Capítulo 19: La llegada de los mutantes (Original Beast Wars episodios 28 y 29)

A causa del ataque de los alienígenas, todas las cápsulas que orbitaban el planeta acabaron estrellándose contra él, algunas completamente destruidas, otras por suerte intactas, tocando ahora encontrarlas y rescatarlas.

Dos de ellas han caído en un páramo desértico, afectado por las tormentas provocadas por el revienta planetas. Ambas comienza a escanear formas de vida, pero el secuenciador de ADN ha sido afectado por la ola cuántica, viéndose alterada la protoforma del interior.

- AVERÍA GRAVE EN ESCANER. ERROR DE DUPLICACIÓN. TRANSMISIÓN DE DATOS NO RECUPERABLE.

La señal de ambas cápsulas llega a la base Rocket, por lo que Eric y Pazos parte inmediatamente a la zona, dejando al cuidado de la base a Dayo.

Al quedarse este solo, nota que ahora hay una única luna en el planeta, pero se da cuenta de otra cosa, por lo que entra al interior de la base sin darse cuenta que Rakkun también está en la zona, camuflada con barro para que los sensores no la detecten, quien también se ha percatado de la luna.

En el interior de la base, Dayo llega a la zona donde se encuentran nuestros Macgaffins favoritos: los pendrives dorados, los cuales están protegidos por un campo de fuerza para evitar su robo. Es en esta sala donde Rakkun acorrala a Dayo.

- ¿Has visto la luna? - Pregunta Rakkun mientras agarra del cuello a Dayo y le desarma.

- ¡Sí! Hay una luna ahora, el planeta ha cambiado, y eso significa significa…

- Sí… Resulta que Eric tenía razón… Estamos en la Tierra. - Dice muy molesta Rakkun, la cual recordad que desertó de los Rockets porque creía que estaban en un planeta completamente distinto. - Los pendrives…

- Registros del futuro, poder absoluto. - Dice Dayo, al ver que Rakkun contempla ambos pendrives. - Pero Eric los tiene protegidos. ¿Mapache y Dayo se unen para conseguir los pendrives juntos?

- ¡Excelente idea!

- ¿Mapache piensa eso? - Dice Dayo preocupado al ver que Rakkun le da la razón.

- Tu primero, por favor. - Dice Rakkun antes de lanzar a Dayo al campo de fuerza de los pendrives.

El sistema de seguridad de los pendrives se activa, electrocutando así a Dayo y haciendo que salgan unas sierras eléctricas que empiezan a trocear fuera de cámara a Dayo. Momento que aprovecha Rakkun para hacerse con ambos pendrives.

Al final, los trocitos de Dayo caen dentro de una prensa hidráulica, quedando convertido en un cubo que cae a los pies de Tsuki, la cual acaba de llegar con el cuerpo de Doc.

- ¡¿Qué está ocurriendo aquí?! - Pregunta ella antes de que Rakkun la empiece a atacar y huir con los pendrives.

- ¡Ha robado los pendrives! ¡Detenlo! - Le ordena Doc a Tsuki.

- ¡Olvídalo! ¡Se marcha y no pienso arriesgar mi hermoso cuerpo persiguiéndole!

- ¡Idiota! ¡Esos pendrives son más valiosos que tú! - Protesta Doc. - … Olvidado por ahora. Ya veo que equipo que necesitamos.

Mientras Tsuki se dirige a donde le ha indicado Doc, dejan el cubo de Dayo ahí solo y abandonado en la sala.

- Oh, claro. No os preocupéis por el pobre Dayo. Dayo se queda aquí sufriendo. Arrastrándose él solo hasta la cámara de reanimación. No es justo dejarme así.

Mientras tanto, los Rangers han conseguido hacerse con una cápsula.

- Al menos esta ha caído donde podamos verla. - Dice Hebi.

- Pero otras dos han caído en territorio Rocket. - Explica Kiara. - Y quién sabe dónde habrán caído las demás.

- Eso es lo que vamos a descubrir Marina y yo. - Dice Lynx.

- Mantened nuestros asientos calientes, pues estaremos en contacto. - Dice Marina antes de partir junto a Lynx en su aventura.

- Buen viaje amigos. - Comienza a despedirse Juan. - Sois parte de este planeta. Dejaos guiad por el instinto.

- Ten cuidado, grandullón. - Dice Kiara por el comunicador.

- Jejeje Siempre, pequeñuela. Siempre. - Responde Lynx.

