Kioto Compilation
I Arrived
Kaoruko se encontraba en la entrada de la casa, sentada en la pequeña escalera, mirando el cielo, había llegado antes a casa, pero olvidado sus llaves y Futaba aún no salía de su trabajo, lo único que podía hacer era esperarla.
Agradecía haber puesto a cargar su teléfono en el teatro, empezando a aburrirse de estar ahí, aunque solo llevaba cinco minutos, decidió escribirle, a sus amigas.
En mensajería:
Kaoruko: ¿Qué hacen ustedes cuando se quedan por fuera de casa?
Karen: Vivo en un edificio, así que tengo que llamar a un cerrajero o a Hikari-chan
(づ ̄ ³ ̄)づ
Mahiru: Si olvidase mis llaves le avisaría a Suzu-chan, solía perder las suyas siempre, así que ahora carga un collar con sus llaves e identificación. Como un carnet.
Claudine: Ah, jajaja, le pusiste collar.
Nana: Me imagino que debe tener una correa a juego.
Mahiru: No estén molestando -
Kaoruko frunció el ceño dándose cuenta que se habían desviado del tema, aunque molestar a Mahiru parecía divertido.
—Oh, alguien mandó un audio —colocándolo pudo distinguir la voz de Junna.
Junna: "Nana casi siempre olvida sus llaves, así que suele pasar por mí antes de volver a casa, cuando no es así, la encuentro sentada junto a la puerta jugando con el celular"
Mahiru: Oh, Junna-chan está ¿Leyendo? La conversación.
Nana: No estoy con ella, pero le activé el control por voz y el talkback a su celular, así que, sabe cómo manejar el teléfono sola.
Karen: Que ingeniosa. Es como en esas películas futuristas.
Junna por voz: "Karen, deja de decir tonterías"
Maya: Una vez me quedé fuera, así que rompí la cerradura.
Claudine: Quisiera que eso fuera chiste.
Hikari: Entra por la ventana.
Suzu: Apoyo lo de entrar por la ventana.
Kaoruko miró la entrada analizándolo, que tan factible era la idea, su teléfono sonó con una notificación nueva.
Futaba: Ya voy en camino, no les hagas caso y espérame en la entrada.
Kaoruko: Apúrate.
Karen: Aguafiestas...
Kaoruko volvió a sentarse mirando el cielo, pensando en escribirle a Tamao, buscó su chat, hasta que le llegó mensaje de un número desconocido, al abrirlo, frunció el ceño ante lo que leyó.
En mensajería:
Ichie: He oído que te has estado juntando mucho con Tamao, deja de hacerlo.
Kaoruko: Ah ¿Eres una admiradora?
Claramente sabía que se trataba de Ichie, Tamao le había advertido de eso hacía unos meses, pero parecía que le había costado tiempo conseguir su número de teléfono.
Ichie: ¡Soy su mejor amiga! :c
Kaoruko: ¿Te paso nuestras fotos? Para que te deshagas de esa idea.
Ichie: También tengo muchas fotos con ella, no te creas especial. Además, ¡Tengo más años siendo su amiga!
Kaoruko: Cantidad no es lo mismo que calidad. Su amistad tendrá más tiempo, pero no la misma calidad que la nuestra.
Se estaba comenzando a irritar, pero estaba aburrida, así que eso al menos la entretendría un rato. Pero antes de que le contestaran, una moto se estacionó en la entrada, guardando su teléfono decidió dar por terminada esa "conversación" con Ichie.
Futaba se bajó de la moto, y quitándose el casco le dijo —Llegué.
Levantándose de la escalera le contestó —Bienvenida.
—¿Cómo es que aún olvidas tus llaves? —Reprochó Futaba un poco molesta.
Se cruzó de brazos frunciendo el ceño —No es fácil recordar que debes tener contigo algo siempre.
—No es difícil Kaoruko, es hasta irresponsable olvidarlas.
No pudo evitar sentirse molesta por ese comentario y con el ceño fruncido, tomó una manta que había dejado en una de las sillas de la entrada y caminó al patio en silencio.
Futaba solo la vió ir, confundida. Suspirando decidió ir detrás de ella, asumiendo que estaba molesta —¿Kaoruko? ¿A dónde vas?
Al llegar a un espacio plano del patio de atrás, colocó la manta y se recostó encima de ella en el suelo —No necesito tus llaves.
—¿Qué estás diciendo y haciendo?
Colocando su bolso como una almohada le contestó —Voy a dormir aquí.
—Te vas a resfriar. No seas tonta, vamos adentro.
—No voy a ir a ningún lado —Cerrando sus ojos hizo un puchero, molesta.
Futaba suspiró sentándose junto a ella en la manta —¿No vas a entrar?
—No lo haré. Idiota —Su ceño se frunció aún más.
—Esto no es solo por lo que te dije ¿No?
—Fue un mal día.
Acostándose junto a ella le susurró con un tono tranquilo —¿No quieres contarme que pasó?
Ella negó con su cabeza —Estoy cansada.
