Hola a tooodos! XD

Aquí les traigo el último capítulo de esta historia...

;.; me siento feliz de poder haber terminado este proyecto, que empezó como simple distracción en las clases de la secundaria y terminó tecleándose en Word.

Esta historia-alterna- de Zelda, me abre el camino para empezar otras historias que tengo en mente.

Agradezco a todos los que ocuparon parte de su tiempo leyéndola, y a los que me dejaron un review, me agregaron al msn o me enviaron un mail, a todos los aprecio, en especial a ciertas personas que estuvieron siempre al pendiente.

Ellas son: Zilia K, en verdad aprecio que una escritora como tú me haya dado la oportunidad de conocer más acerca de tu persona, y los geniales comentarios que me hacías.

Mineko-chan: tu me mandaste el primer review...dándome ánimos, muchísimas gracias! Eres muy creativa y divertida, espero sigas así siempre.

Fukaru Rhyan: muchísimas gracias por tus comentarios, conocerte aunque sea por msn, me dio ánimos para seguir.

Phantom girl: aunque a ti te conocí ya cuando estaba muy entrada en la historia, agradezco tus palabra de aliento, platicar contigo fue un placer!

Iruka Aoi: jamás pensé que alguien como tu leyera mi historia- por lo del tema de tu fic, en primer lugar- pero platicar contigo siempre fue divertido, y aprendí muchas cosas.

Gracias a todas ustedes.(Dialirvi hace una pequeña reverencia)

Espero les haya gustado leer esta historia, como a mi me encantó hacerla.

Si quieren algo en especial (epílogo, capítulo inédito) me avisan por review ;D

Se despide afectuosamente de ustedes...

Dialirvi ;)

Capítulo 20: "Un final, un comienzo".

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Los niños se le quedaron viendo a los sabios, ellos asintieron.

-Se puede saber...¿qué pidieron?-Le dijo Saria al niño.

-Pues, ambos estamos de acuerdo... y creo que a todos les beneficiará...-le respondió él.

-Entonces...princesa...haga los honores y toque el triángulo dorado-le habló Rauru.

Zelda se sorprendió, estaba curando una herida de Impa.

-¿Yo? Pero porqué ellos no?

-Hágalo su majestad...ha estado en contacto con la trifuerza más tiempo que nosotros.

Caminó algo dudosa hacia la imponente estructura, alargó su mano.

-Bien...díganme lo que desean...-y tocó la superficie dorada.

-Deseamos...-respondió Suze- que todos los que fueron injustamente asesinados por Kaloh vuelvan a la vida...no recordando el momento de su muerte...

-Y que las barreras y puertas desaparezcan, dejando todo Hyrule como antes de este problema- finalizó el niño.

Zelda asintió, Rauru sonrió, habían deseado exactamente lo que él pensaba.

-Diosas creadoras de Hyrule!-comenzó la princesa- cumplan el deseo de ésta su fiel servidora!Deseo...que todos los injustamente asesinados por Kaloh vuelvan a la vida, y que les borren de la memoria el momento de su muerte! Destruyan las barreras y todo lo que haga alusión a ellas, liberen las almas de los caídos y que vuelva la paz!

Una luz cegadora los inundó a todos y después ya no supieron nada.

Y que esto no se vuelva repetir...Gracias Diosas...Finalizó Rauru, desapareciendo hacia la cámara de los sabios.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Miltreth veía solitariamente al castillo, estaba por alguna razón muy triste.
Agitó su farol viendo cómo la llama refulgía en su interior, observó con detenimiento las flamas azules que la rodeaban.

Una luz muy potente salió del castillo, y dos brillos dorados se fueron en distintas direcciones.

Sintió que tocaba el suelo de nuevo, las flamas a su alrededor desaparecieron y el farol extrañamente desapareció.

Se observó una mano¡ya no era transparente!

-Estoy viva!-Dijo sin creerlo y comenzó a saltar de alegría.

