7º CAPÍTULO:
EL GRUPO SE DIVIDE-BUSCAR VIDA EN UNA CIUDAD MUERTA.
El grupo se dirigió hacia la zona comercial. Unos pasos más adelante, Megaman, tras dar la vuelta a una esquina, vio el cadáver de un mercenario tendido en el suelo, cosa que le asustó al verle, confundiéndolo por un zombie, Kailtin le tranquilizó y le dijo que no había peligro ya que alguien le disparó al cabeza.
-Kaitlin: Cuando alguien es infectado por el virus, la única manera de evitar que se convierta en zombie es administrándole la vacuna o disparándole a la cabeza.
-Megaman: Umbrella...están completamente locos.
Los chicos llegaron al final del pasillo, de repente, Cutman se dio la vuelta alterado, y apuntó con su escopeta hacia la parte alta de un edificio.
-Kaitlin: Cutman, ocurre algo?-dijo Kaitlin preocupada.
Cutman bajó el arma al ver que no había nada, y se dirigió a Kaitlin.
-Cutman: No...no pasa nada, me pareció ver algo subiéndose por esa pared, pero...ahora no está. Creo que el miedo me ha afectado los circuitos.
Kaitlin miró a Cutman y le dijo a los demás que se preparasen.
-Kaitlin: Chicos, creo que vamos a tener que defendernos de algo, no sé el qué, pero no es nada bueno.
Los chicos ante las palabras de Kaitlin prepararon sus armas.
-Cutman: Kaitlin, ya te he dicho que a lo mejor me lo he imaginado, puede que no haya sido nada-le dijo Cutman para no preocuparla.
-Kaitlin: Cutman, no subestimes tus sentidos, tienes el oído más fino de todos nosotros, no puedes dejar pasar ni un sonido, y ni una sombra. Si escuchas o ves algo, estate preparado para lo que sea. Puede que, cómo tú dices, no haya sido nada, pero es mejor prevenir que curar. Confía más en tus sentidos, puede que ellos te salven la vida en estas situaciones.
Cutman sonrió a Kaitlin y volvió a levantar su escopeta.
Elecman abrió la puerta y se vieron en una especie de almacén. Nada más avanzar un par de pasos, Cutman escuchó algo. Se acercó a Kaitlin y el pidió que pararan.
-Elecman: Qué pasa ahora?
Cutman pidió silencio, y empezó a hablar muy bajito.
-Cutman: Shhh. Esperad, creo que he oído pasos.
-Megaman: De qué Cutman, Un zombie?
-Cutman: No...déjame escuchar...-guardó silencio y se concentró en volver a oír ese sonido-...Lo he vuelto a oír
El silencio se apoderó de toda la zona durante unos segundos, pero los demás no podían oír nada.
-Fireman: Yo no escucho nada.
-Gutsman: Cutman, qué es lo que has escuchado?
-Cutman: No lo sé... parecen pasos, pero son muy sigilosos para ser los de un zombie.
-Bombman: Un Licker?
-Cutman: No... es otra cosa...no sé lo que es, pero tampoco es Némesis...
Entre tanta adivinanza, Kaitlin echó un vistazo a su alrededor. Vio que había una caja colgada del techo, unas telas que cubrían casi toda la zona y una especie de plataforma de metal, nada de allí parecía alarmante. Cutman volvió a oír ese sonido de nuevo.
-Cutman: Otra vez, pero ahora está más cerca.
-Megaman: Si. Yo también lo he oído.
Kaitlin volvió a mirar a su alrededor, nada parecía fuera de lo normal...pero se dio cuenta que la caja del techo se estaba balanceando, analizó el balanceo, la velocidad y la tensión de la cuerda con su sistema de calculo, tomó sin mediar palabra alguna la escopeta de Cutman y disparó a la caja, la cuál cayó al suelo rompiéndose en pedazos.
-Elecman: Que cosa más sospechosa. Una caja. Por dios Kaitlin, tú y Cutman estáis peor de lo que pensaba. Me largo!
-Kaitlin: Bueno, vete si quieres, pero, podrías echar un vistazo a la caja antes de irte?-le dijo Kaitlin, también sarcástica.