Futaba asintió, notando que Kaoruko aún tenía sus ojos cerrados. Sonrió ligeramente al notar que se estaba haciendo la fuerte. Sin saber bien que hacer, decidió abrazarla, a lo que la peli-azul respondió abrazándose contra ella.
Susurrando contra su cabello le preguntó —¿Qué tan mal fue el día?
Kaoruko inhaló aire con fuerza, antes de soltarlo, agradeciendo la calidez de sus brazos, aún con sus ojos cerrados, le contestó con el mismo tono suave, aunque con un deje de enojo—Fue horrible, estaba algo distraída y confundí mis líneas varias veces en los ensayos, me molesté por eso, luego me iba a reunir con Tamao-han y resulta que me tuvo que cancelar y ahora llego a casa pensando en darme un baño, comer y dormir y olvidé las llaves, y tú, idiota, llegas y me haces enojar.
Futaba frunció el ceño, aunque comprendía que solo estaba molesta, tomando su rostro entre sus manos la hizo mirarle a los ojos y le dijo —Nada de lo que pasó hoy fue tu culpa, así que no te castigues por ello, también puedes equivocarte a veces.
Kaoruko asintió dándole una suave sonrisa, sabía que varias de esas cosas habían sido su culpa, pero, amaba que Futaba siempre intentara animarla, cerrando sus ojos volvió a abrazarse a ella ocultando su rostro contra su pecho.
Viendo sus ojos cerrados y la calma de su rostro mientras la abrazaba, con una sonrisa enternecida soltó —El cielo está estrellado.
Kaoruko abrió sus ojos y levantando la mirada, se encontró los ojos de Futaba sobre ella, sonrojándose le preguntó —¿Si estás mirando las estrellas?
—A la más brillante de todas —un rubor cubrió su rostro de la vergüenza.
La peli-azul se rió contenta —¿Hoy estás de buen humor, Futaba-han?
—Tuve un día regular. Pero si mejor que el tuyo —Intentó no molestarse por el tono divertido que tenía Kaoruko.
Levantando la mirada le dijo con una sonrisa ligera, acompañada de rubor —Dame un poco de tu buena vibra —no se habían besado desde que habían llegado, así que quería su beso de bienvenida.
La pelirroja acercó su rostro al suyo, y cerrando sus ojos, unió sus labios con los de Kaoruko, en un beso, intentando hacerle saber lo mucho que la amaba.
Una vez se separaron, Futaba le preguntó en broma —¿Quieres cenar conmigo hoy?
Riéndose le siguió el juego —¿Qué habrá en el menú?
Rompiendo el abrazo, levantándose de la manta, para ofrecerle ayuda para levantarse le contestó—¿Qué quieres comer?
Una vez se hubo levantado, se empezó a acomodar la ropa, una sonrisa ladeada adornó su rostro mientras lo hacía —Se me ocurre algo para el postre, pero te vas a molestar.
Tomó la manta del suelo y el bolso de Kaoruko, para luego tomar su mano, preparándose para volver a la casa —¿No estabas cansada? —Tenía muy claro a que se refería.
—Lo estoy. Pero tendré energía después de cenar —habían comenzado a caminar de regreso a la entrada de la casa.
—Hay sushi. Pasé a casa de mi madre antes de venir aquí, y nos mandó sushi, así que podemos cenar eso. Pero lo dejé en la moto con mi maleta.
—Está bien, me convenciste.
Entrando a la casa encendieron las luces. Futaba sonrió ante la idea que ese era su hogar y junto a ella estaba la persona más importante de su vida. No podía quejarse de lo que estaba viviendo.
Kaoruko por su parte se quitó los zapatos antes de mirar a la ventana, preguntándose qué tan peligroso habría sido entrar por ahí, volteando a mirar a Futaba, quién la miraba con reproche, como si hubiera leído su mente, le sonrió, ya estaba en casa, con su amada Futaba-han y sabía que estaría con ella siempre, estaba feliz de tenerla incluso en sus días malos. Estirándose antes de terminar de entrar a la casa soltó —¡Estoy en casa!
La pelirroja le respondió con una sonrisa —Bienvenida.
En menos de una hora de haber entrado a casa, Kaoruko y Futaba se encontraban en la cocina, después de haberse bañado y cambiado.
Futaba se encontraba sirviendo los rollos de sushi en dos platos, repentinamente sintió como unos brazos la envolvían por la cintura, haciéndola sonrojar —Kaoruko ¿Qué pasa?
—Estoy hambrienta...
El tono de voz de Kaoruko la hizo erizarse, frunciendo el ceño, se dio la vuelta saltándose del abrazo y le tendió un plato con sushi —Ten. Ve a sentarte.
—No quiero sentarme —acercó peligrosamente su rostro —quiero comer el postre.
Sonriéndole, cerró sus ojos, cuando Kaoruko cerró los suyos la besó, era un beso cargado de pasión, se dieron un par de besos más, hasta que le susurró —abre un poco la boca para mí.
Kaoruko separó más sus labios con los ojos aún cerrandos y ella en cambio colocó un rollo de sushi en ella —Toma, primero la cena.
Frunció el ceño comenzando a masticarlo y tomando el plato que ahora le tendían se apartó—Está bien, iré a sentarme. Te estaré esperando.
