In the front

Solo les pido un favor… no se acostumbren a las actualizaciones rápidas, jaja. No son frecuentes y cuando lo hago… no es buena señal. Gracias a todos por sus comentarios, son maravillosos.

Star Trek no me pertenece. Es una creación original de Gene Roddenberry y la película, de J.J. Abrams.

Extrañamente, nunca se había encontrado tan nervioso. Mientras caminaba de un lado al otro de aquel enorme pabellón, Christophe G. Kirk meditaba la secuencia que lo había llevado hasta aquel lugar. Encontró a James Tiberius Kirk en medio de un estado de criogenización o algo similar a bordo de la Vengeance, una nave que la Federación llevaba dos décadas buscando. El sitio estaba abandonado y el rescate de ese hombre, ex capitán de la USS Enterprise, le permitió recuperar a uno de sus dos padres, precisamente aquel que podría guiarlo por el camino de los humanos, un panorama de si mismo que no comprendía. Pero desde entonces… no hacia mas que meter la pata (tal y como decían los humanos) una y otra vez. De entre todas su malas decisiones… la de dejar hablar al hombre a sus superiores… quizá había sido la mas estúpida.

– Entonces quedará todo acordado cuando… – Las voces procedentes tras la puerta que se abría, hicieron al joven vulcano caminar con velocidad hacia el lugar.

– Me parece bien… – Kirk caminaba de manera tranquila junto a un grupo reducido de hombres y mujeres.

Chris se impresionó al ver de quien estaba acompañado su padre.

– Y solo vuelve a meterte en un solo problema, James… – Amenazó la mujer de cabello negro y piel oscura. Jim sonrió ampliamente y tomó la mano de ella entre las suyas. Todos se retiraron, pero Jim seguía ahí, mirando con dulzura a la morena, que a pesar de lucir mayor, seguía radiante.

– Parece que no me conocieras… problema es mi segundo nombre…

– En realidad, es Tiberius – Intervino Chris. La mujer se giró para verlo y le sonrió como siempre hizo desde que lo conoció y medía apenas lo que un bulto pequeño. – Señora Uhura.

– Chris… cada vez que te veo, te pareces más a tu padre.

– ¡Hey!, también se parece a mi… – Jim puso su mano sobre el hombro del vulcano y vio su rostro reflejado en aquella mirada azul celeste.

– No me refería a Spock, ¿sabes?... Jim, es tan grandioso verte después de tantos años… y es aun más maravilloso ver que no has cambiado nada. Puedes considerar que hay una misión importante para ti en el universo, ¿no lo crees?

– O quizá el castigo no ha terminado aun… – Concluyó el rubio con resignación. Uhura puso un rostro melancólico, cuando miró el rostro del joven vulcano y sonrió con diversión.

– Mejor dime como se llevan tu y este jovencito, ¿Quién es tu papá consentido ahora, Chris?

El vulcano abrió la boca, pero antes de contestar nada, contempló un asunto más importante que esa conversación sin importancia.

– ¿Mi cita con la Federación se verá pospuesta?

– Al menos hasta ver los resultados de esta… "misión".

– ¿De que habla? – Chris se giró para ver a su progenitor, pero este se acercó lo suficiente como para dar un beso sobre la mejilla de la mujer y salir de ahí caminando velozmente.

– Hasta pronto, Uhura.

– Cuídate, Jim… y cuida a Chris y Spock.

– Ya lo creo… – Y así, Chris tuvo que seguir a su progenitor a donde quiera que fuese.

– ¿Señor Jim?

– No te preocupes, te dije que recuperaría la Enterprise… – Los ojos del vulcano se mostraron sorprendidos, ¿eso significaba que…? – Oh, no, no… no le harán nada a Spock… el seguirá siendo el capitán… yo tengo que hacer un nuevo entrenamiento… además, las cosas han cambiado mucho en 20 años… hay cientos de cosas que podrían pasar, mi destino está en el espacio, pero aun no sé que es. Cualquier cosa podría suceder… Solo les hice saber poco de lo que sabia de la Vengeance y se mostraron interesados en ayudarme a recuperar el resto de mis recuerdos… la tecnología de Khan puede ser de ayuda de muchas formas

– Fascinante… – Jim sonrió al escuchar aquella palabra. Este vulcano era un recordatorio perpetuo a su otro vulcano… un momento, pensó: "su". – En cuanto a mi suspensión…

– Eso lo tendrás que solucionar en unas semanas, personalmente… pero por ahora solo harás… ¿que dijo Uhura?, aportaciones en las ramas de tus doctorados… ¿Cuáles son exactamente?

