No sabía cuánto tiempo había pasado desde que su madre los dejó en la habitación, pero era consciente de que a ese paso no dormiría nada. Estaba agotada, aún así no podía cerrar los ojos sin evitar rememorar los eventos sucedidos la tarde anterior, se sentía culpable, impotente.

Había hecho promesas y no fue capaz de cumplir ninguna.

Era un desastre.

Luego de ser atendidos por Camila y haber cenado en total silencio, subieron a la recámara de Luz, donde se acomodaron para descansar, quedando Willow en la cama de arriba con Vee, Luz junto a Amity en la parte de abajo, y Gus con Hunter en una colchoneta que su madre había colocado.

Un suspiro brotó de sus labios mientras se giraba para contemplar a su novia, quien parecía dormir profundamente. La envidiaba.

—Déjame adivinar, tú tampoco puedes dormir.— murmuró cierto rubio desde el suelo, captando la atención de su amiga. —No te culpó, todo pasó muy rápido, me alegra que al menos tres de nosotros puedan descansar.— habló con sinceridad.

Por su parte, ella asintió.

—Si, pasaron muchas cosas, aún no termino de procesarlo, por más que pienso no entiendo cómo fue que se me salió de las manos.— musitó. —Y pensar que todo comenzó gracias a una fantasía.— recordó riendo con amargura. —Decidí quedarme en las Islas para, además de ser una bruja, sentirme aceptada, pero de haber sabido todo lo que mi ingenuidad provocaría jamás hubiera ido tras ese libro.

Hunter no dijo nada, simplemente suspiró mientras arrullaba al moreno que parecía tener un sueño desagradable. No podía culparlo, después de todo él había visto ciertas cosas.

—Los dos cometimos muchos errores Luz, tú actuaste de manera noble, intentaste huir de tus problemas, querías encajar, sentirte parte del mundo que te rodea, algo que todos quisiéramos, eso es normal.— la tranquilizó. —Yo actúe de manera egoísta, fui manipulado por alguien que decía tener planes maravillosos para mi en nombre del Titán, fui un idiota que cayó en sus falsas palabras de aliento, pero la verdad es que le tenía miedo a ser reemplazado. Sólo quería sentirme útil.— confesó. —Al final tú y yo no somos tan diferentes.

La de corta cabellera sonrió.

—No, no lo somos, ambos caímos en las palabras de un experto manipulador, nos dejamos guiar por lo que queríamos escuchar, pero hoy tenemos la oportunidad de reparar el daño que hicimos.— declaró. —Una vez encontremos la manera de regresar le pondremos fin a todo, recuperaremos nuestro hogar, salvaremos el mundo que nos acogió cuando más lo necesitamos. Willow y Gus creen en ti, yo también lo hago, Amity igual, sólo que en secreto.— bromeó. —Ahora eres libre de elegir qué quieres hacer.

El de ojos escarlata guardó silencio unos segundos, pero luego de mirar a sus primeros amigos, aquellos que le dieron un voto de confianza cuando nadie más lo hizo, supo lo que debía decir.

—Estoy con ustedes, juntos salvaremos las Islas Hirvientes.— aseguró.

Luz no pudo evitar reír en voz baja, acomodándose junto su novia para luego cerrar los ojos, dejándose envolver en los brazos de morfeo, no sin antes dedicarle unas últimas palabras a su amigo.

—Bienvenido al equipo, Hunter…


Los rayos del sol se filtraban por la ventana de la habitación, gracias a eso Amity había sido la primera en despertar, sin embargo, prefirió quedarse unos minutos más contemplando a su novia.

Luz a su lado se veía realmente linda mientras descansaba, verla dormir sin duda sería su nueva actividad favorita.

De pronto, sintió sus mejillas arder cuando la joven, acomodándose, soltó un pequeño suspiro. Por un momento pensó que sería descubierta en el acto. Rápidamente se levantó para así poder arreglarse antes de bajar, no sin antes depositar un pequeño beso en la mejilla de su pareja, quien sonrió entre sueños ante ese gesto.

«Descansa batata, te lo mereces.»

Tras dedicarle una última mirada a la morena, salió de la habitación para luego dirigirse escaleras abajo al comedor, donde se encontró con cierta mujer de lentes que le miró sorprendida.

—B-Buenos días señora Noceda.

La mencionada sonrió.

