Nota de Alima: Sorry por el retraso, aunque me pasaron muchas cosas, no tengo perdón (María). Sólo podemos decir que el próximo estará en muchísimo menos tiempo. Besos y gracias por los ánimos y por continuar ahí.

Gracias a Belezza2001 por su ayuda.

Capítulo dedicado a Mick, el amiguito más persistente y con mayor fe de todo el mundo mágico. Mil gracias por seguir todavía ahí y verás que el próximo llegara más pronto.

CAPÍTULO 24: LA EMBOSCADA

Draco corrió hacia el castillo, sus pensamientos más felices de lo habitual. Claramente, la guerra había dado un giro y, lo que era más importante, Harry parecía estar llevándolo mejor. Aunque no estaban ganando exactamente, ciertamente tampoco estaban perdiendo de una forma tan desastrosa como antes. La resistencia ciertamente había florecido bajo el liderazgo no oficial de Harry. Si Harry pensaba que era famoso antes, no era nada comparado a lo que la gente ahora pensaba de él. La única diferencia es que ahora, ni siquiera él podía sostener que no era una fama merecida.

La gente respetaba y admiraba a Harry por el hombre que era, no por la leyenda que había sido. Era divertido mirar cuando los planes de batalla eran discutidos mientras los combatientes buscaban a Harry para determinar cuál sería su papel en la próxima confrontación y luego luchaban por ser incluidos en las escuadrillas desplegadas cerca del lugar donde el moreno estaría luchando. Todos sabían que Harry tenía la mejor oportunidad de tener éxito y, más en el punto, sólo de sentían a salvo cuando Harry estaba cerca.

Desde su regreso, él solo había conseguido salvar incontables vidas de muggles y magos; su fuerza y determinación eran incomparables, así como sus superiores habilidades mágicas. Apenas habían pasado tres meses y medio desde su regreso a Hogwarts, pero en ese tiempo, Harry se había ganado totalmente al pueblo, sin intentarlo siquiera. No había duda en su mente que cuando esa cosa hubiera sido eliminada, la comunidad mágica estaría de rodillas rogando a Harry que les proporcionara sus consejos en un puesto más 'oficial'. "No que eso pudiera llegar a pasar alguna vez", Draco se rió entre dientes. Harry echaría a correr en la dirección opuesta si alguien siquiera le sugería tal cosa; claro, correría después de que hubiera hechizado concienzudamente a la persona lo bastante valiente para sugerirlo.

El mismo Harry había comenzado a cambiar también, ya no estaba todo el tiempo tan distante como había estado cuando regresaron. Seguro, aún era reservado, especialmente con la gente que había conocido antes de su encarcelamiento, pero participaba en las discusiones que sentía que eran de utilidad e incluso, en alguna rara ocasión, había sido visto compartiendo una sonrisa o una carcajada con alguien.

Ante el pensamiento de poder ver ese hermoso rostro iluminado con risas sinceras, Draco recordó el divertido Halloween que tuvo con Harry y los gemelos sólo unas pocas noches antes.

Flashback

Draco miraba como Harry pasaba su mano a través de su ya despeinado cabello, haciendo que los pocos mechones que permanecían en su lugar terminaran por levantarse y unirse a sus vecinos. Draco se hubiera reído entre dientes de las payasadas de su compañero si no estuviera tan preocupado. Era Halloween y por alguna razón, Harry Potter y Halloween simplemente no parecían llevarse.

Nunca, en todo el tiempo que Draco había conocido a Harry, pasó un Halloween que no sucediera algo malo. No sólo era un día desgraciado para siempre por ser el aniversario de la muerte de sus padres, sino que, históricamente, ese día había estado lleno de acontecimientos desagradables como: luchas contra trolls enormes como montañas, susurros de basilisco y gatos petrificados, su nombre siendo extraído del cáliz del fuego y una variedad de otros no tan maravillosos sucesos. Innecesario decir, Harry y Draco estaban simplemente ansiosos porque ese día terminara de una vez.

Los dos hombres acababan de entrar en su apartamento después de pasar la tarde discutiendo estrategias de guerra y tácticas de batalla con los miembros de la Orden, cuando fueron atacados por dos bultos de piel negra. Rodando juguetonamente por el ataque, Harry se cayó al suelo, fingiendo estar herido, e inmediatamente se rindió antes de dar la vuelta cerca de Matthew. El joven muchacho chilló de la risa mientras Harry rodaba al pequeño sobre su espalda y comenzaba a hacer cosquillas en su barriguita.

Sorprendido de ver a sus hijos disfrazados como algún tipo de animal, Draco rápidamente siguió a Harry y pronto estaba debajo de Evan, quien estaba gruñendo y fingiendo arañar su cara. Pronto, aburrido con ese juego, el niño empujó a su padre y gateó a donde su hermano estaba luchando juguetonamente con su papá.

Después de que los gemelos hubieran sometido exitosamente a Harry y hubieran recuperado el aliento después de reír tan fuertemente, Draco no pudo evitar preguntar:

¿Y ustedes dos por qué están disfrazados?- aún estaba perplejo ante sus disfraces.

Matthew miró fijamente a su padre, sus ojos verde oscuro muy abiertos con incredulidad.

Truco o regalo- su tono no dejo dudas en la mente de Draco de que su hijo pensaba que su pregunta había sido muy tonta.

Draco apartó los ojos del lugar donde su pequeño hijo estaba parado frente a él, usando lo que sólo podía ser descrito como un leotardo negro. El leotardo tenía pelo negro en los dobladillos, cuello y alrededor de los tobillos. Tenía una larga cola negra, y posadas en lo alto de su cabeza estaban las negras orejas alzándose de su desordenado pelo negro. En la cara del niño había bigotes y su nariz había sido hechizada para mostrarse color rosa y parecía estar estremeciéndose ligeramente. Su hermano estaba vestido de manera idéntica. Lanzando a Harry una mirada penetrante, preguntó:

¿Estoy entendiendo que nuestros hijos van a hacerle travesuras a la gente disfrazados como gatos negros?

Harry intentó ocultar su amplía sonrisa con la mano mientras bostezaba con cansancio.

Bueno, no exactamente. Ellos sólo harían travesuras si no consiguen un regalo.

Ya veo- dijo Draco lentamente, aún sin entender el concepto-. ¿Y estás de acuerdo con eso?- preguntó, mientras lanzaba a Harry una mirada preocupada. El cansancio que había estado afligiendo a Harry parecía estar cediendo un tanto, pero su nivel de energía estaba aún inusualmente bajo.

