bueno aki esta el kinto! si bueno aunke no he tenido ni un solo review y eso me frustra un poko y por eso no he escrito el sexto ke no tengo idea de ke va a tratar...jajaja este es el capitulo mas largo y tambien mas intresante es mi favorito pero bueno necesito saber si voy bieeeen! ayuda!bueno supongo ke seguire esperando! por cierto sakura no es mio aunke kisiera!

Capitulo 5

"¡Bendito lunes!" pensaba mientras salía corriendo de mi casa hacia la escuela, se me hacía tarde y no me dejarían entrar, mi hermano no tenia clases ese día y no tenia quien me llevara.

Esperaba ver a Tomoyo, aunque una parte de mi no quería hacerlo, no iba a poder evitarla todo el tiempo. Llegué justo a tiempo para la ceremonia cívica de todos los lunes, y entonces divise su figura unos lugares enfrente de mí, un sentimiento agridulce se coló en mis pensamientos, una sensación electrizante recorrió mis huesos y mis entrañas y se agolpó en mi estomago, una sonrisa se dibujó en mis labios y no presté atención siquiera cuando la maestra me llamó la atención, regresé en un segundo a la realidad, la realidad en la que mi amor solo empezaba con el final, la realidad en la que Tomoyo nunca seria mía, la realidad en la que estaba perdida. El homenaje terminó y nos fuimos a nuestros salones me tocaba abajo y no quise adelantarme a saludarla por miedo a su reacción y prefería que si tenia algo que reprocharme fuera en privado.

Llegué al salón y me senté en el asiento junto a una persona que no deseaba ver…Eriol.

-Hola Sakura-saludó- ¿Cómo estas?-

-…Bien ¿Y tu?- contesté intentando no parecer desganada en la conversación.

-Genial-una sonrisa como pocas iluminó su rostro-¿No has visto a mi novia?

-No…no, creo que no-mi mundo se detuvo ante las palabras que surgieron de su boca, intenté decir algo pero mi mente no era capaz de hacer una oración coherente y preferí callar, la maestra entró en ese momento para mi buena suerte, aún mi mente no comprendía aunque sabia a que se refería con "mi novia"…Tomoyo y él ya eran novios.

Terminó la clase y salí del salón aun confusa y dolida, aunque suponía que no debía ser así, a final de cuentas no habíamos aclarado nada pero Tomoyo se me había adelantado y había sacado conclusiones a medias y soluciones radicales ella misma, entré al salón intentando no mirarla pero me fue inútil, nuestras miradas se cruzaron y sentí de nuevo la adrenalina corriendo por mí sangre, y mí pulso comenzó a acelerarse, me apresuré a mi asiento acortando la distancia entre Tomoyo y yo, voltee la mirada y sin decir una palabra me acomodé en el asiento.

Alex llegó después de mí y se sentó a su lado, le dio un beso en la mejilla y los celos afloraron en mis adentros.

El profesor de Literatura entró al salón y empezó a dar la clase, después de un gran monologo acerca del libro de "La Iliada" del poeta Homero, dijo:

-Muy bien muchachos pues ya que no me están prestando mucha atención van a realizar un trabajo en equipo- el salón estalló en murmullos de inconformidad que fueron acallados enseguida por el maestro-bueno como no quieren, pues yo voy a elegir a las parejas para que realicen un trabajo en binas acerca de la Iliada, va a valer un 30 de su calificación y no quiero trabajos pichicatos.-

Después de eso me empecé a preocupar por quien seria mi pareja para hacer el trabajo, interiormente deseaba hacer el trabajo con Tomoyo, pero por otro lado no quería tener una confrontación con ella. El maestro hizo papelitos con nuestros nombres y empezó a sacarlos de dos en dos

-…Y ahora mmmm Sakura cooon…Tomoyo-, me quede pasmada por segunda ves en el día, volteé a ver a Tomoyo y su rostro mostraba una mueca de inconformidad, el profesor siguió sacando los nombres y después solo supe que Shyaoran había quedado con Eriol.