- ¿Se puede saber que os pasa, que suena a que no los vamos a volver a ver nunca? - Forshadowinea Hebi. - ¡Vamos! ¿Por qué dejamos dormir a nuestra bella durmiente? Rompamos la cascara del huevo y vamos a saludarle.

- Con esta no: está en blanco. Es una protoforma sin Corazón. - Explica Juan, y Hebi pregunta de que les va a servir. - De nada, por el momento. Solo esperemos que Eric tenga la misma suerte con las protoforma que han aterrizado en su zona.

Hablando de ellas, su escáner de ADN ha acabado, y comienzan a surgir ambas criaturas de dentro de ellas.

- Ugh… Vaya… Mira que tenemos aquí. - Dice el primer ser, el cual parece un mercebinario enano y cabezón con el pelo azulado y un uniforme color café con una gran K en el gorro, cuya mitad del cuerpo parece estar pudriéndoselos mientras que en su brazo tiene lo que parece ser un limo gordo y mocoso color verde limón.

- Agh… ¿quién eres tú? Y ya puestos ¿quién soy yo? - Pregunta el otro ser, con barba y cabello rizado oscuro y ojos bondadosos, vistiendo lo que parece una chaqueta de perro de fuego, pantalones de pollo karateca y dos enormes alas de pájaro ígneo legendario.

- No lo sé, amigo, pero te diré lo que sí sé: ¡Sé que puedo aplastarte la cola! - Dice el enano, sorprendiendo así al alado. - ¡Ya me has oido! ¡Vamos, piel de peluche! ¡tú y yo vamos a pelear AQUÍ Y AHORA!

El enano comienza a atacar a atacar al alado, no quedándole otra a este que defenderse, pero su pelea es interrumpida por un ataque aéreo de Pazos.

- ¡Maldita sea mi estampa! Otro que cree que puede conmigo. - Dice el pequeñajo.

- Nosotros no le hemos hecho nada. Está claro que ha de haber un error. - Explica el alado.

- Sí: ¡Ese culo pelón ha interpretado mal mis deseos de darle un patacón en el culo!

Nada mas aterrizar, el gnomo de jardín se lanza contra Pazos, pero este lo atrapa en el aire.

- Jajajaj ¡idiota! ¡El dolor es mi amigo! ¡Deja que te lo presente! - Suelta Pazos mientras empieza a atizar contra el suelo al bicho violento.

- Eso es jugar sucio y abusar ¡Eh, tú! ¡ya es suficiente! ¡Ahora déjale en paz! - Dice el ser alado al plantarle cara a Pazos.

- Anda, mira, un héroe. ¡Mis favoritos!

Mientras Pazos comienza a atacar a estos dos… mutantes, Eric se queda atrás, observando el panorama.

- Oh~ mira que divertido, bieeeen~. - Comienza a decir para si mismo. - Pero supongo que tengo que hacer algo útil mientras están distraídos. L4VR4, entra en los mandos de activación de partner de las nuevas criaturas mientras sus circuitos siguen desconectados.

Mientras pasa esto, ambos mutantes consiguen acorralar a Pazos, pero este decide pelear duro.

- ¡Insolentes! ¡Arded en los fuegos de Pazos64! - Grita antes de Eric le derribe de una colleja.

- Adiós, niño malo. Hola, niño bueno. Bieeeen~ Ejem… ¡Soy EricRod! ha sido un simple malentendido, pido disculpas.

- ¡Lo sabía! - Dice muy feliz nuestro c¡héroe alado.

- ¿¡Cómo!? ¿¡Te fias de este bicho grimoso!? - Protesta el enano mocoso.

- ¿Y por qué no? - Pregunta Eric. - Todos somos Rockets. Si vuestra transmisión de datos no se hubiera averiado en la caída lo sabríais.

- Hablas muy bien, forastero. Pero no me creo nada, a menos que puedas probarlo.

- ¡Ay! Cómo no mi buen…

- ¡Llámame Kofi Sofa! Y no tengo nada de bueno. - Dice el mutante mocoso.

- A mí puedes llamarme… PotiMax… - Dice el mutante alado. - ¡Sí! Puro, fuerte y rápido.

- Ehm… bieeen… De todos modos, Kofi y Poti… mi prueba es muy sencilla: solo tenéis que activar vuestro poder Partner. - Eric activa el suyo como ejemplo. - Ya está, ¿lo veis?

