Capítulo 12:
Ron se detuvo justo en la entrada al salón principal donde se escuchaba la estridente música y se podía ver como las personas bailaban de lo mejor en la pista de baile.
Soltó cuidadosamente la mano de Hermione que no lo miraba a los ojos. Suspiró intentando encontrar las palabras adecuadas para comenzar a hablar; pero antes de que pudiera decir algo, la castaña dio un paso para entrar al salón. Él se interpuso y la tomó por los hombros logrando que ella posara su triste mirada en su rostro.
-¿Por qué estás haciendo esto, Ron? – preguntó ella con la voz apagada.
-No puedo creer que me preguntes eso – comentó sonriendo débilmente – Según tú, Zack era sólo un amigo. Yo estaba armando un escándalo con él, porque supuestamente nada pasaba…
-Y nada pasaba.
-¡No me digas eso! – gritó furioso – Él te dijo que te quería mucho más que a una amiga. Sí pasaba algo, no lo puedes negar.
-Pero con él no me pasa nada, porque no lo quiero – dijo Hermione sacando sus manos de su hombro mirándolo seria.
-¡Estaba diciendo que él podía hacerte mucho más feliz que yo! – vociferó ocultando su rostro con sus manos. Dio una gran bocanada de aire y volvió a hablar – Nunca más te vas a cercar a él, nunca más le vas a hablar, nunca más lo vas a mirar…
-Mira, Ron, cuando te tranquilices hablaremos – la castaña soltó un suspiro cansino – A mí no me gusta Zack, estoy enamorada de ti. Y si haces este escándalo, primero analiza si tú tienes el problema – se dio media vuelta y entró al salón.
Caminó entre las mesas casi vacías, ya que la mayoría de la gente bailaba. Vio como Gabrielle se sentaba en su mesa mirando a todos lados como buscando a alguien sin encontrarlo. Llegó hasta el bar donde pidió que le dieran una cerveza de mantequilla cargado con más alcohol. Miró tristemente como las parejas se besaban o abrazaban. Le dieron la cerveza de mantequilla y de un solo sorbo se lo bebió todo.
OoOoO
Harry había mejorado mucho su forma de bailar, casi podría decirse que bailaba excelente. A veces le pisaba el pie a Ginny, por lo que no podía llegar a decirse que bailaba tan bien; pero ahora era agradable y casi hasta un honor poder bailar con una de las celebridades más importantes del mundo mágico.
En la entrada del recinto había muchos reporteros y fotógrafos. Y por supuesto, no desaprovecharon la oportunidad de tomarle varias fotos o sonsacarle alguna pequeña entrevista a la pareja que reía divertida por su insistencia.
-Me pregunto cuándo dejaran de tomarnos fotografías – susurró la pelirroja apoyando su cabeza en el pecho del muchacho mientras bailaban una tonada lenta.
-No sé, pero ojalá lo hagan pronto. Me están empezando a molestar – rió disfrutando el suave aroma de manzanilla que desprendía el cabello de Ginny.
-¿Sabías que te quiero? – preguntó viéndolo a los ojos.
-Claro, es imposible resistirse a mí – sonrió.
Se fundieron en un corto beso mientras todos los fotógrafos aprovechaban de sacar una foto para publicarla en la sección de vida social del periódico. También algunas personas veían con ternura a los dos jóvenes enamorados, porque era una escena demasiado linda como para decir que era inmoral besarse en público o ese tipo de cosas.
Todas las personas miraban con ternura aquella escena… Menos una.
-Ya veremos si eso dura tanto – murmuró entre dientes la muchacha sirviéndose en el bar un poco más de tequila mientras veía a los dos tortolitos darse un beso en la pista de baile.
Se dio media vuelta y le agradeció al cantinero por servirle el tequila guiñándole el ojo coquetamente. Luego miró a la gente que estaba en el bar, y casi todos eran solteros sin compañía ahogando sus penas con el alcohol; pero le llamó la atención ver a Hermione Granger tomando un whisky de fuego en completa soledad.
Volvió a fijar su vista en la pista de baile, pero ya no estaban Harry y Ginny. Seguramente habían ido a buscar un lugar más privado para darse esas muestras de cariño.
-Tú acá sola, bebiendo un tequila… Algo no muy típico para Cho Chang - comentó Nicole sentándose junto a su amiga que sonrió al verla – Parece que no tienes ya modales, porque cuando fuiste a abrazar tan cariñosamente a Harry no me saludaste a mí.
-Ya sabes que hay una gran diferencia entre los hombres y mis amistades. Tengo prioridades – rió. Le pidió al cantinero otro vaso de tequila para Nicole que aceptó gustosa y lo bebió de a poco - ¿Y tú pareja?
-Se fue por allí a coquetear con las mujeres – bebió un poco – Pero, Cho… Harry no es un hombre cualquiera: Tiene novia.
