12º CAPÍTULO
MEDIDAS DESESPERADAS-EL TURNO DE CUTMAN Y GUTSMAN
Los chicos estaban horrorizados. No podían creer que su amiga se hubiese convertido en un monstruo.
Megaman, dominado por el horror y la tristeza, no pudo evitar gritar maldiciendo a Umbrella con todas sus fuerzas.
Pero no había tiempo para eso ya que Kaitlin-Tirant se aproximaba peligrosamente a ellos y de un simple movimiento de su garra, destrozó una de las estanterías, como si esta fuera de cartón, en un intento de cortarles la cabeza.
Los demás corrieron hacia el pasillo para ponerse a salvo, ella les perseguía dando zarpazos a lo primero que se encontraba, llegando, incluso, a destrozar el pasillo. Una vez que todos llegaron a la sala de la estatuas y los cuadros, cerraron al puerta antes de que ella llegase y la atrancaron con lo primero que encontraron: la campana de la puerta, una mesa de escritorio, una estantería, ect. La tirant comenzó a golpear furiosamente la puerta, pero no era lo suficientemente fuerte para derribarla con todo lo que había detrás de esta. Estuvo golpeándola durante mucho tiempo, pero la final dejó de hacerlo, ya que sus esfuerzos eran inútiles.
Los demás se sintieron mas aliviados cuando dejó de golpear la puerta, pero aún el disgusto de perder a su amiga seguía en sus corazones, sobre todo en Megaman, que no se podía creer que su querida Kaitlin acabase de esa manera.
Cutman estaba también muy apenado, si no hubiera sido tan descuidado con la munición de su escopeta, Kaitlin no sería ahora un monstruo.
Elecman se levantó, tomó su lanzagranadas, lo cargó y se dirigió a la puerta del pasillo.
-Gutsman: Qué vas a hacer?
-Elecman: Voy a matarla-dicho esto, empezó retirar cosas de la puerta.
-Gutsman, Cutman y Megaman: QUÉ!
-Megaman: NO! NO LA MATES POR FAVOR!-gritó mientras se colocaba frente a la puerta para impedir que Elecman pasara.
-Elecman: Azulucho no tientes a la suerte. Ese monstruo no es Kaitlin, ella ha muerto. Es que no lo entiendes?
-Megaman: NO! TIENE QUE HABER ALGO QUE PODAMOS HACER PARA SALVARLA!-dijo ya entre lágrimas-Por favor no la mates!
-Elecman: A mí también me duele tanto cómo a ti Megaman, pero ya no podemos hacer nada. Si la dejamos viva corremos el riesgo de que nos persiga hasta que nos mate.
-Megaman: Pues si la matas…Tendrás que matarme a mí antes!-dicho esto, colocó el lanzagranadas en su pecho.
Elecman se quedó sorprendido ante la reacción de Megaman, pero, hiciera lo que hiciera no le haría cambiar de decisión.
-Elecman: Pero…tantas ganas tienes de morir?
-Megaman: Sin ella... mi vida no tiene sentido...PREFIERO MORIR ANTES DE VER COMO LA PERSONA QUE ELLA AMABA TANTO LE DISPARA!
Aquellas palabras parecieron resonar en todo el edificio. Elecman quedó desconcertado, sus manos comenzaron a temblar; bajó el arma, se dio la vuelta y lanzó con enorme fuerza el lanzagranadas al suelo, rompiendo la loza que lo cubría. El silencio se apoderó de la sala durante un rato, Elecman miró hacia uno de los cuadros; suspiró.
-Elecman: Cuál es tu plan?
-Megaman: ...Qué?
-Elecman: Que cuál es tu plan? Tú sabes cómo curar a Kaitlin?
-Megaman:… ...No... No lo sé...
-Cutman:…Yo sé como!-dijo dirigiéndose a la mochila de Kaitlin, que se la trajo consigo.
-Elecman: Qué!
Cutman sacó todas las carpetas con archivos que Kaitlin había recogido por la ciudad.
-Cutman: Todos los seres de ahí fuera están infectados por un virus verdad? pues todo virus debe tener su vacuna. Estoy seguro que leí algo parecido por aquí-decía mientras buscaba el archivo.
-Gutsman: Tienes razón, yo también lo recuerdo!-pronto se unió a buscar el archivo.
