¡Saludos queridos lectores!
Traigo una nueva historia que corresponde al Día 7: Antifaz del SasuKarin Month Junio 2022 Espero que les guste n.n
Las familias más acaudaladas del país del Fuego habían sido invitadas a una fiesta sin precedentes, pues estaba organizada por la pequeña y recientemente enriquecida familia Haruno. Ellos, aunque habían amasado una fortuna con un pequeño spa que fueron agrandando y comenzó a tener fama cuando su hija se hizo cirujano plástico, no eran lo suficientemente acaudalados para llamar la atención de las familias de abolengo, sin embargo, el evento se hizo reconocido gracias a que tres de las cuatro familias más acaudaladas habían anunciado su asistencia.
¿Por qué la cuarta familia más poderosa y acaudalada no estaría presente en la fiesta?
Decir que no estaría presente no sería lo más correcto de decir, sino más bien era que el único sobreviviente de los Uchiha no había confirmado su asistencia, pero tampoco había rechazado la invitación.
Sasuke Uchiha, había conocido a Sakura porque cuando toda su familia murió, él era muy joven para obtener la herencia familiar. De hecho, en el testamento se estipulaba que si los o el único heredero de la familia eran menores de veintiuno, no podrían acceder a la fortuna sino hasta cumplirlos, en cuyo caso, estarían a cargo de un tutor que podría acceder a la fortuna de forma limitada para la manutención de los menores.
El tutor de Sasuke fue Hatake Kakashi, quien, si bien podría acceder a la fortuna Uchiha para enviar al joven azabache a escuelas prestigiosas de paga, él decidió inscribirlo en escuelas públicas para "ayudarlo a ser más sociables", según sus palabras. Ahí, Sasuke conoció no sólo a Sakura, sino también a Naruto Namikaze, quien en ese entonces se pensaba que era un huérfano de padres desconocidos, pero eventualmente se reveló que era hijo de la última Uzumaki, una de las cuatro familias más ricas del país, sólo que él logró obtener su fortuna a los dieciocho años.
¿Por qué Sasuke no había dado respuesta a la invitación de los Haruno si conocía a su hija?
Kakashi era profesor de la preparatoria donde esos tres estudiaron y el albino tendía a involucrarse en los conflictos que los varones llegaban a tener. Con Sasuke porque él era su tutor y con Naruto porque, y se reveló más tarde, se sentía responsable porque el padre de éste había sido su maestro. De hecho, Kakashi esperaba tener a Naruto a su cargo cuando quedó huérfano, pero en ese momento Hatake era muy joven y por azares del destino y la burocracia, años más tarde se convirtió en el tutor del azabache. Por otro lado, también se convirtió en guía de Sakura, porque mientras Naruto estaba enamorado de ella, ella lo estaba de Sasuke, así que aún en contra de la voluntad de Uchiha, los tres pasaban mucho tiempo juntos.
Dicho lo anterior, era notorio que Sasuke realmente no consideraba a Naruto y Sakura como amigos, y aunque eventualmente llegó a sentir simpatía por ambos, e incluso, si llegó a considerar al rubio como un amigo, Uchiha prefirió alejarse de ellos en cuanto obtuvo un lugar en una universidad fuera de la ciudad de Konoha. Es decir, la universidad de esa ciudad era la más prestigiosa del país, pero Uchiha quería un camino diferente, conocer otros lugares y sobre todo, comenzar a tomar sus propias decisiones, las cuales siempre habían sido limitadas por Hatake y, que por cierto, eran alentadas por Naruto y Sakura.
Con ello en mente, Sasuke había considerado no volver a Konoha, pero aún había algo que debía hacer: obtener su herencia.
Si, Sasuke estaba a punto de cumplir veintiun años y en cuanto llegara su cumpleaños, él deseaba hacer los trámites correspondientes, arreglar las propiedades de su familia e irse para no volver a pisar esa ciudad si no era necesario. Sin embargo, aún faltaban unas semanas para ello y Kakashi condicionó a Uchiha: si no iba a la fiesta de los Haruno, le complicaría el trámite.
¿Cómo podría hacer eso?
