Card Captor Sakura pertenece al grupo CLAMP. Los personajes que no reconozcas son de mi propiedad y si deseas usarlos o reproducir la historia, espero me lo hagas saber.
"Normal" – Hablando.
"Cursiva" – Pensamientos.
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CAPÍTULO XIII: LA DESPEDIDA.
Esa noche, Eriol y Shaoran llegaron al departamento de Sakura donde ella, junto con Tomoyo, les esperaban.
"Buenas noches" – Saludó Eriol para después tenderse en un sofá y suspirar pesadamente – "¡Jamás pensé que tuviéramos que hacer tantas cosas!" – Exclamó.
Sakura y Tomoyo sonrieron – "¿Se fueron de compras, chicos?" – Preguntó ésta última mientras les servía unos refrescos.
"Si, así es. Hiragisawa quería recorrer la ciudad y aprovechamos para comprar algunas cosas para el viaje..." – Respondió Shaoran para después beber un sorbo del refresco.
"Dos hombres de compras. Qué gracioso ¿No crees, Tomoyo?" – Comentó la castaña con una sonrisa mientras se sentaba al lado de su novio y se recostaba en el sofá.
La amatista asintió y tomó asiento junto a Eriol – "Entonces ya falta poco para terminar de arreglar las cosas del viaje..." – Comentó con la mirada triste – "Los voy a extrañar..." – Dijo.
El rostro de la menor de los Kinomoto se ensombreció y ella evitó responder algo. Se sentía triste, muy triste. Había pasado por muchas cosas en los últimos días y Tomoyo, su incondicional y siempre fiel Tomoyo había estado ahí para ayudarla, para escucharla o simplemente para acompañarla en su dolor. Ahora, ellas comenzarían una nueva vida, en países distintos y la distancia las separaría. O bueno, eso creía ella.
"No hay razón para que nos extrañe, señorita Daidouji..." – Comentó Shaoran en tono desprevenido captando la atención de las dos jóvenes presentes – "No creo que vaya a extrañarnos mucho, viviendo en la misma ciudad" – Dijo esperando ansioso una respuesta por parte de su novia.
"¿A qué te refieres, Shaoran?" – Preguntó Sakura que no comprendía muy bien a que se refería el joven.
"Bueno... Verás... Te dije que hoy te diría hacia donde viajamos y pues... Creo que lo mejor para ti será que viajemos a Inglaterra, donde podrás estar cerca de algunos de tus amigos y no te sentirás sola, pequeña" – Le respondió él mientras acariciaba su rostro.
"Shaoran..." – Murmuró la joven – "Shaoran, Shaoran ¡Muchas gracias!" – Dijo avalanzándose sobre él y abrazándolo con todas sus fuerzas.
El ambarino la recibió en sus brazos y sonrió satisfecho. Él sabía que estaba siendo egoísta al querer llevarse a Sakura del país donde había vivido toda su vida, alejarla de su familia, amigos y de su trabajo. Pero sabía que era lo mejor. Esa ciudad estaba también llena de recuerdos dolorosos, de cosas amargas que tal vez no les permitirían ser felices. Y por eso, había decidio un cambio de ciudad para empezar desde cero. Su empresa tenía sucursales en los países más importantes y representativos del planeta, por lo cual en Londres, él desempeñaría su cargo de presidente. Y también, si Sakura así lo quería, ella podría trabajar en el área que quisiera. Sin embargo, no podía evitar sentirse extraño y feliz. Se había enamorado, sí. De eso no había la menor duda, pero jamás imaginó decidir irse lejos con alguna mujer y hacer su vida junto con ella, pero... Sakura... Sakura valía la pena. Por fin estaba seguro que había tomado la mejor decisión.
"¡Qué felicidad!" – Exclamó Tomoyo una vez que la pareja se separó – "¡Vamos a vivir en la misma ciudad ¿Te imaginas, Sakura?. Va a ser como cuando éramos muy pequeñas y vivíamos en Japón!" – Dijo mientras se aferraba a Eriol quien la miraba complacido.
La ojiverde asintió con lágrimas en los ojos – "Muchas gracias, Shaoran. Muchas gracias de verdad" – Le dijo.
"No tienes nada que agradecer, Sakura. Sé que en Londres te sentirás acompañada y serás feliz pudiendo vivir en el mismo lugar que tus amigos... Lo único que quiero es que seas feliz." – Le respondió él mientras acariciaba su rostro.