Elecman y Megaman se dirigieron a ellos y también ayudaron a buscarlo. Fue Gutsman el que lo encontró.
-Gutsman: Lo tengo!
Todos empezaron a leerlo, y hubo una frase que les dio esperanzas:
"Una vez que el un sujeto a mantenido contacto con el virus puede suministrársele la vacuna. A pesar de su efectividad, el tiempo entre la infección y la posterior vacunación no debe ser muy prolongado, ya que una vez pasado un tiempo que aun no hemos podido calcular, esta no surte efecto alguno".
-Elecman: Bien, sabemos que existe una vacuna, lo que no sabemos es donde podemos encontrarla-dijo, aún no muy convencido.
-Cutman: En el hospital de Racoon City.
-Megaman: Y cómo lo sabes?
-Cutman: Kaitlin me contó que desde siempre, la ciudad de Racoon City ha estado bajo poder de Umbrella, sobre todo para llevar a cavo sus investigaciones de armas biológicas, así que estoy seguro de que en el hospital debe haber un laboratorio donde se sintetice la vacuna.
-Gutsman: Eso está claro, pero no sabemos que virus ha infectado a Kaitlin.
-Elecman: Némesis fue el que la infectó, si fue creado utilizando el G-Virus, creo que la vacuna para ese virus será suficiente. Ademas, ese y el T-Virus son los únicos que andan por aquí.
-Megaman: Y si es T-Virus?-preguntó Megaman
-Elecman: Al ser una vacuna para una variante más poderosa, por teoría, debería de destruir igualmente ese otro.
-Cutman: Bien, iré yo buscarla-dijo mientras se ponía en pie y se armó con un rifle de asalto y con su escopeta.
-Megaman: Cutman, tu sólo no tendrás posibilidad alguna.
-Cutman: La culpa de que Kaitlin se haya convertido en eso es sólo mía, por ello soy yo el que debe ir a por la vacuna.
Todos se quedaron cayados, no podían impedir que Cutman fuera a buscar la vacuna, además, cuando se le metía algo en la cabeza, no paraba hasta que lo conseguía.
-Gutsman: Yo voy contigo
-Cutman: No, es mejor que vaya sólo...
-Gutsman: Ni hablar, si mueres, quién se encargaría de traer la vacuna? Por lo menos deja que vaya contigo, así tendremos el doble de posibilidades de salvar a Kaitlin.
Lo que decía Gutsman tenia sentido, Cutman reflexionó un poco: No sólo los zombies estaban ahí fuera, sino otras mortales criaturas que quizás ni sabían que existieran, después miró hacia la puerta donde, detrás de esta, estaba Kaitlin-Tirant encerrada. Al rato, miró a Gutsman.
-Cutman: De acuerdo-dijo con una sonrisa.
-Megaman: Nosotros nos quedamos aquí para vigilar a Kaitlin-luego, se aproximó a Cutman y Gutsman y puso sus manos en los hombros de los dos robots-Chicos, por favor, volved sanos y salvos con la vacuna, no quiero perder a nadie más.
-Cutman: Tranquilo Megaman, lo haremos.-dijo Cutman.
Cutman y Gutsman se aproximaron a la puerta que antes estaba bloqueada por la campana, y salieron por esta.
Una vez fuera, Cutman consultó el mapa de la ciudad, pero inmediatamente lo guardó.
-Cutman: El hospital está a dos pasos de aquí, nada más tenemos que girar por esa calle a la izquierda.
-Gutsman: Por donde sale ese zombie?
Cuando se quisieron dar cuenta, de la misma calle salieron unos cuantos zombies. Cutman sacó su escopeta, y disparó a un barril de gasolina que estaba allí cerca, reventándolos a todos.
-Cutman: Hmm decías algo sobre zombies?-dijo con tono humorístico Cutman.
Los dos se dejaron de risas, y continuaron su camino. Nada más girar la calle, vieron el edificio del Hospital de Raccoon City a un par de pasos más adelante y entraron por la puerta de cristal.
Una vez dentro del edificio, vieron que la sala de espera estaba limpia de zombies, pero no se podía decir lo mismo del suelo, ya estaba completamente sucio de sangre, papeles, cristales rotos y miles de cuerpos decapitados, pero había un silencio muy sospechoso; eso no presagiaba nada bueno.
