¡Hola otra vez¿qué tal? espero que bien jejejejejeje

(para no perder la costumbre) Todos estos personajes pertenecen a JK Rowling y a la Warner (por más que lo he intentando nadie se cree que me los haya inventado yo...)

Y ahora las respuestas a los mensajes jejejeje:

Shagy Sirius: ¿He actualizado bastante rápido? Espero que sí jejejejeje. Gracias por tu comentario y espero que este capítulo también te guste como el anterior (o quizás más jejejeje). ¡Ah! gracias por recordarme lo de los reviews anónimos... si yo lo intenté pero... es que... ¡se me olvidó guardar los cambios! jajajajajaja si es que tengo una memoria de pez... ¡tres segundos exactos!. ¡Nos vemos¡Agur!

Revitaa Locatis-Potter: ¡Hola! en este capitulo verás lo que ha descubierto Snape... seguramente te esperabas una parte (por tu mensaje jejejejeje ¿tan obvio era? jos estoy perdiendo mi toque jajajaja) ¡pero la otra no! (o eso espero...). Tú tranquila que ya haré yo algo para que Ron no lo pase mal... pero por ahora eso es Top Secret jajajajaja. La verdad es que pensará bastante en el sueño pero creo que ahora pensará en algo más... que mala soy jejejejeje. Gracias por los ánimos y espero que este capítulo te guste ¡Agur!.

Calixta: ¡Hola otra vez! Nah... ¿seguro que soy malvada? que va... exageras... Jajajajaja síííííííííííí Harry es un poco despistadillo jajajajaja y en cuanto a Ron... ya haremos algo no te preocupes. En cuanto a Draco... mmmm ya me lo pensaré ¡seguro que no le importa que seas su amiga (más si se lo pido "amablemente" jejejejeje). En cuanto a lo que ha descubierto Snape... ¿en serio que soy tan obvia? mmmm voy a tener que complicar algo más esto ¡si no vais a saber más que yo sobre la historia! jajajajaja. ¿De verdad que tengo mucha imaginación? me alagas (ahora mismo estoy colorada) ¿incentivo? creo que ninguno... me imagino una especie de película (suena como si estuviese loca o algo parecido) no debes tener envidia ¡seguro que tú tienes más que yo¡Nos vemos lectora fiel jajajajaja¡Agur!

Han descubierto a mi doble ¿verdad?

Sí, Voldemort está furioso. Esta tarde me ha torturado personalmente para sacarme información…

¡Oh! - exclamó Hermione - Perdona…

No te preocupes, no ha conseguido sacarme nada… Pero creo que ya sabe dónde estás. Bueno… exactamente cuándo estás…

Vaya… tendré que tener mucho cuidado…

Con este colgante sabrás con quién estás hablando en todo momento, no te pillará desprevenida. Tenemos que empezar con el plan inmediatamente.

Sí, tranquilo. Mañana mismo voy a estudiar defensa contra las artes oscuras y les enseñaré algún nuevo hechizo…

¿Qué tal vas con el medallón¿Has encontrado algo?

La verdad es que no… en los libros se menciona algo pero nada que me pueda ayudar a encontrarlo, ni siquiera una foto o un simple dibujo… ¿cómo lo voy a encontrar?

Bueno… siempre has sido una sabelotodo insufrible… - le sonrió Snape.

Sí, tienes razón - sonrió ella - Lo encontraré aunque tenga que revisarme toda la sección prohibida de esta biblioteca.

Si pudiese ayudarte…

Bastante estás haciendo con aguantar todas las torturas y no delatarme…

No me refiero a mí, sino a mi yo pasado. Seguro que podría ayudarte en algo.

Si voy donde tu yo pasado y le digo algo sobre esto pensará que estoy loca y no dudará en hacer que me echen de la escuela, estoy segura de que disfrutaría con ello…

Yo también estoy seguro - le dijo Snape mientras evocaba los tiempos pasados - Estoy seguro.

Bien… creo que voy a seguir… ¿Alguna idea?

Shhhhhh un momento - le interrumpió Snape mientras desaparecía del colgante.

