Capítulo 18 : Los Elegidos.
6 de marzo, 2019. 11:57 AM.
- Oye Kari, ¿Puedes finjir al menos que me estas prestando atención? - se quejaba Yolei al notar como su amiga castaña estaba mirando para otro lado mientras ellas estaban hablando.
Por obvias razones, la chica de pelo violeta no recordaba nada del asunto con Ken y eso hacia sentir muy mal a Kari, ya que odiaba no contarle cosas a su mejor amiga pero era lo mejor para mantenerla protegida.
Desde la situación en el aeropuerto, Kari había tratado de actuar de lo más normal ante Yolei, pero era algo que le costaba bastante y hasta a veces se notaba que estaba ocultando algo.
- Perdona Yolei. - se disculpó Kari. - vengo teniendo unos cuantos días demasiados pero demasiados locos. - dijo para después terminar de beber ese jugo de naranja que había pedido en el bar donde ahora se encontraban.
- Pero para eso están las amigas, puedes contarme lo que está sucediendo. - sonrió Yolei.
Antes de que la castaña hablara, su celular sonó, se trataba de Tai.
Kari se puso de pie y se alejó de Yolei para poder hablar de forma mas privada hasta que luego de unos segundos, volvió con su amiga pero esta vez para despedirse.
- Perdón, surgió un imprevisto en el trabajo y tengo que irme, pero pondremos juntarnos otra vez mañana si quieres, ¿Si? - sonrió la castaña para después marcharse rápidamente.
Eran ya demasiadas actitudes raras de parte de Kari y Yolei no podía no darse cuenta, por lo que finalmente decidió con mucha precaución seguir a su mejor amiga y por fin descubrir que estaba pasando.
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12:34 PM.
- Entonces, ¿Que es esa cosa que está ahí? - preguntó Sora viendo como Izzy y Joe trabajaban en el Digimundo.
- Como ya hemos dicho, el Digimundo está creciendo y generando su propia naturaleza. - explicó el pelirrojo viendo en la pantalla como todos los digimons que eran sus compañeros y otros que también habían sido creados recorrían ese Digimundo y lo disfrutaban. - generó sus propios metales, fuegos y hasta el mar, que es lo que están viendo ahora.
- ¿Pero por qué hay dos mares? - preguntó Mimi, la vampira hibrida estaba confundida ya que veía uno "normal" y otro completamente oscuro.
- Todo esto está hecho de datos, por lo que al igual que en una computadora, se necesita una papelera de reciclaje. - volvió a decir Izzy.
- Y ese mar oscuro sería aquella papelera de reciclaje. - dijo Joe.
En el momento que Tai llegó junto a ellos, también Kari había llegado a la base.
Un par de minutos después, eran Matt y TK los que habían llegado.
- Muy bien, estamos todos ahora. - sonrió Tai. - parecemos un grupo de jóvenes elegidos o algo así.
- ¿Que pasó Tai? Me llamaste de forma muy urgente. - dijo su hermana.
- A nosostros también, sobre todo a TK. - dijo Matt.
- Ya que estamos aquí todos los cazadores de está región, incluyendo a los cazadores híbridos. - dijo el castaño refiriéndose a Matt, TK y Mimi. - creo que ya es el momento de que todos tengamos nuestros compañeros así estamos completos, sacalos de ahí Izzy.
Tras un par de tecleo en la computadora por parte del pelirrojo, dos pequeñas figuras luminosas que antes estaban en el Digimundo aparecieron frente a TK y Kari.
La criatura que apareció frente a la castaña era un pequeño gato blanco parado sobre sus dos patas.
- Ella es Gatomon, Kari. - dijo Tai. - como tienes el emblema de la bondad de los cazadores, tu Digimon compañero será éste, ya que es el que mas características similares a ti tiene.
- Wow... - dijo Kari sorprendida sin dejar de ver a la pequeña criatura digital con forma felina.
