Nihao! Aqui Kotoko Hyuuga con un nuevo fic, de Narutin xDDD. La verdad es que tenia la idea pensada desde hace mucho tiempo y mira, al final me he decidido a publicarla. Espero que os guste. A, una aclaracion adelantada, en este fic sale un personaje inventado llamado Sai, es una chica, pero no tiene nada que ver con el que sale en Naruto. Se llama asi porque son las letras de mi nombre ordenadas de otra forma (Sai, Isa). Bueno, ahora si, disfrutad del fic!
Disclaimer: Naruto, por desgracia, no es mio, ni Neji, ni Sasuke, ni nadie, pero algun dia lo seran, y tanto que lo seran... wahahahaha
La noche estaba cerrada, no había nadie por la calle y solo se oía el eco de sus pisadas sobre el asfalto. La reunión de antiguos compañeros se había alargado demasiado y él ya no era un jovenzuelo para andar por esas calles a altas horas de la noche. El silenció aclaparador le encogía el corazón y sin darse cuenta, su respiración iba tornandose mas agitada a causa del rápido caminar del hombre.
Entonces oyó un ruido detrás suyo. Se giró, espantado, pero allí no había nada. Empezó a correr, algo le daba muy mala espina desde que había salido del local. Otro ruido. Esta vez no se giró, sino que augmento el paso aun más, viendo a lo lejos ya la estación de metro. Suspiro aliviado. Estaba salvado. Entonces, una garra descomunal le atravesó el cuello, arrancandole la cabeza, que rodó por la calle hasta chocar contra una farola. El cuerpo, ya sin vida, se cayó como un muñeco en el asfalto. A su lado, una sombra se iba desvaneciendo.
-Me he equivocado de objetivo-Dijo antes de desaparecer.
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Eran las 7 de la mañana y Naruto ya estaba despierto y casi vestido. Lo estaría si esa corbata puñetera no se resistiera tanto a atarse. Ya harto, Naruto se izo un nudo algo extraño y bajó corriendo las escaleras, oliendo el almuerzo que su prometida le había preparado: huevos y un café cargado.
Desde la cocina, Hinata oyó como Naruto bajaba las escaleras como si fuera un niño pequeño y sonrió. Lo amaba tanto que cada cosa que había le provocaba una pequeña sonrisa. Acabó de servirle el almuerzo y le puso el plato encima de la mesa, poniendole también cubiertos. Cuando entró en la cocina, le dió un beso en los lavios y rápido, se comió los huevos. Hinata miró su aspecto y, aguantandose la risa, le colocó bien la corbata.
-Tu y las corbatas-Dijo entre risas Hinata.
Naruto la miró a los ojos, sonriendo. Era la mujer de su vida, su prometida, su amor. La abrazó, manchándole de café y, bebiendoselo de golpe, se despidió de su mujer con otro abrazo y se marchó corriendo.
-Adiós cariño-Gritó ya desde la puerta.
Hinata suspiró al ver su devantal manchado. Siempre hacía igual, aunque a ella no le importaba. Almorzó un zumo de naranja y se fue a cambiar, también con algo de prisas, ya que tenía que ir a trabajar.
Cuando salió para coger su coche, se dió cuenta de que había un camión de mudanzas parado delante de la casa del vecino. Hinata lo miró extrañada. Llevaban 5 meses en esa casa y aun no había visto a nadie en la casa continua, aunque sus vecinas le habían dicho que estaba máldita y que todos los que vivían allí acababan muriendo. Hinata no creía en esas historias, pero no sabía porque, cada vez que veía esa casa le recorría un escalofrío por la espalda.
De la casa salió un muchacho muy guapo y musculoso. No llevaba camiseta, ya fuera para fardar o porque verdaderamente hacía calor. Hinata desvió la vista. Aunque ya no era tan tímida y vergonzosa como antes de salir con Naruto, aun no podía evitar sonrojarse al ver espectaculos como ese.