El vulcano se detuvo a meditar la cuestión unos segundos. Jim se paró a unos metros de él.

– Soy programador de sistemas de prueba y doctor… he programado la Kobayashi Maru por 3 años seguidos… eso significa que…

– Te quieren a bordo de la Enterprise… pero solo si aceptas la intervención de Spock… te aconsejaría quedarte en el cuartel un tiempo…

– No, le repito que asumiré mi responsabilidad ante Padre y ante la Federación… pero yo no… – Sin necesitar otra explicación, Jim mostró una sonrisa de lado a su hijo. Conocía perfectamente sus intenciones, no abandonaría la Enterprise siempre que Bones estuviera a bordo.

– Entonces puedes seguir siendo doctor… ¡pero, hey!, te voy a tener vigilado todo el tiempo…

– ¿Y cuando podre volver a desempeñar mis funciones dentro de la Federación?

– Bueno, eso ya no podría decírtelo yo… pero mejor vámonos pronto, que la peor batalla está aun por pelearse…

El joven vulcano no preguntó más. Sabía perfectamente de que hablaba su padre humano.

O*O*O*O*O

– Me mentiste. Llevaste contigo a un sujeto de experimentación importante para el señor McCoy, apoyaste un robo a bordo de una nave de la Flota Estelar, asististe a un sitio de recreación con un uniforme del servicio, comenzaste una pelea, de la cual se han reportado 18 heridos de gravedad y desperfectos que cuestan lo que una nave menor de exploración. Ocasionaste heridas menores en otros y en ti, golpeaste a una mujer injustificadamente, guiaste a Kirk hacia los lideres de la Federación y asumiste una responsabilidad que no te correspondía, sino al capitán de esta nave. Pasaste por encima de mí, de todos los mandos en la jerarquía antes que tú y me has creado una decepción perfectamente justificable. Voy a presentar una denuncia de baja justificada hacia los altos mandos… no puedes permanecer en la USS Enterprise.

Spock mantenía una postura rígida, mientras mirada directamente a los ojos celestes del joven vulcano. Este sostenía su mirada con dignidad, pero verdadero pesar… todo lo que dijo había sido acertado… pero la parte en la que mencionó la decepción, fue su peor castigo. Simplemente… jamás sería lo que Spock merecía.

– ¿No estás siendo demasiado injusto, Spock? – Jim, quien a duras penas se mantuvo bajo los análisis de McCoy, se puso de pie de la camilla y caminó hasta estar a muy pocos metros de los vulcanos. – Es un chico, cometió un error, pero está aquí, enfrentándote a pesar del miedo y asumiendo su responsabilidad, ¿eso no significa nada?

Spock evitó (aconsejado por McCoy) dentro de lo posible, el ver a Kirk bajo cualquier medio. Pero ahí estaban… a tan solo dos metros el uno del otro. Su control sobre las emociones impidió saltarle encima para abrazarlo la primera ocasión, pero en ese momento, sus sentimientos no podían ser más contrarios. Chris jamás había sido tan desobediente, tan irracional ni tan complicado antes. Todo vino a raíz de la influencia de aquel hombre. Imaginó velozmente lo que habría sido su vida marital de haber mantenido a Kirk a su lado esos 20 años… seguramente, un problema tras otro…

Pero aun así…

Lo anhelaba.

Aunque ese no era el momento adecuado para pensar en ello.

