Noche número 30 (parte 2):

Empezaba a sudarle la mano, esperaba con todo su corazón que ella no lo notara, que ella siguiera durmiendo tan tranquilamente como hasta ahora. Más de una hora había pasado desde que los dos se escabulleron debajo de las sábanas con la clara intención de dormir, pero es que no analizar lo sucedido hubiera sido imposible.

Uno; se había anunciado de manera verbal que los dos formaban una pareja.

Dos; se habían besado. Be-sa-do. Be sa do.

Tres; compartían cama cogidos de la mano.

Ranma no se había atrevido a mover ni un sólo dedo, literalmente, sus manos seguían unidas, ella en una posición más agradable, él soportando todo su peso sobre su brazo derecho, empezaba a notar como los músculos se le adormecían, como su extremidad le pedía a gritos que cambiara de costado para poder aliviar aquel mal estar. Pero él no sabía cómo. La cama era muy pequeña, cualquier movimiento que hiciera sería notado por ella, además no veía y no sabía si sin querer tocaría alguna parte indebida de su irascible prometida. Porque sí que estaban saliendo, pero aquello seguía siendo nuevo y muy probablemente ella se enfadaría y le gritaría como siempre si sus manazas rozaran sus "casi inexistentes" pechos. Quería moverse, se sentía atrapado en aquel diminuto colchón, pero no quería despertarla, no quería molestarla, pero el dolor del brazo comenzaba a ser demasiado.

Resopló con cansancio, sueño y nervios. "Menuda tontería estar así por todo esto" pensó "ella me pidió que durmiera aquí, ella me pidió que le diera la mano, ella se lo ha buscado si la despierto".

Akane intentaba apretar los ojos lo justo y lo mínimo para disimular bien y no parecer despierta, aunque llevaba una hora estándolo. "¿Es mi mano la que suda o la de Ranma?" dudaba inquieta "sólo me faltaba sudar para que Ranma tenga más motivos para llamarme poco femenina o marimacho". No quería moverse, tampoco, tenía miedo de que él despertara y viera que ella aún no se había podido dormir por culpa de todo lo acontecido, seguro que para él no era nada importante, un par de simples besos, aclarar su relación, dormir juntos… pero para ella lo era todo. ¡Por fin! Podía sentirse segura de tenerlo al lado sabiendo que él le correspondía, que posiblemente ese día era el día en que todo cambiaría, ya no sentiría que no podía ir de la mano con él por la calle porque ese no era su papel, ahora ya podría gritar a todas sus rivales que Ranma estaba con ella, sólo con ella, y todo por voluntad propia.

Una lágrima cayó por su mejilla fruto de la felicidad que sentía, sin pensarlo, en un acto reflejo, separó su mano de la de su prometido para apartar aquella gota salada que poco a poco recorría su piel.

"¡Perfecto!" exclamó mentalmente el muchacho aprovechando la ocasión para cambiar su posición y colocarse cómodamente sobre su espalda. La libertad de su extremidad celebró una pequeña fiesta que al poco rato se vio alterada. Al hacer eso su hombro, ancho como era, tocó el hombro de la chica, que no esperándose aquella cercanía dio un respingo, haciendo un espasmódico movimiento que asustó a Ranma provocando que se apartara y acabara cayendo de la cama.

—¡Ouch!

—¿Ranma? ¿Por qué te has tirado al suelo? —preguntó Akane acercándose al borde.

—Verás, me apetecía golpearme la cabeza —respondió con sarcasmo.

—Idiota…

—No cabemos —dijo admirando el tamaño de la cama.

—Sí cabemos.

—No quieres que te toque Akane, aún me tienes miedo, y es imposible, yo soy muy fuerte, musculoso, atlético… tengo el cuerpo de un toro, la espalda más extensa de Japón —seguía diciendo mientras a la peliazul le caía una gota de sudor por la sien— es imposible que no te roce sin querer si me giro…

—Si es sin querer no pasa nada.

—Pero si te asustas cuando me acerco unos centímetros.

—¡Perdóneme usted! Es que no estoy acostumbrada a dormir con un hombre en mi cama, no es algo que haga a menudo.

—¿Te crees que yo sí acostumbro a dormir con marimachos como tú? Yo estoy acostumbrado a que se me tiren encima bellezas como Shampoo o… —se tapó la mano con rapidez. Akane le lanzó una mirada cargada de ira, pero sobre todo cargada de decepción— Per-perdona Akane, esto ha sonado mal, no quería decir…

—Ya sé lo que querías decir. Perdona si soy así… perdona que no sea femenina, perdona que no sea guapa como Shampoo… —él resopló aliviado no notando la ironía que las palabras de su prometida transmitían.

—Tranquila, no te disculpes, no elegiste ser así, eh pero no te preocupes, a mi me gustas así.