—Buen día… ¿Amity?— ella asintió. —¿Qué haces despierta tan temprano? Recién son las ocho de la mañana.— preguntó. —No me digas que Luz no te dejó descansar.— suspiró. —Discúlpala, tiene una forma de dormir algo peculiar.

Un tenue rubor cubrió el rostro de la joven, quien negó rápidamente.

—Descuide, no fue nada de eso, sólo ya estoy acostumbrada a madrugar.— sonrió, acercándose para ayudarle a terminar de poner la mesa, algo que Camila agradeció.

—Ya veo.— respondió mientras se dirigía a la cocina. —Debe ser difícil adaptarse a un nuevo entorno, ¿no?— la de ojos dorados volvió a asentir. —Bueno, cuéntame Amity… ¿Cómo conociste a mi hija?

Ante esa repentina pregunta la de cabellera morada detuvo su acción, pensando rápidamente en qué responder. No podía simplemente decirle que estuvo a punto de dejar que la disecaran sólo por una tonta estrella dorada de cartón.

Definitivamente sería mala idea decir eso.

—Ambas, junto con Willow y Augustus, somos compañeros de escuela, ella ingresó a estudiar magia hace unos meses y fue ahí donde nos conocimos.— respondió con la verdad a medias mientras seguía poniendo la mesa. —Le confieso que en un principio no nos llevábamos del todo bien, pero después nos volvimos… Buenas amigas.— finalizó.

La veterinaria sonrió.

—Vaya, aún me cuesta creer que todo lo que Luz decía sobre las brujas, magia, demonios y criaturas mágicas resultó ser real, siempre pensé que su imaginación era muy poderosa, pero ahora me entero de que mi hija estudiaba magia en un mundo lleno de esos seres.— suspiró. —Tuve que verlo para poder creerle, que buena madre soy.— ironizó, y al darse cuenta de que habló de más, negó. —Seguro te estoy incomodando, no me hagas caso.

Amity se acercó a la mayor para tocarle el hombro, llamando así su atención, dedicándole posteriormente una sonrisa.

—Por lo que Luz me ha contado, usted es una excelente madre.— habló. —No se culpe, puedo entender que algo así haya sido difícil de entender, incluso aún después de haberlo visto, en mi caso sigo sin creer que estoy aquí, un mundo totalmente diferente, es casi imposible de procesar.— confesó. —Pero créame, ella jamás le reprocharía nada, su hija la adora, usted es su ejemplo y el motivo por el cual se esforzó día con día para poder regresar, y si, quizá Luz puede ser algo tonta al expresarse, lo cual am… ¡Digo! Es lindo.— murmuró levemente sonrojada. —También suele ser imprudente, pero todo lo que hace es por el bien de las personas que ama, así que le aseguro que ella no guarda resentimiento alguno, después de todo es Luz de quien estamos hablando.— concluyó, ganándose una mirada sorprendida por parte de la mayor. —¿Gusta que le ayude a hacer el desayuno?

Camila sonrió. Seguía impresionada de lo bien que la joven frente a ella conocía a su primogénita.

—¿Sabes cocinar?

La de cabellera morada asintió.

—Quizá la gastronomía humana sea diferente, pero puedo aprender.

Una pequeña risa brotó de los labios de la mayor, quien tras aceptar su ayuda comenzó a explicarle lo que tenía que hacer, empezando así con la sencilla preparación de hotcakes, un platillo desconocido para la menor.

Las dos se sentían realmente a gusto con la compañía de la otra, por lo que, mientras hacían el desayuno, conversaban de cosas triviales para romper la tensión, siendo así como Amity le contó sobre los logros de su hija en las Islas Hirvientes, incluyendo en su relato el cómo fue que gracias a Luz logró reconciliarse con su mejor amiga, Gus amplió su conocimiento humano, Hunter se redimió y abandonó al tirano por el que había quedado atrapada en las Islas, además, le contó cómo era la maestra de su novia, tranquilizando a Camila al escuchar lo bien que le trataron todos esos meses.

Estaba agradecida.

—Buenos días.

Ambas detuvieron su conversación, prestando atención a los cinco jóvenes recién llegados que saludaban avergonzados desde la entrada.

—Buen día niños.— saludó la mayor. —Siéntense enseguida terminamos y servimos el desayuno.

Todos asintieron apenados, se sentían mal por haberse quedado dormidos, sin embargo, obedecieron la orden, tomando asiento en silencio mientras se miraban unos a otros buscando una idea sobre qué decir o cómo explicar todo lo ocurrido durante el día de la unidad.