De pronto sintió algo muy pesado.

-Mi padre...se supone que lo estoy ayudando a acarrear la paja. Debo ir a Villa Reloj... ahí debe estar...

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Suze despertó en una habitación del castillo, todas sus heridas estaban suturadas y debidamente curadas, alguien la había cambiado de ropa, cambiándola por un vestido sencillo azul.

La habitación encantadoramente arreglada, con muebles muy finos, y en un sillón toda su ropa y su morral de pertenencias a un lado.

Alguien se había molestado en arreglar su báculo destrozado, amarrándolo con una cinta de cuero.

Se sentó en la cama, y se dispuso a salir de ahí, cuando alguien tocó a la puerta.

-Estás despierta?- la voz de Impa sonó del otro lado de la habitación.

-Si..pase...

La sabia entró, se alegró mucho de ver a la niña despierta.

-Has dormido 5 horas, espero no te moleste que te haya curado las heridas.

-No...muchas gracias...¿y Link?

-Está en la habitación cruzando el pasillo...aún no despierta. El Rey casi está por llegar...y...

-Impa..¿ya despertó?- la voz de la princesa se escuchó lejana.

-Claro su majestad...puede entrar.

Nada que ver con lo que había visto en el salón del trono horas antes, la mujer que había visto en las garras de Ganondorf a punto de morir asfixiada no se comparaba con lo que tenía en frente, era como otra persona, un vestido rosa pálido con toques morados, una tela azul en la falda con la trifuerza bordada con finos dibujos, algo así como una hombreras de oro puro, un cinto del mismo material, el cabello suelto que le llegaba hasta un poco más arriba de la cintura, y una tiara que adornaba su frente, hecha de oro y con un rubí en el centro.

-Pensé que te demorarías más en despertar.

-Princesa...-dijo Suze toda apenada- no merezco estar en el castillo.

-JA! Tonterías! Te mereces eso y más! Hyrule ha sufrido una extraordinaria transformación!Todas las bajas que habíamos tenido se redujeron..

-Eso quiere decir que...

-Todos los muertos revivieron!- finalizó Impa muy emocionada.

A Suze sólo le pasaron las imágenes de su mamá y su hermano.

-No sabes cuán agradecida estoy contigo- dijo Zelda sentándose a un lado de ella- cuando vayamos a Ciudad Sheikah serás recompensada en sobremanera, y a Link también...

Suze se enrojeció, muy apenada.

-Yo sólo deseo estar con mi familia.

Zelda e Impa se miraron con una sonrisa.

-Pronto saldremos.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Link se despertó con el brazo vendado, y le dolía mucho, un aparatoso vendaje en el cuello, y un ungüento aplicado en unas heridas por todo el cuerpo.

Una sirvienta estaba acomodando sus cosas en un buró.

-oh! Le diré a su majestad que usted ya despertó...-salió de la habitación.

-o.O

Al poco rato llegó Impa y la princesa, seguidas por Suze, que tenía casi toda la cara suturada.

-XD deberías verte!parece como que te cosieron!

-¬¬XX que bueno que ya despertaste Link...

-Link...-la princesa lo llamó- debes saber que puedes pedir lo que quieras, estás en tu derecho, has ayudado a salvar el reino.

-Pedir lo que quiera?- se quedó pensativo.

-Va a ser una tarugada, de eso estoy segura- comentó la chica.

-Quiero...ir con mi papá! Y regresarle estas cosas a Fado- dijo viendo la espada y el escudo- basta de aventuras por un tiempo -.-

-Pues, si eso es lo que deseas...en la tarde partiremos a Ciudad Sheikah, y llevaremos a Saria al bosque...

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Saria caminaba por un pasillo que daba al salón principal, se había despertado una hora después de lo del deseo, y estaba en una cama , se levantó para buscar a Impa.

Ruto estaba en el salón principal admirando una pintura de ella con los demás sabios.