Elecman avanzó por el pasillo, y antes de asomarse a los restos de la caja, resbaló y cayó al suelo. Cuando se incorporó un poco y vio que su cuerpo estaba lleno de un líquido verde viscoso, se levantó, dirigió su mirada al lugar en el que cayó la caja, y vio a una extraña criatura que estaba panza arriba de color oscuro, tenia seis patas que acababan en unas afiladas púas y tenia el rostro como el de una araña, Elecman retrocedió un tanto sobresaltado.
-Elecman: Pero...qué es esto!- dijo mientras se quitaba con asco ese líquido verde.
-Kaitlin: Es un Drain deimo. Otra criatura resultada del Virus de Umbrella, es como un primo-hermano de las arañas, creo que será la mutación de una de ellas.
-Elecman: ARAÑAS? AAGG!-gritó y empezó a temblar como una gelatina y a sacudirse enérgicamente la sangre verdosa de la criatura.
-Megaman: … Es que te dan miedo las arañas, Elecman?-dijo sorprendido.
-Kaitlin: Bueno… las arañas aquí no son como las que se ven normalmente. Son muchísimo más grandes por el virus… no quiero decirte nada respecto a ellas.
-Elecman: NOO! NO ME HABLEIS DE ARAÑAS POR FAVOR! Es lo único me da miedo en esta maldita ciudad!.
Los demás no dijeron nada, por miedo a una represaría por parte de Elecman. Él era el más poderoso de ellos y era el que más mal humor tenia, así que cerraron la boca.
-Kaitlin: Cutman, Puedes oír algo más? Es raro que este Drain deimo esté sólo, normalmente atacan en grupo.
-Cutman: Un momento...,..., no, no oigo nada más.
-Kaitlin: Bien, puede que el otro esté por ahí esperando a atacarnos por la espalda, son muy sigilosos.
El grupo avanzó por ese pasillo, todo parecía ir bien. Elecman que estaba un tanto asustado seguía al grupo muy pegado a Kaitlin, ella estaba encantada con eso, y sonreía al ver como el robot Electrico se escondía detrás de ella como un niño pequeño. Megaman se moría de celos al ver la escenita, así que le ocurrió una idea para separarles. Se acercó sigilosamente detrás de Elecman, se acercó a su oído y gritó:
-Megaman: ELECMAN! TIENES AL BICHO ENCIMA!
-Elecman: AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHH!
Elecman pegó un grito de puro terror, salió corriendo hacia la salida de ese almacén y desapareció detrás de la puerta de salida.
Kaitlin siguió a Elecman con preocupación y los demás hicieron lo mismo. Megaman se dio cuenta de que no había sido una buena idea.
Salieron de ahí y se encontraron en la zona comercial, pero no vieron a Elecman por ninguna parte.
-Kaitlin: Dios mío, dónde estará Elecman?-dijo terriblemente preocupada.
-Megaman: No te preocupes, Elecman sabe cuidarse sólo, no le pasará nada.-dijo mientras ponía su mano en el hombro de Kaitlin, pero está lo apartó y le empezó a regañar.
-Kaitlin: Sabes lo que has hecho! Por tu estúpida broma ahora Elecman se ha perdido en la zona comercial, y encima completamente asustado, en ese estado Elecman es una presa fácil! Si le pasa algo no te lo perdonaré nunca!-dijo Kaitlin con lágrimas en los ojos.
-Megaman: ...Lo siento Kaitlin, sólo quería bajar un poco la tensión pero, veo que me he equivocado...lo siento mucho-trató de disculparse.
-Kaitlin: Depende de cómo esté Elecman cuando le encontremos, entonces ya veré si te perdono o no. Por el momento no pienso dirigirte la palabra.
Mega se quedó muy triste con lo que le dijo Kaitlin, ahora lo menos que podía hacer por ella era ayudarle a encontrar a su amigo.
Kaitlin se reunió con los demás en un cruce de caminos.
-Gutsman: Por dónde vamos?
