N/A: Hace días que tenia esta en la punta de la lengua, pero hoy (lease hace 5 dias) la cerré. ). Dedicada en 100 a alos-ale-alosca-alejandrita, fanática de Sevi.
Ya me tengo que poner yo a escribir algo más largo de él...
Basta de rodeos, a por la viñeta...
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Profundo como Océano
¿Ama Severus? No lo sé. Pasé infinitas tardes a su lado intentando convencerme de que sí, pero es un ser enigmático al extremo. No sé que esperar de él, siempre tan hermético, cerrado en su propio mundo de magia oscura y maleficios olvidados. Ojalá pudiera saber lo que ocultan sus ojos, la parte de su mente en la que no puedo indagar por mucho que quiera.
Aquella noche, después de haber cenado casi en completo silencio, un silencio insondable y espeso que no me atreví a romper ni para pedir que me pasara la sal, nos sentamos en la sala a tomar algo de té. Últimamente todas nuestras reuniones eran así, vacías, vanas, incapaces de satisfacer todo lo que yo necesitaba de él. Deseosa de compañía, de alguien con quien hablar. Ni mi esposo ni mi hijo estaban en casa, estar sola con los elfos domésticos era un suplicio.
-Severus…- dije con voz tambaleante, en un intento de establecer un vínculo con el, algo que me haga creer que todavía estaba vivo.
-¿Si?- su voz profunda y gutural llena la sala, invadiendo, penetrando en mí, hiriéndome en cierta manera. Me siento tan sola y desesperada que podría llegar a tirarme sobre él. Quiero sentirme deseada. Por mi cabeza pasan imágenes, pantallazos, de lo que podría ser una realidad...
Me paro, mirándolo fijamente. Nunca fui una persona dubitativa. Me acerco y le quito la taza de té de las manos. La porcelana tiembla mientras la traslado a la mesa ratona. Estando tan cerca, todavía puedo sentir aquel abismo de dudas que nos separa. Dudas ensombrecidas por aquel frío y aristocracidad que nos caracteriza a los dos. De todas formas, el de aristocrático solo conserva el porte.
Clava sus ojos vacíos en mi, estrellas negras que brillan por su ausencia de relleno, de vida. Nunca se abrió, nunca dejó que alguien entrara en él, que lo invadiera, que aliviara su soledad. En eso se parece a mí. Nunca acepté ayuda de nadie y así estoy, pudriéndome en mi propia desgracia, intentando acostarme con un viejo amigo, solo para satisfacer mi apetito sexual. ¿O hay algo que no puedo distinguir ahí abajo, en las profundidades? Puede ser, pero me niego a creerlo.
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N/A: Estoy medio apuradisca, así que me voy yendo...
Los reviews ayudan gente! Sigan leyendo que sino decaigo en la auto-compasión y me hago auto-reviews xD.
Mile
Alias toxic.secrets