– No significa nada más que el conocimiento pleno de que cometió errores que lo llevan a esta resolución. Mi veredicto al respecto no está a discusión y agradecería, Jim… – Una extraña punzada atravesó el pecho de Kirk. Hasta lo que recordaba… Spock jamás lo llamó por su nombre sin que tuviera que pedírselo… ¿que fue eso que lo hizo sentir tan a gusto? –…Que no interfirieras en un asunto en el que tu participación es una clave crucial en el entendimiento de muchas situaciones que llevaron a Christophe a tomar decisiones erróneas.

– ¿Ahora yo tengo la culpa? – No… simplemente no podía evitar ser tan James Tiberius Kirk. No era su problema, ¡las estúpidas reglas!, eran ellas las culpables… – ¿Y porque me llamas "sujeto de experimentación"?, ¿es eso lo que soy ahora?

– Es un término adecuado para las funciones que la Federación espera que desempeñes a bordo de la Enterprise.

– Además, en algo este tipo tiene razón, Jim… tu tienes la culpa de todo lo malo que le sucede a Chris… ¡llevarlo a un bar!, es como si… – El joven vulcano sintió un vuelco dentro de su estómago, pues McCoy se mostró preocupado por algo que tenia que ver con el. ¡Concentración!, ese no era el punto.

– ¡Basta, Bones!, no quiero oír una metáfora ahora… ¡y tu quita esa miradita que me molesta mas! – Dirigió a su hijo, quien de inmediato agachó su cabeza, avergonzado. Ni Spock ni Bones alcanzaron a mirar que estaba viendo y a que mirada se refería Kirk. – Si, puede que sea parcialmente culpable de algunas cosas que sucedieron… pero en mi defensa y la de Chris, no todo fue nuestra culpa, no comenzamos la pelea y todo fue por ese tipo, y además Shia, Shayo o no se como se llamaba, ella estaba ahí y me besó… y no… – Spock y Chris arquearon sus cejas con confusión. Bones le dedicó su peor mirada al rubio… ¿se suponía que esa era su defensa? – Chris me estaba defendiendo y yo pues… también lo defendí en su momento… así comenzó la pelea…

– La cual no se habría llevado a cabo si no hubieran hurtado las posesiones del señor McCoy y una nave que se llevaron bajo engaños…

– ¡Pero no mentí! – Contestó con un grito el joven vulcano, pero una vez que Spock lo miró a los ojos, no tuvo de otra más que volver a esconder su mirada. – Si me dirigía a la Federación… es solo que… omití mencionar al señor James.

Kirk miró preocupado a su hijo, después a Spock. No se suponía que las peleas familiares fueran así… el joven simplemente asumía siempre todas las responsabilidades y Spock se imponía sin mas. Tendrían que cambiar muchas cosas por ahí…

– Omitir la verdad es igual a engañar, el engaño es una mentira y es lo que tú hiciste. No puedo volver a confiar en ti, ni en nada de lo que digas. Solo por eso debo expulsarte de la Enterprise.

– ¡PERO…!

– Eso es todo. – Concluyó. Chris lo miró suplicante, pero terminó por aceptar con impotencia su mandato. Jim dio un paso enfrente y se colocó justo frente a Spock con su rostro tan cerca como aquella ocasión en que se metió con lo que mas le importaba solo para rescatarlo de sus conflictos emocionales… pero en esa ocasión era por su hijo. El hijo de ambos. Para evitar que cometiera otro error.

– ¿Que rayos pasa contigo, Spock?, tu y yo mejor que nadie sabemos que no hay problema con mentir siempre que se haga por un buen motivo y tu hijo no tenia otra alternativa… lo chantajeé y por eso me llevó hacia al Tierra, pero nada de lo que se le acusa fue su culpa, sabes perfectamente que lo que vivió en la Vengeance es motivo suficiente para perder el ánimo y las esperanzas en ti mismo, pero no pareces comprometido con apoyarlo o siquiera darle algún animo… solo quieres minimizar sus reacciones y hacerlo sentir culpable.