Oh, vamos Draco, es una tradición de Halloween. Pequeños niños disfrazados, yendo de puerta en puerta pidiendo a la gente regalos. Generalmente, la gente les da a los niños un caramelo y luego los pequeños siguen a la siguiente puerta. Pero si la gente no tiene un regalo para los niños, bien, entonces a estos les está permitido gastarles una pequeña broma, de ahí el nombre 'truco o regalo'. Seguramente tú lo hiciste cuando eras un niño- Nicole, que había diseñado los trajes de los niños, se rió de la expresión horrorizada en la cara de Draco. A veces ese hombre podía ser tan... bien, tan inglés.

Absolutamente no. No vas a convertir a mis niños en vulgares mendigos. No puedo creer que siquiera sugirieras tal cosa- Draco miró con furia a la niñera-. Además, soy un Malfoy, nosotros nunca pedimos a los vecinos nada, si vemos algo que queremos lo compramos, o más a menudo, simplemente lo tomamos.

Harry rodó sus ojos. Sabía que los gemelos habían cogido el hábito de truco o regalo durante su último año en California y que esta tradición en concreto, para la celebración del Halloween, no era algo que se hacía usualmente en Europa. No que él hubiera tenido la oportunidad de ir como cualquier niño la hubiera tenido, pero seguramente Dudley habría brincado ante la oportunidad de ir de puerta en puerta exigiendo caramelos.

Harry abrazó a su compañero de alma.

Mira Dray, es sólo una noche al año, y será muy divertido para los gemelos. Además, han estado planificándolo todo el mes, no se lo estropees¿de acuerdo?

Incluso Dumbledore ha dado su bendición de permitir a los niños del castillo celebrar la fiesta de esta forma 'Americana'- agregó Nicole, viendo que Draco seguía estando indeciso.

Draco intentó mirar a cualquier lugar menos a las personas que estaban paradas delante de él mientras pensaba en esta extraña costumbre, pero en todas las partes que miraba había un recordatorio de Halloween. Por lo visto, Nicole y los muchachos, con la ayuda de algunos elfos domésticos, habían adornado su apartamento para la fiesta. Las calaveras talladas con misteriosas caras estaban iluminadas con interminables velas, e imágenes de gatos negros y globos blancos, que Draco asumió que eran fantasmas, y mujeres feas con las caras verdes y largas narices torcidas, adornaban las paredes.

Incapaz de oponerse a los cuatro pares de ojos suplicantes, cedió.

Vale, me doy por vencido- suspiró-. Y si vamos a hacer esto, vamos a hacerlo bien. ¿Qué clase de bromas tienen planeadas?

Nicole apenas dio una última mirada a las cuatro cabezas agrupadas juntas en el medio de una muy seria discusión, y sacudiendo la cabeza con aprobación, se encaminó hacia el piso superior, alegre de que los muchachos fueran a salirse con la suya.

Más tarde esa noche, luego de una cena ligera, los gemelos, disfrazados, estuvieron finalmente listos para marcharse. Nicole, cortésmente, había decidido que Draco y Harry los acompañaran en su excursión, mientras ella se quedaba atrás, ante el improbable acontecimiento de que alguien encontrara sus aposentos y pidiera caramelos. Mientras se preparaban para irse, Evan examinó a sus padres, ninguno de los cuales había podido ser convencido para usar un disfraz, a pesar del mejor intento de soborno de Nicole.

Papi gato- exigió el pequeño.

Harry sonrió.

No, no esta vez, Evan.

Papi gato- esta vez era Matthew quien exigía que su papá hiciera algo.

Draco se dio cuenta rápidamente. Harry nunca le había revelado específicamente su tercera forma de animago, pero él lo había visto un par de veces cuando estaba transformado, generalmente cuando estaba corriendo y necesitaba escaparse de las cosas por un rato.

Vamos Harry. Es perfecto. Nadie sabrá que eres tú.

Harry realmente no estaba sorprendido de que Draco supiera sobre su forma de felino. No se lo había estado ocultando a su amante deliberadamente, pero tampoco se había presentado la oportunidad de contarle. Los muchachos amaban todas sus formas, pero les gustaba especialmente la de la pantera negra. A veces, cuando los chicos eran más pequeños, mientras tomaban su siesta por la tarde, Harry se enroscaba a su lado y los hacía dormir con su profundo ronroneo.

Harry asintió ligeramente y momentos después, en donde una vez había estado parado, apareció un gato enorme. La piel de la pantera era del negro más oscuro, sin rastros del matiz rojo que se encuentra comúnmente en algunos animales negros. Su forma era elegante y atlética, poderosamente construido para velocidad y agilidad. Su piel era sedosa, lustrosa y suave, y sus ojos eran del mismo verde esmeralda profundo.

¡Papi gato, papi gato!- los gemelos comenzaron a animar repetidas veces, claramente excitados. Era obvio que habían pasado una buena cantidad de tiempo con esta particular pantera y muy probablemente, Nicole había diseñado sus actuales disfraces para parecerse a él.

Vamos chicos, en marcha- propuso, y cuando creyó nadie estaba escuchando, agregó en voz baja-, y acabemos con esto lo más rápidamente posible.

Al oír las últimas palabras de su compañero, la pantera gruñó y descubrió levemente sus dientes en advertencia.

Así que supongo que ahora también tienes oídos extra sensibles- comentó Draco tranquilamente, ignorando la advertencia de su compañero, mientras se encaminaban a la sección principal del castillo.

La noche había sido ciertamente una aventura. No eran el único grupo que había decidido disfrazarse e ir a buscar truco o regalo, pero ciertamente eran los únicos con una pantera negra acompañándolos. Ignorando las miradas que la pantera estaba recibiendo, los chicos pronto comenzaron a golpear las puertas, gritando "Truco o Regalo".

Sólo alrededor de la mitad de los habitantes había entendido completamente el aviso de Dumbledore sobre las actividades de Halloween. Los que habían comprendido el mensaje tenían preparados maravillosos regalos para los niños, que éstos rápidamente colocaban en sus interminables sacos después de dar un rápido gracias'. Los que no habían entendido el mensaje habían tenido una sorpresa muy grande.

Harry había hecho prometer a Draco que no interferiría con ninguno de los trucos que los gemelos habían planeado a menos que la situación llegara a ser peligrosa. Viendo imposible que niños de tres años pudieran efectuar una broma peligrosa, Draco convino.

No llevó a Draco mucho tiempo comprender del por qué Harry parecía seguro de que los gemelos serían capaces de dedicar un cuidado adecuado sobre sus propias bromas. Las de estos dos no estaban ni malditamente relacionadas con las que efectuaban los merodeadores o los famosos gemelos Weasley, en absoluto. Un hombre abrió la tercera puerta a la que habían llegado. Claramente, no había oído antes sobre truco o regalo pues no tenía ningún regalo preparado para los niños. Los gemelos sólo fruncieron el ceño por un segundo antes de mirarse uno al otro. Antes de que Draco se diera cuenta de lo que estaba sucediendo, el hombre estaba allí de pie, con un traje anaranjado brillante y el pelo púrpura. El sujeto ni siquiera se había dado cuenta de que le habían jugado una broma antes de que cerrara su puerta.