—Ya voy a hacerte compañía.
Futaba fue a sentarse junto a ella a comer mientras la veía contenta degustar el sushi, realmente amaba a Kaoruko.
Who is better?
Kaoruko estaba en el restaurante de los Tomoe, viendo gente entrar y salir, mientras Tamao ayudaba a su padre con la clientela, se suponía que estaba ahí para conversar con su amiga, pero ahora estaba en una silla apoyando sus brazos en una mesa vacía, el local parecía concurrido.
Por la puerta entró una rubia, acompañando a una chica de cabellos lavanda, frunció el ceño tratando de recordar dónde las había visto, hasta que notó que se acercaron a Tamao, entonces supuso que se trataba de chicas de Rinmeikan.
Ichie estaba sonriente, Tamao les había pedido que esperaran un poco a que saliera, por lo que estaban buscando lugar donde sentarse.
Fumi estaba mirando el local llena de asombro, era la primera vez que estaba ahí en años, todo se veía bastante diferente a cuando trabajó ahí anteriormente.
Aquel día era sábado y Fumi estaba libre, así que Ichie logró convencerla de viajar a Kioto el viernes por la noche, su padre les prestó el auto porque sabía que su hija quería ver a su amiga y a él no le molestaba mientras fuera Fumi quién estuviera al volante.
Sus ojos daban vuelta por el local, hasta que se toparon con alguien a quién reconoció y le hizo fruncir el ceño.
Mirando a Fumi le dijo —Vamos a sentarnos allá.
La rubia miró en dirección a donde le señalaba y le contestó —Está ocupado, Ichie, no podemos solo ir y sentarnos ahí, además, no señales, es de mala educación.
Negó con su cabeza en respuesta —La conozco, tranquila, es una amiga de Tamao. Además, hay gente que pagaría porque un dedo mío la apuntara.
Fumi se cruzó se brazos en respuesta, pero se mantuvo en silencio porque aunque le molestaba, era cierto eso último. Miró algo preocupada aquella mesa, tenía un mal presentimiento. Ichie lo tomó como si ella hubiera cedido y la jaló del brazo con dirección a aquella chica.
Kaoruko las vio acercarse y colocó su bolso en una de las sillas libres intentando evitar que se sentaran junto a ella.
Fumi frunció el ceño ante la acción de la peli-azul, un poco confundida.
Ichie se sentó en la silla frente a Kaoruko, mientras Fumi se mantuvo en pie.
Fumi pensó en decir algo, pero Ichie se adelantó.
—Oye, roba amigas ¿Qué haces aquí?
La peli-azul volteó a mirarla enojada y recordando los mensajes que hacía días alguien le había enviado reclamándole sobre su amistad con Tamao, supuso que era la misma persona.
Por lo que le respondió: —Estoy esperando a mi mejor amiga, Tamao, para salir con ella —solo quería provocarla.
Fumi había pensado en interrumpir, pero al notar que se trataban con el mismo nivel de respeto, aguardó en silencio, aún de pie junto a Ichie.
La peli-lavanda le dijo —¡No es tu mejor amiga!
Kaoruko quitó su bolso de la silla junto a ella, e ignorando a Ichie, miró a Fumi y le dijo —Soy Kaoruko Hanayagi, puedes sentarte.
La rubia le dio una leve reverencia antes de decirle —Buenas tardes, Fumi Yumeoji —sentándose añadió —gracias.
Ella le respondió con una sonrisa —¿Eres hermana de Yumeoji Shiori-han? La de las películas, me refiero.
Ichie sonrió para sí misma, de brazos cruzados pensando en que Kaoruko acababa de golpear el ego de Fumi.
La rubia asintió, con el ceño ligeramente fruncido —Sí, es mi hermana. Creo que nos conocimos en la época que estuvimos en el colegio ¿Eres amiga de Isuguri Futaba-san?
Ella asintió —Ah sí, Futaba-han, estoy esperándola también, junto a Rui-han, deben estar en camino.
Ichie decidió volver a la conversación —Dejen de ignorarme, estoy aquí —mirando a Kaoruko le dijo —deja de hablarle a mi Fumi, ¿Además de robarme a Tamao quieres robarme a Fumi?
Ella rió —No tengo necesidad de robar nada, tus amigas me buscan por si mismas. Es que soy mejor amiga —se notaba el ego en su voz.
La peli-lavanda la señaló molesta —¡Demuéstralo! ¿Cuál es su color favorito?
Fumi miraba la situación con el ceño fruncido —No hagas de esto una tontería, Ichie.
Kaoruko le sonrió confiada, para luego encogerse de hombros —No lo sé ¿Cuál es?
Ichie rascó su nuca y rió nerviosa —¿El morado tal vez? Ya no lo recuerdo.
La rubia suspiró —Creo que solo acaban de demostrar lo malas amigas que son.
La peli-lavanda insistió —¡¿Cuál es su comida favorita?!
Kaoruko leyó el menú del restaurante, antes de contestar —¿El udón?
Fumi negó —Error ¿Y tú, Ichie?
Ella sintió que su mente se bloqueaba y más nerviosa que antes, respondió — ¿El hígado?
