MI OTRO YO

Todos los derechos de la serie Neon Génesis Evangelion pertenecen a Gainax. Esta historia fue escrita sin fines de lucro, solo como medio de esparcimiento. No me demanden.

Nota: Shinji tiene dos tipos de diálogos, "Normal" y "Cursivo", esto es para poder diferenciarlos.

Capítulo XXXIX: "NECESITO VITAMINAS"

Shinji tomaba su desayuno totalmente extenuado. No estaba seguro, pero le parecía que había impuesto una marca. Nunca imaginó que pudiera llegar a hacerlo TANTAS veces en un solo día. No era de extrañar que estuviera tan cansado, somnoliento y adolorido, si hasta sentía que su camarada de armas estaba apunto de caérsele. Esa mujer prácticamente le había drenado hasta la última gota de energía... maldijo su suerte y a su "Otro Yo". Cuando ya estaba seguro que la cosa había terminado, ella le decía cualquier cosa que tuviera las palabras "Sirviente o Ama" e irremediablemente él terminaba diciendo, "Como desee, mi ama"

Para la total frustración de Shinji, debía reconocer que lo había pasado bien. Ahora conocía cada rincón del cuerpo de esa mujer y lo que le gustaba hacer en la cama... fuera de las cosas que inventaron, cosas que de solo recordarlas hicieron que le subiera la temperatura.

Apartó esos pensamientos de su cabeza y siguió comiendo su desayuno para recuperar energías. Lo único bueno de todo eso, es que Sabrina se había ido temprano llevándose sus cosas, ya que encontró un departamento donde quedarse el sábado en la tarde y que por estas COSAS de la vida, olvidó mencionar. Levantó la cabeza cuando sintió la puerta. Kaji apareció segundos después y levantó una ceja al ver el estado deplorable del chico.

-- Parece que te pasó un camión por encima.

-- En realidad fue una rubia –- dijo Shinji con pesar.

-- ¿Una rubia?. Oye, no habíamos quedo en...

-- Lo sé, y se fue temprano con sus cosas. Encontró donde vivir y espero que todo quede ahí. La verdad es que me dejó hecho polvo... y no fue cosa mía, fue cosa de "EL".

Kaji se sentó en la mesa frente a Shinji.

-- Si, y parece que te dio con todo... bien, al menos eso terminó y las cosas no pasarán a mayores. Mira que de seguir con ella te estarías metiendo en un gran lío -– dijo Kaji.

-- Kaji... si sabías eso¿Entonces por qué no nos detuviste la otra noche? -– preguntó Shinji.

-- ¿Me crees tan estúpido para interrumpirte cuando estabas en lo mejor?. Eso hubiera hecho que te enojaras, y no quiero terminar como esos Agentes que golpeaste el otro día en un arranque de furia.

Shinji bajó el rostro avergonzado.

-- Está bien Shinji, no pasa nada -– dijo Kaji y le dio un par de palmaditas en la espalda –- Solo trata de tener mas cuidado de ahora en adelante. Ahora si me disculpas, voy a tomar un baño y luego dormiré un rato... Misato no me dejó dormir mucho anoche –- comentó Kaji encaminándose a su cuarto. Shinji lo observó y negó con la cabeza. Kaji no tenía remedio.

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Shinji se dejó caer pesadamente es su asiento y se recostó sobre su escritorio, dispuesto a echarse una siesta antes de que comenzaran las clases. O eso pretendía, ya que Kensuke opinaba otra cosa.

-- Oye Shinji¿Qué te pasa?. Parece que no dormiste nada anoche.

Shinji levantó la cabeza y miró a su amigo con rostro cansado.

-- En verdad no dormí mucho Kensuke... y si no te molesta, quisiera dormir un poco antes de que comiencen las clases.

-- Oye... ¿Touji y tú no habrán salido a alguna fiesta a mis espaldas? -– preguntó Kensuke con ojos estrechos.

-- Claro que no. ¿Por qué la pregunta? –- preguntó Shinji extrañado.