-No se ven cuerpos así todos los días eh!-Dijo una voz a su izquierda.
Era Tenten. Era una de sus mejores amigas y vivía al lado contrario que ese muchacho recién llegado. Hinata le sonrió. Tenten vivía sola con su gato, por eso se fijaba mucho más en esas cosas.
-Venga, mujer, no es para sonrojarse! Si Naruto esta como un tren.-Dijo Tenten, entrando en su jardín.
-Buenos días, Tenten.-Dijo sonriendo-Ya sabes que estas cosas aun me dan verguenza.
-Si, suerte que has cambiado un poco... antes, en el instituto, casi te desmayabas-Dijo ella sonriendo.- Ya te vas?
-Si. Nos vemos después en la tienda de Ino.-Dijo sonriendo y se marchó.
El muchacho moreno la miró irse. Antes había visto marchar al que parecía su novio o marido en coche, y la verdad es que no estaba nada mal el chico. Sonrió para sus adentros.
-Me lo voy a pasar mejor de lo que me pensaba-Pensó mientras descargaba dos cajas más.
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Naruto llegó con el tiempo justo para cambiarse rapidamente e ir al despacho de Tsunade, su jefa. ya llevaba 5 meses trabajando en pueblo y le encantaba, aunque cuando Tsunade se enfadaba daba verdadero miedo.
-Naruto- Le llamó Sakura Haruno mientras corría hacia él.
Era la chica más guapa de su trabajo y era su secretaria. Su pelo rosado y cortito bailaba al viento mientras corría. Llevaba una falda larga y rosa que combinaba con su pelo y una camisa blanca que le destacaba su bonito pecho. Al correr con tacones, pero, resbaló y cayó encima de él.
-Y mira que enamorarme de una chica así, suerte que ya pasó.-Pensó Naruto mientras ayudaba a levantarse a Sakura.
-Naruto, Tsunade te llama inmediatamente a su despacho!-Dijo mientras se arreglaba su falda.- Esta muy enfadada, ves rápido.
-Gracias Sakurita! Te sienta muy bien esa falda- Exclamó sonriendo zorrunamente y corriendo hacia el despacho de su jefa.
Cuando llegó, pero, casi se vuelve para su casa, ya que daba bastante miedo. El despacho estaba poco iluminado, ya que Tsunade aun no había abierto las persianas. Esta se encontraba sentada en su silla, con las manos apolladas en su frente y mirando para abajo, como si estuviera pensando en algo muy importante.
-Naruto-Dijo con voz potente y algo enfadada- Llegas tarde.
-Perdone, Tsunade, es que la corbata no se quería poner y..
-Eso da igual ahora.-Dijo muy seria.- Tenemos problemas. Ha habido un asesinato esta noche y era el famoso Hisashi Hyuuga.
-Que?-Exclamó-Es el tio de Hinata!
-Si, lo se, por eso quiero que te encargues tu del caso. A sido en Garden Street, ves rápido.
-Si, Tsunade-dijo flojito. Cuando se lo dijera a Hinata, se apenaría mucho.
-Antes de que te vayas, Naruto. Nos han enviado aun nuevo inspector, quiero que lo mantengas a tu cargo una temporada. Se llama Sasuke. Sasuke Uchiha.
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Hinata aparcó su coche al mismo tiempo que su compañero Rock Lee. Ambos se sonrieron. Llevaban mucho tiempo como compañeros, más de 1 año, y se llevaban muy bien.
-Buenos días, Hinata.-Dijo amablemente.
-Buenos días, Lee. Hoy llegas puntual-Dijo Hinata sonriendo.
-Me apetecía arreglar unos papeles antes de comenzar-Y cogió su maleta.- Voy a comprar el diaro, ahora vuelvo.
-Avisaré a Jiraya-sama- Y dicho eso, ambos se marcharon en direcciones diferentes.
Hinata sonrió con alegría. Había empezado a trabajar como profesora en ese colegio desde hacía bastante ya y Lee había entrado a la vez que ella y se habían convertido en muy buenos amigos. Lee tampoco tenía pareja, eso lo sabía, por eso siempre intentaba que coincidieran él y Tenten.
