9º CAPÍTULO
LLEGADA A LA TORRE DEL RELOJ-LA PESADILLA
En el aire se oía una extraña melodía procedente de una caja de música, la cual despertó a Megaman.
Se levantó de donde estaba acostado y vio que se encontraba en una extraña sala, al pie de unas escaleras. La sala estaba muy bien decorada y limpia, pero se sentía confuso, dónde estaba, y sus compañeros?...y Kaitlin?.
La música volvió a sonar, se oía muy cerca de un lado de las escaleras, así que miró en el hueco de estas. A lado izquierdo, vio una caja de música, pero la que él oía no procedía de allí; su curiosidad le impulsó a abrirla, la música era distorsionada y desafinada, pero podía distinguir la misma melodía que estaba escuchando. Colocó la caja en su sitio, y se dirigió al otro lado de la escaleras, a cada paso que daba, podía oírla mucho más cerca, cada vez más y más, hasta llegar al hueco derecho. La música procedía de allí, pero, antes de poder acercarse más, vio unas sombras, cuyas voces sonaban en la oscuridad.
-Voz
1: Al fin despertaste, me has tenido preocupado.
-Voz 2: Me alegra
ver que estas bien.
Megaman reconoció las voces al instante, eran las de Elecman y Kaitlin. La sombra que los cubría desapareció dejando al descubierto a los jóvenes. Mega, sin saber porqué, permaneció oculto detrás de una columna.
-Kaitlin: Le...le prometí a Fireman que no permitiría que nada malo le ocurriese...ni a él, ni a nadie...pero...ahora…esta muerto…-dijo mientras empezaba a llorar.
-Elecman: No ha sido culpa tuya. Tu le protegiste todo el tiempo que te fue posible...él decidió morir por su propia voluntad para salvarnos...así que no llores.
Megaman
nunca había visto a Elecman tan amable y tan cariñoso
con Kaitlin. Aunque eso le desconcertó, había algo que
le impedía salir de su escondite e interrumpir la escena.
Kaitlin parecía inconsolable, no hacía otra cosa más
que llorar y frotarse los ojos intentando secárselos. De
repente, Elecman la rodeó con sus brazos con fuerza y
cariño.
-Elecman: No quiero verte llorar mas…por favor,
para.
Kaitlin dejó de llorar al instante y sus mejillas se sonrojaron al sentir el abrazo de Elecman. Megaman se quedó paralizado ante al escena, intentó decirle a Elecman que la soltase…pero de su garganta no salía ni una palabra, intentó hablar pero no pudo, era como si se hubiese quedado mudo, precisamente en ese momento. Kaitlin y Elecman parecían ignorar la presencia de Megaman.
-Kaitlin: E…Elecman…
-Elecman: Kaitlin, desde siempre me has gustado. Eres…tan bonita.
-Kaitlin: ...
-Elecman: No solo por eso, también me gusta tu carácter inocente y alegre, tu compresión, tu bondad...todo eso me gusta de ti.
-Kaitlin: Elec...
-Elecman: Te quiero, Kaitlin.
Kaitlin abrazó a Elecman, débilmente en un principio, y poco a poco más y más fuerte.
-Kaitlin: Elecman…yo también te quiero.
El corazón de Megaman pareció romperse en pedazos…pero no podía decir ni hacer nada, solo ver la escena con los ojos llenos de lágrimas. "Kaitlin, por favor no vayas con él...! Te quiero!", Megaman deseaba poder decir esas palabras con todas su fuerzas, pero su voz estaba completamente apagada y ausente, y su cuerpo paralizado por el dolor que sentía en su corazón.
Kaitlin acarició los labios de Elecman y él los de ella.