– No te permito poner en duda mis capacidades como padre o líder, Jim… las decisiones que he tomado se basan en un estudio lógico de…

– De nada sirve ser lógico si te vas a comportar como un cretino con tu propio hijo – Si, era exactamente igual que en aquella ocasión. Tendría que insultarlo para que entendiera. Solo que en aquella ocasión, era mucho mas doloroso. – No puedo creer siquiera que yo, YO MISMO permitiera que un sujeto como tu educara a mi hijo… habría sido mejor mantenerlo a mi lado en la Vengeance… al menos así habría sido yo el cretino sin emociones…

– Esa conclusión es por completo… – Chris se preocupó, jamás había escuchado a su padre tan molesto. Y a juzgar por el rostro de Bones, sin dudas Jim tampoco estaba en sus mejores días.

– ¿Y sabes otra cosa?, ¡Si, es cierto!, tal vez yo haya echo muchas cosas malas en las ultimas 76 horas que llevo aquí, pero no es a mi a quien el mira con miedo o incomodidad… ¿siquiera te detuviste algún momento, de sus 19 años, a preguntarle si quería ser vulcano?, no has hecho mas que enseñarle mentiras… sobre ser lógico y racional con todo lo que siente… ¿que hay de ti?, ¿le has dicho cuan confundido te encontrabas por ser el niño de dos mundos?, ¿por sentir el deseo de vengarte de los romulanos por lo que el hicieron a Vulcano?, ¿Cuánto te enfureciste al creer que Khan me había asesinado?... y si es cierto todo lo que me han dicho hasta este momento, ¿fue lógico para ti, amarme cuando yo te encuentro, por completo, todo un fastidio?, ¿que de lógico hay en eso?, ¡dímelo!

Chris miró a Jim y después a Spock. No sabia porque, pero presentía que uno de los dos golpearía al otro. ¿Todo eso era cierto?, ¿su padre enfrentó los mismos problemas alguna vez?, ¿Por qué, entonces, lo hizo sentir tan miserable por hallarse confundido tantas veces?
Jim tenia razón… el jamás tuvo la opción.

– Tranquilo, Jim… –Bones intentó apartar al rubio del camino del vulcano, pero Jim de inmediato retiró su agarre. Spock no iba a seguir torturando a su hijo de esa forma.

– No, Bones… necesito ahora mismo, ¡en este instante!, dejar las cosas claras… no voy a permitir que vuelvas a molestar a Chris ni que lo amenaces… el no esta solo, ya no más… y si no puedo enfrentarte aun, conseguiré a quien lo haga, de alguna forma, pero… no volverás a molestarnos, NUNCA. ¿Me escuchas?

Spock estuvo por contestar a sus comentarios irracionales, cuando cambió la dirección de su mirada y observó a su hijo. Si algo de razón tenían las palabras de Jim, tenia que saberlo en ese preciso instante.

– ¿Es su afirmación correcta?

Chris buscó apoyo en Jim y Bones, pero ambos guardaron silencio. Ni en un millón de años imaginó que tendría aquella conversación con su padre vulcano. Aquella confrontación.

– Yo creo que… – Pero es que, le temía mucho a Spock. No sabia porque, pero odiaba decepcionarlo, detestaba darle problemas y mas aun, contradecirlo… ¡simplemente no podía!, no a él. No a Spock. – Pudo… pudo haber sido… más… comprensible… quizá…

Y eso fue suficiente. Spock abrió sus ojos con asombro nada disimulado, se giró para mirar a Bones y Jim, quienes lo observaban con su "TE LO DIJE" tatuado en la mirada. El vulcano comenzó a buscar en sus recuerdos la fuente de aquel acontecimiento, la forma en la que terminó ahí. Y la única respuesta se resolvía con un nombre. Aquel sujeto que decidió afrontar el peligro solo… llevándose consigo todo su universo.