¿Snape? - preguntó la castaña mientras miraba atentamente al medallón.

¿Snape? Vaya… no me digas que también le vas a abrazar a él - le dijo una voz familiar que le sobresaltó.

¿Quién es? - preguntó al vacío mientras cerraba rápidamente su colgante escandiéndolo y se volvía al libro.

¡Ya no reconoces mi voz! Vaya… - le dijo sonriendo el moreno que estaba llegando a su mesa.

¡Harry! - le dijo ella mientras le miraba a la cara y no notaba cambio alguno en su colgante - ¿qué haces aquí? Pensé que estarías ya durmiendo…

Bueno… volví a tener el mismo sueño y como no me pude volver a dormir pensé que leyendo un par de libros lo conseguiría y vine aquí. La verdad es que no pensé que aún seguías en la biblioteca; son más de las doce…

Sí, ya sabes… cuando estoy estudiando se me pasan las horas volando - le dijo mientras sentía que el colgante ardía otra vez, señal inequívoca de que Snape quería volver a comunicarse con ella. - Será mejor que nos vayamos a dormir…

¡Pero si ya te he dicho que yo no puedo!

Vale… llévate este libro - le decía mientras le tendía el que había cogido ella - te ayudará a dormir.

Si no me duermo leyéndolo siempre podré decirle a alguien que me deje K.O. - le respondió mientras observaba asustado el grosor del libro - Por cierto ¿qué hacías leyendo este libro?

Pues… estudiando claro - le respondió mientras pensaba mentalmente que no se había parado a mirar de qué trataba - ¿Qué creías?

No creo que tengamos ningún examen de leyendas Hermione…

Nunca se sabe - le dijo mientras se levantaba y le instaba a que él hiciese lo mismo - Nunca se sabe…

Está bien, está bien… ya me voy a descansar… - le dijo Harry mientras tiraba suavemente de la túnica de la castaña - Pero tú también te vas. Últimamente pareces muy cansada.

Vale

Wingardium leviosa - dijo el moreno cuando llegaron al retrato de la señora gorda.

¿qué? Ah sí… pasad… - respondió somnoliento el retrato mientras se abría perezosamente.

Buenas noches Hermione - le dijo Harry mientras se acercaban a las escaleras.

Buenas noches Harry - le contestó la castaña que iba corriendo hacia su habitación y dejaba parado al moreno que daba la impresión que iba a contarle algo más.

¿Snape? - dijo la castaña una vez entró en el baño de su habitación - ¿qué es lo que sucede?

Me he enterado de algo, con esta información seguramente puedas adelantarte para ayudar.

Bien…

Como ya te he dicho Voldemort ya sabe cuándo estás…

¿Cómo lo ha podido averiguar? - le preguntó nerviosa.

Bueno… es un mago muy poderoso. Además cuando te fuiste no le dejaste información a tu doble para que recogiese todo lo que habías dejado esparcido por tu habitación… - le reprochó Severus mientras en su rostro se dibujaba una mueca de enfado.

¡No¿Cómo pude ser tan descuidada?...

Tenías mucha prisa por irte… Ya da igual…

¿Entonces vendrá a este tiempo? Ahora es muy poderoso si se junta con su futuro que es mucho más poderoso aún… ¡Será invencible!

No, ese no es su plan… - susurró Snape mientras sus labios se retorcían en una mueca de horror - Quiere cambiarse por alguien, alguien muy cercano a vosotros y de quien nunca sospecharíais… Aún no sé quién puede ser pero tengo una ligera idea…

¿Dumbledore? - pronunció Hermione mientras sus piernas comenzaban a temblar ligeramente.