La rubia volvió a negar —Esa es su comida menos favorita, le encantan el sushi y el anmitsu ¿En serio están discutiendo por algo como eso cuando saben tan poco sobre ella? —ambas asintieron, por lo que suspirando decidió unirse a su juego— llevan dos preguntas de tres mal contestadas, así que la que gane aquí, será la mejor amiga de Tamao, es sencilla ¿Qué cosas le gustan a Tamao?
Kaoruko contestó sin pensarlo mucho —Rui-han.
Ichie soltó —La jardinería.
Ella les sonrió —Ya está, ganaron ambas, felicidades.
Kaoruko asintió desinteresada —Cuando vuelvas a Tokio, entonces seré la mejor amiga de Tamao-han, nuevamente.
Ichie volvió a fruncir el ceño molesta —Ella sigue siendo mi mejor amiga, ¡No importa la distancia!
Tamao se acercó a la mesa y encontró a Fumi con rostro de cansancio, junto a una Kaoruko que parecía desinteresada y una Ichie enojada.
Intrigada ante la escena, saludó —Buenas tardes ¿Está todo bien? —dirigiéndose a Fumi añadió —no han estado causando estragos ¿No?
La rubia le sonrió —Estaban haciendo una competencia tonta sobre quién es tu mejor amiga, pero si te dijera los resultados creo que terminaría ganando yo.
Tamao estaba por contestar, pero una voz conocida la interrumpió.
—Permítanme unirme a la competencia.
Futaba saludó —Buenas tardes.
Ichie le dijo a Fumi —Rui no puede competir.
Kaoruko la apoyó —Claramente lleva ventaja. Es Tamao nivel diez.
La castaña ayudó a Futaba a unir una mesa y sentándose junto a ellas, le contestó —Es bueno que reconozcan su nivel.
Fumi estaba sentada junto a Ichie, la cual estaba al borde de la mesa, Tamao a su derecha, enfrente estaban Rui, junto a Kaoruko y ella al lado de Futaba.
Tamao suspiró antes de decirles avergonzada —Déjense de tonterías, ambas son mis mejores amigas, no tienen que ver quién es mejor.
Futaba asintió —Kaoruko, no seas infantil.
Ella le respondió —Pero si yo estaba aquí tranquila, ella fue quién llegó a retarme, no voy a perder.
Ichie le dijo —¡No voy a permitir que te quedes con mi mejor amiga!
Fumi la regañó —No hables de Tamao como si fuera una cosa, Ichie.
Tamao frunció el ceño —No hay necesidad de pelear por mi, las quiero.
Rui bromeó —No me hagan sentir celosa. Pero estaban haciendo una competencia ¿No? —ellas asintieron —respondan a esto, ¿Cómo le gusta a Tamao e... —no pudo terminar.
Kaoruko le respondió inmediatamente —de rodillas.
Ichie soltó entre risas —de espaldas.
Tamao se sonrojó y entre avergonzada y enojada les dijo —¿Qué están diciendo, idiotas?
Futaba ocultaba su rostro entre sus manos evitando que vieran sus carcajadas.
Fumi se sonrojó y trató de evitar reírse, ante la vergüenza de Tamao.
Rui negó rápidamente con el ceño fruncido —No le gusta así, pero estaba hablando del sushi.
Tamao le llamó la atención —¡Rui!
Ichie le señaló su teléfono a Kaoruko, antes de mandarle un mensaje:
En mensajería
Ichie: La que más moleste a Tamao, gana.
Kaoruko: Es mi especialidad.
Fumi que estaba junto a Ichie, notó las señales que le dió a Kaoruko, le dijo en un susurro —No hagas una tontería que la haga enojar.
Ella asintió, antes de dirigirse a Tamao diciéndole —Sabes que soy tu mejor amiga, porque nadie te conoce tanto como para saber que le pones nombres a tus plantas.
Tamao la miró y avergonzada le dijo —¡No es del todo cierto!
Kaoruko sonrió para sí misma —Como si supieras las fantasías de Tamao-han, no la conoces realmente.
Rui se ruborizó al igual que Tamao, y le dijo a Kaoruko —No digas más.
Futaba frunció el ceño —¡Kaoruko! No hables de cosas íntimas.
Tamao ocultó su rostro entre sus manos —¡Ya deténganse por favor!
Fumi suspiró intercediendo —A este paso harán que no tenga mejor amiga.
Descubriendo su rostro, Tamao se decidió a jugar al mismo juego que ellas —Las dos pueden ser mis amigas, no necesariamente debe ser una sola, además, las conozco lo suficiente como para saber que a Kaoruko le gusta que la amarren y a Ichie le gusta que la dominen.
Ichie, roja cual rosa, gritó —¡MENTIRA!
Kaoruko completamente avergonzada ocultó ocultó su rostro detrás del menú —Calla, por favor.
Tamao estaba avergonzada por haberse atrevido a decir algo así.
Futaba desvió la mirada apenada, mientras Fumi quitó su mirada tratando de ocultar su vergüenza.
Rui les contestó bromeando —Me parece que las tres cumplen con el único requisito para ser amigas, molestarse entre sí.
