Disclaimer: Ruroni Kenshin es de Nobuhiro Watsuki y esta historia esta basada en el manga de Akuma de Sorou.

Cursiva: "pensamientos del personaje"

Aclarado todo comencemos con la historia

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Mi adorable Pecado

.-Epilogo-.

Se ponía notar mucho movimiento en el lugar, como si buscaran algo…o a alguien…Sato…ya con unos cuantos años mas encima vestía un Kimono tradicional muy elegante. Se acerco a Sakura la madre de Kenshin, quien aunque no llevaba algo tradicional, si era bastante elegante.

-Sakura-san… ¿no has visto a Hikaru?-. Decía algo preocupada.

-No, no lo he visto-.

-¿Pasa algo abuela?-. Kamatari se acerco a ellas, vestía un traje negro formal, con la camisa de color azul…resaltando el color de sus ojos.

-No encuentro a Hikaru…estaba conmigo hace unos momentos-.

Mientras tanto, en otro lugar, una mano levanto lo que al parecer era el mantel de una mesa, luego esa misma persona se asomo por debajo sorprendiendo al pequeño que estaba ahí debajo. Vestía un traje formal haciéndolo ver muy simpático. Miraba molesto a la persona que lo descubrió.

-Con que aquí estabas-.

El pequeño de ojos azules profundos miro enojado a ese pelirrojo que lo fastidiaba. Y todo por el hecho de haberle robado a su hermana…era una molestia. Kenshin por su parte sonrió, él lucia realmente guapo, llevaba un traje blanco muy elegante, en el bolsillo del saco llevaba un adorno sencillo pero muy significativo con flores de jazmín. El pequeño bajo la mesa…recordó cuando miro por primera vez a su hermano mayor…y cuando le hizo esa promesa.

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-¡¿ Donde esta Hikaru? ¡-. Gritó Kaoru mientras bajaba las escaleras y con la misma prisa fue a la cocina.

-¿Qué pasa ahora Kaoru?-. Pregunto Tokio al ver a su hija molesta.

Kaoru se había graduado en el colegio que ella había elegido, ahora a sus 24 años, se encontraba trabajando en una guardería impartiendo clases a los niños. Miraba a Kenshin cada que eran las vacaciones, además de que se escribían y llamaban seguido. En un principio había sido difícil, pero finalmente se acostumbro y más porque después de todo no se había alejado tanto de él, como ella había creído.

-¿Dónde esta?-. Buscaba por todos lados.

-¿Ahora que hizo?-. Suspiro Tokio.

Kaoru pudo divisar una pequeña pierna bajo la mesa.- ¡Ahí estas! -.

Se inclino para sujetarlo y tratar de sacarlo, pero su hermanito fue más listo y salio corriendo nuevamente dirigiéndose a la salida de la casa.

-¡Ven acá…porque cortaste mis fotos eh!-. Kaoru lo siguió. Estaba molesta puesto que cuando entro a su habitación miro dos fotos rotas donde estaba ella con Kenshin. Y eso había sido obra de su pequeño hermano.- ¡Vuelve! -. Se asusto cuando su hermano abrió la puerta y salio de la casa.

Por su parte Hikaru corría para escapar de su hermana, se sentía feliz de haber quitado a ese hombre de la foto de su hermana. Cuando volteo a ver donde iba Kaoru no se dio cuenta y tropezó, metió sus manos para que el golpe no fuera tan duro pero no cayó. Al contrario alguien lo detuvo. Cuando levanto su mirada casi palideció.

-¿Qué pasa?-. Acaricio la pequeña cabeza del niño que tenia frente a él.-¿Otra vez hiciste una travesura?-.

Cuando Kaoru lo alcanzo a ver inconcientemente detuvo su marcha, sus ojos estaban completamente abiertos…sus labios temblaron mientras una de sus manos subía a cubrirlos.-Ken…Kenshin-. Murmuro con dificultad.