-Kaitlin: Dejadme ver el mapa,-dijo sacandolo de su mochila-Bien... tenemos varios sitios donde buscarle: La cafetería, el periódico y la gasolinera; Bombman y yo iremos a la cafetería. Cutman, Gustman, vosotros id al periódico y Megaman...tu y Fireman id a la gasolinera. Voy a repartir varias municiones para cada uno, por si hay dificultades o, al caso, aparece Némesis. Nos reuniremos en el trolebús. Si alguno encuentra a Elecman herido, ya sabéis, utilizad las hierbas y los sprays si viene el caso, y, Gutsman recuerda que las rojas no curan, potencian a las azules y a las verdes.
-Gutsman: Si, ya lo sé.
-Kaitlin: En marcha!
Todos se separaron para encontrar a su amigo lo antes posible. Kaitlin y Bombman fueron los primeros en separarse del grupo, ya que la puerta trasera de la cafetería estaba justamente a dos pasos de ellos. Más adelante, tras cruzar un pasillo y pasar por una puerta, Cutman y Gutsman se separaron de los demás para ir las oficinas del periódico, dejando a Fireman y Megaman más solos, y a este último con más tristeza que nunca.
Kaitlin y Bombman ya se encontraban en el interior de la cocina de la cafetería, se asomaron por todas partes, pero no encontraron nada ni a nadie,
-Bombman: Parece ser que aquí no está Elecman, en verdad, cuando se asusta, corre más rápido que el rayo. Literalmente.
-Sigamos buscándole, quizás esté bien escondido-dijo mientras se dirigía al comedor cuando oyó un chillido.
Inmediatamente, Kaitlin se asomó un poco al puerta de la cocina y acto seguido mandó a Bombman que se agachara, cosa que este hizo a toda prisa.
-Bombman: Qué pasa? Qué a sido eso?
-Kaitlin: SHHH...calla y asómate con mucho cuidado-le dijo en voz muy baja.
Bombman se asomó con sumo cuidado a la ventanilla de servir la comida del restaurante, y vio una especie de criatura verde, parecía la fusión de un gorila con una rana, pero tenia afilados dientes y unas garras enormes, y por encima de su cabeza y espalda tenía una especie de erupciones de color rojo chillón. Ante tal espeluznante criatura, Bombman se agachó totalmente acongojado, y pálido del miedo que recorrió por todos los circuitos.
-Bombman: Q...qué...qué es eso...?-preguntó con la voz baja y temblorosa.
-Kaitlin: Es un Hunter...pero, nunca había visto uno semejante a este, debe de ser una nueva variante...viene hacia aquí?-preguntó con gran preocupación.
-Bombman: Parece que..sí-dijo con más miedo, se podían oír los pasos del Hunter acercándose a ellos muy lentamente.
Kaitlin, miró a su alrededor y vio la trampilla del sótano que estaba abierta, y avisó a Bombam para ir hacia allí y bajar rápidamente sin ser vistos por el Hunter. Así, lentamente, se dirigieron a gatas hacia la trampilla, pero no se daban cuenta de que el adorno metálico que Bombman tenia en la cabeza sobresalía de la ventanilla, cosa de la que el Hunter se percató, pegó un chillido y corrió a gran velocidad hacia la puerta de la cocina y encontró a los intrusos, Kaitlin y Bombman se quedaron paralizados por el miedo, cuando, antes de poder reaccionar, el Hunter dio un gigantesco salto con su temibles garras preparadas para cortarles la cabeza.
Cutman y Gutsman continuaban su camino hacia las oficinas del periódico, que estaban justo en la calle de al lado. Después de despedirse de Megaman y Fireman, tomaron una desviación hacia la derecha, y justo enfrente estaba las oficinas. Al entrar todo estaba muy tranquilo, lo único que vieron fue un pequeño incendio en las escaleras que llevaban al piso de arriba, las subieron con cuidado para no quemarse, al llegar al lado de la puerta que daba a las oficinas del piso superior, Cutman pisó un escalón muy quemado, se rompió y cayó, quedando atrapado a medio cuerpo entre las maderas quemadas.
-Gutsman: Cutman no es momento para ponerse a jugar con los escalones, tenemos que encontrar a Elecman-dijo en plan guasón.
