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FIGHTING DREAMERS

By Tensai Seko


Capítulo 4: Motivos para quedarme

Tras dejar a Naruto y Kiba en sus respectivas casas y despedirse de los demás, Shikamaru caminó ya hacia su casa con bastante cansancio. Pensaba dormir hasta tarde, dándole igual los gritos de su madre y los entrenamientos especiales de su padre. Todo el mundo necesitaba un descanso y él más que nadie, pues no estaba acostumbrado a trabajar tanto y últimamente no paraba. Ser jounin había resultado más duro de lo que esperaba.

Por fin llegó y abrió la puerta con cuidado para no despertar a nadie. Cerró tras él y caminó de puntillas hacia las escaleras, pero antes de que llegara a pisar el primer escalón las luces se encendieron. Shikamaru sintió un escalofrío; ahora su madre le daría la charla por llegar tan tarde sabiendo que al día siguiente tenía que ir a entrenar. Más que 18 años, parecía seguir teniendo 12.

Se giró dejando escapar un suspiro, pero para su sorpresa no era su madre quién estaba allí. Su padre estaba sentado en una de las sillas de la cocina, con los codos apoyados en la mesa y mirándole con expresión grave. Lo interesante era que no llevaba el kimono con el que iba a ir a la feria, sino que vestía con su uniforme jounin. Shikamaru carraspeó y se acercó hasta estar frente a él.

"¿Ha...pasado algo?" preguntó finalmente.

"Siéntate hijo" dijo el hombre haciéndole un ademán con la mano. Shikamaru obedeció con rapidez y sin dejar de mirar a su padre. "¿Sabes la hora que es?"

"¿Nani?" dijo extrañado. "Creía que las broncas sobre la hora me las daba mamá, no tú, viejo... Además, ya soy mayorcito¿no creéis?"

"Vaya¿eso es lo que le dices siempre a tu madre? No me extraña que se ponga de peor humor..."

"Mamá siempre está gruñendo" resopló Shikamaru. El hombre sonrió y se levantó de la silla. "Oi, ojashi... ¿me dirás qué ha pasado?"

"¿Qué te hace pensar que ha pasado algo?" preguntó el hombre extrañado.

"Llevas el uniforme y me estabas esperando a oscuras" dijo el chico cansado.

"Shikamaru, mañana duerme hasta tarde" dijo su padre caminando hacia las escaleras. "Tómate el día libre, ves con tus amigos¿vale? No habrá entrenamiento"

"¡Chotto, ojashi!" Shikamaru se levantó arrastrando la silla pero su padre ya había desaparecido escaleras arriba. El chico resopló. "Cuando dice eso es porque dentro de poco tendré una misión difícil... que problemático..." murmurando solo, él también subió las escaleras y entró en su habitación. Al menos, podría descansar.


Debían de ser las cuatro y media de la mañana cuando llegaron a casa de Sakura. Ella y Lee hablaban en la entrada mientras a varios metros, al final de la calle, Tenten y Neji esperaban a su compañero. La joven de dos moños miraba con curiosidad hacia la pareja mientras el joven Hyuga se había sentado en el suelo apoyando la cabeza en la pared con cansancio. Miró a su compañera de reojo y sonrió.

"Tenten, tu curiosidad parece no tener límites..."dijo en un murmuro, haciendo que la joven se sonrojara y le mirara con enfado.

"Estoy preocupada por ellos, sólo eso" dijo cruzándose de brazos y agachándose junto a él. Neji suspiró.

"Aún no sé que hago yo aquí... como Hiashi-sama se entere de que no acompañé a Hinata-sama a su casa y que encima dejé que la acompañara Shino, soy hombre muerto" dijo con pesar. "Y créeme cuando te digo que mi tío siempre se entera de todo"

"No será tanto. Además, Lee es nuestro amigo y ahora tendremos una clara oportunidad para hablar con él" dijo sonriente.

"Me va a tocar a mí¿no?" dijo el chico mirando a la joven con una gotita.

"Venga Neji¡tú siempre sabes qué decir! Será pan comido para ti" dijo Tenten dándole unos golpecitos en la espalda para animarle.

"No es a mí a quién le gusta Lee" dijo mirando de reojo a su amiga, que se sonrojó para acto seguido darle con el puño en la cabeza.