- ¡Espera, alto ahí! ¿quieres decir que solo tengo que activar el padrón ese y- - Siguiendo el ejemplo de Eric, el partner de Kofi se activa y saca a relucir una espada rota y oxidada. - ¿¡Qué demonios es esto!?

- Y ahí lo tienes: nueva forma, nuevas armas y nuevas oportunidades.

Ahora le toca el turno del Poli, el cual dispara dos misiles de fuego desde sus alas.

- No me gusta nada este poder destructivo. - Explica él.

- Jajajaja ¡Pero no puedes discutir los resultados! - Explica Kofi mientras dispara un impacmoco con su limo hacia Pazos y lo disfruta.

- Jajajaja Excelente, bieeeeeeen~ Bienvenidos mis nuevos Rockets.

A su vez, en la Oak, Juan está empezando a montar un artilugio mientras su tocayo verde comienza a quejarse.

- ¡Ay Juan, esto va cada vez de mal a peor! Rangu ha muerto, Rakkun ha desaparecido, el lince salado y la mujer pájaro están de crucero, ¡Y ahora se te ocurre hacer un matrix! ¿Por qué no abrimos la puerta e invitamos a Eric ya de paso?

- Tengo que hacerlo. - Explica Juan. - Cuando la maquina alienígena explotó, abrió una ventana al espacio distorsionado. No durará mucho.

- ¿¡No podrías pensar que te necesitamos consciente justo ahora!? - Pregunta Hebi mientras Juan comienza a entrar en coma inducido. - ¿y tu que miras? Pon tu nuevo y brillante culo en orbita y encuentra a cara antifaz antes de que lo hagan los Rockets. - Le ordena a Kiara.

- ¿Quieres que vuele? - pregunta ella.

- ¿Quiero que vueles? ¡No! Quiero que cojas un submarino. ¡Claro que quiero que vueles! ¡Vete de una vez! - Obedeciendo sus ordenes, Kiara parte volando a ver si encuentra a su camarada. - Caray… Rangu, ¿cómo lo hacías?

Hablando de Rakkun, ella se encuentra en lo alto del monte del destino, con ambos pendrives en mano.

- Ser o no ser; he ahí la cuestión. Estos pendrives que tengo sostengo, ¿son registros de lo que será, o solo de lo que podría ser? Porque, si el futuro está predicho de modo inmutable, mi muerte será instantes después de esa confirmación. Ya que, no podría vivir si no soy dueña de mi destino. Pero si el futuro se puede cambiar, si estos pendrives solo registran un sendero entre miles de senderos que el cosmos puede crear, entonces su poder es infinito, y sin embargo, también limitado. Ya que solo pueden usarse una vez, y en ese acto hay que determinar la historia… ¡Puedo destruirlos! Pero no. Eso sería una cobardía. Yo conoceré la verdad. Y luego, o ellos, o yo, tendremos que afrontar el olvido. ¡Hasta entonces…!

Tras la duda existencial de Rakkun, ella esconde uno de los dos pendrives debajo de una de las rocas del monte y parte en dirección a la base Ranger.

Mientras tanto, Eric sigue con sus nuevos reclutas, de los cuales, Poti ayuda a reincorporarse a Pazos tras la pelea de antes.

- Bieeen~ Excelente. Trabajo en equipo y cooperación, ese es el lema de los Rockets.

- ¿Y por qué no traición y puñalada trapera? - Pregunta Kofi.

- Oh, podemos ser flexibles… ¡pero nuestro interés primordial es la destrucción de los Rangers!

- La destrucción es bella, ¡Me gusta la destrucción!

- Entonces tendrás tu oportunidad, Kofi. - Asegura Eric, al ver que Kiara está volando por la zona, aprovechando así para abatirla.

- Rakkun ¿Me oyes? Llama a la kitsune voladora. - Le envía un mensaje antes de recibir el disparo de energía de Eric. - ¡Alguien quiere despellejar a este zorro!

- ¡Poti, persíguela y matala! - Ordena Eric.

- ¿Por qué? No está atacándonos.

Esta bondad no le gusta nada a Eric, así que abre sus hombreras y de ellas salen dos miniErics que disparan a discreción a Poti.

- Jamás discutas mis ordenes. ¡Vete! - A Poti no le queda otra que obedecer y parte en vuelo a perseguir a Kiara. - ¡Pazos! ¡Coge a Kofi y sígueme!

Al finalm los 4 rockets parten volando a perseguir a Kiara.

- ¡Vaya! Llevo detrás el desfile del orgullo Rocket. - Dice Kiara al ver el panorama. - ¡A ver si pueden seguir la estela de este cometa!