El testamento de sus padres estipulaba que si sus herederos o heredero menor de edad no demostraba capacidades académicas, no podría obtener la herencia hasta no conseguir un título universitario sin importar la edad, así que Kakashi se valdría de decir que él estaba en una universidad menos prestigiosa que la de Konoha para señalarlo como poco capaz académicamente hablando y si bien esto no era cierto y eventualmente se comprobaría con los resultados del examen de admisión, esto si que atrasaría los planes de Sasuke y se seguiría viendo sujeto a la tutoría de Kakashi para acceder al dinero de su familia, por lo menos hasta que todo se aclarara.
Uchiha no respondió a la amenaza de Hatake porque le dió hasta el día de la fiesta para presentarse.
Decir que Sasuke estaba furioso era decir lo menos, especialmente porque sabía que Kakashi seguía intentando, así como Naruto y Sakura, de hacerlo regresar a Konoha. Esos tres tenían la cursi ilusión de que un día él volvería, les agradecería el haberlo "apoyado" gran parte de su adolescencia y casarse para establecerse en Konoha para vivir como amigos de toda la vida por siempre.
Tanto tiempo de conocerse y ellos no entendían lo que él realmente quería. Ellos pensaban, especialmente Kakashi, que el querer irse de Konoha era un berrinche de adolescente y que su mal humor con ellos era sólo porque "le costaba hacer amigos", pero ¿Qué clase de tutor daba su propio diagnóstico psicológico sin ni siquiera intentar hablar con su paciente? Es decir, no era como que Sasuke fuera a hablar en el primer intento, pero Kakashi siempre estableció sus reglas después de hacerlo hablar de las cosas que le gustaban, le disgustaban y sus metas. Eso fue todo lo que el albino indagó de él.
Lo que Sasuke quería era simple: superar su pasado.
Perder a su familia a los ocho años había sido un golpe terrible para Sasuke y por mucho tiempo anheló volverlos a ver y regresar a su vieja rutina. Empero, con el tiempo aceptó su realidad y se dió cuenta que le era difícil vivir en Konoha porque todo le recordaba a su familia de una u otra forma, lo que lo llevaba a la tristeza y posteriormente a la frustración.
Él decidió irse de Konoha no sólo para alejarse de las imposiciones de Kakashi, sino también para alejarse de los recuerdos dolorosos, pero para Hatake y sus dos ayudantes decir "quédate sólo con los buenos recuerdos, eso habría querido tu familia" era fácil hacerlo con sólo sonreír y rodearse de gente que se preocupaba por nimiedades, pero si ellos vivieran lo mismo, no pensarían igual.
Cuando Sasuke llegó a Oto, la ciudad dónde se encontraba la universidad que él había elegido, sintió alivio cuando no hubo quien lo atosigara con palabras cursis motivacionales ni lo presionara a hacer cosas que no quería. Es más, por casualidad conoció gente con la que terminó relacionándose y si bien eran animados como lo eran en Konoha, ellos no le decían qué hacer ni cómo sentirse, lo que lo hacía sentirse cómodo con ellos al punto de saber que si él decidía hablar, lo escucharían y apoyarían.
Entre ese pequeño grupo de amigos había una chica, Karin. Ella de entre los demás había resultado más que una compañera y amiga y es que probablemente de entre toda la gente que conocía, la pelirroja era la que más podía empatizar con él, pues si bien su infancia no fue la misma, ambos habían sido amados por su familia y la habían perdido a la misma edad de forma repentina. La diferencia entre ella y él, era que Karin parecía haber podido dejar atrás las tragedias del pasado y que, aunque su presente no era el mejor, ella era optimista con conseguir cierta estabilidad bajo sus esfuerzos. Él, mientras tanto, aunque deseaba su independencia y estabilidad, sabía que no había podido superar su pasado porque lo último que él quería volver a experimentar era el amor y la pérdida.
Resultaba irónico que alguien que no quería lazos nuevos para evitar el dolor, al final terminara teniendo amigos e incluso, Sasuke sabía que sentía algo más por Karin. Empero, él creía que podría controlar mejor sus sentimientos, siempre y cuando no profundizara.