-Esta pintura no me gusta... salgo muy rara...

-Ruto! Qué bueno que te veo!-dijo ella corriendo hacia donde estaba- ven, busquemos a Impa.

Cuando caminaban de regreso a las habitaciones, una mujer morena (gerudo) con ropas azules les salió al encuentro, seguida por un gran goron.

Ellas dos no creían lo que veían.

-Nabooru?-dijo la niña asombrada.

-Darunia?- exclamó la reina Zora.

-JAJA- dijo con una sonrisa ella- los mismos!

-Anda goro, si parece que vieron fantasmas goro!

-O.o están vivos!-Saria se lanzó a abrazarlos.

-Gracias a ustedes y a la trifuerza!-dijo Nabooru muy emocionada.

-Entonces..ya sabes todo lo que le ha pasado a tus...hijos...

La gerudo se puso algo triste...miró a Ruto con cara de angustia.

-No sé qué les pasó...y no quiero averiguarlo, dejemos el tema en paz...¿quieren?

-Goro...es hora de celebrar¿dónde dijo la princesa que sería la fiesta?

-En la Ciudad Sheikah...no te impacientes grandote n.n- le dijo Nabooru.

En eso, se escuchó el relinchido de un caballo, y muchas exclamaciones de soldados.

El Rey, Nohansen Hyrule entró al castillo.

-Sabios?

-Su majestad- hablaron al unísono e hicieron una reverencia.

-Qué hacen aquí? todo se solucionó?

-Así es rey..-empezó Ruto- si no hubiera sido por la excepcional ayuda de dos niños, no estuviéramos aquí.

-Supe que revivieron a todos los muertos...

-Déjeme ponerle al tanto con eso.-Saria se dispuso a hablar.

Cuando le estaba comentando las cosas, llegó Impa seguida de dos chicos.

-Alteza!-dijo asombrada- no pensé que llegara tan rápido...

-Impa, hicieron una maravilla!Todo está reconstruido!Los muertos se levantaron y parecen no recordar nada!Las puertas desaparecieron!

Impa se sonrojó...pues si no hubieran ayudado Suze y Link no habrían hecho nada.

-Ellos son los dos niños que ayudaron en sobremanera...-le dijo señalándolos.

Link hizo una reverencia, y agachó a Suze para que también la hiciera.

-Su alteza...-dijeron los dos en un susurro.

-n.n levántense! Que ustedes aquí son los que serán premiados!

-Para eso vamos a ciudad Sheikah- comentó Ruto- pero yo me voy con mi gente.

-Y yo ya quiero ver de nuevo al árbol deku...-dijo Saria con tristeza.

-Y yo quiero regresar a mi ciudad...comer rocas de nuevo!-Darunia estaba emocionado.

-Ver a mis chicas...-dijo Nabooru- se van a infartar cuando me vean...

-Entonces no van a la ceremonia de recompensa?-dijo la sabia de la sombra.

Los demás negaron con la cabeza.

-Pero...estamos orgullosos de ustedes dos- habló Ruto con una sonrisa.

-Me podrían explicar?-dijo el Rey todo confundido.

-Es que...como ella es una sheikah...regresaremos a la ciudad a ver cómo andan allá-dijo Impa explicándole al monarca.

Mientras le contaban lo sucedido y le explicaban cómo le iban a hacer para recompensarlos, Link y Suze se fueron hacia un lado.

-Ya quiero ver a mi papá...

-Mi mamá...mi hermano...-dio un saltito de alegría-están a salvo!

Link le puso la mano sobre el hombro.

-Espero que cuando llegues los abraces muy fuerte...

-No vas a ir?

-Ya no tengo porqué...Acompañaré a Saria al bosque, y regresaré estas cosas...quiero ver a mi papá...lo extraño mucho, no me ha visto en 5 meses...

-Te comprendo Link, cuando salgamos será la última vez que nos veamos...

