Después de su primera derrota ante el gimnasio de Norman en Ciudad Rubí, Fen sigue adelante con su viaje, con el objetivo de ser más fuerte y retar los gimnasios de la región. Sin embargo...
Un basto campo de flores se extiende a la vista, y nuestro joven entrenador camina por el sendero de este, luciendo, perdido.
Fen: donde diantres estoy?
Se cuestiona nuestro chico, mientras toquetea su MU-Watch, tratando de descifrar el mapa.
Al no poder reconocer el sitio, y sin mucha más opción , sigue andando. En el camino se topa con un curioso anciano, de piel oscura, algo calvo con barba y cabello blanco, muy delgado el cuál tiene un atuendo un poco gastado, y salpicado de pintura, este hombre está precisamente pintando un lienzo, el paisaje florido frente a él.
Nuestro joven novato habla llamando la atención de ese pintor.
Fen: disculpe, señor? Sabe hacia donde lleva este camino?
Pintor: claro que si muchacho. Vas derecho hacia Ciudad Omega.
Fen: ciudad… Omega?
El entrenador vuelve a mirar su reloj, y busca el lugar mencionado.
Pintor: te ocurre algo chico?
Fen: … creo que estoy perdido. Lo siento, mi nombre es Fen, soy entrenador pokémon y estoy de viaje. Quiero ir a la siguiente ciudad y retar al gimnasio pokémon.
Pintor: gimnasio? Pues temo que vas mal chico, en Omega no hay gimnasio.
Fen: Qué?! O diablos…
¿?: papá!
Se oye una voz femenina, tanto el hombre como el entrenador ven acercarse a una chica, ella tiene una blusa blanca, que denota unas pocas manchas de pintura, lleva también pantalones que llegan por debajo se sus rodillas, y una boina sobre su cabeza, ambos de un color gris. Bajo su boina se nota su cabello pelirrojo. Lleva en su mano lo que parece una libreta de pintura, y un pincel.
Junto a esta hay un pokémon, semejante a un perro que camina en dos patas, la forma de su cabeza recuerda a una boina, y destaca su larga cola la cual termina en un mechón de pelo, cubierto de un liquido que parece pintura.
Ella se acerca al hombre, pero se sorprende un poco al ver al entrenador en el lugar.
¿?: uh papá, quién es él?
Pintor: ah Penny, este es Fen es un entrenador.
Penny: un entrenador? Un entrenador!
Antes de Fen saberlo, la chica, llamada Penny, había corrido hacia él y le agarro las manos para sostenerlas frente a ella con un brillo esperanzado.
Penny: eres entrenador?! Quizás tu puedas ayudarme!
Fen: bah beh… eh, ayudarte con qué…?
Pintor: Penny, no molestes así al chico.
Penny: te llamas Fen verdad? Fen necesito tu ayuda. Este es el campo de las hadas, esta habitado por pokémons de tipo hada.
Para sorpresa de Fen, Penny busca en su libreta de dibujo, y le enseña una pintura. En esta se ve a una criatura, casi pareciera el híbrido de una planta y una niña pequeña. Tiene un pequeño tallo verde en lugar de piernas, acabado en dos pequeñas hojas, su cuerpo es de color blanco, y en su cabeza destaca dos orejas que simulan un peinado de coletas, además sus ojos tienen un pétalo que parecen pestañas. Lo interesante, es que en sus brazos sosiene una flor de color azul, sujetándola como si fuese una sombrilla.
Fen: um, eso es…
Penny: este pokémon se llama Floette. Ves cómo lleva una flor? Esa flor puede ser de 5 colores diferentes. Quiero hacer una pintura de las 5 floettes de cada flor! Pero… smeargle no es muy bueno en batallas y… no puedo atrapar a las floettes para juntarlas…
Penny parece deprimirse, igual que su pokémon smeargle. Fen por su parte piensa un momento, logrando comprender la situación.
Fen: … oh! Ya, entiendo. Quieres que, te ayude a buscar y capturar a los floette.
La única respuesta de Penny, es una mirada llena de brillo y una sonrisa inocente. Fen siente como una gota de sudor cae por su nuca. Al final solo suspira.