Kiara se adentra dentro de un risco con varias rocas mientras Poti la persigue, este al final dispara sus plumas ignífugas, pero Kiara las esquiva y hace que Poti se estrelle contra una de las rocas de la zona.

- ¡Ja! ¡No hay nada como la astucia y agilidad de los zorros! - Su victoria no canta tanto cuando ve a Eric comiendose todos los pedruscos de la zona. - ¡A parte de la fuerza bruta! ¡Aquí Kiara! ¡Código 1! ¡Emergencia!

- Claro, como si las cosas no estuvieran lo bastante mal. - Contesta Hebi. - ¿Qué has hecho ahora?

- ¡He encontrado un nido de Rockets en el cuadrante delta! ¡Un par de ellos nuevos sacados de un circo! ¡Están pegados a mi culo!

- Ay, pitufina, tú sí que sabes animar el cotarro. ¡Vale, extenderemos la alfombra de bienvenida!

Hebi pone a CRVX1T0 en alerta máxima y conecta las autoarmas, pero pasa algo cuando va a esperar a Juan.

- PELIGRO. LA CONSCINECIA DE JUAN SE HA EXTENDIDO HASTA LIMITES INCONMENSURABLES. CUALQUIER PERTURBACIÓN PUEDE CAUSAR UN COMA PERMANENTE.

- ¡Cómo no! Tu siempre tan oportuno. - Suelta Hebi ante la buena noticia.

- ¿Qué ha pasado? - Pregunta Rakkun, quien acaba de llegar y tiene el pendrive oculto en su espalda. - CRVX1T0 está en alerta.

- ¡Hombre, cara antifaz! ¿Dónde estabas? ¿Salvando el universo tu sola?

- Puede ser… ¿cuál es la emergencia? - Pregunta Rakkun mientras se mete en el arsenal.

- Nah, no es para tanto: Juan está jugando a los marcianitos en su cabeza y Kiara ha invitado a un grupo de Rockets a jugar a casa. Además, si atacan la base, nuestro gigantón rojo no despertará jamás.

- ¡En tal caso, la mejor defensa es un ataque! - Dice Rakkun tras salir del arsenal armada hasta los dientes, como si estuviera en una peli de Rambo, y le lanza a Hebi una actualización de su pistola de jamones, ahora es de pata negra.

Nada más salir de la base, Hebi adquiere su modo sobre ruedas y se adelanta para ir al rescate de Kiara, a la cual Eric ya le está empezando a morder los talos.

- ¡Ah, no, nada de eso monstruo de chatarra! - En plena carrera, Hebi salta y dispara a Eric, consiguiendo así derribarle. Este consigue cae de pie, y Kiara logra coger a Hebi en el aire y aterrizar en el otro lado de la zona.

- ¡Rockets, reagrupados en torno a mi posición! - Ordena Eric por su comunicador.

Mientras tanto, en la base Rocket, Tsuki está traspasando la consciencia de Doc a su cuerpo. Ella se ve que está sufriendo, pero Doc lo está disfrutando.

- Sí… ¡Sí! Funciona… ¡Funciona! - Empieza a decir Doc desde su cuerpo, el cual empieza a recobrar su nueva forma, el cual ahora posee un Power Suit de serpiente color rojo sangre, con dos cierras circulares en sus brazos, garras en sus pies y pinchos en los hombros, y dos enormes turbinas en su espalda, y ahora con gafas cyberpunk. - Mi Corazón se ha recuperado, y mi cuerpo es más fuerte que nunca. Estoy vivo… ¡VIVOOOOOOO! WAHAHAHAHAHAHAH

- Entonces tu también te has actualizado ¿eh? - Dice Tsuki mientras le apunta con su pistola de bisturíes. - ¡Pues pienso infectarte hasta las pestañas si das un paso mas!

- Yo creo que no. - Dice Doc, en el mismo momento en el que el brazo de Tsuki se parte en dos. - Dragona traidora… He dejado un vinculo psíquico entre nosotros. Incluso desde este nuevo cuerpo, puedo controlarte todavía.

- Aquí EricRod llamando a la base Rocket. - La discusión cirujana es interrumpida por una videollamada de Eric.

- Aquí KarmaDoc.

- ¡Ah! Excelente. Veo que estás consciente otra vez, y también te han diseñado bien.

- ¡Yuju! ¡Dayo también está aquí! - Dice Dayo saliendo de la cámara de reanimación de la base. - ¡Mapache invade la base, pero Dayo-!