"¡No seas tan grosero, Neji!" Su compañero suspiró y se levantó del suelo al ver a Lee caminar hacia ellos. "¿Todo bien, Lee?"

"Hai Tenten" dijo el chico nada convincentemente. Los tres empezaron a caminar a casa de la kunoichi que se pasó el corto trayecto intentando animar a su compañero de equipo sin ningún éxito. Al llegar a su casa los tres pararon. "Oyasumi Tenten; te espero al final de la calle, Neji"

"¡Oyasumi, Lee!" dijo Tenten contenta mientras Neji miraba a su amigo extrañado.

Se ha ido, nos ha dejado solos¿por qué ha hecho eso?, se preguntó el Hyuga mirando hacia el final de la calle sin salir de su asombro. Sin embargo no tuvo tiempo a darle muchas vueltas ya que Tenten le hizo volver a la Tierra.

"Neji, ahora es tu oportunidad, habla con él seriamente"

"De verdad me encantaría hacerlo Tenten, pero no sé qué esperas que le diga. Lee y yo nos llevamos bien, pero nunca hablamos de Sakura..."

"Venga ya Neji, hay mucha confianza entre vosotros... a mí Lee nunca me dirá qué le preocupa para que yo no me sienta mal, pero contigo es diferente. Habla con él de amigo a amigo, pregúntale por Sakura y Sasuke¿vale? Ponte en su lugar y dile lo que harías¡algo se te ocurrirá!" la joven agarró el brazo de su amigo mirándole como si le rogara. Neji suspiró y entornó los ojos asintiendo con la cabeza. "¡Arigato Neji! Eres el mejor" dijo dándole un beso en la mejilla y corriendo después hacia su casa. "¡Oyasumi nasai!"

"Hai, hai, oyasumi..." dijo Neji sin ganas, caminando calle abajo hacia dónde Lee le esperaba.

Ambos empezaron a caminar en silencio sin saber muy bien si iban a casa del uno o del otro; simplemente, caminaban por la silenciosa y oscura Konoha. Tras un rato así, Neji advirtió que daban vueltas en círculo y que cada vez acababan frente al mismo edificio. El joven de ojos blancos suspiró dejando de caminar, extrañando al chico que le acompañaba.

"Lee, estamos dando vueltas en círculos y siempre acabamos delante del Hospital" dijo Neji con voz grave y semblante serio. "¿Quieres hablar?.¿De Sasuke o Sakura?"

"No sé qué hacer Neji" dijo el chico suspirando. "Tenten me aconsejó que le diera tiempo a Sakura pero... ella no quiere hablar conmigo de Sasuke, no sé qué le está pasando por la cabeza y no me gusta lo que imagino..."

"¿Se lo has dicho a ella?" Lee le miró como si hubiera dicho una barbaridad, por lo que Neji entornó los ojos. "Bakaro¿cómo vas a saber qué le pasa si no hablas con ella? No la conozco muy bien, pero creo que no ha aprendido a leer la mente de los demás¿verdad?"

"Guarda tu ironía para otra ocasión" le reprochó el joven empezando a caminar de nuevo. "Si se lo digo, tal vez la agobie"

"Y si no se lo dices, te agobias tú" dijo el Hyuga impaciente. "¿Vosotros sois pareja o no? Así no llegareis a ningún sitio, necesitas desahogarte"

"¿Y qué propones, que me desahogue peleándome con ella? Eso sí que no servirá para nada...déjalo, tú no sabes nada de estos temas" dijo Lee con enfado.

Neji arqueó una ceja sintiéndose ofendido. Era cierto que hasta el momento nunca había tenido una relación seria a largo plazo, pero tampoco era tonto. Se había puesto en la situación de Lee y tenía bien claro lo que él haría en su lugar.

"¿Quién ha dicho nada de pelearte con ella?" dijo el joven curvando los labios en una sonrisa que Lee traducía como problemas. "Puedes pelearte con otra persona"

"Claro¿cómo no se me ha ocurrido?" dijo el chico con sarcasmo. "Si te parece me peleo contigo¿eh?"

"Lee, estoy empezando a pensar que eres tonto de verdad" dijo Neji frunciendo el ceño. "¿Para qué vas a pelearte con Sakura, si puedes pelearte con Sasuke?" Lee abrió los ojos de par en par, sorprendido por la propuesta de su amigo.