Fen: bien… supongo que no me molesta hacerlo-
Penny: GRACIAS! Ven conmigo!
Exclama ella antes de que él pueda siquiera terminar su oración, y luego se lo lleva arrastrando hacia el florido campo.
Pintor: ay esta niña es como su mamá.
Habla el hombre para sí mismo y luego vuelve a su propia pintura.
~ Pokécchimon ~
Capítulo 9: El Campo de las Hadas
Penny: estas, son Velozballs. Pueden capturar pokémons si se usan al comenzar una batalla.
Explica la chica pintora mientras entrega a nuestro entrenador, 3 pokébolas de color azul claro con lo que parecen flechas amarillas que se unen en su centro, dibujando casi un diamante.
Fen las toma y las examina un momento, se ve interesado por la información.
Penny: dividámonos y busquemos a las floettes, recuerda que son de 5 colores diferentes. Tratemos de capturarlas todas!
Sin otra palabra, la chica pintora se voltea y corre por entre las flores, muy entusiasta. Fen se mantiene en su sitio, viéndola perderse, luego mira hacia las, velozballs, y gime un poco.
Fen: se aprovechan de mi nobleza. … en fin.
El joven entrenador recorre, sin ninguna prisa, el campo florido, y no demora en notar lo que parece una flor azul moviéndose por sí misma entre todas las demás. Una mirada más cercana, logra distinguir que esa flor es sujeta por una floette.
Sigiloso, se acerca, y al estar cerca de la pequeña pokémon ,saca una de las velozballs. La pequeña hadita demora un poco, pero logra darse cuenta de la presencia del entrenador.
Fen: Velozball, VE!
Grita él al lanzar la esfera, esta vuela por el aire, y logra golpear a la pequeña hada flor y retenerla dentro de sí. La esfera cae al suelo, y se tambalea un par de veces, antes de sellarse, logrando así la captura.
Fen: wow! De verdad funcionó!
Exclama él asombrado para después acercarse y tomar la velozball. Sonríe para sí mismo y guarda la pokébola, luego sigue buscando.
Al poco tiempo encuentra otra floette, esta tiene una flor amarilla y está sentada en una roca, relativamente grande. Fen se prepara, y cuando la pequeñita se da cuenta de él, lanza la velozball, y la captura sin problema.
Con dos floettes atrapadas, el entrenador sigue andando por el lugar. Luego de un rato, no parece haber señal de otra hadita con flor, hasta que, distingue un movimiento, una florecita color rojo agitándose entre medio de varias flores. Mirando atentamente, en seguida ve a una floette con flor roja. Se apresura a sacar la velozball, y al ver la pequeña hada al entrenador, este lanza la ball. Sin embargo, la hadita logra moverse y evitarla, lo que provoca que la ball golpee el conjunto de flores rojas, para sorpresa del chico, la ball se activa, y ese conjunto de dores rojas, es atrapado…
Fen se queda confuso mientras ve la pokébola agitarse, una vez, otra, y luego, se abre, lo que sea que golpeó por accidente, se libera…
Nuestro entrenador queda tieso, ante él surge un ser, que parece ser una gran flor, con un aspecto humanoide femenino, un aparente tallo causa la ilusión de un par de piernas cubiertas de un vestido morado, adornado además por dos enormes hojas a los lados, casi parece una cola de sirena. Ese "vestido" sube por el torso hasta acabar debajo de los grandes senos de la pokémon, cubiertos por lo que se asemeja a un brasier color negro. Su piel es de un suave blanco, pero lo más impresionante son las flores que rodean su cabeza, formando una especie de melena, a su vez dándole el aspecto de ser un ramo de flores gigante.
Fen: wah…! Qui-Qua-Qué…?!
Este ser planta humanoide mira al joven entrenador, y da una sonrisa casi burlona.
Fen, un tanto intimidado por la presencia del desconocido ser, busca su ecchidex.
Ecchidex: Florges. Pokémon Jardín. Habita en campos floridos y utiliza la energía de las flores como fuente de poder. Protege los jardines y las plantas, y con su energía es capaz de extender su vida durante varios siglos.
Florges suele ser una pokémon amorosa y dispuesta a entregar placer y afecto. El romance acompaña al placer de esta pokémon y su pareja.