Los gemelos se miraron y comenzaron a reír. Su risa era contagiosa y pronto Draco estuvo riéndose con ellos. Cuando se calmaron, se inclinó y susurró en el oído de la pantera:

¿Más magia sin varita?

La pantera sonrió y cabeceó.

La noche continuó por ese camino, con los gemelos consiguiendo regalos o las personas que abrían la puerta consiguiendo una broma. Conforme la noche avanzaba, Draco estuvo extremadamente impresionado, no sólo con la cantidad de control sobre la magia sin varita que sus jóvenes hijos exhibían, sino también con su creatividad. Algunos de los colores que lograron eran puro genio.

Una de las llamadas de los niños trajeron a un par de hombres pelirrojos a la puerta.

Hey Charlie, tenemos algunos gatos Potter en la puerta- Fred sonrió a los dos chicos que había visto sólo de lejos.

Charlie, también dio la bienvenida a esta oportunidad de saludar a sus sobrinos, aunque realmente eran sobrinos segundos, los Weasley consideraban a los gemelos Potter como sobrinos pues nunca tuvieron la oportunidad de considerar a Harry como sobrino.

Bien¿acaso éstos no son dos hermosos gatitos?- dijo Charlie con entusiasmo, mientras se arrodillaba para conseguir una mejor vista en los chicos.

Hey Charlie, Fred- saludó Draco a los dos hombres, bastante amistosamente-. ¿Y dónde está Bill? Pensé que ahora vivía aquí con ustedes.

Fred alzó la vista hacia el alto y delgado hombre rubio que acababa de poner una de sus manos en cada uno de los hombros de los hijos de Harry, en un gesto protector.

Bill está pasando esta noche en las dependencias de Ron y Hermione, ayudando a cuidar a mamá mientras Hermione está llevando a su hija para jugar a truco o regalo.

La posesividad de Draco, no sólo respecto a Harry sino también a los hijos de éste, no pasó desapercibida para Fred. La gente no se había dado cuenta de que aunque él y George siempre estaban bromeando durante el tiempo que estuvieron en la escuela, ya que así lo habían decidido, podían haber competido para altas marcas con un muy pequeño esfuerzo.

Fred era muy observador, y debido a que la gente tenía la tendencia a subestimarlo, a menudo se encontraba en ventaja. Sabía que Draco y Harry parecían estar muy enamorados, alguien tendría que ser tonto para no darse cuenta de lo que era tan obvio. Pero él se preguntaba con frecuencia, cuanto tiempo exactamente llevarían involucrados ambos hombres.

Ahora, mirando de cerca los ojos de acero de uno de los gemelos, Fred pensó que puede que tuviera la respuesta a la pregunta más frecuentemente realizada alrededor del castillo desde el regreso de Harry. Fred acababa de descubrir quien era la 'madre' de los niños de Harry.

Rápidamente dejó de mirar los ojos del pequeño Potter sólo para capturar una mirada casi idéntica, aunque más vieja.

¿Algo mal, Fred?

La pregunta de Draco, suavemente expresada, tenía apenas el veneno suficiente como para hacer la advertencia que el hombre rubio no podía expresar con palabras en su entorno actual.

No Draco, no hay nada mal. Estaba intentando mirar de cerca a mi sobrino. No hemos sido presentados formalmente- dirigiéndose a los niños una vez más, Fred ofreció su mano al que estaba más cerca de Draco-. Hola, mi nombre es Fred y soy tu tío¿cómo te llamas?

La pantera negra gruñó bajo en su garganta cuando Fred se llamó su tío. Sin embargo, su gruñido pronto se detuvo cuando Draco lo pateó suavemente para hacerle callar. La única respuesta de Draco a la mirada de pura cólera de su compañero fue permanecer silencioso y levantar una ceja. Evan, primero miró la pantera y luego a Draco, pidiendo permiso antes de responder.

" Bien, hay ciertas ventajas de discreción en que Harry esté disfrazado" pensó Draco mientras asentía animando a su hijo para que saludara a los Weasley.

Después de que los chicos hubieran sido presentados formalmente, Draco indicó que era hora de continuar. Charlie alargo la mano detrás de él y sacó un cuenco de caramelos brillantemente envueltos y se los ofreció a los gemelos. Harry dio un cabezazo a Draco justo cuando Matthew estaba a punto de alcanzar con su mano el cuenco para coger un puñado de caramelos.

Saben qué; creo que vamos a pasar. Disfruten del resto de la noche- Draco guiñó el ojo a Fred antes de arrancar a un resistente Matthew del cuenco contaminado de caramelos.

Para el momento en que llegaron a la puerta de Black, Draco estaba deseando que El Merodeador no tuvieran ningún regalo, ya que le gustaría ver lo que los gemelos le harían. Fue realmente extremadamente malo que Sirius abriera la puerta sosteniendo un gran cuenco lleno con barras de caramelo muggle. Después de deslizar algunos regalos extras en los bolsillos de los muchachos, Sirius retrocedió para admirar sus disfraces.

Hey Moony, mira que tenemos aquí.

Remus pronto se unió a su compañero de habitación en la puerta.

Vaya, si es uno...dos... tres gatos negros- Remus miró con curiosidad el tercer felino, una pantera de ojos verdes, intentando comprender qué le resultaba familiar en la bestia. Había algo extraño, Remus estaba seguro. Repentinamente, contuvo la respiración, dándose cuenta que el gato olía exactamente como Harry.

Harry estaba maldiciéndose por permitir que Draco y los chicos le convencieran de salir en esta forma. Era peligroso. Supo al momento en que Lupin había descubierto que él era la pantera.

¿Entonces Draco, dónde está Harry?

"Dios bendiga a mi olvidadizo padrino", pensó Harry, mientras mantenía sus almendrados ojos de gato enfocados en el hombre lobo.

No pudo asistir; va a intentar alcanzarnos más tarde- mintió Draco.

Bien, Supongo que lo veré cuando regrese a su apartamento. Tengo intención de ir más tarde para pasar un rato con Nicole.

Sí, como si eso fuera algo nuevo. Creo que pasas casi tanto tiempo en el apartamento como lo hacemos Harry y yo- replicó Draco sarcásticamente. El fuerte flirteo entre Sirius y Nicole finalmente había materializado en forma de una cita a mediados de septiembre. Desde ese momento, los dos intentaban pasar tanto tiempo juntos como sus agitados horarios se lo permitían. No que a Draco le importara. Él estaba realmente muy feliz por los dos.

Los gemelos estaban poniéndose impacientes por pasar a la siguiente puerta en búsqueda de más regalos, aunque Draco estaba seguro que nunca podrían acabar el botín que habían rellenado ya en sus sacos.