- ¡Silencio! Converged en mis coordenadas. Es hora de acabar con los Rangers, para siempre.

Nada más dar esta orden, Eric saca su reloj de bolsillo para ver cuánto tardarán sus hombres en reunirse con él, siendo los primeros los mutantes y Pazos.

En la otra punta del páramo, Hebi y Kiara están preparándose sus armas para la batalla que toca librar, justo en el momento en que llega Rakkun con sus armas preparada para lo que toca.

Al cabo de un rato, Dayo y Doc llegan al lugar, siendo la nueva actualización de Doc un modo moto usando las turbinas de su espalda como ruedas. Al ver que ya están todos sus hombres en la zona, Eric da la orden de moverse.

Ya con todas las armas preparadas para lo que se viene, la buena, la mala y Hebi comienzan a moverse y se colocan en frente de los Rockets, que se han colocado en fila de ellos doblandoles el número, todos y cada uno de ellos con sus respectivas armas en su cinturas y sus manos preparadas cuando toque desenfundar.

El silencio y la tensión es absoluta en la zona, lo único que se oyen son los buitres y las manecillas del reloj de Eric hasta que esté da la campanada, haciendo que todos los Rockets desenfunden contra los Rangers y…

Comienza el duelo.

Los Rangers hacen lo que pueden, pero se nota la diferencia de poder.

- Excelente, los tenemos acorralados. ¡Máxima potencia de fuego! - Ordena Eric.

- ¿Qué? - Pregunta Poti - Nosotros los duplicamos en número.

- Sí…

- Tenemos el dobla de potencia de fuego.

- Sí…

- Deberíamos darles la oportunidad de rendirse.

- Mmm… no. - Contesta Eric antes de golpear a Poti. - Vuelve a cuestionar mis ordenes y te descuartizaré pieza a pieza, imbécil. ¡Quiero al enemigo destruido fulminantemente y sin piedad! ¿Alguien más tiene algo que objetar? - Pregunta a los Rockets, pero todos niegan asustados, menos uno.

- Bueno, yo quisi- - Añade Kofi antes de que Eric le agarre de la cabeza y lo levante del suelo para así "poder oírle mejor". - Uhm… ¿Para qué actuar tan deprisa? Cuando estén heridos, quisiera disfrutar un buen rato de su sufrimiento.

- Comparto tu sensibilidad, Kofi, pero el trabajo es antes que el placer.

Los Rockets entonces reanudan el ataque. A su vez, el ordenador de la base alerta el nivel de peligro al que se somete Juan, quien parece que su consciencia se está alejando cada vez más, hasta tal punto que de la nave sale un haz de luz hacia el espacio.

En pleno ataque, Doc está comunicándose con Tsuki mientras la tortura con su control mental.

- ¡Deprisa, bruja! ¡No puedo tener ocupado a Eric eternamente! ¿¡Por qué tardas tanto!?

- ¡Si me dijeras de una vez lo que estamos buscando! - Explica Tsuki, que se encuentra en la base buscando entre los cajones de Eric.

- ¡Los pendrives dorados! - Responde Doc, y Tsuki le recuerda que Rakkun los robó. - ¡Necia! ¡Eric habrá hecho una copia de seguridad!

- Sí… La guardó en sus archivos privados. - Dice Tsuki mientras se cuela en el ordenador de Megatron.

- ¡Date prisa, a ver si puedes recuperar algunos datos!

- Mmmm… ¿Con quién estará hablando esa serpiente rastrera? - Se pregunta Eric al ver a Doc hablando solo. - No detecto ninguna señal de radio.

En el bando de los Rangers, ellos la están pasando un rato putas.

- Caray, en momentos como este echo de menos las burradas del jefe. - Explica Hebi.

- ¡Los sobrevolaré y atacaré desde el aire! - Añade Kiara, y Rakkun la secunda.

- Sí, salvo por un ligerisimo problema. - Dice Hebi mientras lanza una roca al aire y termina cayendo arena.

- … Bueno, la esperanza es lo último que se pierde. - Dice Rakkun al ver lo que pasa, pero entonces retoman el contraataque.

- ¡Estos Rangers son idiotas! - Dice Poti al ver la clara ventaja que tienen ante ellos. - Hemos rodeado su posición. Deberían retroceder, ¡pero siguen atacando!

