"habla"

'piensa'

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PARTIDA

Esa mañana Ranma despierta abrazando a Akane. Aún desnudos de la noche anterior pero tapados por las sábanas. Observa a su mujer, quien se encontraba delante de él de espaldas, afirma su abrazo sobre la cintura de la joven y le da un suave beso en el hombro.

"Bueno, bueno, parece que nos despertamos…" –se escuchó una voz dentro de la habitación pero que no provenía de Akane, aunque sí de una mujer.

Ranma busca el origen de ésta asustado y cuando se da cuenta de donde provenía da un salto que lo deja sentado en la cama. –"¡Nabiki!"

"Buenos días, Ranma-kun…"

"¿Qué hacés acá?... ¿cómo entraste?... ¿cómo?..." –Ranma no entendía nada.

"Vengo a buscar mercadería, y obtuve bastante se podría decir y de muy buena calidad… sobre todo la de anoche, a muchos les gustaría tener en sus manos ese video…"

"¿De qué video hablás?" –dijo Ranma colorado creyendo lo peor.

"Los filmé a través de una cámara oculta, por supuesto. La escenita del casate conmigo estuvo muy buena, te felicito."

"¿Cómo nos vas a filmar?...Y… y ¿cómo que vas a vender…estás loca…. ¡no podés hacer eso!…"

"Ranma-kun, Ranma-kun, no se hagan problema, parte de lo que gane va a ir para ustedes, además, no te gustaría demostrarles a unos cuantos lo bueno que podés ser…"

"¡BASTAAAAA!"

"¡RANMA!"

Ranma abre los ojos y se encuentra con el rostro de Akane preocupado. Se sienta en la cama y mira toda la habitación, vuelve a cruzarse con los ojos de su mujer quien no hace más que preguntarle que le pasa.

"¿Sueño, fue un sueño?"

"Parecía más bien una pesadilla?"

Ranma se lleva su mano al pecho aliviado. –"Y qué pesadilla…"

"Pero qué fue lo que soñaste para que te pongas así?"

"De recordarlo me da escalofríos…"

"Bueno¿pero ya estás bien?"

"Sí, estoy bien…"

"Bueno, entonces voy a seguir durmiendo… estoy bastante cansada…" –y vuelve a la posición en que estaba antes de que Ranma la despertara.

Ranma vuelve a acostarse y asomándose por el hombro de Akane le dice –"igualmente, ya es un poco tarde Akane, son las nueve, podríamos empezar a ordenar para irnos…"

Akane le contestó hundiéndose aún más en las sábanas. –"estoy cansada…"

"Bueno, bueno, un ratito más…" –le dijo mientras pasaba su brazo por la cintura de su mujer quedando en cucharita, sin antes volver a chequear la habitación, no sea que realmente haya una cámara de video en alguna parte del cuarto.

Durante la siguiente media hora Ranma se quedó despierto, mirando cada detalle de Akane, sintiendo el perfume de su pelo, y sintiendo la suavidad de su cintura al pasear sus dedos por ella. –"Sos como una muñeca de porcelana, sos bellísima." –Le decía suavemente al oído, sin importarle si ella lo escuchaba o no.

Al terminar de decir esto Akane se voltea y lo mira a los ojos. –"Sabés Ranma, con tus caricias no me puedo dormir."

"Ah, perdón…"

"No baka, no te lo digo como un reto, sino que no quiero dormirme, porque me gusta disfrutarlas…" –le dijo con una radiante sonrisa.

Ambos se observaban como hipnotizados, los ojos brillosos, una sonrisa cálida, el pelo revuelto, los hombros descubiertos por las sábanas.

"Akane¿te hice daño?…a anoche me refiero…"

Akane levantó los ojos y se mordió el labio inferior en señal de hartazgo, pero con mucha paciencia le dijo –"Ranma, es la vigésima vez que me lo preguntás, te dije que no…"

"Bueno, lo que pasa es que…"

"Es la primera vez que lo hacía y no sabía si lo hacía bien…"

Ranma se puso colorado y afirmó con la cabeza.

"Me gustó mucho Ranma, fuiste muy suave conmigo."

Ambos estaban ruborizados ahora.