-- Por que Touji está igual que tú. Mira.

Shinji observó donde señalaba Kensuke y efectivamente vio a su amigo Touji con cara de sueño y cansancio. Este levantó la vista al sentirse observado y vio a Shinji en un estado similar al de él. Shinji estrechó los ojos y le dedicó una discreta mirada a Hikari, que estaba en la parte de más adelante del salón, irradiando felicidad por cada poro del cuerpo y con un rostro que resplandecía. Shinji miró a Touji con una media sonrisa y este se sonrojó, apartando la vista.

-- Si... se podría decir que estuvimos en una fiesta similar –- dijo Shinji volviendo a recostarse en su escritorio.

-- ¿Qué fiesta fue esa? -– preguntó Kensuke.

-- Una... divertida, pero agotadora -– fue la respuesta de Shinji, y volvió a su intento de dormir.

-- Si, claro –- dijo Kensuke, no muy convencido por la respuesta –- En todo caso... ¿Crees que puedas conseguirme esa tenida militar que usabas el otro día?.

Shinji miró a su amigo con ganas de decirle "Déjame dormir por la misma mier..." cuando su mirada quedó clavada en cierta pelirroja que acababa de ingresar al salón y que lo miraba con no muy buenos ojos. Tragó con dificultad. Por la cara de Asuka, era claro que estaba en problemas y empezó a analizar sus opciones de escape.

-- Tercer Elegido... ¡AQUÍ, AHORA! -– rugió Asuka, atrayendo la atención de todos.

Shinji sintió un escalofrío recorrerle la espalda. No tenía escapatoria... si solo supiera que había hecho para ponerla sí.

Asuka frunció el ceño al ver que Shinji no reaccionaba y caminó hasta él con grandes y firmes zancadas, lo agarró por el cuello de la camisa y lo arrastró fuera del salón, ante las miradas sorprendidas de todos y las protestas de Shinji, por ser jalado de forma tan poco decorosa.

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-- ¿Qué te pasó ayer? –- preguntó Asuka, cruzando los brazos.

Shinji miró a la pelirroja sin entender su pregunta, hasta que su adormecido cerebro pudo finalmente procesar la información y recordar que había quedado de ir a verla el día anterior. Cosa que no hizo ya que se quedó jugando a "Las Aventuras Sexuales de Integral y Alucard", con su profesora de Inglés.

-- ... yo... puedo explicarlo...

-- ¿Y bien?.

-- Lo que pasó es que... bien... yo... bueno, yo... iba a ir pero... la verdad... yo... no pude.

-- ¿Por qué? -– preguntó Asuka, estrechando los ojos.

-- Porque... bien... porque... veras... jejejeje, no me lo vas a creer, yo... jejeje... no pude ir.

-- ¡Eso ya lo sé Baka! –- rugió Asuka, agarrándolo por las solapas -– ¡Ahora dime por qué no apareciste ayer por la tarde!.

Asuka miró con furia a Shinji. Este la miraba algo asustado, pero bajó el rostro un tanto sonrojado. Esto descolocó un poco a la pelirroja, hasta que un desagradable pensamiento pasó por su mente.

-- No me digas que... ayer... te convertiste en el Shinji Hentai –- dijo Asuka con algo de temor.

Shinji no respondió, solo se sonrojó un poco más. Para Asuka eso era el equivalente a un si. Miró a Shinji con furia y le conectó un derechazo en la mandíbula que lo envió de espaldas al suelo.

-- ¡ERES UN COCHINO HENTAI!. ¡TE ABORREZCO!

-- ¿Por qué tan violenta Pelirroja-Chan?. ¿Acaso te molesta la idea de verme con otra mujer? –- dijo Shinji.

Asuka miró con sorpresa a Shinji por ese comentario tan arrogante y fuera de lugar. Este le sonreía en forma traviesa con un hilo de sangre corriendo por la comisura de sus labios, al que no le daba la menor importancia. Sus ojos la miraban con una mezcla entre travesura y deseo. Asuka comprendió que el que tenía al frente no era su Shinji, era el Shinji Hentai... aquel que tanto detestaba.