Pero antes de que se marcharan del umbral, el pelo de los merodeadores había sido transformado, un brillante amarillo neón con puntas rojas para Moony, y un rosa pálido con espirales verde lima entremezclado al azar por todas partes para Padfoot. Los ojos de los gemelos se agrandaron cuando vieron el cambio. Metiendo prisa a su familia hacia la siguiente parada, Draco apenas podía contener sus risas ahogadas.

¿Y, cuál de ustedes hizo eso a su distinguido padrino y a su amigo? Y les acababan de dar todas esas pastillas de caramelo, eso no parece justo.

Matthew estaba horrorizado pensando que su padre les haría devolver sus caramelos por no seguir las reglas.

Yo no, yo no lo hice.

Sabiendo exactamente lo que pensaba su hermano, Evan también negó con vehemencia estar implicado en la broma.

Las inocentes expresiones en las caras de sus hijos parecían demasiado sinceras para ser fingidas.

Bien, si ustedes dos no lo hicieron, y yo no lo hice, sólo queda otro candidato. ¿Harry?

La única respuesta de la pantera fue comenzar a ronronear y a frotar su cabeza a lo largo del muslo de Draco. Éste se arrodilló y rascó al gran gato detrás de la oreja.

Sabes, se supone que los animagos no pueden hacer magia mientras están en su forma animal. Pero tampoco se supone que sean capaces de hacer magia sin varita, así que imagino que de una desordenada forma Potter de hacer las cosas, esto realmente tiene alguna clase de sentido.

El único problema real con que se habían topado en toda la noche fue cuando los gemelos se prepararon para llamar a una de las puertas situada cerca de donde estaba el viejo dormitorio Gryffindor y Harry intentó detenerlos. Harry se había puesto entre los gemelos y la puerta, y no quería dejarlos pasar. Los gemelos habían intentado asediar a papá gato pero, en última instancia, Harry se había puesto en su camino y la puerta fue abandonada sin molestar

Harry podía sentir que la puerta conducía al apartamento donde vivían Hermione y Ron. No quería tratar con más Weasley esa noche. Se había sentido mal por la familia cuando se enteró de todas las cosas trágicas que habían tenido que soportar desde que había sido arrestado, y ciertamente se había sentido fatal por la condición actual de Molly. Si había un Weasley con quien consideraría hacer las paces sería ella, pero su condición mental actual no lo permitía. Harry tenía la esperanza de que un día quizá pudiera pasar algún tiempo con ella. Ella merecía justicia por lo que pasó. Merecía la verdad, y Harry estaba decidido a asegurarse de que la consiguiera, si sólo estuviera lo bastante coherente para entenderla.

Cansados y listos para regresar, los gemelos insistieron en una última parada antes de dirigirse a casa, las mazmorras. Draco miro con rabia a Harry cuando la pantera gruñó una vez más en protesta, y el felino decidió guardarse para si el resto de sus opiniones.

Una visita rápida y sin dificultad a Severus, y los gemelos estaban cargados incluso con más ranas de chocolate. Draco guiñó un ojo a la pantera cuando Snape se quejó de que Dumbledore había hecho que saliera y entregara caramelos a los mocosos del castillo y ninguno de ellos se había molestado en venir y ensuciarse visitando las mazmorras. Era agradable saber que algunas cosas nunca cambiarían.

De regreso en el apartamento, los chicos habían vaciado sus sacos de regalos en dos montones muy grandes. Después de que sus padres hubieran examinado cualquier artículo que pareciera sospechoso, escogieron una o dos piezas de cada montón que estimaron merecían ser probadas y dieron permiso a los chicos para atrincherarse

Sirius había llegado poco después de eso, aún ostentando su nueva apariencia. Eventualmente, Harry tuvo compasión del hombre, era difícil cortejar a alguien con el pelo rosa, así que regresó su pelo a la normalidad.

Total, la noche había sido un cambio agradable del tradicional Halloween de Hogwarts. Había estado llena de diversión y risas, y Draco estaba agradecido, no sólo por la alegría en los ojos de sus hijos sino también por Harry. La noche ciertamente había distraído al hombre moreno de su tristeza respecto a Halloween. Quién sabe, quizás esto marcaba una nueva época en los Halloween Potter.

Fin del Flash Back

Aún perdido en sus propios pensamientos, Draco continuó apurándose. Estaba retrasado. Harry seguro lo debía estar esperando, ya que se suponía que debería haberse reunido con él veinte minutos antes. Desafortunadamente, había estado ocupado con Severus, discutiendo sobre su última modificación en la poción para dormir sin sueños. Basada en la investigación que había llevado a cabo en su increíble laboratorio de pociones, era capaz de eliminar todas las características adictivas de dicha poción. Eso ciertamente sería una ventaja cuando los pacientes necesitaran tomar este tipo de sustancia a largo plazo.

Draco sonrió con satisfacción cuando recordó que su padrino se había sentido absolutamente aturdido con este último descubrimiento. Bueno, tan aturdido como Severus Snape pudiera estar jamás, es decir, abrir los ojos de par en par y quedarse sin habla.

Esta no era la primera poción que había sido capaz de modificar gracias a los libros e ingredientes de pociones dejados por los Fundadores. Draco sacudió la cabeza con pesar; era una lástima que parte del conocimiento de los Fundadores, especialmente la brillantez en pociones de Slytherin, se hubieran perdido hasta ahora. Enfocados en las pociones típicamente usadas en el ala del hospital, Draco y Severus habían sido capaces de hacer mejoras en muchas de ellas, mejorar su potencia, y/o duración, o reducir algunos de los efectos adversos.

Severus le había pedido ayuda a Draco para intentar mejorar la poción matalobos para Remus. Hasta ahora no habían tenido ningún gran avance, pero Draco pensaba que podrían estar cerca de uno muy pronto.

Golpe

Draco gritó de dolor mientras que golpeaba su cabeza con fuerza contra la pared de piedra. Había estado tan envuelto en sus propios pensamientos que no oyó a alguien acercársele por detrás y como resultado había sido tomado desprevenido. Se encontró dando la vuelta bruscamente y presionado con fuerza contra la inflexible pared del vestíbulo. Antes de incluso poder pronunciar un sonido de alarmar, sus labios fueron capturados en un brutal y casi agotador beso.

Cuando procesó lo que estaba sucediendo, procedió a empujar con fuerza contra el firme pecho de la persona que lo había sujetado contra la pared. Desgraciadamente, el cuerpo que lo tenía sujeto no se movió más que algunas pulgadas.

Hola, amor.

Draco, enfadado, intentó limpiar con la mano su boca en un intento de deshacerse del horrible sabor. El intento fue inútil, pues su agresor tenía sus muñecas atrapadas en un apretón de hierro sobre su cabeza.

¿Qué demonios crees que estás haciendo?

