Hola hay alguien por ahí otra vez con un nuevo capítulo como prometí, aunque como les anticipe me demore un poquito y como siempre espero que les guste.

Disclaimer:Los personajes son de propiedad de Stephenie Meyer solo la historia es de mi autoría.

Capítulo 5. La boda

No podía dormir pensando en que mañana lo vería y que les contaría a Rosalie, Alice, a mi mamá y a Jacob mí noviazgo con Edward aunque si ellos lo sabían la noticia no tardaría en esparcirse, la presentación formal con mi padre sería otra historia no habría ningún problema o eso esperaba yo, en ese momento me abrumó una infinita felicidad que no creí que podría sentir y que fuera por Edward era aún más irreal tal vez fue este sentimiento escondido detrás de nuestra enemistad el que me motivo a seguir intentando ser su amiga y como lo agradecía, así me dormí esperando a que cuando despertara no fuera tan solo un sueño mi imaginación no daba para tanto.

-Bella, hija despierta. Escuche que mi madre me decía suavemente.

-¿Qué pasa mami? ¿Qué hora es? Le pregunte un tanto desorientada mala idea la de quedarme soñando despierta la noche anterior a la boda.

-Son las 10:30 de la mañana lo siento creí que te despertarías sola y salí muy temprano a comprar junto con Emily.

-No tienes que disculparte mami aún me queda tiempo. Le dije mientras caminaba de un lado al otro buscando mis utensilios de aseo para bañarme aunque había quedado con Alice y Rosalie de encontrarnos a la 13:00 para arreglarnos todas juntas tenía ansias de llegar lo más pronto y sabía con seguridad la razón exacta, refleje sin querer una gran sonrisa.

-¿y esa sonrisa?

-No sé de qué me hablas mami. Le dije tratando de evadir el tema pero esa vocecita de la conciencia me decía que debía hablar y contarle, como ella ya estaba sentada en el sillón de mi cuarto yo solo me ubique a su lado y hable con tranquilidad.

-Mami yo sé que debí haberte contado esto desde antes pero tú y mi papá ya lo sabían.

-Bella déjate de tanto preámbulo y cuéntame que la curiosidad me está matando.

-Edward y yo somos novios. Le dije y esperé su reacción.

-Hija felicidades no sabes lo feliz que estoy por ti y si tu padre y yo no te dijimos de las intenciones de Edward era para que decidieras por tu cuenta sin que sintieras ninguna presión.

-Si lo sé y se los agradezco….

-Pero hija cuéntame cómo fue, ¿qué te dijo?

-Mami en este momento tengo que apurarme para la boda te cuento después, sí.

-Está bien pero me cuentas, es que todavía no lo puedo creer hace tan poco eras mi niña y ahora ya tienes novio. Dijo lo último al borde de las lágrimas y me dio un abrazo antes de irse.

Salí de mi casa con tiempo de sobra, ni bien llegue entre presurosa a la mansión estaba preciosa más adornada que en la fiesta de graduación los empleados y meseros entraban y salían con adornos y comida Esme era quien estaba dirigiéndolos así que me acerque a saludarla.

-Buenos días Esme, ¿puedo ayudar en algo?

-Hola Bella. Me dijo emocionada y dándome un abrazo.-No, lo mejor es que subas con Alice que ya te está esperando.

-Tiene razón, conociendo a Alice debe estar exasperada. Ambas nos reímos me despedí y me adentre en la mansión, disimuladamente miraba buscando a Edward tal vez tendría suerte y podría verlo antes de la ceremonia pero no lo encontré así que resignada me encaminé a la habitación de Alice que seguro se habría convertido en un sofisticado salón de belleza y suspire fue cuando sentí que me halaban del brazo dentro de una de las muchas habitaciones de la casa, estaba a punto de gritar por ayuda pero lo olvide por completo cuando vi quien era.

-Edward casi me matas del susto. Le dije ya que mientras me halaba mi mente se imaginó lo peor, era muy asustadiza pero mi pulso ya no estaba acelerado tan solo por el miedo sino por tenerlo cerca.