Es muy probable. Pero no te preocupes te ayudaré. Te contaré exactamente lo que pasó cuando te encomendó a mi cuidado…

Te escucho…

Unos días antes de la primera visita a Hogsmade… me retuvo en el rellano argumentando que debíamos hablar de la marcha de mis clases. Cuando nos quedamos solos únicamente me dijo que debía de cuidar de ti cuando nadie estuviese cerca, que era de vital importancia. Yo le contesté que porqué debía de hacer eso ya que tú nunca estabas sola y siempre te protegían tus amigos. "Únicamente haz esto Severus, es lo último que te voy a pedir; he de desaparecer por el bien de un ser querido. Cuídala cómo si fuese la última esperanza del mundo.". Recuerdo estas palabras cómo si me las hubiese dicho ayer, las recuerdo en sueños intentando averiguar por qué nos abandonó el primero en esos momentos tan difíciles…

Creo que ya lo sé… - exclamó en un suspiro.

Sí, Voldemort le hará algo a su hermano para poder hacerse pasar por él y acercarse a Harry sin que nadie sospeche. Tienes que adelantarte a él Hermione…

Pero si hago eso, si ayudo a Dumbledore y él vuelve al colegio dejando a Voldemort sin ningún cuerpo que sustituir ¿qué es lo que pasará?

¡No! No debes hacer eso…

¿Rescatar al hermano de Dumbledore? - preguntó Hermione.

No… eso sí debes hacerlo pero Dumbledore no debe volver al colegio…

¡Ah! Debo dejar que Voldemort crea que ha conseguido su propósito y que venga a la escuela. De todas formas yo sabré cuándo tengo que alejarles de él…

Sí, lo has entendido. Ahora tenemos que trazar un plan…

Bien… el domingo será la primera visita, así es que Voldemort aún no ha sustituido al director…

Sí, tal vez puedas hablar con él y cantárselo todo…

¿Crees que me creerá?

Si piensas en las últimas palabras que me dijo estoy seguro de que sí…

Tienes razón… ¿Qué te parece si hacemos un doble de él?

¿Un doble?

Sí, piénsalo… Aquí hay muchos pasadizos secretos y Dumbledore podría salir o esconderse en uno de ellos, mientras esté su doble no creo que nadie sospeche nada. Lo único que debemos hacer es que el profesor le de las instrucciones precisas a su doble para que nadie sospeche ¿verdad?

Es una buena idea… También podemos hacer un doble de su hermano, le decimos los hechizos exactos que pude realizar y… - Snape hizo una pausa - le tendremos que decir cuándo tiene que morir…

Es cierto - le dijo Hermione apesadumbrada - los dos han de morir…

Bien, mañana tienes que hablar con el director y contarle todo.

¿Qué hechizos le tengo que decir al doble de su hermano?

Eso supongo que lo tendrás que decidir tú, pero que no se te olvide decirle que ha de sufrir con cada ataque y morir… ya sabes que los dobles no sienten…

Sí, claro… mañana hablaré con él…

¿Hermione¿Estás ahí metida? Uff necesito entrar… - sonó la voz somnolienta de Ginny mientras tocaba a la puerta.

Sí soy yo… ahora mismo salgo - exclamó la castaña mientras le decía buenas noches a Snape y cerraba el medallón. - No estoy muy segura de que funcione - susurró para sí misma mientras se lavaba las manos.

¡Gracias! - le dijo Ginny mientras entraba como un vendaval en el baño.

Hermione estaba confundida y a la vez aterrada; dentro de poco él estaría en Howgarts y tendría que enfrentarse a él… otra vez. Pero de repente una cálida sensación invadió su cuerpo: ahora podría librarse de él. Primero ayudaría a Dumbledore y después a sus amigos. Mañana practicarían hechizos y se prepararían y tendrían la ventaja de que alguien los guiaría en el buen camino. Mientras pensaba esto se dirigía a su cama y apartaba el dosel descubriendo una cama blanda y ancha que esperaba el peso de su cuerpo.

¿Con quién vas a hablar mañana? - le sorprendió Ginny mientras se acercaba a ella.

¿Qué?

Bueno… te he oído decir que mañana ibas a hablar con alguien…

¡Ah¡Sí! Voy a hablar con Dumbledore…

Ah… - Ginny se extrañó pero no preguntó nada más porque su amiga ya se había metido en la cama y estaba tumbada al lado contrario de donde se encontraba ella. - Buenas noches…

Buenas noches - murmuró Hermione mientras sus párpados se iban cerrando poco a poco.