Mientras, frente a TK habia también una criatura pequeña alada que tenía la forma de algo parecido a una ¿Papa?
- El es Patamon, así es, la forma infantil de Amgemon que anteriormente pudieron ver. - dijo Tai. - y como tu TK posees el emblema de la esperanza, será tu Digimon.
El rubio menor no sabía como reaccionar ante la criatura, pero está no tardó en sentarse rápidamente sobre su cabeza.
- Al parecer le caiste bien. - río Kari.
- ¿Y se supone que me podría fusionar con él? De la misma forma que Matt lo hizo con el suyo. - cuestionó TK no dejando de mirar para arriba ya que Patamom se había recostado por completo en su cabeza y ahora estaba durmiendo.
- Creo que de eso ya te tienes que encargar tu mismo. - dijo Tai. - lo mismo para ti Mimi.
- No creo que sea mucho problema. - sonrió la híbrida de pelo rosa.
- Es muy importante que actuemos bien como un equipo en estos momentos, con el D-44 en nuestro control, estamos bajo peligro de forma constante ya que Kurata y los suyos podrían atacar en cualquier momento aunque tengamos nosotros la ventaja ahora, siempre es de vital importancia que nos contemos todo lo que pasa. - dijo Tai mirando está vez claramente a Izzy, que simplemente lo miró confundido.
- Entonces... ¿Te estás autoproclamando el líder de este "equipo"? - se acercó Matt. - es lo que haces creer con esas palabras.
- Creí que ya lo era. - sonrió el castaño. - soy el cazador con más antigüedad aquí, el más fuerte, tengo el Digimon más cool de todos, no hace falta decir que también soy el más hermoso de aquí. - dijo mientras rodeaba con un brazo a Sora pero la chica se lo quitaba de encima.
- ¿Quien dice que eres el más fuerte? - preguntó Mimi. - soy una hibrida natural con los mejores genes tanto de vampiro y cazadora, ademas tienes a dos híbridos mas aquí entre licántropo y cazador. - dijo señalando a los hermanos rubios. - inclusive Izzy y Joe con lo inteligentes que son podrían ser lideres también.
- Al fin un cumplido para mi. - dijo Joe acomodando sus anteojos mientras observaba por la computadora como Gomamon nadaba en el mar del Digimundo.
- Todo muy bien con las características que cada uno de ustedes tiene. - los calmó Tai. - pero ninguno de ustedes tiene esto.
El castaño abrió uno de los cajones que había en la base, de donde sacó unos lentes de aviador color azul y se los puso en la cabeza sin que quedarán en sus ojos, mejor dicho arriba de su frente.
- ¿Unos lentes ridículos? - preguntó Matt en tono bromista.
- ¿Con que ya te crees con el derecho de hacer bromas Ishida?
En ese momento, la alarma de la base de los cazadores comenzó a sonar, al parecer alguien había logrado irrumpir en la base.
- Que los Digimons de cada uno se mantengan a nuestro lado. - indicó Tai. - no sabemos aún que es lo que puede pasar.
Una de las puertas se abrió y de ahí varios soldados comandados por Kaede aparecieron controlando a una chica que estaba tratando de escapar, Yamaki también hizo acto de aparición en la sala.
- ¿Que es lo que sucede? - exclamó el hombre con su encendor pero aún estando en calma.
- Encontramos a esta chica, de alguna forma logró entrar aquí. - dijo Samantha con Kaede a su lado, ambos sostenían a esa chica.
- ¡Lo siento! ¡No me hagan nada! ¡Yo solo...
- ¿Yolei? - se acercó Kari al reconocer la voz de su amiga pelimorada. - ¿Pero... que haces aquí?
- Cielos Kari, tu amiga si que es realmente escurridiza. - suspiró Tai con los brazos cruzados.
Gracias por leer, espero que les haya gustado.
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Nuevamente gracias, nossss vemossss.