-Muy bien pues el trabajo es para el viernes 3 de abril…bien esto es todo muchachos nos vemos la siguiente clase.- se dirigió hacia la salida y desapareció tras de la puerta.

Todavía no cabía en mi asombro, no solo no le hablaba a Tomoyo si no que también tenía que hacer un trabajo con ella. Su silueta se acerco a mi escritorio, no la veía ahora con adoración, no la veía con amor, solo la veía y sin sentimiento alguno, se paro enfrente de mí.

-¿Qué vamos a hacer?-saliendo de mi ensimismamiento con su voz irritada, intente recuperar el temple.

-¿Perdón?-dije con voz trémula, y queriendo sin querer lo sentimientos regresaron a mi, dolor, amor, rencor y más amor.

-el trabajo- respondió aun mas irritada por lo incoherente de mi pregunta.

-no se lo que tu quieras-le solté secamente las palabras justo como a mi me había caído la "noticia".

-pues si por mí fuera no haría nada-

-pues nadie te está pidiendo que hagas nada…pero como el trabajo es en parejas y yo no pienso hacerlo sola puedes ir a las cuatro a mi casa-. Se quedo unos segundos sin decir nada, como pensando en su respuesta.

-esta bien como sea tengo que trabajar…nos vemos-su expresión cambio rápidamente de estar enojada a simplemente verme con ternura lo que termino de molestarme y salí del salón. El día transcurrió lentamente entre clase y clase.

La hora llegó, la espera terminó, mientras me levantaba y abría la puerta. Su rostro apareció ante mi como una visión de un pecador moribundo, no la hice esperar y sin siquiera saludarle le hice entrar.

-¿De que es el trabajo?-pregunté mientras caminaba con molestia hacia mi habitación.

-De la Iliada¿Qué no pusiste atención a clase?-no había enfado en su voz, la vieja camaradería regresaba.

-por supuesto que no ¿Quién me crees?- contesté sentándome en una silla frente a la computadora sin una sonrisa en los labios.

-… ¿Estas enojada?-pregunto sentándose en la cama.

-¿Crees que tengo razón para estarlo?- contesté con otra pregunta aún seria, no volteé a verla, pero si lo hubiera hecho me hubiese encontrado con una mirada triste y unos labios sin sonrisa.

-¿no?-

-si no estás segura no contestes- volteé a verla y me encontré con ella, como si fuera la primera vez que la veía, hermosa, con una inocencia en la cara, como la primera ves.

-perdón…-

-no me pidas perdón a mi, pídetelo tu misma, yo te perdono y no justifico tus actos egoístas-mi voz se alzaba en un grito contenido.

-¡mis actos egoístas!-el tono de su voz también empezaba a crecer.- ¡ni siquiera sabes y solo criticas!

-¡como si tú supieras!-mi voz bajo a ser como un suspiro-…todo lo que te quiero, lo mucho que te amo, lo mucho que me lastimas…-

El tiempo se detuvo en el cuarto, su rostro no mostraba más que asombro y aflicción, mis músculos estaban tensos esperando su respuesta.

-…yo…-

-no se ni por que te digo esto-empecé-…creo que simplemente tenia que decírtelo de frente para que pudieras gritarme y golpearme, decirme que me odias y que no quieres volver a verme o tal ves solo para conservar la vana esperanza y decirme que me amas y que me necesitas tanto como yo a ti…pero creo que lo que mas me duele es tu silencio que mata…que me mata amor mío-.