-Cutman: JA, JA, ¡JA, Te crees muy simpático, no? Gutsman, ayúdame a salir de aquí en vez de quedarte mirando como un tonto-replicó de muy mal humor.
Gutsman le agarró por la cintura y de un tirón lo sacó del agujero en el que estaba metido. Ambos se dirigieron hacia las oficinas del piso superior. Unos cuantos zombies les esperaban, pero no estaban muy dispuestos a recibir su bienvenida, así que arremetieron contra ellos y los despacharon en dos tiros de escopeta.
Cutman se detuvo un momento.
-Cutman: Gutsman, ahora que lo pienso...si Elecman se hubiese escondido aquí, no nos habríamos encontrado con los zombies.
-Gutsman: ...O eso...o se lo han comido.
-Cutman: Sólo hay una manera de averiguarlo-dijo avanzado a toda prisa el pasillo y asomándose a las oficinas-Elecman, estas ahí?-preguntó.
Nadie contestó, claro, no había nadie, Cutman se tranquilizó, y bajó la escopeta.
-Cutman: Bien, definitivamente, Elecman no ha pasado por aquí.
Cutman y Gutsman curiosearon un poco por los papeles que habían revueltos por encima de la mesa, Cutman recogió unos archivos y Gutsman encontró una caja de cartuchos para la escopeta detrás de una papelera; tras eso se dispusieron a salir.
Antes de que Cutman pudiese abrir la puerta, se detuvo; unos pasos subían las escaleras, unos pasos que no presagiaban nada bueno.
-Gutsman: Qué pasa Cutman?-preguntó a su amigo que empezó a temblar y a retroceder.
-Cutman: Es...es él...otra vez...-dijo mientras tomaba a su amigo por el brazo y se lo llevaba al interior de las oficinas a toda velocidad.
Una vez dentro, Cutman se agachó cerca de la puerta y Gutsman hizo lo mismo.
-Gutsman: No me digas que es...
-Cutman: Si...-dijo con un sudor frío que le recorría por espalda del miedo que sentía.
Antes de poder decir algo más, la puerta se abrió y una voz siniestra recorrió todo el pasillo con una simple palabra: "S.T.A.R.S"
Megaman y Fireman se encontraban en una especie de callejón al aire libre que estaba cerca del ayuntamiento, Fireman estaba entablando una conversación con Megaman sobre Kaitlin.
-Fireman: No te enfades con ella Megaman, sólo se preocupa de la seguridad del grupo.
-Megaman: No, no estoy enfadado... sólo un poco triste...eso es todo. Desde que he llegado a esta ciudad he estado metiendo la pata una y otra vez...
-Fireman: Anímate. Kaitlin se enfada con bastaste facilidad, pero en el fondo es una buena chica, seguro que ya te ha perdonado por lo que le hiciste a Elecman.
-Megaman: No me lo recuerdes. Todo fue por culpa de mis estúpidos celos...UPS!
Megaman se tapó la boca rápidamente, con la esperanza de que Fireman no le hubiese oído, pero ya era tarde.
-Fireman: No creas que no te he escuchado. La verdad es que Elecman tiene suerte de tener a una chica tan buena como ella. Aunque no lo quiere admitir, él también la quiere mucho.
-Megaman: ...también?-dijo Megaman un tanto confuso.
-Fireman: Bueno, todos nosotros queremos a Kaitlin como una hermana, y ella también a nosotros. Pero tiene un cierto afecto por Elecman, estoy seguro de que Kaitlin está enamorada de él.
-Megaman: O eso, o es que Elecman está aprovechándose de ella.
-Fireman: Elecman? No. Me sorprendería que hiciera eso, no es de ese tipo de robots.
De repente, las ventanas del ayuntamiento, que daban a ese callejón se rompieron, y un gran número de zombies comenzaron a salir de ellas, uno de ellos llegó a morder a Fireman en el brazo, en un grito de dolor de este. Megaman le apartó de ellos y salieron corriendo hacia una bifurcación. Tomaron el camino de la izquierda, pero otro gran número de zombies les cortó el camino. Retrocedieron hacia la puerta que estaba a mano derecha, pero también el camino estaba lleno de zombies. No tenían salida alguna.