Shinji se puso de pie, sacudiendo su ropa, se limpió la sangre de la boca con el dorso de la mano y luego se la lamió lentamente limpiándola sangre, sonriendo en todo momento.

-- No respondiste mi pregunta, Pelirroja-Chan... ¿Te molesta la idea de verme con otra?... si es así, entonces no te soy tan indiferente¿verdad? Eso explicaría ciertos cambios que has tenido conmigo últimamente –- dijo Shinji aumentado su sonrisa.

Asuka abrió los ojos sorprendida por ese cometario, que en el fondo era verdad. Sintió ganas de saltar sobre él y molerlo a golpes, pero algo dentro de ella le dijo que no sería muy buena idea. La mirada de este Shinji Hentai era diferente a las anteriores y no le dio muy buena espina, lo que le hizo preguntarse ¿Cuántas versiones distintas habían del Shinji Hentai? Porque sabía que había más de una. Estaba La Modalidad de Fiesta, La Modalidad Hentai y la Modalidad de Pelea, pero esta era algo diferente... algo así como una mezcla. Tendría que hablar con Misato. Por lo pronto decidió pasar de él, y retomar la conversación cuando el verdadero Shinji regresara. Después de todo, era ese Shinji el que le interesaba.

-- Aléjate de mí si no quieres que te parta la cara a golpes, maldito Hentai –- dijo Asuka con desprecio, dio media vuelta y comenzó su regreso al edificio principal, dejando a Shinji solo en el patio trasero de la escuela.

-- Eres toda una fiera, Pelirroja-Chan –- dijo Shinji para sí –- Y a mí me gustan las mujeres salvajes... para poder domarlas -– finalizó con una sonrisa.

Asuka siguió caminando, sin mirar atrás. Shinji solo sonrió. Esa pelirroja definitivamente le tenía ganas, era solo cosa de tiempo. Se encaminó rumbo al salón de clases con las manos entrelazadas en la nuca y una radiante sonrisa.

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-- Las clases ya comenzaron señor Ikari. ¿Por qué viene llegando a esta hora? -– preguntó la maestra de música, una linda mujer de unos 30 años, con corto cabello negro que le llegaba hasta un poco más arriba de los hombros.

-- Razones de fuerza mayor –- dijo mirando discretamente a Asuka y guiñándole un ojo, cosa que a Asuka la molestó más de lo que ya estaba.

-- Ultima vez. Puede sentarse –- dijo la profesora.

Shinji hizo una ligera inclinación y pasó con aire de suficiencia hasta su puesto, atrayendo las miradas deseosas de las chicas, que ya se habían enterado que Isuzo Masaki se había ido de Japón, por lo que Shinji estaba nuevamente disponible.

-- Bien, pongan atención –- dijo la profesora –- Como todos saben, el próximo sábado habrá una fiesta acá en la escuela, y a este salón se le designó la tarea de encargarse de la música. Ahora tenemos que ponernos de acuerdo sobre como hacer eso.

Los murmullos comenzaron inmediatamente entre los alumnos, mientras la profesora los veía con algo de diversión, hasta que Hokari llamó a un poco de orden y pidió permiso para hablar.

-- Profesora. ¿Usted tiene alguna idea?. digo, usted es profesora de música, debe tener algo en mente.

-- Bien, podría ser, pero la idea es que sean ustedes los que propongan algo. Yo solo estoy para ayudarlos –- respondió la mujer.

-- Ya que es una fiesta de Cosplay¿Por qué no poner música de series de animé? –- dijo uno.

La aprobación de esa idea fue general. En verdad era una buena idea, considerando que por lo general, la música de las series era interpretada por cantantes o grupos de moda.

-- ¿Pero de donde vamos a conseguir tanta música de animé? -– preguntó otro.

Inevitablemente las miradas fueron dirigidas a tres chicos, conocidos por su amor incondicional a todo lo que oliera a animé.