- Los rangers son muchas cosas, incluso actores porno, pero no son unos idiotas. - Ante las palabras de Poti, Eric hace un zoom con sus ojos y ve el haz de luz saliendo de la base. - Intentan impedir que alcancemos su base. ¡Dayo, Poti, subid y volad en circulo! ¡Converged en la base Ranger, deprisa!

Ambos voladores obedecen y emprenden el vuelo dirección a la Oak, y los Rangers lo notan.

- ¡Eric ha adivinado nuestra estrategia! - Dice Rakkun.

- Pues ahora necesitamos otra, y pronto. - Explica Hebi. - Porque si esos dos llegan a la base antes que nosotros, Juan será tan vegetal como una lechuga. ¡Kiara, remonta el vuelo! Nosotros te seguiremos.

- ¡Se me acaban de acabar las balas! - Explica Rakkun.

- Yo necesito un poco de impulso, y me pica un pie.

- ¿¡Callaos los dos!? ¿Es que tengo que hacerlo todo yo? - Se queja Hebi mientras gira a Kiara y le da una patada en el culo, emprendiendo así el vuelo aprovechando el impulso. Acto seguido, él adquiere su forma vehículo. - ¡Venga, súbete!

Mientras tantos, ambos Rockets voladores se dirigen a la base.

- ¡Dayo está al mando! ¡Dayo dirige!

- Vale… Ya que eres tú el que conoce el camino, adelante. - Dice Poti, pero eso molesta a dayo y le para en seco.

- ¡Tú no dices a Dayo lo que hacer! ¡Dayo al mando!

- Vale… vale.. - Empieza a decir Poti con una sonrisa forzada y entredientes. - ¿Cuales son tus ordenes, brillante líder?

- ¡Perro volador sigue a Dayo! ¡Dayo dirige!

Dayo provoca dolores de cabeza a Poti, y eso hace que ninguno vea a Kiara, la cual consigue derribar y estrellar a Dayo contra el suelo, pero entonces Poti comienza a perseguirla. Mientras tanto, en el suelo, Rakkun monta sobre Hebi mientras este conduce.

- Y pensar, que un guerrero se volvería un… rata patrulla. - Se queja mientras empieza a cargar su rifle.

- Tu ocúpate del arma, Wabuu, nosotros te guiaremos.

Eric ve el panorama y ordena a todos los Rockets avanzar, momento que aprovecha Doc para comunicarse con Tsuki.

- ¡Nos movemos! ¿Has encontrado ya algo de importancia?

- Algo relacionado con una gata morada, pero la mayoría de grabaciones han sido borradas. Miraré si hay datos antiguos. - Tsuki parece encontrar lo que buscaba, momento que aprovecha Doc para ver de qué se trata, pero ella logra taparse apartar la mirada.

- ¿¡Qué es!? ¡No te resistas, arpía! ¡Déjame ver! - Comienza a gritar Doc, momento que Rakkun aprovecha y dispara a un pedrolo que tiene encima y le aplasta con él.

- … ¿Qué pasa, Doc? … Vil serpiente… - Pregunta Tsuki al ver qué no oye a ese maniático. - ¡Libre! por el momento, al menos. ¡L4VR4, descarga y codifica por triplicado, YA! - El ordenador obedece y descarga el código fuente de los pendrives en el interior de Tsuki.

Mientras, en el campo de batalla, a Hebi no le queda otra que conducir haciendo eses a causa del fuego aéreo de Pazos y Eric, por suerte Rakkun consigue zafarse de ellos disparando a Pazos y haciendo que choque contra Eric, produciendo un momento cómico donde ambos se cambian la cabeza de cuerpo, cumpliendo así el sueño de Pazos de poder sentir lo que siente su reina. Pero regresemos con Doc, que ha recuperado la consciencia.

- Tsuki… ¿que has encontrado… ¡Contesta!

- Me temo que los datos tenían una clave de seguridad. Se han autodestruido. Lo siento. - Le explica Tsuki a Doc mientras esconde su pistola aun humeante.

Mientras tanto, Kiara ha atraído a Poti cerca de la base, activando así las autoarmas de la nave y derriban a Poti de varios disparos, y para mas seguridad, Kiara le apunta con su espada en el cuello, justo en el momento en que llegan Rakkun y Hebi.

- Hola, enana. Habríamos llegado antes si cara antifaz no fuera tan cerda.

- ¡El viaje más asqueroso de mi vida!

- Venga, adelante. Acabad conmigo. - Dice Poti todavía en el suelo, y Rakkun encantada de darle el golpe de gracia con su bate, pero es detenida por Hebi y Kiara, sorprendiendo así a Poti.