Fen: no necesitaba saber lo último.
Susurra el entrenador a su aparato, pero desvía la atención de este cuando oye a esa florges hablar, con una voz femenina y elegante.
Florges: parece que encontré un chico un tanto atrevido.
Habla ella con un tono algo burlón, para después reír levemente. Fen se tensa un poco y trata de explicarse.
Fen: pe-perdón ah… ah… señorita, Florges? Yo quería, atrapar al floette, el pequeñito-
Florges: hmm, por qué quieres una floette? Te gustan las pequeñitas? No preferirías, una hembra más grande~?
Su voz gana un tono sugerente, y usa sus manos para sostener sus senos, haciéndolos resaltar. Fen se sonroja.
Fen: n-n-no no no! No es así! Es que… una chica las necesita para-
Florges: oh~, así que quieres impresionar a una chica.
Para sorpresa, y un poco de miedo, del chico, esta dama flor se acerca flotando, y se inclina ligeramente para estar sobre la altura de él.
Florges: y ella es linda?
Fen: ah bah.. bah… y-yo… creo que, lo está, mal interpretando…
Florges: capturas pokémons para ella. No preferirías capturar una para tí? No quieres, capturarme a mí~? Puedo hacer mucho por ti~
La pokémon flor se acerca más, hasta poder abrazar al chico por el cuello y atraerlo hacia ella, dejando la cara del entrenador entre sus senos. Nuestro entrenador se queda helado, pero muy rojo, y no es capaz de responder. Florges por su parte solo sonríe y al no tener respuesta, se separa de él y se atreve a inclinarse y besar los labios del entrenador, cosa que lo hace tensarse y jadear de sorpresa.
La pokémon hada le abraza el cuello, y lo jala un poco para que su beso sea más profundo, cerrando sus ojos ella se atreve a usar su lengua, encontrando la del chico le da un beso estilo francés, y se pega a él causando sus senos aplastarse contra el pecho del chico.
Cuando ella se separa, deja su lengua rozar la del chico hasta separarla y sonreírle.
Florges: bien? Fue eso agradable?
Fen trata de hablar, pero sus palabras se traban causando la risa de la hada. Sin él saberlo, aquella floette de flor roja está flotando por encima, mirando la escena, y ríe divertida.
Mientras la hada flor jala de nuevo al chico, uniéndolo en otro beso, lo empuja al suelo y ambos caen sobre las flores, aunque caen con tal suavidad que no recibe ningún impacto. Florges sigue ese beso de forma más apasionada, haciendo que su lengua juegue y roce la del chico, sacándole a él un par de jadeos y gemidos.
Fen no puede contener la excitación al sentir el beso y la lengua de la pokémon, así como el cuerpo de esta sobre al suyo, sentir ese par de senos contra su torso, empieza a responder ese beso, y lleva sus manos a la cintura de florges, por error alcanza el trasero de esta, sorprendiéndose de sentir una forma similar, aunque diferente de un trasero humano. La pokémon por su parte, no parece molestarse al ser tocada, en cambio inclina su cabeza pudiendo así profundizar más ese beso.
Cuando la pokémon se separa y rompe un hilo de saliva entre sus lenguas, ella se levanta lo suficiente, para pasar sus manos debajo de esas figuras en forma de diamantes negros que cubre su pecho, se lo quita cual si fuese un brasier y deja descubiertos sus senos. La vista de los senos blancos de la pokémon adornados con pezones rosados, muy humanos, solo causan excitación en el cuerpo del entrenador, cosa que empieza a notarse. Más aún, florges pasa sus manos ligeramente debajo de aquella especie de vestido morado que cubre su cuerpo, y se lo baja, revelando su blanquecina piel, aquella especie de cola simula la forma de unas piernas torneadas, y en su centro hay un pequeño coño color rosa, ya notoriamente humedecido.
Fen puede sentir su hombría crecer, apretadamente dentro de su pantalón, cosa incómoda que lo hace gemir. Florges ríe y después le quita la ropa a él también, soltando así su miembro el cuál parece sorprenderla, pero la hace sonreír. Ella vuelve a recostarse sobre el entrenador, se frota sobre él, haciendo sus pechos rozar el pecho del chico, y su coño rozar su miembro. Fen solo puede gemir excitado ante tal sensación, y la hada de flores se sonroja ella misma, para luego darle un suave beso en los labios, cosa que él le responde.