Te he extrañado, cariño, y pensé que quizás necesitabas recordar justo a quien perteneces- respondió el hombre en un susurro áspero

Draco dejó de luchar el tiempo suficiente como para mirar a su anterior amante a los ojos.

Suéltame Blaise- gruñó-. No te pertenezco, y nunca lo hice, ahora… déjame… Ir.

Aumentando la ira de Draco, Blaise rió entre dientes, pero no disminuyó su apretón sobre el hombre rubio ni un poco.

Ah, te dejaré ir, pero no hasta que termine contigo.

Si una persona tuviera la habilidad de abrasar a alguien con sus ojos, no cabía duda que Blaise estaría ardiendo ya en el horno del infierno. Blaise era otro de los espías de la Orden que se habían infiltrado en las filas de los Mortífagos; no formaba parte del círculo interno de Voldemor, pero aún así era útil. Después de una misión particularmente horrible y desagradable un par de años atrás, donde una familia de muggles había sido torturada y luego asesinada, incluidos sus tres hijos pequeños, Draco había vuelto a Blaise por consuelo. Desde ese momento, los dos hombres se habían convertido en amantes otra vez; cada uno procurando olvidarse en brazos del otro de las cosas atroces que habían sido forzados a hacer, forzados a presenciar.

Aunque Draco sabía que su corazón no estaba realmente en la relación, estar con Blaise al menos le ofreció la liberación física que necesitaba conseguir en ciertos momentos. Pero ahora, parecía que quizás sus momentos juntos habían significado mas para el Slytherin de ojos oscuros que para él.

Eso terminó, Blaise

¿Terminó? Yo no estaría tan seguro si fuera tú, Draco. El Señor Oscuro estuvo particularmente interesado cuando le dije todo sobre que Harry era su nieto y un Heredero de Slytherin.

Draco no podía creer lo que estaba oyendo.

Bastardo, nos has vendido.

Vamos, Draco, yo no hice tal cosa. ¿Seguramente recuerdas cómo es esto? Debes dar un poco para conseguir un poco, y fui particularmente recompensado por un poco de información. Si sólo hubiera sabido que todos esos años Harry podía no haber sido un huérfano, lo más probable es que el Señor Oscuro hubiera respetado a su propia hija y hubiera tomado a Harry para entrenarlo, y probablemente hubiera sido su heredero- dijo Blaise con engreimiento cuando se inclinó sobre la mejilla de Draco y la rozó con sus labios. Moviendo su boca apenas ligeramente, susurró en el oído del otro, su cálido aliento haciendo que el rubio se estremeciera.

Desde luego, no fue nada comparado con la recompensa que conseguí cuando le dije sobre los dos hijos de Potter, los cuales son hablantes de Parsel, justo como su viejo bisabuelo querido. Ves Draco, Voldemort es bastante listo para darse cuenta que Potter es una causa perdida, ninguna lavado de cerebro le hará cambiar de opinión, pero dos impresionables niños pequeños, especialmente dos con su única herencia, serán extremadamente poderosos cuando crezcan. Bien, es innecesario decir que hay mucho potencial allí.

La deliberada amenaza a sus niños dio a Draco una explosión de adrenalina, bastante para que finalmente pudiera liberar sus muñecas de un tirón y empujar el repugnante cuerpo lejos de él.

Bastardo¿tienes idea de lo que has hecho?- la voz de Draco tembló ante el miedo que lo consumía, que estaba extendiéndosele a través de él, mientras imaginaba lo que sucedería si Voldemort conseguía alguna vez atrapar a los gemelos.

Draco sacó su varita y enfrentó a su antiguo compañero de casa, listo para buscar una justa retribución para su familia.

¿Quieres saber qué le sucedió a tu padre, Draco, cuando el Señor Oscuro oyó que habías regresado, que te habías convertido en nada más que una puta, es decir, la puta de Potter?- Blaise simplemente no se callaba, sólo seguía y seguía. Antes de que Draco pudiera acabar de pronunciar una maldición que, aunque no era ilegal ciertamente era considerada una maldición oscura debido a la cantidad de dolor que otorgaba al destinatario, Blaise fue dado la vuelta de cara a la dirección opuesta, lejos del rubio.

Los ojos de Blaise apenas registraron la cara enfurecida del Gryffindor antes de que le golpearan fuertemente en la cara.

Harry ni siquiera dio otro pensamiento a la forma arrugada de Blaise, mientras jalaba hacia si a un conmocionado Draco.

¿Estás bien?

Draco asintió, sintiendo crujir el aire alrededor de ellos con energía inacabada.

Sí. Merlín, odio a este bastardo.. Draco caminó hacia donde estaba un inconsciente Blaise, tumbado en el frío suelo de piedra, y dio una patada en el culo del hombre-. ¿Oíste...?

Harry intentó no sonreír mientras Draco tomaba su venganza en el indefenso mago.

Sí, venía a buscarte cuando oí lo que dijo sobre lo que Voldemort había dicho de mí y los chicos- confesó Harry tranquilamente.

Bien¿qué vamos a hacer acerca de ello?- Draco aún estaba muy conmocionado-. Tenemos que hacer algo; no podemos dejar que se lleve a Matthew y Evan.

Harry caminó hacia donde Draco aún estaba dando patadas al azar en el culo de Blaise. Parándose al lado de su amante, estiró la mano y suavemente tomó la cara de Draco, atrayéndole del objeto de su represalia. Viendo que tenía la completa atención de Draco, comenzó a acariciar lentamente un lado de su rostro, moviendo el pulgar suavemente arriba y abajo por la suave mejilla.

No lo haremos. Te lo prometo- susurró, mientras finalmente apartaba a Draco de la forma aún inconsciente de Blaise-. Dray, realmente nada cambió. Sabía que al contarlo a la Orden las noticias llegarían a Voldemort. Realmente, me sorprende que le tomara tanto tiempo descubrirlo. Pero en vista de que fue Blaise quien le dijo, por lo menos sabemos ahora que nadie más dentro de Hogwarts nos vendió. Y créeme, eso es algo que necesitaba saber.

Sorprendido, Draco se alejó bruscamente de Harry.

Tú montaste esto- jadeó, incrédulo-. Planeaste esto desde el principio, ofreciendo esta oh-tan-jugosa información ante todos para determinar cuanto tiempo tomaría a las noticias para alcanzar al Señor Oscuro y como carnada para algún traidor potencial.

Harry no negó las acusaciones de Draco.

Merlín Harry, algunas veces pienso que eres más Slytherin que yo. Entiendo por qué lo hiciste¿pero por qué usaste algo que enfocara la atención de Voldemort en los chicos de esta manera?- Draco estaba preocupado y se sentía un poco lastimado de que Harry no le hubiera hecho partícipe de su plan.

Harry alargó la mano y tomó una de las de Draco en las suyas. Al ver que su compañero se estremecía levemente mientras el largo pulgar bronceado tocaba suavemente su muñeca, frunció el ceño y sacó a la luz la muñeca de Draco, de modo que pudiera examinarla de cerca.

