In the Hope

Star Trek no me pertenece. Es una creación original de Gene Roddenberryy la película, de J.J. Abrams.

Con la mano sobre la muñeca del otro hombre, arrastrándolo a través de pasillos y corredores, Chris caminaba a grandes pasos tomado de la mano de su medio hermano. James tenía el cabello de color negro y sus ojos eran celestes, realmente se parecía mucho más a Chris ahora, pero sabía que eso era una infinitamente pequeña razón para haberle salvado la vida.

— ¿Qué estás haciendo, Chris?, ¡te meteré en problemas!

— Ya tenemos demasiados problemas, uno más no hará gran daño. ¡Ahora necesito que te concentres, James Kirk!, no puedes dejar que la sangre de Khan vuelva a dominarte o será nuestro final.

— ¿Kirk?

— Eso somos, ¿cierto?

El hijo de Khan miró de arriba abajo al medio vulcano, su indecisión desapareció y el Chris que se encontraba frente a él nada tenía que ver con aquel muchacho titubeante y sumiso que conoció en la Tierra. Él también había cambiado.

— El señor Spock, Khan lo utilizará para recrear un núcleo sin necesidad de destruir a padre, tiene un método perfecto que reduce el tiempo de experimentación de décadas en días.

— Entonces no podemos esperar… pero… ¿tú lo sabes, James?, sobre Khan… ¿sabes el por qué?

El ahora moreno miró en dirección de su hermano sin poder creer que esa inteligencia vulcana no pudiera descifrarlo por sí misma.

— ¿No es demasiado evidente? ¿O es tan retorcido que simplemente es inconcebible?... Khan, mi padre…

— ¡Es una besti…!

— MI PADRE al final de todo… intentar ocultarlo solo puede hacerlo volver… Khan, ese "súper-hombre" ama a papá Jim. En su retorcida forma, solo él presenta las características que él tanto ha deseado para su compañero, un hombre capaz de liderar a su lado, un hombre que pueda sostener el poder de un grupo entero de seguidores, de conquistadores, mostrarse altivo ante ellos, pero aun mantener aquel significado de pertenencia dentro de una "familia". Por eso no tolera al señor Spock, por eso intentó aniquilarte. Para Khan, ambos representan la corrupción de papá Jim, la inferioridad de eso que ellos llaman "amor" pero que para él no son más que un montón de necias dilaciones sobre el avance entre el importante hombre que puede llegar a ser y la mediocre criatura-esposo de un vulcano mestizo y padre de otro como aquel… eso es lo que Khan siente, Christophe. Eso le costará la vida al señor Spock… si no actuamos pronto.

El vulcano miró la seriedad en el rostro de James y suspiró cansado. Sabía que Khan estaba loco, pero aquello sobrepasaba cualquier límite sobre el cinismo.
¿Amor?, ¿Khan?... ¡deseo, sería!, porque el amor le impediría dañar a Jim de la manera en que lo había dañado. Si su padre corría tal peligro, debían movilizarse lo antes posible.

— No podemos regresar en la nave de la Federación o nos detendrán por desobedecer al capitán.

— ¿Papá es capitán ahora? — La sonrisa se asomó en el rostro de James. Finalmente su padre conseguía lo que había buscado todo ese tiempo.

— ¿No lo sabías?

— No… ¿eres teniente de nuevo?

— No, sigo siendo doctor, pero estoy a prueba.

Mientras los jóvenes observaban la escotilla que daba vista al basto universo, algo en la cabeza de James se activó, un recuerdo que podría serles de mucha ayuda.

— ¡Las coordenadas de Khan!, se encuentran en la sala de control. No es el lugar al que se dirigía, pero su gente se encuentra ahí. Alguna pista podremos obtener si nos acercamos y quizá custodien ahí al señor Spock.

— ¿La sala de control?, ¿no es ahí donde dejamos a padre y Legión?, no podemos regresar.

— Y no lo haremos… haré que las traigan aquí.