-¿Y eso a mí me debería importar? – preguntó con un brillo malicioso en la mirada mientras bebía todo su vaso de tequila – Estará con novia, pero no muerto.
-Cho… - negó con la cabeza preocupada – No coquetees con Harry sólo para ganar el concurso de la revista, tú vas a ganar sin hacerte ese tipo de publicidad barata y sucia.
-Mira, Nicole Morick – se puso de pie la oriental mirándola fijamente con un dejo de desprecio – Fuimos amigas cuando íbamos en Ravenclaw y guardo maravillosos recuerdos de nuestra amistad. Pero ahora no somos amigas, sólo unas simples conocidas… Y si quieres seguir manteniendo alguna relación conmigo, por favor, métete en tus asuntos y déjame tranquila – dijo antes de irse.
Nicole miró como se iba Cho antes de pedir otro vaso de tequila bien cargado para olvidarse de todas las preocupaciones que abrumaban su mente.
Miró hacía los lados y se encontró con que Hermione bebía solitariamente una gran copa de whisky de fuego. Se veía triste y unas juguetonas lágrimas rodaban por su mejilla.
Tomó su vaso de tequila y caminó hasta llegar a la castaña que recibió feliz la compañía de su amiga.
OoOoO
Salieron al balcón donde no había nadie. Era sencillo y bonito. Se podía apreciar toda la avenida principal iluminada por los faroles; y el cielo estrellado se veía hermoso, se veía tan inmenso y amplio que daban ganas de saltar para introducirse en el firmamento del cielo.
Harry pasó su brazo por los hombros de Ginny abrazándola con fuerza mientras ella recargaba su cabeza en su hombro admirando el bello paisaje ante sus ojos.
Como odiaba pasar tanto tiempo lejos de ella. Él estudiando en la academia y ella atareada con su último año en Hogwarts. Todo se hacía tan difícil sin que estuviesen juntos casi todos los días como era el año pasado… Pero algo que le agradaba, era que esos momentos en los que estaban juntos se hacían tan especiales y tan intentos que eran inolvidables.
-Harry… - murmuró tranquila la muchacha.
-Dime.
-Aunque estemos separados la mayor parte del tiempo, nunca dejó de pensar en ti en ningún segundo – lo miró a los ojos.
¡Por Merlín, como amaba esos ojos! Desde la primera vez hace siete años que los había visto se había enamorado. Y también se había encaprichado en el famoso Harry Potter desde muy pequeña. Ahora le era tan fascinante saber que él era su novio, de que estaban juntos y se querían; casi era como un sueño.
Ojalá esos nunca acabara, que siempre fuera así de especial y bonita la relación que mantenían.
-¿Crees que alguna vez he dudado de eso? – le besó la frente tiernamente – Yo también nunca dejo de pensar en ti, porque te quiero.
-Eso si que no lo he dudado – sonrió.
Se dieron un beso lento. Esas agradables mariposas aparecieron en el estómago de los dos y un calorcito recorría sus cuerpos haciendo que el beso se profundizara más y más.
Se separaron con lentitud y al abrir los ojos los dos sonrieron torpemente.
-Tengo que ir al baño – sacó la lengua juguetonamente - ¿Quieres acompañarme?
-No puedo entrar al baño de mujeres – dijo riendo.
-Mi idea es que te quedes afuera esperándome…
-Ah, si es en ese caso voy – se tomaron de las manos antes de entrar.
OoOoO
Cho estaba sentada en la mesa al lado de su madre que le conversaba obre una cosa que ni le interesaba. La oriental estaba demasiado ocupada vigilando el lugar tratando de ubicar a la parejita para entrar en acción.
Justo vio como Harry y Ginny iban tomados de la mano caminando hacia la salida… Posó su vista en la salida y encontró los baños.
Sonrió contenta por saber que ya había llegado su ansiado momento mientras se disculpaba con su madre. Fue hasta un grupo de periodistas que al verla sacaron de un maletín una cámara fotográfica profesional y unos papeles que rápidamente firmó Cho.
-Ha llegado la hora de empezar la función, muchachos – dijo sonriendo.
OoOoO
Harry estaba esperando a Ginny en el baño. Tenía recostada su espalda en la pared del pasillo y tenía las manos en los bolsillos de su pantalón mientras tarareaba la canción que tocaban en la pista de baile del salón principal.
De repente apareció a su lado Cho Chang. Traía puesta sus manos en las caderas y caminaba de manera provocativa.
-Hola, Harry – se acercó – No tuvimos la oportunidad de hablar hoy después de cómo ve veía la muchachita pelirroja.
-Ginny… Mi novia – agregó sin mucho interés de hablar con la oriental.
-Tengo tantas cosas que decirte – se apoyó en la pared al igual que él – ¿Sabes? Recuerdo como si fuera el día de ayer cuando los dos estábamos juntos.
-Nunca estuvimos juntos – rió – Yo estaba colado por ti, pero tú no me tomabas en cuenta. Y eso pasó hace mucho tiempo.
