Este drabble es mas corto de lo que viene a ser habitual en mí, también viene a ser más estúpido y sin mucho sentido (lo digo en serio XP) y más subido de tono (aunque no de forma explicita, lo mío es dejar todo a la imaginación XDD) Aparte de eso, no sé como he sido capaz de escribir esto, por que mi odio hacia este personaje es difícilmente descriptible…quizás es que me gustan los retos XD o soy masoca, que también es posible. En fin, que espero que disfrutéis al menos leyendo esta parida.

como siempre, mil gracias por los reviews. sois los mejores!

PD. Mi primera lectora, (siempre es la primera en leer lo que voy a publicar XD) me ha pedido que os diga que cuando lo hayáis terminado, recomienda que volváis a leer las frases de los capitanes. Según ella, es lo mejor XD Eli, querida, en serio, necesitas leerbuena literaturaXD


Frankestein

Saber es poder.

Estas eran las palabras que motivaban la existencia de Kurotsuchi Mayuri, capitán de la duodécima división. Ni más ni menos.

Quizás por ello, cuando aquella mañana recibió aquel misterioso paquete que provenía del mundo de los vivos, se sintió inmensamente irritado.

No por que alguien le hubiera enviado un obsequio (si podía llamarse así), si no por que el contenido era algo totalmente desconocido para él.

Lo tomó en sus manos y le echó un vistazo, intentando averiguar qué función tendría el extraño aparato.

Lo golpeó contra la mesa, lo partió en dos y lo volvió a unir, no sin cierta dificultad; le aplicó descargas, lo congeló y lo sometió a altas temperaturas. Pero no sirvió de nada.

- ¡Argh¡Estúpido artefacto! – exclamó, fuera de sí, golpeando la mesa con violencia - ¡Exijo conocer tu cometido o te partiré en trozos tan pequeños que no te reconocerá ni tu estúpido fabricante humano!

- Mayuri-sama…

- ¡Cállate Nemu ¡esto es importante!

- Pero Mayuri-sama…

- ¡Cállate!

- ¿No debería leer el manual de instrucciones, Mayuri-sama? – preguntó la teniente, sosteniendo en alto un pequeño papel.

El capitán le arrebató a su teniente el pliego y gruñó.

- Cierra el pico, estúpida. – exclamó, para rápidamente, comenzar a leer.

Nemu permaneció silenciosa en su lugar.

- Bla, bla, aquí no dice nada útil…- Kurotsuchi repasó las indicaciones escritas con el ceño fruncido – un momento, aquí dice …Nada volverá a ser igual con nuestro nuevo V2000, disfrute encontrando el ppu…¿qué demonios es esto¿Qué significa esta palabra? Jamás la había visto antes.

- Eso es…

- ¡Cállate de una vez, Nemu! – bramó el capitán – Tengo que pensar. Por que esta es la clave, esta extraña palabra debe ser la clave para dominar este aparato… ¡Nemu, tráeme los últimos informes!

- Sí, Mayuri-sama…

La teniente depositó una pila de papeles sobre el escritorio del capitán, el cual, los revolvió rápidamente.

- No puede ser¡no hay información¿eres estúpida? – exclamó, volviéndose hacia Nemu – ¡si no está la información que necesito ¿para qué los quiero!

- Mis disculpas, Mayuri-sama.

- Parece que no me queda más remedio…

Por primera vez en su vida, Kurotsuchi no sabía que hacer con aquel aparato, y además la terminología utilizada en el extraño manual de instrucciones lo desconcertaba. Sobre todo, aquella misteriosa palabra que tanto poder parecían enterrar en su significado.

Aquella palabra era la clave, estaba seguro de ello. Necesitaba saber, necesitaba conocer el secreto. Inmediatamente.

Sin embargo, su búsqueda del conocimiento no parecía que fuera a dar su frutos demasiado pronto. Y por ello, se vio obligado a hacer algo que en otras circunstancias no se habría atrevido ni a plantear siquiera: Preguntarle a otra persona.

Tal era su desesperación por saber, que recorrió todo el Seireitei en busca de los capitanes, con la esperanza que, debido a su experiencia, pudieran contestar a su pregunta. Por desgracia para él, las cosas nunca salen como uno las ha planeado.

Miró el papel que sostenía entre las manos, con las respuestas obtenidas tras tantas horas de esfuerzo, y chasqueó la lengua, con desagrado.

- No tengo ni idea de lo que es ese pu... lo que sea - fue la clara respuesta de Komamura ante la pregunta formulada por el capitán de la 12.

- ¿Qué clase de estúpida e irrelevante pregunta es esa? – fue la replica de Byakuya, ocultando tras su frío gesto, según Mayuri, su ignorancia.

- Lo siento, Kurotsuchi, me temo que no puedo ayudarte, pero la cuestión es que me resulta familiar…- fue la amable, pero nada útil, respuesta de Ukitake.

- Oh, es una nueva marca de sake, seguro.- afirmó Kyoraku Shunsui, sonriendo.

- Es una palabra que describe la balanza de la justicia, no hay duda de ello.- contestó Tousen, en su, siempre ignorado por Mayuri, mitin sobre la justicia.

- No sé de que me hablas, pero ¿no tendrá algo que ver con Yoruichi-sama, verdad¿VERDAD? – fue la apasionada respuesta de Soi Fong.

- Eso es algo que me gustaría comprobar personalmente.- fue a agradable aunque enigmática contestación de Unohana.

- Así es como se llama cuando abres a tu enemigo por la mitad y sus vísceras se esparcen por el suelo.- dijo Zaraki con expresión macabra.

- Oh, supongo que podrás averiguarlo por ti mismo. Buena suerte. – sonrió Aizen para exasperación del capitán de la doce.

- Ah, quien sabe – fue la respuesta de Ichimaru, mientras se encogía de hombros – pero seguro que es divertido¿no te parece?

- Estos viejos siempre igual…- murmuró Hitsugaya, saliendo con paso rápido, antes incluso de que Mayuri le preguntara directamente.

Kurotsuchi entró en su laboratorio, irritado como nunca en su vida, sus planes fracasaban uno tras otro, pero él estaba decidido a descubrir el secreto de aquella indescifrable palabra. Y si la teoría no le permitía acceder al conocimiento, lo haría por medio de la práctica.

- Mayuri-sama …

- ¡Cállate, Nemu!

- Pero Mayuri-sama…

- ¡Que te calles, idiota!

El capitán lanzó una mirada asesina a su teniente, tras golpear la mesa.

- ¿No ves que me desconcentras, estúpida? Este experimento es demasiado importante para que vengas a interrumpirme ¡lárgate!

- Pero Mayuri-sama, no creo que…

- ¡Fuera!

- Sí, Mayuri-sama – asintió ella obedientemente, girando sobre sus talones y desapareciendo tras la puerta.

- Bien, bien – habló Kurotsuchi, escalpelo en mano, a su aterrado conejillo de indias – encontremos entonces ese "punto G".


no me pregunteis cual era elartefacto que le entregaron a mayuri, teneis suficiente cabeza para imaginaroslo...verdad? XD aunque debo decir que cuando lo escribí, pensabaen urahara (aka el tendero loco) como el remitente de dicho paquete...si, se me va la olla, lo sé. :P