-Kaitlin: Elecman…bésame
Elecman sonrío y cumplió el deseo de Kaitlin. Ambos unieron sus labios en un tierno beso. Megaman no podía soportar esa escena y se derrumbó en el suelo llorando, sin poder hacer nada para parar a la pareja. Sus ojos estaban tan humedecidos por las lágrimas que tuvo que secarse la cara. Cuando apartó una de sus manos con la que se había secado la cara, vio que ésta estaba llena de sangre. Mega se estremeció al ver eso y empezó a notar como unos gruesos hilillos de sangre recorrían su frente y su cara, pronto su terror fue en aumento al ver que todo se volvía oscuro y como un fondo negro le rodeaba. La confusión y el miedo se apoderaron del robot, fue entonces cuando sintió que algo le atravesaba el pecho produciéndole un terrible dolor, miró a este y vio que un tentáculo era el causante de todo. Megaman notó que las fuerzas le abandonaban a la vez que su sangre le salía a borbotones del pecho, pero pudo darse la vuelta y ver a Némesis a sus espaldas; la criatura sacó su tentáculo del pecho de Megaman y le dio una patada en la espalda para rematarle. Mega, que aún estaba consciente vio como caía en la oscuridad como si de un gigantesco abismo se tratase, pero en el fondo de toda esa oscuridad, había una horda de zombies que esperaban con hambre al joven robot, que caía sin remedio hacia ellos.
-Megaman: AAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHH!
Megaman abrió los ojos y se levantó alterado del suelo en que estaba tumbado, la oscuridad había desaparecido y con ella los zombies, se palpó la cara y el pecho, viendo que estaba intacto y no había herida alguna, solo una venda que le rodeaba el brazo que se hirió en la batalla contra Némesis. Pronto respiró relajado y se tranquilizó al ver que todo había sido una pesadilla y estaba a salvo de una biblioteca con sus compañeros de viaje.
Sin aviso alguno, escuchó unos gritos que procedían de Kaitlin, quien estaba acostada sobre una manta y retorciéndose en sueños. Al verlo, Megaman se levantó del todo y corrió hacia ella
-Megaman: KAITLIN...! QUÉ TE PASA!...KAITLIN, DESPIERTA!
Kaitlin abrió lo ojos al oír la voz de Megaman.
-Kaitlin: E...Elecman!…ah…Mega…eres tú.
-Megaman: Uff, no vuelvas a darme un susto cómo ese...has tenido una pesadilla?
Kaitlin vio que Mega y los demás estaban con ella y comprendió que todo lo que sólo había tenido una pesadilla. Elecman se dirigió hacia a ella y se agachó a su misma altura.
-Elecman: Kaitlin, estás bien?
-Kaitlin: ...Es...estoy bien-dijo incorporándose. De repente, vio que faltaba alguien entre los demás-Dón...dónde está Fireman?
Los chicos se miraron uno a otros, y Cutman y Gutsman se apartaron dejando ver una mesita de escritorio, en la cual, encima, estaba Fireman. Pero, al pobre robot le faltaban las piernas y un brazo y tenía un enorme agujero en su vientre, que todavía continuaba sangrando, pero, estaba aún vivo.
Kaitlin se levantó de golpe al verle, y corrió hacía a el.
-Kaitlin: Fi...Fireman...-dijo entre lágrimas.
Fireman empezó a girar lentamente y con gran esfuerzo la cabeza, abrió los ojos y miró dulcemente a Kaitlin.
-Fireman: Ka...Kaitlin...estás...viva...
-Kaitlin: Fireman...Por qué lo has hecho?...
-Fireman: Ya...te lo dije...No...no iba a permitir...que Némesis te...te...hiciera daño.
-Kaitlin: Pero era yo la que tenia que protegerte...no tu a mi!
-Fireman: Y lo hiciste...demasiadas veces...tenia que...devolverte…el favor... ...ahhhgggg-mientras hablaba, empezó a escupir sangre.
-Kaitlin: FIREMAN!...NO TE MUERAS!...POR FAVOR!-comenzó a suplicarle, mientras cogía la mano de Fireman.
-Fireman: Kaitlin...ya ha...llegado mi hora...no...no quiero verte llorar...-dijo acariciándole la cara-Quiero recordarte con una sonrisa...
Kaitlin, aún entre lágrimas, le dedicó una sonrisa a Fireman, al mismo tiempo que apretaba con fuerza su mano, que perdía fuerzas poco a poco.
-Fireman: Kaitlin...gracias por haber sido...tan buena conmigo...y...por darme valor...-los ojos de Fireman se llenaron de lágrimas a medida que se cerraban-...Te…quiero...amiga mía... ...
