Capítulo 3. La estirpe de los Sparrow

- ¿Mamá?- inquirió Coral cogiéndola de la mano- Mamá¿estás bien¡¡¡Mamá!- gritó asustada la muchacha intentando agarrar a su madre, la cual había caído sin conocimiento. Jack respondió y recogió a la mujer antes de que ésta tocara el suelo. La cogió en brazos y la llevó a una habitación contigua, recostándola sobre un camastro. Coral lo siguió preocupada.

- ¿Está bien?- le preguntó a Jack cuando éste chequeó a su madre concienzudamente.

- Trae un vaso de agua- dijo sin mirarla.

- Pero ella…

- ¡Hazlo!- le cortó el hombre.

Coral salió rauda a buscar agua al pozo. Cuando llegó con una jarra y un vaso Rose ya había recuperado el conocimiento. La chica le entregó la bebida y se apartó para dejarle aire. Ésta estaba pálida como un fantasma y extrañamente seria, sin embargo, después de beber un sorbo de agua, consiguió esbozar una media sonrisa. Jack estaba sentado en una silla a su lado.

- Coral, cariño, coge una silla y siéntate. Jack y yo tenemos algo que contarte.- La muchacha la miró confundida, pero obedeció. Tras sentarse frente a Jack, al lado de su madre, se dispuso a escuchar. Jack jugueteaba con varios anillos nerviosamente y miraba a su alrededor. Coral carraspeó con impaciencia.

- Jack y yo vamos a contarte una historia.- dijo mientras la muchacha fruncía el ceño y torcía la boca.

- ¿Una historia¿No soy un poco mayorcita para historias?

- No todas las historias son cuentos infantiles.- comentó Jack.- Esta ha estado oculta para ti durante muchos años.

- Todo comenzó cuando el recién nombrado capitán de la "Perla Negra", el Capitán Jack Sparrow, llegó a la localidad inglesa de Ludlow. Yo era hija de un noble de bajo rango, Thomas Flower, y… me enamoré locamente del joven Jack cuando, durante un viaje marítimo abordó nuestro barco. Parece que él también se fijó en mí porque, cuando nos dejaron ir, él me retuvo y… yo me quedé con él. Mi padre me abandonó a mi suerte sin molestarse en saber siquiera si estaba en peligro. Fue un cobarde.- dijo con tono colérico y los ojos llenos de odio.- Pero, agraciadamente, estaba en muy buenas manos. Cada día estábamos más enamorados. Un día le cedió su cargo de capitán a su amigo William Turner y él se estableció conmigo durante unos años en esta isla, en los cuales tuvimos una hija.

- ¿Una hija!- La interrumpió Coral.- ¿Me estás diciendo que tengo una hermanastra?- preguntó ilusionada.

- No, no tienes una hermana.

- Ooh…¿se murió?

- No, no es eso.- dijo Jack con una sonrisa misteriosa y gesto hastiado.- Parece que no entiendes. ¡Tú eres nuestra hija!- declaró acercándose a ella. Coral parpadeó.

- Bromeáis. Mi padre está muerto. Murió cuando yo tenía cuatro años. Y era marinero, no pirata.- dijo las dos últimas palabras en un tono lo más insultante que pudo. Rose negó estas palabras con la cabeza.

- Mentí.- dijo.- Eso es algo que te conté yo para explicar su ausencia. Eras una niña y yo estaba enfadada con él. Para mí es como si estuviera muerto. ¿Y cómo iba a decirte que tu padre era un pirata?. Una niña no asimila eso. Además, si fueras contando por ahí que tu papá era un pirata nos hubieran colgado a ambas.

- Y yo pronto me di cuenta de que mi vida estaba en la "Perla"; no podía vivir en tierra. La "Perla Negra" simboliza mi libertad. No pude soportarlo y os abandoné a tu madre y a ti en este lugar, junto con un buen puñado de dinero. Soy rebelde por naturaleza y, por lo que me ha contado tu madre mientras cogías agua, te he traspasado mi forma de ser.- dijo sonriendo con algo parecido a orgullo reflejado en su rostro.

