesto Stear.
Venga, pero si ellos se arreglaron e incluso fueron amigos después del divorcio.-Stear suspiro pesadamente este tema en especial le incomodaba.-No veo porque no puedas tu solo terminar esa relación de buena manera, como quien dice cerrar el ciclo..
¿Por qué el repentino interés?-
Tú me hiciste recordar el tema, además no sé si ellos seguirán en contacto.-comento patricia mientras mecía al bebe que parecía querer despertar.
No lo creo, además Candice me hubiera dicho.-
¿Para qué decirte?, te pones como energúmeno mejor así.-contesto Patricia.-Será mejor que vayas a preparar el desayuno.
Está bien.-respondió Stear yendo a la cocina pero pensando en aquella amistad de tantos años que tuvo con William Andrew y claro la oportunidad laboral que le dio, sumado al hecho de que los padres del rubio le tenían en estima así que solo por unos segundos se sintió como un malagradecido…tal vez en su momento no debió de meterse en ese asunto, pero no pudo evitarlo era su hermana la ofendida…si tal vez solo tal vez su esposa tenía en parte razón.
Esto está muy rico.-menciono la rubia llevando un trozo de tocino a su boca.- ¿Quieres probar?
Si.-contesto William mientras masticaba el trozo de tocino que ella le daba, la verdad es que estaba crujiente como le gustaba la mesera al fin se acercó con su orden.-Esta bueno.
El sonriente beso su mano para por fin poder desayunar porque se habían equivocado con su orden, pero él ni siquiera se molestó al contrario espero paciente y ella claro se sorprendió un poco.
¿Qué piensas?-
Nada en especial, tenemos que fijarnos bien cuando es que hay una posibilidad de ver el sol en todo su esplendor.-el asintió.-¿Cuándo veras las casas?-
Hoy veré una la otra hasta mañana me mandaron un mensaje para reasignar la cita.-
Punto malo.-respondió la rubia mientras el solo asentía.
Así es, pero no pierdo nada con ver…al final tiene que quedar esto resuelto este fin de semana.-contesto William mirándola con atención, era tan hermosa mucho más que antes y se sintió de pronto mal por lo que había pasado entre ellos.-Te eche de menos como no tienes una idea.-dijo sorprendiéndola un poco.
Candice le miro a los ojos y tomo su mano.-Fuimos un par de idiotas, ¿Verdad?.-el asintió.-Tal vez que pasara todo eso nos sirvió de muchas formas.
Nos sirvió definitivamente, pero nos separó muchos años.-
¿Lo pasaste tan mal?-el suspiro hondamente, le gustaba mucho el poder decir y expresar lo que sentía.
Bebió un sorbo de café caliente.-Lo pase sin pensarlo, fue como ir solo viviendo en una película y bueno tuve buenos momentos negarlo suena absurdo…pero nunca me sentí del todo satisfecho con mi vida.
Yo jamás pensaba eso porque solo agarraba un dolor de cabeza.-ambos rieron.-Creo que ahora estoy al fin donde siempre quise estar.
Pienso lo mismo, sé que no hemos hablado sobre lo que los demás dirán sobre nuestra nueva relación.-
Candice llevo un trozo de comida a su boca.-Pues me siento un poco indiferente en estos momentos porque no es algo que esté pensando tanto…sé que tal vez mi familia me reñirá en especial mi padre junto con Stear.
Me da pesar que.-
Nada interferirá en las decisiones que yo tome.-le contesto ella apretando su mano.-Soy una mujer independiente, sé que es lo que quiero y lo que no.
Quisiera que esto no dañe lo que estamos construyendo en escasas horas.-el rio mientras la rubia se sonrojaba intensamente.-Dios me perdone por lo que voy a decir, pero de verdad que eres alucinante.
¿Alucinante?-
Si, hacer el amor contigo es la cosa más placentera del universo entero.-esas palabras le hicieron quedarse muda de pronto mientras su corazón latía rápidamente en su pecho.
Albert.-dijo sin más entre un largo suspiro porque de verdad es que ella era plenamente consciente de que estaba enamorándose cada día mas del rubio y a pesar de que le daba miedo…le daba mucha esperanza.
Candice.-respondió el mientras tomaba su mano para besar su palma logrando que ella pasara saliva por su acción tan personal.-¿Estará bien si vamos al hotel?.
No lo se, primero creo que debemos de ver la agenda.-el rubio asintió calmándose mientras terminaban el desayuno, las calles estaban heladas y un poco solas el mes de Octubre era preciosamente festivo y helado.
Salieron del restaurant para caminar un poco más mientras que Candice se concentraba en buscar los ángulos perfectos y tomar fotografías del inmenso océano en contraste con la bahía…media hora después estaban haciendo su chek list para poder entrar a la que sería su habitación.
La rubia miraba las fotos mientras que el señor le entregaba las llaves al rubio, caminaron tomados de la mano a la que sería su habitación del fin de semana…dejaron sus maletas para salir rumbo a la casa prospecto.
Era una casa de dos pisos a pie de playa, la alberca era bastante bonita y además de eso parecía casi todo nuevo…ella dio el recorrido con William tomada de su mano, esto le daba mucha seguridad porque solo le escuchaba hablar con la mujer que les mostraba la casa.
No era lo mismo de antes, ella conoció la mala parte de ese hombre y el contraste con el que le sostenía la mano era como si fuera otra dimensión…otro universo.
El soltó su mano para comenzar a ver los detalles sobre el pago pues al parecer esta casa era suficiente y lo cierto es que William no deseaba perder más tiempo en eso…no él deseaba tener todo el tiempo del mundo para estar con Candice.
La rubia con cámara en mano camino por las escaleras que daban a la playa y tomo varias fotos más mientras disfrutaba de la brisa fresca porque el sol estaba ya calentando…sonriente cerro los ojos mientras escuchaba el sonar de las olas…era simplemente perfecto.
