"Like a Black Kitti"
Basado en el fic de Itzukiai de Gundam Wing
"ENTRE DOS DESTINOS"
Wufei x Quatre
By Seiryu

Capitulo 4°

Ojos de Mar:


"Con un salto en espiral

me querré acercar...

vamos de la tierra al sol

distanciar...

el destino intentará

hacer justicia...

con un giro transversal

me querré acercar...

más cerca que no exista la distancia

que no puedas respirar...

más cerca que no exista la distancia

que no puedas respirar...

más cerca que ahí

me quedaré..."

("Distancia"...Lucybell)


Ahí, de pie frente a esa puerta, con el corazón en la mano, sin saber a ciencia cierta "qué era lo que hacía, en específico ahí" Wufei se debatía entre golpear o hacerse el loco y caminar de vuelta a su habitación.

Su mano se alzó temblorosa, intentando obtener valor de algún modo y lograr tocar, pero a medio camino, su mano se detuvo y ya no quiso seguir avanzando.

Bajó la vista, "Qué diablos hacía ahí?" se preguntó tratando de hacerse entrar en razón, es decir...qué podía decirle en este momento, a esa altura de la noche...

No tenía nada en mente, solo quería volver a verle, a pesar de haber pasado casi todo el día oyendo su voz, viendo esos ojos preciosos que le miraban brillantes, a pesar de que esa sonrisa hermosa y dulce, había pasado casi toda la tarde solo ofrecida para él...aún así, algo en su cabeza le pedía más, le pedía otra vez repetir aquella sensación que experimentaba al estar tan cerca del rubio...y por eso, por esa simple razón, él, el guerrero orgulloso de la dinastía del Dragón, estaba ahí, igual que un idiota, frente a la puerta de Quatre, sin siquiera tener el valor suficiente como para golpear.

Un día precioso había sido el día entero. En la mañana, después de aquel desayuno, salieron a caminar por la ciudad, sin dirección alguna, solo caminaron, conversando de vanalidades y estupideces, que el chino, jamás pensó encontrar interesante, pero que al escuchar la armónica voz del rubio, parecían tan perfectas y valederas, que sus sentidos se concentraron de sobremanera en ellas...

Quatre reía ante las respuestas escuálidas y a veces tontas de Wufei, que tratando de parecer arrogante, y desinteresado, solo lograba probar aún más los puntos de vista del árabe...y eso, la sonrisa de Quatre, arrancaba una dulce también en el rostro siempre huraño del chino, que desviaba la vista solo para no ofrecerle en todo su esplendor al rubio, su parte humana.

En definitiva, Wufei comprendió que Quatre lograba sacar de él todo tipo de sentimientos que creyó dormidos por culpa de la guerra. Y queriéndolo o no, también debió reconocer, que aquel sentimiento que había nacido en algún momento de su convivencia con el rubio, que en tiempo atrás catalogó de gusto...ahora, junto a él, tan cerca, se había incrementado, quizás, convirtiéndose en algo que él temía de sobremanera...

El día transcurría lentamente, mientras visitaban casi todo el centro de la ciudad observando los aparadores de las grandes tiendas, y comían una y otra tontería en el camino.

Helado, que en conjunto concordaron en el sabor, golosinas y comida chatarra que de alguna forma resentiría su estómago.

Las tiendas de mascotas parecían ser las preferidas por el rubio, y Wufei tuvo que aceptar que, de aquí para allá, uno que otro animal escogido por el rubio, era precioso, sobre todo cuando lo colocaba junto a su rostro y sonreía.

En una de las cuantas vueltas por los centros comerciales y calles de la ciudad, los ojos de Quatre se abrieron de sobremanera inyectándole a sus ojos una emoción extraña...

De pronto, como si nada, Quatre tomó la mano de Wufei, haciendo que el corazón del chino saltara como si nada hasta la mismismo luna. Sus mejillas se tiñeron de rosa al sentir aquélla calidez entre sus dedos, mientras a lo lejos, casi muy lejos, logró oír la voz del rubio diciéndole que se detuvieran en aquélla esquina, y entraran al cine donde estaban proyectando una película que hacía mucho, el árabe estaba tratando de ver.

Wufei solo asintió, no pudo decir que no a aquélla sonrisa calma que parecía desarmarle sin problema. El chino nunca había disfrutado tanto una película de la cual, gracias a su poca concentración en la pantalla, solo logró ver el título.

