Burning Stardust
By: HybridVirus

Disclaimer: One Punch Man y sus personajes son pertenencia de sus respectivos dueños, solamente soy dueña de Lightning Quasar y no hay ninguna ganancia con esto, más que darle amor a mi personaje favorito; solo soy una fan que escribe para fans.

Pd: Se aceptan donaciones en PP :La descalabran:

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Capítulo XXVIII

El eco de apresurados pasos resuena en sus oídos, mientras intenta a toda costa evitar mirar hacia atrás. ¿Qué diablos está haciendo? La incredulidad se aferra a su rostro, porque se está comportando de un modo tan vergonzoso. Sabe de sobra que no es necesario correr, pero es difícil romper los hábitos y su forma de actuar al verse descubierta.

La sensación de ser jalada por un brazo, la hace apretar los dientes porque el chiquillo es más veloz de lo que esperaba. Lo ha visto pelear, pero esa única vez ha sido suficiente para suponer, que no sería alguien de quien preocuparse. Obviamente se ha equivocado, porque es como si Kousagi pudiera leer todos y cada uno de sus movimientos.

¿Es esto, siquiera normal para una persona?

–¿Por qué, estás tan a la defensiva Harikēn?

El socarrón gesto en su rostro, la hace fruncir el ceño. Porque todo esto se siente, como si el chico simplemente estuviera jugando con ella. Una molesta exhalación escapa de sus labios, al mismo tiempo que se cruza de brazos para posar su mirada sobre el peliblanco.

La diferencia entre sus cuerpos, es notoria a simple vista y esto debería de ser suficiente advertencia, para no acercarse demasiado al chico. ¿Pero, porque pensar de ese modo? Si se detiene a analizar las cosas, no es como si haya intentado hacerle daño alguno, claro exceptuando la primera vez que se han visto en el departamento.

–Ok, ya sabes la verdad… ¿Ahora qué?

La sonrisa de Garou se agranda, porque la agresión y molestia en esa voz, son prácticamente perceptibles. Qué curioso es, que ha tenido que reconocerla para poder conseguir semejante reacción de Haruka. Pero, aunque las emociones de la pelicastaña, son claras en su rostro, cuerpo y voz. No puede ver esos ojos negros, que resplandecen como una advertencia de inminente peligro.

Eso basta para saber, que en verdad no se encuentra bajo ningún riesgo. Esa vez Haruka lo hizo dejar el lugar, y por una parte enserio entiende la razón detrás de sus acciones. Los aterrados transeúntes, que se abrazan unos a otros y gritan, son los mismos que guardaron silencio… mientras Haruka era azotada contra una pared.

–Nada, ¿Por qué actúas, como si te fuera a entregar o algo por el estilo?

Sus dedos se deslizan avergonzadamente contra el puente de su nariz, porque también recuerda como una mano en su cuello, es la forma que utilizaron para inmovilizarla en ese lugar. Supone que es de ahí, que no le gusta ser sujetada de tal modo. Es obvio que es ese recuerdo… lo que la hizo reaccionar así.

Su agresión también tiene sentido, simplemente sintió la necesidad de defenderse. Esto afirma su decisión, ¿Quién más podría entender su convicción, por llevar acabo estos actos? Solo aquellos que conocen el temor, el dolor y la pena, tienen derecho de réplica en este mundo. Son ellos, a quienes les permitirá beneficiarse de sus acciones, y de ese modo se asegurará que no pasen por este mismo malestar.

–¿No confías en mí, aunque he guardado silencio todo este tiempo?

El silencioso gesto en el rostro de la fotógrafa, le deja ver como la calma toma lentamente control sobre su ser. Solo necesita explicarle todo, no hay forma en la que se rehúse a escucharlo. Porque ella también se ha defendido, y ha atacado a otros para conseguir paz y seguridad.