Sintió unos brazos apretarla fuertemente, era su aroma…era el…el hombre que siempre espero…-Estas lista para irnos.
¿Qué ha pasado?-
He decidido por rentar este sitio.-la rubia se giró para abrazarlo pasando sus manos por su cuello mientras que el miraba el verde de sus ojos expresivos y alzándola cual pluma ligera del suelo la elevo para esta a su altura.
Cerro sus ojos para besar sus rojos labios lentamente mientras ella se aferraba a su fuerte cuello cediendo a su lengua que se deslizo lentamente en su tibia boca con sabor a menta…adoraba ser besada con tanta devoción, sintiendo como su respiración pesada exigía mucho más.
Se inclinó más profundamente logrando que ella gimiera un poco para traerlo a la realidad del lugar donde estaban…bajo el beso poco a poco hasta solo terminar besando su mejilla mientras Candice un poco excitada escondía su cara en su cuello y el parecía entender su vergüenza.
La acuno contra él mientras se calmaban, ahorita ellos estaban en una etapa donde solo existían ellos dos no había espacio para nada ni nadie más.-¿Estas lista?-Candice movió su cabeza mientras la depositaba lentamente en la arena.
William le acomodo el cabello que se estaba frente a su cara acariciando sus mejillas rosadas, adoraba saber que él era el culpable de ponerla así…era más preciosa ante sus ojos y era la única dentro de su vida.
¿Estás seguro de esta casa?-
Lo estoy, siendo honesto era mi primera opción y es que la otra casa es un poco más vieja, además de que si me reasignaron la cita es por dos razones…otro interesado o un desperfecto que no ha quedado.-la rubia entendía, ella había tomado un poco de experiencia en todo eso.
¿Señor?-le llamo la mujer para que vieran lo del pago y el tomo la mano de su acompañante para subir las escaleras, tenían que ir a las oficinas para poder cerrar el trato…entregarle recibos.
Subieron al auto para irse al lugar donde todo fue rápido y bueno cuando menos pensaron estaban libres para hacer las actividades que ellos quisieran…pero las actividades que ellos deseaban hacer se limitaban a permanecer en la habitación.
Mano de William se deslizo por el pecho desnudo de Candice amasando suavemente su pecho mientras ella le miraba expectante cuando sintió su húmeda lengua rosar su pezón cerro los ojos para disfrutar de su caricia.
El adoraba tenerla desnuda sobre la cama, ahora deseaba saborear cada parte de su suave anatomía llena de las mejores curvas del mundo…jamás existió una mujer como ella en su vida, nunca hubo un punto de comparación porque él sabía que Candice era la única.
Su mano se posó entre sus piernas blancas acariciando lentamente su centro de placer para soltar el pezón sonriente y comenzar a bajar lentamente por su ombligo hasta donde deseaba desde que la vio.
William.-dijo quedamente Candice con las mejillas arreboladas, la boca hinchada y los pezones sensibles…el acariciaba uno con suavidad mientras su lengua al fin probo su humedad salada…una vez, dos veces, tres veces mientras ella gemía quedamente.
Aún estaba demasiado sensible por la intensa sesión que tuvieron, sus genitales estaban un poco vulnerables ante el trato recibido…pero él deseaba escucharla gemir su nombre sin estar dentro de ella.
Su boca se quedó succionando poco a poco convirtiendo esas preciosas piernas de pronto en una prisión que se cerraban en cada embiste de su lengua…la mano de Candice se apodero de su cabeza la verdad que le daba mucha alegría saberla libre de guiarlo.
Ella pronto estaba ahí luchando por no caer presa de su ansiedad, recargada en sus codos mirándole atenta y cerrando los ojos cada que su lengua se deslizaba por su botón de placer…su respiración era pesada, errante, caliente.
Dios.-dijo con pesadez mientras la jalaba con determinación abriendo sus piernas lo más que ella pudiese pero estaba adolorida y se limitó aprisionar sus suaves pero al mismo perfectas nalgas para hundirse en su centro…lo logro…
Candice estaba perdida con todo esto era como si su cuerpo se desconectara…sensaciones inexplicables, sentimientos aflorando, suspiros hondos y calientes, deseos oscuros, secretos de amor…
Ella comenzó a gemir profundamente mientras el simplemente se dejó llevar succionando con más fuerza hasta que sus piernas se apoderaron fuertemente de su cabeza para que con sus manos se aferran de la cama.
Se sintió tan bien por regalarle un poco de cielo a la mujer que tanto anhelaba tener…
Buenas noches.-saludo Sebastián a su mujer besando sus labios.
¿Cómo te fue?-
Tengo mucho trabajo, estoy agotado y nunca es suficiente.-comento el mientras Pauna le sonreía.
Vamos no seas tan pesimista, ¿cenaras?-el asintió mientras dejaba las cosas en donde iban y tomaba rápidamente en brazos a su pequeño hijo quien sonriente le estiraba los brazos.
¿Corrió?-Pauna rio pues el niño ya caminaba.
Voló, se cayó y se levanto ha sido un día un poco aventurado para nuestro hijo.-comento Pauna sonriente.-Pero lo hemos pasado bien en el parque y en la revisión médica.
¿Está bien?.-pregunto un poco preocupado Sebastián mientras le acomodaba el cabello revisando su carita regordeta.
Esta perfectamente saludable y creciendo demasiado rápido.-contesto ella con un poco de melancolía mientras servía los platos en la mesa.
Vamos no te pongas así.-le dijo Sebastián sonriente.-Nuestro hijo es un niño feliz, más bien dime porque no cenaste.-
Te estaba esperando, pero comí una fruta.-respondió la rubia mientras tomaba asiento y el castaño dejaba a su hijo en el corral donde se entretuvo rápidamente con sus juguetes.
