Hola! Vaya, vaya, cuantos reviews, que alegria! Ahora los necesito mas q nunca, q estoy liada con cierta practica para la universaidad q no me deja respirar, incluso sueño con ella!

Bueno, bueno, los reviews que he recivido del capitulo anterior se separan en dos bandos.

Bando A) Los que no creen q sea buena idea q Anne vaya a Isengard

Bando B) Los q quieren q Anne se las vea con Saruman y le diga unas cuantas cositas.

Bueno, pues leed este capitulo y me contais lo q os ha parecido!


Cap 16: La maquiavélica mente del principe psicópata

A la mañana siguiente Anne estaba vestida y preparada para la partida antes del amanecer. En realidad, no había dormido gran cosa a causa de los nervios que sentía por el viaje, así que preparó sus cosas y se sentó a los pies de la cama meditando si estaba tomando la decisión adecuada. Poco antes del amanecer, Aragorn llamó a su puerta, Gandalf le había enviado a despertarla, y quedó bastante sorprendido al ver que la chica ya estaba lista.

"Estas segura de que quieres venir?"- le preguntó. -"Es un camino largo y no sabemos lo que encontraremos."- añadió con preocupación en su voz.

Anne asintió. -"Lo sé, pero aun así quiero ir. Es por su culpa que estoy metida en este lío. Al menos tengo derecho a verle la cara, no?"- dijo muy seria. Sus ojos castaños, fijos en los de Aragorn, brillaban con determinación. El exmontaraz comprendió que la joven había tomado su decisión y que no podría convencerla de lo contrario.

"Ese es el único motivo?"-

"Bueno..."- medio sonrió Anne. -"También estoy un poco harta de estar aquí encerrada"-

Aragorn sonrió. –"En la entrada principal en media hora."-

Aragorn abandonó la habitación de la joven y se fue hacia el despacho de Lord Elrond, donde el medio elfo y Gandalf conversaban acerca del mejor camino a seguir. Al poco rato, se les unieron Legolas y Guimli, quienes formarían parte de la guardia que les acompañaría hasta el Vado del Bruinen, y después se pasarían una semana fuera, inspeccionando los alrededores de Rivendell. Entre todos decidieron los detalles del viaje, excepto Legolas, quien no abrió la boca para nada, y se limitó a mirar a los presentes en silencio durante toda la reunión.

–"Ocurre algo?"- le preguntó Aragorn, al notar su comportamiento.

–"No me parece buena idea."-

Aragorn no necesitó más para saber que era lo que a su amigo no le parecía buena idea, al fin y al cabo, a él tampoco, pero había sido decisión de Gandalf, ellos no podían impedirlo.

–"A tomado su decisión y Gandalf la apoya. No podemos hacer nada."- le dijo, al ver la cara de preocupación del elfo. Quien se limitó a mirarle unos segundos antes de salir del despacho.

'Por que quiere venir? Es que no comprende lo peligroso que puede llegar a ser!... Va a tener que entrar en razón ... ' Caminó con rapidez hacia la habitación de Anne y entró sin llamar a la puerta.

Anne le miró sorprendida. –"Es que no sabes llamar? podría haber estado desnuda o algo ... "- Legolas se había parado a unos pasos de ella y la miraba muy serio. 'A este que le pasa?'

–"No vas a venir."- empezó Legolas.

–"No es decisión tuya."- le dijo Anne con tranquilidad. 'Así que es esto, tendría que haberlo supuesto.' –"Tengo permiso de Gandalf, no necesito el tuyo."-

–"Creo que no comprendes el peligro de este viaje. No entiendo por que quieres ir."-

–"Por culpa de Saruman estoy aquí."- empezó Anne, su castaña mirada fija en la del príncipe. –"Quiero verle, quiero saber porque."- y suavizando su mirada, añadió. –"Esperaba que lo entendieras."-

Legolas dudó unos segundos al ver la convicción de la chica, pero había ido a convencerla de quedarse y eso es lo que iba a hacer. –"Eso es cosa de Gandalf, tu debes quedarte aquí."-

–"Ni lo sueñes!"- Anne se estaba empezando a enfadar.

