Adora Pov

Sabía que no debíamos de confiar en la Horda, ahora aquí estoy encerrada en el calabozo amarrada en mis muñecas y pies con cadenas pesadas, esperando que acaben conmigo, sin embargo realmente todo esto valió la pena, mi corazón se siente tranquilo de saber que por fin le había demostrado a Catra cuanto la amo, será un suplicio estar sin ella en donde quiera que me manden si es que no me matan de una vez. Escuche un alboroto fuera de mi celda, los dos guardias que custodiaban la celda desaparecieron, después hubo un silencio, me acerqué lo más posible que me dejaban las cadenas y ahí estaba Catra abriendo mi celda con una media sonrisa que me encantaba.

–Hey Adora, creo que alguien necesita ayuda.- Me encanta todo de ella, sería imposible no enamorarme de ella a pesar de estar en una situación de peligro ella lo aligera todo.

-Si por favor.

-No sabía que te gustará ser encadenada Adora, eso es nuevo. – Dijo con sarcasmo, pero mi mente divagó por muchas escenas eróticas de ella y yo que me hicieron sonrojar.

-Bueno solamente me gustaría estar encadenada contigo, donde tengamos una cama cómoda, tú tal vez encima de mí con nada de ropa.- Dije de manera divertida aunque con un rubor en mis mejillas, ella se sorprendió y también se le iluminaron sus mejillas del tono rojizo más hermoso y tierno, quería besarla ahí mismo.

-Ahemmm. Chicas es muy lindo verlas coquetear pero tenemos que irnos a toda prisa.- nos interrumpió Scorpia.

Catra rápidamente me quitó las esposas, y me puso de pie. Corrimos lo más rápido posible las tres lo bueno que Catra y yo conocíamos todos los atajos para evitar soldados o la mayoría de ellos.

-Tenemos que ir al hangar ahí dejé cosas en un deslizador para poder movernos en el Bosque de los Susurros.- Dijo Scorpia, ya casi llegábamos a nuestro destino pero para nuestra sorpresa Shadow Weaver ya nos estaba esperando con unos cuantos soldados más.

-Tan decepcionante Catra, nada puedes hacer bien.- Dijo mirando a Catra con desaprobación. –Adora querida, fue un terrible error unirte a la rebelión pero yo puedo ayudarte, borraré tu memoria para que esta vez Catra no sea una distracción y desarrolles todo tú potencial, no la necesitas, después lidiare con Hordak para que te acepte al frente donde siempre debiste de estar.- Dijo mirándome esperanzadoramente.

-Catra no es una distracción, es mi pareja, yo la amo, y de ninguna manera voy a dejar que borres los preciados recuerdos que tengo con ella. – dije de manera tajante, Catra me miró con ternura.

Shadow Weaver se asombró. – Adora… acaso tú, ¿te vinculaste con ella?- No respondí solo hubo un silencio. – En ese caso entonces tendré que disponer de Catra.- Dijo con furia alzando un brazo dirigiendo un ataque mágico hacia Catra, la cual me lancé a ella para evitar que cayera de lleno rozándome un poco la espalda sacando un poco de sangre. Nos escondimos detrás de un deslizador los soldados nos disparaban sin siquiera poder movernos de nuestra barrera necesitábamos salir de aquí antes de que nos rodeen, sin tan solo tuviera la espada de poder, podría habernos sacado de aquí rápidamente.

Agarramos las armas que estaban dentro del deslizador, y empezamos a derribar uno por uno a cada soldado, solamente nos quedaba el mayor peligro que es Shadow Weaver, en eso vi a Catra lanzarse a ella, pero con su magia negra empezó a herirla solamente escuchaba sus gritos de dolor, mi mente se nubló lo único que supe es que con una lanza había atravesado su torso para después arremeterle en la garganta cortándola, mis manos y ropa estaban manchadas de su sangre, nuestra matriarca yacía en mis pies haciendo en un charco de su sangre extendiéndose a mis botas, Catra yacía en el suelo inmóvil e inconsciente, Scorpia fue con ella para ver su estado, no podía escuchar nada, nunca había matado a alguien, mi cuerpo temblaba.

-Scorpia, ¿Catra está bien?- Dije mirándola fijamente, ella no me respondía solamente miraba mis manos ensangrentadas y el cuerpo de Shadow Weaver a mi espalda. - ¡Scorpia!- respingó un poco con mi tono enojado.

-S-sí, ella e-está bien solamente le sofocó un poco pero de s-seguro despertará pronto.- Dijo muy nerviosa. No podía creer que había matado a alguien a sangre fría, pero mi cuerpo reaccionó a un solo pensamiento tenía que sacarnos de aquí.

-Bien, tenemos que irnos ya.- dije en un tono sombrío fui con ella para cargar a Catra y dirigirme al deslizador que aunque un poco dañado todavía servía. – ¿No vienes?- le pregunté a Scorpia enfadándome un poco por estar inmóvil todo el tiempo. Eso le despertó y subió al deslizador conmigo y así a toda prisa salimos de la Zona del Miedo, dirigiéndonos al Bosque de los Susurros.

