Capítulo 4: A la Oficina del Director, Parte 1.
Severus prácticamente irrumpió en la oficina del Director, con la señorita Granger y Draco tras de él.
Dumbledore lo miró, con su incesante chispa en los ojos.
"Mi querido muchacho", lo saludo complacido, "Que energético te encuentras esta noche. ¿Quieres un chocolate caliente?"
"¿Cómo pudiste hacerle esto a una chica inocente, insensato?", Snape prácticamente le gritó al anciano mago.
Sólo en ese momento Dumbledore notó a las dos silenciosas figuras tras Severus. Su cara se tornó instantáneamente seria.
"¿Qué pasó, señorita Granger¿Señor Malfoy?"
"¡Dejaste a una niña convertirse en Mortífaga, y ni siquiera consideraste oportuno informarme, eso es lo que pasó!", gritó Severus.
"El Profesor Snape presenció un pequeño malentendido entre Draco y yo, señor Director", Hermione tranquilamente informó a Dumbledore, "Lamentablemente, a Draco le pareció necesario contar una historia bastante fantástica y el Profesor exageró un poco su reacción. ¡Ahora, podría por favor decirle al Profesor Snape que se ocupe de sus propios asuntos y me deje en paz!" .
"¡No lo voy a hacer, demonios!", Snape aun estaba gritando, pero la idea de la presencia de sus alumnos cruzó por su cabeza, de cómo disfrutarían verlo tan completamente fuera de control, y se controló lo suficiente para bajar su voz a un volumen tolerable, "Quiero algunas respuestas"
"Me temo que no será tan fácil, señorita Granger." Dumbledore suspiró y observó a los tres recién llegados tristemente. Severus, completamente pálido y virtualmente temblando de rabia; Draco, nervioso y miserable; y Hermione, intocablemente tranquila como siempre, la perfecta actriz, la perfecta máscara.
"Ahora que el Profesor Snape está al tanto, tendrá que ser informado por completo."
"¿No puede borrar su memoria, Director?
El silbante hilo de aire que Severus estaba aspirando le dijo a Dumbledore que iba a comenzar a gritar de nuevo. Hizo un gesto tranquilizador y fue recompensado con un silencio general.
"Por favor, tomen asiento", repitió, "Todos ustedes. Si esta conversación es realmente necesaria, vamos a tenerla de una forma civilizada, sin gritarnos. Ahora, señorita Granger¿desea poner usted al día al Profesor Snape?"
"Ya que es usted quien lo estima necesario, felizmente le cederé ese honor", le contestó rígidamente. Luego volvió sus ojos hacia la enorme ventana y pareció perder todo interés en la conversación.
Dumbledore suspiró nuevamente y se inclinó hacia atrás en su silla por un momento, masajeando su sien.
"Hace unos tres meses", comenzó tras un momento, "La señorita Granger pidió una reunión conmigo y me informó acerca de su entrada al circulo de los Mortífagos. Debo decir que hasta ese punto, yo no tenía la más mínima idea de lo que ella estaba haciendo. Ciertamente yo no la "obligué" a hacerlo, y estaba más que en desacuerdo con su decisión."
Dumbledore dirigió una cansada sonrisa hacia Hermione, quien aun estaba ignorando a todo el grupo. Dado que todo esto era completamente ridículo, su espalda parecía informarles, no estaba dispuesta a participar en ello.
"Al principio intenté disuadirla, pero estaba bien preparada, y la única forma de detenerla habría sido mediante el uso de la fuerza."
"Deberías haberla usado"
"No lo creo, Severus. A ti puede parecerte una niña, pero la señorita Granger es mucho más de lo que parece. Durante los últimos meses ella nos ha sido invaluable, su información detallada y sin fallas. Aparentemente, ha ganado la confianza de Voldemort más rápido que cualquiera antes que ella, y ha avanzado velozmente dentro del grupo."
"¡Esto no tiene sentido!", explotó Snape de pronto, "¿Qué podría querer Voldemort con una inútil sangresucia como ella¡Las niñas como ella son buenas para divertirse un rato, pero él nunca la admitiría como Mortífaga!"
"Severus", la severa voz de Dumbledore sonó furiosa, "¡No vas a usar ese tipo de términos en esta escuela!"
"¡Oh, por favor, Director¿Envía a la señorita Granger a ser torturada y violada, pero no puede soportar que la llame sangre sucia¡Realmente es un tonto!"
"Yo no la envié, Severus", había una agudeza en la voz de Dumbledore que le advirtió a Severus no ir más lejos, "Ella fue sin avisarme de antemano. Y se ha rehusado a reportar cualquier cosa que no sea de valor para la Orden. Incluso se ha negado a decirme como fue que se acercó a ellos. Sólo sé que les ofreció cierta información que era… demasiado buena para resistirla. Tal vez decidieron que no podían dejarla ir después de esto."
