Disclaimer: Slam Dunk y Yu Yu Hakusho, no me pertenecen y mucho menos sus personajes, para mi mala suerte. Aix! Que desgraciadita que soy!

Esto es un X-Over, la pareja es KuramaxHanamichi, estáis avisado/as, así que si no os gusta lo siento, y por favor ahorraros comentarios como Kurama solo pertenece a Hiei, o cosas así. Esta locura estúpida tiene su origen en un sueño que tuve este fin de año pasado, si no fuera porqué no tomé ni una gota de alcohol diría que fue el cava.

Sumario: A veces estar rodeado de demonios no es un infierno, sobre todo si algunos están más buenos que un tren.(N/A: Esto es mi opinión y la de Hana-chan también)

CAPITULO 6

Hanamichi y los demás, no tuvieron más problemas durante el resto del camino.

Finalmente llegaron a su destino, pero no era lo que esperaban.

-Yo solo veo agua sucia-Dijo Yusuke observando el lago de líquido oscuro que tenían en frente.

Hanamichi estaba confuso, sabía que su madre lo le había mentido; además esa tal "Botan" también les había dicho la misma dirección. -¿Pero entonces como es que no la noto? Se supone que si estamos tan cerca…-Pensó mirando a su alrededor buscando alguna pista que les ayudase, pero no encontró nada.

-¿Notas su presencia?-Preguntó a Kurama. Esté negó con la cabeza.

-¿Entonces no está aquí?-Preguntó Yusuke decepcionado e incrédulo.

-Yo no he dicho eso. ¿Hiei que hay más allá de este lago, o lo que sea?-Preguntó Hanamichi.

-El antiguo territorio de Mukuro.-Respondió el demonio de fuego.

Hanamichi se quedó igual. Pero creyó recordar que "ese Mukuro" era alguien muy fuerte.-Demasiado arriesgado…-Murmuró Hanamichi acercándose al líquido.

Hiei le sujetó por un brazo. –Nadie que se haya metido en eso ha vivido para contarlo.-Dijo, y para demostrarlo agarró una piedra, y la lanzó al "agua"…La piedra empezó a deshacerse como si fuese mantequilla.

Entonces Hanamichi notó algo. Después de pensarlo un poco, sonrió. –Mmm…es una locura, pero… ¿desde cuando yo estoy cuerdo?-Pensó.

Concentrándose, Hanamichi, empezó a levitar. Se colocó por encima del líquido horizontalmente, y fue avanzando hasta el medio del lago. Allí ganó altura y se colocó en posición vertical.

-¿Qué crees que estás haciendo?- Preguntó Kurama, no le gustaba el rumbo que estaban tomando las acciones del otro pelirrojo.

-Solo una prueba. Si me meto ahí dentro y después de unos minutos salgo a la superficie, es que no hay peligro, si no…mmm…dejémoslo en que tendréis que empezar a buscar de nuevo, pero esta vez sin mi.-Respondió divertido Hanamichi.

-Está como una cabra!-Exclamó Yusuke.

Kurama mientras ya se había transformado en Youko. Y se dirigía a la orilla del lago, muy decidido. Un golpe de viento repentino le hizo perder el equilibrio y caerse de culo al suelo.

-Tsk! Tsk! Youkai malo. La prueba la hago yo, dudo mucho que muerto salves a tu madre. Y yo…bueno…eso es algo que no os incumbe. Hagamos una cosa, en lugar de esperarme, será mejor que habléis con la "Botánica" esa.-Sugirió Hanamichi, aunque en realidad era una orden.

Kurama empezó a gruñir, las plantas que rodeaban al cuarteto estaban creciendo.

Hanamichi viendo que si continuaba pensando en como traspasar el líquido, si es que de verdad existía, Kurama le detendría…Ganó altura y luego se dejó caer en picado. Dejando atónitos a los otros tres.

El líquido empezó a cambiar de colores, marrón, negro, azul oscuro, gris…luego volvió a su estado original.

-¿Por qué no le detuviste? Eres más rápido!-Dijo Kurama a Hiei, enseñando los colmillos.

-Sabes tan bien como yo, que alguien hubiese tenido que hacerlo. ¿Hubieras preferido que fuera uno de nosotros?-Le desafió Hiei.

