Capítulo 3 : Rescate.

10 Febrero, 2019. 10:25 PM.

Ambos viajaban totalmente en silencio mientras el castaño conducía el auto hasta la dirección que la base les habia indicado.

- Vamos Ishida, puedes hablar con total libertad. - dijo Tai mientras conducía. - después de todo, aceptaste nuestra propuesta hace unos días y se podría decir que ahora somos un equipo. - sin embargo, el rubio seguía sin decir palabra alguna. - Bien, se que esto por el momento parecerá bastante raro pero no te preocupes, mis ganas de matarte desaparecieron hace años.

- ¿Eh? ¿Tus ganas de matarme? - preguntó Matt mirándolo, hablando por primera vez en todo el viaje.

- Tengo que admitir que tras la luna de sangre aun sentia ganas de ir por ti y destrozarte para después enterarte en medio del bosque. - dijo Yagami de una forma tan tranquila que provocó que Matt se asustará. - pero Yamaki ya nos había quitado los poderes a mi y a los demás cazadores y no hubiera podido hacer nada, lo mas posible es que tu me hubieras terminado arrancando la cabeza... Entonces, simplemente el tiempo paso, seguí con esa vida normal que es tan sobrevalorada y olvidé el odio irracional que sentía hacia ti, tu raza y cualquier otro ser sobrenatural.

Matt miró a Tai que seguía conduciendo sin dejar de mirar el camino, no parecía mentir de ninguna manera, pero de todas formas no se iba a confiar de la misma manera que lo hizo hace 5 años.

- Es perfectamente natural que no confíes un carajo en mi. - volvió a decir el castaño. - recuerda que tengo mis poderes de vuelta, puedo leer tu mente.

- Creo que no tiene caso no decirte nada ni ocultarte nada. - suspiró Matt resignado.

- Igual no lo puedo hacer todo el tiempo, solo en ciertos momentos y creeme que es algo que realmente duele, no por tener poderes quiere decir que no sintamos dolor.

Los dos volvieron a estar callados, todavía faltaba para llegar a destino.

- Y entonces... ¿Como está Kari? - preguntó Matt.

- ¿Kari? Muy bien por suerte. - sonrió Tai. - está trabajando de fotografa y hace poco se mudó, ya empezó a vivir sola.

- ¿De veras? Que casualidad, hace tan solo unos días TK tambien se mudó, no me dijo demasiado pero al parecer se está acomodando bien. - dijo Matt sorprendido.

- Ellos si realmente merecen esa vida normal. - dijo Tai y Matt hizo un gesto de afirmación. - hacen mucho que los dos no se ven, de todas formas tampoco se recuerdan por borrarles la memoria de todos los sucesos.

- Esta ciudad es grande. - comentó el rubio. - no creo que algun día se vuelvan a encontrar.

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10:30 PM.

Tras haberse olvidado de comprar mas víveres para la semana, TK recién bajaba de su moto con varias bolsas del supermercado y comenzó a subir las escaleras para poder llegar a su reciente nuevo apartamento.

Cuando estaba a punto de colocar la llave en su puerta para entrar, una naranja se cayó de una de las bolsas y comenzó a caer por las escaleras.

El rubio corrió como loco para tratar de agarrarla, lo que provocó que se chocara con alguien en las escaleras y la naranja terminó en el suelo.

- Lo siento, estaba... ¿Kari?

- ¿TK? Nos volvemos a encontrar. - rió la castaña y miro hacia atrás al ver la naranja, que ahora estaba siendo robada por un perro que al parecer era de otro vecino del edificio. - creo que acabas de perder tu naranja, ¿Que estas haciendo a esta hora?

- Recién vengo de comprar por lo que podrás ver. - sonrió el rubio. - ¿Y tu?

- Iba a salir a cenar con unas amigas, pero se canceló todo a ultima hora por, tu sabes, cosas de mujeres.

- Emmm no, no se. - rió TK. - de todas formas, ya que tus amigas te decepcionaron y yo compré comida, ¿No quieres venir a mi apartamento a comer algo?

- ¿Una propuesta de tu parte tan rápido? - sonrió Kari. - No lo se, puedes que seas un violador que quiere aprovecharse de una inocente joven como yo.

- Hey, hey, hey, te juro que soy una persona decente. - se quejó TK.

- Solo sube, y muestrame que sabes cocinar que tengo hambre.

- Bueno, pero no vayas a quejarte de lo que cocino después.

(-)

10: 37 PM.

Unos minutos después, Tai y Matt habian llegado a la dirección que les habían indicado, se trataba de una fábrica abandonada.

- ¿Estará aquí? - preguntó Matt.

- Sospechamos que en este lugar se queda antes de que empiece sus matanzas nocturnas. - respondió el castaño cargando su arma y dándole tambien una al rubio. - por si acaso nomas, supongo que aun sabes transformarte.

- No lo hago desde la luna de sangre, pero claro que no lo he olvidado, ¿Tus compañeros vendrán?