No importa que es lo que diga la sociedad, ellos dos saben que es posible para el monstruo vencer, en especial si su lucha es causada por un buen motivo. Harikēn debe entenderlo mejor que nadie, ¿No ha sacrificado tanto, en un claro intento por ayudarlo en esa ocasión?

–Ahora explícame, ¿Cómo rayos, es que te has encogido tanto?

La sonrisa socarrona en su rostro se agranda, porque sin duda alguna es gracioso ver el sinfín de emociones, que toma control de la cara da Haruka. Desde sorpresa, a incredulidad, para ser remplazados por molestia, indignación y finalmente vergüenza.

Una carcajada escapa finalmente de su pecho, gracias a la ofuscada joven que intenta fulminarlo con la mirada, mientras que una palma se golpea contra su brazo, en un abochornado intento por silenciar su risa.

–¡Tonto, has sido tú el que ha crecido demasiado!

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El silencio que se cierne sobre ambos, solamente se ve roto por el suspiro de la brisa nocturna y el eco de sus respiraciones. Los orbes de Haruka se encuentran fijos sobre Garou, intentando explicarse porque razón es que se encuentra tan despreocupado con su presencia ¿Por qué es, que no piensa entregarla?

¿No es eso lo que un ciudadano decente, debería de hacer en caso de… encontrarse con un monstruo? Un suspiro escapa de sus labios, porque no sabe qué clase de decisión tomar. ¿Debe escapar de nuevo, o simplemente ignorar el hecho de que alguien sabe quién es? Puede que, si habla con Amai-senpai sobre eso, no tendría por qué preocuparse por Metal Knight…

–Relájate Dengeki; te vas a arrancar el labio, si sigues haciendo eso.

Los dientes de Haruka liberan su labio inferior, al mismo tiempo que sus ojos se entrecierran para posarse sobre el despreocupado gesto en el rostro del joven. Ese nombre le hace hervir la sangre, porque nunca nadie intervino cuando lo necesito. Pero en cuanto se defendió, consiguió ser marcada con una palabra por el resto de la sociedad.

–No me llames de ese modo…

Una parte de ella no puede negar la tensión en su cuerpo, ese apodo le trae recuerdos, que no quiere tomar en cuenta. No cuando ya no es esa persona, ha cambiado… está segura de ello. La mirada de Haruka se desvía de la cara del joven, que la observa con una ceja arqueada en un silencioso '¿Cómo debería llamarte?'

El ceño de la heroína se frunce, porque tiene un nombre. Pero no es, como si el chico en verdad lo use. Incluso la confunde el saber, que Kousagi-chan está demasiado calmado, como si en verdad no le preocupara o agobiara nada de esto. Y aunque ha confirmado, que no piensa decir nada… aún queda la duda de si… ¿Debería confiar en su palabra?

–Me gusta más, como me llamas tú…

Un suspiro escapa de sus labios, porque ha sido ella quien ha insistido en que son amigos. Pero ahora, no sabe del todo si puede cargar con eso. ¿Entregarle un secreto de tal magnitud a otra persona, no sería algo realmente tonto de su parte? Pero no es como si le quedara otra opción, porque no podía deshacerse del chico, simplemente porque la había reconocido.

–¿Prometes, que no se lo dirás a nadie?

Una de las platinadas cejas se arquea levemente, en un gesto que denota incredulidad hacia su pregunta. El rostro de Haruka se enciende, repleto de vergüenza ante la divertida mirada de Garou. Quien simplemente suelta un sonoro resoplido, para afirmar su respuesta con un simple 'Seh'.

Los orbes ambarinos se entrecierran en confusión, al ver como la periodista extiende uno de sus dedos meñiques en su dirección. El rostro del joven se ladea levemente, sin entender que es lo que espera Haruka conseguir con ese gesto tan raro. ¿Qué se supone, que tiene que hacer con eso?

–¿Nunca has hecho, una promesa de dedito?