-Estoy en casa-.

Kaoru aun no lo creía…-No…puede ser…pero…aun falta…-. Tartamudeaba por la emoción de tenerlo frente a ella.

-Queria volver pronto…para verte-. Sonrió y camino lentamente hacia ella luego de tomar en brazos a Hikaru.

-Hermanita-. Hikaru estiro su brazo al ver a su hermana llorar.

Después de eso, ella corrió hacia ellos para abrazarlos con fuerza sin poder detener esas lágrimas de felicidad.- ¡Kenshin! -.

Una semana después Kenshin y Kaoru estaba conversando en el sofá. Estaban pensando en organizar una reunión con todos sus amigos. Cuando Kenshin quiso pasar la mano por los hombros de esta, sintió una punzada en el brazo. Miro molesto a su pequeño hermano quien estaba prendido de él.

-¡Hikaru, suelta a Kenshin!-.

-¡Ouh…eso duele niño!-. Kenshin se trato de deshacer de su pequeña molestia. La verdad desde que llego era de que ese niño no se le despegaba a SU Kaoru…así que a veces reconocía que él también lo molestaba…

Cuando Hikaru lo soltó Kaoru comenzó a retarlo.-Discúlpate con tu hermano-. Hikaru miro a Kenshin y después le saco la lengua y Kenshin le respondió igual. Ante eso recibió un coscorrón por parte de su hermana.-Ya basta los dos…-. Suspiro, la verdad que era cansado separarlos a cada rato.

Se sentaron nuevamente a ver la televisión, Kaoru estaba en un sofá con Hikaru mientras Kenshin estaba en otro. Ambos hermanos se miraban desafiantes.

Hikaru estaba sentado en las piernas de Kaoru mientras la abrazaba.-Ese hombre no me gusta para mi hermana…tiene el pelo revuelto…la camisa abierta, llama viejo a mi papi…y tiene cara de niña-.

Kenshin lo miraba de igual forma.-Ese mocoso…que se cree con estar pegado de Kaoru como si fuera un Koala…-. Se incorporo.-Hey tu…el koala…-. Tomo de un pie a Hikaru para bajarlo pero este se aferro a Kaoru quien solo miraba con molestia a esos dos que nuevamente estaban peleando.-Deja de abrazarla tanto-.

-¡No…ella es mi hermanita!-.

-¡Ya basta!-.

Segundos después Kenshin y Hikaru estaban en el sofá con un buen golpe propiciado por Kaoru. Al menos por una vez estaban de acuerdo, cuando ella se enojaba era de temer.

Mas tarde Kaoru y su hermanito se encontraban dándose un baño. Hikaru decía molesto moviendo el agua de la tina con sus manos.-Odio a ese tipo-.

Kaoru suspiro y le dio uno de los juguetes de baño del niño.-Hikaru…no digas eso…trata de llevarte bien con él… ¿si?-. Tomo las manitas de su hermano.-Además…él es tu hermano mayor-.

Su hermanito la miro, …no, no lo haría. Se levanto de la tina rápidamente.-No lo haré, ¡eres una tonta hermana!-. Salio corriendo del baño.

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-No voy a aceptarlo mamá, además mi hermano la hace llorar-.

-En serio-. Decía Tokio mientras escogía el cuento que le leería a Hikaru, el ya estaba con su pijama y listo para dormir.

-Si, la hizo llorar cuando llego, y también la otra vez que estaban platicando en el sofá… ¿no te acuerdas mami?-. Se cruzo de bracitos.-Mi hermana no había llorado hasta que el llego…no lo quiero-.

Tokio miraba sorprendida a su hijo, ella sabia que era un niño muy inteligente a su edad. Pero le sorprendió que su hijo sacara esas conclusiones.-Eso no significa que Kenshin sea malo hijo-. Cubrió a Hikaru con sus frazadas.-Lo que pasa que Kaoru de vez en cuando se porta como una niña mimada delante de él-.