Cómo fuera, Sasuke se vio obligado a ir a la estúpida fiesta de los Haruno, pues él quería conseguir su herencia y soltarse de la correa de Hatake los antes posible, pero como no quería llamar la atención de nadie, no envió ningún tipo de respuesta a la invitación y ya que la fiesta era de máscaras, nadie más que Kakashi, debía enterarse de su presencia. De acuerdo, quien recibiera las invitaciones tendría que enterarse de su presencia, y se suponía que se quitarían las máscaras hasta la medianoche, pero él esperaba haberse esfumado para ese entonces.
Sasuke se presentó a la fiesta con un elegante traje y un antifaz negro que cubría la mayor parte de su rostro, casi era una máscara, pues no quería ser reconocido. Es más, la máscara que él llevaba tenía una expresión atemorizante con el fin de asustar a la gente que pudiera acercársele.
Al entrar al salón, Uchiha se acercó a la mesa de los anfitriones, hizo una reverencia a modo de saludo y se marchó. Si por él fuera, ni siquiera habría hecho ese gesto, pero él estaba seguro que Kakashi tendría que estar cerca de los anfitriones y en cuanto descubriera quién era él, le revelaría su presencia para que no cumpliera su amenaza. Sin embargo, el hombre no estaba allí, al azabache se le olvidó que Hatake era la persona menos puntual que había conocido en su vida.
Irritado, el azabache se mantuvo alejado de las multitudes. No le quedaba más que esperar a su tutor.
Para evitar tener que socializar, se mantuvo la mayor parte del tiempo en los balcones que estaban preparados para tener privacidad, pero muchas veces fue echado cuando algunas parejas cursis y otras más bien fogosas, necesitaban del espacio y ya que él permanecía solo, consideraban que no merecía estar allí.
Ya era la octava vez que lograba conseguir tomar un balcón, cuando nuevamente, alguien entró a interrumpir su privacidad. Sorprendentemente, esta vez se trataba de una joven que, sin mirar más nada, corrió al balcón dando arcadas y no hubo nadie que llegara detrás.
Confundido, Sasuke no sabía si quedarse o irse, pues no quería involucrarse con nadie en la fiesta, pero ya estaba harto de tener que ser él el que tuviera que marcharse. Si tan sólo Kakashi estuviera en esa estúpida fiesta a la hora que se le citó, no estaría pasando por tales problemas.
—Lo siento…
La chica intentó enderezarse para disculparse, pero de nuevo las arcadas comenzaron. Empero, ella no estaba devolviendo el estómago.
—Aquí podemos… disculpen —un hombre había abierto la cortina para entrar al balcón, pero al ver al par de jóvenes se retractó antes de que su acompañante se dejara ver.
De no ser por ese hombre, Sasuke se habría ido sin más, pero al ver que así nadie lo echaría, prefirió lidiar con esa joven que tener que seguir buscando un lugar privado.
—¿Necesita llamar a alguien? —le preguntó, pues aunque él no estaba muy dispuesto a ponerse a buscar a nadie, no se le ocurrió qué más decir.
—¡No, por favor! —exclamó la chica aterrada antes de que las arcadas volvieran— Necesito calmarme.
Le pareció una chica muy extraña. Obviamente se sentía mal, pero no parecía querer ayuda, lo que de alguna forma le convenía, pero si se ponía grave, él no quería lidiar con lo que viniera de ello. Quizá era mejor sólo irse ¿No?
—Quizá este esté desocupado —se oyó una voz antes de que una mujer abriera la cortina y tronara la lengua cuando no fue así.
—No puedo con la presión —comentó la chica dejándose caer en el suelo y abanicándose con las manos— Esto es demasiado para mí. Esto… —la joven lo miró y soltó una risita nerviosa— ¿Kaito? ¿En serio?
Sasuke quedó confundido con la reacción de la chica, pero enseguida recordó que Kaito era el nombre del personaje cuyo antifaz él llevaba. Este, era un personaje muy popular de una leyenda de Oto, pero que realmente era poco conocido fuera de la ciudad. Él había comprado el traje y la máscara allá para no tener que recorrer las calles de Konoha buscando lo que se pondría para la estúpida fiesta
—Hay muchos personajes aquí —respondió Sasuke quitándole importancia, aunque era obvio que la joven debía venir de Oto si reconocía al demonio Kaito.