No hagas eso, ya es muy tarde.-comento el sentándose a comer el pollo a las finas especies, lo cierto es que se estaba acostumbrando poco a poco a las comidas estilo noche de restaurante porque su mujer era una chica de sociedad.
Pauna era una mujer empoderada como decían hoy en día, por el momento estaba en pausa porque había tomado la decisión de criar a su hijo y mudarse de país, entonces se dedicaba a la casa pero no por ello se martirizaba sino lo contrario disfrutaba de preparar cenas elegantes de la mano de su asistente en casa como solía llamarla.
La verdad es que a Sebastián si le había costado un poco de trabajo dejar que alguien más estuviera en su departamento, porque él había sido tanto tiempo autosuficiente que tener personal de limpieza le causaba cierto rechazo a la vida ostentosa que no le gustaba.
Pero amaba a Pauna y desde que salían entendía esa parte en ella, era lo normal porque así que creció en casa junto con nanas, personal de limpieza, mayordomo incluido además…además él no podría ponerse a ser tacaño con la mujer que le daría un hermoso hijo y ni pensó en ello.
¿Cómo les fue con la preparación?-pregunto él.
¿Te gusto?-Sebastián asintió.-Que bueno, porque pensamos Madeleine y yo que nos habíamos pasado de vino.
¿Tiene vino blanco entonces?-la rubia asintió.-No se siente el sabor, pero esta rico y la pasta bastante buena.
Pauna suspiro con alivio.-Que bueno que te ha gustado, pero dime te noto estresado… ¿Qué pasa?-
Pues tengo mucho trabajo, creo que llamare a Candice para venga a apoyarme porque hay trabajo para aventar para arriba.-
Estaría bien vernos.-comento Pauna quien sabía que su hermana estaba en Nueva york pero hasta el momento no le había dicho nada de que se hubiese encontrado con su ex mujer.
Le escribiré para que vaya organizando su agenda, ¿Cuándo vendrán tus padres?-
Aún no han decidió venir, Elizabeth me dijo que era complicado por los niños y claro el clima.-el castaño entendía esa parte.
Con dos hijos asmáticos no la juzgo, ¿Dónde quieres pasar navidad?-
Pues no lo sé aun, es la primer navidad de nuestro hijo y sé que tú tienes mucho trabajo.-
Aunque el clima sea horrible.-Contesto el castaño mientras reía.
Deberá acostumbrarse al país donde crecerá y bueno aun no tengo pensado nada, si nos toca pasarlo en nuestra casa para mi perfecto.-le contesto la rubia.
Me parece bien.-respondió el castaño mientras se levantaba para tomar una lata de soda.- ¿quieres una cariño?
Mejor dame jugo.-Sebastián saco el envase y tomo un vaso para ponerlo en la mesa mientras su chica se servía…el abrió su bebida con gusto.
Sabes hoy estuve pensando en que no se si en algún par de años tú quieras trabajar nuevamente.-Pauna bebió de su vaso.
No tengo pensado encerrarme en una oficina todo el día, ahora mi prioridad es otra y además estoy lejos…sé que Antón es capaz de hacer las cosas, se contrató personal altamente calificado.-dijo la rubia a la que admiraba tanto Sebastián.-No estoy del todo fuera de apoyar a mis hermanos, al contrario siempre que puedo les apoyo…pero ahora lo que quiero es estar tranquila para ver crecer a mi hijo y tal vez más adelante tener uno más.
El castaño tomo su mano con amor.- ¿Estás seguro de que quieres otro bebe?-ella asintió.-Digo es más que claro que nuestro hijo nos salió precioso y que le echamos ganas, pero…yo dispuesto para hacerlo, es más vamos a nuestra habitación.
Pauna comenzó a reír mientras el castaño se acercaba a ella para besarla.-Te he dicho que estas preciosa el día de hoy.-la rubia negó.-Y lo que más me gusta es cuando.-el amaso un pecho.-Estas crecen.
Sabes una cosa, eres imposiblemente predecible.-le comento ella riéndose porque siempre hacia algo que le sorprendía y bueno él era tan bueno en todo que enamorarse perdidamente del francés fue sumamente fácil…casi tan espontaneo como el mismo.
¿Me amas?-pregunto Sebastián mirándole seriamente a los ojos.
Si, te amo.-respondió ella segura.
Yo también y quiero otros diez hijos más contigo.-comento el sonriente mientras besaba la mano de la mujer que conquisto su corazón.
Ella era todo, era tierna, cálida, amorosa, hermosa, inteligente, cariñosa…era simplemente la mitad que le faltaba…era ella…Pauna y próximamente su esposa.
Candice caminaba de la mano de William mientras las personas a su alrededor solo seguían su camino, era tan mágico tener esos momentos para ellos dos y donde no existía nadie que les juzgara en lo absoluto…estaban conscientes de lo que se vendría en un futuro…pero.
¿Qué tanto piensas?-
Nada en especial, solo es que me siento tan en paz que me sorprendo un poco.-el rio.
También me siento en paz, aunque no sé cómo sea después de que regresemos a nuestras labores diarias.-dijo meloso deteniendo su paso para abrazarla.-Creo que a lo bueno se acostumbra uno demasiado pronto.
¿Me echaras de menos?-el rubio asintió.
Definitivamente no podré dormir sin ti en mis brazos, pero ahora mismo que estamos reconectando y bueno a pesar de que no he realizado la pregunta.-la rubia le miro con duda.
¿Cuál pregunta?-contesto ella.
Si la pregunta, tu sabes soy un romántico.-ella comenzó a reírse mientras el disfrutaba de ver su alegría en los ojos, cuanto había echado de menos esa sensación calidad en el estómago.