-- Si, bien, creo que podemos aportar algo –- dijo Shinji -– Recientemente adquirí una excelente colección de música, y Kensuke también tiene una surtida colección en su casa.

-- Bien. Entonces creo que eso soluciona el problema –- dijo la profesora.

-- En realidad, no -– dijo Shinji, atrayendo la atención -– Es una buena idea, pero le falta algo. Podríamos tener un DJ que pusiera música, mientras en una pantalla gigante se pasen escenas de series de animé, pero además estaba pensando que sería bueno tener una banda que toque música en vivo y poder hacer un concurso de Karaoke, o algo por el estilo.

La aprobación fue inmediata por parte de todos, menos por cierta pelirroja que miraba a Shinji con ojos estrechos.

-- Es una excelente idea Ikari –- dijo la maestra -– Pero no creo que la banda del colegio pueda aprenderse tantas canciones en tan poco tiempo.

-- No estaba pensando en ellos. Conozco una banda que es excelente, ya he cantado con ellos antes y estoy seguro que estarían dispuestos a venir.

-- ¿Canta en una banda Ikari?. ¿Si canta en una banda, entonces por que no quiere integrarse al coro de la escuela? –- preguntó la profesora.

-- Porque el coro de la escuela canta canciones muy aburridas y estúpidas para mi gusto –- dijo Shinji, ganándose una mirada enojada por parte de la profesora -- Por lo otro, no soy parte de la banda, pero canté con ellos en una fiesta que organicé con unos compañeros de trabajo de NERV.

-- ¿Una fiesta? –- preguntó uno.

-- Si, fue una fiesta genial. Cantamos, bailamos, comimos, bebimos, hasta hicimos una barbacoa junto a la piscina mientras tomábamos sol con las chicas antes de... jejeje divertirnos mas a fondo. Hasta Kensuke se ligó a tres chicas.

-- ¡SHINJI! –- reclamó Kensuke, totalmente rojo, mientras las chicas lo miraban impactadas y los chicos con sorpresa, y respeto.

-- Bien, está decidido. Yo me encargo de esto profesora. Déjelo todo en mis manos, no la defraudaré –- dijo Shinji, colocándose unos anteojos peligrosamente parecidos a los de cierto vampiro, tomando su mochila y en encaminándose a la salida.

-- Un momento. ¿Adónde cree que va? –- preguntó la maestra, cortándole el paso.

Con un leve movimiento de cabeza, Shinji deslizó un poco los anteojos por el puente de su nariz, para dedicarle una traviesa mirada por sobre ellos, con una sonrisa algo juguetona.

-- A conseguir la banda, una pantalla gigante y un DJ para que ponga música. Mañana le doy los detalles –- dijo con voz seductora, acercándose a escasos centímetros de ella y mirándola de arriba abajo –- No me había fijado, pero en verdad es una mujer hermosa... es una lástima ya tenga ama.

La mujer su puso más roja que señal de tráfico ante ese comentario, sobre todo cuando Shinji se postró ante ella y le besó el dorso de una mano antes de salir del salón, ante la mirada impactada de todos sus compañeros, bueno, Rei miraba seria como siempre.

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Shinji había dado unos pasos por el pasillo cuando dio un profundo bostezo, lo que le recordó lo cansado y somnoliento que estaba a causa de las demandas sexuales de su "Ama"... pero valió la pena por haber podido devorarse a ese tremendo pedazo de mujer... otro bostezo.

"Bien, será mejor que me pegue una siesta antes de ir NERV" pesó para sí, y se encaminó al techo de la escuela, sin notar un par de ojos que lo observaban a unos metros de distancia.

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Shinji estaba a punto de quedarse dormido en el techo de la escuela, a la sombra de la construcción que albergaba la puerta de salida de las escaleras al techo, usando su mochila como cabecera. Una persona se paró a un lado de él y lo empezó a mover con la punta de un pié. Shinji entreabrió los ojos y vio una esbelta figura de larga cabellera rubia observándolo divertida.