Apareció una luz muy fuerte proveniente del bosque. Ella se acercaba lentamente pero con decisión; una voz melodiosa la invitaba a adentrarse en ella. Pero de repente una mano le sujetó su brazo y le impedía ir. Forcejeaban y cuando estaba a punto de tocar la luz otra voz le dijo "no te vayas, quédate conmigo"; se dio la vuelta y en lugar de encontrar a un hombre encontró un medallón en el suelo y una puerta. Recogió el medallón y se encaminó a la puerta sin escuchar la voz que la invitaba a reunirse con ella en el bosque. Cuando abrió la puerta una luz distinta la bañó y ahí estaban todos sus amigos y su familia. Sin apenas tener tiempo para darse cuenta en dónde estaba sintió un abrazo y la misma voz que le había salvado del bosque le decía ahora "gracias, no sabes cuánto te necesito". En ese instante Hermione se despertó. - ¿Qué significará este sueño¿Quién será él? Ese medallón… ¿será el que necesito?... Que sueño más extraño… - pensó mientras se echaba otra vez en la cama boca arriba. No podía volver a dormirse pensando en el sueño. Normalmente soñaba todos los días con la muerte de Harry y el comienzo de una pesadilla que se hizo realidad pero… ese sueño era muy diferente. Al principio se sentía feliz cuando se acercaba a la luz pero, cuando sintió el tirón en su brazo comenzó a estar triste… sabía que dejaba algo atrás. Mientras seguía mirando al techo y pensando poco a poco volvió a dormirse.

¡No te vayas¡Quédate! - exclamó Harry en medio de la noche. - ¿Qué¿Qué ha pasado¿Dónde estoy? - preguntaba desconcertado mientras miraba a uno y otro lado.

¿Estás bien? - le preguntó Ron al que le había despertado su grito.

Sí… creo que sí… - le respondió no muy convencido el moreno.

¿Ha sido una pesadilla¿Quieres contármela? Tal vez eso te ayude en algo - le dijo Ron mientras se levantaba y se sentaba al lado de Harry.

Mmmm no estoy muy seguro de lo que pasa, pero de lo que sí estoy seguro es de que pierdo a alguien muy importante para mí.

Tranquilo… será mejor que la próxima vez sueñes hasta el final… tal vez te sorprendas.

Desde que se volvió a dormir Hermione recordó una y otra vez el enfrentamiento con Voldemort, cómo les tendió la trampa, como Harry intentó enfrentarse con él… pero eso era lo único que podía ver. Lo cual era bastante extraño ya que ella presenció hasta el final la batalla. Cuando aparecieron los primeros rayos del sol se despertó. Se levantó, se desperezó e iba a vestirse con los harapos de siempre cuando vio su uniforme cuidadosamente doblado y en ese instante recordó que estaba en el pasado. - Vaya… Espero no volver a olvidarme - pensó para sí misma cuando se levantó y se vistió en silencio para que sus compañeras no se diesen cuenta. Cuando iba a acercarse a la puerta de la habitación el colgante que llevaba volvió a subir de temperatura y tuvo que correr al baño.

¿Qué es lo que pasa?

Hermione ¿estás bien? - le preguntó preocupado Snape.

Sí, claro que estoy bien…

Ha sucedido algo… no sé muy bien el qué pero…

¿Ha cambiado el futuro¿Harry no ha muerto?

Pues… la verdad es que no, no ha muerto…

¡Vaya! Parece que nuestro plan va a funcionar - le dijo ilusionada Hermione.

Bueno… no creo que funcione como esperábamos…

¿Por qué dices eso? Si Harry está vivo significa que Voldemort no lo está…

Hay diferentes grados de muerte Hermione…

¿A qué te refieres?

Pues… a que Harry está… mentalmente muerto.

¿Qué!

Bueno… has cambiado el futuro… en realidad has cambiado TU futuro - recalcó Snape mientras intentaba encontrar las palabras precisas.

¿Mi futuro? - preguntó sin entender muy bien qué es lo que le estaba intentando explicar Snape.