No tengo ni idea.-respondió Candice mientras él se acercó para besarla fugazmente, la verdad es que él deseaba algo más que sexo en esa relación…claro ninguno podría quejarse en lo absoluto del tema porque desde siempre tuvieron buena química pero existían más cosas alrededor de esto.
Sé que estamos en un proceso, aunque nos hemos brincado como todos los protocolos porque no estamos para juegos y esas cosas.-comento William mientras la rubia le miraba con atención, era tan guapo que le robaba el aliento.-Pero aun así tengo una ilusión.
Candice entendía del proceso en el que estaban, pero el que fuera pues mucho más expresivo le causaba como algo de incertidumbre y bueno era el todo lo que le interesaba por esos momentos en su vida.
¿Qué ilusión?-
Pues no es el lugar más idóneo, pero ¿Quieres ser mi novia?-la rubia rio de momento.
¿Enserio William Albert Andrew?-respondió melosamente mientras deslizaba sus brazos por su cuello.- ¿Estas deseando que sea formalmente tu novia?-
El sonriente asintió.-Quiero todo lo que sea formal contigo Candice Adams.-le respondió.-Quiero todo contigo y quiero escucharte decir mi nombre cada que…-se acercó a su oído para decirle algunas cosillas pervertidas.
Las mejillas de la rubia se tiñeron de rojo, pues él era a pesar de todos el mejor amante que pudiese tener en el mundo y tal vez dudaba que si en algún momento lo perdiera…encontrara a uno que le hiciera tocar la luna con tanta facilidad.
¿Qué me respondes?-ella le miro con seriedad misma que William también tomo para el.- ¿Quieres ser mi novia?-
Sí, quiero ser tu novia y quiero que esto funcione…quiero que sea tan formal con el deseo de una larga relación al futuro.-
Gracias por darme esta oportunidad, daré todo mi esfuerzo para que funcione.-Candice recargo su cabeza en su pecho mientras se calmaba porque esto le daba mucha alegría.
¿Y si te hubiera contestado que no?-
Lo intentaría hasta que dijeras que sí, pero sé que estamos en la misma sintonía.-afirmo el seguro de lo que decía.
Si estamos muy sintonizados.-respondió melosa mientras le besaba lentamente y claro que el respondía con rapidez…era como si solo ellos dos existieran, nada de lo que había a su alrededor importaba.
El fin de semana se pasó volando, ellos se lo pasaron conversando, conociendo esas nuevas formas de pensar, de los cambios reales en cada uno y de pronto todo era sumamente sencillo…claro sin tanto pensarle, sin fingir, reconociéndose uno con el otro…si es más fácil cuando lo das todo sin esperar superar expectativas sino que solo fluya tan real como respirar.
Ante los ojos de William, Candice brillaba divinamente con esa magnífica sonrisa en su cara y algo dentro cambiaba…era una sensación extrañamente alegre pero tal vez sentía que si la perdía seria terriblemente dolorosa…nacía del estómago fluyendo por su cuerpo, por su pensamiento, se le aceleraba el corazón y todo los planes que tenía para pronto en todos, en cada uno de ellos…estaba ella como protagonista.
Si cual telenovela romántica, donde ella era el centro de todo lo demás y siendo sincero le gustaba mucho esto que estaba formándose…estaba enamorándose de verdad…
Estaban sentados mirándose uno al otro, juntitos…pegaditos…desnudos y solo mirándose fijamente mientras que lo demás fuera de esa habitación no importaba...eran solo ellos dos en esta burbuja que formaban superando lo demás.
Candice entro a su departamento y siendo honesta no era un alivio llegar a él, mientras que su ahora novio cerraba la puerta.-Pues hemos llegado a la realidad.
Hemos llegado.-contesto ella mientras dejaba la maleta en el pasillo.- ¿Iras a trabajar?
Si tengo varios pendientes y además tengo que checar algunas cosas sobre la agencia de Australia.-contesto el rubio con un poco de enfado.
¿Dejaste a alguna persona encargada?-le pregunto ella, porque habían hablado de muchas cosas eso si poco trabajo.
A mi socio Edwin, es de mi entera confianza y bueno a Zac quien se encarga casi de todo.-comento el rubio.-Pero aun así no es tan fácil.
Seguramente.-comento la rubia.- ¿Has pensado en volver?
El negó mientras tomaba asiento.-No lo he considerado y sé que tengo que sentarme a pesar en que hacer, pero ahora mismo mis prioridades han cambiado un poco.
Candice se sentó a su lado.-Sabes no debes de pensar tanto.-
¿Por qué lo dices?-le pregunto William mirándole con duda mientras ella se sentaba a su costado.
No dudes.-le respondió la rubia mientras le acariciaba la mejilla.-Me siento segura de que te seguiría a donde fueras.
Los ojos azules le miraron con sorpresa, ella estaba siendo tan honesta con lo que le decía que le hizo trastabillar.-Esto no es un juego para mi William.-la rubia le acaricio la mejilla.-Sé que tú tienes tus negocios y yo pues soy una nómada moderna.
¿De verdad te irías conmigo?-ella asintió segura de lo que decía, tan segura que algo dentro de William crecía como la espuma.
Me iría contigo al fin del mundo, además hay muchos lugares que aun quiero conocer.-el respiro hondamente con la calidez de su presencia la abrazo para aspirar su aroma y solo disfrutar de tenerla entre sus brazos…porque definitivamente ella era un regalo del destino, de dios, de las circunstancias, su segunda y única mejor oportunidad en el mundo.
Ella le beso en los labios.- ¿Dudas de mí?
No, dudo de mí y creo que estoy tan ansioso de hacerte el amor que tal vez no vaya a trabajar para tomarme el resto de la semana.-ella rio divertida.-Nunca tengo suficiente de ti.