La mano de Fireman quedó estática en la cara de Kaitlin, y esta, al soltarla, cayó como una hoja seca. Fireman había muerto.
Kaitlin comenzó a llorar inconsolablemente sobre el cuerpo de Fireman, los demás no pudieron evitar emocionarse. Elecman se destacó del grupo, tomó a Kaitlin por un hombro y la separó del cuerpo de Fireman.
-Elecman: Kaitlin, entiendo cómo te sientes, pero hay cosas que nadie puede evitar, y, antes de que pongas histérica has de saber que no ha sido culpa tuya. Tu le protegiste todo el tiempo que te fue posible...él decidió morir por su propia voluntad para salvarnos...así que no llores.
Kaitlin dejó de llorar, y se secó las lágrimas. Megaman se puso pálido; esas palabras de Elecman, eran las mismas que las del sueño. Inmediatamente, Mega, sin decir nada, empujó a Elecman apartándolo de Kaitlin. Todos se quedaron muy extrañados por aquella reacción.
-Elecman:
…Pero…PERO QUE MOSCA TE HA PICADO!
-Megaman: No le pongas la
mano encima a Kaitlin! Me oiste?
-Kaitlin: Megaman qué pasa!
-Megaman: Escúchame Kaitlin. No quiero verte cerca de Elecman.
-Kaitlin: …Pe…pero por qué?
-Megaman: PORQUE YO LO DIGO!
Kaitlin, asustada ante la actitud de Megaman, le dio tal empujón que el robot chocó contra una de las estanterías.
Los demás se quedaron de piedra ante esa extraña y violenta situación. Megaman se quedó paralizado ante el fuerte golpe, tanto que no supo que hacer. Kaitlin, al darse cuenta de lo que había hecho, se puso colorada y comenzó a llorar.
-Kaitlin: …Lo siento…lo siento, lo siento...yo no quería...esto...ESTO ES DEMASIADO!
Kaitlin salió de la habitación corriendo; los demás la siguieron, temerosos de que le ocurriese algo malo, ya que no llevaba ningun arma. Al abrir la puerta, Kaitlin se encontró con una enorme sala, y se detuvo al verla. Los demás, al llegar, quedaron maravillados y observaron la majestuosidad de aquella sala.
-Bombman: Guuaaauuu, nunca pensé que en Raccoon City hubiese un edificio tan bonito como este.
-Kaitlin: …La torre del Reloj...
De repente, sonó una distorsionada melodía, cosa que, a Mega hizo que los cables se le saltaran de su sitio ya que era la misma que había escuchado en su sueño, se giró y vio a Gutsman en uno de los lados de la escalera principal, con una caja de música en las manos.
-Gutsman: Está rota, no se oye bien-dijo el grandullón dejándola en su sitio.
Megaman se alivió ante eso, pero al poco rato, cuando Elecman se dirigía al otro lado de la escalera, Kaitlin corrió como un rayo hacia él y gritando le tiró al suelo.
-Kaitlin: NO VAYAS ALLÍ...TE MATARÁN!
-Elecman...¡¡PERO...!¡¡¿¿QUÉ HACES, SUÉLTAME?
Elecman forcejeaba con Kaitlin, ya que ella se agarró como una sanguijuela a su cintura, pero, hiciera lo que hiciera, no conseguía quitársela de encima, mientras ella lloriqueaba.
-Megaman: Pero…Kaitlin qué te pasa?
-Kailin: Mega, que no vaya ahí, que no vaya, por favor...
-Elecman: Pero qué demonios os pasa, creo que el golpe que os disteis en la cabeza os ha afectado bastante…-dijo Elecman mientras apartaba a Kaitlin-Déjame en paz!
Haciendo caso omiso de lo que decía Kaitlin, Elecman se dirigió al lado de las escaleras, ella, atemorizada, sólo podía mirar, como se acercaba a ese lugar que tanto temía ella.
-Elecman: Aquí sólo hay una caja de música-dijo mientras la abría y al rato comenzó a sonar la melodía de esta.
Kaitlin se tapó los oídos y cerró los ojos. Al poco rato vio a Elecman acariciarle la cabeza, y luego comenzó a reírse.