- No es lo que hubiera hecho Rangu. - Explica Kiara.

- ¡Bahhh! ¡Sentimiento Ranger! - Empieza a quejarse Rakkun. - Oh, yo debí haber salido defectuosa.

- Cállate y lleva al muchacho a la cámara de reanimación. - Ordena Hebi. - Yo veré cómo anda Juan.

En el interior de la base, Juan sigue haciendo lo que sea que esté haciendo, y podemos ver cómo su consciencia está viajando lo más rápido que puede por lo que parece ser el espacio.

- Se me acaba el tiempo, pero tiene que estar aquí, al otro lado de la Cerradura.

Justo entonces entran Hebi y Mimi, y se sobresaltan cuando Juan recibe una pulsación enorme.

- ¿He vuelto? - Pregunta Juan mientras se reincorpora.

- Pues… eso parece. Pero por un momento me has tenido preocupado. - Dice Hebi. - ¿Se puede saber a dónde has ido?

- Dónde… todos somos uno. - Esas palabras sorprenden a Hebi, pero entonces la base comienza a ser atacada. - Te lo explicaré luego. Esperemos que mi camino de baldosas amarillas dure lo suficiente.

En ese momento reciben una llamada de emergencia de Kiara.

- ¡Ataque Rocket en toda regla! ¡Y los escudos están fallando!

- Oh genial. Vamos a morir todos.

- Es posible, pero también lo son los milagros. - Dice Juan mientras carga con sus METRALLETAS POKÉMON GARTLING DE LA PERDICIÓN y se une a la batalla junto a todos los demás.

- ¡Atentos, Rockets! ¡Abrid fuego! - Ordena Eric mientras todo su grupo dispara, dejando sin energía los escudos de la base.

- ¡O los rockets o nosotros! - Dice Juan mientras comienza a disparar.

- ¡Ya conoces mi voto! - la responde Kiara mientras ella lanza bolas de fuego desde sus cabezas de kitsune.

Los Rangers se defienden como pueden, pero entonces sus armas empiezan a quedarse sin balas, incluidas las METRALLETAS POKÉMON GARTLING DE LA PERDICIÓN de Juan, quedando así todos a merced de Eric y los rockets, quienes aprovechan para atacar sin miramientos al grupo.

Mientras tanto, en el interior de la base, se puede ver algo bajando por el haz de luz que ha creado Juan, llegando hasta el interior de la cápsula estanca en blanco. De ella entonces sale algo grande y robusto que comienza a caminar por la base, y lo primero que se encuentra es a Poti, que ya se ha recuperado en la cámara de reanimación, y lo que ve… le deja con la boca abierta.

Al cabo de un rato, comienza a amanecer y los Rangers están todos más muertos que vivos.

- Llega… el amanecer. - Dice Juan, quien tiene el pecho completamente abierto.

- Y también… nuestro ocaso. - Termina de decir Rakkun, a la cual se le ha caído el brazo. Menos mal que la sangre es rosa.

- Avanzad, Rockets; hemos esperado largo tiempo este momento. Bieeeen~ Acerquemonos a disfrutarlo.

Siguiendo las ordenes de Eric, todos los rockets avanzan lentamente para su disfrute de poder acabar con sus propias manos con los rangers.

- Al menos… moriremos con honor. - Dice Rakkun, al ver en la situación en la que se encuentran.

Cuando ya están lo suficientemente cerca, Eric ordena acabar con ellos, pero entonces, comienzan a ser atacados por algo que viene del interior de la base Ranger. Todos comienzan a preguntarse de que se trata, hasta que se dan cuenta que, por el suelo, hay rodando, ni más ni menos que… un balón de futbol.

Todos entonces miran arriba con cara de sorpresa, pero mientras la expresión de los Rangers muestra esperanza, la de los Rockets, sobretodo la de Eric, muestra desesperación ante la imagen que se les planta delante.

- ¡Vaya, esto es precioso! - Exacto, Rangu ha vuelto, y actualizado con un Power Suit AZUL de oso, con un cañón en su cintura y dos mazas sujetas a un escudo enorme que tiene en su espalda con dos hombreras aun más grandes que las de Eric.

- ¡Es el jefe! - Se alegra Kiara, a la cual casi se le empiezan a saltar las lagrimas.

- Sí… ha funcionado… - Dice Rangu intentando reincorporarse.