—Ya veo, compró la máscara sin saber quién es —la chica suspiró más relajada, hablar de un tema sin importancia parecía relajarla.
—Kaito, el demonio que se comía a las mujeres de Oto en la época antigua hasta que se enamoró de Suki, una mujer pelirroja que lo cautivó por su astucia y belleza —respondió Uchiha aunque no le importaba demasiado que ella pensara que era un ignorante.
La joven sonrió y Sasuke se dió cuenta que ella llevaba un antifaz que representaba a la chica del mito. Seguramente el cabello rojo que ella tenía peinado en un chongo con algunos cabellos sueltos, era una peluca para ir acorde al disfraz.
—No sabía que había gente en Konoha que conociera ese mito —comentó la joven riendo, parecía más tranquila— Aunque esa es la versión que se les da a los turistas para no alarmar a los mojigatos.
—Y yo no sabía que habría gente de Oto aquí —Sasuke también sabía que esa era la versión para los turistas.
—No soy originaria de Oto, aunque tampoco soy ajena a él —la joven se quitaba el antifaz para tratar de abanicarse con él— Llevo viviendo alrededor de siete años allí y quizá me mude.
—¿Karin? ¿Qué haces aquí? —Sasuke estaba más que sorprendido. Es decir, ella dijo que tenía un asunto familiar que arreglar, pero hasta donde él recordaba, ella era de la Hierba, no de Konoha.
—¿Sasuke? —Karin pudo reconocerlo aún cuando él no se quitó el antifaz y es que la voz ya se le hacía familiar, pero en cuanto él dijo su nombre no tuvo duda de quién era.
Karin tampoco esperaba encontrarse a Sasuke en aquella fiesta, empezando por el hecho de que hacía menos de una semana ella no tenía ni idea de que estaría en Konoha y que, aunque ella sabía que él iría a su ciudad natal, no sabía lo que haría en ella.
—¿Por qué…?
Uchiha no pudo terminar su pregunta porque Karin se había levantado del piso y se lanzó a abrazarlo por el cuello, pero a diferencia de otras veces en que ella intentaba acercársele, ella parecía más bien aliviada.
—Qué bueno que estás aquí. Sasuke, por favor, tienes que ayudarme, no puedo hacer esto sola.
Confundido, Sasuke no sabía qué hacer ni qué decir y en un impulso la rodeó con el brazo y le dió unas palmadas en la espalda, pues aunque ella parecía aliviada, también se oía inquieta.
—¿Qué ocurre?
—Yo… no les había contado que soy adoptada. Aunque quizá ya lo intuían —Karin se separó de él lo suficiente para mirarlo, pero se quedó en sus brazos porque se sentía segura— Le pagué a un investigador privado para encontrar a mi familia y lo hizo… Aunque jamás imaginé que tendría familia en Konoha, es sólo que me comentaron que sólo hay un miembro vivo —Sasuke quedó a la expectativa— Aquí debería asistir un primo hermano mío, un Uzumaki.
—¿Naruto es tu primo? —preguntó Sasuke sorprendido, pues debía admitir para sí mismo que por un instante se tensó pensando que pudieran ser parientes, pero rápidamente se dió cuenta que era absurdo, pues ella conocía su apellido y si fuera el caso, ella habría reaccionado diferente.
—¿Conoces a Naruto Uzumaki? Menos mal —dijo Karin aliviada— Estaba tan nerviosa de acercarme yo sola que no dejaba de sentir ganas de vomitar aunque no sacara nada, pero si lo conoces, será más sencillo presentarme —se veía menos nerviosa— Me ayudarás con esto ¿Verdad?
—Mi relación con él no es tan buena —contestó el chico, pues no deseaba revelarse frente a él o Sakura.
—No puede ser tan malo ¿O si? Es que no quiero presentarme sola —de nuevo se oía nerviosa— Tengo entendido que es una familia de dinero ¿Y si cree que soy una estafadora? Pensando de dónde vengo, hasta yo lo creería —murmuró lo último— Sería bueno tener un beneficio, pero mi objetivo era encontrar a la hermana de mi madre. Ella la extrañaba y esperaba poder reencontrarse con ella —decía con sinceridad— Sé que ella ya murió, pero estoy segura que a mi madre le gustaría que conociera a mi primo.