-Elecman: Esto era el gran peligro? Jajajajajajaja, pero que puede hacerme una simple caja de música?
Kaitlin empezó a llorar con un gesto de rabia y dolor en su rostro. Se levantó del suelo, y antes de Elecman poder reaccionar, le pego una bofetada, con tal fuerza, que el robot cayó al suelo.
La bofetada resonó en todo el edificio, pared, por pared, en medio del silencio. Todos se quedaron muy cayados, hasta que Kaitlin rompió el silencio.
-Kaitlin: No sabes hacer otra cosa más que burlarte de mí? Tu no sabes lo mal que lo he pasado y cómo lo estoy pasando, y por qué, porque me preocupo de un robot tan idiota cómo tu. Yo aquí haciendo la imbecil, tratando de protegerte, mientras tú...tú...
-Elecman:…Y a mí que me importa!
Elecman, muy enfadado, se dispuso a subir las escaleras que llevaban al piso superior, cuando un terrible rugido inundó todo el edificio, un rugido, que para ellos, era inconfundible.
-Megaman; Némesis está cerca…pero por ahora nos dejará tranquilos.
-Bombman: Cómo puedes saber eso?
-Megaman: Si hubiese querido atacarnos, ya lo hubiera hecho. Sólo nos ha dado un aviso.
-Elecman: Hablas cómo si le conocieras.
-Megaman: Por la experiencia que he tenido luchando contra él, se diría que sí, y cómo bien se dice, para vencer al enemigo, hay que conocerlo.
-Elecman: Oooh, pues ya sé lo que hacer la próxima vez que lo vea, pedirle el numero de teléfono para pedirle una cita. jajajajajajajajajaja-se rió Elecman
-Kaitlin: Pensé que eras más listo. Cómo sigas con esa actitud, nos vas a poner en peligro a todos. Tómate esto en serio de una maldita vez.
Elecman continuaba subiendo las escaleras sin importarle nada. Kailtin, muy enfadada, se adelantó para cortarle el paso, cuando de repente, sintió que había pisado algo que desparramó un líquido viscoso y verde. Cuando se dio cuenta de lo que había pisado, lo pisoteó una y otra vez, como si quisiera desintegrarlo.
-Elecman: Qué pasa? qué has pisado?
-Kaitlin: NADA!
Elecman apartó a Kaitlin de donde estaba, miró al suelo, su rostro se puso azul y un escalofrío le recorrió cuerpo.
Los demás se acercaron hacia ellos extrañados de ver tanto silencio de repente. Bombman se destacó del grupo y se acercó a Elecman.
-Bombman: Qué pasa chicos?
Elecman, al sentir la mano de Bombman en el hombro, pegó un gran grito y, del susto, cayó escaleras abajo, pero por suerte no se hizo daño.
-Elecman: IDIOTA! VAYA SUSTO ME HAS DADO!
-Megaman: Has sido tu el que nos ha asustado, qué demonios pasaba ahí arriba?
El rostro de Elecman cambio de gesto cuando Megaman le preguntó aquello.
-Elecman: Una…una araña-dijo un poco avergonzado.
Kaitlin bajó de las escaleras, llamó a los demás y comenzó a hablarles en voz baja
-Kaitlin: Chicos, tenemos un grave problema.-les comentó en voz baja.
-Megaman: Cuál? En cualquier sitio puede haber arañas, no?
-Kaitlin: No es eso. Todos vosotros sabéis que Elecman tiene un miedo atroz a las arañas mutadas por e virus, y si hay una aquí las otras no estarán lejos, la que acabo de pisar es sólo una cría.
-Megaman: Cómo que una cría?...las hay más grandes?
-Kaitlin: Si, las crías tienen el tamaño de un puño, mientras que las adultas...bueno...no llegan a ser tan grandes que Gutsman, pero casi.
Megaman se quedó de piedra al oír esa descripción, si Gutsman ya era grande, no quería imaginarse cómo serían esas arañas.
-Kaitlin: Lo peor de la situación es que Elecman ya sabe que aquí hay arañas, así que no querrá continuar.