Llegó a su clase y se puso a arreglar papeles. Y poco a poco, fueron entrando alumnos.
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-Hombre Lee!-Gritó contento Kankuro desde su puesto en el quiosco-Lo de siempre, o te apetece cambiar un poco y pensar en cosas mejores...-Dijo empezando a sacar sus cajas llenas de revistas porno.
-No, gracias, ya sabes que quiero el periodico.
-Oh, que ha pasado con tu "llama de la juventud" que tenías antes?-Dijo Kankuro imitando su voz.
-La llama de la juventud aun me acompaña a mi, y a mis pequeños alumnos-Dijo llorando y alzando el puño.
Cogió el periodico y entró con sus alumnos al colegió. Muchos le saludaban, a lo que él correspondía con una radiante sonrisa blanca. Pero entonces, leyó las noticias y se quedó helado. No podía haber muerto.
-Neji!-Exclamó preocuado mientras pensaba tambien en Hinata.
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-Estas mejor, solo necesitas un poco de reposo y beber mucha agua. Piensa que eres propenso y te puede volver a salir una piedra-Dijo mientras sonreía a su paciente. Después de haber pasado por una operación así, todos estaban muy nerviosos.
-Kiba!-Le reclamaron desde el pasillo.
Kiba sonrió de nuevo y se despidió, marchando hacía donde le habían llamado. La que le había llamado era Sai, su ayudante reciente. Tenía unos papeles en la mano, que se los entregó de inmediato.
-La muchacha que entró ayer con dolor de barriga esta vomitando en la habitación 321 y te necesitan para una operación de aquí un cuarto en la sala 4 de operaciones. Es apendicitis.
-Muy bien, gracias Sai, si necesito algo te llamaré. Tómate un descanso y después vienes a la sala de operaciones.
-De acuerdo, Kiba- Y se marchó a tomarse un café. Esa noche no había podido dormir mucho, ya que la madre de Neji les había llamado muy tarde preocupada y llorando, diciendo que su marido no aparecía en casa desde las 6 de la tarde.
Pero había tenido que ir al trabajo, dejando a su amor preocupado y sin poder trabajar. "Duerme un poco" le había dicho, pero no creía que le hubiera hecho caso. Algo preocupada, le llamó. El telefono sonó muy poco y le contestó una voz impaciente.
-Cariño?-Dijo extrañada-Estas bien? Que ha pasado?
-Sai-Dijo solamente.- Cuando puedas sal del trabajo. Mi padre ha muerto.
Sai se quedó helada. Muerto? No había podido morir... pero si estaba como una rosa el último fin de semana que les visitaron.
-Neji...-Dijo triste y apunto de llorar.
-No pasa nada, tu ven cuando puedas y te cuento.
Y colgó justo cuando entraba alguien en la sala. Sabaku no Gaara, un hombre que verdaderamente daba miedo.
-Hola, Gaara... yo ya me marchaba.
Gaara la miró friamente y cuando Sai ya se marchaba, le dijo:
-La operación esta apunto de comenzar. Vas a llegar tarde.
Sai la miró agradecida. Aunque en un principio Gaara no le caía muy bien, había momentos como ese que desaba ser amiga suya.
-Gracias...-Dijo y se marchó corriendo. Que rápido pasaba un cuarto de hora...
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Naruto llegó al lugar del crimen y el corazón se le encogió. El cuerpo sin cabeza del tio de Hinata esztaba extendido en el suelo, bañando de sangre toda la acera. La zona estaba acordonada y había muchos policias vigilando. Inspeccionando el cuerpo estaba Shino Aburame, uno de sus mejores amigos.
-Hola Shino-Dijo con las tripas revueltas. Un cuerpo decapitado no se veía todos los días.
-Hola Naruto. La cabeza está allí-Dijo señalando, 10 metros más allá, la farola y debajo, la cabeza. Sus ojos, bacios de expresión, le miraban directamente.