- Tienen que estar por llegar en cualquier momento. - respondió Tai, justo en ese momento un auto negro paró en el lugar y del el bajaron Izzy, Joe y Sora, que quedó mirándose con Matt. - justo a tiempo están aquí chicos, habrá tiempo para miradas mas adelante Sora.

Los cinco con mucho cuidado, entraron en esa fabrica después de que Izzy abrió el candado de la puerta.

- ¿Y como has estado? - preguntó Sora a Matt, mientras todos caminaban inspeccionando esa fábrica.

- Bien, no me puedo quejar. - respondió el rubio con evidente distancia, él no la odiaba, pero tenía sentimientos encontrados desde la ultima vez.

- Ishida, Takenouchi, el trabajo no es lugar para hablar cosas personales, eso dejemoslo para después. - dijo el castaño escuchando todo.

En ese instante, escucharon a alguien correr a mucha velocidad alrededor de ellos.

- Si, claramente ya sabe que estamos aquí, tengan mucho cuidado, usen toda la fuerza que gusten, lo necesitamos vivo aun al D-44. - indicó el castaño y todos afirmaron.

Cuando Matt se distrajo, El D-44 apareció sorpresivamente y se abalanzó contra él.

Los demás cazadores estaban a punto de ir a ayudarlo pero el D-44 gritó de una forma tan fuerte creando una onda expansiva provocando que todos ellos salieran volando por los aires.

Viendo que se quedaba sin opción, Matt decidió transformarse para liberarse del agarre del D-44 pero no lo lograba.

"¿Que sucede? No puedo transformarme"

Uno de los brazos de Ken se transformó en uno de lobo mientras que su boca mostraba colmillos de vampiro y el emblema de la amabilidad de su cuello brillaba intensamente.

El D-44 seguía sin soltar a Matt y estaba a punto de atacar, hasta que alguien atravesó su pecho de un puñetazo y así el rubio logró soltarse.

- ¿Mimi? - se sorprendió al ver quien era el que habia atacado al D-44.

Inmediatamente, Takuya apareció junto a Rika y varios vampiros y hombres lobo mas a atacar juntos a Ken.

Tai y los demás cazadores tambien se sumaron nuevamente al ataque.

El D-44 se encontraba bastante dañado por todos los ataques recibidos pero aun seguía luchando con mucha fuerza y nadie podía detenerlo de ninguna forma, su poder sobrepasaba al de todas las personas que habia ahi, tanto cazadores como seres sobrenaturales.

- No hay forma alguna, es imposible. - dijo Joe.

- Claro que la hay, Izzy, pasame tu nuevo invento. - ordenó Tai.

- Pero aun no esta del todo...

- ¡Dije que me lo pases! - gritó el castaño y el pelirrojo obedeció pasándole una especie de control remoto un pequeño objeto gris cuadrado.

- Muy bien MachineDramon, veamos como funcionas.- sonrió Tai lanzando el objeto gris al suelo, que comenzó a crecer hasta tener un enorme tamaño y tener la forma de un dragón robotico con cañones en su espalda que comenzó a cargar con una gran energía.

- ¿Que demonios es eso...? - dijo Matt viendo a esa criatura.

- ¡Todos a un lado! ¡Ahora! - gritó Mimi tomando a Matt y todos se alejaron de Ken para que esté solo él en el rango de alcance de MachineDramon.

La criatura disparó sus cañones, dándole a Ken de forma directa y causando una explosión de la cual los demás lograron cubrirse.

Una vez el humo se disipo, Tai se fijo que el D-44 no se encontraba en el lugar, pero no porque hubiera sido destruido sino porque había logrado escapar.

- No hay que parar de buscar. - dijo Tai. - debió haber quedado muy malherido... Es fuerte, muy fuerte pero MachineDramon tambien lo es.

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11 de febrero, 12:09 AM.

Debido a que tenía que estudiar, además de que Sora tambien se encontraba ocupada aunque no dijo el motivo, Yolei canceló la reunión que iba a hacer junto a ella y Kari.

"Ya habrá otra oportunidad para hacerlo" pensó mientras seguía estudiando y posiblemente lo iba a seguir haciéndolo durante toda la noche

Se encontraba leyendo un libro bastante largo hasta que escuchó un ruido proveniente de su jardín. Entró en pánico ya que como estaba totalmente sola, alguien pudo haberse metido a su casa.

Tomó un palo de cocina y con mucha valentía, salió al Jardín preparada para lo que sea, pero lo soltó al ver de que se trataba.

Un joven peliazul muy malherido estaba tirado en el medio del jardín.

Estaba sumamente confundida, pero sin perder tiempo, decidió ayudar al joven.

Gracias por leer, espero que les haya gustado y no se olviden dejar su opinión.

Una cosa para decir, si hay alguien nuevo por acá, seria muy ideal que leyera la primera parte de esta historia que se encuentra en mi perfil así están mas al tanto de las cosas que pasaron antes, aunque si quieren seguir leyendo asi nomas adelante (?

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Nuevamente gracias, nosssss vemossss.