– Yo… – Comenzó con la voz apagada, haciendo así, sentir mas culpable a Chris. Jamás imaginó ver a su padre tan mal. – Hice, todo el tiempo… lo que consideré que era correcto. – Alzó su mirada y observó a Chris como jamás se permitió hacerlo. Con su lado humano y el corazón abierto. – La única razón por la que te llevé a Nuevo Vulcano y busqué la manera en que siguieras siendo solamente vulcano es porque… – Jim y Bones intercambiaron miradas rápidamente. Quizá fueron demasiado severos también. – Hay una extraña tendencia en mi… de perder a los humanos que me importan… y a uno de ellos, quizá el mas importante… lo perdí por mi incapacidad de hacerle entender lo ilógicas e irracionales que eran las decisiones que tomaba… todo el tiempo… pensé que si tu podías ver las cosas de una manera racional… jamás correrías irremediablemente hacia el peligro… supongo que te expuse a otra clase de peligros, de cualquier forma, te fallé.

– ¡Eso no…! Intentó decir algo para hacer sentir mejor a su padre, pero la alarma los asustó a todos. Spock salió a grandes pasos de ahí, seguido de Chris y finalmente, de Bones.

– No, tú te quedas. – Empujó a Jim, quien intentó seguirlos, pero que fue rechazado por el doctor.

– ¡Pero…!

Y le cerraron la puerta en la cara. Tendría que permanecer ahí… en el consultorio… de nuevo.

Miró los aparatos, incluso intentó jugar con algunos otros, pero nada le quitaba la espina de querer ir a ayudar con el problema que activó la alarma y llevó a Spock hacia el puente. Quizá su hijo también estaba en problemas… no podía quedarse ahí, con los brazos cruzados, ¿cierto?
Dio un paso en dirección de la salida, cuando un extraño sentimiento de vértigo lo invadió. Estaban ahí de nuevo, los recuerdos reprimidos… lo que fue y ya no era más…

…

….

….

– Con un cuerpo receptor como el tuyo, la reacción funcionará como un contenedor, la energía necesaria para filtrar las reacciones físicas que ocasionan los ataques de naves como la Enterprise y la Vengeance.

Su cuerpo estaba atado a una mesa, con cinturones de titanio y ambas muñecas sostenidas contra sus costados. El ambiente parecía el interior de un laboratorio medico, el hombre que lo mantenía atado era…

– Pero antes… es necesario eliminar el rastro de aquel sucio vulcano… – Khan se colocó un guante que parecía compuesto de algún extraño magma grisáceo. Lo colocó sobre el estomago de Kirk y un extraño dolor le hizo doblegarse. Ese sujeto tocaba sus entrañas sin atravesar su piel.

– ¡NO!, ¡DETENTE!... ¡hazme lo que sea!... pero… ¡no lo toques! – Kirk respiró con dificultad, viéndose a si mismo sufriendo de aquella forma. Khan lo miró con la misma frialdad que derrochó en su anterior encuentro. Con algo parecido a una sonrisa tenebrosa, cerró su puño en el interior de Jim y el dolor fue tan grande, tan terrible… que cayó inconsciente al instante.

Mientras que, el Kirk que observaba, se sitió tan mareado que una ola de imágenes comenzaron a acumularse dentro de su cabeza. Sin embargo, al igual que en su ultima visión, esta terminaba con el rostro de un joven de cabellera rubia y ojos celestes, aun mas claros que los de él. Como lo de…

– ¿Padre?

– Chris… – Susurró a punto de vomitar. No deseaba seguir ahí… algo estaba mal. Era como estar a bordo de la Vengeance.

– ¿Cómo llegaste a bordo de la Enterprise? – El joven caminó alrededor del rubio, con ambos brazos a sus costados, pero como si mantuviera la guardia alzada. – ¿Cómo recuperó tu cuerpo sus funciones?

– Yo no lo… fue Bones… pero, ¿Quién...? – Finalmente las cosas dejaron de girar y…

¿Estaba en la Vengeance?

O*O*O*O*O*O

– Jim no está, Spock… Jim no está en ningún sitio.

– ¿Ya se comunicó a la sección de salida?

– Según la teniente Fisher, el registro de las acciones realizadas dentro de la Enterprise, el Señor James no abandonó la sala de exploración, esta puerta ni siquiera fue utilizada después que nosotros la abandonáramos. – Chris llegó hasta el par de hombres en el puente.

La alarma les avisó de una amenaza acercándose hacia la Enterprise, pero tan rápido como esta fue ubicada, desapareció…
Y extrañamente… Jim también.