El miembro erecto del entrenador roza el sexo de la hada, y sin poder aguantar, él la toma por la cadera, la acomoda sobre sí y logra meter su pene dentro del coño de florges. Ella suelta un grito pero en respuesta, empuja su cadera contra él, haciendo esa unión más profunda.
Ambos respiran agitamente y se quedan unidos, después empiezan a moverse casi al mismo tiempo, Fen empuja su pelvis hacia arriba, mientras florges se empuja abajo, la anatomía de la pokémon permite que ella esté recostada sobre el chico, lo que hace más fácil el acto. Los senos de florges se aprietan y rozan sobre Fen, y él se aferra al trasero de la pokémon, empujándola un poco más contra sí mismo.
Ambos se besan y dejan sus lenguas jugar mientras siguen empujándose contra el otro. Fen llega a su orgasmo y se corre dentro de la hada flor, ella misma al sentirlo se empuja contra él, para recibir todo. Rompen el beso y la pokémon sonríe, mientras el entrenador se ve un poco apenado.
~ Pokécchi ~
Penny: Fen! Fen! Conseguí una floette naranja y una blanca! Tú-
Su pregunta queda cortada, al ver al entrenador sentado en el suelo, con la hada flor también sentada entre las flores, sus senos aún descubiertos. Ambos aparentemente descansaron tras su acto.
El entrenador se había arreglado la ropa lo suficiente, pero aún se pone nervioso al verse, "descubierto", pero…
Penny: Encontraste una florges!
Grita ella y corre hasta estar frente a la hada flor, para sorpresa de esta.
Penny: he oído que las florges son hermosas! No puedo creerlo!
Florges: je je, esta es la chica? Bueno, es linda.
Penny: Florges! Me dejarías pintarte?! Por favor!
Florges solo sonríe, parece interesada ante tal pregunta. Por su lado, Fen está desconcertado.
Fen: um, yo…
Penny: ah si! Fen! Encontraste a las floette?
Fen: um, bueno, conseguí una de flor amarilla y una azul, vi a una roja pero-
No acaba su oración pues siente algo, caerle suavemente en la cabeza. Apenas puede distinguir nada mirando hacia arriba, pero es la floette de la flor roja, quién ahora se posa en la cabeza del chico, parece interesada, y algo divertida.
Penny: la de la flor roja! Tenemos a las cinco! Fen! Lo hiciste!
Fen parece querer hablar pero no puede, porque Penny se le tira encima y sin duda ni pena le planta un beso en los labios que lo deja mudo.
Ambas pokémons hadas ven la escena, y ríen divertidas.
Fen trata de levantarse pero la pintora lo sujeta con fuerza y mantiene su beso.
~ Pokécchi ~
La chica pintora traza su pincel sobre su pequeña libreta, frente a ella puede verse a la florges, ya correctamente "vestida", sentada en una roca del lugar, y a su alrededor flotando, están las pequeñas floettes, todas quietas, posando para la chica.
Un par de pases más, y Penny termina su pintura. En esta puede verse el campo de flores, un cielo azul de fondo, la gran hada flor sentada en la roca, y las pequeñas haditas sujetando sus flores alrededor.
Pintor: te quedo de maravilla Penny.
Felicita el padre de la chica, con el smeargle al lado de él, afirmando.
Penny: gracias papá! Y gracias amigas!
Saluda y agradece ella a las seis pokémons con flores, quienes también se acercan a ver su pintura. Fen por su lado, está un poco apartado, Penny se voltea para verlo.
Penny: y gracias a ti Fen, no hubiera conseguido esto sin tu ayuda.
Fen: ah, no hice gran cosa. Pero, me alegra que terminaras tu pintura.
Penny: ahora, floettes, disculpen por capturarlas, pero, ya pueden irse.
Dicho esto, la chica toma las dos velozballs que tenía, y usa el dispositivo de liberación para así dejar libres a las dos haditas. Viéndola a ella, Fen decide hacer lo mismo. Después, regresa las pokébolas a su dueña.
