¡Bienvenides a la semana de San Calentín!
Para los que somos acérrimos enemigos del 14 de febrero, os traigo cinco días de puro y duro... pues eso, ya me entendéis. Es mi deber, y mi responsabilidad como ficker y como madre de una adolescente, recordar que este fic es +18. No os molesteis en responder que vais a leerlo igualmente, porque ese tipo de comentarios duran menos de lo que se tarda en decir Snitch
No soy una escritora de lemon. Me gusta leerlo, pero para escribirlo tiene que parecerme que la historia lo justifica. De cualquier manera, hace un par de meses les decía a mis amigues del Aquelarre que estaba un poco frustrada con eso, que no sabía si sería capaz de escribir realmente escenas sexuales aun cuando la historia lo pidiera. Y mi diablilla preferida hizo una sugerencia: te doy una situación y tu escribe más de mil palabras; pero no vayas al grano, aprovecha para recrearte.
En media hora había escrito de un tirón una escena que hasta a mi me sorprendió. ¿Qué a qué viene tanto rollo? A que llevo estos meses estirando mis límites y este era otro más y me siento feliz de haber escrito estos 4 OS. ¿Qué vamos a tener? pues mucho lemon, obviamente, un poco de femlash y alguna relación no convencional, porque así soy yo.
Nos vamos a ver de lunes a viernes. Que no, que no se me ha olvidado contar, el último es un two shot. Disfrutad, comentad y amadlo.
Los personajes de esta historia no me pertenecen, yo solo les doy otra vida diferente a la que planteó JK. Y por supuesto no me lucro escribiendo esto.