"Vos también estuviste bien Akane…"

Akane le besó el mentón de forma juguetona.

"Eso me recuerda… no me saludaste esta mañana, con mi pesadilla y todo eso…"

"Vos tampoco me saludaste, y fuiste vos quien me despertó a mí primero…"

Ranma toma su rostro en sus manos y le da un fuerte beso en los labios. –"Buenas Akane."

"Buenos días Ranma."

Una vez que se saludaron Akane se sienta cubriéndose el pecho con las sábanas, ya que estaba desnuda y le daba pudor que Ranma la observara. -"¿Mi ropa?"

Ranma se sienta junto a ella y le señala detrás del pie de la cama. –"Creo que anoche voló por allá atrás."

Akane empieza a pararse arrastrando la sábana mientras se envolvía en ella. Ranma agarra la sábana tapándose la cintura. "¡Hey, a dónde te llevás las sábanas, me vas a dejar desnudo."

"Y cómo querés que salga yo de la cama, mi ropa también está lejos"

Se miran por un segundo con el ceño medio fruncido. Akane se ruboriza un poco. "¿Qué?. No me vas a decir que salga desnuda a agarrar mis cosas¿no?"

Ranma se puso más colorado que ella ante ese comentario. –"Si te da vergüenza miro para otro lado…"

"Ja¿y cómo se que no vas a mirar?. Mirá si hacés trampa."

"Akane, ya te vi desnuda anoche, así q-" –el rubor de ambos se acrecentó tanto que llegaba a ser un bordó. –"así que no tenés de que preocuparte."

"Anoche, estaba oscuro, es distinto. Ya se, salí vos entonces, total, yo también te vi desnudo anoche."

"Bueno, mirá si no voy a poder salir…"

"Bueno, hacelo entonces…"

Ranma apoyó los pies en el piso aún tapándose la zona de la cadera. "Pero no me vayas a decir nada después, eh."

"No, dale."

Se miraron a los ojos nerviosos.

"Mirá que salgo."

"Estoy esperando."

Ranma tomó aire y exhaló con nerviosismo. Amagó a pararse y sen sentó de nuevo. Sentía las piernas duras como una piedra de los nervios, Akane no lo quitaba la mirada de encima, segura de que no se levantaría. El joven volvió a tomar aire y cerrando los ojos como concentrándose dio una gran salto y tiró de las sábanas con todas sus fuerzas al grito de –"¡perdón Akane!" En ese segundo a Akane no le alcanzaban las manos para cubrirse cuando Ranma de la desesperación por envolverse en la tela se hizo un nudo y cayó de boca al piso, las sábanas deslizándose lenta y suavemente hacia los lados. Toda la zona posterior del cuerpo del chico a la vista. Akane lo miraba atónita. –"Baka…" –finalmente suspiró ya más tranquila. Al terminar de decir esto, las imágenes de su caída volvieron a su mente y estalló en una distendida risa. Ranma se volteó hacia ella y la miró con el cejo fruncido –"kawaikune…" –alcanzó a decir casi como un suspiro. Akane continuaba riéndose, él al verla ya sin preocuparse por la desnudez de ambos se sonrió. Se fue parando despacio, tomó la ropa de la chica y se la tiró. Cuando esta hizo contacto con ella, se percató de que aún no estaba vestida, miró a Ranma sonrojada, quien la observaba con una cálida y serena sonrisa mientras se ponía los calzoncillos. Akane lo imitó, comenzó a vestirse, con un poco de vergüenza aún, pero mejor irse acostumbrando. Una vez cambiados, Ranma dobló las sábanas para ponerlas en el bolso de viaje y Akane se dirigió al baño a cambiarse, sin antes, al pasar al lado de su mano, otorgarle una suave caricia pasando su mano suave y delicadamente por el abdomen del muchacho.

Una vez terminados los preparativos para su partida, Ranma pasó por la casa de adelante, donde vivían los Teruya para invitarlos a un almuerzo con ellos, a modo de agradecimiento por su hospitalidad. Asistió el matrimonio Teruya y el recién llegado Keitaro. Akane había preparado el almuerzo, mantuvieron una conversación muy animada sobre lo mucho que habían disfrutado el lugar y prometiendo volver alguna vez a visitarlos y quizá quedarse algunos días.