Necesitaban ser sutiles para no preocupar a la madre de su mejor amiga.

Por su parte, Luz veía con una sonrisa a ambas féminas que se encontraban sirviendo el desayuno, se veían tan animadas que sentía curiosidad por saber sobre que estuvieron hablando todo ese rato. De igual forma le alegraba ver que su novia se llevaba bien con su madre.

Eso facilitaría las cosas.

Una vez acabaron de servir, procedieron a desayunar, nuevamente en silencio, nadie se sentía preparado para hablar, a excepción de la de ojos miel, quien conversaba por ratos con su suegra sobre recetas, tanto de las Islas Hirvientes como del reino humano, y una vez entraron en confianza, los demás presentes se unieron a la plática, donde cada quienhablaba de cosas que les gustaba hacer. Willow daba consejos sobre el cuidado correcto de las plantas, Gus manifestaba sus dudas sobre algunos mitos, además de su deseo por tener un balde humano, siendo así que, con una sonrisa, la de lentes le prometió que le obsequiaría uno con gusto, por su parte, Hunter y Luz hablaban vagamente sobre la magia, ambos expresando su pasión por el estudio de la misma, Vee compartía sus conocimientos como basilisco con el grupo, quienes la escuchaban fascinados, al igual que la veterinaria. Fue entonces que todos comprobaron que sin duda Luz tenía razón, Camila era una mujer muy amable.

Cuando terminaron de hablar, la de corta cabellera le prestó nuevamente ropa a sus amigas, mientras que Vee buscaba algo que pudiera quedarle a los jóvenes, y una vez listos, todos se pusieron manos a la obra para compensar el no haber ayudado esa mañana, repartiéndose labores con las cuales apoyar a su anfitriona, quien les dijo que no era necesario al ser ellos sus invitados, pero ante su insistencia no le quedó otra más que acceder, dejando que la ayudarán con el aseo de ese día.

Aunque le apenaba.

—Bien, llegó el momento.— habló, luego de terminar con sus deberes, cierta morena, quien le indicó a la mayor que tomara asiento en el sofá frente a ella, donde se encontraba ya con sus amigos. —Antes necesito que tomes las cosas con calma, lo que te voy a contar es totalmente real, todo lo vivimos en gran parte juntos, así que…

Mija, tranquila, voy a creerte.— aseguró la mayor, quien ya estaba sentada donde le había pedido. —Pero si no están listos para contarme lo voy a entender, sin presiones.— sonrió.

Luz suspiró.

—La última vez te conté las cosas a medias, hablamos sobre como llegué a las Islas, quienes me dieron asilo, la escuela, mis métodos para hacer magia, incluso de cómo quede atrapada ahí, también te explique mis razones por las cuales me ví obligada a destruir el portal, sin embargo, pasaron otras cosas antes que omití, y otras que ocurrieron después de que nos vimos.— confesó, dedicándole una mirada disimulada a su novia, quien nuevamente negó. —Te hablaré más sobre Eda, Lilith, King, Belos, Philip y el día de la unidad…

Camila escuchó atenta las palabras de su hija, quien le contó a detalle cómo fue que terminó en aquel mundo y el porqué tomó la decisión de quedarse, relató quienes fueron sus cuidadores todo ese tiempo, recalcando que Eda era como una segunda madre para ella, que King era prácticamente su hermano menor, mientras que a Lilith podía considerarla una tía, a pesar de haber tenido ciertos enfrentamientos en un principio. Platicó también sobre cómo conoció a sus mejores amigos, comenzando por Willow, posteriormente Amity y al final Gus, claro, al igual que la de cabellera morada, prefirió omitir la parte en la que casi hace que la diseccionen. Explicó la historia de su mentora y la maldición que su propia hermana le había lanzado, habló sobre cómo fue su primer día de clases, su primer baile de donde no la habían echado por ser "rara", el deporte que aprendió estando ahí, también incluyó los eventos ocurridos el conocido día de la petrificación, dando más detalles sobre lo sucedido, y el porque destruyó el portal sin dudarlo, asombrado a su progenitora, quien parecía no poder creer cada avance que su hija había tenido en ese otro mundo.

Ella había madurado.