-¿Niña mimada?-. Decía confundido.

-Si, quiere que Kenshin este al pendiente de ella, por eso se comporta así y llora, pero en el fondo es porque ella se siente feliz al tenerlo a su lado-. Termino de arroparlo y beso su frente.-No te preocupes hijito…tu hermana es feliz, ahora descansa-. Salio de la habitación.

Abrazo su oso de peluche mientras el sueño comenzaba a llegarle.-Él hace llorar mi hermana…el quiere alejarme de ella…no…no me dejare enredar por ese tipo…-.

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La mañana siguiente Kenshin y Kaoru estaban listos para salir, había quedado con los chicos. Hikaru los miraba desde la puerta de la sala.

-Voy por mi bolsa-. Iba a ir pero Kenshin la tomo del brazo y la atrajo a él para besarla.-Ken…jeje-.

Saito fue al recibidor.-Hijo, no olvides el asunto pendiente que tenemos-.

-Si papá-.

-¿Qué asunto?-. Dijo Kaoru al llegar con su madre de nueva cuenta.

-Eh…eh…este…pues que ¡mi bebe pasara tiempo con su padre!-. Decía abrazando con efusividad a su hijo.

Kenshin trataba de quitárselo con fastidio.- ¡Viejo! … ¡déjame!-.

Tokio y Kaoru que llegaron los miraron divertidas. Algunas cosas nunca cambian. Cuando se libero de su padre Kenshin miro a Hikaru.-Hey…que haces ahí escondido enano, ¿quieres ir con nosotros?-.

Desvió la mirada, aunque se moría de ganas por ir, no complacería a su hermano.-No-. Luego se fue a ver la televisión nuevamente.

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Megumi recibió con alegría a los recién llegados. Ya solo esperaban por ellos, decidieron hacer la reunión en la casa de Sano y ella. Que por cierto no tenía mucho que la habían adquirido, Sanosuke tenia poco de haberse recibido de programador en sistemas. Le iba muy bien sobre todo creando programas para empresas importantes. Al parecer tenía cabeza para eso. Mientras Megumi seguía estudiando medicina. Y con tres meses de embarazo, ambos estaban muy felices. De boda por el momento no hablaban, se sentían muy a gusto así como estaban.

-Adelante, acomódense por ahí-. Les dijo después de saludarlos con un abrazo.

Cuando los demás los vieron, fueron a saludarlos, en especial a Kenshin que era a quien no veían desde hace mucho. Kaoru fue a saludar a Misao que tenia en brazos a su pequeña Akari de un año. Aoshi y Misao ya llevaban tres años y medio de casados. Y la pequeña Akari llego para hacerlos aun mas unidos. La bebe se parecía mucho a su padre, pero los ojos eran idénticos a los de Misao.

Kaoru busco a Tsubame con la mirada.- ¿Y Tsubame? -.

-No pudo venir, recuerda que andaba en un viaje por Europa con Yahiko…según celebrando por tercera vez su luna de miel-. Dijo Misao mientras acomodaba a su niña en sus brazos.-No alcanzo a llegar, pero en tres días mas estará acá-.

La velada paso muy a gusto para todos, la cena que preparo Megumi había quedado muy bien, todos la felicitaron. Mientras la degustaron, todos habían recordado los momentos vividos. Pareciera que fue ayer cuando se conocieron. Finalmente estaban en la sala platicando. Unos bebían algo mientras otros comían unos bocadillos. Kenshin busco lugar aun lado de su novia y tomo su mano para enlazarla con la de él, esto tomo por sorpresa a la ojiazul.

-Quiero decir algo-.

Ante esto todos quedaron ante la expectativa, dejaron de hacer lo que hacían y pusieron su atención en ambos. Kaoru se sintió apenada y curiosa al mismo tiempo. La mirada de Kenshin se poso en la de ella, fija…penetrante…y…sincera…

-¿Quieres casarte conmigo?-.