El estómago de la fotógrafa se revuelve, ante la forma en que el chico se encoge de hombros. ¿Cómo es, que nunca hizo esto con sus amigos…? La mirada grisácea se posa sobre el confundido rostro de su acompañante, para finalmente entrelazar su dedo meñique con el de él. Es algo un tanto infantil de su parte hacer esto, pero al mismo tiempo se siente como algo correcto.

Si Kousagi-chan guarda su secreto, ella se asegurará que no tenga por qué sentirse solo nunca más. Aunque aquello que le confeso esa noche, entre la oscuridad no eran palabras repletas de dolor, igualmente no permitiría que el chico pudiera volver a sentir esa emoción… jamás.

–Me llamas niño, pero eres tú quien hace estas niñerías…

La mirada de Garou se desvía de la despreocupada sonrisa de Haruka, la misma que parece delatar que todo está bien entre ellos. 'Eso es porque, eres un amargado.' Un resoplido escapa de sus labios, intentando no caer en la provocación de su nueva… ¿Cómplice? ¿Conocida? ¿Amiga?

Los dedos del artista marcial se hunden entre su cabello, rascándose la nuca ante la realidad de que aún no tiene un nombre para esto. ¿Pero, enserio es necesario, ponerles etiquetas a las cosas? ¿Todo tiene que ser blanco o negro? ¿Porque no simplemente permanecer en una zona gris, que denote la neutralidad de las cosas… un tono gris, justo como esos ojos?

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El golpeteo de sus pasos en la desierta calle, resuena en los alrededores mientras sus brazos se estiran perezosamente, para acomodarse detrás de su cabeza. Uno de los ojos de Garou mira de reojo a su acompañante, quien en algún momento ha cerrado su sudadera y acomodado la capucha sobre su cabeza.

Es casi como si Haruka buscara ocultar su identidad, de alguna mirada curiosa que se encuentre en los alrededores. Sus orbes se ven repentinamente atrapados, en una silenciosa charla y por un instante, Garou no puede evitar preguntarse… si esa sonrisa que le dedica, ¿Se encuentra ahí, para cualquier persona?

–¿Quieres divertirte un poco, Kousagi-chan?'

Una de sus cejas se arquea para demostrar su duda, mientras que sus pasos se detienen. La sonrisa que se curva sobre esos labios, deja de parecerle algo agradable para dar paso a una socarronería, que el mismo Garou no puede creer sea posible de ver en una cara tan… aparentemente inocente.

Antes de que pueda decir algo, la silueta de Haruka se acerca apresuradamente hacia una de las casas. Para presionar el timbre de la misma de tal modo, que incluso Garou no puede evitar hacer un gesto incrédulo. La repentina carcajada de la chica, se une al apresurado eco de pasos que provienen de la dirección del parque.

–¡Hey ustedes, ¿Qué creen que hacen?!

Su boca se abre y cierra al ver a los héroes, que intentan acercarse a toda velocidad. Pero es la visión de uno de ellos, en una camisa de tirantes estampada como un tigre, aquello que ocupa toda su atención. Recuerda a ese imbécil, oh claro que lo recuerda y también sabe, que aún tiene una cuenta que cobrar para alguien más.

Tanta es su distracción, que no se percata de en qué momento es que Haruka se une a él, para tomar su muñeca y levantar una de sus manos, para enseñarle el dedo medio al héroe cuyo rostro, se torna de un intenso color carmín a la par que no deja de escupir insultos para ambos.

–¿¡Qué esperas!?

¿Qué diablos está haciendo? No es como si él necesitara correr de estos idiotas. No, cuando puede tirarle los dientes y romperles las extremidades, a todo el grupo de insensatos que corre detrás de ellos. Pero, no puede negar… que le gusta la risa de Haruka.

Hay algo realmente peculiar en la forma, en que hecha la cabeza hacia atrás como si fuera una chiquilla en una montaña rusa. Y la sensación de la mano que se aferra a su muñeca, tampoco es nada desagradable. Quizás sea que los gritos detrás de ellos, y el eco de esa risa le han contagiado algo.