–"Es peligroso, o es que no aprendiste nada de lo que ocurrió en tu casa? Es que no pasaste miedo?"-

Anne puso cara de dolor, eso había sido un golpe bajo. Por supuesto que había pasado miedo, y él lo sabía. –"Pienso ir, y nada de lo que digas va a hacerme cambiar de ... "- Se quedó paralizada cuando Legolas se acercó a ella y la abrazó con ternura. Anne estaba convencida de que el elfo había ido para discutir y se quedó helada al verse envuelta en ese cálido abrazo. Legolas la rodeó con sus brazos, aprisionándola contra él, mientras que la chica apoyaba sus manos contra el pecho del elfo, sin fuerzas para apartarle.

–"Legolas?"- susurró Anne.

–"Yo sí que pasé miedo."- susurró Legolas en su oído. –"Cuando vi el destrozo que había en tu casa, me temí lo peor. Creí que nunca más volvería a verte."- Mientras hablaba, Legolas acariciaba suavemente el cabello de Anne, quien no podía evitar temblar con cada caricia, ni pensar con claridad. Todos sus sentidos estaban centrados en esa nueva sensación.

Legolas se apartó un poco, pero sin llegar a soltarla. De manera que quedaron cara a cara. Sus ojos fijos en los de ella. Casi involuntariamente comenzó a acariciarle la mejilla con ternura. Su piel era tan suave, recorrió con sus dedos su naricita, la mejilla, la barbilla, los labios... Y, sin poderlo evitar, centró su atención en ellos. Anne, por su parte, estaba completamente perdida en esos ojos azules, la mirada del elfo la tenía hipnotizada y sus caricias le provocaban pequeños escalofríos que recorrían su espalda. Ni siquiera se percató cuando Legolas empezó a inclinarse hacia ella.

'Este no era el plan!' Legolas se quedó quieto, a apenas unos milímetros de su destino. 'Si sigues después te odiará!' continuó la voz de su cabeza. Así que, guardándose las ganas, deslizó suavemente su mano por la espalda de la chica hasta su cadera, y tras alcanzar su objetivo...

"Aaaah!"- gritó Anne y miró a su alrededor sin acabar de comprender lo que ocurría. Legolas la había lanzado sobre la cama y, rápidamente, se dirigía hacia la puerta. -"Pero que haces!"-

"Como he dicho, te quedas!"- dijo Legolas sin girarse, a la vez que alzaba una de sus manos para mostrarle un objeto brillante.

'Joder!' Anne se palpó los bolsillos. 'Es mi llave!' Enseguida comprendió lo que el elfo iba a hacer. Se lanzó hacia la puerta, pero Legolas fue más rápido, y antes de que pudiera alcanzarla, ya la había cerrado. 'Me ha encerrado!'

Anne tiró de la puerta con fuerza. -"Elfo estúpido! Quien te has creído que eres! No puedes encerrarme aquí!"- gritó, pero Legolas siguió su camino. -"Eh! Legolas! Abre la puerta!"- siguió tirando de ella y dándole golpes y patadas durante un buen rato, hasta que al final, se rindió. 'Estúpido elfo! Y yo que creía que me iba a... que tonta, solo lo ha hecho para quitarme la llave' Se dejó caer al suelo. 'Quien es él para impedirme que vaya! Tengo derecho a ir! ... Por que me ha hecho esto? Con lo bien que lo pasamos ayer...' Empezó a llorar a causa de la impotencia que sentía, tanto por no poder salir de esa habitación como por lo que acababa de NO ocurrir.


Cuando Legolas llegó a la puerta principal de Rivendell, todos estaban ya preparados. Así que, tras montar su caballo y ayudar a Guimli a subir, dijo: -"Nos vamos ya?"-

"Aun falta Anne."- dijo Gandalf. -"Iré a buscarla."-

"No será necesario. Ella no viene."- comentó el elfo.

Gandalf lo miró sorprendido. -"Como que no viene?"-

"Acabo de hablar con ella y la he convencido para que se quede."-

Gandalf miró de nuevo hacia dentro del palacio, extrañado. -"Ayer parecía muy convencida de querer venir..."- y, aunque sospechando que no se quedaba tan convencida como afirmaba el príncipe, les indicó que emprendieran la marcha. Él también creía que era mejor que se quedase. Así que, con un problema menos sobre el que pensar, salió de Rivendell.


Anne lloró durante un rato y, al final, se quedó sin lágrimas. No era una persona que llorase a menudo, así que se sorprendió que lo ocurrido hubiese causado tal impacto en ella. 'Estúpido elfo!' El llanto empezó a transformarse en mal humor. 'Mira que encerrarme en la habitación!' El mal humor en rabia. 'Y fingir que iba a besarme!'

