Descargo de responsabilidad:

Miraculous: las aventuras de Ladybug y Chat Noir no es de mi autoría ni propiedad, es de la empresa ZAG Heroes y de su creado Thomas Astruc.

No sé quien es el autor de la hermosa imagen de portada, si lo sabes dimelo así le doy los créditos correspondientes

PRECAUCIÓN: Spoiler de la temporada 3.

Disfruten la lectura


Capítulo 6: Nuevo guardián

Todo era un desastre.

Y pensaba que no podía empeorar, pero estaban muy equivocados, porque lo peor estaba por venir.

Ladybug no tuvo el suficiente cuidado al buscar en miraculous, lo que ocasionó que el siempre alerta Hawkmoth descubriera la ubicación del Guardian. Ahora Fu se encontraba resistiendo con su campo de fuerza contra un sentimonstruo, mientras Ladybug y Chat Noir peleaban contra todos sus aliados bajo el control de Chloe.

No solo habían descubierto el escondite del Maestro Fu y ahora el débil aciano se encontraba peleando a la par de los jóvenes, sino que sus enemigos tenían en su poder la caja de los miraculous, y habían descubierto la identidad de todos los aliados que habían tenido hasta el momento.

Después de una larga y agotadora pelea ganaron, pero… ¿a qué precio?

A pesar de volver a la normalidad, el poder de Tikki no lograba borrar la memoria de los enemigos, por lo que ya no podría volver a encomendar miraculous a las personas que había elegido Ladybug en un principio. A algunos portadores no los había llamado a luchar muchas veces, pero aliados como Alya, Nino, Kagami o Luka eran una gran perdida, porque ya había adquirido mucha experiencia en la lucha contra los akumas.

Hawkmoth se estaba volviendo cada vez más agresivo, tendrían que conseguir nuevos aliados, ¿cómo haría eso? Al descubrir las identidades de los portadores de apoyo no tardarían en darse cuenta que Ladybug tenía relación con la clase de la señorita Bustier del colegio Francoise Dupond. Tendría que ser muy cuidadosos de ahora en más.

Por otro lado, tendrían que buscar una forma de controlar a Chloe, porque claramente no había quedado feliz luego de ser akumatizada y perder, y era obvio que no volvería a recibir un miraculous, lo que la mantendría más furiosa que se costumbre, pero al mismo tiempo había que protegerla más que nunca de Hawkmoth, sin importar los nuevos sentimientos que Adrien y Marinette tendrían por ella. Era hora de demostrar que, a pesar de ser adolescentes, eran muy maduro gracias a su deber como héroes de Paris.

El lado bueno es que habían recuperado la caja de los miraculous, pero el precio final a pagar era la pérdida del Maestro Fu como aliado y como Guardian, lo que también se traducía en su perdida completa de la memoria. Incluso si había dejado en respaldo en caso algo como esto llegase a pasar, no era lo mismo que tener su sabiduría y conocimiento al alcance de la mano en todo momento.

De ahora en más, Marinette sería la nueva guardiana y, a pesar que había estado entrenando con Fu desde hacía un año para este momento, ella nunca pensó que realmente llegaría a suceder, le faltaba mucho por aprender todavía, y ya no tendría la guía de su maestro para seguir adelante en aquel incierto camino. A pesar de llevar tantos años siendo Ladybug, en su interior tenía siempre presente la inseguridad de Marinette Dupain Cheng, prnsando que no podría hacer eso sola sin alguien que la guie.

También estaba el hecho de que Hawkmoth sabía que Ladybug era la nueva guardiana, lo que se traducía en un nuevo peligro para ella y todos sus seres queridos, porque de ahora en más la buscarían no sólo por ser Ladybug, sino también por ser la guardiana, y no tenía ninguna duda que Hawkmoth haría todo lo posible para descubrir su identidad, incluso si tenía que extorsionarla con su familia o seres queridos.