Concentrándose en niveles que pensaba imposibles, James cerró los ojos y buscó dentro de su cuerpo, manteniendo el mando de todas y cada una de las funciones de sus células, una acción imposible en términos sencillos. Su cuerpo poseía el compuesto de Jim, la sangre de Khan, vestigios de la Vengeance y todos los experimentos que su padre puso en él. No era humano, no era una máquina. Existía una conexión extrema entre todo lo que lo rodeaba, y todo lo que se encontraba fuera en el espacio. Su mente era capaz de liberar una sincronización que buscó dentro de aquella nave, un ente vacío que ocupar y que aun pudiera servir a su propósito, no utilizando su mente, pero si conociéndolo en un nivel extraordinario.

"Dentro de la memoria de control… la última localización… tráela… toma una salida para una nave especial… nos veremos en 6 minutos en la salida principal"

— ¿Qué haces, James?

— Vamos, nos esperan en la salida de la Vengeance.

— ¿"Nos esperan"?

O+O+O+O

— ¿Cómo…?

— Pasar la seguridad de la tierra no será fácil… debemos revisar todos los canales disponibles para acceder sin que den nuestra información a la Federación, ¿puedes hacerlo con los nuevos escudos de la actualización?

— Eso haré…

Christophe observaba a su medio hermano con verdadera intriga y una perplejidad que su rostro vulcano era nuevo en expresar. Aley Zulovich manejaba con maestría aquella pequeña nave de uso particular, con una mano sobre el panel de control y la otra sobre la pantalla, obviando cualquier pregunta en mente del vulcano mestizo, como por qué ahora parecía un hombre más, cuando hacia momentos lo había encontrado recostado inerte y casi putrefacto entre los brazos de su hermano. Su cuerpo seguía pálido en un tono azulado muy marcado, sus ojos no poseían brillo alguno y su cabello parecía haberse maltratado por años bajo un tratamiento de calor, pero todas sus funciones parecían perfectamente estables.

— James… ¿el coronel?

— Está bien, debemos preocuparnos por alcanzar la tierra antes que padre vuelva a contactar la Enterprise y haga que nos sigan.

— Creía que sus funciones corporales habían desaparecido por completo… ¿Cómo?

— Es definitivo, Christophe, es lo que necesitas saber. Su cuerpo fue incompatible con el compuesto que nos une a padre, Khan y a mí. Todos estamos conectados y todos dependemos de su estabilidad.

— Antes explicaste que esa cosa era una fuente de energía infinita, un arma peligrosa pero efectiva en desempeño a nivel celular. Eso evita que nuestro padre envejezca, pero también mantiene estable la energía de la Vengeance. ¿Cómo lo controla Khan, James?, ¿Cómo podemos detenerlo?

— No existe una forma exacta de explicarlo. Llámalo "sangre azul", pues hace que esta tome ese color. Cuando Khan descubrió que nuestro padre se encontraba de encargo, supo que él era parte de aquella minoría escasa de varones humanos con la capacidad evolutiva de dar a luz. De esta forma, padre se volvía candidato para albergar el resultado de un experimento que se llevaban años ideando, mucho antes de su confinamiento al sueño eterno… un compuesto que comunicaba el trabajo cerebral de un hombre con la materia, el espacio y el tiempo. Esta fórmula, en sangre de un humano, brinda un poder incalculable que podría destruir a su poseedor, si este no posee un núcleo apropiado. Como un cerebro humano posee la .000001 parte de la actividad que este proceso requiere, un núcleo de computadora es necesario, por ello Khan confiscó a padre en aquel sitio, para que su cuerpo se encontrara en contacto con el compuesto dentro y fuera de sí mismo y con el cerebro de la Vengeance. La sangre azul era estable en el cuerpo de padre, milagrosamente, pero cuando comenzó a salir una y otra vez del recetor, su cuerpo, fue necesario confiscarlo al núcleo de manera definitiva, mientras Khan buscaba la manera de obtener los beneficios de la sangre azul sin sufrir el deterioro que padre padecía.

Christophe aguardó un momento, mientras analizaba lo que había escuchado, cuando una duda sombría y muy triste ocupó su mente.

— Has dicho que ese compuesto los une, ¿cierto? ...¿Qué pasará si toda estabilidad se pierde?

James dio una última orden en el comando de la pantalla frente a ellos, dejó el objeto que antes manipulaba y se giró para ver directo hacia los ojos de su hermano vulcano. Solo había sinceridad en ellos.