"Ranma-kun, no se si preguntarte… pero esa joven pelirroja del otro día…" -comenzó Naoko.

Akane lo miró de reojo, Ranma dejó de comer y apoyó su plato sobre la mesa.

"¿Alguna vez escucharon de Jusenkyo?" –dijo Ranma mirándolos seriamente.

Todos negaron con la cabeza.

"Bueno… yo estuve ahí, es una aldea de entrenamiento en China, y bueno… el lugar tiene gran cantidad de estanques con maldiciones, se podría decir…"

"¿Qué tipo de maldiciones?" –preguntó con curiosidad Saito.

"Quien caiga a esos estanques, se transforma en lo que murió en ese estanque…"

El silencio reinó por unos segundos.

"¿Cómo el hombre lobo?" –se aventuró a preguntar Keitaro.

"No exactamente…" –contestó Akane.

"Akane, prepará agua caliente." –dijo Ranma.

Akane se paró y se dirigió a la cocina a calentar la tetera. Ranma tomó un vaso de la mesa y poniéndolo sobre su cabeza miró a todos con seriedad. –"Miren con atención." –Una vez dicho esto dejó caer el agua fría sobre él. El cuerpo empezó su cambio.

Todos lo miraron con los ojos desorbitados. No podían creer lo que estaban viendo. –"¿Co…cómo hiciste eso?" –preguntó Keitaro sin salir del asombro.

La voz ahora femenina explicó –"el agua fría me convierte en mujer, mientras que el agua caliente…" –Akane vertió el tibio líquido sobre la cabellera de Ranma y éste en su recorrido llegó hasta sus hombros. –"me vuelve a mi forma original."

Los tres lo miraban estupefactos. –"¿No tiene cura?" –preguntó Naoko con cierta preocupación.

"Sí, la había pero en China, pero los estanques se mezclaron y era muy peligroso meterse en el correcto, así que no se cuánto tendré que esperar para tener la cura otra vez…" –contestó Ranma cabizbajo.

"Y…y cuando te transformas en mujer… ¿te gustan los hombres?" –preguntó Keitaro.

"¡NOOO!" –gritaron al unísono el joven matrimonio, lo que hizo retroceder a Keitaro.

"Ranma, sigue siendo Ranma, sólo cambia su cuerpo, nada más…" –prosiguió Akane.

"Menos mal¿no?" –continuó Saito intentando tranquilizar la situación. –"Sino, sería un gran problema para ustedes, más ahora que están casados…"

Ambos lo miraron recuperando la calma y afirmaron con la cabeza.

El resto de la comida transcurrió tranquilo, los Teruya buscaron omitir el tema de la transformación de Ranma para no incomodarlo ni molestarlo.

Una vez que terminaron de ordenar la casa, dejándola en condiciones para que pueda quedarse Keitaro en ella, Ranma y Akane se dispusieron a partir. En la gran puerta de la entrada se despidieron de los Teruya con una reverencia y amigables sonrisas. Hicieron su camino hacia la parada de colectivos y se lo tomaron rumbo a Nerima.

Al toparse nuevamente con el gran portón de la casa y dojo Tendo, se tomaron de las manos y se miraron regalándose una sonrisa. Ranma le dio un pequeño beso en los labios a Akane para tranquilizarla, así como también para él mismo darse ánimos. Abrieron la puerta los dos juntos y Kasumi salió a recibirlos con una de sus siempre cálidas sonrisas de bienvenida. Akane arrojó el bolso y corrió a darle una fuerte abrazo. Ranma levantó el bolso y se lo colgó en el hombro. Kasumi dio un grito llamando a toda la familia. La primera en asomarse fue Nabiki, quien al ver de quien se trataba salió sonriente a su encuentro, Soun salió corriendo a vivo llanto a abrazar a su hija y panda-Genma mostrando carteles que rezaban las frases "bienvenidos", "los extrañamos mucho" mientras bailaba detrás tirando papel picado. Soun abrazó a su hija mientras continuaba llorando y preguntándole por si estaban bien, si estaban cansados, cómo los había ido y demás. Nodoka fue la última en asomarse, venía de colgar ropa en el patio. Al ver a su hijo salió corriendo hacia él y lo abrazó. Una pequeña lágrima bordeó su rostro. –"Me alegro tanto que hayan vuelto…" –Ranma le devolvió el abrazo. Nodoka lo fue soltando despacio y luego abrazó a Akane. Al soltarse del abrazo, llevó su mano al vientre de Akane y mirando a Ranma le preguntó –"¿me trajeron el regalo que les pedí?"