-Perdóname Bella pero te extrañaba mucho y no pude esperar hasta la fiesta y en cuanto observe que llegaste se me ocurrió esta idea para verte. Me respondió y me dio un beso en los labios que hizo que mi corazón latiera aún más rápido.

-No es nada y yo también te he extrañado. Le conteste acordándome de respirar.

-¿Vas a bailar conmigo en la boda? Me pregunto mirándome directamente a los ojos y fui feliz de poder darle una buena noticia.

-No solo voy a bailar contigo sino que vas a ser mi pareja durante toda la ceremonia ¿Qué te parece? Los ojos de Edward se iluminaron.

-¡Bella me parece maravilloso! Entonces eso quiere decir que les vas a contar las buenas nuevas en cuanto las veas.

-Sí y de hecho mi mamá ya lo sabe, se lo conté esta mañana. Le informe con una enorme sonrisa en mi rostro.

-Si es así, te estaré esperando con ansias y creo que debes ir con Alice y Rosalie ya casi es la hora en que quedaron de verse.

Yo asentí y me dio otro beso de despedida, abrió ligeramente la puerta para cerciorarse de que no hubiera nadie y salimos nos separamos cada quien por su lado, lo mire mientras bajaba la escalera hasta que desapareció.

Mire la hora estaba con el tiempo justo, el tiempo paso tan rápido.

-Alice soy Bella ¿puedo pasar? Le pregunte golpeando la puerta.

-Entra amiga la puerta está abierta.

-Hola Alice, Rose. Las salude dándoles un abrazo.

-¿Y cómo así no han empezado a arreglarse? Le pregunte extrañada ella siempre muy organizada para que todo saliera bien.

-Porque las señoritas que contraté para que nos arreglaran llamaron para avisar que van a llegar media hora más tarde. Me contesto Alice con frustración.

-Pues creo que en este momento es lo mejor porque les tengo que contar algo importante. Les dije tratando de no demostrar entusiasmo pero las dos se volvieron hacia mí ansiosas por lo que les iba a contar.

-Entonces habla Bella.

-Edward y yo somos novios. Les dije sin más preámbulos pero no estaba preparada para su reacción empezaron a gritar de alegría y entre las dos me abrazaron fuerte.

-Te dije que sucedería. Le decía complacida Alice a Rosalie mientras esta se sentaba en el mueble junto a la ventana.

-Pero cuéntanos Bella cuando fue que no nos dimos cuenta. Me pregunto para mi sorpresa Rosalie.

-Fue el día de la audición, Alice recuerdas que te conté que tuvimos que escondernos en un salón de música del padre de Jessica.

-Ah sí lo recuerdo. Me respondió pensativa mirando por la ventana que daba al jardín y se me hizo raro que no me siguiera interrogando y Rosalie la mirara sonriendo.

-Alice ¿qué sucede? ¿Porque estas así de distraída? Le pregunte mientras sigilosamente Rosalie y yo nos acercábamos y observábamos la razón de su distracción, la tía abuela de Alice la condesa Charlotte de Wolf caminaba junto con su abogado que reconocí como Jasper Withlock hijo, ahora todo me quedaba muy claro, lo conocimos en la fiesta de cumpleaños 16 de Alice la tía abuela le había regalado una finca cerca de la ciudad y él se había encargado de los tramites como su abogado personal, Alice había quedado encantada con él pero su edad no era la adecuada para empezar un noviazgo, así que en los últimos años las pocas veces que lo veía se había limitado a simples conversaciones pero ahora ya no habría excusas para que Alice iniciara su noviazgo con Jasper, ya podía imaginarme la cara de Emmett y de Edward que eran tan sobreprotectores, no tendría precio.

-Porque no me contaron que vendría. Les dije emocionada por Alice.

-Llego de un momento a otro para la boda, nadie sabía si podría venir por el quebranto de su salud. Me contesto Rosalie porque Alice estaba embelesada observando por la ventana.

-¡Qué bueno que no pudo venir! No crees Alice. Le dije a propósito para saber qué planes tenia pero golpearon la puerta y Alice corrió a abrir.