Fumi suspiró —Rui tiene razón, porque parece que es lo que mejor saben hacer.
Futaba miró su reloj y dijo en voz alta —Deberíamos ir yéndonos, ya casi son las cinco y no quiero llegar de noche.
Ichie miró a Tamao confundida —¿Van a salir?
Ella asintió —Sí, planeamos ir a acampar cerca de la playa, lo habíamos decidido desde hace un par de meses.
Kaoruko añadió amablemente —Pueden unírsenos, va a ser divertido.
Fumi miró a Ichie expectante.
La peli-lavanda negó con su cabeza —No, gracias, no estamos preparadas para el viaje y veníamos a hacer algo además de visitar a Tamao, así que será otro día.
La rubia sonrió para sí misma, sabía que no tenían ningún otro plan, pero Ichie posiblemente no quería molestar el viaje de Tamao. Al menos eso le daba tiempo de aprovechar con ella y pasear a solas por Kioto.
Futaba les dijo —No se preocupen, será en la siguiente ocasión, un placer haberlas vuelto a ver.
Kaoruko le tendió una mano a Ichie —¿Amigas?
Ella le sonrió de lado devolviéndole el apretón de manos —Rivales.
Tamao sonrió y colocando sus manos alrededor del apretón de ellas, e ignorando a Ichie, les dijo —Ahora somos amigas. Que bueno que se lleven bien, para la siguiente visita de Ichie las invitaré a cenar conmigo.
Kaoruko e Ichie le respondieron en unísono —¿Sushi?
Ella asintió contenta —¡Me encanta el sushi! Que lindas son para recordar un detalle como ese.
Rui soltó —Que buena memoria.
Se miraron cómplices y solo pudieron reírse, mientras Fumi fruncia el ceño sabiendo que ella se los había dicho. Futaba las miró en silencio mientras se preguntaba como Kaoruko había hecho trampa para recordar algo como eso.
Escape
Fumi tenía cincuenta minutos conduciendo. Ichie la había convencido de ir a Osaka, que estaba junto a Kioto, el lugar donde fueron a visitar a Tamao, en vista de que su amiga estaba ocupada, Ichie tuvo la maravillosa idea de ir a pasear a otra prefectura.
La rubia se había negado en un principio, porque el padre de Ichie solo les había prestado el auto para ir a Kioto y ella creía que romper su regla quebrantaría su confianza y él tomaría represalias contra ella, no quería ver a Soma enojado.
Pero Ichie terminó insistiendo y chantajeándola, no tuvo más opciones aceptar y por eso estaban a minutos de llegar a la ciudad.
—Ichie, ya que te traje, deberías darme algo a cambio, así que tengo una petición para ti —aprovecharía el tiempo para molestarla.
La peli-lavanda le bajó el volumen al radio y le preguntó —¿Qué es? Te daré la oportunidad de controlar a Ichie-sama.
—Guarda silencio el resto del viaje.
Ella frunció el ceño cruzándose de brazos mirando el camino.
Fumi reía internamente al verla fruncir cada vez más el ceño, pero solo cinco minutos después sintió que se estaba volviendo loca con el silencio y le dijo —Olvídalo, ya habla, me estás volviendo loca.
Ella le sonrió triunfante —Lo sé, amor.
Negando con su cabeza le respondió —No seas tonta.
Ichie le señaló un cartel que daba la bienvenida a la ciudad de Osaka, contenta le dijo —¡Ya estamos aquí! Vamos a caminar un poco y mirar el lugar, la última vez que estuve aquí pasé muy rápido y había mucha gente tomándome fotos, no disfruté ese viaje.
Fumi tomó su brazo llamando su atención al verla intentar abrir la puerta —Espera, Ichie, dejemos esto claro una vez más. Esto es un secreto, estamos escapadas, nadie puede saber que estuvimos aquí.
Ella asintió y le continuó —Lo sé, lo sé, nada de fotos, nada de redes, nada de llamar la atención, lo sé, nada que pueda hacerle saber a otros que estuvimos aquí, ya lo repetiste tanto que lo tengo claro.
Con un tono demandante le dijo —No lo olvides, no quiero problemas con tu padre.
—Papá no se va a enojar, ya te lo dije.
—Eso piensas tú, pero posiblemente estés equivocada, como cuando dijiste que a tu madre le gustaban los girasoles y me hiciste llevarle unos en su cumpleaños, para que resultara siendo alérgica.
Rio nerviosa —Pensé que le gustaban, ¡Pero eso fue solo una vez! ¡No me he equivocado más de una vez!
Frunció el ceño —Porque no te he dado oportunidad de equivocarte —abriendo la puerta del carro se bajó —vamos que son las seis, busquemos donde cenar.
—¡Vamos! ¡Quiero comer sushi de Osaka!
Ichie bajó tras ella y caminó a su lado, agarrando su brazo. La rubia miraba los anuncios, precios y ofertas decidiendo cual parecía barato y de calidad para invitarle a Ichie a comer.
En el centro de la plaza vieron a una periodista y dos camarógrafos.
—¿Estarán grabando el noticiario en vivo?