Sabía que no era lo correcto, pero no le importaba. La reprimenda de Tsunade no era nada comparado con aguantarse las ganas de verle; en aquel momento necesitaba hablar con él, necesitaba saber qué hacía allí, saber por qué había vuelto. Lo demás, poco le importaba.

Tras asegurarse de que Tenten, Neji y Lee se habían marchado, Sakura salió de su casa sin hacer ruido para no despertar a sus padres y empezó a correr hacia el hospital. No tardó en ver el gran edificio frente a ella. A esas horas, sólo estaban encendidas las luces de recepción y pocas habitaciones; sonrió al ver encendida la de la tercera planta, lo que indicaba que Sasuke aún estaba despierto.

Sonrió y corrió rodeando el edificio hasta estar bajo la ventana del chico. Hizo un sello que ya sabía de memoria, se concentró y acumuló chacra en los pies, para después subir despacio por el edificio. De vez en cuando miraba a su alrededor para asegurarse de que no había nadie que pudiera verla, aunque en realidad poco le importaba. Al llegar junto a la ventana, la golpeó varias veces, hasta que alguien descorrió las cortinas, sorprendiéndose al acto.

Sasuke tardó varios segundos en reaccionar y en abrir la ventana. La joven entró de un salto y se giró hacia él sonriendo, permaneciendo en silencio y observándole. Cayó en la cuenta de que no hablaban desde hacía cinco años y verla allí delante, en silencio y sonriendo, se le antojó extraño. Miró a la chica con el ceño fruncido.

"No puedes estar aquí y lo sabes"

"No me importa. Necesita verte, Sasuke-kun" dijo desviando la vista al suelo. El chico respiró hondo.

Sasuke-kun. ¡Cuánto tiempo sin escuchar aquel Sasuke-kun! Aunque lo hubiera negado, realmente lo había echado de menos, y en aquel momento no quería que Sakura se fuera. Miró a la joven a los ojos y midió sus palabras y su tono antes de hablar, para intentar no sonar tan brusco como antes.

"¿Para qué querías verme?" dijo mientras le señalaba una butaca. La joven sonrió y se sentó cómodamente.

"Quería ver que estabas bien. La operación fue larga y complicada...y quería comprobar que tú..."Sakura se calló como si no quisiera acabar la frase. Sasuke sonrió.

"Que yo estaba vivo¿no?" ella asintió lentamente. "Estoy bien, no tienes que preocuparte. Y tú¿cómo estás?" la joven pareció sorprenderse por la pregunta, cómo si no la esperara de ninguna de las maneras.

"Yo...bien, estoy bien. Sigo como siempre, supongo" dijo riendo tímidamente.

"Iie. Has cambiado mucho, pareces más adulta" Sasuke miró al techo pensativo. "Sakura¿quién sabe que yo estoy aquí?"

"Pues, de momento Lee, Tenten-san y yo. A parte de Tsunade y sus personas de confianza, quiero decir..." Sakura respiró hondo dispuesta a abordar el tema por el que realmente había ido a ver al chico. "Sasuke-kun... me gustaría saber por qué... ¿por qué tú...?" la joven parecía no aclararse con las palabras, y al sentirse observada fijamente por su compañero se puso más nerviosa aún. "¿Por qué has vuelto, Sasuke-kun?"

"Bueno, yo..." el chico miró a todos lados menos a Sakura, como si buscara una respuesta apropiada y que satisfaciera a la joven. Abrió la boca para decir algo, pero ella le interrumpió.

"Dime la verdad, no lo que yo quiero oír, por favor"

Sasuke la miró sorprendido, aunque luego sonrió. Era obvio que la tonta y pesada compañera de equipo de hacía cinco años había desaparecido dando paso a una joven inteligente y madura, cosa que le alegró. Se preguntó si Naruto habría cambiado tanto como ella, pero apartó la pregunta de su mente para contestar a la joven que tenía delante.

"La verdad. La verdad es que no he vuelto Sakura. Pensaba pasar por aquí, pero sin que nadie me viera...igual que tú has venido porqué necesitabas verme, yo también necesitaba veros a vosotros...quería comprobar que estabais bien y...eso..." ambos se quedaron en silencio mirando cada uno hacia un lado.