– ¿Crees que…?

– Sin que los escudos lo detectaran, es una hazaña imposible, los nuevos escudos de la Enterprise impiden que una nave externa pueda transportar a un individuo desde el interior de nuestra… – Spock siguió analizando los motivos por los cuales Jim podría haber desaparecido. No quería admitirlo, pero estaba muy asustado, desesperado. Después de 20 años de haberse resignado, todo el tiempo perdido y la nueva oportunidad de recuperarlo… de nuevo estaba lejos.

Solo podía ser… ese tipo.

– Khan. – Dijo Bones en voz baja. Chris y Spock cruzaron miradas preocupados. El capitán regresó a la silla y ordenó una inspección exhaustiva del sistema de protección.

Chris miró en dirección del espacio. No de nuevo… no después de sentirse protegido por primera ocasión.
Su padre no pudo haberlo dejado de nuevo… no lo permitiría. Nunca más.

– ¡George!, ¿A dónde vas?

– Voy a encontrar la Vengeance… mi padre debe estar ahí… y yo iré por él.

O*O*O*O*O

– ¿Por qué me llamas padre?

– Es el término que los humanos inventamos para la posición que usted presenta en nuestra relación biológica…

Jim observó detenidamente a ese chico. Era mas joven que Chris, evidentemente; sus ojos eran de un color azul claro, mucho más celestes que los suyos, pero su cabellera lucía idéntica, rubia con tonos ligeramente oscurecidos en castaño claro. Vestía una gabardina negra y un pantalón de un plástico grisáceo del mismo tono oscuro. Había un extraño sentimiento que inundaba su pecho, algo cálido, pero pesado. No se encontraba siendo el mismo en ese momento.

– ¿Por qué desaparezco 20 años y de pronto todos me encasquetan niños?, ya no creo nada… ¡y ahora de quien se supone que eres hijo tu?, ¿de Bones?, ¿de Chekov?, ¡eh!, ¿eh?

– Nunca estuve dentro de su cuerpo, pero mi sangre es la combinación de su ADN, muestras mitocondriales y los de el individuo que usted llama Khan.

– N-O J-O-D… – Antes de poder terminar su pintoresca maldición, Jim se cubrió el rostro con sus manos y comenzó a sudar frio… – No, no hay forma… con Spock, creía que era demasiado… pero… ¿¡KHAN!? ¿¡QUE ME HICIERON!?, ¿¡QUIEN ERES!?, ¡Me voy de aquí!

Intentó evadir al joven, pero este se interpuso. Su manera de hablar era similar a la del sujeto que mantuvo cautivo a Jim durante dos décadas, pero su mirada era amable y apacible. Junto a Chris, ambos Kirk parecían los polos mas opuestos de todos… pero ese sujeto no lucía del todo distinto.

– Soy un experimento, Papá… – Su voz y las palabras que envolvían hizo a Jim mantenerse d esa forma, suspendido en sus ideas. ¿Por qué esa mirada lo convencía de esa forma?, ¿Por qué se sentía contraído por un dolor tan familiar y desconocido a la vez?... ¿y porque no sentía lo mismo con Chris, a quien se suponía, tuvo con alguien a quien si amaba? – No es necesario que sientas afecto o cariño hacia mi… te comprenderé ahora… pero al menos, permíteme cuidar de ti. Eso es lo único que te pido.

Su corazón se detuvo (en un modo metafórico) al escucharlo.
Había cientos de cosas que no podía explicarse a si mismo. ¿Que pasó durante esos 20 años?, ¿Dónde estaba Khan ahora?, ¿Por qué se encontraba oculto en el núcleo de la Vengeance?, ¿que eran todas esas visiones que tenia? ¿Eran ciertas o solo ilusiones?, ¿ese chico frente a él decía la verdad?, ¿él había sido capaz de olvidar a dos personas con las que compartía sangre y al supuesto amor de su vida?

– Es… dime la verdad – Sus ojos miraron directamente a los del otro rubio. – ¿Quién eres tu?, ¿Dónde esta Khan?... ¿y en verdad eres…?