–¡Anda, hay que dejar en el polvo a esos perdedores!

Porque no está seguro de en qué momento, una sonrisa socarrona ha aparecido finalmente sobre su rostro. Tanta es su emoción, que no se percata de la manera en que el gesto en los labios de su acompañante, pasa a dar lugar a algo más gentil y sin malicia alguna. Como si le agradara haber conseguido, esa respuesta a pesar de que sea a costillas de Tiger…

Ok, eso es mentira. Sabe que le encanta, que esto sea a costillas de Tank Top Tiger. La repentina sensación de ser jalada con más fuerza, la hace posar su mirada sobre los orbes del monstruo humano. Quien rápidamente toma la delantera, y pasa a sujetarla a ella para guiar la trayectoria de su destino.

–De acuerdo, ¿Lista para demostrarles, que los héroes no siempre pueden ganar?

El resplandor en esos ojos le roba el aliento, porque puede ver una seguridad imposible de quebrantar, una que le dice que no tiene que preocuparse, no hay forma en la que Garou permita que los atrapen. Un asentimiento es su única respuesta, para permitirse perder aquello que siempre ha sentido nunca debe hacer…

Pero no puede negar que, en este instante se siente… como si en verdad no necesitara tener el control de su ser. En especial, cuando el núcleo parece calmarse en su interior, y esparcir cierta calidez… que no sabe cómo nombrar.

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El exaltado sonido de sus respiraciones resuena sin cesar en el callejón, mientras que sus cuerpos se presionan gentilmente el uno contra el otro. Los gritos del grupo tank top alejándose en la distancia, les deja saber que han conseguido escapar y hacer que los héroes, den al menos cuatro vueltas en los alrededores del departamento, antes de asegurarse de perderlos por completo.

Una risita escapa de Haruka, al mismo tiempo que se permite aferrarse al cuello de Garou. Su frente se presiona contra el costado del rostro del chico, recordando que ha sido una de sus locas maniobras, lo que los ha llevado a perderse entre las sombras del callejón, sin ser descubiertos por la pandilla liderada por un iracundo Tiger.

–Shh, llamaras de nuevo su atención.

Aunque la voz del artista marcial intenta ser la razón, que busque aplacar su risa. No hay forma en la que pueda negar, el deje de diversión que permea sus propias palabras. Un repentino escalofrío recorre el cuerpo de Haruka, porque ha tenido que calmar su gracia, para percatarse de que están… demasiado cerca.

La sensación de la cercanía del cuerpo, que se presiona sin miramiento contra el suyo. Consigue que in intenso color rojo, empiece a esparcirse por su piel. En especial cuando escucha el susurro, de la finalmente relajada respiración de su acompañante.

La misma que se desliza contra su oído, por la posición en la que se encuentran. Los brazos que envuelven sus costados desprenden tal calor que, incluso por este momento podría permitirse olvidar… que aún es de noche.

–¿Hmm?

La mirada platinada se desvía, al percatarse del modo en que una de las cejas de Garou se arquea. El gesto cuestionador en su rostro, delata que su acompañante se ha percatado de su repentina atención. Consiguiendo que la mortificación en su cara, aumente al saberse descubierta poniéndole semejante cuidado a su faz.

Una de sus manos se presiona contra el hombro del más alto, en un claro indicio de que la suelte para intentar recuperar, lo que sea que aun conserve de su maltrecha dignidad. Basta con apenas un movimiento, para que el artista marcial se incline, permitiendo así que sus pies toquen de nuevo el suelo.

–¿Estas bien?

Un rápido asentimiento con la cabeza, es su única respuesta mientras que un aliviado suspiro, escapa de los labios de Haruka. Únicamente para que los orbes de la joven se abran de golpe, al apreciar como algo cálido se presiona contra su frente. Si su cara estaba colorada antes, sin duda está segura que… ahora pondría en vergüenza, el tono rojo del labial favorito de Okamaitachi.