-Ah! Ya entendí lo que quieres hacer!-dijo al fin el Rey a la sheikah- tienes mi permiso...

Se escucharon pasos que venían del pasillo que daba a las habitaciones.

El rey volteó, y los sabios sonrieron...Zelda iba directamente al salón principal.

Venía ocupada con unas vendas y no se había percatado de quién estaba ahí.

-Oye Impa... ¿qué hago con estas ven...- alzó la mirada y vió a su papá...ni siquiera se había dado cuenta que estaba ahí- papá?- tiró las vendas aún sin poder creerlo los ojos se le llenaron de lágrimas.

-Zelda? Hija!- no podía creer lo que veían sus ojos, aquella niñita de 14 años que había desaparecido hacía ya 13 años no era la mujer que tenía en frente, pero tenía la misma cara angelical.

Ella fue la que se acercó a abrazarlo¡habían sido tantos años! Él no sabía que hacer, al final se dejó llevar por el momento y abrazó a su recuperada hija.

Los demás veían conmovidos el momento, a Saria e Impa se le salieron las lágrimas, hacía mucho que nos los veían juntos.

-Hija!Estás bien! No puedo creer que seas tú! Qué te pasó?

Ella se separó del abrazo de su padre, y lo vió feliz.

-He pasado tantas cosas, sufrido tanto!

-Qué te obligó a marcharte?

Silencio, sólo ella y los sabios lo sabían, y le habían dicho al Rey que se había ido por causas urgentes y para salvar su vida.

-Te explicaré papá...y de paso aclaro lo que tenía que aclarar...-dijo viendo a Suze y a Link.

"Hace ya 13 años...cuando sellamos a Kaloh...

-¡SELLO!

Un haz de luz envolvió al ser, mientras gritaba y maldecía.

-Tú!

Sólo se le quedó viendo a la princesa, trató de tomarla, para llevarla consigo a ese haz de luz que lo consumía, pero sólo logró rasguñarla

La herida no había sido mortal...pero al finalizar el hechizo caí inconsciente.
Impa me trajo de nuevo al castillo, donde tuve horribles pesadillas cuando me trataban de curar la herida.
Resonaba la voz gutural de ese endemoniado ser por toda mi cabeza...

-El lugar que más quieres...je je je...el lugar que tanto cuidas...será tu tumba... pues mi magia te ha intoxicado, el aire te quemará viva...¡morirás ahogada si no te largas! Y cada vez que regreses...será peor..y si mucho tiempo permaneces... me encargaré de tu cadáver personalmente... ja ja ja ja ja!

Desperté sintiendo algo en mi garganta, me comencé sofocar, llamé a gritos a Impa, que vino en mi ayuda; le conté todo lo que había soñado. Cada vez podía respirar menos...

-Es una maldición...-dijo Impa sombría- será mejor...que vallas cerca del bosque perdido...ahí encontraremos algo que nos ayude...¿puedes cabalgar?

Asentí... y me acompañó a las caballerizas, después de poner en orden mis cosas y llevármelas.

-Vas derecho, tengo que ir por libros de magia, e informarle a tu padre, es peligroso si te quedas aquí...

Y tenía razón, cada minuto que pasaba cerca del castillo era horrible, sentía como si ahogara.

Tomé a mi caballo blanco y me dirigí al este, donde estaba el boque perdido, había pasado como media hora, y ya no podía respirar bien.

Me bajé del caballo, y esperé a Impa tas un árbol, pero cada vez el aire me faltaba más... no pude aguantar y corrí hacia el bosque, sin importarme nada.
A lo lejos escuché el silbido de Impa, pero no podía regresar, corrí y corrí, hasta llegar a un riachuelo, ahí, supe que la única forma de sobrevivir era siendo otra persona, y como ya había intentado eso antes, cuando Ganondorf atacó por primera vez, sabía que no sería nada nuevo.
Me concentré con mucha fuerza y cambié de identidad, pasé de nuevo a ser ese joven de ojos rojos, un sheikah...