—No deberías preocuparte por eso. Estoy seguro que a Naruto le alegrará saber que tiene familia —Sasuke le aseguró— Tampoco creo que él piense mal de ti. Es muy ingenuo e idiota que ni siquiera le pasará por la mente.
Karin finalmente se soltó de Sasuke y aunque sabía que el joven estaba siendo sincero, ella aún no se sentía del todo segura, pero antes de poder decir o hacer algo, el sonido de un mensaje en el celular llamó la atención de ambos.
—¿Vas a encontrarte con alguien aquí? —preguntó la pelirroja cuando Sasuke revisaba sus mensajes.
—Si —respondió el joven sin dar ninguna explicación y se quitó el antifaz mostrando una cara de enfado. El mensaje era de Kakashi que le decía que esperaba que estuviera en la fiesta divirtiéndose y que él llegaría en una o dos horas más.
—¿Está todo bien?
—Quiero largarme de este lugar —apretó la careta muy irritado.
—¿Hay algo en lo que pueda ayudarte? —preguntó Karin, esperando que él pudiera decirle un poco más de su situación.
—Te acompañaré a hablar con Naruto, pero evita decir quién soy. No quiero que él ni sus acompañantes sepan que estoy aquí.
—¿Por qué vendrías a una fiesta llena de gente con la que no te llevas?
—Puedes ir sola a hablar con Naruto —sugirió el chico.
—Bien, no digas nada. Me conformo con saber que no estaré sola en esto —Karin entendió la amenaza y se puso de nuevo el antifaz— Diremos que eres mi acompañante para la fiesta ¿Estás de acuerdo?
Sasuke asintió y emocionada con la idea, la pelirroja se tomó del brazo del chico, momento en que alguien abrió la cortina del balcón escandalosamente.
—¡¿Estás aquí, Sasuke?! —un chico rubio con un antifaz naranja entró al balcón y detrás de él llegó una joven pelirosa.
—Maldita sea —Sasuke murmuró, porque estaba seguro que Kakashi les dijo dónde estaba y ni siquiera podría negar su identidad porque su máscara la tenía aún en la mano.
—¡Kakashi-sensei tenía razón! —exclamó el rubio— ¿Por qué te has estado escondiendo aquí?
—¡Sasuke-kun! ¡Qué bueno que estás aquí! Llegué a pensar que no vendrías —la joven pelirosada decía todo muy sonrojada— Sé que lo prometiste, pero cuánto más pasaba el tiempo, más me preocupaba.
Sakura quiso acercarse al azabache para abrazarlo, pero paró en seco cuando notó a Karin. Es decir, ella y Naruto estaban tan centrados en encontrar al azabache que no habían prestado demasiada atención a su alrededor.
—¿Quién es ella? —preguntó Naruto incluso en nombre de Sakura.
—Karin, él es Uzumaki Naruto —habló Sasuke sin entender a qué se refería Sakura con que él lo prometió, así que simplemente lo ignoró y miró al rubio— Te interesará hablar con ella.
—Hola —saludó la pelirroja tomando con más fuerza el brazo del azabache por los nervios, pero se había esforzado por hacer que su voz sonara normal.
—Hola. ¿Quién eres? ¿Por qué estás con Sasuke? —preguntó el rubio con cierto tono inquisidor.
—¿Podemos hablar a solas, Sasuke-kun? —pidió Sakura inquieta— Así también podremos dejarlos hablar a ellos.
—Estoy aquí para apoyar a Karin —respondió Uchiha, pues notó que la pelirosa haría otro de sus intentos por quedar a solas con él para hablar de temas que no le interesaban.
—¿Apoyarla? ¿Apoyarla en qué? ¿Qué es ella de ti? —insistió Naruto.
—Lo que es Karin de mi no importa ahora —el joven le dió una mirada a la pelirroja para que hablara.
—Soy Seidou Karin, la que te envió mensaje hace tres días sobre tu prima —Karin se animó a hablar y de nuevo sintió el estómago revuelto por la forma tan poco amistosa en que el rubio la miraba.