Hay algo realmente peculiar en esos irises dorados, algo que le recuerda la calidez de un día de verano en la playa de ciudad J. El único lugar en el que nunca se ha preocupado, por que las cosas se salgan de control. Donde no ha conocido más que felicidad y tranquilidad. El único lugar donde se ha sentido verdaderamente segura, de que no hay modo en que nada malo pueda pasar…

–¿Segura?, porque estas realmente roja…

El estruendo de los truenos en el cielo, consigue liberarla de la atención de Garou. Quien apenas puede alejarse unos cuantos milímetros, antes de que la caricia del agua que proviene del cielo, empiece a impactarse sobre sus pieles. Anunciando que ha tenido suficiente del espectáculo, que ambos han llevado a cabo en la seguridad de la penumbra.

Continuara…

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Hybrid-Virus

Yo! Buen día lectores, aquí tienen una actualización doble para compensar mi ausencia. ;D

En este capítulo podemos ver como Haruka lidia con las cosas, en cuanto estas han escapado de su control. Una vez que sus poderes han sido expuestos, Haruka prefiere desaparecer del lugar. Algo que obviamente no pudo hacer, en cuanto Sweet Mask se percató de su potencial.

De ese modo es que se sabe atada de manos, teniendo que aceptar ser algo que supone jamás podría ser. Esta es la razón por la que Haruka, admira tanto a Genos y a Mumen Rider. Ya que, para ella ambos cumplen con los requisitos para ser héroes verdaderos.

En la adolescencia hay un punto, donde las jovencitas suelen ser más altas que los chicos. Hasta que los papeles se invierten, y los jóvenes finalmente tienen su ultimo estirón. Esa es la razón por la que Haruka, era más alta que Garou la primera vez que se encuentran.

Soy una firme creyente de que a Garou no le molestan los niños, ni tampoco todos aquellos que han sido víctimas de abuso. Pero eso no implica que haya tomado el tiempo, para crear alguna clase de conexión emocional con ninguna persona.

A pesar de eso, podemos ver lo bien que Garou socializa con Tareo. Haciéndome suponer que, en el instante en que alguien cae en su gracia es imposible sacarle de ahí. A no ser que esto sea necesario, para llevar acabo sus planes.

Es por esto que quería que estos dos, empezaran a hacer las tonterías que en verdad no han tenido la oportunidad de llevar a cabo. Garou es un adolescente que ha vivido entrenándose, en su búsqueda para convertirse en el salvador de los desvalidos.

Así que se merece ser un chico normal, que hace bromas y maldades, en especial si la víctima es Tiger. A pesar de que Haruka es una heroína, recordemos que esto no es algo, que haya sido decidido por ella misma. Es por esto que, sin el menor problema la puedo imaginar llevando a cabo semejantes actos.

Nada refuerza una amistad, como guardar un secreto del resto del mundo. Porque eres consciente de que eso, puede ser utilizado en tu contra en cualquier instante. Por eso, se puede decir que un secreto es la prueba definitiva de la confianza, pues no es algo que se comparta con cualquiera.

Es el momento de que la atracción se manifieste, porque ya hemos esperado casi 30 capítulos por ello. Así que después de esta larga espera, finalmente podemos decir ¡Es hora de alocarnos!

Sin más por el momento, dejen un review y nos vemos en la próxima actualización.

¿Dudas? ¿Comentarios? ¿Critica? ¿Etc.? ¡Ya saben qué hacer, envíen un review!

"Formemos parte de la línea de reviews, cuando leamos un fanfic con un personaje que nos gusta y no es muy común ver, de un fandom olvidado o de una historia que nos guste; dejemos un review, porque esa persona escribe para nosotros y que mejor forma de inspirarla y darle combustible para seguir"