Pude respirar, pero de algún modo, seguía siendo yo, me vi en el agua del riachuelo, era como si sólo me hubiera vendado la cara.

Yendo así, regresé a buscar a Impa, pero no la encontré..."

-Habían pasado más de dos horas... y después llevé a muchos soldados a buscarte...-dijo Impa toda triste.

-Deja que cuente Impa, sé que no fue tu culpa...-la consoló el Rey.

-Está bien...ahí fue cuando me convertí en sheikah de nuevo...

"Regresé por mis cosas, y caminé mucho tiempo hasta llegar a una planicie, sabía que eso ya no era Hyrule, y para comprobarlo volví a ser yo; no me asfixiaba... ¡no era Hyrule!
Me fui por un senderito, y llegué a una aldea, donde me di cuenta que era el reino de Oredean."

-Oredean?-dijo el Rey sorprendido- eso está a kilómetros de aquí! casi 6 meses de viaje...¿cómo...?

-Recuerde su majestad- habló Saria- que el bosque perdido se come muchos trechos de camino, y todos sus lugares son mágicos.

-Entonces- continuó la princesa- estaba en Oredean...

" Ahí me dieron posada durante un mes, pero me fui de ahí para tratar de confeccionar mi poder y eliminar de la presencia de Sheik todo lo que tuviera que ver conmigo.

Pasé 2 años trabajando como un hombre en ese lugar, hasta que fui en busca de una cura para mi maldición.

Y en ese viaje pasé 10 años buscando en 5 diferentes reinos, y nadie me podía ayudar.
Destrozada y cansada volví a Hyrule, me tomó casi un año, pero ya no como princesa, ya no como Zelda, sino como un mago que para subsistir hacía trucos para entretener a la gente.
Ahí fue, cuando llegué por el sur, a Ciudad Sheikah.

Me maravillé con todo lo que habían hecho en ese lugar, la gente me veía raro, porque llevaba un atuendo parecido al de ellos.
Comencé el espectáculo, y ahí fue cuando..."

-Te robaron tus pertenencias y yo salí tras el ladrón...-dijo Suze interrumpiendo el relato al escuchar esa parte.

La princesa asintió.

-Pero es parte del pasado! Ya no hay que recordarlo! Hay que celebrar que estamos aquí juntos!

El Rey vió a Impa, había algo que tenían que decirle, pero no ahí, sino en privado.

-Disculpen, pero- Saria comenzó- debo regresar con el Gran árbol Deku...

-Es cierto, la celebración pronto comenzará! Es hora! A Ciudad Sheikah!- dijo ella muy emocionada.

-Si, es hora...-dijo Impa- alisten los caballos!

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Ya llevaban 3 horas de camino, Suze y Link iban sobre Kiny, los demás sabios habían partido cada quien a su lugar, excepto Saria que iba con Impa sobre su caballo, Darunia que venía "rodando", y la princesa que iba sobre su caballo blanco.

-Pronto llegaremos, sólo dos horas más y estaremos en el bosque kokiri...-le decía Impa a Saria que ya estaba impaciente.

Link veía divertido la escena, hasta que llegaron a Ciudad Goron.

-Aquí me despido su majestad- dijo el goron haciendo una reverencia.

-Cuídate mucho Darunia...

-Nunca nos olvides, nos volveremos a ver- se despidió Saria.

Impa sólo hizo una seña con su mano, y fueron de nuevo al sur.

-Suze...

-Sí, Link?

El niño se afianzó de nuevo a ella por atrás, ya que casi se cae de la yegua.

-Nada...

Al par de horas divisaron la casa de Dan, era ya muy entrada la tarde; y él estaba regando unas plantas.

Llegaron los caballos y el señor se quedó impactado por la comitiva que venía con ellos.

-Li..Link?- dijo sin poder creer lo que veía, a su hijo acompañado por la mismísima princesa de Hyrule y dos sabias.