"Entonces, eso significa que no vas a quedarte¿no?" dijo Sakura sin atreverse a mirarle a los ojos. Si lo hacía, las lágrimas saldrían sin que ella pudiera evitarlo. A pesar de eso, Sasuke sabía que ella estaba angustiada por el tono de voz, suave y roto.

"No lo sé" dijo Sasuke sinceramente. "No sé si permitirán que me quede, Sakura, y aún en el caso de que así fuera... no tengo muy claro que fuera conveniente"

"¿Por qué?" preguntó la pelirosa sin entenderlo. "Sasuke-kun, tú no has hecho nada contra Konoha, no estás exiliado ni nada por el estilo¡no pueden echarte nada en cara!" gritó levantándose con enfado.

"Sakura, estuve a punto de matar a Naruto hace cinco años. Por mi culpa, vosotros dos, Kakashi y el equipo de Gai estuvisteis en serios problemas. Aunque el Consejo y Tsunade dejaran que me quedara aquí¿crees que Lee o Neji estarían de acuerdo?. ¿Y Naruto?"

"Ellos no son nadie para decirte nada, un error lo comete cualquiera y si el Consejo te diera permiso... Ya no tienes motivos para irte, Sasuke-kun..."

"Tampoco tengo motivos para quedarme" dijo el chico con una seriedad que congeló a Sakura.

La joven le miró desconcertada, buscando desesperadamente algo que decir pero sin éxito. Sasuke se levantó de la cama, se acercó a ella y, para su sorpresa, la abrazó. Sakura cerró los ojos dejándose caer en aquel abrazo que tanto había anhelado y que años atrás pensó que nunca recibiría. A pesar de la conversación, a pesar de lo que viniera después, la kunoichi se sentía feliz. Sasuke estaba allí, con ella, abrazándola con fuerza como si el mundo fuera a acabar, y eso le bastaba. El aliento en su oreja le hizo volver a abrir los ojos, sorprendida.

"¿Y tú, Sakura, tienes motivos para quedarte?"


En el momento en que vio a Sasuke abrazando a Sakura, Neji se arrepintió con toda el alma de haber llevado allí a Lee. Miró con preocupación a su amigo, que no apartaba la vista de la escena con una seriedad inusual en él. El Hyuga permanecía atento a la espera de cualquier reacción que pudiera darles problemas; al fin y al cabo ellos no debían de estar allí y aunque por la noche parecía no haber vigilancia, lo más seguro era que la Hokage ya supiera que tanto ellos como Sakura habían ido. Si encima Sasuke y Lee acababan a puñetazos, los problemas serían serios, y el culpable sería él. Por centésima vez desde que habían llegado allí, Neji se maldijo interiormente.

Al principio le había parecido una buena idea ir al Hospital; Lee y Sasuke hablarían, su amigo se desahogaría y lo mucho que podría pasar era que se gritaran. Pero había algo con lo que no había contado en ningún momento y que ahora se había convertido en un grave problema: Haruno Sakura. Neji no entendía cómo se le había pasado por alto la posibilidad de que la chica fuera a verle; ahora que los veía, le resultaba bastante lógico, pues ella había estado toda la noche tan ausente como ellos dos. Era obvio que en cuanto tuviera la menor oportunidad iría a verle al Hospital. Nuevamente, Neji se maldijo pensando en lo egoísta que había sido su idea. Lo único que había pretendido desde el principio era tener una excusa para ver al Uchiha y hablar con él. Y su amigo se había convertido en la excusa perfecta.

Lee apretó los puños con rabia sin dejar de mirar a Sakura y a Sasuke, aún abrazados. Él le estaba diciendo algo que no llegaba a oír, cosa que no sabía si era buena o mala. Desde aquel árbol, a varios metros de la ventana, era imposible averiguar qué decían y aunque había intentado acercarse más, Neji se lo había impedido. Era obvio que su amigo se arrepentía profundamente de haberle llevado hasta allí, al ver a Sakura se había borrado la sonrisa torcida de su cara y se había quedado más pálido de lo normal. Era obvio que no esperaba verla allí.