— Khan, padre, Aley y yo moriremos. Es casi un hecho. Es necesario. Para destruir a Khan, la mejor y más segura forma será destruir el núcleo de la sangre azul definitivamente. De esta forma, Khan no tendrá oportunidad de vivir de manera eterna y nadie más podrá emplear esa peligrosa y cruel tecnología. Sin embargo… cuando este se destruya, definitivamente, nosotros también lo haremos. Ahora nuestros cuerpos son solo marionetas que no se terminan de descomponer y cuyas funciones cerebrales se sostienen sobre nada… es similar a ser un fantasma… padre pereció hace años… yo lo hice cuando ayudé al señor Spock a escapar y Aley murió hace semanas, siguiéndome dentro de la Vengeance y… — Aun cuando el coronel miraba en dirección del espacio, parecía que su vista no se dirigía a ningún sitio. James pasó una mano por su hombro derecho, pero este ni siquiera se inmutó. El hijo de Khan sonrió de una forma que casi evocaba la ternura y dejó al coronel seguir su destino. —…ya no creo que haya nada más por qué vivir.

— ¡Te equivocas!, ¡no puedes detenerte así sin más!, siempre hay motivos, no conoces nada fuera de la Enterprise o la Vengeance, me pides que te destruya para salvar a nuestro padre, ¡pero no lo haré!, buscaremos una forma, ¡juntos!, no te hagas el mártir más. Ahora sé que puedo cumplir mis sueños, pero mi familia es mi sueño también, no creas en todo lo que aprendiste de Khan ni en quien diga que no podemos lograrlo. Yo no te voy a dejar, estoy aquí, ¿no lo ves?

James estuvo por contestar aquello, pero se giró en dirección del fondo, donde los ojos decididos de Chris, tan parecidos a los de su padre, no lo atormentarían. Solo pudo responder al vulcano de la forma más segura que se permitió.

— Por favor, no insistas, busquemos a tu padre y vuelve a la Enterprise. Si tienes esos sueños, entonces rescata a tu familia y cúmplelos…

— No entiendes… — Chris quiso ponerse de pie, pero James de nuevo lo evadió.

— Ya sé que has aprendido a apreciarme, pero no es suficiente… una condena fue dictada y jamás esperé siquiera vivir lo que he vivido con ustedes. Un solo día en la Enterprise junto a padre y a ti fue como vivir mil años en libertad… fui libre, eso es suficiente para mí. Busquemos una solución si lo deseas, pero no hagas más por mí o saldrás lastimado de nuevo.

— Habrá una forma, si algo aprendí de todas esas historias de Leonard sobre padre es que siempre se puede hacer algo.

— ¡No se puede!

— Sé que se puede, ¿por qué no intentas vivir mis sueños conmigo?

— Solo les traeré problemas…

— No olvides que eres mi hermano, hagamos nuevos caminos…

— ¡Pero por qué no te callas!, ¿desde cuándo tanto optimismo?, ¿no eras tú el principal oponente de "esta familia"?, deberías sentirte aliviado…

Cuando Chris notó que James estaba cercano al llanto, supo por qué intentaba herirlo para orillarlo a pensar en dejarlo atrás.

— Pues parece que ahora soy menos vulcano que antes… tú tampoco aceptas las cosas como lo hiciste cuando te conocí. Comenzamos a parecernos más y más a padre… para mi mal.

— Te sienta bien…

— Gracias.

— ¿Dijiste "Leonard"?

— Ya somos novios… — Afirmó sin prueba alguna el joven vulcano. Algo parecido a una sonrisa se dibujó en su rostro. Finalmente, recuperó su calma.

— ¿Padre sabe?

— Es una posibilidad… — Recapacitó, ¿su nuevo "yo" mentía? — Sabe lo que siento, pero aún no termina de aprobarlo.

— Vaya, no sabía que estas cosas ocupaban tramite… — James se giró de nuevo en dirección de Aley y lo acompañó en el trabajo de dirigir la nave por una ruta que les permitiera entrar en la Tierra escondidos.

Chris sonrió divertido, pues aquel parecía James, EL James, de nuevo. Su respuesta parecía demasiado típica de su torpeza y eso alegraba al vulcano, pues significaba que Khan tenía probabilidades de ser erradicado en su sistema.

