Un poco corto este cap, pero bueno, a ver que les parece… gracias por lo rw's!
Capítulo 7
Nunca se había sentido tan desalentado. No sentía ganas de regresar a su habitación en esos momentos. Había interpretado tan mal las cosas…
- No tienes que seguirme Ginny… debes tener cosas que hacer…- dijo Draco dándose cuenta de que Ginny seguía junto a él.
- No… está bien…- dijo tímidamente Ginny, disfrutando esos momentos de soledad junto con Draco.
Siguieron caminando en silencio y finalmente llegaron al lugar de donde había partido. Entonces vieron cómo Hermione se dirigía hacia ellos por el pasillo. Draco saltó involuntariamente hacia atrás, ocultándose rápidamente detrás de una armadura y jalando a Ginny. Al parecer Hermione no los había visto, pues pasó frente a ellos sin notarlos.
"¿Por qué te tiene que gustar ella?", pensó Ginny con tristeza al ver cómo Draco miraba a Hermione que subía unas escaleras en dirección a su habitación.
- Debo irme Ginny…- dijo Draco cuando Hermione se perdió de vista.
- Si… claro…-
- Gracias por acompañarme… buenas noches…- dijo Draco alejándose en dirección de las escaleras.
- Buenas noches…- dijo Ginny mientras veía a Draco alejarse tal como lo había hecho Hermione.
- ¿Entonces asistirás al torneo? ¡Lo sabía! ¡No podías abandonarnos!- gritó Harry durante el desayuno la mañana siguiente.
- Así es… no podía abandonarlos… estaré listo para la tarde…- dijo Draco con firmeza evitando mirar a Hermione.
- Perfecto… te estaremos esperando- dijo Harry con euforia.
Hermione se levantó y salió de la habitación sin decir una sola palabra.
- No te deprimas Draco… en su interior ella quería que asistieras…- dijo Harry al ver la cara de frustración de Draco.
- En su interior ella quiere que muera…-
- No seas exagerado…, además, ¿por qué tienes que fijarte en ella precisamente? Conozco una que otra persona que daría lo que fuera por estar en el lugar de Hermione…-
Draco no contestó. El se lo había preguntado infinidad de veces. ¿Por qué Hermione? Nunca podía llegar a una conclusión.
Ese día las clases se suspendieron para los integrantes del club de duelo. Draco se dirigió a la sala de entrenamiento y se dispuso a pasar una mañana difícil.
- Perfecto Draco. Sabía que vendrías- lo saludó Neville al llegar.
- Si… supongo…-
- ¡Hermione! ¿Quieres entrenar con Draco?- preguntó Neville entusiasmado.
- ¿Por qué yo?- preguntó Hermione al llegar.
- Siempre he pensado que hacen bonita pareja… debí suponer que Draco sería tu tipo ideal…- dijo Neville alejándose risueño sin notar el silencio incómodo que quedaba atrás de él.
- ¿Soy tu tipo ideal Hermione?- preguntó Draco en tono de broma en un vano intento por aliviar la tensión. La expresión de Hermione lo hizo retroceder.
- Ni en tus mejores sueños Malfoy…- y sin otra palabra, comenzó a atacarlo sin piedad.
- Wow… increíble…- comenzaron a escucharse las primeras exclamaciones al poco rato conforme la intensidad del ataque de Hermione aumentaba haciendo que Draco se esforzara al máximo. Las personas habían comenzado a rodearlos sorprendidos.
- ¿Recuerdas cuándo Ron hacía enojar a Hermione? Ella lo atacaba de la misma manera…- se escuchaban murmullos.
- … y él la esquivaba igual que… Draco…-
- No podría notar la diferencia entre Ron y Draco en estos momentos…- dijo alguien.
- Excepto por el cabello…- añadió otro al distinguir una mancha rubia que se movía fugazmente esquivando una y otra vez los ataques.
- No hay duda… él ganará el torneo- le dijo Neville a Harry convencido. Éste último asintió en silencio.
- ¡Descanso de 15 minutos!- anunció Neville, haciendo que los ataques cesaran de pronto.
Draco intentó respirar y recuperar el aliento. Volteó a mirar a Hermione, quien por su parte caminó hacia un rincón solitario y se sentó cabizbaja. Draco intuyó que algo andaba mal. Vio cómo Harry caminaba hacia ella, presintiendo probablemente lo mismo.
- ¿Hermione? ¿Estas bien?- preguntó Harry al llegar. Se sorprendió al descubrir que Hermione tenía los ojos llorosos al alzar la cabeza.