– Hace 12 años, fuiste confinado al núcleo de la Vengeance por el elemento que me creó d manera artificial.

– Khan… – Las lágrimas comenzaron a brotar de los ojos de Jim. Cuanto le quitó ese sujeto… no solo a Pike, a Spock y toda su vida. También sus motivos para seguir…

– Si… hasta ese momento, fuiste lo más cercano que tuve a un verdadero padre… pero él nos separó. A mí, siendo un experimento… a ti, con un cuerpo extraordinario en términos humanos. La posibilidad de concebir vida en los humanos del genero masculino son reducidas a millares de centésimas, sin tratamientos adecuados y medicación… pero tu, un simple humano sin mayores cualidades ni superioridad entre los tuyos, de entre la unión con un vulcano…

– Entonces Chris es en realidad…

– Oh, claro que lo es… tu hijo… "hermano", si, ¿es la palabra? – El rubio menor caminó con los brazos recargados tras su espalda, directo hacia una enorme pantalla que permitía vislumbrar el espacio exterior. – Para conocer mejor tus funciones biológicas, Khan te permitió proseguir con la gestación del vulcano, aun cuando su sangre se volvió venenosa para tu sistema. Finalmente él nació y de alguna forma conseguiste burlar la seguridad y expulsarlo de la nave antes que Khan lo tomara como objeto de experimentación… pudo seguirlo, acabar con su padre vulcano y toda la tripulación de la USS ENTERPRISE, pero… si te mantenía a ti, tenia el núcleo de poder.

Su marcado acento y la manera en la que miraba hacia la nada… Jim sintió que estaba de nuevo frente a Khan, con una enorme barrera de cristal separándolos, pero en lugar de eso, su hijo… y sus recuerdos perdidos que reaparecían y cobraban significado.

– ¿De que hablas?, ¿que núcleo?

– Existe un compuesto en tu sangre… después de ser "revivido" por primera ocasión, ¿puedes recordarlo?, cuando ese vulcano atrapó a Khan y el, junto a la teniente humana y el doctor de la Enterprise, fusionaron tu sangre… esta se volvió distinta en toda expresión… tu cuerpo, Padre… es energía, energía similar a una explosión nuclear contenida dentro de un complicado sistema en constante evolución.

– Eso es… imposible… no hay… forma… – Jim sintió tanto estrés, cansancio y confusión en un solo instante que…

– ¡Padre! – Cayó de rodillas sobre la superficie y terminó por vomitar… tal y como había temido.

Era demasiado.

Era… DEMASIADO.
No había lógica, no había motivos. Solo pasó. Todo. Debía ser un sueño. Más profundo que eso, debía ser una pesadilla horrorosa.

– Me has preguntado quien soy… una vez que Khan comenzó su experimentación biológica… en fusión de su sangre y la tuya, la energía, los componentes adecuados y con el núcleo en marcha, te volviste en el contenedor perfecto para revivir la fuerza del pueblo desterrado por su perfección y superioridad sobre la raza humana… los destructores de guerra y creadores de tecnología.

Jim sostuvo su frente, a punto de explotarle. Alzó la mirada y ahí estaba a un par de centímetros suyo, el experimento, hijo suyo y del hombre que mas odiaba en el universo.

– Aunque en un principio mi cuerpo se encontró inerte y escaso en rasgos de ningún tipo, humanos o alienígenas, mi denominación era una clave alfanumérica… pero algo dentro de sus "emociones" humanas lo llevó a llamarme "James"… significa algo para usted… pero no sé que podría ser… – Fue momento del joven para cubrir su mirada de llanto. – Soy un experimento, padre… bajo ese conocimiento, no puedo pedirle afecto de ningún tipo, ¿con que derecho podría…? Pero, justo ahora que Khan ya no se encuentra en la Vengeance y no volverá… ¿que harías por Christophe, mi hermano?... ¿que haría el por ti?... ¿no podría yo hacer lo mismo?