Apartados del mundo, apartados de todos, la luz apagada, y su corazón latiendo a mil por hora...qué podría pasar en aquel momento...

La película, comenzó.

Apenas el film se proyecto en medio de las tinieblas, sus ojos negros, cubierto por el manto negro del cine, se fijaron en el rostro blanco del rubio que gracias a la luz de la pantalla, parecía más blanco y suave...y reprendiéndose a si mismo, se dio cuenta de que hubiese babeado en ese momento si no hubiese sido de que se dio cuenta que atrás de ellos, había un chico con un par de ojos verdes esmeralda que le veía intensamente...

"Trowa" susurró el chino logrando ser oído por Quatre, quien volteó y le hizo señas al latino para que se sentara con ellos...

Para mala suerte de Wufei, Trowa "El guardaespaldas de Quatre" (sobrenombre impuesto por Wufei al latino) no encontró nada mejor que hacer, que sentarse en medio de los dos...

Wufei por poco y le corta el cuello por aquélla razón, gracias al gran espíritu en los cielos, después de aquélla película logró calmarse y regresaron al internado, donde, casi enojado el chino se fue sin despedir...dejando a Quatre y Trowa sin explicaciones de la actitud del chico.

"Eso es!" sonrió Wufei al haber encontrado la excusa precisa para volver a hablar con el rubio...'una disculpa', se disculparía con el pequeño árabe de haber sido un "desconsiderado e irse sin más." (ni él mismo se creía lo que pensaba, pero...después de todo, Quatre aceptaría su excusa como valedera sin dudar)

Su mano se alzó nuevamente, y justo cuando se disponía a tocar, la puerta se abrió de improviso, dejando ante sus ojos, la figura de Trowa enfadado, saliendo del cuarto del rubio, y atrás, a un Quatre, totalmente sonrojado, tratando de detenerle.

Wufei heló en ese momento...su cabeza funcionó en un segundo mostrándole el sin fin de razones por la cual, se podía llegar a ese momento en el cual, ahora se sentía fatal...

Quatre abrió los ojos a más no poder al verle ahí de pie junto a la puerta. La cara del chino en jaque mientras el tartamudeaba aún sin saber que hacer...Por un lado Trowa diciéndole que se cuidara de algo que él jamás pensó posible, y que aún pensaba igual, y por otro, la extraña actitud que mostraba el chino en ese momento cuando sin decir nada, frunció el ceño como acusándole de un crimen que ni él mismo sabía cual y dio media vuelta para marcharse...

Por otro lado, Wufei sin saber como actuar frente a ese torbellino de sentimientos que en su pecho se mezclaron, su enojo y un extraño sentimiento de celos le invadió, y mirando fijamente al chico de ojos verdes, en desafío...

Trowa solo dijo algo indescifrable antes de que chino se marchara, que el rubio escuchó y entendió de inmediato, para luego, empujar a Wufei y salir de aquélla habitación perdiéndose en la oscuridad que reinaba a esa altura de la noche en el jardín .

El chino iba a hacer exactamente lo mismo, mas cuando dio la vuelta para marcharse, una mano suave sujetó la suya y le hizo detener...para luego oír una suave voz, casi en súplica una palabra, que como siempre, por parte del rubio, le desarmó y le obligó a actuar según lo que sus hormonas adolescentes el indicaban...

"...Quédate!"

Sus ojos se cerraron derrotado en una batalla que Quatre jamás supo que había comenzado, y dando vuelta para quedar frente al rubio, suspiró en hastío a su estupidez.

"interrumpí algo importante?" preguntó Wufei tratando de sonar normal, mas una entonación amarga salió de su boca como filo incrustándose en los sentidos del rubio.

"no...él ya se iba." respondió el rubio aún sin soltar la mano de Wufei, mientras un sonrojo aparecía en su rostro al recordar las palabras del latino con respecto a su discusión. "Venías por algo?"

"venía a..." se detuvo, su mirada quedó fija en el rostro de Quatre que como evitándole, no alzaba la vista para verle a los ojos."no...no era nada importante...mejor me voy" terminó dando vuelta para marcharse...mas la voz del rubio volvió a detenerle.

"Qué harás mañana" preguntó Quatre alzando la vista incrustando sus óvalos turquesa en los negros del chino.

"Nada, mañana es día libre¿recuerdas?"

"Si" respondió el rubio sonriendo de forma dulce.

"Entonces por qué preguntas?" inquirió el chino extrañado.