— Si encuentras la forma… — Comenzó a susurrar el moreno a Chris. Este se acercó hasta él, viendo que se encontraban a poco tiempo de entrar en la atmosfera de la Tierra. — Sálvalo a él…

Sin cuestionarse un solo instante, Christophe sabía a quién se refería su hermano menor y eso no lo hacía sentir menos ansioso. Ganar todo o perderlo no podían ser las únicas posibilidades y era seguro que si sus caminos eran escasos, y solo podía rescatar a la mitad de los involucrados, su padre y su hermano serían los elegidos. Que James se preocupara por alguien más que si mismo era tranquilizador, pero también muy triste.

— Le voy a decir a padre lo que has dicho…

James dejó escapar una carcajada sonora dentro de aquel pequeño compartimiento. Imaginar que habría algo después de todo "eso"… definitivamente eso era muy de Kirks.

— Yo no soy el mayor, será más permisivo.

— No dirás lo mismo cuando intente matar a Zulovich como a Leonard.

— ¿Eso qué más da?, yo ya me le adelanté.

O+O+O+O

— Esto tiene que ser una broma…

Mientras James acomodaba un último detalle en el cuello de la chaqueta que Aley vestía, Chris intentaba no rasparse los parpados inferiores con tanta presión.

— Entonces ya lo sabes, vuelve pronto. — Fue la última orden del moreno hacia el coronel, antes que este volviera a la nave y dejara solos a los hijos de Jim. — ¿Acaso conoces este sitio?

— Vine con padre hace poco… relativamente.

— Las coordenadas nos llevarán a Khan, pero también a una trampa, solo consiguiendo la máquina que controla las direcciones de todos los miembros de la Flota podremos comparar las coordenadas del señor Spock y las de Khan para asegurarnos que lo ha llevado con los suyos para comenzar la inyección de sangre azul.

El paisaje no era demasiado distinto a la última vez que estuvo ahí junto a Jim para "beber" un trago— que en realidad no bebió—.
La cantina o bar o sitio de mal a muerte, como Christophe prefiriera llamarlo, donde su padre casi hizo que le costara la carrera, aun con ese repulsivo ambiente de siglos pasados, las paredes oxidadas y el olor a licor barato por todas partes, acompañado de un pintoresco cuadro de hombres en cuero oscuro y marcas por todos lados. ¡Jamás olvidaría aquel lugar!
Pero también… sobre aquella acera, precisamente en ese sitio, su padre pasó el primer momento de plena convivencia con él, en todo el esplendor de su persona. Ahí conoció verdaderamente a su padre, no el hombre de los cuentos en las conversaciones de Bones o aquel sobre quien su padre omitía mucha información importante. Solo el sujeto que fue sometido a todo el sufrimiento del mundo para dar a luz un destino triste e injusto. ¡Era cierto!... una conversación quedó inconclusa en aquel sitio…

¿Alguna vez Spock te dijo…?

¿Qué quiso preguntarle Jim aquella noche?, ¿preguntaría si su padre lo amaba?, ¿o quizá si lo amaba a él?
James tenía que estar equivocado… pues él aún tenía mucho que vivir junto a Jim.

— ¡Hola!, ¡señorita!

— ¡James!, ¡No deberías…!

Su hermano, en otra de sus muestras típicas de torpeza profunda, corrió en dirección de una fémina que estaba estacionándose cerca de la entrada de aquel sitio. A pesar que debían esperar el regreso de Aley, pasar desapercibidos era crucial y en aquel momento James estaba por llamar la atención de todo el mundo con sus gritos y comportamiento infantiles.
Y venía algo todavía peor…

— ¡Tú!

— Shia… — Era claro que los eventos del bar lo habían marcado permanentemente y algo muy terrible tendría que suceder dentro de su cabeza para olvidar a la alienígena de piel azul profundo, de ropaje vulgar— a su parecer— y una voz chillona y molestan que se atrevió a cortejar a su padre, cuando su otro padre lo esperaba en su nave-casa. Y él era correspondido en rencor, por supuesto.