Creo que tampoco yo, pero tienes que arreglar lo del comercial y yo tengo una sesión en tres horas así que muy delicioso el fin de semana…pero tenemos que ponernos a trabajar.-dijo ella sonriente besándole rápidamente.
Siento que me estas echando.-ella negó.-Pero tienes razón hay obligaciones por cumplir, ¿Cenamos juntos?-
Ella rio.-Claro que sí, paso por ti saliendo de mi trabajo.
Si estaría bien.-él se levantó porque el tiempo ameritaba que se apurara.-Bueno será mejor que me marche, quedamos que llegas por mí y sirve que ves algunas cosas.
Está bien.-ella también se levantó para acercarse a su novio y besarlo.-Te echare de menos.
También yo, pero nos vemos en un rato mas.-con algunos arrumacos, William se marchó a la agencia para dejar el auto e irse al trabajo mientras que Candice se ponía las pilas para lavar la ropa sucia, comer algo rápido para marcharse a trabajar.
La tarde paso bastante amena hasta que el teléfono de la rubia comenzó a sonar, eran una serie de mensajes de su amigo Sebastián…tenía ganas de verle, habían tantas cosas por conversar pero…al mismo tiempo sabía que no era el tiempo aun.
S: Espero que sigas tan guapa como te recuerdo mi chica viajera, por el momento deseo profundamente que estés en Nueva York.
C: Gracias por el cumplido joven padre de familia y si efectivamente estoy en Nueva York, espero que todo este de maravilla en la capital de la moda y más con Pauna e hijo…dales cariños de mi parte.
S: Lo hare, pero tengo una oferta de trabajo con sentido de urgente porque no puedo hacerlo solo y tú eres la única en la que confió.
A la rubia le dolió es estómago y claro no podría dar una excusa valida especialmente a Sebastián, después de todo lo que le había ayudado.
C: Cuéntame.
S: Catálogos y mas catálogos, labiales, cremas, ropa interior…buena paga ya lo sabes…marca conocida…por favor necesito de tu colaboración, seria en un par de semanas.
La rubia suspiro pesadamente porque esto implicaba al menos unas dos semanas fueran o cuando más exprés una sola…cosa que no deseaba pasarla alejada de William…pero…
C: Tengo algunos pendientes acá, pero yo te aviso.
S: Esperaba un vale, ya tomo el vuelo pero está bien y sé que es imprevisto.
C: Sabes que el chantaje no es lo tuyo, pero tengo unos compromisos pactados y tratare de hacerlos para poder confirmarte…el viernes te aviso sin falta.
S: Perfecto, para mandarte ticket y gracias.
C: Gracias a ti, besos.
La rubia de pronto se sintió agobiada y bueno es que ella no podría negarse con Sebastián porque al final era trabajo, que le considerara era valioso porque ella conseguía con esto pues mayor recomendación en el mercado.
Miro el reloj que marcaban las 5:30 de la tarde, así que guardo el equipo y pidió el uber para ir donde estaba William, le tomo un rato llegar a las oficinas del rubio.
Subió al elevador y saliendo la chica de la recepción quien le conocía por la vez anterior le saludo.-Buenas tardes, viene con el Señor Andrew.
Así es.-contesto ella mientras la chica asentía.
Permítame deje llamarle.-Candice asintió mientras el rubio al minuto aparecía por el pasillo con una sonrisa cálida.
Hola, pensé que saldrías más tarde.-ella negó le beso en los labios ante la sorpresa de la recepcionista quien solo giro su vista.
William.-le riño la rubia mientras el solo reía tomando su mochila.
Yo no tengo porque esconderme de nadie, si se tienen que enterar que se enteren y punto.-dijo el seguro de sus palabras mientras le tomaba de la mano firmemente para ir a su oficina, ella se sintió extraña pero a la vez confortada.
Candice tomo asiento, ya había estado ahí anteriormente mientras el colocaba la mochila en la mesa contigua.-Quiero que veas los modelos que se han contratado y las bebidas que ya tengo aquí.-
Veamos entonces.-dijo ella levantándose de la silla para ir frente a la de William quien le mostraba las imágenes estaban concentrados mientras el pegaba su cara a la de la rubia ajena a su cercanía porque no había nada de malo.
¿Me podrías pasar el teléfono de la?.-Steve se quedó callado al ver tan juntos a esos dos, la miro con atención y esa cara se le hizo conocida…escucho a varios que la fotógrafa era muy guapa y se parecía a la chica del comercial de las medias.
Entonces qué crees.-dijo el mientras se miraban fijamente sin darse cuenta de que la presencia del castaño que carraspeo para captar su atención.-Que tal Steve, pasa.
Candice le miro sin expresión mientras el rubio permanecía a su lado pegado a la silla.-Quería saber si me pasas el teléfono del diseñador gráfico.
Si claro, pero antes déjame presentarte a mi novia Candice Adams.-dijo el todo formal mientras la rubia sonreía mirándole rápidamente.-
Mucho gusto, soy Steve Collins socio.-dijo el castaño mientras estrechaba la mano de la rubia.
Mucho gusto.-contesto ella amablemente.
Tengo una duda.-dijo el mientras el rubio negó y anotaba el teléfono en un postick.
Si ella es la del comercial de las medias.-contesto William mientras Candice solo sonreía y bueno Steve tomaba el dato para desaparecer por la puerta.
Eso ha sido un poco cómico.-ella rio, mientras su novio negaba.-Te veo incómodo.
En algún momento el hombre de las cremas dijo que deseaba tenerte como las modelos y Steven hizo una serie de comentarios no muy acertados.-ella rio.-Pero ya paso.