Sus ojos se estrecharon y apretó los dientes cuando vio con enfado las marcas rojas en la muñeca de su compañero, marcas que seguramente dejarían hematomas. Las antorchas del vestíbulo destellaron casi como en respuesta al enfado, nuevamente despierto, de Harry. Determinado a seguir haciendo pagar a Zabini por sus acciones, Harry hizo amague de moverse hacia el hombre, planeando despertarlo y después golpearlo hasta dejarlo inconsciente al menos unas cuantas veces más.

Sabiendo intrínsicamente lo que estaba planeando Harry, Draco le detuvo con sólo una mirada enfurecida.

¿Qué?- gruñó Harry.

Ya sabes que- dijo Draco con desprecio-. Ahora, deja a ese bastardo solo, trataremos con él más tarde y contesta mi pregunta.

Decepcionado, Harry respiró profundamente para liberar algo de su ira.

Mira Dray, cuando tomé la decisión de traer a los gemelos a Hogwarts sabía que serían un objetivo de cualquier modo. Revelar esta información cuando le hice sirvió a dos propósitos. Primero, permitió que rescatara mi vida de Dumbledore, algo que he necesitado hacer durante mucho tiempo. La gente necesitaba escuchar lo que había sido mantenido oculto por demasiado tiempo.

Draco cabeceó para que Harry continuara.

En segundo lugar, sabía que entre tú, yo, Sirius, Nicole y Severus haríamos todo lo que estuviera en nuestro poder para mantener a los chicos seguros. Pero si, por alguna horrible razón de Dios, Voldemort ganara esta guerra, o consiguiera pasar nuestras defensas y lograra secuestrar a los muchachos, sabía que la primera cosa que haría sería asesinarlos, justo como mató a cada uno de los otros miembros de mi familia- la voz de Harry se quebró ligeramente.

Sin embargo, Draco, si Voldemort pensara que hay más en los chicos que el hecho de que yo sea su padre, si viera su relación con ellos, el potencial en ellos, quizás no estaría tan predispuesto a matarlos.

La pálida cara de Draco estalló en una mueca mientras veía a dónde quería ir a parar Harry con esto.

Así que dejando que ese monstruo supiera que los gemelos son sus descendientes y descendientes de Salazar Slytherin, estarías protegiéndolos.

Harry asintió.

No hay un mortífago vivo lo bastante estúpido como para matar a los nietos del Señor Oscuro, no cuando podrían ser posiblemente convertidos.

Draco continuó el tren de pensamientos de Harry.

Y eso nos daría tiempo para un intento de rescate.

Sí- dijo Harry suavemente mientras apartaba la mirada de su amante.

Detectando que había algo más, Draco tomó suavemente la barbilla de Harry y volvió su cara hacia él.

¿Qué más?

Harry levantó sus vacilantes ojos.

Es sólo que todavía hay una oportunidad de que podamos perder esta guerra.

¿Y?

Bien, sin importar quién gane, sólo quería asegurar que los gemelos sobrevivieran - Draco tuvo que esforzarse para distinguir las palabras de Harry; su tono era tan suave.

Draco alzó la vista bruscamente, mirando la cara que amaba más que la suya propia.

Leo¿te estás dando cuenta de lo que estás diciendo?

Harry pasó una mano a través de su alborotado pelo, deteniéndose brevemente para poner sus revueltos pensamientos en una apariencia de orden.

Sí, lo pensé en el poco tiempo que estuvimos en California después de que tomamos la decisión de volver aquí. Mira, si nos derrotan, tú y yo estamos muertos, al igual que Sirius, y Severus. Hemos ido directamente contra el Señor Oscuro, no hay ninguna manera de que pueda permitirnos vivir, ni siquiera si él lo quisiera, que no lo hace. N quiero ni pensar qué le sucederá a Nicole. El nuevo mundo que sería creado después de nuestra caída, no es el lugar que elegiría para criar a los chicos, eso es por lo qué estamos luchando esta maldita guerra. Pero dada la opción de este mundo o ningún mundo, quiero que vivan- Harry se detuvo brevemente otra vez-. Además, antes de morir me cercioraría de que Lucius supiera que los gemelos son tanto tuyos como míos. Creo que entre los dos, Voldemort y Lucius, los gemelos estarían protegidos.

Draco alargó su mano y enjugó un lágrima furtiva de la mejilla de Harry.

Dios Dray, esa no es la vida que quiero para ellos, pero por lo menos es una vida- Harry estaba desesperado por hacer ver a Draco su razonamiento, sin importar cuan horrible e imperfecto fuera.

La profundidad de la buena voluntad de Harry para hacer cualquier cosa que asegurara la supervivencia de sus niños, desarmó Draco. Si era posible, su amor por ese hombre creció aún más en ese momento.

Te quiero.

Harry miro con incredulidad tal aceptación y amor brillando en los tempestuosos ojos grises que podría haber pasado horas sólo mirándolos. El alivio de que Draco no lo odiaba por lo que había hecho era tan fuerte que Harry aplastó al rubio en un apretado abrazo.

También te quiero. Nunca dudes eso.

Sintiendo las fuertes oleadas de emoción de Harry, Draco se apartó y sonrió al hombre ligeramente más pequeño.

Retiro lo que dije anteriormente Leo, eres más Slytherin de lo que yo podría esperar llegar a ser jamás ser.

Bueno, supongo que lo debería ser, puesto que tengo su sangre corriendo a través de mis venas.

Draco sólo sonrió mientras los dos hombres se ponían en camino a su apartamento, dejando a Blaise Zabini todavía tumbado en el frío suelo duro.

Más tarde esa noche, unos muy relajados y saciados Harry y Draco se abrazaban en su cama cuando fueron interrumpidos por unos golpes en la puerta de su dormitorio.

¿Qué quieres?- gritó Draco, no del todo contento con la intromisión.

Harry, es Albus. Está llamando por la chimenea de la sala común. Ha habido alguna clase de emergencia y necesita hablarte enseguida- se escuchó la voz apagada de Nicole a través de la pesada puerta.

Compartiendo una mirada rápida con su compañero, Harry dijo en voz alta:

Dile que estaremos allí enseguida.

Revolviendo en su ropa descartada que estaba esparcida alrededor del cuarto, unos momentos más tarde los dos ligeramente arrugados hombres entraban en la sala común.

Viendo la cabeza sin cuerpo de Albus Dumbledore flotando en la chimenea, Harry fue derecho hacia ese extremo de la habitación.

¿Qué sucedió?

Si Albus se sorprendió por la falta de cumplidos, no lo demostró. Durante los últimos tres meses y medio, había conseguido acostumbrarse a que Harry iba directamente al punto.