-Megaman: Por qué no se queda aquí abajo mientras investigamos la torre? Él es mayorcito para defenderse sólo.
-Kaitlin: VUELVE A DECIR ESO Y TE HAGO TRIZAS!-le amenazó furiosamente.
Los demás se sorprendieron ante la reacción de Kaitlin, ella nunca era tan agresiva.
-Kaitlin: … Lo siento Mega, pero es que estoy muy nerviosa eso es todo, perdonadme...Mirad yo me quedaré con Elecman en la planta baja, vosotros id a investigar la torre, de acuerdo?
-Megaman: Ni hablar! Me opongo completamente a eso!
-Kaitlin; Pero...
-Megaman: NO PIENSO DEJARTE AQUÍ CON ELECMAN!
Todo miraron con mala cara a Megaman y este se puso colorado. No quería a dejar que Elecman y Kaitlin se quedasen solos y su pesadilla se cumpliese.
-Kaitlin: Quieras o no, voy a quedarme con Elecman, no soy ninguna niña, y además como líder es mi responsabilidad velar por la seguridad de cada uno de los miembros del grupo.
-Cutman: Hace un momento estabas lloriqueando como una niña y ahora hablas como una heroína, la verdad no hay quien te entienda.
Pronto comenzó una discusión entre Megaman y Kaitlin, pero un rayo se interpuso entre ellos y les interrumpió.
-Elecman: NO SOY NINGÚN BEBÉ PARA QUE UNA NIÑATA COMO TU ME CUIDE!-gritó, con una de sus manos aún echando chispas.
-Megaman: Entonces, vienes con nosotros?
-Elecman: Por supuesto, y me importa un rábano lo que haya allí arriba...bueno…relativamente.
-Kaitlin: Elecman, sé el miedo tan horroroso que te dan las arañas, no prefieres quedarte aquí conmigo?
-Elecman: Ni loco, prefiero estar rodeado por miles de arañas antes que estar contigo.
El grupo avanzó con sigilo el pasillo que continuaba a la escalera, cuando unos extraños pasos se acercaron a ellos. Elecman reconoció esos pasos y corrió a esconderse detrás de Kaitlin y atemorizado.
-Kaitin: No cabe duda, son arañas, esperad a que se acerquen un poco y a mi orden disparad-dijo Kaitlin
Los demás esperaron a la orden, pero se dieron cuenta que no era sólo una araña, sino cuatro. No podían permitirse gastar munición con todas ellas, así que retrocedieron.
-Cutman: Cómo vamos a matarlas deshacernos de ellas? Son muchas!
-Megaman: No lo sé...tenemos que pensar en algo pero rápido
Bombman miró de un lado a otro hasta que se dio cuenta que había una tubería de gas pegada a la pared, entonces les dijo a sus amigos que se apartaran. Una vez que se pusieron a cubierto, Bombman disparó a la tubería cuando la arañas estuvieron lo suficientemente cerca, y estas saltaron en mil pedazos, junto con un trozo de pared.
-Kaitlin: Muy buena idea Bombman, pero...si nos dicen algo, la pared la pagas tu.
Todos se rieron ante ese comentario de Kaitlin, pero no había tiempo para reírse. Continuaron por el pasillo y llegaron a una puerta. Kaitlin la abrió y vio con horror como el pasillo que continuaba estaba infestado de telarañas, eso no era buena señal, Elecman se puso cada vez más nervioso.
-Elecman: Yo por ahí no paso!
-Kaitlin: No te preocupes, parece que todo está despejado. Si tienes miedo, tú sólo cierra los ojos y agárrate a mi brazo.
A pesar de que Elecman no le apetecía nada hacer eso, siguió su consejo, cerró los ojos y se agarró con fuerza a su brazo, pero en cuanto lo hizo, su rostro se sonrojó, perdió esa expresión de miedo y pasó a otra un poco mas relajada. Megaman se puso muy celoso, otra vez.