Venga, no te enojes, me parecen bien los modelos y solo ocuparemos más iluminación considera eso…podríamos empezar con los productos mañana en el estudio para que quede solo lo de locación.
El asintió.-Tengo hambre, será mejor que nos marchemos.
¿No comiste?-
Solo un emparedado hace algunas horas.-ella negó.-Lo siento se me paso el día rápidamente y bueno al fin llegaste.
Ella se levantó de la silla para mirarle de frente.-Debes de comer o me obligaras a que venga a traerte alimentos.
Eso sería magnífico.-el rio abrazándola para besarle los labios.-Pero mejor apurémonos que tengo hambre, que te apetece comer.
Comida china esta entre tus planes, no recuerdo que fuera.-
Me gusta, tengo un lugar favorito así que te parece si vamos ahí directamente.-ella mientras él tomaba su mochila y apagaba con prisa el computador.
Salieron de su oficina tomados de la mano mientras que Steve recogía unos paquetes en la recepción.-Listo.-dijo el castaño.
Listo, nos vemos mañana.-
Que les vaya bien.-respondió el con un poco de duda, reconoció que esa mujer era sumamente atractiva y si era además de modelo, fotógrafa pues un bonus plus.
Es muy guapa verdad.-dijo la chica amablemente, mientras el asentía no podría esperar menos del principal socio.
Cerca de media hora después los rubios entraban al local que estaba tranquilo, afortunadamente encontraron una mesa y siendo bufete pudieron tener sus alimentos frente a ellos…esto era agradable para los dos porque compartían tiempo juntos después de un día de trabajo.
El día de hoy recibí mensajes de Sebastián.-dijo ella mientras William bebía de su soda.
¿Cómo están?-
Creo que bien, me ha ofrecido trabajo en Francia y pues no puedo negarme.-el sintió de pronto que el hambre se le quitaba.- ¿Qué piensas?-
Pues…no pienso.-ambos rieron.-Siento un poco de angustia, pero sé que tú tienes que trabajar y bueno…no lo sé, ¿Cuánto tiempo estarás fuera?.-
No lo sé bien, pero al menos dos semanas.-el enarco una ceja con pesar, pues recientemente empezaban su relación y esto de que ella estuviera fuera no le entusiasmaba mucho.
¿Y si te contrato por más tiempo?-dijo el con pesar mientras ella negaba.
Lo siento, tampoco me emociona ir a Francia pero tú sabes que además de ser una oportunidad para mí pues se lo debo a Sebastián.-En parte era cierto, pero ahora era más complicado porque no deseaba salir de Nueva York.
No te preocupes que yo estoy aquí para apoyarte, creo que gastaremos mucho en video llamadas.-ambos rieron con un desazón porque no deseaban separarse y bueno tal cual sería la ausencia momentánea de la rubia.
Llegaron a casa de Candice donde durmieron sin final feliz, porque había sido un día algo cansado y ajetreado, lo bueno es que al vivir tan cerca William no había tenido problema alguno de ir a su apartamento para cambiarse.
La rubia le confirmo su estadía a Sebastián quien al día siguiente le mando su clave para abordar y ella aun con pesar pues trataba de no pensar demasiado…tal vez esa pequeña distancia les serviría un poco para…que demonios no les serviría de nada porque ella tanto como el deseaban estar juntos.
Varios días después
Quiero que te pongas de perfil por favor, eso es sube un poco más tu brazo izquierdo…así…-la rubia daba indicaciones al modelo quien quieto como estatua obedeció mientras ella disparaba los flashes.-Ahora por favor ponte derecho con la bebida empuñada, así…mira fijamente al fondo con cara seria.
William llegaba a donde estaba su novia escuchando las indicaciones mientras tomaba las fotos y no le gustaba del todo la enorme sonrisa del modelo cuando se acercó a ella para mirar sus fotografías.-Eres muy buena fotógrafa.-dijo mientras Candice solo le miro con rareza por la familiaridad con la que le pretendía tratar.
Gracias.-contesto ella un poco incomoda mientras el rubio se acercó a ella quien le sonrió.-Hemos concluido con mi proceso.
¿Cómo quedo todo?-
Le decía William que es una excelente fotógrafa.-el chico era extraño, pero no podrían negar que se esforzaba por ser agradable.
Lo es, es la mejor.-comento el rubio besando la mejilla de Candice mientras ella se sonrojaba ligeramente y esto claro para marcar territorio, el chico entendió perfectamente el mensaje…sin demora desapareció del mapa.
Creo que lo entendió entonces.-se dijo para sí mismo el rubio sonriente mientras sin apuro le abrazaba.
Nos están viendo.-
No me importa, que se enteren que eres mi chica.-ella rio meciéndose entre sus brazos.-¿Acaso te avergüenza?, para dejar de hacerlo.
En lo absoluto, esta parte de ti me encanta.-respondió la rubia mientras el sin resistirse le beso…cuando menos esperaron ya estaban en la ciudad editando el trabajo y ella concluyendo con sus pendientes laborales.
Al menos había recorrido el trabajo para un día antes de marcharse, lo cierto es que era complicado hacerlo cuando estaba ahora con muchos deseos de pasar más tiempo con William.
Darse cuenta de que podrían compartir muchas cosas en el trabajo les gustaba, era como si de pronto el rubio pudiera dar su opinión de manera asertiva en los trabajos que ella realizaba e incluso le dijo que podría sacar un libro de sus fotografías…esto por supuesto que sonaba bastante alentador y al mismo tiempo tentador.
Candice sentía que al partir tal vez esto se enfriaría o tal vez le demostraría algo que no entendía que sería para ver si de verdad funcionaria lo que ellos tuvieran…tal vez un poco de distancia les serviría.
