Chapter 7. Acercamientos

Lily fue corriendo rápido por el castillo hasta que llegó a su habitación y se dejó caer en la cama, muerta de sueño pero sin poder dormir. Estuvo toda la noche dando vueltas en la cama. James y Sirius eran animagos y habían alejado aquel enorme lobo del colegio. Pero porqué? Parecía que lo conocieran. Podía ser que el lobo… No, bueno, el caso es que la opinión que tenia de los dos estaba cambiando. Desde entonces se los miraría con otros ojos. Y el lobo… tenía que decírselo a Chris y a Lucy, pero no, primero debía estar segura.

….

Las chicas bajaron al comedor para desayunar antes de clase. Chris y Lucy habían visto un poco extraña a la pelirroja pero ésta les había dicho que todo estaba bien.

- Lily seguro que todo fue bien ayer por la noche? – preguntó Chris arrugando las cejas con semblante preocupado.

- Sí de verdad, todo está bien, sólo estoy un poco cansada.

Empezó la primera clase y Lily estuvo mirando todo el rato a los merodeadores, se les notaba cansados, con ojeras, pero no hacían cara refunfuñada, estaban riendo y gastando bromas como siempre aunque si te fijabas bien veías que tenían algún arañazo. La pelirroja pensó que si verdaderamente el lobo era quien pensaba que era, estos chicos se merecían un 10.

- Oye Lily, ya! – dijo de repente Chris sacándola de sus pensamientos.

- Ya qué? – dijo Lily volviendo al mundo real.

- Pues que no estas atenta a la clase y estas todo el rato mirando a Black y a Potter – concluyó Lucy.

- Sí, así que no digas que no pasa nada.

- Está bien… Sí que pasa algo, pero ahora no os lo puedo contar así que no insistáis por ahora. Os lo contaré en el momento adecuado.

- Tenemos que preocuparnos? – preguntó Lucy.

- Bueno… Supongo que no, bueno esto espero – dijo la pelirroja no muy segura dejando por zanjado el tema.

Chris y Lucy se miraron un poco preocupadas pero decidieron hacer caso a su amiga y no molestarla más durante la clase. Normalmente decía las cosas por algún motivo y confiaban que hablaría con ellas tarde o temprano, cuando lo creyera adecuado.

Al terminar la clase se dirigieron hacia transaformaciones que era la próxima clase que tenían pero Lily se retrasó ya que no sabía qué hacer, no podía creer lo que había visto y necesitaba decirlo ya. Mientras daba vueltas sobre si misma andando por un pasillo del tercer piso, alguien la interrumpió.

- Qué te pasa? Estas bien?

Lily levantó la cabeza. Lo que le faltaba, encontrarse a Potter de cara en estos momentos no era lo que más necesitaba para tranquilizarse.

- Estoy bien, voy a clase – dijo Lily rápidamente.

- Vale, vale… - dijo James que se dispuso a irse ya que no tenía muy buena relación con la chica.

- Espera – dijo Lily de pronto.

- Qué – contestó James con un tono no demasiado agradable, más bien como cansado.

- No… Nada, nada da igual, lo siento.

- Oye qué te pasa? Estas un poco extraña y no me contestas como si fuera un bicho raro, seguro que no te pasa nada? Ya sé que no somos amigos pero bueno, si quieres decirme algo…

- No, no de verdad, sólo que si te puedo ayudar en algo…

Y Lily se fue con una sonrisa. James se quedó pensando que aquella chica era muy extraña pero se fijó en aquella sonrisa… Nunca se había fijado, y tampoco en sus ojos, curioso… Tendría que fijarse más en ella.

- Ey Remusín qué tal estas – preguntó Sirius entrando en la enfermería.

- Bien, bien, gracias.

- Menuda carrera nos pegamos ayer eh… - dijo James sentándose en su cama.

- Si… lo siento…

- Por favor no vuelvas a decir lo siento tío, qué pesado, sabes que si vamos al bosque es porque queremos.

- Ya… Sabéis qué? He estado pensando en Lucy. Me gusta de verdad y por eso querría intentar algo con ella pero no estoy seguro. Esta vez es diferente, no siento lo mismo por ella que por las otras chicas con las que he estado y por eso creo que tengo que vigilar mucho.

- Vigilar el que – dijo Sirius – ve a por ella y ya está.

- No, no es tan sencillo, soy un hombre lobo, recuerdas?

- Sí Remus, pero si estuvierais juntos sería porque los dos queréis y entonces a ella esto no le importaría, esto si de verdad es más que un simple rollo y lo que sentís va más allá de una simple atracción, claro…

- Carai James, que experto en el tema – dijo Sirius.