-Buenas tardes somos las señoritas que contrató para arreglarlas para la boda.

-Qué bueno que llegaron sigan por favor que estamos con el tiempo encima.

Durante todo el tiempo que nos maquillaron y peinaron nos entretuvimos conversando de los vestidos y del viaje de bodas que empezaría en Italia recorrerían las principales ciudades de Europa por dos meses, unas horas después Esme ya toda arreglada vino para ayudar a que Rosalie se pusiera el vestido mientras nosotros hacíamos lo mismo, estuvimos listas media hora antes, incluso las demás damas de honor ya habían llegado.

-Hija quedaste preciosa pero para que estés oficialmente lista…. Esme muy entusiasmada tomó una caja dorada de su bolso y sacó un par de pendientes plateados incrustados con piedras azules que resaltaban con el color de ojos de Rosalie que nos dejó a las tres deslumbradas.

-Rosalie estos pendientes me los regalo mi padre el día de mi boda y ahora yo te los obsequio a ti pues te considero una hija.

-Esme te agradezco por tu cariño pero no puedo aceptarlo es Alice quien le lo merece más que yo y…

-No Rose tú te mereces este obsequio tanto como yo ¿acaso Bella, tú y

yo no crecimos como hermanas? Me voy a enojar si no los aceptas. La interrumpió Alice y sus palabras sonaron muy sinceras.

-Gracias Alice, Bella ustedes son las mejores hermanas que la vida me pudo dar y Esme yo también la considero como mi mamá y gracias por todo. Todas nos abrazamos casi llorando de la emoción del momento cuando llamaron a la puerta.

-¿Puedo pasar? Pregunto mi madre desde la puerta.

–Que si ya están listas porque ya casi es la hora de bajar…. Pero en cuanto nos vio la emoción se manifestó en su rostro.

-Alice, Bella están preciosas; Rosalie estas hermosa con ese vestido, estoy segura que tu mamá estaría dichosa como Esme y yo lo estamos.

-Renée gracias, más feliz no puedo estar.

-Bueno ahora sí respira, nada de lágrimas porque ya debemos bajar Emmett ya debe estar esperándote.

Rosalie se adelantó al final de las gradas la esperaba su padre y tomada de su brazo se dirigió hasta la sala que daba al jardín y sentó en uno de los majestuosos muebles esperando a que iniciara la música de entrada, Alice se fue junto a Esme y yo a propósito hice que mi madre y yo fuéramos al último pero cuando le iba a hacer una pregunta ella se me adelanto.

-Bella, ¿tu pareja en la boda va a ser Edward?

-Si mamá Edward ya sabe que te conté a ti y a las chicas ¿Por qué?

-Es que yo ya sospechaba que harías eso y le conté a tu padre.

-Y ¿cuál fue su reacción? Le pregunte entrando en pánico.

-Puedes estar tranquila hija lo tomo muy bien, conoce a Edward de toda la vida y el que hablara antes con él fue una carta a su favor.

- Gracias mami. Le dije muy feliz ya solo faltaba que hablara con Jacob, ella asintió y se alejó a reunirse con mi padre, ya casi era la hora de que la boda empezará seguro que Jacob ya estaba aquí así que lo busque entre los invitados para sorprenderlo pero la sorprendida fui yo.

-Bella. Me dijo Jacob y me abrazo como un loco como siempre lo hacía.

-Hermanito. Le dije y le correspondí el abrazo lo extrañaba mucho ahora que ya casi no lo veía por su trabajo.

-Ven que te tengo que contar algo. Le dije emocionada llevándolo a una mesa y en cuanto se lo iba a decir me di cuenta que aunque ellos ya no estaban enemistados tal vez a Jacob no le gustaría.

-Bella ya dime que me está preocupando tu silencio. Me dijo muy serio yo lo mire tenía razón debía decirle el seguro me entendería.

-Edward es mi novio. Le dije esperando su reacción esta noche llena de confesiones me tenía en un vaivén de emociones.