Bueno… lo has cambiado de tal forma que… digamos…

¿Qué? - le interrumpió casi fuera de si - Por favor… Te refieres a que he…

Muerto - terminó Snape. - Y bueno… - no sabía por dónde seguir ya que veía que la castaña tenía lágrimas en los ojos y una expresión de espanto - Harry debió de verte morir porque desde entonces no puede ni articular palabra. Únicamente se queda en un rincón y mira al suelo. Por las noches sueña y repite tu nombre…

No… - lloró Hermione mientras le escuchaba. - No puede ser… todo esto para nada - dijo en un suspiro mientras se imaginaba el futuro - ¿Y Ron¿También está muerto? - estas últimas palabras iban acompañadas de la esperanza de una negación.

Está vivo… pero está encerrado conmigo… Debió de ir en vuestra ayuda y le capturaron. Está en mejores condiciones que Harry pero…

¿Y los demás? - Esta vez hubo miedo en su voz.

Como antes…

¿Hermione¿Estás bien? - le dijo Snape asustado al ver el rostro de la muchacha paralizado por el dolor.- No te preocupes me enteraré de qué pasó y sabiéndolo lo cambiaremos todo…

¿Estás seguro?

Sí. Ahora no es el momento de venirse abajo. Has estado aguantando cinco años este momento y tienes que aprovecharlo Hermione. Lo lograrás, yo estoy seguro. Si no lo estaría ahora mismo ni me hubiese molestado en intentar contactar contigo… ya sabes que yo no estoy de acuerdo con apoyar causas perdidas… - esto último lo dijo con una sonrisa en los labios lo que hizo que Hermione creyese sus palabras.

Tienes razón. - le contestó con renovados ánimos - Pero… ¿Cómo vas a saber lo que pasó?

Se lo preguntaré a Ron… creo que me será de más ayuda que Harry.

Está bien… cuando lo sepas dímelo, no quiero que ellos sufran lo mismo que hemos sufrido nosotros.

Bien… - y cerró el medallón en el mismo momento que llevaban de vuelta a Ron a la celda.

Hasta luego Snape… eres mi última esperanza - le dijo Hermione después de cerrar su medallón. Era extraño decir estas palabras ya que en el pasado hubiese preferido depender de una doxy sin tener ella antídoto…

Después de esta conversación salió del baño y la misma luz que comenzaba a inundar su cuarto ahora le parecía más apagada, pero se obligó a sonreír y a pensar que todo lo iba a superar. Ahora lo más importante era hablar con Dumbledore. Aunque… tal vez es ahora cuando estoy sellando mi final… - pensó Hermione mientras bajaba las escaleras que le conducían a la sala común. - No seas tonta Hermione, tienes que ser positiva y ayudar a Dumbledore, así seguro que él les puede ayudar después… sí - se dijo mientras se daba pequeños golpecitos en la cabeza cómo queriendo decir que era hora de dejar de pensar cosas tristes. Estaba casi en la mitad de la sala cuando se fijó que estaba nevando y corrió a mirar por la ventana. Hacía mucho tiempo que no veía nevar y le encantaba ver cómo todos los jardines comenzaban a tener una suave capa de esponjosa nieve. Cuántas veces había deseado volver a jugar con sus amigos en una batalla de bolas de nieve mientras estaba sola en su "habitación". Cuántas veces recordaba sus caras sonrientes mientras ella los miraba…

¿Hermione no vienes? - le preguntó Ron mientras comenzaba a amontonar bolas de nieve en un agujero.

No, prefiero terminar de leer este libro…

¡Vamos!

No insistas Ron, prefiero terminarlo…

Bueno… ¡cómo quieras¡Prepárate Harry! Esta vez no me vas a dar ninguna vez - le decía el pelirrojo mientras buscaba un sitio en el que esconderse.

Sí, bueno… eso es lo que siempre empiezas diciendo y acabas mojado… - le dijo Harry entre risas.

Pero ahora es diferente… - le dijo misteriosamente su amigo - ¡Ahora tengo aliados! - sonrió mientras sus dos hermanos se le unían y blandían amenazantes sus bolas de nieve.

