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15, tal vez 40
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-¿Y manana?
-No, mañana tampoco -responde Kakashi moviendo su ficha por el tablero.
-¿Po' qué?
-Porque no se puede.
-Pedo… e'to es muy abudido.
-Lo sé. Pero tenemos que seguir aquí.
-¿Y mama?
-Mama tampoco podrá venir.
-¿Y Zakumo?
-Sakumo está ayudando a mama.
-¿Po' qué?
-Porqué es mayor y puede.
-¿Y po' qué no podemoz ir a Ichiraku a po' damen?
-Porque tenemos que quedarnos en casa, sin salir.
-Papi… ¿po' qué mama me llama Gurita?
Kakashi deja escapar un gran suspiro, pero intenta mantener la calma ante el aluvión de preguntas diarias. Siempre las misma, casi en el mismo orden. Al menos las primeras. Luego de golpe cambiaba y planteaba algo totalmente diferente, como que no entendía porque la lluvia caía hacia abajo, o que no entendía porque los peces podían nadar sin ahogarse. Kakashi siempre intentaba responder con calma y quitando importancia al asunto, pero la cosa era seria.
Estaba por responder al último "po qué" de Yumiko cuando el teléfono sonó.
-Dame un momento y seguimos jugando, ¿está bien?
-Zi.
Kakashi va hasta su despacho, cierra tras de si y descuelga la vídeollamada.
Sakura, con mascarilla y traje antibacterial, se encuentra al otro lado de la llamada.
-¿Cómo vais? -pregunta con tono agotado.
-Bien. ¿Y vosotros?
-Agotados. No hay tiempo para descansar.
-¿Cómo está Sakumo?
-Bien. Se encuentra bien. Está muy animado. Se le pasó la fiebre. Pero será mejor que se quede aquí.
Kakashi asiente en silencio.
-¿Y tú? -pregunta finalmente.
-Yo estoy bien. Ya te lo he dicho. Cansada, pero nada más.
-Los informes son muy vagos. ¿Cuáles son las cifras reales?
-Muchos contagios. Más de los que hubiéramos imaginado. La propagación es muy rápida. El hospital está saturado, no podemos atenderlos a todos. Y seguirán llegando. Esperamos tres días más de nuevos ingresos.
-¿Cuántos muertos?
Ahora es Sakura la que guarda silencio por un momento. Kakashi comprende que prefiere no hablar de ello. Le ha llamado para desconectar, no para hablar de la pandemia que está asolando varias aldeas.
-Yumiko os manda saludos -comenta cambiando a un tono más alegre.
-¿Está siendo muy Yumiko?
Kakashi se carcajea. Yumiko se había convertido en un adjetivo para hacer alusión a esos momentos en que su hija, inagotable, empezaba a preguntar y preguntar sin fin.
-Sí, un poco. Quiere saber cuándo volveréis y, sobre todo, quiere saber porqué ella no puede salir a la calle y los ninken sí.
Ahora es Sakura la que ríe.
-¿Está despierta?
-Sí. Dame un segundo, la traeré.
Kakashi sale del despacho.
-Yumi, ven. Estoy al teléfono con mama, ¿quieres hablar con ella?
-¡Ziiiiii! -grita corriendo hacia el despacho. Pasa de largo a Kakashi y corre hasta la butaca a la que salta para saludar -. ¡HO'A MAMI! -grita.
-Hola cariño.
-¿Cua'o vuelve'? ¿P'onto? -mientras pregunta Kakashi la toma en brazos, se sienta en la butaca y la pone sobre sus rodillas para que los dos puedan ver a Sakura.
-Me temo que no, cariño. Aún tendré que quedarme aquí unos días.
-¿Y zi voy yo?
-Tampoco puede ser. Debes quedarte allí con papa. ¿No querrás dejar solo a papa?
-¿Vamo' lo do'?
-Lo siento mi vida, pero no podéis. Debéis quedaros allí unos días más.
-¿T'es?
-No. Más.
-¿Tinco?
-Más.
-¿Cuat'o?
Kakashi deja escapar una risilla y Yumiko se gira para mirarle con reproche.
-¡No te días de mí! -pide molesta.
-Oye, no te cabrees. Me voy a tener que cabrear yo, que no quieres pasar unos días conmigo.
-Zi quiero.
-Entonces dile a mama lo bien que lo estamos pasando y que la queremos mucho, y estamos deseando que venga, y con ella Sakumo, pero que esperaremos tranquilamente en casa, los días que hagan falta.
-¿Pedo zon mutos?
-Puede que quince -responde Kakashi.
-Tal vez cuarenta días -añade Sakura.
-¿Cuarenta días? -pregunta Kakashi sorprendido.
-¿Cuadenta? -pregunta Yumiko.
-Hemos descubierto que se puede trasmitir el virus incluso después de superarlo.
-¡Ez una ete'nida'!
-Es muchísimo tiempo -se lamenta Kakashi.
-Lo sé. Pero si no lo hacemos…
-Lo sé. Lo sabemos, ¿verdad Yumi? -pregunta abrazando a la pequeña.
-Zi. Lo zabemoz.
Detrás de Sakura aparece un enfermero que busca llamar su atención.
-Chicos, me tengo que ir. Hablamos más tarde. Estaré con Sakumo.
-¡Ziiiiiii! -grita poniéndose en pie sobre Kakashi.
-Os quiero -dice alargando la mano para cerrar la conexión.
-¡Sakura! -grita Kakashi para detenerla.
-¿Sí?
-¿Por qué le llamas Gurita? -dice sin soltar el abrazo de Yumiko.
Sakura sonríe.
-Cuando duermes, te haces una bolita, justo como Guruko.
Yumiko empieza a reír y se tapa la cara medio avergonzada.
-Eres mi bolita especial. Os quiero -dice sonriendo antes de desconectar.
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NdA: A Frida, que me ha recordado que Yumiko existe.
Ánimo, a todos, la gran mayoría de los que conozco están en cuarentena, yo incluida, así que ánimo, esto pasará. Saldremos de esta, y todo volverá a la normalidad, o algo cercano a ella. La verdad es que espero que cambiemos, espero que aprendamos de todo ello, por los que se han ido, pero también por nosotros, para hacer un mundo mejor. Resistid unos días, si Yumiko puede, tu puedes.