-no me importa-

-…entiendo…-conteste tristemente-bien terminemos el trabajo-

-¿no me entendiste? No me importa-

-creo que está de más entenderte las palabras lo dicen todo-

-si pero depende con que sentido se digan…mi amor-puso un énfasis en las ultimas palabras. Mi cara solo mostraba confusión, no sabia si reír o llorar, no sabia que hacer.-no me importa si tienes novio, no me importa si yo tengo novio, solo se que te amo, y se que no puedo vivir sin ti.-

-…ya no ando con Shyaoran, además ¿no crees que ya has hecho demasiado daño?-

-¿ya no andas con él?-

-no, no quería meterlo más en lo que siento-

-entonces ¿terminaste con él por mí?-

-no, termine con él por mí, estoy muy confundida y se que no lo amo como te amo a ti-

-entonces¿me amas?-

-¿no te lo dije ya? Que te amo como a nada en mi vida-

-entonces ¿Qué esperas?-mi mirada denotaba frustración y confusión al o saber de que me hablaba

-¿Qué espero para que?-

No dijo nada más me tomó del mentón, coloco sus labios entorno a los mis, sentí su calor de nuevo en mi, entreabrí la boca para facilitarle la intrusión a mi boca, ella lo agradeció introduciendo su lengua acariciando lenta y suavemente, le correspondí instintivamente iniciando una danza erótica con su lengua y la mía, me levante de la silla sin despegar mis labios de los suyos, la intensidad del beso crecía mas rápido de lo que mi mente podía controlar, las emociones fluían como drogas en mi sangre invitándome a perder el control de algo que sabia que no podía controlar, ella llevaba el control de la situación por así decirlo, me llevó hasta la cama y empujándome suavemente caímos en el mullido colchón, ella encima de mi, no podía pensar y solo me dejaba llevar por sus manos recorriendo mi cuerpo, nuestras respiraciones entrecortadas eran lo único que se escuchaba en la habitación a parte del roce de las ropas, en un momento me di cuenta de que mi blusa ya no cubría mas mi torso y estaba tirada en el suelo pero poco me importó, al parecer ella estaba en la misma situación, y mis manos tampoco se quedaban atrás y acariciaban su torso desnudo bajando un poco mas de lo permitido hacia sus piernas, saboreando el momento, no quería que terminara, cuando estaba apunto de desabrochar su sostén se paró en seco, me detuvo, no solo se separó bruscamente de mi, si no que tomo sus cosas y se vistió, cosa que no le tomo mucho tiempo, mientras yo la miraba entre confundida y dolida.

-¿Por qué hiciste eso?-pregunté enojada esperando una respuesta mientras yo también me vestía.

-es que yo…no… ¡no puedo¡Eres mi mejor amiga¡Dios! en ¿Qué demonios estaba pensando?- respondió con prisa, sorpresa y molestia.

-eso mismo me pregunto yo ¿Qué nada mas querías decirme que me amabas para fajar conmigo un rato¿Para darme alas y después meterme en el infierno?... ¿Ves a lo que me refiero cuando digo que solo piensas en ti!- en ese momento olvide de cuanto la amaba y simplemente saque toda la frustración contenida contra ella, aunque después de todo se lo merecía

-no tu no lo entiendes… ¡no lo ves! si solo estuviera pensando en mi…yo…yo no…te lastimaría tanto…de verdad que esto es difícil…te amo…pero no puedo… ¡esto esta mal! Yo no puedo ser… ¡así!-

-Y ¿Crees acaso que para mi es como estar durmiendo en flores¡Yo diría que mas bien en rosales! Y créeme para mi esto tampoco es fácil… ¡preferiría no tener que sentir esto pero no lo puedo evitar!- todo fluía y sentía que ya no se podía detener lo dicho dicho estaba y hasta ahí la cosa no era muy buena.

No quiso escuchar mas, supongo que en el fondo mis palabras si le dolieron, me senté en la cama, sus manos habían dejado un fantasma en mi piel, me recosté en la cama, muchas preguntas fluían por mi mente pero en realidad no tenia muchas ganas de contestarlas…la única que realmente hacia mella en mí era ¿Cómo demonios puedo terminar algo que ni siquiera ha empezado?...Y la semana solamente empezaba...bendito lunes.