'Pero si te morías de ganas!'

'No'

'Si'

'No'

'Entonces por que no te apartaste?'

'Cállate! Tu de que bando estas!... Estúpido elfo! Me esta volviendo loca! Ahora incluso hablo sola!' Y, por último, la rabia en ira. 'Cuando vuelva le voy a ... ' Centró su mirada en la cerradura de su puerta y, sin ser consciente, también centró toda la ira que guardaba dentro. 'Le voy a ...'

CRASH

"Ups!"- Anne se quedó perpleja cuando vio la puerta volar por los aires. 'Puedo hacer esto?... Que caña!'


Gandalf volvió su vista hacia Rivendell, había notado un gran poder durante unos segundos y sonrió al comprender a que se debía. 'Así que el príncipe la había convencido, eh?'

Guimli charlaba animadamente desde detrás de Legolas con varios elfos y Aragorn, y aunque él creía que también con Legolas, éste estaba perdido en sus pensamientos. Estaba convencido de que Anne debía quedarse en la ciudad, pero no sabía si había hecho lo correcto. Fue a su habitación para convencerla, pero al ver lo segura que estaba de su decisión se asustó, no acababa de comprender porque se ponía en peligro ella misma.


"Se puede saber que ha ocurrido aquí?"- preguntó un perplejo Lord Elrond a Anne cuando vio las virutas de madera que minutos antes formaban su puerta.

"La puerta ha explotado"- 'Es que no es obvio' Dijo Anne con voz inocente mientras se ponía en pie.

"Como? Has sido tú?"- preguntó el medio elfo, aún sin comprender.

"No... Si... Bueno, en parte..."- Lord Elrond la miraba esperando una explicación un poco más elaborada que un par de monosílabos. -"Ha sido culpa de Legolas! Me ha encerrado en mi habitación!"- Tras el shock de ver la puerta explotar, la ira hacía Legolas volvía a salir.

"Entiendo"- dijo Lord Elrond, mirándola con media sonrisa. -"Intenta no sobresaltarte tanto. Aun no controlas tu magia."-

Y, acto seguido, la obligó a seguirle hasta su despacho, ya que, como había decidido quedarse, tenían que seguir con las clases. 'Clases noooo!... La esperanza de vida de cierto elfo disminuye por momentos!'


El día pasó rápido para los viajeros y al anochecer llegaron al Vado. Decidieron pasar la noche juntos y separarse a la mañana siguiente. Gandalf, Aragorn y los elfos de Lorien cruzarían el Bruinen y se dirigirían al sur, mientras que los guardias de Rivendell y Legolas y Guimli rastrearían los límites del bosque en busca de orcos.

Aragorn estaba sentado ante el fuego, fumando su pipa, mientras que Legolas se encontraba en pie mirando al horizonte. Les había tocado hacer la primera de las tres guardias que habían decidido para esa noche. El rey de Gondor miraba a su amigo pensativo, el elfo no había hablado en todo el día, y, aunque era bastante reservado por naturaleza, no dejaba de parecerle raro. Legolas le miró al sentirse observado. Y, Aragorn al verse descubierto, le hizo un gesto para que se sentase a su lado.

"Mañana nuestros caminos volverán separarse."- comentó Aragorn. Legolas asintió. –"Y espero que no tardemos otros ocho años en reencontrarnos."- Legolas volvió a asentir. El exmontaraz frunció el ceño y miró a su amigo preocupado. –"Tan grave es?"-

Legolas miró a Aragorn sorprendido por su pregunta. –"No comprendo."-

–"Lo que te ocurre. Sea lo que sea, sabes que puedes contar conmigo, verdad?"-

El elfo miró a su amigo durante unos segundos, y al final se decidió a hablar. –"La encerré en su habitación."- dijo suavemente, la culpa pintada en su cara.

Aragorn abrió los ojos como platos. –"Que hiciste que?"-

–"No quería entrar en razón."- se defendió el elfo.

–"Era su decisión no la tuya, debiste respetarla."- dijo Aragorn, ahora más serio.

Aragorn lo miraba sorprendido, nunca se hubiese esperado esa reacción de Legolas. Antes de conocer a Anne , solo lo había visto discutir con Guimli, y nunca le habría creído capaz de perder los nervios de tal manera como para encerrar a alguien en una habitación. Pero por otro lado, Anne estaba muy decidida a ir, ya había pensado en la posibilidad de que el elfo no la hubiese convencido con palabras.