Todos se quedaron atónitos, ni se diga de Kaoru…sentía que no podía respirar…sus labios se movían pero no decía nada…sus ojos se humedecieron…solo pudo murmurar…-S…si…-.

Kenshin le sonrió y de su bolsillo saco una pequeña cajita de terciopelo…la abrió con cuidado, mostrando un anillo de oro blanco con un zafiro incrustado en el centro y a sus lados dos zirconios blancos…curiosamente el color del zafiro, pareciera el color de los bellos ojos de ella…por eso fue que Kenshin eligió ese anillo…lo cautivo desde el inicio…así como ella lo hizo la primera vez que la vio. Lo tomo para luego levantar la mano correspondiente…y colocar el anillo en su dedo…ante la escena, todos aplaudieron emocionados. Por su parte Kaoru no podía dejar de llorar. Kenshin la atrajo hacia él y la abrazo.

-No has cambiado siempre terminas llorando-. Ante la alegría de sus amigos Kenshin dio un corto beso en los labios de Kaoru.

Los días pasaron rápido, así pasaron tres meses. Kenshin y Kaoru habían estado muy ocupados con los preparativos de su boda. Decidieron tener una boda sencilla, invitando solo amigos y familiares. En dos días mas serian esposos. Kaoru se le hacia tan increíble…pasaron por tantas cosas y ahora por fin estaban juntos…

-¿En que piensas?-.

Sintió las manos de él enredarse en su cintura, sus labios besar su hombro varias veces. Los besos iban subiendo al cuello de ella lentamente y su mano bajando un poco mas…la espalda de ella totalmente palpada por el pecho de él…se sentía tan bien…

-Mm…no…mamá podría escuchar…mm…-. Decía tratando de detener las caricias de su prometido.-Kenshin…-. El murmuro salio casi como una suplica…la verdad que cuando Kenshin se ponía así, había algo en ella que no podía resistírsele…

-Te amo-. Decía una y otra vez entre cada beso que depositaba en ella. Abrazarla…besarla…acariciarla…quería grabar su forma…todo de ella…no pudo evitarlo…el solo roce del cuerpo de Kaoru…sus leves gemidos…provoco en él una erección nuevamente.

-Um…-.

Tuvo que cubrir su boca con su mano, al sentir unos dedos intrusos en ese lugar que tanto placer le daba. Se sentía excitada…hacia poco que ella y Kenshin habían iniciado ese tipo de juegos mientras tenían intimidad…Dios…jamás se arrepentiría…se sentía tan bien…

-Kaoru…-.

Apenas y si podía resistirse a no tomarla en ese mismo momento. Sus dos dedos se movían con lentitud, pero sabia bien donde tocar…donde acariciar…donde brindarle placer a ella…el mismo estaba al limite, no podía soportar ese punzante calor en su entrepierna…ladeo el cuerpo de Kaoru y con suma agilidad se acomodo sobre ella.

-Ken-.

Su nombre fue lo único que alcanzo a salir de sus labios, aferro sus dedos en la espalda de él cuando finalmente entro en ella. Se sentía avergonzada…pero no podía evitarlo…los gemidos salían de su boca por si solos…no podía hacer nada ante los movimientos rápidos de Kenshin…solo unirse a ese ritmo de placer en que estaban envueltos…

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Al día siguiente el pequeño Hikari entro a una habitación, que por cierto se lo habían prohibido. Aun estaba molesto con Kenshin, no terminaba de aceptarlo, a pesar que el pelirrojo había hecho cosas por ganárselo. Cuando entro a la habitación su mirada se quedo fija en el vestido que estaba frente a él. Era el vestido que usaría su hermana para su boda…si tan solo…si tan solo…con su manita tomo la falda del vestido apreciándola…en eso la puerta se abrió y por la sorpresa jalo un poco el vestido…solo se escucho el sonido de rasgado…

-¿Qué haces?-.