Annie estaba parada tratando de barrer el escaso cabello que había recortado de su ultimo cliente mientras que su amigo se acercaba a ella.- ¿Cuéntame cómo esta Candice?-
Pues no lo sé, no he tenido noticias de ella desde la exposición en la galería y le escribí para que decirle que nos reuniéramos, tú sabes para echar cotilla pero me dijo que tenía mucho trabajo.-comento Annie con enfado.
Por dios, le escribí y me dijo que no estará en las próximas semanas que viaja a Francia.-dijo Adrién sentándose.
¿Crees que nos evite?-
No veo porque razón lo haría, sabes algo que yo no sé.-respondió el rubio mientras ella suspiraba.-Sabes algo así que dime.
Bueno pues resulta que en la galería se presentó el que era el ex esposo de Candice y bueno no sé porque sospecho que la situación va por ese rumbo.-
¿Ex esposo?-pregunto Adrián con duda.-¿Crees que regresaron?, bueno solo sabía que era divorciada y nada más…Dime como es.
¿Cómo te lo imaginas?-el alzo los hombros.-Al menos inténtalo.
Bueno sé que me gustan los hombres en especial mi esposo, pero no puedo negar que Candice es una chica realmente hermosa y con su alto perfil…-el apretó la boca.
Recordamos a León verdad.-el rubio asintió, pues también supo que Archivald había sido su novio hacía muchos años atrás en la universidad, chisme cortesía de Lizzy Bar.
Claro, pero siento que ella tendría a un esposo todo poderoso, formal, muy atractivo y claro con mucho fuego en la cama…pero un tirano en lo absoluto.-
Madre santa, de donde se te ocurren tantas cosas.-
No lo sé, tu sabes que me gusta el drama.-afirmo el rubio sonriente mientras su amiga negaba.
No tengo idea de porque se divorció, pero he conocido a su ex marido y puedo asegurarte que León no es competencia para el…-
¿En serio?...dios santo y eso que se te hacia tan guapo el...-
¿Solo a mí?-contesto la pelinegra.
Que perrita…la verdad es que le traje ganas por años, pero él es mil por ciento hetero…mejor descríbemelo para imaginármelo.-
Altísimo, rubio natural.-ella hizo pucheros señalando que él no lo era.-Unos ojos azules casi como el color del cielo, rostro de ángel y cuerpo de Thor.-dijo la pelinegra mientras Adrián pasaba saliva.
Santo cristo redentor, eso sueno como un orgasmo a la vista mujer…creo que las hormonas te están afectado.-le riño el rubio oxigenado.
De verdad es así de atractivo y no quiero decirte que nosotros nos fuimos de la exposición dejándola sola con semejante hombre…me dijo Archie que le conocía al parecer es de una familia de renombre y me afirmo que si era el peor que había cambiado algo…que no estaba tan fuerte.
¿Por qué lo conoce?-solo Adrién mientras Annie rodo los ojos.
Sabes que fueron novios historia mil años atrás.-el rio.-Pues después de que se acabó ella se hizo su novia y después se casó.
¿Francia?.-el rubio se levantó mirando el reloj.-Bueno me marcho que tengo pendientes, con tal descripción me estoy acordando de una persona que recién ha llegado a la ciudad…pero antes de afirmar algo quiero comprobarlo.
Bueno pues me avisas cualquier cosa.-Archivald entro en ese momento con algunos paquetes.
Que tal Adrién.-el chico solo asintió.-
Nos vemos querido, te deposito.-
Si está bien.-respondió Annie mirando salir a su amigo mientras se acercaba a su esposo para besarlo en los labios.- ¿Cómo te fue?-
Perfectamente bien, ¿Cotilleando?-
Un poco, muero de hambre déjame terminar para comer.-el asintió mientras llevaba las cosas a la mesa de adentro mientras su mujercita hacendosa se apuraba a terminar
Algunos días después
Candice miraba a los aviones volar mientras esperaba que fuera su hora para abordar, este era un viaje algo complicado para ella y no le daba gusto como cuando lo hacía…todo lo contrario, le dolía el estómago por esa sensación de vacío-
¿Estás bien?-ella miro al rubio quien tampoco parecía pasarlo del todo bien.
No sé qué decirte.-
La verdad yo no quisiera que fueras.-comento el siendo sincero mientras sus manos apretaban sus hombros.-Pero sé que este es tu trabajo y no debemos de cambiar nuestros compromisos, quedamos en llevar las cosas con calma.
¿Estás bien?-el rio abrazándola fuertemente contra su pecho para aspirar su dulce aroma, la echaría de menos cada hora.-Tratare de apurarme.
No lo dudo, pero sabemos que debes de hacer el trabajo bien.-comento el sonriente, mientras que llamaban a los pasajeros.-Creo que es hora.
Lo es.-se besaron lentamente ignorando por completo a los demás mientras ella se colgaba del cuello de William quien la levanto del suelo para tenerla frente suyo, el aire les hizo falta pero ella rápidamente hundió su nariz en su cuello necesita aspirar todo su aroma personal.
¿Nos llamaremos?-
Lo haremos.-respondió William abrazándola fuertemente hasta que después de tantos años lejos la tuvo que soltar un vez más para verle partir del otro lado del mundo.
Cuídate.-dijo Candice con un enorme nudo en la garganta.
Tu también.-se besaron en los labios y sin más despedidas ella camino para irse, solo le miro decir adiós…era tan desagradable esa sensación…pero era trabajo.
El rubio tuvo un día particularmente de mal humor, pero con mucho trabajo afortunadamente y cuando menos pensó varios días habían pasado entre llamadas a deshoras…te extraño era lo que más repetían en sus conversaciones y cada uno dormía en lo frio de su habitación.
Candice se había sumergido por completo en el trabajo, para su fortuna las cosas estaban yendo a tiempo…lo malo de esto es que salieron más oportunidades laborales que por supuesto no podría dejar de lado y más por la insistencia de Sebastián, además sería tonto no aprovechar ahora que podría hacer un colchoncito de plata.