"Y tú... ¡Tú sabías todo y no fuiste capaz de decirme!" – Exclamó Tomoyo a su novio con una sonrisa juguetona.
"El señor Hiragisawa no sabía nada. Es más, esta misma tarde tomé la decisión, así que... el simplemente me vio comprar los boletos" – Le defendió Li con una sonrisa también.
"Eso es cierto" – Afirmó Eriol – "Pero, señor Li... ¿No cree usted que si vamos a vivir en la misma ciudad y seremos prácticamente cuñados, deberíamos dejar a un lado los formalismos?" – Cuestionó el joven inglés.
Shaoran asintió – "Tiene razón, Eriol" – Respondió a lo que Hiragisawa sonrió.
"Yo también espero que me llame por mi nombre, Señor Li" – Agregó Tomoyo mirándolo con una sonrisa.
"Eso si usted hace lo mismo conmigo, Tomoyo" – Le respondió Li a la vez que sonreía.
La joven asintió complacida - "Esto tenemos que celebrarlo" – Apuntó la amatista levantándose del asiento – "Vamos a bailar, chicos. ¿Qué les parece?" – Propuso.
"¡Eso sería magnífico!" – Exclamó Sakura – "Me cambio de ropa y salimos ¿Está bien?" – Preguntó a lo que los dos hombres asintieron y las mujeres se dirigieron a sus respectivas habitaciones.
"Sakura se tomó muy bien la noticia, Shaoran" – Comentó el ojiazul bebiendo lo último de su refresco.
"Al menos allá podrá tener la compañía de ustedes y le será más fácil acoplarse a la situación, Eriol. Le agradezco mucho el haberse portado tan bien con ella" – Respondió el ambarino.
"Sakura es una mujer muy valiosa. Y sé que usted es el hombre ideal para ella... Y Tomoyo me apoya. Así que cuente con cualquier cosa que necesite de parte de nosotros" – Le ofreció el joven inglés.
"Gracias, muchas gracias" – Respondió Shaoran para después suspirar cansadamente.
Unos minutos después, las jóvenes salieron listas para irse de fiesta y disfrutar de sus últimos días en New York.
"¿Vamos?" – Preguntó Sakura. Eriol y Shaoran asintieron para después levantarse del sofá y tomar a sus respectivas novias por la mano para encaminarse hacia el estacionamiento e irse a divertir a algún club nocturno de la ciudad.
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El día siguiente fue muy agitado para Sakura. Tuvo que terminar con urgencia sus asuntos económicos, es decir, tuvo que poner en arriendo su departamento pues no quería dejarlo ahí... tirado como si nada. Además tuvo que hacer algo muy triste que fue ir a la oficina donde había trabajado varios años a presentar su carta de renuncia. Tomoyo le ofreció su compañía, así que ambas jóvenes se dirigieron al lugar. Al entrar, los compañeros de la ojiverde la recibieron sorprendidos, pues no se esperaban que ella estuviera allí.
"¡Sakura!" – Saludó Kim, su compañera y amiga de trabajo – "¿Qué haces por aquí?" – Preguntó – "No me digas que tu adicción al trabajo fue más fuerte que tus vacaciones" – Comentó divertida.
La castaña sonrió – "No, para nada. No se trata de eso" – Dijo en tono triste y apagado.
"¿Entonces?" – Preguntó la morena intrigada al verla así.
"Vine a... Presentar mi carta de renuncia..." – Dijo entrecortadamente mientras sentía la mano de Tomoyo posarse sobre su hombro.
Los ojos de Kim se abrieron en señal de asombro – "¡¿A presentar tu carta de renuncia!" – Exclamó – "Pero... ¡¿Por qué!".
"Me voy del país, amiga. Me voy a vivir a Inglaterra" – Respondió la hija de Fujitaka sin mucho ánimo.
"Pero... ¿Cómo? ¿Por qué?"
"Me voy a vivir con mi novio, Kim. Es por eso que debo presentar mi renuncia" – Le explicó Sakura calmadamente intentando no llamar la atención de las demás personas que estaban en el lugar.
"¡¿Con Kevin!" – Gritó la joven alarmada – "¡No puedes...!" – Intentó decir.
"No. No me voy con Kevin" – La interrumpió la menor de los Kinomoto – "Me voy con Shaoran Li... Mi novio." – Dijo con una sonrisa en el rostro.