¡No¡Eso no es justo! - comenzaba a decir Harry mientras se reía a carcajadas - Me tendré que buscar aliados…. ¡Hermione¡Ven¡Ayúdame!

Ya os he dicho que prefiero terminar el libro…. - les dijo mientras intentaba leer por decimocuarta vez la misma línea del libro, cuando de repente una bola le impactó en medio de la cara. - ¿Quién?... - comenzó a decir levantando la cabeza. Así es cómo se dio cuenta de que había sido uno de los gemelos ya que ambos la miraban con cara pícara. - ¿Sabes Harry? Creo que voy a ayudarte - dijo finalmente mientras se unía a su amigo.

¡Bien! - dijo el moreno mientras ambos preparaban sus bolas de nieve - Ahora os vais a enterar…

Recordaba los buenos momentos mientras se quedaba embobada mirando por la ventana sin darse cuenta de que no estaba sola. Un muchacho bajaba en silencio las escaleras mientras se iba calzando el último zapato. De repente perdió el equilibrio y al agarrarse a una de las sillas hizo un gran estruendo…

¡Vaya! - dijo Harry mientras seguía agarrando con fuerza la silla que le servía de apoyo.

¿Quién? - comenzó a decir Hermione mientras se daba la vuelta.

Lo siento… es que me he tropezado… - explicaba el moreno cuando la vio. Al ver su imagen en frente de la ventana su corazón dio un vuelco. No sabía porqué le pasaba eso si estaba acostumbrado a ver a su amiga, pero esta vez fue distinto y él no se lo explicaba. Mientras intentaba llegar a una conclusión final no dejaba de mirar fijamente a su amiga.

¿Estás bien? - le dijo Hermione que ya había llegado hasta él - ¿Estás bien Harry? - le volvió a preguntar otra vez, mirándole a los ojos. - ¿Por qué tendré que mirar a la gente a los ojos? No se si seré capaz de mirarle más veces sin decirle nada… - pensaba Hermione mientras le ayudaba a ponerse de pie.

¿Eh? Sí… estoy bien. Gracias - logró decir el moreno mientras soltaba la silla. - ¿Cómo es que te has levantado tan pronto?

Bueno… me ha despertado la luz del día y ya no me he podido volver a dormir - le contestó ya que el medallón seguía conservando su temperatura normal. - Supongo que tú iras a desayunar para poder entrenar ¿no?

Sí, lo has adivinado…

¿Y Ron¿No baja?

Sí… le he dejado mientras se vestía…

¿Has dejado a Ron solo en una habitación que tiene una cama a estas horas de la mañana? - sonrió Hermione - ¿Seguro que quieres que desayune y entrene contigo?

Es cierto - se rió Harry - Bueno… de todas formas podemos ir nosotros a desayunar… Le he dicho que le esperaba en el Gran Comedor.

Claro, vamos.

No había nadie en los pasillos a esas horas de la mañana de un sábado, hasta los cuadros seguían dormidos. Los dos chicos caminaban despacio cada uno pensando en su mundo particular, en ningún momento se dirigían ni la mirada ni la palabra. Cuando de repente Harry, sin que Hermione se diera cuenta ya que estaba pensando en cómo iba a decirle a Dumbledore todo lo que pasaba, miró de reojo a su amiga. Siguió mirándola durante todo el camino mientras intentaba averiguar el porqué de su reacción de esta mañana.

Bueno… estamos de suerte seguro que podemos comer todo lo que queramos - interrumpió Hermione los pensamientos de Harry.

Sí, creo que vas a tener razón - le respondió Harry mientras abría el comedor y comprobaba que estaban totalmente solos.

Pues… vamos… - le dijo sonriendo Hermione.

Los dos comenzaron a desayunar en silencio. El moreno ya no sabía que hacer, no podía dejar de mirar a su amiga y eso le asustaba. - Está bien… miraré al techo - pensó Harry. Pero fue inútil, sus ojos se desviaban al rostro de la castaña que estaba desayunando con aire pensativo. - Me gustaría saber qué es lo que está pensando - se sorprendió pensando. - ¡No! Harry piensa que es tu mejor amiga… ¡sí! Es mi mejor amiga y sólo eso… ¿Por qué no puedo convencerme? Es que es tan guapa… ¿No! - se repetía una y otra vez mientras movía negativamente su cabeza - ES MI AMIGA.