Pero esto no lo tomo del todo bien William cuando una semana paso y ella le dio las buenas nuevas por así decirlo…se sintió un tanto confundido, pero entendía perfectamente que era una oportunidad para ella.
Le dio palabras de aliento, le dijo que le extrañaba con demasía pero que sabía que le servía para que más personas le conocieran en el ámbito y además creciera como fotógrafa…palabras que le costaron decir cuando lo que más deseaba era tenerla entre sus brazos.
Quisiera entonces que me dijeras si estos contrastes en lo impreso son…William…William.-dijo con un poco de extrañeza Steve.
Lo siento, estoy un poco.-
Distraído.-completo la frase el castaño.-¿Pasa algo?...he notado que estas como preocupado por algo y no sé si…
Lo siento, es solo que soy un idiota.-comento el de pronto suspendiendo a su socio.
Pero que dices, si eres el tipo más listo que conozco.-afirmo Steve mientras el rubio negaba.-¿Es referente a tu novia, cierto?-
¿Se nota tanto?-respondió William ofuscado.
Demasiado, además de que no ha venido en algunos días… ¿han terminado?-el rubio rio.-Lo se soy un poco cotilla.
No, ella tuvo que ir a trabajar a Francia pero la verdad es que se quedara más tiempo y yo no sé…
¿Y?.-dijo el castaño mientras William le miraba con rareza.
¿Y?.-respondió el rubio.
Hermano que haces acá, ve por ella…vuela a Francia para que estés a su lado, digo no soy un ejemplo de novio pero sé que si quiero estar con una mujer no me importaría cruzar el océano para estar donde ella.-afirmo Steve.
Suena como que ya lo has hecho.-
Lo hice en su momento, pero esa es otra historia.-
Pero el trabajo.-
¿Cuál trabajo?...recién estamos entregando el comercial y lo demás solo son dos semanas no tenemos otro prospecto…mejor ve con tu chica que saco lo demás, los depósitos están hechos…-el rubio asintió porque ya había cobrado, dividido ganancias y pagado a los proveedores.
Me marcho entonces.-dijo sin más mientras su socio asentía se levantó con premura para buscar en su móvil un vuelo que compro sin pensar mucho…-Creo que tengo el ticket, hago maleta y me voy al aeropuerto.
Steve sonrió, si definitivamente su socio estaba enamorado de la chica del comercial y como tal cruzaría el océano por ella.
William no supo cómo sucedieron las cosas pero de pronto estaba en un avión con más de diez horas de vuelo y con muchas ganas de verla…solo eso era lo que le importaba ahora, solo eso.
La rubia entraba al departamento de Sebastián, pues Pauna le invito a cenar así que ella acepto y ver al pequeño Sean seria agradable.
Hemos llegado cariño.-dijo el castaño mientras la mayor de los Andrew aparecía.
Qué bueno, ¿Qué tal estuvo el día?.-pregunto Pauna acercándose para besar a su esposo y saludar a la rubia.
Pregúntale a Candice, nos ha tocado una fila de niñatas tontas que no tenían nada de gracia para modelar…terriblemente jóvenes y terriblemente estúpidas.-dijo con su más agrio humor.
Pesado entonces.-dijo Pauna mientras miraba a la rubia asentir.-Pobre de ti aguantar a Sebastián de malas es complicado.
Ni que lo digas.-ambas rieron mientras el negó.-Pon tus cosas en el mueble, la cena ya casi esta y vendrá una persona más a cenar.
Candice tomo asiento mientras escuchaba la voz de Sebastián preguntado quien era mientras iban a la cocina y ella estaba un poco cansada, miro su celular no tenía ningún mensaje de William así que eso le hacía sentirse un poco ansiosa…no sabía cómo estaba el.
La puerta sonó dos veces y ella se levantó.-Yo abro.-dijo al aire mientras escuchaba a Pauna responderle que sí.
Abrió la puerta y jamás se imaginó que él estuviera ahí parado frente a ella con una enorme sonrisa…dios santo que en verdad le había extrañado solo con una semana lejos.
¿William?-el solo le sonrió.-¿Qué haces aquí?...bueno acá.-
Pues te extrañe demasiado, ¿Tu no?...-ella sin pensarlo se arrojó a sus brazos mientras el rubio le recibía con gusto levantándola del suelo como solía hacerlo para verle a los ojos se besaron lentamente.
Y se separaron…-Te quiero con toda el alma Candice.-ella atesoro esas palabras tan sinceras y más cuando el hombre al que también quería tanto había cruzado el océano para verle, se derrito entre sus brazos para besarse nuevamente.
¿Quién es…-Sebastián se quedó ahí parado con total sorpresa viendo a William con Candice entre sus brazos mientras que Pauna sonriente cargaba a Sean y jalaba del brazo a su novio para darles privacidad…si…ella cómplice al fin y al cabo.
Hola mis hermosas, ando volando con el capítulo recién lo termino y bueno subo porque no quiero dejarlas sin esto que esta calientito…
Sé que he fallado con los dos por semana pero tengo cantidad de trabajo que me retiene la mayor parte de mi día y en parte escribo…téngame paciencia, porque estos capítulos son punto y aparte de la historia original.
Sin embargo, ellos están juntos y bueno ahora mismo el amor flota en el aire como dice la canción…no alcanzo a contestar sus reviews porque ya casi acabo mi jornada de trabajo así que les dejo el capítulo ya les leo después…
Bonito martes, gracias por leerme y les mando un abrazo a la distancia…chaooo
Carol Aragon
MariaGpe22
Yusmariz
Chocoyii
IsasiB
Reeka21
Karolamx
Mia8111