—Posiblemente están haciendo un reportaje sobre lo concurrido que está el lugar, aunque estos días creo que había un escándalo sobre el representante de Osaka, tal vez estén aquí por eso.
—Puede ser ¿Ya elegiste donde vamos a... —no pudo terminar su frase.
El piso empezó a moverse y sin saber que hacer la rubia trató de ir a un lugar más vacío, la gente empezó a salir de los restaurantes y la plaza se llenó de personas asustadas, mientras temblaba.
Después de unos segundos el temblor se detuvo, Fumi estaba esperando por si sucedía una réplica, pero escuchó la voz de la periodista y al darse cuenta que estaba cerca de ella trató de huir, al voltear notó que estaba frente a la cámara e Ichie hablaba al micrófono, se juró que la mataría.
Ichie miraba a la cámara mientras decía —Me asusté, creí que moriría, pero ahora que hago memoria, fue poco en comparación a los temblores que he vivido en Tokio —tiró de Fumi más cerca de ella —por suerte estaba mi Fumi conmigo y me sentí segura mientras tomaba mi mano —alzó su mano que estaba entrelazada a la de Fumi, sonriendo.
La rubia quitó su mirada avergonzada y una vez le pasaron el micrófono invitándola a hablar dijo —Pudo ser peor.
El camarógrafo regresó a la periodista y Fumi tiró de Ichie lejos de la grabación, mientras le decía —¿Eres idiota? ¡Te dije que no llamáramos la atención! ¡Pero salimos en el noticiario!
Ella rio —No te preocupes, estaremos bien.
—¡Y se supone que seríamos discretas con la relación, pero hasta mostraste nuestras manos y en la televisión!
—Somos buenas amigas a los ojos del mundo.
—¡Ichie! ¡Eres una idiota! —su teléfono sonó, Fumi se sintió palidecer, antes de sacarlo de su bolsillo, frunció el ceño al leer el nombre de su hermana.
El de Ichie también empezó a sonar y ella rió nerviosa al leer el nombre de su madre.
Al contestar, Fumi frunció el ceño —¿Shiori? Hacía mucho no me llamabas ¿Pasó algo?
Se escuchó un tono preocupado de parte de su hermana —Eso dímelo tú, te veías muy seria en las noticias.
Suspiró sabiendo que acababa de aparecer en televisora nacional —Estoy bien, solo fue un leve temblor.
Shiori soltó en un tono bromista —Por otro lado, no esperaba que fueras de esas que regresan con sus exs.
Fumi palideció —¿Sabes que terminamos? ¿Cómo te enteraste?
—La mamá de Ichie-san me llamó para preguntarme por tu número de teléfono, pero le dije que no lo tenía, entonces me contó que regresaste con su hija, supongo que es lo que hacen las mamás, hablar de la vida de sus hijos, igual tu suegra te quiere mucho.
Suspiró en respuesta —Saki-san a veces puede hablar mucho. Bueno —hizo una pausa algo avergonzada —aún no vuelvo con Ichie, pero podría decirse que estamos en eso.
Shiori sonó contenta —¡Hay que ir a cenar las cuatro algún día!
Ella frunció el ceño —¿Cuatro? ¿Estás hablando de?
Ahora estaba nerviosa —Akira, pero no hagas un escándalo ni me regañes, no estamos juntas, solo salimos a veces.
Fumi se molestó e irritada le respondió —Ya te dije, en su momento, todo lo que tenía que decirte sobre eso. De cualquier forma, me tengo que ir, hablamos después.
Shiori suspiró del otro lado de la línea antes de responderle —Cuídate, hermana, hablamos después y salúdame a Ichie-san —Cortaron la llamada.
Al girar Fumi se encontró con el rostro molesto de Ichie, confundida le preguntó —¿Qué pasó?
Ella soltó un bufido —Mamá dice que soy "trending topic" en redes sociales, y se supone que vine a disfrutar sin molestias, ella también estaba enojada.
La rubia se rió —Te lo buscaste, pero dejemos eso de lado, ¿Qué tal si vamos a comer en el hotel y mañana venimos a pasear por aquí?
Suspiró tomando su mano nuevamente —Es lo mejor, si no nos vamos de aquí posiblemente pronto tengamos fotógrafos detrás.
Fumi apretó su agarré en la mano de Ichie para tratar de calmarla —No dejaré que nadie te tome fotos, soy tu guardaespaldas hoy.
A lo lejos Ichie reconoció a un tipo con una cámara enfocándola, le hizo señas a Fumi, por lo que ella tiró de Ichie en dirección a un parque, al estar ahí se escondieron tras un árbol, aprovechando la oscuridad que reinaba.
La peli-lavanda soltó una risita emocionada al escuchar los pasos de la persona siguiéndolas, sabía que podía detener eso solo avisando a algún policía que estuviera rondando el parque, pero era más divertido jugar a las escondidas con Fumi.
La rubia frunció el ceño mientras empujaba a Ichie, por los hombros, contra un árbol evitando que se moviera, cuando no escuchó más pasos y pensó que se había ido, bajó la mirada, encontrándose con el rostro ruborizado de Ichie y una sonrisa que le pareció peligrosa.