-- ¿Se puede saber que haces durmiendo aquí arriba en vez de estar en clases?

-- Tenía sueño –- respondió Shinji, como si nada.

-- Pensé que la luz del sol era el peor enemigo de los vampiros -– comentó la rubia divertida.

-- La luz del sol no es fatal para mí... solo la evito si es posible -- respondió Shinji, poniéndose de pie y siguiéndole el juego -- ¿Y usted que hace aquí?

-- Te vi subir y te seguí... como tengo hora y media libre, pensé que... podríamos aprovechar el tiempo... sirviente –- dijo ella con una sonrisa.

-- Como desee... mi ama –- respondió Shinji y le dio un apasionado beso, mientras le desabrochaba la falda, que caía a los pies de la mujer.

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Una hora y media después, Sabrina Legrand bajó de la azotea con una radiante sonrisa en su hermoso rostro, y poco después lo hizo un demacrado Shinji, que siguió el rumbo opuesto de la mujer y se encaminó a la salida de la escuela, mientras arrastraba pesadamente los pies, pero no alcanzó a caminar mucho cuando fue interceptado por un automóvil negro.

-- ¿Adónde crees que vas?. Deberías estar en la escuela a esta hora –- dijo Clinton, bajando del automóvil, con no muy buena cara.

-- Voy a ver a la doctora Ritsuko... ya que están aquí, pueden llevarme –- dijo Shinji cansadamente y se montó en la parte trasera -– Despiértenme cuando lleguemos.

Ambos agente se miraron un momento y se encogieron de hombros. Si el chico iba donde la doctora Ritsuko, entonces no había problema, además que no se veía muy bien. Pusieron en marcha el automóvil y se fueron a NERV.

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-- Ritsukooooo... –- dijo una voz de ultratumba llamando la atención de la científica.

-- ¡SHINJI! -– dijo la mujer sorprendida, al voltearse y ver al susodicho en estado cadavérico, apoyado apenas en la pared que estaba detrás de él.

-- Necesito... vitaminas –- dijo Shinji y cayó al suelo desmayado.

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Shinji abrió los ojos y se topó con un techo desconocido... no, en realidad le era algo familiar.

-- ¿Te sientes bien Shinji?.

Shinji miró a un lado y vio a una preocupada Misato junto a él, que se encontraba recostado en una camilla del laboratorio donde tuvo su primer encontrón con Ritsuko.

-- Si... estoy bien –- dijo, sentándose en la camilla.

-- ¿Qué te pasó? –- preguntó Misato, parándose junto a él.

Shinji sudó frío. No podía decirle a Misato que estaba así por exceso de sexo.

-- Bueno... este... stress...si, eso, stress. Creo que necesito descansar... y distraerme un poco.

-- Entiendo... tómatelo el día de mañana. No vayas a la escuela, ni vengas a NERV. Distráete y descansa un poco, mira que en verdad no tienes muy buen aspecto.

-- Ejem... gracias Misato –- dijo Shinji con una gota de sudor en la nuca.

-- No hay nada que agradecer... en verdad, y quiero pedirte disculpas. He estado tan atareada últimamente que no te he dedicado suficiente tiempo Shinji... soy una pésima tutora –- dijo Misato amargamente.

-- No digas eso Misato. Eres una excelente tutora, y una gran amiga... la mejor.

Misato miró a Shinji, le regaló una hermosa sonrisa con los ojos un tanto húmedos y le dio un fuerte abrazo, que Shinji respondió inmediatamente. Al separarse Misato le dedicó una mirada traviesa, que a Shinji no le dio muy buena espina.

-- Sabes, estás demasiado tenso Shinji, pero se me ocurre algo para relajarte –- dijo la mujer y se encaminó hasta la puerta, cerrando con llave –- Ritsuko acaba de salir para a revisar unas cifras del EVA-00, así que tenemos algo de tiempo.

-- ¿Tiempo? –- preguntó Shinji, un tanto asustado al ver a su "Tutora-Amiga-Amante-Ocasional" acercarse en una pose sensual -- ¿Tiempo, para qué? –- preguntó ya totalmente aterrado.