- ¡Es Rangu! ¡Devolvedle a la tumba! - Ordena Eric al ver que su vieja némesis ha vuelto.

Todos los Rockets comienzan a disparar, pero Rangu consigue protegerse a tiempo con el escudo de su espalda.

- ¡Me toca! - Dice Rangu, que hace que cambia de posición el escudo, haciendo que las mazas de futbol se conviertan en cañones y comience a disparar con ellos a los Rockets haciendo que se escondan.

Para seguir jugando con ellos, Rangu decide descender en su nueva forma actualizada: convirtiendo su escudo en una tabla de surf voladora propulsada por el cañón de su cintura.

- Volar ya no es solo una ventaja para ti, Rangu. - Dice para si mismo Eric, quien también adquiere su modo de vuelo para perseguir a Rangu.

Rangu logra aterrizar, y se ve rodeado por un lado por Doc y Kofi y por el otro por Pazos, siendo este el primero en disparar. Por suerte Rangu esquiva la fruta explosiva, dándoles de lleno a Doc y Poti.

- ¡Te toca arder a ti, Rangu Gamer! - Dice Pazos, retando así a un duelo de velocidad a Rangu.

Ambos están frente a frente, pistolas en cintura y con las manos listas para desenfundar, momento perfecto que aprovecha Eric para situarse detrás de Rangu para tener un blanco mejor.

Al final del duelo, Rangu demuestra ser más rápido disparando un balonazo al pecho de Pazos, y es ahí cuado Eric saca sus miniErics.

- ¡Hola y adiós, Power Rangu Gamer! - Le dice Eric sorprendiéndole antes de abrir fuego, pero entonces algo se pone en su campo de visión.

Es ni mas ni menso que Poti, que desciende volando y embiste a Eric empujándole por el barranco que tenía detrás.

- ¡Considera eso mi renuncia a los Rockets, EricRod! - Le grita Poti mientras Eric cae al vacío. - Ahora se que mi sitio estuvo siempre con los Rangers. ¿Puedo unirme a vosotros?

- Pues… Me gusta tu curriculum. - Dice Rangu mientras oye como Eric ya ha llegado abajo.

Al cabo de un rato, todos se encuentran en el interior de la base, y completamente curados.

- ¿Esto ha hecho la explosión del arma de los Annonymus? - Pregunta Rangu al ver su nuevo look. - ¿Y cómo aguantamos la infección de los bots?

- No supone ningún problema, jefe. - Explica Kiara. - Los trajes absorben completamente la infección y cargan por completo nuestro armamento.

- Este sector del planeta recibió toda la potencia del revienta planetas. - Comienza a explicar Juan. - Todos los bits locales o explotaron o se convirtieron en cubos estables de bits. En cuanto al resto del planeta, tendremos que esperar el informe de Lynx y Marina.

- Bien. Mientras tanto, hay mucho trabajo pendiente, gente a la que conocer, y cosas que hacer. - Comienza a decir Rangu. - Fundamentalmente, ¡decirle a HebiLee que quite toda su basura de mis aposentos!

- ¡Hebi! - le acusa Kiara.

- Alimaña oportunista. - Le echa en cara Rakkun.

- Eh, vamos, chicos. Cortaos un pelín. - Comienza a decir Hebi. - El chico estaba muerto.

Tras terminar estas palabras, Hebi recibe una colleja por parte de Rakkun.

Mientras tanto, en la base Rocket, Eric ya se ha percatado de todo lo que ha pasado ahí en su ausencia.

- A ver, que me quede claro: Rakkun se ha llevado los pendrives y ha destruido mis copias. Pero nosotros contamos con tu completa recuperación.

- Yo vivo solo para servirte, Eric. - Le contesta Tsuki.

- Ya ya… Y de mis copias de datos, ¿estás segura de que no se puede recuperar nada? - Pregunta Eric.

- ¡Sí! ¿Nada en absoluto? - Pregunta Doc, quién también se encuentra por ahí.

- Como puedes ver, están totalmente destruidas. - Le demuestra Tsuki. Y Eric, de la rabia, golpea contra la pared a Doc.

- Sí… ya veo. - Eric entonces abandona el lugar, no sin antes soltar una de las suyas. - Bieeeen~ Entramos en una nueva fase de la guerra de los streamers. Los acontecimientos futuros serán muy interesantes.

- Sí~ pero que muy interesantes~ - Dice Tsuki, mientras guiña a nuestros querido lectores, y en sus ojos se pude observar que ella posee en su interior los datos de los pendrives.

- FIN -