Kurama no dijo nada, se acercó una vez más al agua.-Voy a seguirle! Vosotros buscad a Botan, puede que haya descubierto algo nuevo. Lo de la piedra seguro fue una ilusión, pero eso no quita que Ha…Sakuragi esté solo allí bajo.-Dijo, entonces se lanzó al agua.

Después de eso, Kurama, solo recordó como Hiei y Yusuke le siguieron. Nada más.

Kurama despertó, cuando notó que algo o alguien estaban jugando con sus orejas. Abrió los ojos abruptamente, dejando a un Hanamichi muy sorprendido y avergonzado.

-Eh…Tenía curiosidad! Ehehehe!-Rió nervioso el Tensai. Luego adoptó una expresión seria.–Creo recordar haberos dicho que buscarais a esa amiga vuestra y no que os metierais en el agua.- Dijo mirando hacia arriba.

Entonces Kurama se dio cuenta que estaba en una cueva, pero que el techo de esta no era de roca, si no el lago.

-El líquido es un sedante, cuando alguien se sumerge, segundos después se duerme, el líquido atrae hacia el centro todo lo que entra en él. Así quien entra muere por falta de oxigeno. Tuve que crear un escudo alrededor de mi cuerpo y luego levitar para sacaros. Y…¿sabes? No me apetecía mucho después de haberme roto el culo en 4 trozos al aterrizar.-Dijo Hanamichi.

-Por eso te lanzaste en picado-Razonó Kurama.

-En realidad no, era la única forma de sorprenderte lo bastante para que no te metieras por el medio. He de confesar que no pensé en el hecho que el enano pudiera pararme. Nyahahaha!- Confesó Hanamichi.

Kurama no aguantó más y le dio un puñetazo a Hanamichi, sentándolo en el suelo. Después se acercó a los otros dos que empezaban a despertar.

-Teme kitsune! ¿Tu de qué vas?-Exclamó Hanamichi al registrar el motivo por el cual su culo estaba en el suelo, otra vez.

Kurama le ignoró por completo.

De repente Hanamichi, notó la presencia de algo familiar. Algo que no notaba desde su último partido contra el Sannoh.

Hiel y Yusuke, que justo habían despertado, fueron capturados por una luz blanca, mientras una azul atrapaba Kurama y Hanamichi.

Segundos después los cuatro estaban en frente de una Shiori muy sorprendida, y ¿libre?.

-Yusuke! Me alegro de verte!-Exclamó Botan, agarrando las manos del detective.

-Ahh…Y yo, pero…¿se puede saber que pasa aquí?-Preguntó Yusuke confuso.

Hanamichi estaba mirando a su alrededor buscando algo o alguien desesperadamente.

Hiei intentaba localizar a la bruja.

Y Kurama…estaba petrificado, miraba a su madre. Esta tenía una expresión indescifrable en el rostro.

Shiori podía ver el pánico el los ojos del kitsune. La chica hiperactiva y muy rara, de pelo azul (Botan) había aparecido minutos antes que aquellos cuatro y le había explicado, todas las cosas buenas que había hecho su hijo. Shiori estaba enfadada con su hijo, no por quien había sido, si no porque no confió en ella. Aún así, su Shuichi estaba sufriendo. Con paso decidido se acercaba a Kurama, quien retrocedía por instinto.

-El gran Youko Kurama tiene miedo de una simple humana.-Dijo sorprendida, aunque no quería ser cruel, esa fue la impresión que le dio a su hijo.

-De una simple humana, no. De ti si.-Confesó Kurama bajando la mirada.

Hanamichi dejó su búsqueda. Él había vivido lo mismo pero con Youhei.-Confía en ella, confía en ti.-Le dijo telepáticamente a Kurama.

Este alzó la vista para mirar a Hanamichi y se encontró con los ojos de su madre, que al contrario de lo que él esperaba, no contenían odio, desprecio ni nada semejante.

Kurama no resistió más, abrazó a su madre tan fuerte que casi la rompe.

Yusuke y Hanamichi sonrieron.

Hiei fue el único lo bastante práctico como para hacer las preguntas del millón de euros.-¿Qué haces aquí? ¿Cómo la liberaste? ¿Cómo hemos llegado aquí y donde está la bruja?-Interrogó Hiei a Botan.

Esta puso su cara de gato. –Meow! Hiei-san, pues la verdad es que…-Empezó Botan.

-Estas preguntas te las responderemos nosotros.-Dijo una voz muy familiar para Hanamichi.

Continuará…