El niño se asusto y se puso frente al vestido para ocultar la pequeña rasgadura. Para complicar las cosas quien había abierto la puerta era Kenshin. Quien traía el cepillo de dientes aun en la boca. Había escuchado algo y por eso fue averiguar a la habitación.

-Mm…tu…hermana…va a ponerse eso mañana…mm…así…que no hagas…mm…nada-. Decía el pelirrojo mientras lavaba sus dientes. Cuando miro fijamente se dio cuenta de lo ocurrido. Fue hacia el niño y se inclino mirando la rasgadura.-Tu hermana estaba muy deseosa de ponérselo…-.

El niño estaba ya casi a punto de llorar, era de seguro que Kaoru se enfadaría y hasta podía dejarle de hablar. Entre pucheros miro a Kenshin.-Por favor…no…no se lo digas a mi hermana, por…favor-. Decía tallando sus ojos para evitar el llorar.

Kenshin se levanto y lo miro fijamente y hablo con dificultad al traer el cepillo aun en la boca.-Ok…lo arreglare…pero a cambio…-.

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-¿Cuál fue tu promesa Hikaru?-. Pregunto Kenshin mientras miraba a su pequeño hermano bajo la mesa.

-Yo…-. Evito la mirada de Kenshin y dijo con frustración.-Ser…ser amable con mi hermano por un día-. Dijo con molestia.

-¿y que más?-. Kenshin busco la mirada del niño.

Suspirando.-Felicitar a mi hermana-.

-Bien, ahora que ya lo recuerdas, no te escondas-. Con rapidez lo tomo para levantarlo y llevarlo sobre su hombro ante la sorpresa del niño.

Hikaru no podía hacer nada, más que dejarse llevar por ese hombre.-Pero si la felicito…es como si aceptara a este tipo-. Se sorprendió cuando Kenshin detuvo su marcha.

-Escucha Hikaru…-. El tono del pelirrojo era serio.-Aunque tu hermana se case…ella seguirá queriéndote de igual forma-. Kenshin acomodo a su hermano para ahora llevarlo en sus brazos y mirarlo.- ¿No quieres ver a tu hermana feliz? …tu puedes hacerlo ¿cierto? -. Sonrió.

Era la primera vez que ese tipo de mostraba una sonrisa…tenia que aceptarlo…realmente quería ver a su hermana feliz…aunque asi tuviera que aceptar que se alejaría de él.

-Hikaru aquí estas, ven la ceremonia casi empieza…-. Sato tomo de la mano al niño luego que Kenshin lo bajo al piso.

Se sentía nervioso, llevaba el ramo que Kaoru usaría, finalmente entraría a ver a su hermana ya arreglada…y tendría…tendría que felicitarla…-Ese fue mi trato con ese tipo…voy a hacer feliz a mi hermana-.

Entro, y para el fue como si hubiese visto a un ángel…su hermana vestida completamente de blanco, el vestido era como de una princesa…el velo que cubría su cabello arreglado en un peinado que la hacia lucir realmente hermosa…y esa expresión que nunca le había visto…era como si no fuera su hermana…

-Listo-. Dijo Misao quien ayudaba a ajustar los últimos detalles del vestido.-Te ves hermosa-.

Kaoru sonrió a su amiga, estaba tan emocionada.-Gracias Misao-.

-Kaoru, se que serás muy feliz-. Dijo Tsubame, estaba conmovida por la boda de su amiga.

-Hay que darnos prisa, la ceremonia ya esta por empezar-. Dijo Megumi mientras se terminaba de arreglar. Ya que tanto las chicas como ella serian las damas de honor de Kaoru.

Tokio suspiro. Pensar que aun la miraba como su pequeña niña, pero ya era toda una mujer….-Te ves hermosa hija-. No pudo evitar que una lágrima la traicionara…lo que hizo a Kaoru abrazar a su madre.

