Capítulo 2

Un taxi los llevó por la hermosa Turín hasta un edificio de departamentos, donde al llegar acomodaron sus pertenencias en uno de los que quedaba en el quinto piso.

-No es muy grande, pero al menos cabemos los dos –comentó Paola conforme, abriendo los ventanales del lugar, desde donde podía divisarse el estadio "Delle Alpi" de la Juventus

-Supongo que tú estás acostumbrada a otras cosas –comentó Kojiro casualmente

-No sé por qué lo dices –respondió ella, volteando a verlo- Recuerda que la mayor parte de mi vida la pasé en una habitación del Toho

-Así fue. Y con eso zánjenla ya o nos quedamos así hasta la cena –intervino Ken mientras miraba alrededor- ¿Porque ya es hora de la cena, no?

-Jaja, sí no te preocupes –rió su amigo divertido

-¡Mira, ésta es la habitación principal! –exclamó Paola, que de un momento a otro había ido a inspeccionarlo todo

Ken y Kojiro intercambiaron miradas y se dirigieron hasta allá, donde encontraron a Paola saltando divertida encima de la cama.

-¡Yupi! ¡está blandita! –comentó la chica divertida de la vida, sin dejar de saltar

-Mejor no pregunto el por qué de tu "yupi" –dijo Kojiro con sarcasmo, sonrojando a Ken mientras Paola le sacaba la lengua

-A veces se comporta como la hermanita menor que nunca tuve –confesó Ken apenado

-Y créeme que se ve como si lo fuera –admitió su amigo, recibiendo un almohadazo

-¡Ya te oí tigrito! Así que retira lo dicho –amenazó Paola bajándose de la cama

-Cómo que tigrito –se indignó Kojiro

-¡Ja! Para que veas que hasta los insultos contra mis amigos me los aprendo por si son necesarios alguna vez

-¿De veras te casaste con ella? –le preguntó Kojiro a Ken, incrédulo

-Eso parece –murmuró el karate keeper divertido, mostrándole el anillo de oro blanco en su dedo

Luego de acomodar algunas cosas, los tres se dirigieron a un restaurante cercano, donde sobra decir que más de la mitad de los presentes había reconocido a Kojiro.

-Se nota que eres muy famoso aquí –comentó Ken

-¿Inventaste algo o qué? –se mofó Paola

-Inventé la manera de hacer respetar a un jugador de fútbol japonés –contestó Kojiro altanero

-¿Y funciona a gas o baterías? –alegó la chica irónicamente

-Si sigues burlándote, dejo a Ken viudo antes de que le dejes descendencia –amenazó el delantero

Paola lo miró indignada y decidió quedarse callada XD Después de disfrutar de una entretenida cena, en la que la muchacha fingió gran indignación, negándose a dirigirle la palabra a Kojiro. Cuando retornaron a su departamento el tigre japonés se despidió de ellos, quedando con su mejor amigo verse antes del inicio general del entrenamiento para ponerlo al tanto de muchas cosas.

-¿Nervioso? –preguntó Paola en medio de la oscuridad de la habitación, cuando ambos estaban ya acostados para dormir

-Mucho –confesó su esposo

-Sé que lo harás bien –siguió ella, echándose de costado con la mirada dirigida hacia él

-Quiero quedarme, ser titular y...

-Y ganar el puesto de titular en la selección –completó Paola- Ya lo sé

-Voy a demostrar que soy mejor que Genzo –resolvió Ken apretando los puños

-Paso a paso Ken –le dijo la muchacha- Primero comienza por triunfar en la Juventus, ya luego lo demás vendrá como agregado

-Gracias –dijo él, sonriendo en la oscuridad

-¿Por qué?

-Por apoyarme siempre

-¿Para eso estoy no?

-Te pagaré con creces todo lo que has hecho por mi –continuó el karate keeper, acariciando una mejilla de la germano japonesa- Dejaste todo en Japón por seguirme

-Y lo haría aunque te fueras al mismo infierno –aseguró Paola, cubriendo la mano del muchacho con la suya- Sólo habría un problema si así fuera

-¿Cuál?

-Habría que preguntarle a Genzo si estará para abrirnos –bromeó la chica, desatando la risa de su esposo

Al día siguiente, a eso de las 6 de la mañana, el teléfono sonaba en el departamento.

-¿Hola? –contestó Paola medio dormida

-Paola, ¿Ken ya despertó?

-¡Qué inoportuno eres! –renegó la muchacha- Hace como dos horas que recién pudimos conciliar el sueño y vienes a despertarnos

-Yo no tengo la culpa de que se ejerciten tanto –se burló Kojiro con sarcasmo

-¡A qué te refieres! No seas cochambroso, el cambio de horario nos va a matar y tú me vienes con eso...

-¿Aló? –dijo Ken, quitándole el teléfono a Paola que seguía protestando en todos los idiomas que se le ocurrieron

-En una hora te veo en los vestidores del club –anunció su amigo

-Gracias por despertarme –respondió Ken

-¡Cómo que gracias! –se indignó Paola, tomando de nuevo el auricular- ¡Ésta me la pagas Hyuga!

-Adiós Wakabayashi –se despidió Kojiro divertido, colgando el teléfono

-¿Puedes creerlo? –bufó Paola- Me colgó

-Mejor voy a bañarme –dijo Ken divertido, dándole un beso en los labios y levantándose de la cama

-¿Quieres que te ayude? –bromeó Paola

-Je, no gracias, puedo solo –respondió el muchacho, entrando al baño

-Como quieras, tú te la pierdes –replicó ella, cubriéndose nuevamente con las mantas para dormir un poco más

Cuando Ken llegó, bastante nervioso por cierto, a la cancha de la Juve buscó a su amigo en los vestuarios. Kojiro ya estaba allí, preparándose para la jornada que iniciaba.

-Deja la cara de susto –le recomendó al verlo

-Qué quieres que haga, esto es nuevo para mi –alegó Ken

-Estás peor que en tu boda –recordó Kojiro sonriendo

-Nah, a comparación de mi boda esto es cualquier cosita –bufó su amigo irónico- ¿Sabes lo que es ver a varios Wakabayashi mirándote con ojos de odio y amenazándote en estéreo?

-Jajaja, mejor vamos a la cancha

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Tanto sarcasmo me recuerda que yo soy la autora XDDD

Espero que las fans de Genzo no me maten por el chistecillo ¡era sólo un chascarrillo mañanero! XDD

Y recuerden que Ken sí tenía a qué temerle, porque se supone que además del padre de Paola figuran el padre de Genzo, el Minotauro y dos de sus hermanos OO