— ¿Volvieron por más, idiotas? — El parentesco de James, a pesar del renovado cabello negro, hizo que la mujer lo confundiera con su padre. — ¡Jen'ee!

Entonces el gigante de piel roja que antes los había golpeado, salió de la cantina con una velocidad de temer, dispuesto a pelear con quien fuera.

— ¿James? — Llamó el vulcano, pero su hermano no borraba aquella boba sonrisa de su rostro.

— ¿Se conocen, Chris?

— Si, vámonos ya…

— ¿Conoces a mi hermano? — Se dirigió el menor a la mujer. Esta revoloteó una cola enorme que antes no habían notado, con una cabeza de flecha en el final de esta, emitiendo el sonido de un látigo que azota el viento.

— ¿Pasó de hijo a hermano?, pues tu familia no es bien recibida por aquí, cielo. — El sujeto rojo comenzó a doblar y tronar sus nudillos, aumentando el nerviosismo de Chris por la seguridad de su hermano.

— ¿Qué hicieron tú y papá aquí, Chris?

— ¿Nosotros?, ¡Esta!… mujer, besó a padre en el cuello y su amigo lo golpeó en el rostro, ¡eso pasó!

— ¡Tú me golpeaste a mi primero!

— ¡Porque eres una resbalosa! — Concepto aprendido de Bones.

— No encuentro una relación entre la demostración de emociones con el concepto de fricción. — Respondió James al vulcano, tal como él lo hizo en su momento.

— Es una expresión…

— ¡Oh, Chris!, ¡ahora lo entiendo todo!, estabas celoso de la señorita porque esperas que padre y el señor Spock reanuden su situación sentimental pendiente.

— Espera… ¿realmente era tu padre?, ¿tú quién eres? — La mujer cruzó sus brazos frente a ella y dirigió una mirada de indignación hacia el par.

— Soy hermano de Chris, mi nombre es James y mi hermano te odia porque eres muy atractiva y teme que alejes a nuestro padre de su padre, Spock.

— ¿Hablas de tu otro padre?

— No, mi padre se llama Khan, su padre se llama Spock y nuestro padre Jim es a quien mordiste y golpearon aquí.

Chris tomó del hombro a James con fuerza para arrastrarlo lejos de ahí, pero su hermano siguió acercándose con entera firmeza.

— Suena a que tu problema no soy yo, cielo. Su padre no es precisamente un santo.

— ¡Hey! Es de mi padre de quien estás hablando…

— ¿No nos intentó decir algo sobre promiscuidad?, ¡claro!, durante la charla…

— ¿"La charla"? — Shia escuchaba todas y cada una de las palabras de James con atención, después detuvo al sujeto que antes llamara Jen'ee. Este solo se apartó del camino de la chica. — ¿Cuántos años tienes?

— 15, ¿tú también?

— ¡Ah, qué lindo! — La chica cambió su expresión a una llena de felicidad. Jen'ee se rió de la pregunta de James, pero de inmediato fue castigado con el codazo de la fémina. — Tengo 22.

— ¡JÁ! — Soltó el vulcano, con tanta ironía como le estaba permitida.

— Es que Christophe se encuentra tenso, siempre que hablamos dela charla, se pone así y se molesta y todo es muy incómodo. Papá dijo muchas cosas muy vergonzosas…

— ¡Lo sé!, ¿Qué les pasa?, nadie quiere escucharlo…

Durante todo ese momento, Chris pensaba que su hermano pasó de asesino sociópata a niño perturbado, pero no lograba comprender porque seguía comportándose de esa manera. No lo supo hasta ese preciso instante.

— Y todo eso sobre si has estado con alguien o no y tu padre mirándote fijamente a los ojos sin saber que decir o hacer, nervioso…

— ¡Lo sé!, Hajhala y yo discutimos todo el tiempo por lo mismo, no veo el día para dejar de vivir con Sho'lolá.

A la mujer comenzaba a gustarle James y eso mantenía tranquilo a Jen'ee. De tan solo un momento al otro, los chicos se encontraban dentro del bar, bebiendo—o fingiendo que lo hacían— junto al grupo de amigas de Shia y la compañía del gigante colorado.
Las habilidades de manipulación que James tenía no sorprendían demasiado a su hermano. Alguien tan seductor como James Tiberius Kirk y un sociópata con aires de emperador como Khan no podrían concebir a un hijo sin encanto alguno. En un segundo, el vulcano se encontraba preguntando a nadie si había corrido con mala suerte al heredar únicamente el temperamento obstinado de su padre terrestre y la indecisión y el aspecto de su padre vulcano.