-- Para relajarte un poco –- dijo Misato ya junto a él, y dándole un suave beso en los labios –- Ahora recuéstate y déjalo en mis manos -– dijo la mujer con una sonrisa traviesa, le bajó el cierre del pantalón y tomó entre sus manos a un extenuado guerrero, que pese a todo, se puso de pie al sentirse atrapado en las suaves manos de esa hermosa mujer.

-- ¿Mi, Mi, Mi, Misato, que...? -– intentó preguntar Shinji, pero su voz se perdió al ver como la mujer se agachaba sobre cierta parte de su cuerpo abriendo la boca para... "OH, MY GOD" pensó Shinji dejándose caer sobre la camilla abriendo la boca en un silencioso y placentero gemido.

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Misato se limpió una sustancia algo espesa que amenazaba con escurrírsele por la comisura de los labios, usando uno de sus dedos para luego lamerlo en forma sensual.

-- ¿Te sientes mejor Shinji? -– preguntó Misato, a lo que el pobre chico solo pudo asentir con la cabeza –- Me alegra... pero no te acostumbres –- dijo divertida, encaminándose a la puerta –- Iré por Ritsuko para que te revise. En la tarde pasa por el departamento, me gustaría que cenáramos con Asuka como en los viejos tiempos.

Shinji solo pudo asentir con la cabeza y luego vio como Misato salió del cuarto. Se dejó caer otra vez en la camilla, más relajado, no podía negarlo, pero todavía cansado. Decidió dormir un rato pero justo entonces entró Ritsuko.

-- Veo que despertaste –- dijo la mujer y caminó hasta él -– Te ves algo demacrado Shinji, no me extraña que te hayas desmayado. ¿Has comido bien y dormido lo necesario? –- preguntó la mujer, haciéndole un rápido examen preliminar.

-- La verdad no.

-- ¿Por qué? -– preguntó examinando la respuesta de sus pupilas con una pequeña linterna.

-- Es... difícil de explicar... yo... creo que tengo muchas cosas en la cabeza... tú sabes –- dijo Shinji tratando de inventar una excusa para no decir que estaba así por exceso de sexo.

-- Shinji... te dije que no te preocuparas –- dijo la mujer poniendo las manos en sus hombros para llamar su atención -– Encontraré una solución a tu problema, confía en mi... ahora quítate la camisa para revisarte bien.

Shinji asintió y se quitó la camisa, contento de que Ritsuko estuviera en "Modalidad Doctora" por lo que no tenía de que preocuparse.

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-- Bien, con eso bastará –- dijo Ritsuko, retirando la jeringa del brazo de Shinji -– Te acabo de colocar un Cóctel de Vitaminas. Quedaras mejor que nuevo. Los efectos son casi inmediatos así que dentro de poco te sentirás mejor.

-- Gracias –- dijo Shinji, sentado en la camilla.

-- De nada, pero tienes que alimentarte y dormir bien o volverás a lo mismo... y dile a esa chica que se calme un poco. Debe ser una fiera para dejarte así -– dijo Ritsuko.

Shinji la miró aterrado.

-- ¿Creíste que no me daría cuenta?.

-- Yo... Ritsuko, yo...

-- Esta bien tranquilo. En tu actual situación no se te puede recriminar nada. No puedes controlarte... y me apena decir que me he aprovechado un poco de esa situación –- dijo Ritsuko algo sonrojada.

-- ... no ha pasado nada que yo no haya querido... algunas veces era YO y no EL, eso lo sabes bien... siempre... deseé estar contigo –- dijo Shinji apenado.

-- Gracias Shinji... me halagas... Misato no sabrá nada de esto, así que no te preocupes.

-- Gracias.

-- ¿Te cuidaste verdad?.

-- Si, Kaji compra preservativos por cantidades industriales, no hay problema.

-- No me extraña de él. Pero no los necesitaremos ahora... para eso me estoy cuidando yo.