-Papá!-Link se bajó del caballo y corrió hasta los brazos de su padre.

-Hijo! Estás bien! Me alegra tanto!por las diosas!

Los demás se bajaron del caballo, Impa ayudó a Saria a bajar.

-Un gusto verlo de nuevo señor Dan...-dijo la kokiri.

-Srita. Saria! El gran árbol Deku estaba preocupado por usted, pero ahora está feliz al saber de su victoria...

-Claro...- se volteó para ver a Impa, Zelda y Suze- muchísimas gracias... ahora Hyrule está de nuevo a salvo, no sé qué decir...

Zelda se acercó a la sabia del bosque.

-No hay nada que decir- la abrazó- cuídate mucho, por que eres mi amiga...

-Sí, Zelda...yo también lo extraño...-le susurró al oído.

-...

-Ahora, déjame despedirme de Suze- caminó hacia ella e hizo una pequeña reverencia- gracias... a ti y a Link... han sido de gran ayuda...

-no hay de qué- dijo Suze toda apenada.

-Señor Dan...Link, los veré mañana- caminó al bosque- Princesa, Impa, hasta que el destino nos quiera reunir, saben dónde estoy...- y se fue corriendo hacia su hogar.

-Suze...-La llamó el niño todo triste.

Ella fue a su lado.

-Este es el adiós Link...-dijo ella tratando de reconfortarlo- eres un buen amigo.

-Gracias por dejarme acompañarte...me ha servido de mucho...gracias!-dijo abrazándola.

-Fue un placer convivir contigo...-se separó del abrazo- eres mi otro hermano menor...

-Cuídate mucho, prometo ir a visitar...

-Adiós Señor Dan... adiós Link...¡hasta pronto!- dijo corriendo para subirse a su caballo.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Impa veía a Zelda que iba toda seria, recordaba lo que le había dicho antes de salir del castillo.

"-Zelda...debes saber...-comenzó su padre- que Link regresó una vez...

-Qué?

-Link regresó dos años después de tu desaparición- comenzó Impa- pero al ver que no estabas...

-Salió en tu búsqueda...y no hemos vuelto a saber de él...

- qué quieren que yo haga? desde hace casi 14 años no lo veo... no puedo hacer nada...

Nohansen abrazó a su hija.

-Sé...que lo extrañas mucho, como nosotros te extrañábamos a ti...

-Yo..pensé que estaba aquí en Hyrule..lo busqué mientras iba tras Suze y el otro chico...jamás lo encontré...

-Hora de irnos Zelda...-Impa la llamó.

-Regresaremos mañana papá...

-Hasta luego..."

La sabia de las sombras veía como la princesa tenía la vista perdida en el horizonte...
Hasta que divisaron una construcción a lo lejos.

Llegaban a Lon Lon Ranch, había pasado una hora desde que dejaron las afueras del bosque kokiri.

-Es hora de regresarte Kiny...-le dijo la muchacha a la yegua mientras caminaban hacia la entrada del rancho.

Malon estaba atendiendo a unas vacas, cuando observó que había clientes. Llegó presurosa a atenderlos, y se llevó una sorpresa.

-Su majestad! Impa?

-Hola Malon!-le dijo Zelda sonriendo- venimos para entregarte algo.

Suze se bajó de la yegua, y le entregó las riendas a Malon.

-Muchísimas gracias, pero ya no la necesito...

Se quedó sin saber qué decir.

-¿Cómo está tu hijita?-le preguntó la princesa.

-Bi..bien...

-Qué gusto!-Dijo aún sonriendo- aún afligida por la muerte de su papá? Perdón por no haber venido, pero acabo de regresar de un viaje...

-La herida sanó...princesa...mi esposo murió atacado por un wolfo, por si no lo sabía... con su permiso, veo que tienen prisa; Suze, gracias por cuidar a Kiny...hasta luego...

Se retiró al rancho.