Una vez finalizado el trayecto, se encontraron en el balcón de la torre, las vistas desde allí eran espléndidas, no era de extrañar que la torre fuera una de las mayores atracciones turísticas de la ciudad. Pero no era tiempo para eso, tenían que subir al mecanismo de la torre para hacer funcionar las campanas y que un helicóptero les sacara de aquel infierno. Megaman subió por al escaleras metálicas que daban al mecanismo, y los demás le siguieron. Una vez arriba, se encontraron con un enorme amasijo de poleas, cables, cuerdas y ruedas dentadas de enorme tamaño, Megaman y Cutman fueron a buscar el control principal, pero no lo encontraron por ninguna parte.
-Bombman: Quizás se mueva utilizando estas palancas-señaló mientras tomaba una de ellas, pero por mucho que tirase no conseguía nada, estaban atascadas.
Mientras, Megaman y Cutman intentaban hacer funcionar el mecanismo del reloj, pero no conseguían nada. Mega ya se daba por vencido cuando, al dar un paso hacia atrás, notó algo debajo de su pie, lo apartó y vio una especie de rueda dentara de color plateada. Tras verla un rato y al agacharse para tomarla, vio un hueco entre dos ruedas dentadas del mecanismo principal, así que colocó aquella rueda en el hueco, pero la pequeña rueda no tenía los dientes necesarios para hacer girar las otras dos. Megaman pensó que si esa rueda estaba ahí a lo mejor tendría que haber otra que la complementase, así que miró por el suelo, y debajo de una estantería encontró otra rueda dentada, pero esta de color dorado. Si dudarlo la tomó, encajó las dos ruedas y las colocó en le hueco del mecanismo.
Con un ligero temblor, el mecanismo comenzó a funcionar, y al poco, las campanas sonaron.
Todos se alegraron de escuchar ese sonido, por fin su pesadilla llegaba a su fin.
Kaitlin corrió hacia Megaman, le abrazó fuertemente y le dio un beso en la mejilla.
-Kaitlin: Megaman eres genial!
Mega se puso colorado y no se desmayó de puro milagro. Pero no había tiempo para eso, tenían que volver al hall principal para esperar al helicóptero; así que uno por uno empezaron a bajar la escalerilla metálica. Megaman ya había bajado, cuando Cutman se detuvo.
-Bombman: Qué ocurre Cutman?-preguntó Bombman al ver que su amigo se había parado en seco.
-Cutman: Me temo que tenemos serios problemas, MIRAD!
Cutman, desde dónde estaba, podía ver una enorme figura subiendo por los muros hacía el balcón, los demás dirigieron su mirada hacia allí y cuando se dieron cuenta, Némesis ya había llegado al balcón y estaba frente a Megaman.
Todos volvieron a subir las escaleras lo más rápido posible, dejando a Megaman con aquella mala bestia, con la cuál empezó a luchar. Pero el combate duró poco, ya que el espacio tan reducido en donde luchaban supuso una desventaja para Mega, que calló al suelo al recibir un puñetazo de Némesis en la cara.
Elecman no podía soportar ver esa escena y decidió intervenir. Saltó de las escaleras, corrió hacia Némesis con una enorme carga de electricidad en sus manos y la descargó toda en el cuerpo de la criatura, el cual, tras un terrible alarido cayó al suelo inconsciente.
Al ver que había pasado el peligro, por el momento, los demás bajaron de las escalerillas. Elecman llamó a Gutsman para que le ayudase a levantar a Némesis y tirarlo por el balcón, cosa a la que Gutsman se prestó a ayudarle. Ambos lograron levantarlo y se dirigieron al borde del balcón. Cuando se dispusieron a lanzar a la mole al vacío, Némesis comenzó al moverse, Gutsman, al notar que volvía en sí, lo lanzó con todas sus fuerzas, sin advertir que el ser tuvo el tiempo suficiente para sacar uno de sus tentáculos y rodearlo en el cuello de Elecman, el cual, arrastrado, comenzó a caer con Némesis.
Los demás al ver que Elecman caía, corrieron en su ayuda, por suerte el robot se agarró cómo pudo a la barandilla del balcón, pero el gran peso que colgaba de su cuello no le dejaba respirar y se iba debilitando. Todos hacían lo posible para subir a Elecman de nuevo al balcón, pero era inútil. Megaman que volvió en sí, se dio cuenta del peligro, y raudo, buscó una solución que les librase se aquella situación y se percató que cerca había un foco, vio eso cómo la única posibilidad de salvarles. Corrió hacia el objeto, lo encendió y dirigió la segadora luz hacia la deformada cara Némesis. Este intentó protegerse la vista del foco, pero al colocar su mano delante, el tentáculo que rodeaba el cuello de Elecman se soltó, e inmediatamente, Némesis cayó al vacío a la vez pegaba un horrible alarido.