Marinette tenía una gran necesidad de llorar por lodo lo sucedido, pero ese no era el momento. Tenía que llamar a Marianne y hacerse cargo de Fu hasta que su amada pueda buscarlo en Paris.

Tenía que hacer un plan para asegurarse que todos sus amigos y ex portadores permanezcan a salvo de ahora en adelante. Y también formular un plan para que no la persigan de camino a casa al final de cada pelea.

- ¿M'Lady? -pregunto preocupado Chat Noir mientras se encontraban arrodillados junto a un Maestro Fu sin memoria.

-lo siento Chat, solo estaba pesando -dijo con una seriedad que le helo la sangre al chico de la máscara. Sabía que Ladybug no lloraba, pero en una situación límite como era aquella, esperaba por lo menos que se le humedezcan los ojos- deje que lo acompañemos a un lugar seguro, señor Fu -se dirigió con una débil sonrisa ante el anciano- Chat, llévalo a su hotel, su nieta ira a buscarlo más tarde.

Todo era una mentira, obviamente. No quería que lo primero que Fu sepa de ella sea una mentira, pero no quedaba de otra. Su vida entera era y sería una mentira de ahora en más. Pero no había otra alternativa, tenía que convencerlo de que Marinette era su nieta para reunirlo con Marianne y que este no desconfíe.

- ¿qué harás, M'Lady? -pregunto preocupado, sabía que ella estaba fingiendo. Tal vez no aprendía del todo como leer sus movimientos y expresiones, pero si sabía leer sus ojos, y eso era más que suficiente para saber que estaba fingiendo- estoy aquí si necesitas algo -dijo casi suplicante, esperando que ella muestre algún sentimiento real.

-gracias Chat, pero necesito encargarme de un par de cosas -respondió con la seriedad que llevaba hasta el momento, sin darse cuenta de la preocupación que estaba generando en su compañero- hablaremos más tardes -lo tranquilizo- por ahora te encargo llevar seguro al señor a su hotel.

Dicho esto, Ladybug arrojo su yoyo y se alejó del lugar de la pelea con la nueva caja de los miraculous bajo uno de sus brazos. Rápidamente se dirigió a su casa, sabía que Hawkmoth había huido junto a Mayara cuando esta se desmayó, por lo que le daba un poco de ventaja para correr a su hogar sin peligro, pero sabía que eso no sería algo usual. Tomo la nueva caja de los miraculous y la escondió bajo unos tablones tras el diván. Pero antes de ocultarlo por completo, guardo el miraculous de la tortuga viendo la expresión triste de Wayys por perder a su portador, y saco el miraculous del zorro.

Era consciente que no podría dárselo a Alya, sería muy obvio. Pero, conociendo el riesgo que conllevaba, iba a darle ese miraculous a uno de sus aliados revelados. Escondió el collar en el yoyo y se dirigió a su nuevo destino.

~O~

-toc toc -dijo Marinette entrando al camarote solo para encontrar a un triste Luka.

-hola Ma-Ma-Marinette -dijo con una media sonrisa el ver a su amiga- ¿qué te trae por aquí?

-pensé que te alegraría verme -bromeo para animar al chico- pero si no soy bienvenida puedo volver otro día.

-lo siento Mari, quédate -la detuvo rápidamente- solo… fue un día largo.

-tengo una idea de ello… -dijo con tristeza, sabiendo que él notaría su tristeza, Luka era realmente muy perceptivo- mira, no daré muchas vueltas al asunto… tu conoces mi secreto, y necesito pedirte un gran favor.

-cualquier cosa para ayudarte, Bugaboo -dijo en tono burlón.

-no copies a ese gato pulgoso -dijo con voz seria, pero mostrando una leve sonrisa- sé que es peligroso lo que te voy a pedir, pero es una tarea algo que solo puedo confiarte a ti…

-sabes que puedes pedirme lo que quieras, Mari, sobre todo si es para mantener a salvo a mi familia y a Paris -tranquilizo el musico.