La súbita comprensión golpeó a Severus como un balde de agua fría.
"Fue usted", dijo, pasmado, "Usted me traicionó, señorita Granger. Usted les dijo que yo era un espía."
La chica asintió con la cabeza, sin volver sus ojos de la tormentosa noche del exterior.
"Lo consideré necesario", dijo despacio, sin emoción alguna en su voz, sin arrepentimiento.
"Niña estúpida. Pequeña idiota", Snape murmuró, desesperado, "Van a matarte tarde o temprano¿no te das cuenta?"
"Mientras alcance a hacer lo necesario antes de ese momento, eso no me preocupa."
"¿Pero no te das cuenta de lo que van a hacerte?", Snape notó que le estaba suplicando, rogándole que lo mirara, que tomara sus advertencias en serio, que escapara mientras aun podía hacerlo. "He estado en las reuniones. Sé lo que les hacen a las nuevas Mortífagas. Aún si no te trataran como una sangresucia no podrías soportarlo."
"Creo que tuvo que soportar la mayor parte de eso antes de entrar", dijo Draco, que finalmente había encontrado el coraje para hablar.
En un momento increíblemente largo y silencioso, Hermione Granger se volvió de la ventana y miró a Draco a los ojos. Parecía penetrar en ellos, buscando una verdad oculta detrás de su cara. Entonces asintió fríamente y su mirada regresó a la ventana.
"Et tu, Brute", Snape la oyó murmurar.
"¿Qué quieres decir, Draco?"
Draco se encontró ahora con los ojos de Dumbledore fijos en él, y el color subió a su rostro.
"Ella sedujo a mi padre", murmuró desdichadamente.
"¿QUÉ?" En un fluido movimiento, Severus había alcanzado a la chica y la había puesto de pie de un tirón. Ella gimió e intentó alejarse de él, de liberarse.
"¡Suficiente, Severus!", rugió Dumbledore, ahora de pie, "¡Suéltala inmediatamente!"
"¡De todas las estupideces posibles! Lucius es un monstruo, incapaz de tener sentimientos", le dirigió una mirada de indulgencia a Draco, "¿Cómo pudiste permitir esto, Albus¿Cómo pudiste?"
A la luz de las velas, el Director pareció viejo, frágil y agotado cuando alzó sus manos en un gesto desvalido.
"Ella no me lo dijo, Severus. No lo sabía…"
"Puedo asegurarles que Lucius está bastante enamorado de mí", les informó Hermione ácidamente, masajeando su brazo en el lugar en que Snape la había sujetado. "Estoy en perfecto control de la situación."
"Él la admira profundamente", confirmó Draco vacilante, "y habla de ella sin parar. Dice que nunca antes conoció a una mujer tan despiadada, alguien que estuviera dispuesta a hacer cosas más allá de incluso su imaginación, alguien que hasta disfrutara…"
"Creo que te entendieron, Draco", lo cortó Hermione. Aun se negaba a mirarlos.
"No, Hermione, no lo creo", respondió Draco, con la misma resolución que Snape había visto antes de vuelta en sus ojos, "He dicho todo esto por una razón, Director. Creo que Hermione ya no tiene el control. Mi padre me dijo cosas terribles acerca de las revueltas de los Mortífagos, me contó las cosas que ella ha tenido que hacer para satisfacer a Voldemort. Creo que cada vez que va a una reunión es herida gravemente y no le está diciendo a nadie al respecto. Muéstrales, Hermione", le exigió una vez más, "Muéstrales o lo haré yo."
Hermione se levantó de su silla y caminó hacia la ventana, hasta que su cara casi tocó el grueso vidrio.
"Lo siento, Hermione, pero estoy haciendo esto por ti", susurró Draco con aspereza.
"No lo hagas, Draco", dijo ella una vez más, pero Draco cruzó la distancia entre ellos, la giró hacia la oficina y abrió la túnica que la chica había envuelto firmemente alrededor de sus hombros. Hermione no hizo movimiento alguno para detenerlo, pero por un segundo, sus máscaras cayeron, dejando su rostro expuesto y salvaje, lleno de dolor e ira, y Severus se estremeció.
Nota de la Traductora: hola a todos! Este capítulo tardó un poquito más debido a mi falta de tiempo, pero ya está! El próximo debiera salir en un semana (estoy tratando de no dejar pasar mas de una semana sin actualizar porque creo que cuando pasa mucho tiempo entre cap y cap, uno pierde el hilo de lo que está leyendo)
Quiero aprovechar de agradecer a toda la gente que ha enviado sus reviews en lo que va de esta traducción, y a los que están leyendo en silencio¡por favor, evien sus comentario! Necesito saber si la historia está gustando para seguir con la traducción, si hay errores, si algo les parece mal, etc... Review!