—¿Qué quieres?
Ella le respondió con una sonrisa ladeada —Estamos en una posición muy cliché, ¿Por qué no me besas aquí?
Le respondió en un susurro —No seas idiota, es peligroso y podría vernos alguien. Además, en esta posición no pasan solo cosas románticas, podría estarte robando.
Ichie frunció el ceño y le dijo —No seas anti-climática, además es solo un beso, no es que vayamos a hacer alguna otra cosa aquí ¿O es que ya no me amas? — al ver la mirada dudativa de Fumi, sonrió añadiendo —Solo te estaba molestan... —no pudo continuar.
Fumi unió sus labios a los de ella en un beso, ruborizada a más no poder y al separarse agradeció que el lugar estaba bastante oscuro para que se notara su rubor. Mirando en otra dirección le dijo —Espero que estés feliz.
Ella soltó una risa antes de asentir —Lo estoy, pero ahora quiero más—su estómago rugió.
La rubia le dijo con una sonrisa burlona —Deja de decir tonterías, vamos al hotel, son las siete y estamos hambrientas.
Asintió sonriente, antes de tomar su mano y decirle —¡Vamos! ¡Quiero sushi de hotel!
Fumi sonrió divertida, Ichie era una idiota, pero era la idiota que le gustaba.
Caminaron sin prisas, después de alrededor de cinco minutos en los que la rubia no pudo dejar de pensar en lo recién sucedido, intentó indagar sobre el tema.
—¿Qué ha sido lo más lindo que te ha pasado desde que empezaste a ser idol?
Ichie sonrió y sin pensarlo mucho le dijo —Una vez estaba estirando en el set de grabación, estábamos grabando un drama, y una niña parte del elenco, se me acercó y me dijo con la mirada más linda del mundo, "cuando sea grande quiero ser como usted", casi me desmayo de la emoción, pero me decidí a preguntarle el motivo y me dijo que porque brillo mucho cuando estoy actuando, que ella creía que producía luz natural, porque hacía a todos sonreír cuando me veían.
Te juro que estaba desmayándome de la felicidad y la ternura, pero luego me pidió un autógrafo y la vi ir en dirección a su mamá con ese papel firmado por mí, saltando como si fuera lo mejor del mundo y me sentía tan feliz. Luego me enteré que era una niña adoptada por la familia del director y era su hija. Cuando salí de ahí, llamé a mi padre y le pregunté cuánto costaría hacer un orfanato privado, él parecía confundido, pero le conté lo que pasó y me dijo que se encargaría de ello, meses después lo inauguramos en una casa enorme que compramos. También tengo un café con gatos a mi nombre y acciones en una empresa de automóviles, pero eso no es tan emocionante, mi padre es contador e invirtió mucho de mi dinero en acciones y empresas, él administra una gran parte de mi dinero, pero eso son detalles.
Fumi sonrió enternecida, antes de intentar ir más allá con sus preguntas, pero decidiéndose soltó —¿Y lo más raro que te haya pasado siendo idol?
Ella la miró y pensando le contestó —Creo que, podría ser lo del chico que conseguía mi número cada vez que lo cambiaba y me escribía, antes de que preguntes, cada semana cambiaba de número porque cada semana tenía miles de mensajes de números desconocidos, pero lo que fue diferente esta vez era que este chico solo me pedía un audio saludando a su novia, siempre era eso y me pareció gracioso... Al final terminé hablándole, porque era más decente que el resto que me escribía en redes sociales, finalmente le mandé el audio y empezamos a hablar más.
La rubia frunció el ceño —¿Le hablabas?
Ichie asintió —Sí, pero el dejó de escribirme cuando se graduó de la ingeniería.
Fumi estaba incrédula —¿Te hiciste amiga de tu acosador?
Se encogió de hombros —Mi mánager dijo que estaba bien, porque el chico era el encargado del sonido, parte del staff y de paso era parte de mi club de fans, creo que todavía me sigue, pero ya no tiene tiempo para nuestra amistad, aunque lo vi en mis últimos conciertos.
La rubia frunció el ceño —Suena irreal, pero si se trata de ti, lo creo.
Ella se rio —Sé que suena loco, pero puedes buscarlo en alguna de mis presentaciones en vivo, lo presenté en un show de aniversario del grupo. Fui a su boda, creo que su novia no le creyó hasta que me vió ahí, ella era bastante fan de mi grupo idol.
Fumi rascó su nuca inquieta y decidió ir más a fondo —¿Y qué fue lo más horrible que te pasó?
Frunció el ceño —Una vez me llegó una caja con un olor horrible a mi habitación en el hotel donde nos estábamos quedando, yo no me atrevía a abrirla, pero una de mis compañeras decía que podía ser queso. Llamamos a alguien del staff y la abrió, dentro habían bolsitas con líquido blanco, traía una nota, pero nuestro guardaespaldas, que era hermano de una chica del grupo, tomó todo, y le prendió fuego sin que pudiéramos leerlo, estaba bastante enojado. Desde entonces él abría cada cosa que nos enviaran, antes de pasarlas a nosotras.