– ¿Cómo he llegado hasta aquí?, yo necesito… – Secó su llanto como pudo y se puso de pie con gran esfuerzo. James le brindó su mano para ayudarlo. Fue extraño… y dentro de si mismo pensó en algo que lo hizo sentir terrible. Se reprendió y apartó su vista para evitar que el chico lo descubriera. – Tengo que volver a la Enterprise… debo hablar con Spock.

Entonces estuvo seguro de todo. Fue cierto, después de todo… los recuerdos, en su mayoría, mas no todos, volvieron.
El día en que vió por ultima ocasión a Chris… no, antes… el día en que se despidió de Spock por ultima ocasión… no, antes… la experimentación del Pon Farr junto al vulcano… antes… su primera pelea de novios… ¡antes!... su primer beso robado… ¡aun mas antes!... la primera ocasión en que supo que lo amaba… ¡mucho antes!... las lagrimas de Spock mientras lo llamaba su amigo… ¡aun antes que eso…! la pelea por el mando de la Enterprise… El principio… en la Kobayashi Maru.

– ¿Soy energía?... ¿Por qué entonces la Vengeance no pereció sin mi a bordo?

– Porque yo seguía aquí… su sangre y la mía son…

– La misma… – Completó Jim. Entonces miró la vista del joven rubio, dirigida hacia el espacio.

– Necesito que tomes una decisión, padre… – Algo se aproximaba a la distancia. La alarma de la Vengeance los alertó. Kirk se puso de pie y sostuvo su propio estomago con pesar. Debía ser Spock.

– ¿Respecto a que?

– ¿Desea volver a la Enterprise? – James caminó hasta un tablero en el interior del puente, con los dedos tecleando extrañas claves incomprensibles para Kirk, el joven miró en dirección de la nave que se aproximaba hasta ellos y un sensor de señalamiento la apuntó con luces rojas y marcas de alerta en un idioma desconocido, pero bastante claro en sus intenciones. Estaba listo para disparar – ¿O podemos permanecer juntos en este sitio?, no hay nada para mi fuera de la Vengeance… no entiendo, entonces, porque un padre no puede sacrificarse así mismo por su hijo…

El rostro de Jim empalideció aun mas, de ser posible. Tal y como Bones sugirió en aquel tiempo… ¿la sangre de Khan podía heredar la rabia, el sentido homicida y la demencia macabra?

– ¡Alto, Jim!, yo… tengo, TENEMOS algo fuera de este lugar… – Kirk se colocó tras el rubio y lo miró con una decisión que le recordó las muchas ocasiones en que intentó convencer a Pike de que sus decisiones no eran arbitrarias y que las reglas eran las culpables de todo lo malo que acontecía. El joven simplemente se quedó suspendido desde el momento en que lo llamó de aquella forma tan personal. – Y… tengo una idea…

…
Quizá pensaron que la historia iba por otros caminos, pero en si, la idea que había pensado era esto. Jim con un hijo de su peor enemigo y su compañero/pareja. Es la idea que tuve el día que salí del cine.
Paso a contestar un par de cuestiones que vale la pena aclarar. Muchas gracias por leer este Fic y espero que nos sigamos leyendo pronto.

P1: ¿Cada cuanto voy a actualizar?
R1: No tengo fecha o idea siquiera, jaja. Como no había escrito para el Fandom de ST, seguramente no lo sepan, pero no se cuando voy a actualizar, jamás tengo la idea, solo pasa. Como puede que lo haga en un lapso de 3 días, puede que me tarde semanas o 4 meses, así que cuando actualice pronto (tal y como en este caso, que fue dos días seguidos) mejor háganse a la idea que quizá me pierda un rato jaja. ¡No lo planeo así!, solo sucede. Disculpen las molestias (si llegaran a suceder).

P2: ¿Por qué no se pueden ver las imágenes del capitulo 2?
R2: Yo quise separar los enlaces únicamente por asteriscos (*), pero en el archivo de Word a Fanfiction se pusieron espacios que no había en el documento original. Revísenlo, los espacios del enlace completo. No los puse ahí, pero no puedo solucionarlo.

Y eso es todo por ahora. Cuídense mucho, como les dije, ojala nos podamos leer pronto.
By: Roglia15