Hikaru no hallaba la forma de acercarse a Kaoru. Cuando madre e hija dejaron de abrazarse se puso frente a su hermana extendiendo el ramo de flores y armándose de valor.-Hermanita…felicidades por tu boda-.

Esto conmovió a Kaoru y quería llorar pero a la vez sonreír. Hikaru se sorprendió…y fue cuando finalmente entendió…aquella vez que su hermana lloraba, también era feliz…y todo porque él había llegado a casa…Kaoru se inclino y abrazo con fuerza a su hermanito.

-Gracias Hikaru-.

Ella estaba tan feliz…lo había entendido…

Minutos después, el piano dejo escuchar la pieza de entrada para la novia…todos estaban de pie mientras Kaoru entraba a la iglesia del brazo de Saito…su padre…respiro profundo, los nervios le estaban ganando. Sus piernas temblaban…cuando sintió la otra mano de Saito como confortándola…sonrió y miro con emoción a la persona que le esperaba en el altar. En su recorrido miro a los invitados, mostrándole la dicha que sentía en esos momentos…finalmente llegaron.

-Estoy seguro que ambos serán muy felices hijos-. Saito tomo la mano de ambos y las unió. Así ante la mirada fija de Kenshin y Kaoru la ceremonia dio comienzo…

El tiempo transcurrió con una ceremonia muy emotiva, era el tiempo de los votos…Kenshin sostenía el anillo de bodas entre los dedos de una de sus manos y con la otra sostenía la de Kaoru…mientras la miraba fijamente…

-Yo…Kenshin, te tomo a ti Kaoru como mi esposa, para amarte y respetarte en la salud y enfermedad por el resto de mi vida…-. Dicho esto coloco el anillo.

Kaoru tomo el anillo del pequeño cojín que sostenía el sacerdote.-Yo…Kaoru…-. Apretó sus labios…era increíble que no pudiera controlar el querer llorar…-Yo…-. Al ver que estaba muy conmovida Kenshin sonrió y beso su mano para darle confianza. Y resulto.-Yo, Kaoru…te tomo a ti Kenshin como mi esposo…para amarte…y respetarte…en la salud y enfermedad…por el resto de mi vida-. Coloco el anillo a Kenshin.

-Por el poder que me concede la iglesia…os declaro marido y mujer-. El sacerdote miro a Kenshin.-Puede besar a la novia-.

Kenshin llevo sus manos a las mejillas de Kaoru…las acaricio suavemente y luego ante los aplausos de los invitados la beso. Sellando así los votos de amor que habían hecho.

Cuando salieron de la iglesia las felicitaciones y buenos deseos no se dejaron esperar. En esos momentos Kaoru diviso a cierto invitado que no esperaba.

-Enishi-.

Enishi le sonrió para luego acercarse a ella. La abrazo y Kaoru correspondió contenta.-Felicidades-.

-Gracias por venir-.

Dejo de abrazarla.-No podía faltar a tu boda-. Sintió la mirada de Kenshin sobre él. Por dentro sonrió, sabia que el pelirrojo aun sentía algo de celos.-Hazla feliz-. Le extendió su mano.

-No tienes que decírmelo-. Saludo a Enishi, esta vez dejando atrás los conflictos que pudieran haber tenido.

-Kaoru y Kenshin acérquense para la foto-. Dijo entusiasmado Saito.