-Dios... quien puede haber hecho algo así?-Se preguntó más a si mismo que a Shino.
-Sea quien sea, no tiene excrupulos. Se lo has dicho ya a Hinata?-Pregunto Shino, mirandole directamente a los ojos a traves de esas gafas oscuras que llevaba toda la vida.
-No... No se como decirselo. También tengo que ir a ver a Neji y a su madre-Dijo Naruto triste, mirando aun el cuerpo.
-Vaya faena... esa vieja Tsunade cada día esta más cabrona.-Comentó.
Naruto no contestó. Poco a poco, fue levantandose y empezó a hacer su verdera faena: Buscar pruebas.
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Estaba descargando las últimas cajas de arroz de la semana. No le gustaban los lunes, el día de descargar la comida, ya que solo le gustaba cocinar. Le pidió a su ayudante, que ya había dejado su carga en la cocina, que le ayudase con alguna caja. La ayudante sonrió y aceptó encantada.
Poco después, Choji ya comenzaba a preparar los fogones, el aceite, la sal, etc. para cuando entraran los clientes, que querían almorzar o comer. El sonido de la campana le anunció que ya había entrado alguien. Se pusó bien el delantal y fue a avisar a Mitsuki de la nueva llegada. Pero una voz reconocida se le adelantó.
-Choji? Estas ahí?-La voz provenía de Ino, su mejor amiga.
-Ino!-Exclamó Choji emocionado y salió a su encuentro para hablar con su vieja amiga-Cuanto tiempo!
-Si, semanas.-En sus brazos, un bebe empezó a patalear pidiendo atención y Ino, con dulzura y algo de cansancio, atendía a sus necesidades.
-Que tal estas, Shikamaru 2?-Choji cogió una de sus manitas.
-No se llama Shikamaru 2! Se llama Zen, y lo sabes!-Dijo enfadándose.
-Vale, vale, usted perdone... Que tal con Shikamaru?-Dijo Choji algo asustado.
Ino cambió su mirada asesina por una algo más triste. Quería evitar el tema como fuese, pero Choji era su mejor amigo. Eso él lo notó, pero pensó que era mejor que contara sus problemas.
-Shikamaru y yo estamos pasando por una mala temporada. La tienda no va bien y Shikamaru no tiene ideas nuevas, así que llega poco dinero a casa y eso lo hace ir mucho al bar. Filtrea con otras chicas y eso me pone mala...
-Vamos, Ino, sabes que Shikamaru es incapaz de traicionarte! No por algo os casasteis!
-Si, bueno..-Ino intentó sonreir, pero no con mucha suerte-. He venido para decirte que te tenías que ir a provar el vestido de la boda de Naruto y Hinata, que ya está listo.
-Ah, vale! Me pasaré por allí cuando pueda.
Y dicho eso, ambos se abrazarón fuertemente con mucho cariño. Eran muchos los años que llevaban juntos.
-Adiós, Choji, me voy ya que tengo prisa y tu, faena-dijo mientras dos clientes entraban por la puerta.
-Adiós, Ino.-Dijo feliz.
Detrás de la puerta, con cara de recelo, les miraba una muchacha joven.
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A lo lejos, unos ojos rojos miraban la escena del crimen, donde Naruto cogíasangre para analizarla.
-Vas a morir... Neji Hyuuga
Bueno, sinceramente, me gusta este capitulo, aunque he estado canviando muchas veces de escena, el problema es que queria presentarlos a todos, por eso he canviado tanto. Se que de momento, no parece muy yaoi, pero ya apareceran los tonos yaoi, ya... jajajaja. Aun asi, espero que os haya gustado!
A los lectores y lectoras de mis otros fics, intentare colgar nuevos capitulos pronto, aunque estoy enfrascada con un reto de un jitsu llamado Como niños, espero que lo leais! Eso es todo, gracias por leerme... dejad reviews plis!