-Continuemos- le dijo Impa a Suze, le estiró una mano para que viajara con ella en el mismo caballo.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

-Se acercan.

Faina se paseaba inquieta por el templo.¿Dar aviso a Teia?

-No, una sorpresa es mucho mejor...

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Iba muy nerviosa, iba a ver a su familia de nuevo.

-Nerviosa?-Impa parecía leerle el pensamiento.

-Un poco...los extraño mucho...

-Impa...-Zelda la llamó- ¿has hablado con la sacerdotisa del templo?

-No...¿eso que tiene que ver? Ah! Ya veo...-dijo recordando algo de pronto.

Casi al anochecer, llegaron a la salida de la ciudad, se bajaron de los caballos, dejándolos en un tronco amarrados.

-Mi casa...-dijo Suze feliz, al ver de nuevo su ciudad reconstruida, con vida, no como la había visto días antes.

-Vamos...tienes a muchas personas que ver, y después te hablaremos de lo que te tenemos planeado- le sonrió la princesa.

-Nosotras estaremos en el templo del poder, puedes ir con tus conocidos...-Impa la despidió.

-Si...-asintió y muy emocionada se fue corriendo hacia su casa.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Seth estaba jugando con un gato en el patio de su casa, había estado muy aburrido, le jaló la cola y el animal chilló y le lanzó un zarpazo, que esquivó.

-¬¬ Méndigo gato hijo de...gata...

-Seth! Deja al gato en paz!por Farore!- su madre lo regañó desde la casa.

El chiquillo de 10 años estaba enojado con el gato, con su mamá por haberlo regañado.
Desde que se había ido su hermana, no había tenido con quién jugar, con quién entrenar...

Una lágrima rodó por su mejilla.

-¿Dónde estás?- dijo apretando su puño.

Suze corría a toda velocidad por la calle, la gente la saludaba en cuanto la reconocía , hasta que llegó a las afueras de su casa, observando cada detalle, y notó a su hermanito que hacía un berrinche.

-Seth!

El niño volteó, y su cara se le iluminó, corrió hasta la baranda para saltar fuera de la casa y lanzarse a su hermana que lo recibió con brazos abiertos.

-Su!

Giraron aún abrazados, y ella lo depositó de nuevo en el suelo.

-Cómo has estado! Quiero saber todo!

-Qué te pasó? Te ves más feliz!

-Sólo que ya quería verlos, los extrañaba muchísimo.

Teia salió de la casa.

-Seth!Ve por ag...agua...-su madre la vió, tirando el recipiente que traía en las manos- Suze!

-Mamá!

Ahora fue ella la que corrió hacia su madre, que la abrazó con fuerza.

-Mi niña! Ha vuelto!-Dijo llorando.

Ella no dijo nada, sólo se quedó ahí, Seth llegó y abrazó a las dos, así se quedaron un buen tiempo.

-Pero dime! Qué hiciste! Qué aprendiste!

-Ya habrá tiempo para contar...Impa y la princesa me esperan en el templo del poder...

-La princesa?

-Es una historia muy larga...

Caminaron hacia el templo, había mucha gente en la plaza.

Faina e Impa hablaban sobre todo el problema que había sido resuelto, respondiendo preguntas de los pobladores.

-Suze! Sube acá!- la llamó Impa.

Zelda se paró mientras la chica subía, era hora de hablar sobre lo que le darían.

-Primero que todo...mi más profunda gratitud a esta chica que por su gran responsabilidad...

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Era ya casi de noche, cuando un viajero que venía sobre una yegua desmontó cerca del límite entre el bosque perdido y el campo de Hyrule.

-Vaya! Esto sí que ha cambiado... creo que por ahí hay una villa o algo...

La yegua relinchó ruidosamente.

-Sí...ya sé que estas cansada...deja de quejarte y vamos, que ahí sabremos a dónde ir...