-- ¿Qué? –- preguntó Shinji, cogido fuera de guardia y recibió un beso apasionado de la mujer.

-- Al natural es más divertido -– susurró Ritsuko subiéndose a la camilla -- Tranquilo, le puse llave a la puerta, además, no voy a dejar que esa aparecida se quede con toda la diversión –- dijo la mujer abriendo su blusa.

Shinji tragó sonoramente, pero cuando Ritsuko le tomó las manos y las guió hasta sus senos, todas las señales de alerta se fueron al olvido y se abocó a la tarea de quitarle ese molesto sujetador... como dijo ella, al natural era mejor, y poder tocar esos senos al natural es lo que quería ahora.

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Shinji despertó y se encontró recostado en la camilla y tapado con una cobija, Rituko no estaba por ninguna parte, así que debía haberse ido hace rato, lo que estaba bien para él. Se sentó en la camilla y se descubrió desnudo, algo muy común los últimos días. Resignado, recogió su ropa y se vistió, momento en que se dio cuenta de que se sentía mucho mejor y con más energía pese a Misato y Ritsuko. Las famosas vitaminas debían estar haciendo efecto.

Al ver la hora descubrió que eran cerca de las 2:00 de la tarde, así que decidió ir a comer algo a la cafetería ya que estaba muerto de hambre.

Luego de terminar con su tercer plato de comida decidió hacer lo que había ofrecido su "Otro Yo", ya que en realidad no tenía muchas más opciones. Fue donde Shigeru y luego de unas llamadas ya tenía lista a la banda para el sábado, luego fue con Hideki y se aseguró de conseguir a DJ Rika, y finalmente buscó a Misato y se consiguió con ella un monitor gigantesco con un equipo de reproducción digital, que enviarían a la escuela el sábado por la mañana. Con todo eso listo decidió salir de NERV, rumbo al departamento de Misato. Acababa de salir de las instalaciones cuando sonó su teléfono celular.

-- Diga -– los ojos de Shinji se agrandaron, pero pronto su mirada se tornó más traviesa y comenzó a esbozar una sonrisa, dejando entre ver otra vez unos relucientes colmillos -– Estaré ahí en 10 minutos... mi ama.

Guardó su celular, hizo parar un taxi y se encaminó a donde le habían indicado, seguido de un automóvil negro con dos Agentes de Seguridad dentro.

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Eran cerca de las 7:00 de la tarde cuando Shinji se paró frente a la puerta de Misato con cara de resignado. Con solo un par de palabras bien elegidas, Sabrina había conseguido que él corriera donde ella para pasar la tarde inaugurando su nuevo departamento a punta de sexo... no es que no le gustara, quien no querría estar con una mujer como ella, acariciarla, recorrer su cuerpo a besos, poder... hacer... cosas, tener... sexo. Lo que le molestaba es que ella había descubierto la debilidad de él y la explotaba su favor. Solo tenía que decirle algo con las palabras "Sirviente o Ama" y lo tenía corriendo detrás de ella más caliente que un mono.

Suspiró con resignación. No había nada que hacer por ahora. Al menos las vitaminas que le inyectó Ritsuko sirvieron de algo.

Abrió la puerta con su llave que nunca devolvió e ingresó al departamento. Se quitó los zapatos y caminó hasta la sala donde estaba Asuka viendo televisión recostada en el suelo sobre un cojín.

-- Llegaste temprano Misato -– dijo la pelirroja sin mirarlo.

-- ...soy... soy yo. Shinji.

Asuka se puso de pie de un salto al escuchar su voz y lo miró con ojos estrechos. Shiunji tragó sonoramente. Sabía que nada bueno saldría de esto. No después de lo de mañana, pero al menos debía intentar pedirle disculpas, después de todo no era él cuando dijo lo que dijo.

Continuará...

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Notas del Autor: Un capítulo más tranquilo y relajado luego de los tres ardientes anteriores, cosa que no es de extrañar, ya que Shinji quedó bastante cansado. Nos vemos el próximo capítulo.