- Bueno, bueno, a ver como seguimos, ya me pensaré bien qué hacer, al fin y al cabo no estoy seguro que ella me quiera, no lo puedo dar por hecho así como así.

- Chicas… creo que ya ha llegado el hora de contaros lo que pasa – empezó Lily.

Subieron a su cuarto y estuvieron charlando un buen rato sin parar.

- Así… que si las cosas son tal y como pienso, aunque no estoy totalmente segura… el hombre lobo sería… - Lily miró a Lucy que hacía un rato que había emblanquecido.

- Remus… - acabó la misma Lucy con una voz frágil.

- Lo siento Lucy – dijo Lily, yo lo creo por la misteriosa enfermedad que ha tenido, hoy tampoco ha venido, ayer era luna llena, y Potter y Black parecía que ya sabían lo que estaban haciendo, como si conocieran aquel animal. De todas formas esto no es suficiente como para decirlo, pero igualmente… tenía que deciros lo que creo.

- Pues sabéis que… - dijo Lucy mirando a sus amigas – si lo es no me importa nada, es más, creo que aún lo quiero más.

Chris y Lily miraron a su amiga que empezaba a soltar alguna lagrimita y se fundieron las tres en un abrazo.

- De todas formas Lucy, no hay nada que lo asegure, es una afirmación muy precipitada y no tengo ninguna prueba real para hacerla, pero antes de decidir a contarlo he ido a la biblioteca y me he informado sobre los hombres lobos…y… no sé, de todas formas ya sabes que soy muy impulsiva a veces.

- Si, y normalmente tus intuiciones e impulsos van por el camino acertado, pero me da igual. Ojalá me lo contara él si es que es verdaderamente un hombre lobo.

A la hora de cenar, en el comedor, Will, Vera y otros Ravenclaw preguntaban por las chicas de Gryffindor que hacía mucho que no veían.

- Mira, allí están – dijo Vera señalando a las tres chicas que en aquel preciso momento entraban en el comedor. Les hicieron una señal para que se acercaran y se sentaron con ellas.

- Qué tal todo – preguntó Will – por cierto Lily – dijo éste dirigiéndose a ella, hoy he visto al novio de tu prima con la tía…

- Ya – dijo Lily interrumpiéndole – es un capullo, sólo espero el momento que mi prima lo deje.

- Bueno, si puedo ayudarte en algo me lo dices, he estado estos días con ella y me parece muy buena chica.

- Sí, lo es, si puedes hacer algo ya te lo diré, gracias – dijo Lily pasándole la bandeja de pollo.

Estuvieron comiendo tranquilamente hasta que las chicas volvieron a subir a su cuarto. Iban hablando de los merodeadores por el camino, Chris y Lucy también habían quedado muy paradas y tampoco lo habían asimilado.

- Qué cuchicheáis – dijo de pronto Sirius que venia en dirección contraria por el mismo pasillo – hablando de la nueva moda que se presenta para el próximo verano o puede que hablando de nosotros.

- Si, Black, no tenemos nada mejor que hacer – contestó Chris pensando que aquella vez el chico había dado en el clavo.

- Claro que no, no hay nadie ni nada más interesante que nosotros.

- Venís de la enfermería? – preguntó Lucy.

- Cómo sabes… - dijo de pronto Sirius mirando a la chica extrañado.

- Bueno, hoy Remus no ha venido a clase así que he pensado que aún debe seguir a la enfermería aunque el otro día no parecía que tuviera nada grave.

- No, no, no tiene nada grave – volvió a responder Sirius.

- Entonces, puedo ir a verle?

- Claro, claro, seguro que estará muy, muy contento – dijo Sirius con una sonrisa pícara.

- Y a ti que te pasa? – dijo de pronto Lily mirando a James, éste había estado todo el rato callado observando a la pelirroja.

- Qué? No, nada, nada. Sólo estaba pensando que ya que Middlewood y Remus se han hecho tan amigos… pues que podríamos intentar llevarnos mejor o digamos que no tan mal – dijo el Merodeador que no encontraba ningún motivo para que la relación con aquellas chicas fuera tan mala – bueno si queréis claro…

- Pues para empezar no me llames Middlewood, sería una buena manera de comenzar – dijo Lucy.

- Entonces…

- Que sí, Potter que sí – interrumpió Lily – que lo podemos intentar, no es tan difícil de entender no?

- Bueno, bueno, vale señorita…

- Puedes llamarme Lily.

- Oye, oye – dijo Chris de pronto apartando a Sirius de encima suyo ya que el chico la había cogido para abrazarla con furia.