Penny las toma, y guarda cuatro de ellas, pero la última, decide dársela a Fen de nuevo.
Penny: toma Fen, para agradecerte. Sé que no es mucho pero… espero que te sirva algún día.
Él se ve sorprendido, pero sonríe, y acepta el regalo.
Pintor: vas a dirigirte a Ciudad Omega ahora?
Fen: si, incluso si no hay gimnasio, intentaré hacerme más fuerte para cuando rete al siguiente.
Pintor: jum, sabes oí que hay un lugar llamado Solar Ensueño, dicen que ahí es un buen lugar para entrenar. Tal vez deberías echar un vistazo.
Fen: Solar Ensueño. Eso suena bien. Iré a ver.
Con una despedida, y un abrazo de parte de Penny, nuestro chico y ambos pintores se despiden. Por su propio lado, las floettes rodean a Fen y vuelan un momento a su alrededor, como un baile de despedida, que lo hace reír.
Florges: sé que antes dije que podías capturarme. Y me gustaría viajar contigo, pero debo quedarme a cuidar de este campo, y estas pequeñas también necesitan cuidado.
Fen: lo comprendo. Está bien. Fue… divertido, je.
Florges se acerca y abraza al chico, dejando su cabeza entre sus pechos.
Florges: vuelve a visitarme alguna vez.
Fen dice algo, pero su voz es ahogada por los senos de la pokémon. Las floettes alrededor solo pueden reír ante tal escena.
~ Pokécchi ~
Nuestro entrenador finalmente sale del campo Hada, permitiéndose una vista más de las coloridas flores del lugar. De su bolsillo saca un papel doblado, el cual al abrirlo, muestra una imagen de él mismo, con una pokébola en mano. Una pintura aparentemente hecha por su amiga. Sonríe con cierto aire presumido, luego vuelve a guardar esa imagen.
Mientras se aleja, no se da cuenta de una pequeña figura. La pequeña floette de flor roja lo ve irse, con una risita decide seguirlo, sin que él se de cuenta.
~ Pokécchi ~
…
El campo sigue tan colorido como siempre. Se pueden ver algunos pokémons jugando o recorriendo los alrededores.
En medio de este enorme jardín, las pequeñas floettes revolotean y se divierten. Entre tanto, aquella florges de vestido morado reposa entre las plantas, teniendo en su regazo un huevo.
De pronto este huevo empieza a brillar, se rompe un pequeño espacio arriba, y una leve luz surge de este. Florges sonríe dejando el huevo de lado, y en cambio, esa pequeña luz se posa ahora en sus mano.
La luz se apacigua revelando a una criaturita, muy pequeña, incluso más que las floettes. Su cuerpo es reondeado, mitad verde terminado en un diminuto tallo, el resto es blanco junto a una cabeza relativamente grande, con dos orejas que parecen alas, de tamaño grande comparado al resto de su cuerpo, y una clase de coronita adora su cabeza.
Este pequeñito ser abre los ojos, y ve a la florges que la sujeta con delicadeza.
Florges: hola mi pequeña flabébé.
Habla la hada floral con un tono suave y cariñoso. La diminuta hadita intenta flotar, y sus orejas se mueven. Florges sonríe, y de entre su propia corona de flores, saca una adicional, de color rojo. La hada recién nacida sonríe, y se aferra al estigma de la flor.
Su madre le sonríe, y las floettes alrededor se acercan para ver al a recién nacida.
~ Esta historia continuará... ~
NOTA:
Eh que dijeron ya se murió la historia pues no! Solo necesitaba pensar en una forma de transicionar los eventos siguientes, el siguiente capítulo nos espera una sorpresa para la trama que planeo de este fic.
Pero basta de semi spoilers, vimos a nuestro entrenador en una desventura más, ya hacía falta que tuviera emoción con una pokewaifu, para variar un poco ja ja
En fin agradezco a los follows y favorits y los comentarios como siempre, me hacen sentir que la historia me sale bien. Nos veremos pronto en otro capítulo, quizás uno especial dedicado a halloween. 'Atrapemoslas' a todas!