-Cutman: Gutsman, será mejor que vayamos en silencio hacia esa puerta que esta hacia la derecha-dijo en voz baja.
-Gutsman: Pasa algo?-preguntó sin comprender la situación.
-Cutman: Tú sígueme y no hagas ruido.
Los dos avanzaron por la sala con mucho sigilo, pero no se dieron cuenta de que uno de los cadáveres se levantaba de su sitio y avanzaba hacia ellos. Cuando se quisieron dar cuenta, el zombie ya estaba a sólo dos pasos de ellos. Pero antes de hacer nada, una sombra paso por detrás de él y su cabeza cayo en el suelo llenándolo todo de sangre. El cuerpo del zombie cayó encima de Gutsman que, sin saber por qué, éste lo tomó en sus manos con asco. Cutman no tuvo tiempo de fijarse ya que la sombra se paró un par de metros cerca de ellos y una vez quieta, se dieron cuenta que era un horrible Hunter con unos eczemas rojos que se extendían de la cabeza a la espalda, pero sólo se quedo un momento inmóvil, ya que pegó un enorme salto y arremetió contra los robots. Por suerte, o casualidad, Gutsman coloco el cuerpo del zombie a modo de escudo, siendo éste el que recibió el zarpazo. Luego se despedazó en pequeños trozos.
Cutman abrió al puerta, tomó a Gutsman, que no había salido de su asombro ante el ataque del Hunter, por el brazo, y se metieron dentro de la sala que estaba detrás de esa puerta, dándose el Hunter un descomunal golpe el la cara con la puerta cuando Cutman la cerró. El golpe que recibió lo dejo inconsciente, por ahora Cutman y Gutsman estaban a salvo.
La sala en la que se encontraban parecía una oficina, un buen sitio donde encontrar información. Cutman miró en las estanterías mientras que Gutsman se encargó de mirar el los cajones. Estuvieron así varios minutos, cuando Gutsman vio un papel que estaba dentro de una maquina de escribir.
-Gutsman: Hey! Cutman! Mira esto!
Cutman dio un rodeo por gran mesa central de la oficina para reunirse con su compañero.
-Cutman: Has encontrado algo?
-Gutsman: Creo que si. Mira lo que pone aquí.-dijo señalando el papel.
Cutman lo vio y sacó el papel de la maquina. La tinta de las letras se corrió un poco al tocarlo, eso indicaba que alguien, hace muy poco, las había escrito.
-Cutman: Dice "Lo que buscáis está en el 3º sótano"
Los dos se miraron sorprendidos.
-Gutsman: Crees que se refiere a la vacuna?
-Cutman: No lo se, pero da igual a lo que se refiera, iremos al 3º sótano a investigar allí.
-Gutsman: Y si es una trampa?
-Cutman: Nos arriesgaremos.
Cutman y Gutsman atravesaron la siguiente puerta que les llevó a la sala de descanso del hospital, donde pudieron encontrar una planta azul y algunas municiones. Cerca de la puerta por la que entraron había un ascensor, tenia un curioso sistema de reconocimiento de voz, pero ya alguien lo había utilizado y estaba disponible. Una vez dentro del ascensor, se dieron cuenta de que sólo podía llevarles a la cuarta planta y al tercer sótano, los dos decidieron que era mejor ir primero a la cuarta planta por si podrían encontrar algo de utilidad, así que se dirigieron allí. Una vez que el ascensor llegó a la planta, un comité de zombies les estaban esperando para exponerles sus quejas sobre la comida del hospital.
Megaman y Elecman estaban sentados en le suelo de la sala, no se dirigieron la palabra en ningún momento. Elecman estaba echando una ojeada a los archivos que habían recogido durante su aventura, mientras Megaman no hacia otra cosa más que mirar al puerta bloqueada.
-Elecman: Quieres dejar de mirar a al puerta? Por mucho que la mires, Kaitlin no va a volver a ser una robot.
-Megaman: Hablas así porque no lo lamentas tanto como yo.
-Elecman: Si, si, si, ya. Todos sabemos lo mucho que la querías, pero ahora ya no tiene remedio. Lo menos que podemos hacer es asumirlo-continuó con su lectura
-Megaman: Cómo puedes decir eso tan tranquilo y dar a Kaitlin por perdida tan pronto! No han ido Cutman y Gutsman a buscar la vacuna!