-Entonces Edward se decidió por fin a confesarte lo que siente por ti.

-¿Cómo que se decidió por fin? Tu igual que mis padres ya sabias las pretensiones de Edward. Le dije sonriendo al parecer esto fue un secreto a voces.

-Sí, lo sabía, él vino a hablar conmigo me dijo que entendía que yo era como un hermano para ti y quería dejar las cosas claras.

-Bueno si ya todo está claro ¿no te enojas si Edward es mi pareja en la boda? Le dije y esperé cualquier señal de reproche.

-Cómo me preguntas eso, claro que no me voy a enojar siempre y cuando me prometas que vas a bailar conmigo por lo menos una canción, porque si como estoy pensando mi pareja va a ser Alice no va a ser por mucho tiempo, ya vi que Jasper vino a la fiesta.

-Entonces pienso que es nuestro turno de ayudarla ¿no crees? Los dos nos reímos fue cuando Alice y Edward se acercaron.

-¿Que es tan gracioso? Nos preguntaron desconcertados.

-Nada, ya debemos irnos con las demás damas, mira tú mamá ya nos está llamando. Le dije presurosa para que no ahondara en el tema Alice se fue con Jacob mirándonos de reojo.

-A mí sí me vas a contar de que te reías con Jacob.

-Nos reíamos porque ahora nosotros vamos a ayudar a Alice con Jasper ya sabes como ella nos ayudó a ti y a mí y a Rosalie y Emmett ¿nos vas a apoyar? El asintió muy divertido pero ciertamente incomodo de intervenir en este aspecto Alice era como su hermana, precisamente por eso en un inicio Emmett y él se habían hecho amigos de Jasper y aunque entendieron que no tenían nada de qué preocuparse su sentido de sobreprotección era fuerte.

La orquesta interpretó la música acostumbrada para la entrada de la novia, las damas y las parejas nos ubicamos a los lados formando un camino de honor inmediatamente Rosalie junto con su padre caminaron hasta el altar ella irradiaba felicidad, la ceremonia fue conmovedora y se cumplió con todo lo tradicional como el primer baile de los novios y fue durante el baile que Rosalie se acercó a mí para armar el plan a Jasper no se le veía intenciones de dar el primer paso para hablar con Alice tal vez por consideración de no dejar sola a la tía abuela pero eso lo arreglaríamos nosotras.

Rosalie y Emmett se abrieron paso entre los invitados hasta llegar donde Jasper y la tía abuela Charlotte y entre felicitaciones la entretuvieron minutos después Edward y yo también nos acercamos saludamos y mientras los tres la seguían entreteniendo yo aproveche para bailar con Jasper que se veía un tanto sorprendido.

-Jasper te importaría bailar conmigo. Él regreso a ver a Edward para su aprobación y luego hasta donde estaba Alice seguro ya sospechaba de nuestros planes, caminamos entre los demás invitados que estaban en la pista y mientras bailábamos fui directa tenía que serlo si quería que mi querida amiga iniciara su historia de amor en este día.

-Jasper creo que ya sospechas que la razón por la que estamos aquí es para ayudarte con Alice, así que necesito que me digas si estas interesado en mi amiga de forma seria. Le dije a Jasper sin dudar y me sorprendí de mi misma.

-Bella tú sabes bien lo que siento por ella, han sido las circunstancias las que no me han permitido pedirle a Alice que sea mi novia, así que lo que tengan planeado que empiece.

Me alegre mucho de escuchar sus palabras estaba muy decidido así que poco a poco nos fuimos acercando hasta donde Jacob y Alice estaban bailando.

-Alice lo siento le prometí a Jacob que bailaría con él pero te dejo en muy buena compañía. Le dije muy contenta sabiendo lo mucho que significaba Jasper para ella.

A una distancia considerable Jacob y yo bailábamos pero con disimulo mirábamos la escena y no se necesitó mucho tiempo para ver a Alice casi brincando de emoción y sellando con un casto beso su historia de amor.