Akane se puso completamente roja –"Obasama…"

"Ofukuro…" –exclamó rendido Ranma.

Todos rieron animadamente y luego ayudaron a los jóvenes a entrar sus bolsos. Prepararon una cena especial de bienvenida, la cual se llenó de la pequeña experiencia que compartieron el nuevo matrimonio Saotome en su luna de miel. Más tarde las voces se fueron apagando y cada uno se dirigió a dormir. Ranma y Akane ahora tenían cuarto propio, creado especialmente para ellos durante sus días de ausencia. A los pocos minutos el silencio lleno la casa Saotome-Tendo. A excepción de un cuarto.

"Sabés Ranma, a pesar de que muchas veces discutimos y nos peleamos y hubo muchos metidos en el medio de nosotros…"

Ranma bajó la mirada hacia su mujer quien tenía la cabeza apoyada en su pecho.

"Desde que te conocí… soy la mujer más feliz del mundo."

Ranma sonrie. –"Antes yo nunca consideré que tener un hogar era importante, las artes marciales para mí no necesitaban de un dojo o un espacio físico para practicarlas, pero desde que te conocí y desde que vivo con vos, me di cuenta… de que sin vos, vivir sin vos era nada. Que me sentía incompleto, nunca me llenaba, por más que profundizara más y más en las artes marciales, me faltaba algo. Desde que te conocí, necesito y tengo un lugar a donde volver, en donde sentirme esperado, en donde sentirme extrañado, querido. Pero más importante que eso, sentir que yo quiero volver a ese lugar porque no puedo esperar el verte, por extrañarte horrores, por amarte…"

Se sonrieron una vez más.

"Yo también te amo Ranma, y siempre lo voy a hacer."

Ranma comenzó a acariciar el pelo de Akane. -"Ne, Akane¿qué pensás del regalo para mi mamá?"

Akane lo miró divertida.

"¿Se lo damos?" -pregutó Ranma y se le escapó una leve risa.

"Hay que prepararlo..." -contestó Akane de igual modo.

Se dieron un largo y profundo beso, el cual se fue ampliando a caricias hasta que finalmente se enredaron en las sábanas uniéndose en un solo ser, sintiéndose por segunda vez completos en cuerpo y alma

FIN

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Bueno, llegué al final...después de tanto tiempo de ausencia. Espero les haya gustado mi historia. Pensaba escribir quizá un epílogo, pero sólo si estoy muy inspirada, porque creo que el cierre está más que claro, no queda mucho más que decir. Lo que sí tengo que decir es GRACIAS, a todos ustedes, todos los que leyeron mi fic, el cual dsifruté mucho escribiendo. Gracias por todo el aliento y comentarios de buena onda que me dedicaron. Me gustaría nombrarlos a todos, pero lo más probable es que me salte alguno y por eso hago un agradeciemiento en general.

Con respecto a este último capítulo quiero hacer una aclaración y un pedido de dsiculpa a la vez... perdón para los que esperaban un lemon :P. La verdad, no se si podría escribir uno... es un género bastante difícil, jeje. Lo dejo a la imaginación de ustedes para el que esperaba eso...además tendría que estar en la categoría M para ser un lemon...no se si este se podría considerar Lime..mmm...creo que no, jeje, pero bue...soy una persona más romántica, que pasional quizá...aunque no creo que eso me sirva de excusa. :P

Gente, es difícil cerrar un fic con comentarios...así que sólo arigato! "SANKYU!" como me encanta cuando los japoneses tratan de hablar inglés. :P Los adoro.

Besos a todos. Y nos encontraremos en algún otro fic si dios quiere.

Sigo delirando...voy a cerrar con dos frases de una canción de HYDE (L'ArcenCiel), del cual soy ultra-fan. "Here in the Shadows...this treasure has no meaning anymore" (simplemente me gusta esa frase...)