-temo que esto puede llegar a poner en peligro a tu familia… -por primera vez Marinette mostraba lo que realmente estaba sintiendo. Era inútil ocultarle sus sentimientos a Luka, ya que ni siquiera pudo mantener el secreto su identidad, él la había descubierto el mismo día que la había conocido, aunque nunca se lo dijo. Ella también tenía la cualidad de leer a la perfección al chico y sabía que su familia era su punto débil, no haría nada que pudiese lastimar a su madre y hermana. La azabache saco el miraculous del zorro de su cartera, y lo acuno en sus manos a plena vista del chico- sé que Hawkmoth estará más atentó por saber que eras el portador de la serpiente, pero ahora soy la guardiana y necesito ayuda cuando acaben las batallas y…

-confió el ti, Ladybug -corto el chico tomando el collar y poniéndolo alrededor de su cuello, por debajo de la camiseta de Jagged Stone- cualquier plan que tengas, lo seguiré al pie de la letra -él sabía que su amiga necesitaba un abrazo y saber que todo estaría bien. Conocía muy a Marinette, y más allá de lo que pudiese sentir, sus planes funcionaban como engranajes en una gran máquina- cuéntame tu idea.

-bien, para empezar -de pronto, Marinette se levantó del pecho de Luka y se enderezo, cambiando por completo expresión y actitud. La esencia de Ladybug es la que inundaba ahora la habitación- no entraras en lucha nunca, sería muy peligroso para ti. Necesito que te encuentres siempre cerca, y una vez que derrotemos al Akuma crees una ilusión de cientos Ladybugs huyendo en todas direcciones.

- ¿para despistar a Hawkmoth?

-sí, estoy muy segura que de ahora en más tendrá a alguien siguiéndome, ya sea Mayura o algún sentimonstruo -explico la chica de ojos azules- además, no sabemos cuanta influencia tenga Hawkmoth, tal vez tenga el dinero para hackear cada cámara de la ciudad y así encontrarme… o a Chat…

-creo que mejor hago ilusiones de ambos, no quiero perder a mi tecladista -dijo con una sonrisa burlona esperando la reacción de la chica.

- ¿cómo supiste eso también? -pregunto casi asustada.

-tranquila, no hizo nada obvio -rio ante su reacción- Sass me dijo una vez que los portadores de la Catarina y el gato negro suelen ser almas gemelas, por lo que lo sospeche por mucho tiempo, y hace unos meses veo cómo te mira… me sorprende que todavía no estén juntos.

-eso no va a pasar por ahora -dijo con una triste resignación- es algo muy difícil de explicar, y no es el momento para pensarlo.

Por unos momentos se quedaron en silencio. Luka se arrepintió de decir eso, no tenía derecho a meterse en la relación de sus amigos, y por su culpa ahora Marinette estaba más triste. La pobre adolescente ya debía tener suficientes problemas como para que él sea uno más. Por eso es que no le gustaba hablar mucho, no sabía con interactuar de forma correcta con las personas con las palabras, le iba mejor con la música. Estaba a punto de disculparse por sus palabras, pero el aura de Ladybug inundó la habitación de nuevo.

-entonces, ¿puedo contar contigo? -preguntó seria, como si nada de lo anterior hubiese pasado, ocultando todo rastro de sentimientos.

-claro Mari, yo me encargo -dijo un Luka más tímido.

-bien, tengo que irme -anunció al pararse de la cama, pero volvió a verlo desde el marco de la puerta cuando paro su caminata- necesito pedirte una cosa más… si en algún momento algo pasa, protege a mi familia… no sé qué haría si les pasa algo.

-ni lo menciones, lo haría de todas formas.

-gracias Luka -agradeció con una sonrisa antes de seguir su camino dejando al chico solo en la habitación.

~O~

-ya me encuentro en la estación de trenes, querida, en un par de horas estaré allí -informo la voz del otro lado del teléfono.