-Elecman: No lo conseguirán. Crees que en un simple hospital puede sintetizarse una vacuna para un virus tan poderoso del que casi nadie sabe que existe? Cutman fue muy tonto al creerse eso.
-Megaman: Entonces, por qué les dejaste ir!
-Elecman: Porque así lo quisieron, yo no soy quién para impedírselo. Además esos dos son muy cabezotas, aunque nos hubiésemos opuesto ellos habrían ido igualmente. Si quieren morir que mueran.
Elecman dejó le archivo en la mochila, y se levanto de sus sitio.
-Elecman: Les esperaremos una hora más-dijo mientras miraba uno de los relojes de la sala.
-Megaman: No te atrevas a...
-Elecman: Si no vienen en una hora tendremos que matarla. Es que aún no lo entiendes?
Megaman y Elecman se miraron el uno al otro con ira. Si las miradas matasen, ya estarían los dos muertos.
-Megaman: Pensé que sentías algo por ella, pero ahora veo que no.
-Elecman: Eh?...Por qué debería sentir algo por ella?
-Megaman: Porque ella más de una vez te ha ayudado, y lo hizo porque te quería. Y qué recibe ella a cambio en la situación en la que se encuentra?; Nada. Solo que el ser al que ella más amaba y por quién dio tantas veces la vida, le da la espalda. Cuando saliste corriendo como un imbecil y te perdimos de vista, ella fue al primera en ir a buscarte sacrificándolo todo por ti, no sabes lo mal que lo pasó, y lo feliz que se sintió al verte sano y salvo. Si eso no es una muestra de amor, entonces, qué es?
Elecman miró hacia otro lado, y sin decir nada, le dio la espalda a Megaman. Miró hacia la puerta y luego a uno de los relojes, principalmente a uno que estaba dentro de un cuadro que tenia pintada la imagen de un esqueleto.
-Elecman: Pero si yo nunca la he amado, ni siquiera me gusta. Me parece increíble que pienses esa estupidez.
-Megaman: Qué?...pe...pero si dijiste que no querías perderla...lo dijiste cuando estabas abriendo aquella puerta con la ganzúa...
-Elecman: No me refería a ella. Me refería a su arma.
-Megaman:...QUÉ!
-Elecman: Kaitlin es uno de los robots más poderosos que he conocido, es capaz de copiar armas y le ganar una gran resistencia. Si ella muere, pretendo quedarme con su arma, además, ahora que es un monstruo se habrá vuelto más poderosa que antes.
-Megaman: Eres...eres un canalla...SOLO TE PREOCUPAS POR TI MISMO!
-Elecma: Puedes pensar lo que quieras. Y no grites. Si "ella" se enfada, puede que lo pague contigo-dijo dando unos golpecillos en al pared.
-Megaman: ... ... ...NO PUEDO CREER QUE SEAS TAN MEZQUINO¡¡...NO COMPRENDO POR QUÉ KAITLIN TE QUISO TANTO CUANDO DEVERÍA DE ODIARTE!
Las palabras de Megaman se vieron cortadas por un puñetazo que le propinó Elecman en la cara, con tal fuerza, que le tiró al suelo. Mega se tocó la mejilla, el golpe le había hecho mucho daño y un fino hilillo de sangre comenzó fluir por su boca. Se levantó, y cuando se disponía a devolver el golpe, vio como el cuerpo de Elecman temblaba ligeramente, aun en la pose de después de haberle golpeado, y como de sus ojos brotaban lágrimas que se corrían por sus mejillas.
-Elecman: Cuando Kaitlin y yo nos encontramos en la comisaría...ella me hizo prometerle que si se convertía en zombie o en otra cosa...que por favor la matara...creí que no llegaría el momento, que no ocurriría...pero...pero ya ves lo que le han hecho.
-Megaman:...Elecman...
-Elecman: Tu…Tu no eres capaz de comprender…Claro que no quiero hacerlo...no quiero matarla...pero...pero...PERO ELLA LO QUISO ASÍ PARA EVITAR COBRARSE MÁS VIDAS CUANDO FUERA UN MONSTRUO! ES QUE NO LE PEDIRÍAS ESO SI TE PASARA LO MISMO!