"Shaoran Li... ¿El que fue novio de...?" – Intentó decir pero no terminó pues se percató de la presencia de Tomoyo.
"Si, El que fue novio de Camille" – Confirmó Sakura dándole a enteder a su amiga que la amatista ya estaba enterada.
"Pero... ¿Estás segura?" – Cuestionó Kim muy impresionada. Sakura no era una mujer de impulsos, eso lo sabía ella muy bien. Entonces... ¿Por qué se iba a ir a un país lejando a vivir con alguien que conocía hacía menos de un mes?.
La joven asintió con la cabeza – "Sé que con él seré muy feliz" – Comentó.
La morena sonrió – "Nunca te escuché decir eso en el tiempo que estuviste con Kevin" – Le dijo – "Espero que sí seas muy feliz" – Comentó para después abrazarla. Sakura Kinomoto estaba enamorada, eso se le notaba a miles de kilómetros de distancia. Así que ella sólo podía desearle lo mejor. Pues nunca había visto ese brillo en sus ojos verdes, nunca la había escuchado hablar de ésa manera de algún hombre...
"Gracias por todo, Kim. Muchas gracias" – Le dijo la castaña – "Espero que volvamos a vernos algún día, amiga" – Le dijo para después encaminarse a la oficina de su jefe.
"Yo también lo espero, Sakura. Pero ojalá que el día que nos veamos, tengas muchos hijos y seas muy feliz al lado del hombre que amas..." – Respondió para después seguir trabajando.
Sakura y Tomoyo caminaron lentamente hacia la oficina del jefe de Sakura – "Veo que esa mujer te aprecia mucho" – Comentó la amatista sonriente.
"Y yo a ella. Fue una de mis amigas incondicionales, además de una buena compañera de trabajo. Espero que sea muy feliz" – Dijo para después detener su paso y pararse al frente de una puerta grande de madera, con un nombre inscrito en el centro. "Ryan Harris, Gerente principal".
"¿Estás segura?" – Preguntó Tomoyo al ver que su amiga no entraba.
La castaña tomó aire y asintió – "Debo hacerlo" – Dijo para después entrar en la oficina.
"¿Sakura?" – Preguntó un hombre de mediana edad, cabello negro adornado por una que otra cana, vestido de manera elegante con un buen porte.
"Ryan... Hola." – Alcanzó a decir ella mientras tomaba asiento para evitar que sus piernas flaquearan.
"No quiero parecer poco amable... pero... ¿No se supone que estás en vacaciones?" – Preguntó él mientras se acomodaba en su asiento.
"Bueno... sí" – Confirmó la ojiverde – "Pero... teno que... entregarte esto" – Le dijo mientras le entregaba un sobre.
El hombre recibió el sobre con un rostro confundido. Lo abrió lentamente y a medida que leía la carta su cara iba denotando un gran asombro – "¿Qué es esto?" – Preguntó – "Sakura, por Dios, tú no puedes hacernos esto en este momento" – Dijo un poco exasperado.
"Esto fue algo que salió de improviso, Ryan. Perdóname por no decirte antes, pero yo no lo tenía planeado" – Se excusó ella intentando que su voz no sonara temblorosa.
"Pero es que tú tienes el segundo puesto más importante de la compañía, eres una mujer joven y sabes que eso es un logro muy satisfactorio y que pocas personas alcanzan. Además, eres una ficha clave en esta empresa, necesitamos de una mujer con tus capacidades" – Le dijo él.
"Yo... de verdad siento mucho tener que irme, pero voy a hacer mi vida en otro país y pues..." – Intentó decir Sakura.
"¡No me digas que te vas con la competencia!" – Exclamó el hombre asombrado y preocupado.
"¡No, no!" – Se apresuró ella a responder – "No es eso... Es solo que... pues... Me voy a vivir con... con alguien..." – Explicó mientras sus mejillas se teñían de rojo.
Ryan sonrió – "Era eso, entonces. ¡Estás enamorada!" – Exclamó feliz – "Me hubieras dicho eso desde un principio" – Comentó.
El rostro de la joven se tornó confundido.
"Las cosas que se hacen por amor, son las que mejor resultan" – Le dijo él mientras tomaba una fotografía que había en su escritorio.
Sakura sonrió – "¿Entonces no estás enojado conmigo?" – Preguntó.