- ¿Por qué se parece tanto a Ron? Por unos momentos creí que… creí que era él de nuevo con quien luchaba…- dijo Hermione con tristeza.
- Vamos Hermione, no… no llores…- fue lo único que se le ocurrió decir. Draco luchaba por recuperar el aliento aún, y se había acercado poco a poco.
- ¿Qué sucede?- preguntó con dificultad al llegar. Hermione bajó la cabeza nuevamente, ocultando las lágrimas.
- No sucede nada, es solo que Hermione está cansada…, ¿no es así Herm?- preguntó Harry rápidamente. Hermione asintió en silencio sin levantar la cabeza. En esos momentos Harry percibió la cabellera roja de Ginny, que los observaba desde la entrada. Las cosas se estaban complicando...
El entrenamiento había terminado, y la sala iba quedando cada vez más vacía.
- Debo irme Harry, los veré mañana en el torneo…- dijo Draco. Las palabras de Harry durante el desayuno le habían hecho darse cuenta que probablemente sería imposible para él estar con Hermione. Y más ahora que se acercaba el torneo. Quería estar despejado para mañana… no quería pasar la noche pensando en Hermione y lo mejor sería alejarse.
- No esperarás a…- le preguntó en un murmullo Harry.
- No… tienes razón… intentaré alejarme de ella…- le susurró antes de salir.
Harry volteó a ver a Hermione, que estaba descansando mientras hablaba con Ginny. Notó que Hermione seguía a Draco con la mirada, y se apresuraba a despedirse de Ginny.
- Hermione… ¿puedo acompañarte?- preguntó Ginny cuando Hermione se levantó.
- ¿Qué cosa?- preguntó sorprendida.
"Habrá problemas…" pensó Harry desesperado al ver que las dos amigas salían hablando.
- Hermione…- comenzó nerviosa Ginny mientras caminaba con Hermione.
- ¿Qué sucede Ginny?-
- Es solo que…-
- ¡Vamos Ginny! ¿Qué te sucede? ¡Nunca te había visto tan nerviosa!- preguntó Hermione risueña al ver a Ginny. Unos pasillos más adelante, Draco se dio cuenta de que había olvidado una botella de la poción de Hermione y decidió regresar por ella.
- Herm… ¿cuál es tu relación con Draco?- soltó Ginny de golpe.
- ¿Qué cosa?... quiero decir… ¿Por qué preguntas eso?- dijo Hermione confundida por la pregunta. Draco se iba acercando.
- Porque… en cualquier parte que te veo con Draco, no puedo evitar pensar que sientes algo por él…- dijo Ginny temblorosa. Una lucha se desencadenó dentro de la cabeza de Hermione. Los sentimientos por Draco luchaban contra el recuerdo de Ron…
- Ginny… yo… él… no tenemos nada que ver…- dijo no muy segura de si misma. Una esperanza se iluminó dentro de Ginny.
- Herm… yo… él me gusta, y he planeado en confesarle mis sentimientos…- dijo Ginny poniéndose roja. Hermione dio un sobresalto. A la vuelta de la esquina, Draco se iba acercando cada vez más, y comenzó a distinguir unas voces un poco lejanas.
- Pero si tú…- dijo Ginny insegura, mientras se acercaba junto con Hermione a la esquina. Hermione la interrumpió repentinamente. El recuerdo de Ron fue más poderoso…
- Ginny… yo… ¡Draco no me gusta! ¡No hay forma en que alguien como Draco me pueda gustar!- gritó Hermione al mismo tiempo que Draco aparecía por la esquina y los tres se topaban por sorpresa.
- ¡Draco!- gritó Ginny antes de huir corriendo, avergonzada el creer que Draco había escuchado sus intenciones. Sin embargo, en la mente de Draco solo resonaban las últimas palabras de Hermione. Por unos momentos, el rostro de Draco reflejó una inmensa tristeza.
- Draco… yo… lo que acabo de decir no es…- comenzó a decir Hermione muy nerviosa.
- Está bien Hermione… te comprendo- la interrumpió Draco suavemente. – Yo sé que no te gusto… y sé que probablemente no hay nada que pueda hacer para… para gustarte aunque sea un poco…- dijo casi en un susurro.
- Draco… yo…-
- Será mejor que vayamos a dormir… mañana será un día muy cansado- dijo Draco sonriéndole a Hermione. Una lágrima silenciosa recorrió la mejilla de Hermione, que lo vio alejarse caminando antes de desaparecer en la penumbra.