Elecman se puso las manos en la cara y empezó a llorar desconsoladamente. Megaman nunca creyó que vería a Elecman tan desesperado. Siempre había mostrado ser muy serio y frío.
Cutman y Gutsman lograron deshacerse de los zombies, aunque recibieron algunos mordiscos de los cuales se curaron fácilmente. Continuaron por el pasillo, Cutman se paró delante de una puerta, al parecer, detrás de ésta, había alguien, pero para no arriesgarse sólo apoyó la cabeza en la puerta y trató de oír la conversación. Pero estuvo muy poco tiempo ya que una explosión de pequeña magnitud dentro de la habitación le hizo retirarse.
Gutsman al oírla se aproximo a ayudar a su amigo, pero vio que estaba bien.
No lejos de donde se encontraban, había dos habitaciones, cada uno entró en una, pero al rato salieron corriendo de ellas con cara de susto y de asco.
-Cutman: Has visto lo que yo he visto?
-Gutsman: Me temo que si.
Al rato las puertas empezaron a moverse con fuerza, como si algo las empujara; cuando de repente unos agujeros se formaron en ellas y de esos sobresalían una especie de mandíbulas que se retorcían intentando salir de ahí, y acto seguido dejaban ver su viscoso, verde y largo cuerpo que caían de las puertas al suelo. Esos gusanos reptaban por el suelo produciendo un ruido horrible. Poco a poco aparecían más y más de ellos llenando el suelo. Cuando los chicos se apartaron para volver al ascensor, uno de ellos agarró a Cutman por las piernas haciéndole caer, y en un salto clavó sus mandíbulas en su costado.
El grito de dolor de Cutman alertó Gutsman, que se volvió a ayudarle; los demás gusanos se abalanzaron sobre el enorme robot pero, este los agarraba y los aplastaba en el suelo. Pudo llegar a donde estaba su amigo, agarró al gusano y tiró de él con todas sus fuerzas mientras su amigo intentaba lo mismo entre gritos de dolor y sus manos se manchaban de sangre; de repente el gusano de desprendió por si solo y Gutsman, ante el impulso, cayó de espadas contra una de la paredes y le cayó un cuadro en la cabeza. Una vez recuperado del golpe vio el gusano en sus manos, había perdido el color verdoso y pasó a ser de un color mas oscuro y rojizo, cuando quiso darse cuenta, el repugnante ser se derritió en sus manos produciendo un olor insoportable. Gutsman se sacudió las manos y se dirigió a su amigo que estaba aun en el suelo gimiendo de dolor.
-Gutsman: Eh, Cutman, estás bien?
Cutman levantó el dedo pulgar en señal de que se encontraba bien, aunque la herida del costado no tenia muy buena pinta.
Gutsman fué a buscar algo para curar a Cutman, cuando se dio cuenta que en la pared con la que chocó había una especie de caja fuerte, la cuál estaba escondida detrás del cuadro que se le cayó en la cabeza. Fue hacia ella, arrancó la puertecilla y vio que había todo tipo material medico dentro: vendas, desinfectante, etc. Lo tomó todo y fue a ayudar a su amigo.
Cutman sacó algunas plantas de diferentes colores, hizo una mezcla y se las colocó en la herida, Gutsman la rodeó con una venda. Cutman miró el material medico que Gutsman había traído y vio un frasquito que le llamó la atención.
-Cutman: "Vaccine Base"?... esto...Esto es la base para la vacuna que estamos buscando!-dijo sorprendido Cutman.
-Gutsman: En serio?
-Cutman: Si, si no lo fuera, no lo esconderían en un sitio tan insospechado.
-Gutsman: Entonces podemos volver.
-Cutman: No, tenemos que encontrar un caldo de cultivo para que la vacuna esté completa, y eso debe de estar en el 3º sótano.
-Gutsman: Un huerto en un hospital? Mira que son raros los médicos.
-Cutman:…Un caldo de cultivo no tiene nada que ver con un huerto-dijo un tanto sorprendido ante la ignorancia de su compañero- es como el líquido de este frasquito, solo que con una sustancia distinta.
-Gutsman: Ah, bueno. Entonces vamos al 3º sótano.
Los dos volvieron al ascensor, mucho más cerca de conseguir su objetivo.