Todos ayudaron a Elecman a subir al balcón de nuevo, por suerte estaba bien, aunque un poco falto de aire, cuando este volvió a tierra firme, miró a Megaman, cabizbajo y un tanto avergonzado:
-Elecman: Gracias...por ayudarme.
-Megaman: De nada, te lo debía. Ahora estamos en paz.
Una vez dicha estas palabras, ambos sonrieron el uno al otro. Kaitlin parecía muy contenta, todo indicaba que esos dos empezaban a entenderse.
-Elcman: Bueno, tenemos que volver a la biblioteca e investigar allí, quizás podamos encontrar algo que nos sirva-dijo Elecman.
-Megaman: Pues volvamos. Supongo que el helicóptero tardará un poco en llegar, así que podemos ver si hay algo más por aquí que nos sirva para saber el paradero de Protoman y de Wally.
-Elecman: Bien...pues...id vosotros delante que yo os sigo-dijo con tono asustadizo.
Todos entendieron de inmediato lo que Elecman quería decir: cómo tenían que volver por el pasillo de las telarañas, era normal que estuviese asustado. Todos decidieron entrar lentamente para asegurar que el pasillo estaba limpio, Kaitlin le dijo a Elecman que sería mejor para él que pasase sólo el pasillo una vez que los demás lo hubiesen cruzado. Elecman se negó en un principio, pero entendió que tenía que superar sus temores, así que esperó a que los demás lo cruzaran. Una vez que Kaitlin le dijo que ya lo habían cruzado, se armó de valor y avanzó por este.
Al ser el pasillo en Zigzag, Elecman no podría ver a sus compañeros hasta que no lo cruzara; a pesar de que sabía que los demás estaban al otro lado, no podía evitar sentir un miedo horrible que le recorría todo el cuerpo. De repente sintió algo pegajoso que se le quedó pegado en la cintura, un escalofrío recorrió su cuerpo y pegó un carrera con los ojos cerrados muy asustado, sin advertir que una gigantesca tela de araña apareció de repente en su camino y quedó pegado firmemente a ella. Elecman comenzó a gritar desesperado pidiendo ayuda a sus amigos, los cuales, a oír sus gritos, corrieron hacia el y vieron, completamente sorprendidos, cómo cuatro gigantescas arañas salían del techo, paredes y suelo. Elecman, al verlas, entró en un estado de shock y comenzó a gritar, a llorar y a agitarse de terror en la telaraña para poder liberarse, pero era inútil, cuanto más se movía, más se enredaba. Los demás se acercaron a ayudar a Elecman, empezaron a disparar contra las arañas que se le acercaban peligrosamente, mientras Kaitlin se quedó cerca de él, ya que al matar a las arañas gigantes, estas soltaban a las crías, así que ella se encargaba de que no se le acercasen. Cuando los demás despacharon a las arañas, creyeron que todo había terminado, pero sonaron unos gritos procedentes de Elecman y Kaitlin, que eran atacados por una araña que se plantó justo delante de ellos. Kaitlin se disponía a disparar cuando la araña se abalanzó sobre ella, cayendo encima de Elecman que quedó libre, pero Kaitlin recibió un mordisco de la araña en la pierna, un mordisco venenoso que hizo que la joven perdiera el conocimiento al los pocos segundos. Elecman se levantó y vio el grave peligro en el que Kaitlin se encontraba, ya que la araña la estaba cubriendo con una gruesa capa de su tela formando un capullo. Así que no dudó, tomó la escopeta de Kaitlin y arremetió contra el repugnante arácnido, hasta que este cayó patas arriba y derramó su viscosa y verde sangre en el suelo. Una vez que pasó el peligro completamente, Gutsman tomó en brazos a Kaitlin y todos salieron de aquel horrible lugar.