Nos pisaban los talones los soldados de la Horda, nos estaban buscando como locos, el deslizador de seguro tiene un localizador, tenemos que ocultarlo y seguir a pie esquivándolos y eso hicimos, Catra todavía seguía inconsciente me estaba preocupando, necesito asegurarme de que se encontrara bien, tenía que volver a Luna Brillante, de seguro me están buscando por irme sin decir nada, espero que nos encuentren pronto, sería de gran ayuda que Glimmer nos teletrasportara para hacerme de mi espada y luchar contra la Horda, también para darle atención médica a Catra la cual cargaba en mis brazos que tenían ahora la sangre seca de Shadow Weaver.

Caminamos hasta que se empezaba a oscurecer, los sonidos de la búsqueda de la Horda se fueron distanciando, sabía que necesitábamos descanso pero no teníamos que parar en cualquier momento podrían alcanzarnos.

Vi a Scorpia sostenerse en un árbol, la entiendo mis brazos dolían por el peso de Catra, mis pies también pero no me daría por vencida soy obstinada lo sé. –¿Estás bien?- Pregunté a pesar de que no me caía para nada bien esta imponente mujer tenía una relación con Catra muy íntima que no me gustaba como me sentía al observarlas pero sé que para Catra ella es importante por lo que para mí su bienestar también lo es.

-V-vaya, ufff si que tienes estamina, creo que debemos descansar no creo poder seguir a este ritmo, además hay que ver mejor el estado de Catra.- Dijo con evidente cansancio en su rostro enrojecido y sudoroso.

-Sí, está bien.- Nos ocultamos en unos arbustos mientras descansábamos, puse a Catra en el suelo para revisar su ritmo cardiaco, viendo mis manos sucias sentí unas nauseas llenarme, pero las retuve como cuando me da mis ataques de ansiedad, por lo menos los latidos de Catra eran normales, y solamente tenía pequeñas heridas, que no eran de preocuparse.

Ya estaba la luna en su esplendor, un ruido de un arbusto nos puso alerta a Scorpia y a mí agarramos nuestras armas dispuestas a atacar, por suerte era Glimmer y Bow quien nos estaba buscando.

-Adora… aléjate de ella.- Mencionó Glimmer al ver a Scorpia a mi lado dispuesta a atacar.

-No, no espera, está bien tiene que venir junto con Catra a Luna Brillante, es una larga historia, pero tenemos que prepararnos para defendernos, se los explicaré cuando estemos a salvo.

-Pero que, no podremos abrir las puertas a dos rangos importantes de la Horda, es muy peligroso para…

-Creo que debemos irnos Glimmer se escucha maquinaria y se están acercando seguramente es la Horda.- Interrumpió Bow poniendo una gentil mano tranquilizadora en el hombro de Glimmer.

-Demonios.- Glimmer se acercó rápidamente a nosotros y nos telentransportó a Luna Brillante quedando exhausta por llevar a tantas personas a la vez. – Bien, Adora parece que nos debes una explicación.- No tuve más opción que mencionarle sobre el vínculo de Catra y mío, de nuestra ida a la Zona de Miedo, cuando asesiné a Shadow Weaver y nuestra huida.

-Creo que esto es mucho que procesar.- Dijo Bow.

-Por favor necesito que Catra esté bien, ¿podríamos llevarla a la enfermería?- Dije mientras Glimmer observaba mis manos manchadas de sangre seca a igual que mi ropa, me sentía incómoda, me avergonzaba de haber matado así a Shadow Weaver, sabía que la culpabilidad en mi descanso me tomaría como un rayo dejándome exhausta y privándome del sueño.

-Ven Adora vamos a la enfermería y a cambiarte de ropas.- Dijo Bow con cariño y preocupación lo que le caracterizaba siempre como buen amigo que es. Con una sonrisa cargue a Catra hasta la enfermería, me dispuse a lavarme y cambiar mis ropas.

Scorpia estaba detrás de mí. – No es tu culpa.- me dijo así sorprendiéndome.- lo de Shadow Weaver no es tu culpa, estaba dañando a Catra y eso no fue tu culpa.- Dijo mientras tomaba de la mano a Catra.

-Creí que te caía mal.

-Bueno veo que realmente te preocupa Catra por lo que digamos que te toleraré.- Con eso sonreí un poco, Scorpia si es buena persona.

Catra se encontraba bien estable no tenía nada grave que una pequeña contusión, quisiera estar aquí hasta que se despierte pero sabía que atender la defensa para el ataque de la Horda es primordial, solamente es Luna Brillante, las demás princesas todavía no se unen a nuestra causa a pesar de que insistíamos no creo que respondan a nuestro llamado de ayuda, el ataque de la Horda va a ser contundente y furioso, su gran comandante había muerto por causa de una rebelde y tendría que vengarse para darle sentido a su causa.

-Scorpia por favor protege a Catra.- dije con la ansiedad al tope puse mi mejor máscara para planear nuestra defensa junto con la reina Angela, Glimmer y Bow.

Continuará….

AN. Este es una reestructura de "Ella es mía", me di cuenta de que ya se estaba convirtiendo en un secuela que en un oneshot como era la primera intención.

Espero que les agrade y creo que ya la descripción del fic es más certero. Esperando que también la hayan pasado excelente en Navidad y en Fin de Año, les dejo con 2 capítulos actualizados del fic.