¡Vamos España! XD ¿Cómo va el mundial? Yo me siento muy rara porque no está Italia a la que siempre le voy por lazos familiares, pero como España me acogió hace 10 años, pues tengo mi corazoncito español :D. Por mi, mientras no gane Rusia todo perfecto XD.

¿Sabían que el equipo de Perú le mando un video al de Dinamarca (el primero con el que se va enfrentar) diciendole lo muy emocionado que estaba de jugar contra ellos y que esperaba que ganara el mejor y que el de Dinarca le respondió con otro donde cantaba su himno y metía Perú a mitad? Awww

Este es el penultimo capítulo del barco y es corto para que se lo puedan leer mientras ven un partido XDDD.

Que disfruten y que gane su equipo

¿A quién le van?


En sus ratos libres, cuando le apetecía o los niños dormían la siesta, el Imperio Español personificado en un joven de 19 años, se sentaba en un recodo del navío y tañía la guitarra con el ritmo que le indicaba la memoria o la inventiva. A veces, hasta cantaba.

Con el pasar de los días se percató de la presencia de cierto niño moreno de ojos color Caribe que rondaba tranquilo, silencioso y atento la zona en la que él se encontraba cuando tocaba el instrumento y que, poco a poco, se iba acercando, mas siempre a una distancia suficiente para que el mayor no lo pudiera alcanzar de una sola brazada.

—Venezuela, ¿no deberíais estar durmiendo la siesta? —cuestionó el día que no consiguió frenar su curiosidad ante el extraño proceder de su colonia. Sencillamente era su periodo de paz, no quería pelear con su hijo, no ahora, por eso se había abstenido hasta el momento de realizar la pregunta.

—No tengo sueño —respondió sin mirarlo. Dirigió su vista a la punta de su zapato, lo movió, se metió las manos en los bolsillos. Parecía que una idea le rondaba por su cabeza. Al final, elevó sus ojos y los depositó en los de su padre, quien no se había perdido ningún segundo de ese espectáculo— ¿Puedo quedarme?

España lo examinaba algo aturdido. Estaba seguro que esta resultaría una de las escasas ocasiones en las que sus pupilas no relampaguearían con la presencia del otro y sus bocas no destilarían mensajes de odio, más bien parecía un intento de mantener una conversación civilizada ¿Aquello resultaba posible? Incluso se diría que el tono y el brillo que el menor le brindaba era una mezcolanza de expectación y temor ¿Acaso le tenía pavor? No, sus ademanes señalaban todo lo contrario ¿Entonces tenía miedo de romper el momento tanto como él cuando lanzó la pregunta?— Sí, siempre que os mantengáis silencioso y tranquilo.

Ante las instrucciones, el infante asintió despacio y se sentó en un barril cercano, apoyando los codos en las piernas y la cabeza entre las manos, desconcertando aún más al español—. Os podríais caer por la borda, mejor sentaros en la base del mástil. —Venezuela volvió a obedecer sin rechistar, terminando recostado a un paso del Imperio, para mayor estupefacción de su familiar. «Definitivamente los aires marinos lo han trastornado».

Sin embargo, siguió tocando y su acompañante cumplió su promesa y con el tiempo esta situación se convirtió en una costumbre que ambos disfrutaban pero ninguno se atrevía a admitir*.


*Yo sé que mucha gente no sabe esto, pero que no lo sepan no significa que no exis-ta. Venezuela es un país musicalmente rico: tiene sus propios villancicos (algo bastante atípico he de decir) que se alejan de los ritmos lentos y las letras europeas, el corrido, el seis por derecho, el carnaval llanero, tonadas y cantos de trabajo (como cantos al pilón) el golpe y el estribillo, el calipso venezolano que dista del trinitario, la fulía (y sus variantes), el merengue caraqueño (que se diferencia del dominicano rítmicamente hablando), el valse venezolano, las gaitas, los polos, los galerones y jotas margariteñas, el bambuco zuliano, las malagueñas, punto cruzao, punto y llanto y un largo etc. Luego están los instrumentos nacionales como el cuatro, el arpa (llanera, aragüeña y tuyera), el furruco, la bandola (central, llanera y oriental), bandolín o mandolina, el requinto, los quitiplas, el tiple, entre otros. Así que allí viene su interés.