- Oye, sólo estoy intentando empezar una amistad…

- Pues para hacerlo no haces falta que te conviertas en un pulpo y me ahogues – dijo Chris enfadada.

- Bueno chicas, nos vemos – dijo Sirius picándole el ojo a Chris mientras se iba con una sonrisa seductora.

- Oh, que tío! – protestó Chris – si no supiéramos lo que sabemos no se qué haría con él.

- Bueno Chris, al fin y al cabo puede que no sea tan malo. Voy a ir a ver Remus.

- Vale, luego nos cuentas qué tal – dijo Lily – por cierto, tenemos que seguir pensando en Pam, al fin y al cabo todo esto lo hemos descubierto gracias a ella.

- Si, tienes razón, tenemos que espabilar para que lo dejen ya! Cuando vuelvas nos cuentas todo y hablamos de esto.

- Se puede?

- Lucy! Que alegría verte, qué tal estas?

- Yo muy bien… Y tú?

- Yo también, yo también, todo perfecto.

- Ya…- Lucy lo miró con semblante serio y preocupado – puedo sentarme?

- Claro, claro – Remus se apartó un poco para que la chica pudiera sentarse a su lado en la cama.

- Remus yo… Sólo quiero que confíes en mí para lo que sea, te lo digo de verdad lo que sea.

- Porqué dices esto? Qué te pasa? Estas muy seria, te preocupa algo?

- No, bueno, en realidad si… no sé, sólo quiero que sepas que estoy aquí para lo que necesites y bueno, espero que te recuperes pronto aunque no se bien lo que tienes.

- Lucy…yo…gracias.

La chica asintió y se levantó de la cama, la enfermera acababa de entrar y la echaba fuera, era tarde.

- Bueno, pues que te mejores, espero verte pronto en clase.

- Si, mañana seguramente ya vendré.

Lucy se fue hacia la puerta y antes de irse se giró y le dijo:

- Recuerda, para lo que sea, no me asusta nada, aunque creas que sea una cosa muy fuerte… pero espero que siempre confíes en mí.

Lucy se fue y Remus quedó muy parado, sobretodo por lo último que le había dicho la chica. Qué quería decir Lucy? Porqué le decía esto? Podía ser que supiera algo? No, imposible, pero entonces… La manera como lo miraba hoy… Entre comprensiva y preocupada, como si esperara que él le contara algo y ella estuviera dispuesta a ayudarlo con lo que hiciera falta. Lucy… Todo el día la tenía en la cabeza.

- Bien – dijo Chris – no esperes que te lo cuente así de pronto. Es algo difícil de explicar, ya te lo contará si cuando él lo crea.

- Y si no me lo cuenta nunca?

- Claro que si, este chico parece muy interesado en ti y no creo que a la larga te oculta una cosa así, no puede.

- Que quiere decir a la larga? Se puede saber qué es lo que te pasa por la cabeza Lily?

- Ah, no! Es sólo que por un momento ya os he visto casados. Que quieres chica, creo que deberías empezar a salir ya porque los dos estáis coladitos.

- Va, cállate loca – dijo Lucy entornando los ojos y haciendo un gesto con la mano sin tomarse nada en serio lo que le había dicho su amiga pelirroja – pasemos al tema Pam.

- Si, tenemos que hacer algo ya! – exclamó Chris – a ver, mañana al mediodía es cuando el imbécil queda con la tía aquella así que es el momento perfecto para que tu prima los pille.

- Si Chris pero tampoco es tan fácil. Ella tiene clase además no podemos asegurar que hayan quedado – dijo Lily-

- Que si, que si. Ellos quedaran seguro porque nunca fallan y nos va perfecto porque tu prima mañana no tiene clase a esta hora.

- Como que no?

- No, he oído como McGonagall les decía hoy que se suspendía la clase, bueno que la cambiaban por la hora de estudio que tienen después porque la profe tiene que ir no sé donde. La cuestión es que estará en la biblioteca estudiando y podemos llamarla y…

- Carai tía… Si es que eres tan cotilla que te enteras de todo – dijo Lucy – entonces… qué plan debemos seguir?

- Mirad, tengo una idea. Yo me esconderé en un matorral ya de lince, y vosotras vais a buscar a mi prima y le decía que habéis visto un lince y como sabéis que le gustan mucho los animales pues que la llamáis para que lo vea. Entonces os la lleváis de la biblioteca y me la traéis. Entonces se emocionará como siempre hace con los animales y vosotras le tenéis que decir algo para que esté callada, que no la oigan.

- Algo como qué? – preguntó Lucy.