Los exploradores que enviamos ayer no se han reportado. Han faltado a sus dos últimos por l programados a través de la chimenea, y estoy preocupado.

El Director parecía de hecho bastante disgustado.

¿Quiénes?

Eran Anderson y Kendall- contestó Albus suavemente.

Harry suspiró. Anderson era un hombre joven, de no más de dieciocho años, cuyo entrenamiento había sido supervisado personalmente por Harry. Había apenas algo sobre ese joven que recordaba a Harry mejores tiempos. Sabía que no debía implicarse personalmente, pero lo hizo.

"Harry, normalmente no te habría molestado con algo tan pequeño, pero viendo como esto...

Harry interrumpió a su antiguo Director.

No, está bien. ¿La Orden se va a reunir para decidir qué hacer?

Sí, ahora estamos reunidos en la cámara¿ si tú y Draco quisiera unírsenos?

Sin siquiera tener que mirar a su pareja, Harry supo que Draco insistiría en ser incluido si Harry iba a estar.

Denos cinco minutos y estaremos allí.

Conviniendo, Albus terminó su llamada.

Nicole acordó permanecer con los gemelos hasta que alguien viniera a relevarla, porque había programado trabajar un turno esa noche en las salas del hospital.

Diciendo rápidamente buenas noches a Matthew y Evan, los dos hombres partieron a otra misión.

En la reunión de la Orden se decidió que enviarían un grupo de unos diez brujas y magos a inspeccionar la zona en que Anderson y Kendall se habían reportado por última vez. El ámbito de su misión era en dos niveles, primero debían localizar y traer a Anderson y Kendall de nuevo a Hogwarts, y en segundo lugar debían determinar si había alguna nueva actividad de mortífagos en esa zona.

Draco se sintió orgulloso de que Harry ni siquiera se inmutara cuando Charlie y Fred Weasley y Remus fueron llamados a la misión de rescate. Sirius, por supuesto, también los estaría acompañando. Durante su tiempo de lucha en los últimos meses, había quedado claro que Charlie, Bill y Fred, junto con Sirius y Remus, estaban entre algunos de los mejores combatientes que tenía que ofrecer el lado de la luz. Por así decirlo, Harry se encontró a menudo peleando al lado de alguno de sus antiguos amigos, y había podido hacerlo sin ningún problema. Al principio, Draco se sintió preocupado de que la falta de confianza de Harry fuera un problema que haría prácticamente imposible que confiara en alguno de ellos para cubrir su espalda, pero después del primer par de batallas, esa no parecía ser la situación. Draco esperaba que esto fuera otra muestra de que quizás Harry estaba cicatrizando sus heridas.

La zona a la cual se dirigían estaba a sólo unas 75 millas al sur de Hogwarts. El área a la que Anderson y Kendall habían sido enviados originalmente cubría aproximadamente un cuadrado de diez millas, por lo que se decidió que las escobas serían el mejor modo de transporte, en comparación con el traslador o aparecerse. Sin embargo, todos en el equipo llevaban un traslador de emergencia que los llevaría directamente al hospital, en caso de acontecimientos imprevistos.

El contingente de diez se abrió camino rápidamente a través del cielo nocturno, siguiendo una rigurosa formación. Mientras se acercaban al último paradero conocido del grupo de exploración, los voladores redujeron a una velocidad que, de estar en la tierra, habría sido descrita como lenta.

La zona sobre la que estaban volando en ese momento poseía una arboleda tan densa que hacía difícil ver correctamente, aunque la mayoría de los árboles ya habían comenzado a perder mucho de su follaje brillantemente coloreado. Era el lugar perfecto para una guarida de mortífagos, que es por lo que la misión de exploración había sido enviada en el primer lugar.

Concentrándose en cómo se sentía al estar en su forma de animago de fénix, Harry enfocó su visión agudamente. Pronto sus ojos estuvieron acostumbrados a la oscuridad y su visión mejoró de modo espectacular. Podía ver casi tan bien como lo hacía cuando estaba transformado en fénix.

Allí veía algo. Parecía que había un salpicado rojo, abajo, en el suelo del bosque. Indicando a sus compañeros que descendieran a un claro que había visto a un corto trecho de donde había visto el objeto rojo, comenzó a aterrizar.

Harry ni siquiera notó el aterrizaje del resto del equipo mientras estaba enfocado en una fuerte presencia mágica que sentía en el bosque. Algo parecía andar mal.

¿Qué pasa¿Viste algo?- preguntó Sirius, poniéndose al lado de su ahijado.

Sí, hay algo rojo en el bosque a unas cien yardas en esa dirección- contestó Harry.

Sirius, quien era oficialmente el líder de esa expedición, envió a dos de su grupo a investigar lo que había visto Harry en el bosque.

¿Lo sientes?

Sorprendido, Sirius examinó a Draco que también miraba a su compañero extrañamente.

¿Sentir qué, Harry?- preguntó Draco, su tono agudo dejando una impresión brumosa en el fresco aire de la noche.

Algo está mal aquí- Harry se detuvo intentando dar sentido a lo que sentía. La magia era fuerte, pero parecía que había un hechizo que la humedecía, casi como si alguien no quisiera que la magia fuera detectada. Harry jadeó, el temor llenando su estómago.

Debemos salir de aquí ahora. Creo que esto es una trampa.

Incluso antes de poder terminar la frase, comenzaron a lanzarles hechizos desde los linderos del bosque que los rodeaba. Era un emboscada, y habían caminado directo a ella.

¡Vuelen… Vuelen!- gritó Harry, mientras esquivaba tres hechizos que habían sido lanzados en su dirección. Dando un rápido vistazo alrededor, notó que todo el equipo estaba en el proceso alejarse volando. Parecía que la mayoría de los hechizos estaban concentrados en él y no en los demás.

Otro hechizo pasó con un chisporroteó mientras Harry capto un tufillo a pelo quemado. Sin desear pensar en lo cerca que había venido ese hechizo, Harry dio la vuelta y lanzó al menos cinco hechizos en esa dirección. Intentó lanzarse un hechizo protector, pero por alguna razón falló, el hechizo que humedecía debía estar interfiriendo con su capacidad de levantar un protector apropiado. Después de intentar levantar un protector alrededor de él unas cuantas veces más, Harry se rindió y, en su lugar, se centró en esquivar y bloquear las maldiciones que recibía y cuando era posible, enviar algunas de las propias de vuelta.

Después de cerciorarse que Sirius y Draco hubieran llegado al aire, Harry supo que era hora para él de salir de allí, montó su escoba y dio una fuerte patada en la tierra.

Mientras comenzaba su ascenso, miró hacia abajo y observó como unas dos docenas de mortífagos salían de los árboles y entraban al claro donde acababan de estar apenas un momento antes.