Fumi apretó los puños enojada —Si hubiera estado contigo, posiblemente habría rastreado el paquete hasta encontrar a ese infeliz y hacerlo pagar con sangre.
—Si eso te pone de mal humor, no sé que habrías hecho si hubiera sido a mí, y no a mi compañera, a quién siguieron hasta su habitación del hotel —le explicó— en ese momento estábamos en Corea del Sur, al parecer alguien supo donde nos hospedábamos y desde entonces estuvo intentando secuestrarnos. Era asfixiante como las multitudes nos seguían a cada lugar, y las cámaras estaban en todos lados, y si de por sí eso era asfixiante, fue peor cuando la gente intentaba adivinar donde nos estábamos quedando para ir a pedir autógrafos o fotos. Al final no supimos si intentaron hacerle algo o no, porque ella solo nos contó que la tomaron del cabello y aquel hombre le dijo que su sueño era conocerla a fondo, entonces ella gritó, y salió alguien de las habitaciones del hotel y la ayudó, el tipo escapó, pero estuvo extremadamente asustada, desde entonces no iba sola a ningún lugar, creo que aún no lo hace.
—Suena terrorífico ¿Es uno de los motivos por los que lo dejaste? — Seguía enojada, por la idea de que Ichie hubiera pasado por cosas así.
Ella asintió cabizbaja —Pensé que era bastante peligroso y estoy, como habrás notado, cansada de las cámaras y la falta de privacidad, solo quería cantar, bailar y divertirme, no convertirme en una Diosa o en un objeto para otras personas, así que elegí alejarme. Puedo cantar, bailar y divertirme de otra forma. Pero estar en el escenario no era lo suficientemente glorioso para olvidarme de que al salir de la presentación tenía que ir a todos lados con guardaespaldas. En cualquier caso, podría volver a actuar en un futuro.
Fumi apretó su mano y le contestó con una sonrisa —Cuando vayas a hacerlo, estaré aquí para apoyarte, no dejaría que algo así te volviera a pasar.
Ella se abrazó a su brazo y ruborizándose le susurró —Esta vez, no me dejes ir.
La rubia suspiró antes de darle una sonrisa —No te vuelvas a ir.
Vieron el hotel aparecer frente a ellas e Ichie rio —¡Al fin!
Fumi sonrió para sí misma y se preguntó cómo Ichie cambiaba de humor con tanta facilidad.
Si Kaoruko es mala amiga, me declaro mala amiga XD
Digo, hola, aquí la compilación de esta semana, posiblemente la otra semana haya más.
Mi cerebro va a explotar, no he tomado descanso desde "Eventful journey", pero al menos estoy escribiendo más, y siento que las tramas han mejorado en comparación a las anteriores.
Después del fic de enero me tomaré tiempo para escribir más historias en universos alternativos, me sacan tanto de mi zona de confort que son divertidas de escribir.
Ahora los inevitables agradecimientos.
Gracias al Team Starlight por ayudarme con estas historias y gracias a ustedes por leerlas.
En realidad esperaba poca recepción para "Seasonal changes", primero porque Frontier es de las escuelas que menos siguen y porque la historia es bastante larga, pero tuvo una cantidad considerable de gente leyéndola hasta el final. Eso me inspira a continuar. ¡Gracias por leer!
A continuación, algunas noticias:
¡"Short Stories of Revue Starlight" será traducido al inglés! No sé si el resto de mis fics también, son tantos que posiblemente lleve tiempo, pero se hará y eso es más que bueno, la persona que se ofreció para hacerlo tiene un inglés nivel "Nativo" según la prueba de Cambridge y anteriormente ha corregido pruebas para el instituto británico de Chile, así que confío en que lo hará bien.
A causa de esto, vamos a corregir las primeras historias, principalmente las de 2019, para reparar algunos errores que he estado encontrando estos días de relectura y tal vez termine añadiendo las líneas de separación de escenas, para facilitar la lectura.
Bueno, es todo, ahora vamos a los comentarios.
Contestando...
Ninja Britten 11: Shizuha es una tonta, pero a Tsukasa le gusta, y definitivamente es mil veces mejor que Kodai.
El beisbol es mi pasión, aunque también me gusta el futbol, suelo mirar los partidos más importantes.
El machismo de Japón es como el de Latinoamérica, solo que aquel es silencioso y ellos lo tienen oculto bajo el manto de "la cultura", en definitiva tienen una sociedad que necesita cambiar, al igual que la nuestra.
SilentDrago: Tsukasa posiblemente no llegó a saberlo porque su mente estaba tan ocupada en otras cosas como para darle atención a ese detalle, digo, ni si quiera le daba atención al supuesto novio que tenia, hasta que llegó Shizuha y cambió todo.
Kodai es un imbécil, pero creo que solo le dijo eso a Shizuha para que no se metiera en problemas.
Hahaha pobre Shinobu, pero no creo que tenga motivos para aparecer pronto.
Definitivamente te van a gustar los AU, solo espera un tiempo, vendrán más historias como esas. De este lado por mientras, terminaré todas las historias que tengo planeadas.
¡Gracias por leer, nos leemos pronto!