- Pues no sé, a ver, por ejemplo, le decís que viene algún profe o alguien y que es mejor que se lleve el lince y que no haga ruido que como la gente se enteré que está allí todo el mundo querrá tocarlo. No sé un poco de imaginación, improvisad.

- Bueno vale, a qué hora tiene biblioteca entonces?

- Tiene a las 4 y el tío siempre queda con la chica a las 4 y poco así que lo tenemos perfecto – dijo Chris emocionada, encantada de hacer cosas así.

- Pobre Pam cuando lo vea… Que desilusión…

- Ya Lucy, pero cuanto antes se entere mejor, no puedo permitir que mi prima sea engañada de esta forma y no se entere y piense que está con el hombre de su vida…

- Si, tienes razón… en fin, pues hasta mañana, será mejor que vayamos a dormir.

Las chicas se pusieron a dormir.

- Oíd – dijo Lucy justo cuando se acababan de acostar – me tenéis que ayudar a que Remus confíe en mi para poder ayudarlo.

- Y como lo vamos a hacer – preguntó Chris

- No sé, creo que podríamos hacernos más amigas de Potter y Black.

- Qué? Por favor Lucy, pídeme lo que sea menos esto. Has visto al imbécil de Black? Ya he hecho suficiente diciendo que nos tragaríamos y que no le insultaría cada vez que pasara por su lado.

- Por favor Chris… Es importante para mí…

- Bueno lo intentaremos – dijo Lily – haremos lo que podamos.

- Ey chicos! Rápido que llegamos tarde a clase! – dijo Remus saliendo rápido de la ducha y viendo con desesperación como sus amigos seguían durmiendo plácidamente.

- Bueno, bueno… ya vamos… Qué tenemos a primera hora? – preguntó Sirius mientras se estiraba como un perrito dispuesto a seguir durmiendo.

- Tenemos pociones y no creo que al profesor Marsde le haga mucha gracia que lleguemos tarde.

- Bueno, ve tirando, ahora venimos – dijo James que ya se estaba levantando.

Remus se fue y los chicos se levantaron sin prisa. Después fueron a clase de Pociones, una clase especialmente aburrida sobretodo porque era la única que hacían con los de Slytherin y tenían la mala suerte que el profesor era el encargado de la torre de las serpientes y evidentemente no les tenía mucha aprecio a los chicos, sobretodo a causa de las incansables bromas que éstos les gastaban a los alumnos de su torre. Por desgracia del profesor, le era difícil castigar y suspender a los merodeadores porque estos eran inteligentes y se sacaban pociones sin demasiado esfuerzo.

- Llegan tarde, 50 puntos menos para Gryffindor y siéntense rápido si no quieren perder otros 30 cada uno.

- Esto es un injusto – saltó de pronto una voz de las primeras filas.

- Perdón cómo ha dicho señorita Evans?

- No, nada… Bueno sí – dijo más segura la pelirroja – Snape y Malfoy también han llegado tarde, sólo dos segundos antes y han podido pasar sin que les restara puntos.

- Así que piensa que soy injusto… Muy interesante, veamos… 50 puntos menos para su torre, haber si aprende a callar cuando debe callar.

La clase transcurrió sin ningún otro incidente hasta el final cuando terminó.

- Quiero que me hagan la poción de la página 30, 31 y 32 para el próximo día y… Potter, Black, por llegar tarde… además de la poción, quiero que me hagáis un informe de los ingredientes que se pueden añadir para que sea más efectiva, pero no se preocupen, les buscaré un ayudante, a ver…. Mira! Tú misma Evans.

- Pero… cómo lo vamos a saber…

- Espabílense, Evans, espabílense.

La clase terminó y los chicos fueron saliendo hacia la siguiente clase mientras algunos chicos de Slytherin se reían por lo bajo.

- Evans! Que te parece si intentamos hacerlo juntos – dijo James acercándose a la chica.

- Bien, y recuerda que puedes llamarme Lily.

- Si, es verdad… no me acostumbro… Bueno pues nos vemos después de comer!

La chica asintió y los chicos se fueron como si nada mientras ella se quedaba cabizbaja. No acostumbraba a recibir castigos y menos a defender a los merodeadores. En fin… todo puede cambiar pensó mientras se reunía con sus amigas.

Hasta aquí el séptimo capítulo. Espero que os guste y que me digáis qué tal. Ahora en verano no creo que pueda actualizar nada, por eso he subido este chap tan rápido, y puede que suba otro más pero hasta después de vacaciones no creo que nada más. Bueno un beso muy grande a tods y dejadme un review please!

Felices vacaciones!

Maria

El próximo chap… Pam!