El hombre sonrió de nuevo – "No voy a negarte que me harás mucha falta, pues eres una excelente compañera y una gran amiga" – Le dijo – "Pero tampoco puedo negarte que me encanta ver ese brillo en tus ojos, me encanta que te sonrojes como una jovencita de quince años... Y no puedo oponerme a que hagas tu vida al lado de la persona que te hace feliz..." – Le explicó mientras con sus dedos acariciaba suavemente la fotografía que tenía en sus manos.
"Gracias, Ryan. Muchas gracias" – Le dijo Sakura mientras intentaba renter algunas lágrimas de felicidad que amenazaban con salir.
"Si alguien se hubiera interpuesto en mi camino cuando decidí ser feliz al lado de la mujer que amo, tal vez hoy ni estaría vivo. Es por eso que no puedo oponerme a tu felicidad... Además, Sakura... Sé que lo mereces, pues eres una joven hermosa, brillante, inteligente, noble, alegre y tienes todo por delante..." – Comentó él mientras dejaba la fotografía en la mesa y se levantaba – "Dame un abrazo de despedida" – Pidió.
La ojiverde se levantó de su asiento y se acercó al que alguna vez fue su jefe – "Gracias por todo. Gracias por darme la oportunidad de trabajar aquí, de seguir aprendiendo cosas nuevas cada día. Gracias por entenderme, Ryan..." – Dijo para después abrazarlo.
"Sólo espero que el sacrificio de dejarte ir valga la pena, pues no acepto que regreses a pedirme trabajo diciéndome que fuiste infeliz con la persona que amas" – Le recalcó él para después dejarla ir.
"No te preocupes, yo sé que seré muy feliz" – Respondió ella para después abandonar el lugar.
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Después de ese día, el tiempo pasó demasiado rápido. Las dos parejas habían ocupado la semana completa en los últimos arreglos para el viaje a Inglaterra. Faltaban dos días y prácticamente tenían todo listo. A excepción de una cosa. Sakura no podía irse sin hablar por última vez con Camille y dejar las cosas claras, eso sería como huír y ella siempre le daba la cara a los problemas. Así que la joven castaña se preparó y se dirigió esa noche a la casa de la que alguna vez fue su amiga. No le avisó a nadie, ni siquiera a Tomoyo pues, eso era algo que la menor de los Kinomoto tenía que hacer ella misma. Debía ir a ese departamento sola y enfrentar por última vez a Camille.
Sakura llegó al edificio donde vivía la antigua novia de Shaoran y tomó el elebador presa de los nervios. Se sentía totalmente aterrada al pensar en la reacción que ella pudiera tener. Dudosa, tocó el timbre del departamento y esperó unos segundos a que alguien atendiera la puerta. Entonces, Camille apareció. Estaba vestida muy elegantemente, en ropa de trabajo, estaba muy maquillada y se veía muy bien.
"¡¿Tú!" – Fue lo primero que dijo la pelirroja al abrir la puerta – "¿Qué estás haciendo aquí?" – Preguntó agresiva.
"Camille... Necesito decirte algo. ¿Puedo pasar?" – Respondió la castaña calmadamente, intentado evitar una discusión aún peor.
"No tenemos nada de que hablar, Sakura. Así que... Te pido el favor de que te vayas de mi departamento. Tengo muchas cosas que hacer" – Dijo Camille en el mismo tono.
"Por favor... Tenemos muchas cosas que arreglar..." – Insistió la ojiverde.
La joven se retiró unos pasos indicándole que pasara. Ambas tomaron asiento en la sala del departamento y se miraron fijamente hasta que Sakura rompió el silencio – "Veo que te encuentras mejor..." – Comentó.
"¿Qué esperabas? ¿Qué me quedara llorando por lo que me hiciste, Olvídalo Sakura"- Respondió Camille brindándole una fría mirada.
"Pero... ¡Hace pocos días tuviste un aborto!"
"Si, pero ya estoy bien. Además, tengo muchas cosas que hacer en mi trabajo" – Explicó ella de mala gana.
"¿Ya regresaste al trabajo?" – Siguió preguntando la hija de Fujitaka intentando darle rodeos a la razón central de su visita. Pero no logró hacer nada.
"Deja de hacer preguntas que no te interesan y dime a que viniste" – Pidió la pelirroja en un tono totalmente exasperado e impaciente.