Luz continuó relatando cómo fue que conoció a Hunter, un chico triste, pero interesante, también que casi la expulsan junto a Willow y Augustus por un malentendido, omitiendo nuevamente que los culpables de eso habían sido los padres de su novia. Contó cómo conoció a su abuela adoptiva, madre de Eda, explicó cómo fue que obtuvo el diario del humano Philip con ayuda de la joven de ojos dorados, quien puso en riesgo su empleo por ayudarla. Habló sobre esa extraña aventura que tuvo con Hunter la vez que estrellaron la nave donde iban, siendo ahí cuando ambos se conocieron un poco más y entendieron de cierta forma al otro. Resumió el relato donde Hooty fue el protagonista, contando únicamente sobre cómo ayudó a su mentora y hermano menor a descubrir más sobre sus poderes, dejando dicho que ella también recibió ayuda de su parte, pero que sería tema para otra ocasión. Siguió con su historia sobre el día en que Amity, junto a su familia adoptiva, se ofrecieron a conseguir sangre de Titán para el portal cuando ella enfermó, también contó lo que sabía sobre la pelea que tuvo la joven con el rubio, quien simplemente se sonrojo al recordar tal humillación.

—Entonces fue así como lograste hacer un nuevo portal.

Luz asintió.

—Aunque no funcionó como esperaba.

Posteriormente explicó los sucesos del día del desfile y su desesperación por demostrar que podía encajar en ambos mundos, también contó su aventura con su tía Lilith la vez que viajaron en el tiempo para conocer a Philip Wittebane, pero no indagó mucho en el tema, relató su confusión al pensar que la autora de los libros de Azura era alguien capaz de viajar entre reinos, siendo todo un engaño de Tibbles, uno de los tantos enemigos que hizo durante su estadía ahí. También confesó lo mal que se había sentido el día del aniversario luctuoso de su padre al no poder estar presente, cometiendo así un sin fin de imprudencias con tal de olvidar su malestar, pero gracias a Amity cumplió con su tradición y logró conseguir flores.

Un suspiro brotó de sus labios al llegar a la parte más difícil.

—… Luego, como una semana después de eso, Hunter y yo quedamos atrapados accidentalmente dentro de la mente del Emperador.— siguió. —Ese fue el momento donde descubrí que él…— miró a otro lado mientras cerraba los ojos con fuerza. —Que él era un…— sin evitarlo comenzó a hiperventilar, preocupando así a la mayor. —N-No puedo creer que lo ayude, ¡te juro que no lo sabía! ¡Jamás quise lastimar a nadie!— sollozó. —¡Fui una…!

—Hey.— interrumpió la joven de ojos dorados mientras colocaba una mano sobre la de ella para llamar su atención. —Tómalo con calma, no te estreses.— sonrió.

Willow asintió.

—Respira lento y cuenta hasta diez, trata de tranquilizarte.— aconsejó.

Por su parte, Gus se levantó rápidamente en dirección a la cocina, trayendo después un vaso de agua fría.

—Ten, toma un poco.— ofreció el ilusionista dándole la bebida a su amiga. —Bébela despacio, te ayudará.

Hunter suspiró.

—Yo puedo contarlo si quieres, también estuve ahí, los dos vimos y escuchamos lo mismo, así que podría continuar en lo que tú te recuperas.

La morena sonrió para después limpiarse las lágrimas.

—Gracias chicos…— murmuró mientras apretaba levemente la mano de su novia, dándose así valor. —Bien, puedo hacer esto.— habló decidida a la vez que inhalaba y exhalaba como la azabache le indicaba para ayudarla a relajarse.

Por su parte, la mayor veía con una sonrisa como todos hacían lo posible para calmar el ataque de ansiedad que tenía su hija, sintiéndose agradecida con esos jóvenes por haberla ayudado y permanecer a su lado.

Al final la de corta cabellera había conseguido ser realista, pero a costo de su propia salud emocional.

Una vez lista continuó las últimas partes de su relato, explicando que gracias a lo ocurrido su familia y ella fueron considerados criminales, además de que buscaban deshacerse de Hunter por presunto traidor, nuevamente omitiendo el verdadero orígen del rubio. Siguió con su viaje en busca del pasado de King, donde descubrieron cosas bastante fuertes, e indagaron más en el tema del coleccionista, incluyó ahí su escape de esa misteriosa isla, también habló sobre cómo logró escapar con su mentora, tía y hermano cuando los guardias del entonces Emperador fueron tras ellos. Suspiró al comentar cómo fue que, por una pelea, casi la capturan a ella junto con Eda, llevándose el susto de su vida, pero todo pareció mejorar cuando Raine les recibió en su guarida, donde todos los rebeldes se ocultaban para evitar ser arrestados. Finalmente contó sobre su plan para detener el día de la unidad, formando equipos para cumplir cada uno con su respectiva misión, siendo la de ella rescatar a Amity, quien estaba prácticamente presa gracias su madre; un pequeño sonrojo cubrió sus mejillas al acordarse de lo ocurrido con ella, por lo que prefirió mirar a otro lado.