Sin embargo, el joven de cejas encrespadas había mantenido la duda hasta el último momento. No le interesaba ver a Sasuke ni hablar con él, mucho menos pelearse; el motivo real por el que había aceptado la propuesta de Neji ella para confirmar sus dudas. Sakura estaba allí con el Uchiha, abrazándole. Lee sentía como la rabia le crecía por dentro y como las ganas de entrar en aquella habitación crecían por momentos. Al sentir la mano de su compañero en el hombro, se sobresaltó de tal forma que a punto estuvo de caerse del árbol.

"Lee¿qué quieres hacer?" el chico miró sorprendido a Neji. "Ha sido idea mía venir aquí y lo lamento, así que te apoyaré en la decisión que tomes"

"Neji..." Lee miró de nuevo hacia la habitación. No podía negar que estaba deseando entrar allí y golpear a Sasuke, pero iría en contra de sus convicciones. "Neji, hazme un favor" el Hyuga asintió con la cabeza. "No le digas a Sakura que la he visto¿vale?"

"¿Qué no le diga...?" repitió sorprendido. "¿Qué pretendes, Lee? Huir de esto no te servirá de nada..."

"No puedo entrar ahí, pensará que la estaba espiando...y es verdad. Quiero que ella me lo diga. Sólo eso" Lee dio media vuelta y se marchó en dirección a su casa. Neji permaneció unos segundos inmóvil, para después bajar de un salto.


Sakura no dijo nada, algo desconcertada por la pregunta. Tras varios segundos en silencio, Sasuke deshizo el abrazo y volvió a sentarse en la cama, mientras ella permanecía de pie observándole. Se sentía incómoda, sin saber qué hacer o decir, pensando si tal vez debería marcharse. Justo cuando iba a despedirse, Sasuke la detuvo.

"He escuchado que tienes nueva profesora" la chica pareció sorprenderse, pero asintió con la cabeza, alegrándose del cambio de tema.

"Después de que te fueras, Tsunade-shisho me aceptó como su alumna. Pero ahora no entrenamos mucho..."

"Debes de haber mejorado muchísimo, Sakura" la chica se sonrojó mirando al suelo, haciendo que Sasuke sonriera. "Y seguro que el dobe de Naruto también..."

"Hai. Le entrenó Jiraiya-sama durante dos años. Ahora ya es chuunin y pronto se examinará para jounin" dijo la chica alegre.

"¿Naruto jounin? Eso es para verlo..." bromeó Sasuke.

"No es el único. Neji fue el primero en hacerse jounin y el ANBU está interesado en él, claro que no parece estar muy convencido. Y hace poco Shino y Shikamaru también ascendieron a jounins, los tres han hecho muchas misiones juntos y son las 'jóvenes promesas de Konoha'" la última frase la pronunció imitando a Tsunade, para después reír. "La única que no entrena mucho es Ino, creo que no le gusta mucho la vida como ninja. Incluso Hinata..."

"Mucha información para una noche¿no crees, Haruno?" los dos jóvenes miraron hacia la ventana, dónde estaba ni más ni menos que Hyuga Neji, mirando a Sakura severamente. La joven le miraba sorprendida, sin saber qué hacía allí y como se había enterado. "Que casualidad que haya salido a dar un paseo y que decidiera pasar por aquí...se os oye desde la calle" dijo mirando a Sasuke con media sonrisa. "Konbanwa, Uchiha"

"Konbanwa, Hyuga" dijo Sasuke con la misma expresión. Sakura sintió un escalofrío, pues parecía que fueran a matarse con la mirada.

"Ne-Neji-san... ¿cómo...?"

"Ya te lo he dicho. Casualidad" dijo el chico mirando de nuevo a Sakura. "Me preguntaba... ¿permiten visita a los enfermos graves, Haruno?"

"I-Iie" dijo bajando de nuevo la mirada avergonzada.

"¿Has venido por algún motivo en especial, o sólo para avergonzarla?" preguntó Sasuke de manera brusca, mirando a Neji con el ceño fruncido. El Hyuga le miró arqueando una ceja y sonriendo con ironía.

"Venía a ver cómo estabas¿cómo te sientes al volver del mundo de los muertos?"

"Vivo" dijo el Uchiha con el mismo tono.