—¿Tu eres la que sabe dónde está mi prima? —preguntó el rubio incrédulo.
Sasuke había puesto su diestra sobre la mano de Karin que sostenía su brazo izquierdo con fuerza y la pelirroja sintió más confianza.
—Si… en realidad, mi verdadero nombre es Uzumaki Karin. Soy hija de Uzumaki Akako —pasó saliva— Bueno, sigo siendo Seidou porque aún no termina el papeleo, pero me entiendes ¿No?
—¡¿Tu eres mi prima?! —gritó impactado.
—Bueno, eso es lo que el investigador privado me dijo hace seis días —con torpeza sacó unos papeles de su bolsa de mano y se los entregó al rubio— Mamá me hablaba mucho de su gemela Kushina, pero nunca la conocí.
—¡Tengo una prima! —exclamó entusiasmado sin mirar el papel y en un impulso se lanzó a abrazar a la pelirroja— ¡Tengo familia!
Los nervios que Karin había estado sintiendo durante toda la fiesta se esfumaron cuando se dió cuenta que Sasuke tenía razón. Naruto no pensaba mal de ella y la había recibido con un efusivo abrazo.
—Por un momento creí que… —Sakura no terminó su frase y sacudió la cabeza para esbozar una sonrisa acompañada de una mirada de arrepentimiento— Sasuke-kun, debiste decirnos que habías encontrado a la prima de Naruto —se acercó a él con timidez— ¿Cómo la encontraste? ¿Tu la buscaste?
—¡Gracias, Teme! No creí que tú serías quien trajera a mi prima —Naruto aún abrazaba a Karin mientras le sonreía al azabache.
—Yo no tenía idea de que fueran parientes —bufó Sasuke, lo que confundió al rubio y la pelirosa, pues entonces no entendían cómo era que estaban acompañándose en una zona privada.
—Tampoco sabía que él conocía a mi primo… es decir, yo tampoco sabía que tenía uno hasta hace seis días —siguió Karin— Sasuke y yo nos encontramos de casualidad en la fies…
—En la Universidad de Oto. Hemos sido compañeros desde el primer día de clases —Sasuke la interrumpió— No habría venido a la fiesta de no ser que ella quería venir a conocerte, Naruto.
—Pero me prometiste que vendrías a la fiesta una semana después de que te envié la invitación —comentó Sakura confundida, pues si era verdad lo que Sasuke decía, eso quería decir que él decidió en el último momento ir a la fiesta. Era absurdo, porque ella le había hablado que organizaría la fiesta para presentarlo con sus padres— Jamás dijiste que te retractabas de ello o que no podías venir en tus demás cartas.
—¿Cartas? ¿Qué cartas? —preguntó Sasuke confundido. Él no enviaba cartas a nadie, ni siquiera a Kakashi.
—Estuvimos intercambiando correspondencia desde que te fuiste de la aldea —Sakura decía desesperada— Incluso me enviaste cartas de amor y me prometiste venir a la fiesta para presentarte oficialmente con mis padres como mi novio —decía desesperada al ver la mirada fría del chico— ¿Ya lo olvidaste? Tengo todas y cada una de las cartas de tu propio puño y letra.
Sakura miraba suplicante al chico, pues no entendía el por qué él negaba la correspondencia que habían tenido durante los últimos tres años. Al mismo tiempo, Naruto y Karin lo miraban expectantes.
—No tienes por qué negarlo. Sakura-chan ya me ha hablado de ello —habló Naruto— No estoy molesto y estaré feliz si ambos lo son, pero si la lastimas…
—Perdona si le dije a Naruto. Sé que dijiste que querías que fuera un secreto hasta que pudieras regresar, pero Naruto tenía que saberlo para poder olvidarse de mi —Sakura explicaba temerosa de que él se enojara— Te prometo que no se lo he dicho a nadie más, espero que por favor no te enojes. Además, ya oíste a Naruto, él lo entendió bien, así que no debes preocuparte.
—¿Sasuke? —a Karin se le escapó la pregunta, pues ella no tenía ni idea de que algo así pasara y si bien no tenía derecho a reprocharle nada porque sólo eran compañeros, simplemente no pudo detener su lengua por la decepción.