Estos fueron hacia donde ya los estaban esperando todos. Megumi con Sanosuke. Este tenía su mano en la ya abultada pancita de ella. También Aoshi y Misao con su niña en brazos. Tsubame estaba con su esposo Yahiko, quien la tenía abrazada por la espalda. Hacia dos semanas que se habían enterado que serian padres. Saito, Tokio, Sakura, Kamatari, Sato, Enishi, todos estaban ahí. Los recién casados se acomodaron en frente. Exactamente en medio de todos sus amigos. Hikaru tomo la mano de Kaoru sonrojado. Ella le sonrió e hizo lo mismo. Por su parte Kenshin rodeo la cintura de ella. Miraron al frente y solo se vio un flash seguido del sonido de captura de una cámara…

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La puerta se abrió dando paso a cierto pelirrojo, se le veía cansado. El trabajo esa semana había estado pesadísimo. Por fin iba a descansar, a comer algo y sobre todo pasar un rato agradable con su mujer. Que por cierto se extraño de que no lo recibiera. Se quito los zapatos y se puso sus pantuflas. Fue a la cocina y no miro a nadie paso a la sala antes de subir a la habitación y tampoco.

-¿Habrá salido?-.

Miro la cama, realmente se miraba acogedora. Asi que fue a ella y se dejo caer. Suspiro mientras se aflojaba la corbata y desabotonaba los primeros botones de su camisa. Tomo el teléfono y marco el móvil de Kaoru. Una melodía invadió la habitación. Al parecer se le había olvidado el móvil. No le gustaba esas ausencias…hacia una semana que se venia comportando muy extraña. Escucho la puerta del recibidor abrirse. Se levanto de inmediato y bajo las escaleras para mirar a su esposa dejar su bolso sobre el sofá.

-Ah…hola amor-. Saludo a Kenshin al percatarse de su presencia.

- ¿Me podría decir donde andaba jovencita? -. Decía mientras estaba recargado en el barandal de las escaleras.

-No tienes que usar ese tono tan sarcástico-. Se acerco a él subiendo unos cuantos escalones para alcanzarlo y besar sus labios.-También te extrañe-. Se giró nuevamente para dirigirse a la cocina. Tenía unas ganas tremendas de beber jugo de naranja.

-Al medio día no estabas tampoco…llame desde la oficina y no contestabas-.

Sonrió mientras vertía un poco de jugo en un vaso.-Kenshin…realmente suenas como un esposo celoso-.

-No estoy celoso…simplemente quiero saber donde estabas-.

-Acompañe a Hikaru a ver una película infantil, luego lo regrese con mamá, de ahí fui a visitar a Megumi puesto que nos quedamos de ver las chicas y yo ahí-. Miro de reojo a Kenshin quien entraba al a cocina.- ¿contento joven Shinta? -.

-Si, acepto sus disculpas-. Dijo ya en un tono mas relajado.

-Oye…no me estoy disculpando…-. Le decía acusadora.

Dos años de un buen matrimonio. Ambos habían mantenido el buen humor en su relación. Realmente el tiempo se había ido volando para ellos. Cada día confirmaban mas el amor que sentían el uno por el otro. Es como si siempre hubieran estado predestinados. Kenshin suspiro y fue a sentarse al sofá.

-Kaoru…no malinterpretes esto…con celos o como un esposo paranoico que piensa que su mujer le puede estar poniendo el cuerno…bueno…tu sabes que nunca te he prohibido nada…pero…-.

Kaoru lo interrumpió.-Aha…no te preocupes…no pensare eso de ti-. Decía tratando de ocultar sus ganas de reír. Se acerco a él por detrás del sofá y rodeo su pecho para luego besar su mejilla.- ¿Qué quieres preguntarme amor? -. Lo conocía muy bien. Y sabía cuando Kenshin tenía dudas.

Tomo una de sus manos y la beso.-Kaoru… ¿a que se debe tanta salidera esta semana, ya hable con Misao y Megumi…y se que algo traman…lo se…las conozco…-.

-Tu respuesta esta en ese sobre-. Kaoru apunto al sobre que estaba junto a su bolso. Que casualmente estaban a un lado de Kenshin. ¿Coincidencia?...no lo creo…dejo de abrazarlo y con paso lento caminaba hacia las escaleras…

Por su parte Kenshin abría con curiosidad el sobre. Lo leía aunque había cosas que no entendía…sus ojos se abrieron sorprendidos. Cuando Kaoru noto la reacción apuró el paso rumbo a la habitación.