Sakura se acomodó en el asiento y tosió un poco para disimular su incomodidad – "Bueno... yo... yo vine a decirte que... verás... me voy del país" – Comenzó sin encontrar las palabras adecuadas.
La ojinegra arqueó una ceja y su mirada se hizo más fría aún – "¿Y eso a mí en que me afecta?" – Inquirió.
"Camille... Yo jamás quize hacerte daño. Eres una persona muy importante para mí, pero jamás imaginé que todo lo que pasó con Shaoran, pudiera llegar a suceder..."- Murmuró ella intentando retener algunas lágrimas que amenazaban con aparecer.
"No digas tonterías, Sakura. Tú te empeñaste en hacerme la vida imposible y parece que lo has logrado. Me hiciste sufrir como a nadie en el mundo y aún así ¿Te atreves a decir que soy importante para ti?. ¡No seas ridícula!" – Exclamó la joven presa de la ira y el dolor que sentía.
"Yo... ¡De verdad lo siento!" – Fue lo único que pudo decir la castaña a la vez que su esfuerzo por evitar que sus lágrimas salieran se desvanecía dando paso todo un río de agua salada que salía de sus ojos.
"¿Eso era todo lo que tenías que decirme?" – Preguntó la pelirroja levantándose del asiento acercándose a la puerta.
Óyeme,
porfavor
no digas nada, perdóname
anoche entre sus
brazos me sentí realmente una mujer
sé que tu
creerás
que es sólo un juego entre los dos
te
juro que esta vez me enamoré
como nunca me enamoré
"No" – Respondió la ojiverde haciendo que la que alguna vez fue su amiga se detuviera y la mirara – "En verdad, lo que yo vine a decirte es que... Shaoran y yo viajaremos fuera del país para irnos a vivir juntos" – Dijo mirándola expectante y nerviosa.
La ojinegra guardó silencio, pero sus ojos denotaron la gran sorpresa que sentía al oír las palabras de la joven.
amiga mía sé que estoy
quitándote al hombre de tu vida
amiga mía sé
que estoy matándote y es lenta tu agonía
amiga mía
que difícil es decirte amiga ahora
amiga mía lo amo
tanto y sé que él a mí también me adora
"Yo... entiendo si me odias Camille, pero... yo... yo amo a Shaoran y quiero pasar el resto de mis días a su lado... Yo... créeme que si pudiera evitarte este sufrimiento, lo haría... pero... no puedo" – Expresó finalmente levantándose de su asiento y encaminándose hacia la puerta.
"Eres una maldita perra, Sakura. Después de que me quitas a mi novio... ¿Tienes el descaro de venirme a decir que te vas con él para hacer su vida juntos?" – Murmuró Camille apretando sus puños y sus ojos con fuerza.
para ti, sé que soy
la
gran culpable entre los dos
comprende, lo de ustedes terminó
antes que llegara yo
"¡No!" – Exclamó la castaña – "Yo... quiero que sepas todo como es. Quiero saber que al menos no me odiarás por el resto de tu vida. Yo sé que ya no podemos ser amigas, pero..." – intentó decir.
"¡Por supuesto que no podemos ser amigas, Sakura!" – Le interrumpió – "¡¿O acaso que quieres? ¿Qué te considere mi amiga del alma después de todo lo que me hiciste!" – Le cuestionó.
"Perdóname, Camille... Perdóname..." – Susurró Sakura sin saber que más responder.
"¿Desde cuando comenzaron a salir?" – Preguntó la joven cambiando de tema.
"¿Ah?"
"¡¿Desde cuando comenzaron a salir!" – Repitió – "¡¿Ustedes tenían todo esto planeado mientras Shaoran estaba conmigo?" – Preguntó.
"No, Camille... No es como tú lo imaginas, nosotros sólo... Nos enamoramos mientras nos íbamos conociendo mejor..." – Explicó Sakura.
"Y yo propicié que ustedes se conocieran más a fondo..." – Se reprochó la pelirroja ya más calmada – "Tal vez si yo..."
"No fue tu culpa... Tú eres una mujer excepcional, Camille... Nosotros jamás imaginamos que todo esto llegara a suceder..." – Le dijo la ojiverde en un tono suave.
"¿Ustedes se acostaron mientras Shaoran estaba conmigo?" – Interrogó Camille.
Sakura no respondió.