—Yo no te he enviado nada a ti ni a nadie —dijo muy serio.
—Pero Sasuke-kun…
—¡¿Cómo puedes negarlo?! ¡Yo también ví esas cartas! —exclamó Naruto muy enojado y para ese momento ya había soltado a Karin y había tomado al azabache por el cuello de la camisa— ¡No te atrevas a romperle el corazón a Sakura-chan de esa forma!
—Yo no envié ninguna carta —Sasuke fue firme en sus palabras y Sakura sacó una carta que había recibido de él para mostrársela.
—Sasuke-kun, esta fue la última carta que me enviaste. ¿No lo recuerdas?
Uchiha empujó a Naruto para soltarse dispuesto a irse, él no tenía por qué ver nada porque él jamás envió nada, pero Karin se había acercado a Sakura y como la pelirosa había extendido el papel, pudo ver la caligrafía ahí.
—Esta no es la letra de Sasuke —Karin tomó el papel de manos de Haruno para cerciorarse— No, esto no lo escribió él.
—Pero…
—¿Por qué crees que yo te enviaría algo como eso?
—Porque tu eres el único que sabría, además de Naruto que me volví cirujano plástico para ayudar a mis padres, pero que realmente quería ser médico cirujano —respondió Sakura con lágrimas en los ojos— Además, en las primeras cartas se mencionaba una y otra vez que te mostrabas frío porque no sabías expresar tus sentimientos. No conozco a nadie más así.
El azabache bufó molesto.
—Disculpa, esta carta está firmada como S°U —señaló Karin que había leído la carta entera.
—¡Sasuke Uchiha! —respondió Sakura mirando al aludido.
—Pero Sasuke jamás firma así —la pelirroja le entregó la misiva a la chica— Él suele escribir…
—Yo no escribí esas cartas. Fue error tuyo asumir que se trataba de mí sólo por esas iniciales —Sasuke no dejó que Karin continuara— Además, es común que la gente firme iniciando por el apellido, así que no puedo ser yo.
—Si estás tratando de engañar a Sakura-chan…
—¿Por qué le escribiría esas cartas a Sakura si ya tengo novia?
—¿Sasuke-kun, tienes novia? —a Sakura se le quebraba la voz al preguntar y enseguida miró a Karin, quien estaba igual de triste y confundida que la pelirosa.
—Vine a apoyarla al reencuentro de su familia —aseguró el azabache mirando a Karin, quien le entendió enseguida, pero no podía asimilar lo que pasaba.
—¿Tu y mi prima? —preguntó el rubio para luego mirar a la pelirroja— ¿Sales con el Teme?
—Bueno… si —Karin dudó al caminar hacia el azabache y lo tomó del brazo— Estamos juntos.
Sakura, al ver la escena, salió corriendo de allí llorando y Naruto, aunque quería seguir hablando con Karin y reclamarle a Sasuke, terminó por correr detrás de la joven Haruno.
—Supongo que lo de mi familia salió mejor de lo que esperaba a pesar de que se fue de esa forma —murmuró Karin para luego mirar a Sasuke— ¿Por qué les mentistes sobre nosotros? Era obvio que esas cartas no son tuyas. Tarde o temprano lo descubrirían —preguntó la pelirroja con nerviosismo al saber que la respuesta no le gustaría— Además, dijiste que no te llevabas bien con Naruto, pero parece que te ve como a un amigo
—Estoy harto de esos dos. Sakura insiste en estar detrás mío y Naruto es capaz de hacerse a un lado por verla feliz y a mi atado aquí —respondió el azabache molesto— Pensando que estoy con alguien más, hará que Sakura deje de molestarme y Naruto se centrará en consolarla.
—Sasuke, no me molesta fingir ser tu novia aunque hubiese preferido que me lo consultarlas primero —comentó Karin para encubrir que le gustaba la idea de ser su novia, pero al final soltó un suspiro porque eso era sólo una mentira— Siendo prima de Naruto, y si no me odia por esta historia, tarde o temprano se dará cuenta que es un engaño.
—Una vez que concluya mis asuntos en Konoha, no tendré motivos para volver aquí, así que eso no importará —Sasuke le aseguró— Sígueme la mentira hasta ese entonces. Será un par de meses cuánto mucho.