Los hechizos aún venían a toda velocidad y de todas direcciones, cada uno iluminando el cielo nocturno con su propio color brillante. Mirando todos los estallidos llenos de color a su alrededor, Harry empezó a recordar con fuerza el último cuatro de julio, que él y Draco habían pasado con Nicole y los chicos en California, mirando los fuegos artificiales.

Un dolor agudo en su costado le trajo de regreso a realidad. Maldición, había sido alcanzado con lo que parecía ser un hechizo acuchillador de alguna clase, en vista de la sangre que comenzaba a filtrar su túnica.

Dando la vuelta a su escoba, lanzó rápidamente un aluvión de hechizos, preparado para llenar sus cuerpos completamente con algunos de sus propios dolorosos hechizos especiales. Sonrió mientras sacaba de combate al menos a cuatro mortífagos con ese ataque.

Notando que sus camaradas ahora estaban a salvo fuera de la línea de hechizos, dio la vuelta a su escoba una vez más y se preparó para continuar. No tuvo tiempo de acelerar antes de que le dieran con otro hechizo; esta vez un aturdidor. Harry sintió el hechizo colándose en él. Afortunadamente, había podido absorber parte del hechizo, y en vez de dejarlo inconsciente, sólo lo dejó levemente mareado.

Usando algunos de los libros que los Fundadores habían dejado en la biblioteca al otro lado de su dormitorio, Harry había encontrado los medios de absorber con certeza los hechizos en su aura mágica. Esta técnica permitía a la persona a la que el hechizo estaba siendo lanzado, que pudiera rechazar gran parte del efecto del mismo. Sin embargo, los efectos del hechizo variaban considerablemente en base a la potencia de este.

Draco y Harry habían practicado esta nueva habilidad por semanas hasta que pudieron amortiguar algunos hechizos, aunque la técnica les dejaba a ambos sensaciones increíblemente agotadoras luego. El libro de la biblioteca advertía a lector que las maldiciones imperdonables no podían ser amortiguadas, debido a la dura naturaleza de las mismas y a la cantidad de poder usada en lanzarlas.

Sacudiendo su cabeza para librarse del vértigo, Harry sintió la herida en su costado comenzar a palpitar; sabía que necesitaba salir de allí ahora. Volando más alto, intentó alejarse de la línea de hechizos de los mortífagos. Justo cuando pensaba que estaba lográndolo, fue herido otra vez. Su cerebro apenas había registrado los gritos de "¡Stupify!" y "¡Crucio!" antes de experimentar una vez más todo el terrible dolor apasionado de la maldición Cruciatus, mientras que luchaba para seguir estando consciente.

A una distancia considerablemente lejos de la emboscada que los mortífagos habían planeado, los otros miembros de la Orden se detuvieron en el aire para reagruparse. Draco miro rápidamente alrededor, notando inmediatamente que faltaba Harry.

¿Sirius, donde está Harry?

La alarma en la voz de Draco, alertó a Sirius del problema, incluso antes que sus palabras tuvieran una oportunidad de registrarse.

Tú- Sirius señaló a uno de los miembros más jóvenes de su equipo-, aterriza en el próximo punto libre y usa tu traslador para ir a comunicarle a Dumbledore que era una trampa. ¡Dile que necesitamos refuerzos ahora y pon el ala del hospital en alerta!

El miembro de la Orden asintió y despegó en su escoba tan rápido como podía, en busca de un lugar para aterrizar.

Mirando a los miembros restantes del equipo, Sirius dijo:

Vamos- nadie cuestionó la lógica de los siete que iban de regreso a pelear con un número desconocido de mortífagos, todo lo que entendían era que Harry estaba en problemas. Con una mirada, todos acordaron que sin importar los riesgos implicados, lo valía para asegurarse de que Harry estuviera a salvo.

Acercándose a un lado Sirius, Draco no iba a permitir que esta misión la dirigiera nadie que no fuera él. Acordando silenciosamente que no regresarían a menos que tuvieran al hombre moreno que amaban con ellos, aceleraron sus escobas rápidamente de regreso a la dirección de la que acababan de venir.

A su cuerpo ya débil de luchar por rechazar la impresionante maldición anterior, le tomó más tiempo la segunda vez, pero finalmente consiguió sacudir los efectos de la maldición Stupefy. Enfocando todo su poder, Harry podía disminuir los efectos de la maldición Cruciatus hasta que el mortífago la levantara. Sin embargo, con toda su atención intentando lidiar con el efecto de las maldiciones que actualmente le lanzaban, no había podido hacer ningún progreso en su tentativa de irse. Cuando la última de las maldiciones cayó, para consternación de Harry, se dio cuenta que aún estaba suspendido en el aire a unos 65 pies de la tierra.

Con su última explosión de energía, Harry empujó adelante una vez más su escoba. Justo cuando estaba a punto de escaparse, oyó tres gritos más, "Stupify, Stupify, y Stupify." Justo cuando la primera maldición le dio, su cicatriz comenzó a arder ferozmente, sin dejar duda alguna sobre quien había enviado por lo menos un aturdidor a su camino.

Harry luchó una vez más para seguir estando consciente, pero los hechizos casi habían sido lanzados al mismo tiempo. Ni siquiera tuvo tiempo para comenzar a amortiguar la primera maldición antes de que la segunda le diera, la cantidad de oscuridad había comenzado a acercarse peligrosamente a su campo visual en el momento en que la tercera y última maldición le golpeara, exponencialmente más fuerte que las otras.

Harry ni siquiera sintió sus manos deslizarse de la escoba mientras la oscuridad a la que había estado rechazando tan gallardamente le inundó.

Corriendo de regreso a donde había visto por última vez a Harry, Draco miro horrorizado como tres aturdidores eran lanzados simultáneamente a su amante. Gritó mientras veía a Harry temblar y luego caer.

Gala Snape: Mil gracias por estar siempre ahí con nosotras, te lo agradecemos mucho, amiguita. Esperamos que este capi también te guste como los otros. Besitos mil

Malena: Gracias! Nos pone felices que te guste el fic, Besitos

Nuriko sakuma: Gracias! Ojalá este capítulo también te guste

Murtilla: Qué bueno que te guste. Sip, será muy malo que Lucios lo sepa, ya verás… besitos

Mickaelle: sorry, sorry, sorry, sorryyyyyyyyyyy. ¿Sirve que te prometamos que el siguiente estará en muy poquito tiempo? Si siento (María) hacer tardado tanto es por ti, de veras que te compensaremos prontito. Lo de elegir relatos tan buenos dalo por hecho , igual que las otras dos

Conacha: Aquí tienes la continuación, que la disfrutes. Besitos

JuliaSakura: gracias, nos alegra mucho. Besitos

Marla: Gracias! Los niños son lo mejor, son buenos descendientes de los Potter y Malfoy . Aquí tienes la actualización, Besitos

Diane Greenleaf Malfoy: Que bueno que te guste, y aunque tarde aquí tienes la actualización. Besitos