"¡Responde! ¡¿Ustedes tuvieron relaciones mientras Shaoran y yo éramos novios!" – Repitió ella perdiendo la paciencia.
"Nosotros..." – Balbuceó la castaña – "Nosotros... Sí" – Respondió finalmente.
Óyeme, porfavor
no digas
nada, perdóname
anoche entre sus brazos me sentí
realmente una mujer
sé que tu creerás
que es
sólo un juego entre los dos
te juro que esta vez me
enamoré
como nunca me enamoré
"Sakura, yo... Yo pensé que eras mi amiga, jamás pensé que tú me traicionarías de ésta manera. ¿Cómo pudiste? ¿Cómo pudiste acostarte con él sabiendo que yo lo amaba?" – Le reclamó Camille entre lágrimas.
para ti, sé que soy
la
gran culpable entre los dos
comprende lo de ustedes terminó
antes que llegara yo
"Perdoname..."
"Shaoran te tirará como a una basura. Justo como lo que tú eres y justo como lo hizo conmigo. Eso tenlo por seguro" – Apuntó ella con agresividad.
"¡Eso no es cierto! ¡Yo sé que Shaoran me ama!" – Se defendió Sakura.
amiga mía sé que estoy
quitándote al hombre de tu vida
amiga mía sé
que estoy matándote y es lenta tu agonía
amiga mía
que difícil es decirte amiga ahora
amiga mía lo amo
tanto y sé que él a mí también me adora
"Él me amó a mi primero, querida. Te lo recuerdo. Y además, estoy segura que... Si tú no te hubieras entrometido en nuestras vidas, él y yo hoy estaríamos juntos." – Le reprochó mientras abría la puerta y la 'invitaba' no muy formalmente a que abandonara el departamento.
"Camille, sólo recuerda que siempre podrás contar conmigo. Recuerda que te aprecio, que estoy muy agradecida contigo por todo lo que hiciste por mí durante tantos y años y que... y que espero que seas muy feliz" – Dijo la ojiverde a manera de despedida.
"Si lo que dices fuera cierto. Jamás te habrías atrevido a entrometerte en mi vida. De ahora en adelante, olvida que fuiste mi amiga, olvida que yo existí en tu vida. Olvida todo sobre mi" – Se despidió Camille para después cerrar la puerta suavemente y quedarse sola, llorando en su departamento – "Te deseo todo, Sakura. Todo, menos que seas feliz..." – Pensó con rabia para después tomar con decisión el teléfono y marcar un número – "¿Hola? ¿Kevin? Necesito hablar contigo urgentemente ¿Podemos vernos?"
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Eriol y Tomoyo estaban en el departamento de Sakura bastante preocupados. La castaña había salido ya hacía mucho rato y no regresaba. Shaoran había llamado varias veces preguntando por ella y no pudieron darle respuesta.
"¿Tú tienes alguna idea de donde pueda estar?" – Le preguntó el joven inglés a su novia – "Tal vez ella mencionó algo y tú no lo recuerdas..."
"Ella simplemente dijo que iba a dar una vuelta, pero eso fue hace mucho rato. No entiendo en donde pueda estar..." – Comentó la amatista.
"Shaoran dijo que venía para acá. Cuando él llegue tal vez podamos saber en donde está Sakura" – Respondió
"¿Y si le pasó algo malo?" – Se cuestionó Tomoyo.
"No te precipites, querida. Las malas noticias son las que llegan primero" – Le consoló él mientras la abrazaba fuertemente.
"Tengo miedo, Eriol. Espero que Sakura se encuentre bien" – Dijo ella aferrándose a los brazos del joven.
En ése momento, la puerta del departamento se abrió dando paso a Sakura quien se veía fuertemente afectada – "Hola" – Dijo para después irse a servir un trago.
"¡Sakura!" – Exclamó Tomoyo aliviada – "¡¿En dónde has estado!" – Preguntó mientras se dirigía hacia su amiga.
"Fui al departamento de Camille" – Respondió sin ánimo para después tomar asiento.
"¡¿Qué!" – Gritó la amatista – "¿Qué estabas haciendo allá?" – Preguntó.
"Fui a decirle que me voy del país... Pero no resultó muy bien" – Comentó la ojiverde para después beber un sorbo de su trago.
"Tienes que dejar esa etapa de tu vida atrás, Sakura" – Apuntó Eriol mientras se servía un trago y se acomodaba.