"Es que quería que me acompañaras al centro comercial, recuerda que la fiesta de la Srta. Relena es pasado mañana...hay que conseguir ropa." dijo con algo de timidez " a menos de que por alguna extraña razón estés molesto conmigo" terminó observándole con sus ojos enormemente llenos de dulzura.

Wufei no supo que responder, sobre todo, por esa mirada tan exquisita puesta sobre su figura que parecía jalea en manos del rubio, y sin poder evitar esa sensación extrañamente llena de ternura en su corazón, tiró de su mano aún sujeta por el rubio, provocando que Quatre se acercara hacia él abrazándole suavemente...

Las mejillas del rubio ardieron en ese segundo, con el corazón latiéndole a 1000x hr. sintiendo en su nariz el aroma exquisito propio del chino, y el calor, aquel calor increíblemente reconfortante y suave que...

Quatre cerró sus ojos, y en un momento de deja vû, su mente le trajo recuerdos de aquélla misión en la cual había casi muerto...

Aquel calor que le mantuvo atado a esta vida, aquélla figura que le salvó...no podía estar equivocado, este calor...ese suave y agradable calor...era el mismo de aquélla vez...

Entonces, aquellas sensaciones¿no las soñó?...aquel aroma¿no fue producto de su imaginación?...aquellas palabras...¿fueron ciertas?...

¡No, estaba nuevamente delirando, soñando despierto, aquellas palabras jamás podrían haber salido de la boca del chino...

"Winner..." dijo Wufei de pronto, haciendo temblar al rubio entre sus brazos "no vuelvas a mirarme de esa forma." susurró quedo.

"Quatre..." respondió el rubio riendo suavemente, haciendo que Wufei se separara de él y le viera a los ojos...a lo que el árabe volvió a decir "por favor...llámame Quatre...Winner es demasiado formal" sonrió.

"Quatre?" preguntó el chino alzando una ceja a lo que el rubio asintió. "esta bien."

"iremos mañana?" volvió a preguntar el rubio sonriendo de sobremanera.

Wufei puso una de sus manos en su cadera y mirando hacia el cielo, puso cara pensativa mientras movía un pie...

"¿Wufei?"

"¡Claro, por qué no..." respondió al fin el chino sonriendo y guiñándole un ojo al rubio, lo que provocó aún más el sonrojo del rubio.

"Entonces nos vemos mañana" sonrió el rubio con felicidad auténtica.

"Wi...digo, Quatre..." dijo de pronto el chino alertando nuevamente al rubio.

"si?"

"necesito irme..." dijo Wufei con un suave tinte rosa en sus mejillas...mientras el rubio parecía no entender. a lo que el chino volvió a decir... "me devuelves mi mano?"

Los ojos de Quatre se abrieron de par en par y mirando su mano, notó que en todo el rato que estuvo hablando con Wufei no le había soltado la mano, lo cual hizo de forma torpe y rápida sonriendo de forma traviesa y avergonzada...

"lo siento..." rió apenado.

"nos vemos mañana entonces...pasaré por ti a las 4...si?"

El rubio solo asintió, para que luego el chino se alejara con una mano arriba despidiéndose y perdiéndose en medio de la oscuridad.

1

2

3

Continuará...


N/A: falta de inspiración, mala escritora y una idea algo bizarra, es lo único que se necesita para que un fic como este surja...jajajajaj!

Ok, eso sonó a derrota, pero es que en verdad, ando medio bajoneada, así que esta vez, quien quiera mentarmela, que se aguante hasta el otro capítulo.

I-chan, mi buena amiga, aqui va otro capi que espero de sobremanera, no te desilucione.

Trowa, amigo, hermano del alma. En verdad te gusta esta pareja?...y que dice Q-chan al respecto?...no sea que le des ideas y ahora sea él el que quiera el 3some...jajajaj.

Gracias a aquellas que han apoyado este proyecto, y gracias por los comentarios e ideas.

Saludos a todos.

y fin.

Seiryu

(pensé que todas mis heridas habían sanado, y solo me di cuenta que, en verdad, solo apredía a vivir con el dolor de su sangrado.)

Cualquier comentario o idea, o simplemente, hacérmela de cuadritos a

OOC: Hasta aquí fueron los capítulos que ya habia publicado en la pàgina de Faby...

Desde el pròximo capítulo, son inéditos...jejeje.

gracias a todos los que han leido y apoyado este remedo de fic. por favor. cualaquier cosa pueden escribirme tambien a este mail

s e i r y u s a m aa i h o t m a i l . c o m

saludos