—¡Imbécil! Estaba siendo irónica. ¡Vete a dormir a otra parte, aquí ya no eres bienvenido!

—¿Dónde quieres que vaya?

—A tu habitación.

—No quiero.

—¡Como si me importara lo que quieres!

—Te importa —comentó con convicción mientras se colocaba de nuevo en la cama.

—¡Te digo que no puedes dormir aquí! ¡Fuera! —gritaba en susurros ella apartándolo del colchón.

—No.

Akane se estiró por completo encima de la cama no dejando ni un centímetro al descubierto en el que el chico pudiera colocarse o sentarse. Ella comenzó a abrir y cerrar sus piernas con rapidez para que él no intentara escabullirse por ningún lado, al ver aquello él frunció el ceño. La chica se estaba comportando como una niña.

—Voy a dormir aquí te guste o no —amenazó en un retador tono.

—No voy a permitirlo, idiota.

Ranma analizó los movimientos de la pequeña figura de la peliazul y cuando vio una posible zona de ataque saltó sobre la cama quedándose de pie, ambas piernas rodeando las caderas de Akane impidiendo que se moviera y bajó rápido su cuerpo hasta agarrar las muñecas de su prometida con suave fuerza. La cara de asombro y enfado que ella le regaló provocó que él riera sin ser escuchado. A veces podía ser tan linda.

—¡Quita de aquí, pervertido!

—No te haré nada Akane, confía en mi. Pero déjame que duerma contigo, sabes que no puedo sino.

—Si no dijeras cosas horribles sobre mi esto no hubiera pasado.

—Te he pedido perdón.

—Pero sigues pensando que ella es más guapa que yo.

—Yo nunca he dicho que pensara eso.

—Pero lo piensas.

—Te equivocas —susurró mientras sus mejillas se teñían de rojo.

—¿Soy más guapa que Shampoo? —preguntó con emoción.

—Mmmm —murmuraba Saotome.

—Si respondes te dejaré dormir aquí.

—Eres… gua…gua…pa.

—¿Más que Shampoo? —ella insistió, él resopló girando su rostro muerto de vergüenza. Afirmando con un leve movimiento de cabeza. Akane se sonrojó y con una enorme sonrisa miró directa a su chico a los ojos —Gracias Ranma.

—¿Eh?

—Aunque sea mentira, gracias por alegrarme.

—Te digo que no es mentira —dijo en voz muy baja mientras se apartaba de Akane.

Ella se posicionó en el lado de su cama sin más y él la imitó.

—¿Sigo siendo tu Akane? —preguntó entre risitas inaudibles.

—Siempre, y ya basta de charlas cursis —Oh como agradeció el gran Ranma Saotome la oscuridad de la habitación, nunca había sentido tanta vergüenza.

En esta ocasión se giraron para mirarse mientras reposaban sus cabezas en sus respectivas almohadas. Poco a poco cerraron los ojos y comenzaron a encaminarse hacia el mundo de los sueños.

Antes, pero, él alargó su mano y agarró con delicadeza la de la joven Tendo.

—Perdona, quizás me suden las manos —murmuró él mientras se dormía.

—Uf, menos mal que no era yo —dijo en un susurro más tranquila al saber que no era ella la que sudaba.

—¿Cómo?

—Nada, nada. Buenas noches.

—Buenas noches.

Continuará…

…

Hi, hi!

No me maten gente de bien. He estado ocupada y lo sigo estando, pero he encontrado un ratillo para actualizar… espero que lo disfrutéis, yo siempre disfruto escribiendo sobre este par.

Sí, ya sé, no hay beso en este capítulo, y mirad que quería que lo hubiera, pero no me pareció natural, han tardado dos años en darse dos castos besos, no creo que la primera noche ya se animaran a más XD.

Este ha sido un capítulo un poco más corto, lo compensaré en el próximo.

Os mando un enorme abrazo a todos y os agradezco la paciencia. Mil gracias a todos los que comentáis o seguís la historia, espero que os guste : ).

En especial gracias a: PenBagu, ivarodsan, Llek BM, MeimiCaro, Ishy-24, Ana Maria Vazquez Gomez, Raven2303, SARITANIMELOVE, AZULMITLA, OlorAPetricor (me encanta tu nombre, adoro el olor a petricor), Little Indulgence, Kotoko22, oOo Dark-yuki oOo, xandryx, Andy-Saotome-Tendo, Akai27, Frankie Marin San, KarenPin91, Vernica, , Silvia PB, Elena Bronte, Luna Akane, Luliz Rizo, Akanita15, devi2791, Astron, Haruri Saotome.¡abrazos mil!

PD: —¿Sigo siendo tu Akane? —preguntó entre risitas inaudibles.

Esta frase habla sobre lo que pasa en el capítulo 4, por si lo habíais olvidado : ).