–"Pero eso no es lo peor"- añadió el elfo.

–"Y que es eso tan horrible que has hecho?"-

Legolas clavó la vista en el fuego. –"Estuve a punto de besarla"- murmuró.

Aragorn tardó en comprender lo que su amigo acababa de decir.

–"No fui con esa intención... No sé lo que me pasó..."- seguía el elfo.

–"No lo sabes?"- preguntó Aragorn medio sonriendo a un desconcertado elfo.

Legolas lo miró pensativo, y, tras unos segundos, Aragorn volvió a sonreír al ver, en la mirada del elfo, que éste sabía exactamente que era lo que le ocurría. –"Pero aproveché el momento para quitarle la llave, así que... ella debe odiarme."-

Legolas se alejó del fuego y volvió a observar el horizonte, su vista fija en dirección a Rivendell, igual que sus pensamientos. Aragorn lo miró preocupado un momento. Desde que conocía a Legolas, nunca le había visto interesado en ninguna dama, así que no dejaba de ser inaudito verlo en ese estado. 'Espero que Anne comprenda los motivos de Legolas' Aunque sabía que la chica iba a estar muy disgustada con el elfo.


Los siguientes días pasaron rápidos, Anne seguía ocupada con sus clases y, aunque Gandalf no estaba, tenía que seguir practicando magia. Así que se pasaba horas en la biblioteca sola leyendo enormes libros que Lord Elrond, muy amablemente, seleccionaba para ella. 'Estúpidos libros!... Estúpido elfo!'. El medio elfo había notado el cambio en la actitud de la chica, Anne no se concentraba en las clases, parecía pensar sobre otras cosas, lo que era cierto, ya que mientras él hablaba, ella pensaba cosas como 'Estúpido elfo!... Cuando vuelva le haré explotar como a la puerta!'. Lord Elrond también sospechaba que durante las largas horas que pasaba en la biblioteca, su concentración era la misma, es decir, ninguna. Así que al final le dio permiso para ir a practicar algunos hechizos a los jardines esperando que, de esa manera, consiguiese centrarse un poco.

Anne paseaba por los jardines, cargando los libros de hechizos que debía practicar, hasta el claro frente a la cascada, donde los dejaba caer al suelo sin miramientos y, acto seguido, se dejaba caer ella. Casi sin ganas, probaba de hacer algún hechizo, pero desde que Gandalf se había ido que no conseguía que ninguno le saliera bien. 'No lo conseguiré nunca... Soy un mago patético!' pensó, mientras se tendía sobre el césped, desanimada. 'Todo esto es culpa de ese estúpido...'

Sus alegres pensamientos fueron interrumpidos por cierto caballito que le acababa de dar un buen lametazo en la cara.

"Eh! Que no soy comida."- dijo molesta con Ambar, mientras apartaba la cabeza del caballo de su cara.

"Que tal si cabalgamos hasta le llanura que hay más allá del río?"- le preguntó Veryan desde lo alto de su corcel.

Anne le miró sorprendida. –"Llegas pronto, aun no es la hora de nuestra clase."-

"Para lo que estabas haciendo..."- le respondió Veryan sonriente.

Anne le miró malhumorada. -"No tengo ganas. Creo que hoy paso."-

"Monta. Te sentará bien. Llevas unos días muy dispersa."- le contestó el elfo con tono autoritario que no daba opción a replicar.

'Estos elfos son odiosos cuando se ponen en plan mandón!' pensó Anne mientras montaba a Ambar y intentaba seguir a Veryan, algo bastante complicado ya que la yegua parecía más interesada en olisquear un matorral cercano que en hacer caso a la chica.

"Eh! Bicho-negro-desobediente! Te importaría seguir a Silencioso?"-

–"Quizás si dejases de llamarla de esa manera y intentases ser más amable, conseguirías que te hiciese caso."-

–"Lo dudo bastante. El bicho me odia."-

Veryan se acerco a ellas y, tras susurrar suaves palabras en élfico a Ambar, ésta empezó a caminar. Trotaron un rato uno al lado del otro sin intercambiar palabra. Veryan la observaba preocupado, desde hacía unos días Anne siempre estaba de mal humor. Llegaron a un bonito prado donde pararon a descansar.

"Que te ocurre?"- le preguntó Veryan mientras se sentaba a su lado -"Llevas unos días muy extraña."-

"Nada"- fue la extensa respuesta que recibió.