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

-...y es por eso, que la sacerdotisa, la sabia de la sombra y yo...hemos decidido, que Suze, sea aprendiz directa de Impa, y ayudante de la sacerdotisa. Además de nombrarla guerrera desde ahora, y hasta que complete su entrenamiento.- sonrió- ya veremos qué podemos hacer...

Ella se sorprendió; todos los ahí reunidos lanzaron vítores y aplausos, su madre estaba llena de felicidad.

-Aceptas?-le preguntó Impa.

-Yo...- vió a su mamá- si...

Más aplausos. Terminó esa condecoración y caminó hacia su madre, que la abrazó.

-Estoy muy orgullosa de ti...

-Yo feliz de regresar...

Se armó una fiesta tremenda en la plaza, mientras Impa y Faina afinaban detalles dentro del templo.

-Impa... estaré por allá afuera... necesito aire.

-Claro su majestad... la buscaré más tarde.

Y salió en dirección el campo, sólo para observar de lejos la ciudad sheikah.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Suze estaba en las afueras de su casa, hablando con los demás chicos de su grado, hacía mucho que nos los veía. Platicando de su aventura, de cómo era el campo allá afuera; cuando alguien le tocó el hombro.

-Regresaste pequeña tonta...

Se volteó para descubrir a Rein, le sonrió y lo abrazó pasándole las manos por el cuello.

-Rein! estás bien!

-Claro que estoy bien! Me alegra que hayas vuelto!

-Yo también me alegro de estar de vuelta.

-Emmm...Suze, acerca de lo que puse en esa carta...- se puso rojo- no creas que yo...eran las circunstancias...

Suze se liberó del abrazo, para poder verlo.

-Me dolió mucho verte muerto...

-Muerto? Yo?

-Olvídalo...pero...- vió al suelo muy apenada- nunca te vayas de mi lado...

Él tragó saliva, vió la cara herida de la chica, le pasó un dedo por la venda de la frente.

-Se ve que sigues igual de torpe!XD

-¬¬XX-lo golpeó con el puño cerrado.

-X.x era mentira! Ya te quería ver aquí!

La abrazó ahora sí más fuerte que antes, acercando su cara a la de ella.

-o.oUUU- sólo lo vió sonrojada.

-Me gustas Suze... y desde hace tiempo...

-yo...- no podía hablar de lo nervios.

Le dio un fugaz beso en los labios, y se fue corriendo.

Ella se quedó ahí parada, viendo cómo se alejaba.

-Suze!

Su madre la llamaba, de seguro para cenar, fue corriendo a su casa.

Mañana, sería un nuevo día...

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Zelda estaba en medio del tramo que separaba la ciudad Sheikah con el campo de Hyrule.

Sola, observando el firmamento tachoneado de estrellas. La luna, llena, dando un toque tenue de luz a todo lo que estaba debajo de ella. Una leve brisa corría por el lugar, levantando levemente su vestido, moviendo su cabello.

-Ahora que estoy aquí... me gustaría saber dónde está...- dijo en un tono de reproche a las Diosas.

Suspiró, cansada... y sólo siguió observando el firmamento.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

El joven caminaba con su yegua a lo que parecía ser una ciudad.

Cuando se dio cuenta de que había alguien en medio del camino, una mujer.

Se acercó para preguntarle dónde estaba...cuando se detuvo, reconocía esa cabellera, la forma de pararse, el vestido, aunque estaba de espaldas a él, ya sabía quien era.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

Zelda estaba tan atenta a sus pensamiento que ni siquiera se dio cuenta de que había alguien detrás de ella a pocos metros.
Una voz varonil la sacó de sus pensamientos.

-Zelda? Eres tú?

Se crispó, conocía esa voz...pero no tan grave, de pronto lo recordó, se volteó lentamente para poder verlo, se llevó una mano a la boca.
Iluminado por la tenue luz lunar, se encontraba un hombre rubio de ojos azules.

-Link?- susurró sorprendida.

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOo

EL FIN