"De-Deberíamos irnos, Neji-san... si Tsunade-shisho nos pilla aquí..."

"¿Por qué no sales a vigilar que no venga nadie? Si no han entrado a estas alturas, es porque no hay nadie en el pasillo. Puedes salir tranquila" dijo Neji impaciente, mirando a la chica con enfado.

"Es mejor que te vayas Sakura, no te preocupes" dijo Sasuke mirando de reojo a la chica.

"Ha-Hai... oyasumi nasai Sasuke-kun, Neji-san" la chica salió cabizbaja pero no por la puerta, sino por la ventana por la que Neji había entrado. Al cruzarse con el jounin sintió un escalofrío.

"Ahora ya puedes decirme a qué has venido" dijo Sasuke aún sentado en la cama, con actitud tranquila. Neji se quedó apoyado en la ventana.

"Iba a hacerte la misma pregunta. Después de cinco años creyéndote muerto, me entero por casualidad de que estás aquí, en Konoha" dijo el Hyuga cruzándose de brazos. "¿A qué has venido, Uchiha?"

"No he venido a nada, pero aunque te lo diga no vas a creerme¿verdad?" ambos se quedaron en silencio, hasta que Neji puso un pie en la ventana dispuesto a marcharse. "Oi Neji... ¿vas a decirle a alguien que estoy aquí?"

"Eso no me corresponde a mí. Se supone que yo no lo sé" dijo Neji mirando de reojo a Sasuke.

"¿Puedo pedirte... un favor?" esta vez, el joven Hyuga se giró del todo y miró a Sasuke sin ocultar su sorpresa e indignación. "Sé que no lo merezco, pero escúchame. Van a enviar a un grupo a la Aldea de la Lluvia, lo liderará Shikamaru... quieren averiguar si miento o no, pero no es eso lo importante. Tengo mis motivos para creer que quieren atacar Konoha y si tú vas... quiero que intentes averiguar si hay o no una conspiración. Si la hay, la Aldea está bajo un grave peligro"

"La Aldea de la Lluvia no representa ningún peligro, a nuestro lado es insignificante. Además contamos con el apoyo del país del Viento entre otros" dijo Neji quedamente.

"No se lo he dicho al Consejo porque no sé si me creerían, pero... trabajé para el Mizukage durante un tiempo y sé que planeaba desde hace años atacar un país. Y ahora que me han atacado, creo que ese país es el del fuego. Sólo te pido que vayas con Shikamaru y estés alerta... intenta conseguir toda la información que puedas"

"Yo a ti no te debo nada, Uchiha. Ve con tu cuento a otro. Seguro que Naruto está deseando escucharlo"

Neji se giró y saltó por la ventana antes de que pudiera decir nada. Empezó a saltar de tejado en tejado por dónde antes había venido. Sin embargo, al llegar a una desviación se detuvo y miró a ambos lados de la calle dudando. Sacudió la cabeza y fue en dirección a su casa. Antes de hablar con Shikamaru, debía pensarlo bien.


Notas: Ya estoy aquí otra vez¿qué os ha parecido? Esto cada vez se pone más dramático xD. A los que me preguntais si habrás SasuSaku, creo que es bastante obvio ya xD NejiTenten...lo siento mucho, pero a Neji le deparo otro destino xD No es por nada, es que quería cambiar un poco las parejas en este fic; eso sí, algún día haré un NejiTen si quereis nn Y a los que me preguntais por la reacción de Naruto...bueno, en el próximo capítulo se entera más gente de que Sasuke ha vuelto...¿estará el rubio entre ellos? xD

Lily-imoto, Miruru, Rimi, Espe-itoko, Dark Rinoa Chan, Jaide112, Hora, Marion-asakura, ElAinu y aquellos q me hacéis saber que os gusta y por algún motivo no dejais review¡muchas gracias!.¡Vuestro apoyo me anima a seguir! ò.ó

Preview: Naruto e Ino están preocupados por el extraño comportameinto de Sakura, Lee y Neji, y Shikamaru idea un plan para averiguar qué les pasa. Ajenos a todo esto, Hinata y Shino quedan para comer juntos, pero un despiste de la chica hará que cierta noticia llegué a sus oídos. Capítulo 5: Mala suerte. ¡Las noticias vuelan, no os lo perdais!