Jack y Rose guardaron silencio esperando una reacción de Coral, pero ésta se limitó a sonreír nerviosamente y a removerse en la silla. De súbito, se levantó y cruzó la habitación en cuatro zancadas, abrió la ventana y dejó que el aire le sacudiera los temores. Una mano se posó en su hombro un rato después y la giró suavemente. Coral levantó la mirada y se encontró con la serena mirada de Jack. Y en ese momento tuvo la certeza de que el hombre que la miraba era su padre. Los mismos ojos, con el mismo brillo; la misma sonrisa, sólo que la de él ya estaba hecha un desasytre con sus dientes de oro por todas partes; más o menos la misma complexión física, con la diferencia de géneros…

Coral le sonrió y él le devolvió el gesto. En ese momento Rose supo que, aunque nunca volvería con Jack, y pasara lo que pasara con su hija, nunca volvería a estar tan orgullosa de ellos dos, de su familia.

Hola, guapas! Gracias por los reviews! Estoy muy, muy, muy feliz! No creí que fuera a leer este fic nadie. No sabéis la ilusión que me hace recibir todos vuestros reviews! Perdonad que sean tan cortitos los capis pero es que ando muy atareada últimamente, tengo un examen de recuperación en la facultad el viernes y estoy que no paro, estudiando la leche. :)

A continuación os dejo las respuestas a los reviews:

Kazehime Kagura: Hola! Asias por el cumplido :P. Respecto a lo de seguir escribiendo, no te preocupes que voy a seguir. Ando un poco liada y por eso no publico todos los dias, pero trataré de publicar al menos una vez por semana, aunque sean capis cortitos como estos. Y encima dentro de dos semanas empiezo el 2º curso…madre miaaaaa, socorrooooo! ;) Nos vemos!

Analongview: Asias, niña! Lo continuaré :)

Daichan hibiki: Hola, chiquilla! Sólo me llegó un reviw tuyo…me enviaste dos:S En primer lugar, gracias por todos esos piropos a mi manera de escribir… En segundo lugar, intentaré ir haciendo capis más largos. Y en tercer lugar, gracias por leer mi fic! Jejejeje

FranChe MalFoY: Hola guapísima! En cuanto termine de publicar este capi, me paso por tu fic, ok? Y…¡sé lo que es quedarse enganchada a una historia! Así que trataré por todos los medios no defraudarte ni a ti ni al resto de mis lectoras. ;) Jijiji! Por cierto…¡ESE JACK! Jajajaja.

Ethel I. Bonnie: Hola, chica! A mí también me parece divertido pensar en como sería Jack como una hija. ¿Será capaz de ser un buen padre a pesar de todo? Es enfrentarlo a responsabilidades, algo que es evidente que no le entusiasma y…apenas puede cuidar de sí mismo, a saber cómo va a cuidar de una jovencita en plena edad de rebeldía? A darle un poco de su propia medicina! Jajajaja. Además¿quién va a imaginar al Jack libre y enamorado únicamente del barco y del mar, enamorado también de una mujer en su juventud?. ¿Quién enseñará más a quién¿El padre a la hija o la hija al padre? Jajajaja. Asias por la información de Depp, pero lo sé todo sobre el actor…jajajajaj; pero me resisto a poner a Jack tan mayor porque no aparenta esa edad.

Iliath: Niña! No adelantes acontecimientos! Jajajaja. ;) Tranquila, que Coral no es una caperucita, es una mujer de armas tomar. De todos modos, es humana y a mi me va mucho el realismo. Una mujercita de 17 años va madurando, evolucionando, como todos los personajes, y la historia no va a durar dos días en el tiempo interno, sino un par de años o más…con saltos en el tiempo, claro. Me gusta mostrar la evolución, como si fueran personas reales que maduran, tienen sentimientos de todo tipo, no son témpanos de hielos, pero tampoco dulces princesitas. Coral no ha sido educada entre algodones. Su casa lúgubre y fría muestra la realidad: son una familia humilde, madre e hija, madre soltera…eso en 1600 y pico estaba muy mal visto y eran casi renegadas sociales. Y encima el pasado de ambas... les podría costar la cabeza, como bien informa Rose. Rose es más dulce, más serena, más realista y menos aventurera. Si pudiera escoger viviría en un palacio. Pero dentro de su pobreza viven sin carencias básicas gracias al negocio familiar. Esta historia está bien documentada… Verás cómo Jack le enseña a Coral todo lo necesario según información rigurosa sacada de libros de historia, navegación, astronomía y esgrima. Así que no te preocupes, yo lo que trato de crear es a una chica humanas con sus flaquezas y sus puntos fuertes, pero ninguna Cenicienta. Bueno, me alegro que te guste y gracias por los consejos, de todos modos. Un besazo!