— ¿Y de quien se están ocultando? — Preguntó una de las féminas del grupo, peinada con enormes coletas esponjosas de color verde oscuro y piel azul celeste.

— ¿Qué te hace pensar…? — Chris comprobó de nuevo que James era demasiado honesto, aun para su mal.

— Huimos de nuestros amigos porque mi padre, Khan, quiere que papá Jim viva con él, odia al señor Spock y queremos encontrarlo antes que le haga daño.

Fue sorprendente para el vulcano la facilidad con la que James resumió un conflicto de 20 años en tan pocas, pero tan certeras palabras.

— Una vez salí con un tipo así, ¿recuerdan? — Shia buscó la aprobación de las chicas y estas comenzaron a soltar comentarios y balbuceos inaudibles de indignación. — Fue E-s-p-a-n-t-o-s-o, no le perdonaré todas sus rabietas, ¡brindemos por eso!, vamos, "yulcano", tú también…

— Se pronuncia "vulcano"… y yo no… — Incomodo desde el principio, Chris aceptó que si intentaban pasar desapercibidos en aquel sitio alejado de la Federación y aun estando bajo el lente de una cámara—aun recordaba cuanto le había costado ello— sería extraño que no bebiera estando dentro de un bar. Dejó caer los hombros con resignación y tomó un vaso que se encontraba a su alcance, justo sobre la mesa donde la chica se encontraba sentada.

Cerró los ojos con esfuerzo y acercó aquel amargo licor al contorno de sus labios, justo estaba por beber aquel líquido cuando una mano extraña lo tomó de la muñeca con una presión opresiva, haciéndolo abrir los ojos al momento.

— ¡Christophe George Kirk!, ¿Qué carajo crees que haces?, ¡maldita sea!

Aquel sujeto arrebató el vaso en manos del vulcano, lo puso sobre la barra y jaló al par de jóvenes en dirección de la salida. Justo antes de toparse con la puerta final, Shia ordenó a Jen'ee que detuviera al "secuestrador". Para mal del gigante, desconocía por completo a aquel hombre.

— Fuera de mi camino…

Chris se soltó de aquel agarre tan molesto y se colocó en posición de pelea, pero James apenas y lo tomó mal, acomodando su chaqueta y girándose en dirección de las chicas.

— Nosotros nos despedimos, señoritas… esperábamos a nuestro invitado y ya que está aquí, debemos partir.

— ¿Estás seguro? — Preguntó con una voz más infantil la joven extraterrestre, fingiendo algo parecido al llanto. El moreno se limitó a asentir con una hermosa sonrisa y una mirada llena de determinación. — De acuerdo… déjalos ir, Jen'ee. ¡Vuelve pronto James!

— ¡Vuelve pronto, James! — Gritaron a coro el resto de las féminas.

Una vez que el gigante se apartó de la entrada, el trio salió de ahí justo para rencontrarse con Aley, quien había llevado una nave distinta.

— De tal palo tal astilla… —Pronunció el nuevo, por completo indignado.

Chris no dejaba de inspeccionarlo. Tenía la cabellera de un marrón oscuro por completo despeinada, ojos verdes azulados y un tono de piel rosado que le evocaba un extraño recuerdo que culminaba en una melancolía inexplicable. Vestía una playera demasiado ligera y unos jeans deslavados oscuros.

— ¿Y por qué están aquí bebiendo si es tan importante encontrar a Spock?, ¿Dónde está Jim?, ¿Qué ha sucedido todo este tiempo?, ¡Duende, no me mires así!

¡Era el doctor! Ese joven, acaso 5 años mayor a él era el doctor, ¡su Leonard McCoy!
De pronto su herencia humana hacia mella en su interior, su respiración se aceleró en tan solo un segundo y su mente perdió toda racionalidad en él.