-gracias por venir con tan poca brevedad, Marianne -dijo aliviada la azabache- estaré en dos horas allí para llevarte a Fu.

Tras unas palabras más, las dos mujeres se despidieron. Marinette se encontraba preparando un bolso que tenía cosas que había encontrado del Maestro Fu y que tal vez necesitaría en su nueva vida en Londres. Una vez terminada esa tarea se dispuso a ir al hotel donde Adrien había dejado al anciano, aprovecharía esas últimas horas para crean nuevas memorias juntos, y esperaba que su partenaire tenga espacio en su agenda. Marinette sabía que el antiguo guardia no recobraría su memoria, pero esperaba que al menos se le forme una sonrisa cuando piense en sus antiguos aprendices.

De repente el teléfono comenzó a sonar, sacándola de sus pensamientos y volviéndola al mundo real.

-buenos días, M'Lady -saludo la voz del otro lado del teléfono con su típica voz galante, aunque esta vez ausente de toda energía con la que él cargaba normalmente- ¿cómo te encuentras hoy?

-hola Adrien -saludo con voz tranquila- estoy por salir de casa, Marianne llegará en unas horas, así que voy a estar con Fu un rato antes de que se vaya, ¿quieres acompañarnos?

-ignoraré el hecho de que has ignorado mi pregunta solo porque estoy feliz de que me estés invitando a una cita, Bugaboo -contestó más tranquilo, más como el Chat Noir que conocía.

-no es una cita, y te dije que no me llames así -contesto fingiendo enojo, ya que en el fondo si le gusta que él la llame de esa manera- estaremos en su habitación, no creo que sea la mejor idea que nos vean en la calle con él.

-como siempre, tienes razón, M'Lady -respondió con voz aduladora- te veré en un rato.

Al terminar la llamada Marinette ya se encontraba en la calle, camino al hotel donde se había dirigido la noche anterior tras organizar todo lo que tenía planeado para estar seguros de ahora en más.

Adrien había conseguido un hotel alejado de las calles principales de Paris, de bajo perfil, para no llamar la atención. La noche anterior la azabache había pasado un par de horas con el anciano después de decirles a sus padres que no se sentía bien para cenar y huir por la ventana de su habitación como Ladybug.

No le hacía feliz tener que decirle al Maestro Fu tantas mentiras a cerca de quien era ella, o quien era él antes de perder su memoria. Pero dicen que las mentiras son más creíbles cuando tienen algo de verdad en ellas, por lo que le dijo que él era un masajista que provenía del sur de china, que se había casado hace muchos años con Marianne, y estaba hace un tiempo en Paris visitando a su "nieta", que en realidad era una niña a la que él había cuidado cuando ella era pequeña, y le tenía un gran cariño. Era verdad que él provenía del sur de China y que era masajista para ocultar su identidad de guardián. También era real que estaba enamorado de Marianne hace mucho tiempo, incluso si no había poder vivir su vida junto a ella.

Cuando llego por fin a la habitación de Fu, este la abrazó con gran cariño, algo que congelo por un momento a la chica de ojos azules, pero rápidamente entro en su papel de "nieta" y lo abrazó de vuelta. Era muy extraño tener contacto con el antiguo guardián, ya qué él no era del estilo de persona que demuestra afecto físicamente.

Al cabo de un rato también llegó el rubio, diciendo que había sido un antiguo alumno de chino de Fu, y también le había tomado mucho afecto, a lo que también recibió un gran abrazo del anciano.

-que lindo que dos personas queridas para mí tengan una relación tan linda -dijo con felicidad e inocencia el antiguo guardián al verlos tan sincronizados mientras servían el helado que Adrien había llevado consigo.