—Tal vez no sea necesario fingir tanto tiempo. Después de cómo se le rompió el corazón a esa chica, es posible que no vuelva a mirarte —respondió Karin un poco decepcionada con la idea— O quizá encuentre a su admirador secreto. Si estaba tan ilusionada con esas cartas, quizá realmente está enamorada de esa persona.
—No sé ni me interesa. Sólo quiero que me ayudes a evitarlos.
—De acuerdo, lo haré si a cambio me das un beso —Karin le pidió con coquetería— Si vamos a fingir ser novios, debería ser normal ¿No?
La pelirroja se acercó a él, cerró los ojos y deseó que él realmente la besara, aún cuando en el fondo sabía que él no lo haría y de todas formas ella lo ayudaría.
Cuando Sasuke vio aquello, se puso un poco nervioso y por instinto, volteó a todos lados esperando que nadie los viera. Al no ver a nadie, regresó la vista hacia la pelirroja y por primera vez en toda la noche la vio detenidamente.
Karin llevaba un vestido de cóctel color blanco con algunas flores adornando las orillas y sin mangas, aunque al mismo tiempo, el vestido tenía una sección de velo en las áreas del escote y los brazos de manga larga que disimulaban las marcas de quemaduras que ella siempre cubría. Así mismo, estaba peinada de una forma que combinaba lo elegante del vestido y al mismo tiempo delataba su juvenil rebeldía y completaba su vestimenta con accesorios de bisutería sencilla que, estaba seguro, era barata, pero que a simple vista parecía real.
Además, hasta ese momento Sasuke se daba cuenta que ella no llevaba puestos sus anteojos cuando se suponía que ella no podía ver bien sin ellos. Estaba seguro que estaba usando lentillas aunque las odiara y… llevaba un maquilla sencillo. Su belleza natural no necesitaba ser oculta tras grandes cantidades de maquillaje.
Si, Karin se veía hermosa y siendo honesto, besarla era un deseo que ya tenía desde hacía un tiempo, pero como quería evitarse esos molestos lazos, ni siquiera lo había intentado. En esta ocasión, ella estaba pidiendo el beso a cambio de un favor, así que no sería mala idea ceder ¿Verdad? Podría obtener un beso sin compromisos.
Convencido, el chico dió un paso al frente dispuesto a besar a la joven, pero antes de inclinarse recordó a Kakashi. Él debía estar en alguna parte del jardín vigilándolo y por ello había avisado a Sakura y Naruto de su paradero. Sasuke quería besar a Karin, pero no lo haría a la vista de su molesto tutor aún cuando fuera a presentarla como su novia, así que se arregló la voz.
—Volvamos a la fiesta —musitó desviando la mirada y ofreciendo el brazo a la pelirroja.
Al abrir los ojos, Karin vio a Sasuke con el antifaz de Kaito puesto y aunque se sintió decepcionada, desde el principio imaginó que no lo conseguiría.
—Pensé que querías estar fuera de la vista de esos dos.
—Ya saben dónde habíamos estado, es mejor moverse.
—Sasuke, yo tengo que hablar con Naruto en algún momento —ella le recordó.
—Podrás hacerlo cuando llegue la persona que espero.
Karin no tuvo más remedio que tomarse del brazo de Sasuke, pues aún si ella iba a buscar a su primo, él seguramente estaba consolando a la pobre chica que tenía el corazón roto, así que tendría que pasar algún tiempo antes de poder hablar con él. Sin embargo, ella quería un pago por todo ello y antes de salir del balcón, ella aprovechó sus tacones para besar la mejilla del azabache.
—Esto es sólo un adelanto.
Sasuke ocultó su bochorno y en silencio la condujo dentro del salón.
Si, una vez más, esta historia tiene más de un capítulo y me alegra mencionar (aunque en fanfiction lo he revelado desde las etiquetas), que en esta ocasión estaré usando como pareja secundaria, uno de los ships crack que me agradan bastante y que no siempre uso, sin embargo, vi la oportunidad de integrarlo.
Espero que la historia les haya gustado y eventualmente subiré la actualización n.n