— Ahora solo necesitamos a alguien más para seguir las huellas de Khan… y tú tienes un motivo más para probar que tus palabras no eran meros juramentos vacios, Chris…

El vulcano sacudió su cabeza y pasó de largo al doctor. Su hermano se aproximó hasta Aley, pero una vez que comprobó que se encontraba sano y salvo, lo dejó volver al interior de la nave.

— ¿A qué te refieres?

— Te digo que las heridas infringidas en el doctor han sido demasiado severas, sus días se encontraron agotados con mayor facilidad después del ataque perpetuado a la Federación.

— No… — Por supuesto que conocía a donde llevaba aquella conversación, pero quería pensar que no sería de esa forma. — ¿Cómo podrías?

— Envié a Aley a traer al doctor por cualquier medio…

— Duende, Jim 2.0, ruso estereotipado, debemos partir antes que nos alcance alguna nave de la seguridad en el hospital… — Sugirió Bones, antes de seguir su camino en dirección de la maquina donde Aley antes entró.

— ¿No había otra forma? — Insistió el vulcano.

— Si no le traspasábamos sangre, el doctor moriría pronto… ahora tienes a otra persona a la que salvar de la caída del núcleo, Chris… ¿te quedarás aquí lamentando o vendrás conmigo a Nuevo Vulcano?

Cuando el viento comenzó a soplar con mayor fuerza, el cabello de James casi cubrió su rostro, excepto por el área de los ojos. Su hermano pudo ver la determinación de su padre en ellos, pero también veía algo más importante oculto en ello, una súplica por la esperanza ciega en un futuro mejor al lado de su redescubierta familia.

— ¿Por qué vamos a mi planeta?

— Para poder ir al origen de todo esto… en el pasado.

O~O ~O~

Que puedo decir… el año pasado actualicé este fic solo en dos ocasiones. Se suponía que este capítulo se subiría en Noviembre, pero evidentemente no pasó.
No voy a dejar el fic inconcluso, ¡en lo absoluto!, pero tampoco actualizaré cada semana, ni podría siquiera definir una fecha para ello…

Este capítulo en particular es extraño porque solo tomé a Bones de los personajes originales y el resto fue sobre Chris y James. Creo que lo necesitaba para que el resto de las cosas por venir sean fuertes si quiero un conflicto de hermanos más grande (pues hasta este punto, recordemos que los chicos no tenían una relación definida). Además, quería dar una tercera explicación a todo esto de la "sangre azul" porque cada vez que toqué el tema, creo que confundía más a todos.

Por todo el tiempo que tardé, ya solo me falta agregar respuestas a las últimas preguntas respecto al fic que puedan ayudar a resolver el embrollo antes xD:

Guest: ¡Me hiciste notarlo!, ciertamente, el capítulo 13 tiene MUCHOS errores respecto al cambio entre "Chris" y "James" (reconozco que este lo subi sin volver a leer lo escrito—tal como este nuevo capitulo—, por eso ni siquiera lo noté hasta que te leí. Lo corregiré lo antes posible para no volver a crear esta confusión. Gracias :)
alexpotter: Intentaré continuarlo rápido para darle el final que merece, ¡gracias por comentar!, fue precisamente la alerta en mi correo sobre tu review que me hizo pensar "Es cierto, tengo este fic parado desde mayo del año pasado!". Intentaré resolver sus dudas.
Firefly of Blue Rose: En el capítulo 12, la confusión de Spock era porque se sentía incompatible con Jim en aspectos que parecían esenciales para una relación romántica. A pesar que lo amaba, tenía miedo de perderlo una vez que este descubriera que él jamás sería enteramente igual al resto de los que lo rodeaban y pensaba que quizá Jim podría llegar a aburrirse de él. Finalmente, tuvo miedo de convertirse en una persona siempre permisiva con Kirk solo para mantenerlo contento a su lado, un aspecto que se reveló cierto— desde su punto de vista— al perderlo en manos de Khan por permitir que siguiera sus irracionales impulsos humanos de valentía y determinación. Espero haber resuelto tu duda :D

Finalmente, no me olvido de todos los que leyeron esto desde el capítulo 1 hasta esta última actualización—no tan actual— y agradezco si lo siguen leyendo a estas alturas.
Nos seguimos leyendo! (espero que pronto).

By: R15