Ese tema aún estaba pendiente.

Concluyó su historia al contar cómo fue que cambió lugar con Hunter para ir al rescate de su mentora y equipo, pues su plan había fracasado, también habló sobre la batalla que tuvo con Belos, quien era realmente Philip Wittebane, un cazador de brujas. Confesó que en ese momento estaba muy asustada, todos pensaron que ese sería su fin, sin embargo, aquello dió un giro inesperado cuando King liberó al coleccionista para ayudarlos, complicando de cierta manera las cosas, haciendo de las Islas un caos, siendo así como decidieron huir, dejando a sus familiares y demás amigos, de los cuales desconocían si seguían con vida o no.

Se sentían culpables.

Camila no sabía qué decir, estaba asustada, enojada, se sentía indignada al pensar en todo lo que tenían que cargar unos adolescentes. Resumiendo, en sus manos estaba el futuro de un reino entero.

Sin pensarlo dos veces se levantó de su lugar para acercarse a los menores, envolviendolos así en un cálido abrazo que les permitió desahogarse, estaban pasando por una situación verdaderamente difícil, y aunque ella no era experta en magia o poseía conocimientos respecto al tema, haría lo posible por ayudarlos.

—Pueden quedarse el tiempo que necesiten.— murmuró. —Juntos encontraremos una manera de que todos regresen a su hogar.— aseguró.

Los jóvenes asintieron mientras agradecían el apoyo que la madre de su mejor amiga les daba.

Ahora sólo debían mantener la cabeza fría, adaptarse a su nueva vida e iniciar una investigación para encontrar información que les ayude a volver.

Sólo esperaban llegar a tiempo.


¡Hey!

¿Qué onda?

Aquí LupitaHaibara con el primer capítulo de este proyecto :'3 cabe mencionar que me base en uno de los cómics de moringmark, lo aclaro para que no hayan malos entendidos a futuro

Les recuerdo que esta historia será actualizada cada viernes a las 11:00 pm (hora México) en Wattpad y los sábados a las 10:00 am se subirá el mismo capítulo del viernes a Fanfiction. Será de esta manera porque quiero mantener todo como cuando salían los capítulos, así que esa hora y día quedarán fijos para actualizaciones, cualquier cambio se los haré saber por el tablero de noticias, Facebook o por Instagram (los links de mis redes los deje en el tablero de noticias de Wattpad, para que pasen a seguirme)

Antes de irme me gustaría decir que, en base a este capítulo, podemos llevarnos como moraleja el hecho de que a veces podemos cargar con muchas responsabilidades sobre nuestros hombros, debido a esto nos vemos obligados a madurar antes de tiempo, queriendo así solucionar problemas que muchas veces no nos incumben, pero todo con tal de ayudar a los demás. Déjenme decirles que querer ayudar no está mal, pero el querer cargar con todo solos no es lo correcto, siempre hay que permitir que otros nos ayuden, pues como bien dicen, entre más mejor, así que si tú queridx lector estas pasando por algo así, te recomiendo que aceptes ayuda, no intentes saltar etapas de tú vida con tal de probar que puedes solx con todo, esto sólo te hará mal, trabaja en equipo y veras que triunfarás.

Ahora sí, sin más que decirles, yo me retiro, ya saben que cualquier cosita pueden dejarla en los comentarios, yo encantada de leerlos :3

Por cierto, como les dije por Instagram, subí la lista de los primeros diez capítulos de esta historia (para entrar en papel y hacer de cuenta que estamos viendo la serie jsjsjs). Cabe aclarar que las fechas de actualizaciónestán sujetas a cambios, de igual forma les estaré avisando Aquí les dejo la lista:

Andare leyendo sus teorías sobre lo que crean que trate cada capítulo Y recuerden, intentaré hacer todo, TODO, como cuando vemos la serie canon,

Nos leemos en otra realidad virtual

Bais~