Harry ¿te pasa algo? - le preguntó Hermione que ya había acabado su desayuno y se preparaba para su conversación con Dumbledore.

¿Qué? No… - le dijo el moreno mientras intentaba no ponerse colorado - Estaba pensando en una jugada que creo que no podré hacer…

¡Ah! No te preocupes yo estaré contigo…

¿Qué! - casi gritó Harry mientras recordaba las palabras de la chica de su sueño.

Pues… que estaré contigo… ya sabes viendo el partido - le contestó extrañada su amiga - Como siempre, a no ser que prefieras que no os vea…

No, no es eso… perdona… es que… - comenzó a decir el moreno cuando de repente se abrió la puerta del Gran Comedor y apareció el pelirrojo.

Buenos días - les saludó somnoliento. - ¿Cómo es que estáis los dos juntos¿No podías dormir Hermione?

No... la verdad es que no, Ron.- El colgante seguía teniendo la misma temperatura. - Bueno, tengo que ir a hablar con Dumbledore sobre un asunto relacionado con mis estudios. Nos vemos luego en el campo ¿vale?

Claro, hasta luego - se despidió el pelirrojo mientras comenzaba a reunir todo su desayuno.

Hasta luego - le dijo Harry mientras miraba a su amiga salir por la puerta - Sólo mi amiga… - se intentó volver a convencer - sólo eso…

Mientras Hermione había llegado al despacho de Dumbledore y miraba a las estatuas que guardaban su entrada. - ¿Cuál será la contraseña?

¿Qué quieres niña? - le preguntó una de las estatuas.

Quiero hablar con Dumbledore ¿está despierto?

Sí, pero dudo que él quiera hablar contigo… - le respondió la otra estatua mientras dirigía su cabeza hasta el sitio en el que se encontraba Hermione.

Yo creo que sí que querrá…

Mmmm espera que se lo pregunto - le dijo la primera estatua que le habló.

Creo que deberías tener más respeto jovencita - le reprochó la segunda estatua.

Bueno… - comenzó a decir la castaña pero la otra estatua le dijo en ese momento que podía subir al despacho del director.

Se acercó a la gran estatua del fénix y subió al primer escalón justo cuando las escaleras comenzaban a moverse. Mientras llegaba al despacho del director pensaba cuál sería la mejor forma de hablarle de todo lo que estaba pasando y de cómo el futuro se iba a convertir en una pesadilla. Cuando se estaba convenciendo que él seguramente le diría que todo lo que le había pasado era un sueño, las escaleras se pararon y ella se acercó despacio a la mesa del director. Observó cómo los retratos de los otros directores estaban vacíos y únicamente estaban Dumbledore y Fawks. El director no la miraba con semblante interrogante sino que se dibujaba en su cara una sonrisa probablemente de aire triunfante. Era muy extraño, es como si él supiera que había vuelto del futuro y que ahora mismo estaba intentando que todo volviera a ser como antes. Cuando llegó en frente de él, estaba segura de que iba a creer todo lo que ella tenía que contarle y que iba a realizar todo lo que ella había planeado.

Buenos días señorita Granger - le saludó el director - ¿Qué es eso tan importante que debía decirme? - le preguntó con una sonrisa en los labios.

Buenos días Albus - le saludó tímidamente mientras le miraba a los ojos y sentía que su colgante seguía teniendo la misma temperatura.

Vaya… tienes el colgante… Seguro que Severus te ha enseñado a realizar el hechizo ya que me has llamado por mi nombre y me has mirado a los ojos. - le informó el director mientras le hacía una seña para que se sentase. - Veo que hemos tenido éxito…

¿Os ha gustado? Espero que sí jejejejeje ¡nos vemos pronto¡Agur! (esto parece una serie... siguiente capítulo la próxima semana jajajajajaja)