"Sentí la necesidad de decírselo. No pude evitarlo" – Respondió la menor de los Kinomoto con sinceridad.
"Con eso te haces más daño a ti y también a ella..." – Le dijo Tomoyo.
"Sí, lo sé. Pero lo hecho, hecho está y así se queda. Por lo menos pude despedirme de ella y decirle que puede contar conmigo" – Sakura rió un poco – "Pero no creo que lo tenga muy en cuenta" – Dijo ya un poco más relajada.
"Sakura..." – Susurró Tomoyo antes de ser interrumpida por el sonido del timbre del departamento – "Debe ser Shaoran, estaba muy preocupado por ti" – Dijo para después ir a abrir la puerta y comprobar su supuesto.
"Buenas noches" – Dijo el ambarino entrando al departamento y acercándose preocupado a su novia – "¿En dónde has estado?" – Preguntó.
"Fui donde Camille. Fui a despedirme" – Respondió Sakura levantándose y alejándose de él.
"¡¿Por qué!" – Exclamó el joven – "No creo que haya sido una buena idea..." – Comentó.
"Ya no importa" – Dijo la ojiverde encaminándose hacia el corredor que daba a las habitaciones – "Ahora, si me disculpan... Iré a dormir un rato. Estoy muy cansada." – Explicó para después retirarse dejando a los demás muy confundidos.
"¿Qué le pasa?" – Preguntó Shaoan extrañado.
"No lo sé" – Respondió Tomoyo confundida – "Está muy extraña"
"Tal vez sólo se encuentre cansada. Es mejor dejarla dormir... Además, mañana viene el Señor Fujitaka junto con el hermano de Sakura para despedirse... Supongo que quiere descansar para eso" – Supuso Eriol tratando de disipar las dudas.
"Es posible... Espero que se encuentre bien" – Comentó Tomoyo.
"Me retiro, entonces. Todavía tengo mucho trabajo pendiente. Hasta luego" – Dijo Shaoran para después salir del departamento muy confundido. ¿Qué estaba pasando? ¿Por qué Sakura se había alejado de esa manera? Honestamente, no entendía nada. Parecía llena de rabia, de rencor. Estaba triste y muy afectada por algo. Pero él no sabía de que se trataba. Pero ya no podía pensar más en eso, puesto que tenía que dejar todos sus asuntos listos y además prepararse para la visita de su suegro. ¡Se iba a llevar a su hija, y él había estado de acuerdo!. No entendía a ese hombre. Según Sakura, Fujitaka Kinomoto había estado en total acuerdo con el viaje. No había puesto problemas para ello e incluso les había ofrecido toda la ayuda posible. Pero... ¿Por qué todo había sido así?
Continuará...
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NOTAS DE LA AUTORA:
En primer lugar, sé que les debo una enorme disculpa por la demora. Pero es que he tenido mucho que hacer, la universidad me está consumiendo poco a poco... En dos semanas salgo a vacaciones así que espero poder ser más rápida para actualizar. ¡Perdónenme!.
Por otro lado, para quienes están leyendo mi otro fic "En busca del destino verdadero", sé que el curso de la actualización era seguir con ese fic, pero la inspiración me llegó primero para éste. Disculpen, trataré de actualizarlo lo más pronto posible... Sí, ya sé que no debí hacer dos fics al tiempo, pero no pude resistirme XD.
Otra cosa que debo decir es que la canción utilizada en este capítulo se titula "amiga mía" y es de Yuri. Para quienes la conocen, saben que está en desorden, pero lo que pasa es que utilicé las estrofas de acuerdo a la situación. Espero no les incomode y muchas gracias a Luna310 por la sugerencia.
Muchas gracias por sus comentarios, son de muchísima inspiración para mí. Espero seguirlos recibiendo ahora que estamos en la recta final de éste fic. Faltan dos o tres capítulos. Se suponía que faltaban menos, pero me han pedido que lo alargue un poco más, así que quize complacerlos. Ahora sí, muchas gracias a:
Katsumi00, Flor de cerezo 13, Lady Fiorella, Darthmocy, Azuka Kwo, Saori-Luna, Sonylee, Kishuu Arashi.Y también a quienes leen y no han tenido la oportunidad de dejar review. ¡Anímense!.
Saludos,
Lunita Kinomoto.
PD: Perdón por la nota de autora tan larga XD.