Una vez cumplida la misión decidimos regresar hasta donde estaban los demás pero entre los invitados algo me llamo la atención divise a dos personas era mi tía Victoria y James Witherdale el abogado de mi padre conversaban aunque note desinterés por parte de mi tía, no sabía que la pretendía pero eso lo averiguaría luego, en cuanto llegamos note que la tía abuela Charlotte estaba conversando con mis padres y los de Alice y todos nos regresaron a ver esperando una respuesta.

-Todo salió perfecto el plan fue un éxito. Les dije sonriendo y tomando la mano de Edward que se encontraba a mi izquierda, Jacob se sentó a mi derecha Rosalie y Emmett estaban frente a mi todos estábamos muy felices la fiesta de bodas no podía ser más perfecta, al final de la recepción todos nos despedimos de Emmett y Rosalie que se retiraron a descansar al día siguiente muy temprano partirían a New York después tomarían un barco a Italia donde iniciarían su recorrido por Europa, poco a poco los invitados se fueron y mi familia y yo hicimos lo mismo no sin antes despedirme de Edward y felicitar a Alice y Jasper.

A la mañana siguiente me levante muy temprano y el chofer me llevo a la mansión Cullen no quería que Rosalie y Emmett se fueran sin despedirme, Alice fue a la primera que encontré en la sala.

-Hola Alice. La salude la sonrisa que tenía durante la fiesta aún le iluminaba el rostro.

-Hola Bella, no sabes lo agradecida que estoy por lo que hiciste, esto que estoy viviendo es mejor de lo que me había imaginado.

-No solo me agradezcas a mi todos contribuyeron en esto ya era nuestro turno de devolverte los favores y dime a qué hora se va Rosalie.

-Creo que en un momento más, todos están en el Estudio de mi papá porque la tía abuela Charlotte como regalo de bodas les va a regalar una casa aquí en Chicago.

-Eso era de esperarse la tía abuela siempre es así de generosa. Le iba a preguntar por Edward pero en ese momento la puerta del Estudio se abrió y Alice y yo nos acercamos, la primera en salir fue Esme y el doctor Carlisle los salude e inmediatamente salude a Emmett y Rosalie que fueron los siguientes en salir pero fue a mi amiga que salude con más energía dándole un abrazo, la nostalgia de su partida aunque corta ya me afectaba; finalmente salieron Edward que me saludo a lo lejos con una sonrisa, Jasper y la tía abuela Charlotte para ese momento el chofer y uno de los empleados bajaban un par de maletas cada uno y se dirigían al coche y todos nos dirigimos hasta ese lugar.

-Cuídense mucho Bella, Alice las quiero. Se despedía Rosalie con ligeras lágrimas en sus ojos.

-Tú también cuídate mucho, te voy a extrañar. Me despedí contagiada de sus lágrimas.-Mis padres no pudieron venir pero te mandan muchas felicidades. Agregue.

-Rosalie diviértete mucho y no olvides escribirnos para saber cómo estas, te voy a echar mucho de menos. Le dijo Alice dándole un abrazo y sollozando un poco.

Todo eso nos dijimos llorando pero ciertamente compartiendo la felicidad de Rosalie, a lo lejos pudimos oír como Emmett aconsejaba a Jasper con respecto a Alice, en contraste dejamos de llorar para reír; una vez que los ahora esposos se despidieron de todos se subieron al coche y partieron, Edward se acercó a mí y me rodeo con sus brazos como señal de protección, mirando cómo se perdían en la carretera me di cuenta que ese también podía ser mi futuro y me agrado aunque si lo pensaba debía ser en uno no muy cercano porque aún me quedaban algunos metas por cumplir sólo esperaba que en el Conservatorio me dieran la oportunidad, Edward más que nadie me podía entender por lo pronto me deje llevar por la sensación combinada de dicha y nostalgia en el ambiente entendiendo que un ciclo en nuestras vidas se cerraba pero otro comenzaba lleno de posibilidades.

¿Qué tal si les gusto? Gracias por continuar leyendo mi historia y si pueden escríbanme un review quiero saber qué tal va la historia.

Saludos.