-¡Kaoru Himura ven para acá!-. Tiro la hoja y salio corriendo tras su esposa…su corazón latiendo fuertemente y la alegría que su rostro expresaba no podía ser comparada con nada…

La nota cayo al suelo…había muchos términos médicos…pero al final tenia una notita con la firma de cierta doctora… "Vas a ser papá baka". Solo Megumi podía escribir eso, suponiendo que Kenshin no entendería el término medico…y sip…así fue…pero eso no importaba…porque los futuros padres se encontraban en la habitación…festejando… ¿Cómo? …eso se los dejo a su imaginación…pero el fruto de su adorable pecado…era presente ya en sus vidas…

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¡Hola! ¿Que les pareció? …saben había pasado el susto de mi vida, porque hace algunos días estaba cómodamente frente a mi compu cuando explota la fuente de poder XD. Y pues ahí tenía toda mi info y los capítulos de mis fic en el disco duro. Así que le pedí prestada la compu a mi hermana y pasar mi disco duro en fin todo lo técnico que se debía hacer. Así que horita acá ando y aprovecho para subir el epilogo que se que varios esperaban.

De verdad que les agradezco de todo corazón el que hayan estado conmigo de principio a fin. Y también espero que este epilogo haya cumplido con sus expectativas como cumplió con las mías. Bueno sin más los veo en mis próximas historias. Gracias n.n

Muchísimas gracias a:

Gabyhyatt: Gracias por tus siempre bienvenidos comentarios n.n

Arcasdrea: Muchas gracias por tu apoyo, tenia rato que no te miraba por acá. Sigue adelante con tu fic también n.n

Naruto Ikari de Hyrule: Muchas gracias amigo, la verdad que te agradezco mucho tus comentarios que me daban muchos ánimos. Espero seguir escribiendo y que me apoyes de igual manera. Ojala hayas disfrutado de este epilogo n.n

Kaoru Higurashi Ikawa: Si, todo tiene un final y bueno este epilogo espero que te haya agradado, nos vemos n.n

Mia T: ¡Acá esta el epilogo! …de verdad espero que te haya gustado y ojala me dejes tu comentario, nos estamos viendo n.n

Kagome Kaoru: Holis, jeje pues ya no tuviste que esperar mas, aquí esta el epilogo y espero que la espera haya valido la pena y te haya gustado, tu email no apareció, pero el mió es kenyiluz arroba hotmail punto com n.n nos vemos

Emina dono: Gracias por tu apoyo y tus comentarios, que bueno que te haya gustado el final y el epilogo espero que también. Por cierto no se si lo sepas pero ya tengo una nueva historia publicada y es un Aoshi, Misao. La historia se llama "La línea delgada entre el amor y el odio" espero te des una vuelta por ahí y me digas que tal jeje nos vemos n.n

Monika dono: no se que decirte solo gracias gracias gracias, tus comentarios me llenaron de animo de que te haya gustado el final y espero que el epilogo también lo hayas disfrutado. Gracias por tu constante apoyo amiga n.n

Kryn chan: Gracias por tu comentario, acá esta el epilogo y espero que lo disfrutes n.n

Shinta girl: Pues acá andamos de nuevo jeje, a ver que tal nos va con este epilogo y espero que haya sido de tu agrado. Espero me dejes comentario nos vemos y gracias n.n

Kaerii Ichida: No es nada, la verdad me pareció muy bien narrado tu one shot. Espero sigas así creando historias. Espero que te haya gustado este epilogo nos vemos y gracias por tu apoyo n.n

Gracias por acompañarme en esta larga travesía de Mi adorable pecado, una historia basada en el manga de Akuma de Sorou.