-solo somos amigos, abuelo -corrigió rápidamente la chica, intentando que no sea demasiado evidente el sonrojo que le había provocado aquella idea. También decidió ignorar a Adrien, a quien conocía demasiado, por lo que sabía que la estaría mirando con ojos coquetos y una media sonrisa de Chat Noir, por lo que solo lo pateo por debajo de la mesa de la habitación, y sonriendo al escuchar su quejido silencioso.

~O~

Unos minutos antes de que el Startrain arribase a la estación de trenes de Paris, el anciano y los adolescentes llegaron y tomaron asiento cerca de las vías. Aprovecharon que aquel era un día frío y cubrieron a Fu con un gorro y una bufanda, para que no se vea del todo su cara. Adrien llevaba un gorro, pero este era de Marinette, ya que él no solía usarlos, pero su cabellera rubia y su cara de modelo llamarían mucho la atención, por lo que lo esconderían con el bello gorro rosa tejido de Marinette, que combinaba a la perfección con la bufanda azul que su padre le había regalado hace unos años.

Tan pronto como el tren paró, Marianne apareció por la puerta acercándose al grupo en cuestión y abrazando a su amado.

-qué bueno que te encuentres bien, mi querido Fu -abrazó feliz y aliviada la mujer al verlo- gracias por cuidar de él, niños.

-no fue nada, Marianne -le sonrió Adrien mientras veía como Marinette se arrodillaba en el piso para abrazar cómodamente a su maestro.

-te voy a extrañar mucho, Fu -dijo en voz baja y abrazándolo con fuerza, intentando aferrarse a él lo más posible, como si fuese a desaparecer- cuídate mucho.

-tu igual, Marinette -sonrió el hombre al separarse de ella- espero que nos veamos pronto.

Adrien también abrazó a su maestro y se alejaron para verlos subir al tren que los llevaría de regreso a Londres. A pesar de no estar mostrando ninguna emoción, Adrien sabia bien que su partenaire estaba sufriendo la perdida de Fu, ella había tenido una relación mucho más cercana al antiguo maestro. Decidió abrazarla por sus hombros para brindarle apoyo, y ella lo acepto rápidamente, girándose para enfrentarlo y esconder su cara en la chaqueta que ella le había regalado para su cumpleaños. Se quedaron así por unos minutos mientras el tren se alejaba.

- ¿Mari? ¿te encuentras bien? -pregunto preocupado después de unos minutos de estar parados en el mismo lugar, en tren ya había salido por completo de la estación.

-lo siento, me distraje y me olvidé de donde estábamos -se alejó nerviosa del chico- solo estaba pensando en que al fin encontré tu color.

-okay… -dijo desconfiado- ¿y cuál sería mi color?

-el rosa, resalta tus ojos -respondió con una sonrisa acomodando el gorro de lana.

-yo siempre había tensado que mi color era el negro, creo que he vivido engañado -bromeo antes de comenzar a caminar siguiendo a Marinette, quien se dirigía a la salida de la estación- ¿te encuentras bien? -preguntó preocupado.

-lo estaré, no te preocupes.


Tuvimos un salto de tiempo, el capitulo anterior pasaría a principios de diciembre, y este a mediados de febrero mas o menos. Tal vez parezca un poco exagerado pasar de Festín a el cambio de guardián tan rápido, pero no son esos acontecimientos los que realmente me importaban tratar en este fic, sino la evolución de la relación entre ambos, y como cambiará de ahora en más.

¿Qué piensan de las pequeñas escenas de Adrinette? Personalmente me gusta mucho el cuadro amoroso, sobre todo el Adrinette y Marichat, y escribir estas pequeñas escenas me dan la vida. ¿Les gustaría un serie de one-shot o drabbles mostrando más escenas de ellos? tengo algunas ideas pero no eran lo suficientemente largas como para hacer un capitulo con cada una, pero podría hacer drabbles en una historia a parte y decir entre que capítulos irían.

Como siempre, recibo criticas y sugerencias, porque me ayudan a escribir mejor y me hacen muy feliz saber si les gusta el resultado.

Hasta la próxima semana.

Naatii3333