Pairing: Genma x OOC (Saya)
Basado en el fic de Zelha, "Portals of light"
Saya se movió en su cama gruñendo levemente, su cuerpo estaba completamente tapado. Sonrió. El recuerdo de la noche anterior era algo bastante bueno, dulce y después de todo, revelador.
La noche había comenzado en el pub, como todos los fines de semana después de sus respectivas rondas Asuma, Kakashi, Kurenai y ella se encontraban allí compartiendo un rato. Normalmente Genma siempre iba con ella, y Midori las veces que estaba en Konoha pero ambos estaban en una misión conjunta. Sunagakure y Konoha eran los dos aliados más poderosos y se ayudaban mutuamente, sobre todo desde que Gaara mando a Midori como intermediaria y la Godaime viendo aquello hizo lo mismo con Tenten, cosa que Kankuro agradeció en su interior. De todas aquellas idas y venidas habían descubierto un movimiento bastante extraño entre Hierba y Trueno y habían mandado a Midori junto a Genma a vigilar aquello.
A Saya le había parecido extraño pues era sabido por la Godaime y por el Kazekage que eran más eficaces con sus parejas, pero si la vieja había decidido aquello, ella no sería quien se metería. La noche estaba medio intranquila por su parte pero Kakashi se veía demasiado tranquilo…o no tanto, porque a poco más de las 1:30 decidió irse. Poco después Asuma y Kurenai la acompañaban hasta su casa pues ellos mañana tendrían que volverse a donde los cazadores por un tiempo bastante considerable.
Saya en ese entonces se había mudado a la casa de Genma, así lo tendría mucho más vigilado pensaba la pelirroja entrando al departamento del cual no habia cambiado muchas cosas. Solo algunas fotos, una de ella con Kakashi y Midori, otra de estos juntos con el equipo 7 y Reiko, la hermana menor de Midori quien también se había echo asidua de Konoha. Otra de su ultimo cumpleaños, junto a Genma. Sonrió al tomar aquella imagen donde él la tenia fuertemente tomada de la cintura atrayendole a él, al lado de aquella otra imagen donde estaban ellos dos de pequeños. Saya enarcó una ceja, ella no tenia aquella imagen, era bastante nueva; la tomó y vió que detrás tenia una nota. La leyó y sonrió, era regalo de Midori y Kakashi; ella no se había acordado pero aquel frío 10 de enero ya era su cumpleaños. Y un cumpleaños sin Genma no era tal.
Abrió la puerta de su habitación y sintio algo a sus espaldas, algo a lo que no le dio tiempo de esquivar y ni siquiera ver, cuando tenia los ojos tapados y sus labios cerrados por otros. Conocía demasiado bien aquella maestría en los besos, y aquella ternura cuando la besaba; enredó sus manos tras el cuello de él y mordisqueó sus labios jugando cuando por fin le vió, tenia un leve corte en la mejilla pero fuera de eso nada más. Saya sonrió, aquel corte podía ser…
- Un sai –dijo Genma al ver la mirada curiosa de ella – Midori es bastante impulsiva..
Saya rió, Midori era peor que una hermana mayor con ella.. peor que el mismo Kakashi cuando se trataba de reducir los instintos de caza de Genma. El chico sonrió al verla sonreir, su preciosa nena; Midori le había azuzado para llegar esa misma noche, era el cumpleaños de Saya y ella no dejaría que su amiga lo pasara sin él. Hasta tuvo tiempo de arreglarle el pelo, ante gruñidos de Genma, ya que decía que era un completo desastre.
- Oye preciosa…
- Aa.. ¿Qué pasa?
- Tengo algo que darte –le susurró malicioso sentandola en la cama mientras él se acuclillaba delante de la pelirroja- Pensé en regalarte un sai como esos que Kakashi le regaló a Midori cuando se prometieron, pero yo no soy tan así.. –Saya asintió, el pobre Kakashi tuvo burlas de Genma durante casi 4 meses a cuenta de haberse prometido, hasta que Midori le hizo una pequeña jugarreta que culminaba con aquella larga caja que él le entregaba. Saya aguantó un gritito de pura satisfacción al verlo, una katana de roja empuñadura y de hoja de plata. La misma que habían visto en una visita a la Arena, aquella que tenía un dragón grabado a lo largo de la hoja… -No es un anillo, como Asuma le dio a Kurenai, ni esos sais de plata tan bonitos pero…
- Es preciosa Genma…
- … sin ella no podría pedirte… que no te vayas nunca de mi lado.
- ¿Qué?
- No es solo un feliz cumpleaños preciosa, es un, necesito que te quedes junto a mi todos los cumpleaños de tu vida.
Saya sonrió aún más claramente, mientras una traviesa lágrima recorria sus mejillas siendo atrapada por los labios del Shiranui. Tras de eso, abrazos y besos que culminarían con la noche más especial de sus vidas.