"Anne, mírame."- Ésta le miró sin muchas ganas y con cara de 'que quieres pesado!'. -"Que ocurre?"- Veryan podía llegar a ser muy paciente, así que Anne estaba convencida que el elfo era capaz de tenerla toda la tarde ahí repitiendo una y otra vez la misma pregunta hasta obtener la respuesta que quería.

"Ya te he dicho que nada."- volvió a contestar Anne, molesta.

"Y por que estas de tan mal humor?"-

"Por nada."- Veryan podía llegar a ser muy paciente, pero Anne era bastante cabezota, así que...

"Algo ha debido ocurrir."- volvía a intentarlo el elfo. -"Estas disgustada por algo?"-

"Nop"-

"Por alguien?"- Veryan sonrió para si cuando vio a Anne centrar la vista en un árbol cercano y mirarlo con odio. -"Un elfo?"-

"Si te digo que sí, que vas a hacer? Vas a nombrar a todos los elfos de esta ciudad hasta que aciertes?"- le preguntó Anne, ya harta de tanta preguntita.

"Creo ser capaz de acertar a la primera"- se limitó a contestar Veryan.

Anne le miró como retándole, 'Vamos a verlo!'

"Es por el príncipe Legolas"- dijo el elfo con sencillez. -"Estoy en lo cierto?"-

La pregunta no era necesaria, ya que en cuanto Anne escuchó el nombre maldito, empezó a mirar a su alrededor enfadada y murmurar cosas como 'Estupido elfo!... Voy a hacerte explotar!'

"Se puede saber que te ha hecho el príncipe para merecer tal odio?"-

"El muy... me encerró en mi habitación! Por eso no pude irme con Gandalf!"-

"Y por que crees que hizo eso?"-

"Porque se divierte torturándome?"- le preguntó Anne con sarcasmo. -"Y yo que se! No me pidas que entienda la maquiavélica mente del príncipe psicópata!"-

"Anne, piénsalo bien..."- intentó tranquilizarla Veryan. -"... y dime, por que crees que hizo eso?"-

Anne le miró un momento y después suspiró. -"Mmm, para que no fuera a Isengard?"-

Veryan asintió. -"Y por que no querría que fueras a Isengard?"- siguió.

Anne volvió a suspirar. -"Porque cree que aquí estaré a salvo?"- 'Este tío tiene estudios de psicología o que?'

Veryan volvió a asentir. -"Y por que crees que él quiere que estés a salvo?"-

Anne lo miró pensativa. -"Mmm"- 'Por que? Por que?... Puede ser que...' -"Porque se preocupa por mi?"-

Veryan asintió sonriendo. -"Lo ves. No ha sido tan difícil entender sus motivos"-

"Pero me encerró en mi habitación!"-

"Todos sabemos que es casi imposible convencerte sin pasar horas discutiendo contigo."- dijo el elfo medio riendo mientras Anne le miraba enfadada.

"Pero fingió que iba a besarme para quitarme la llave!"- 'Ups, creo que no tendría que haber dicho eso...'

Veryan alzó una ceja. -"Que el príncipe hizo que?"-

Anne se estaba poniendo colorada. -"Nada, nada."-

Veryan rió al ver a la chica tan abochornada por la situación. -"Estas segura que estas enfadada por que te encerró? O quizás por que..."-

"Cállate!"- Anne le lanzó una mirada fulminante, mientras Veryan escondía su sonrisa de triunfo por haber descubierto el verdadero motivo del estado de ánimo de su joven alumna.


Bueno, parece que los del Bando A tienen un aliado en el fic que le ha impedido a Anne ir a Isengard, jajaja. Si bien a nadie le parecia una buena idea q la chica fuera, legolas ha sido el único q se ha impuesto! (por decirlo de alguna manera).

Entonces, ahora la pregunta es :

Creeis que Anne ha de perdonar a Legolas?

a) No, nunca.

b) No, es más, deberia tirarle a la via del tren y liarse con Guimli.

c) No, es más, deberia tirarle a la via del tren y, ya puestos tirar tambien a Arwen, liarse con Aragorn y ser la nueva reina de gondor

d) Si, claro, lo ha hecho para protegerla.

e) Si, pero el elfo va a tener q arrastrarse y humillarse publicamente.

f) Es Legolas quien deberia enfadarse con ella por cabezota.

g) ?

Hasta pronto! ;p