-Pero no puedes negar que hacíamos una muy buena pareja - dio un paso y quedó justo al frente de Harry acorralándolo contra la pared – Y me gustaría ver si podríamos repetir esa experiencia tan maravillosa…
-¿Estás hablando en serio? – preguntó aguantando reírse, pero vio como hablaba en serio Chi y se quedó estático - ¿Qué quieres?
-¿De verdad quieres saber qué quiero…? – se acercó al rostro del pelinegro que sólo la veía un poco asustado – Pues, esto quiero – posó sus labios en los de Harry.
OoOoO
-Maldito jabón – murmuró Ginny secándose las manos. El jabón se le resbaló de las manos varias veces antes de lavarse las manos y al final terminó odiándolo.
Dio una última mirada a su vestido blanco con detalles brillantes antes de salir. Abrió la puerta giratoria emocionada buscando con la mirada a su novio… Giró su vista y…
-Ay, no… Debo estar soñando o esto es una ilusión – musitó sintiendo como sus ojos se ponían húmedos, quería llorar. La respiración se le cortó y no podía recuperar el habla de la impresión.
Ahí estaba Harry y Cho besándose a pocos metros de ella. Harry la apartó casi al instante mirándola de forma extraña... Pero eso ni le interesaba a la pelirroja que sintió como una parte de su corazón se destrozaba mientras sus pies comenzaron a correr antes de que él la viera.
¿Cómo podía ser eso posible? Siempre creyó que esa hermosa relación era por la eternidad, que nada ni nadie iba a destruir eso tan especial que tenía. ¿O sea todo era una mentira? No, no podía serlo… Por algo él la apartó de su lado, pero eso no le importaba mucho… ¿Qué hacían los dos juntos cuando ella estaba en el baño? Estaban juntos, él y ella estaban juntos… ¿Cómo pudieron estarse besando sabiendo cuánto lo quería? Todo, todo se había acabado. Era demasiado bueno para que fuera real todo ese cuento de hadas.
-¡Hermione! – llegó corriendo mientras lloraba al bar y en cuanto vio a su amiga la abrazó desesperada.
-¡Por Merlín, Ginny! – exclamó Nicole poniendo una mano en su hombro para tranquilizarla - ¿Qué te pasa?
-¿Cómo pudo hacerme esto? – preguntó entre lágrimas.
-Vamos, Gin, tranquilízate – dijo Hermione que había recuperado la razón al ver a su amiga así de mal. El alcohol ya no le hacía estar media loca - ¿Qué pasó?
-Se estaban besando… Malditos estúpidos – se apoyó en el hombro de la castaña – Era demasiado bueno como para que todo fuera verdad...
-¿Quiénes se estaban besando? – preguntó Hermione mirando preocupada a Nicole que sólo se alzó de hombros.
'No creo que Cho haya hecho eso, no es tan mala persona…' pensó acariciando los cabellos de la pelirroja que miraba atentamente a las muchachas buscando las palabras adecuadas para decirlo.
-¡Harry y Cho se estaban besando! – gritó acompañado de un sonido desgarrador y volvió a hundirse en el hombro de la castaña que sólo atinó a abrazarla lo más fuerte que pudo.
-Ay, no, Gin… No puede ser…
Nicole miró rápidamente a la entrada del salón. Vio a Cho que entraba con una sonrisa que no se le quitaba de la cara y se acercó a un fotógrafo. Estaban hablando sospechosamente.
'Maldita perra' pensó negando con la cabeza. También abrazó a Ginny formando un abrazo de grupo 'Se acabó todo esto… Cho va a pagar por todas las que está haciendo' se dijo a si misma antes de buscar un pañuelo para la pelirroja que lloraba silenciosamente.
Notas de la autora: Mmm… No sé qué comentarios hacer sobre este capítulo. Creo que ya con todo lo que hay es suficiente, pero lo único que puedo decir es: Ginny, anda preparándote… Harry, todo pasa por algo.
Lo que sí puedo agregar como muy extra a la historia es que si yo fuera Nicole, hace que rato no soy amiga de Cho. La oriental es una pésima amiga y una persona asquerosa, una arpía. Y hay personas así en el mundo, estamos rodeadas de ellas camuflándose como buenas personas cuando, en realidad, muy pocas personas son leales, especiales y buenas amigas/os (desahogo personal).
¿Adelantos? Creo que podría adelantar que veremos el diario de Herms, porque hace capítulos que no hay nada de eso. Y el fic dice 'Querido Diario II' y como que el diario está ausente XD! Y habrá un pequeño receso en las tormentas para ver los sentimientos de Hermione y algunos detalles importantes.
Sé que este capítulo no les gustó, obviamente con todo lo que pasó ¬¬… Pero mándenme sus reviews con sus comentarios, críticas, sugerencias, especulaciones de lo que pasará.
Cuídense, adiós!
