X-Men no me pertenece.

ADVERTENCIA: Mención de ideación suicida, cursilerías, "slow burn" x 1000

En el capítulo anterior se me olvidó decir que usé las letras traducidas de "Welly Boots" otra vez, aquí no las usé, pero quería dejarlo dicho.

Cierta parte de él se avergüenza de haber dicho "Eres importante para mí". Porque es algo raro de decir a alguien con quien apenas acabas de usar la palabra "amigos".

Porque lo común es no decir realmente lo que sientes por otra persona, solo suponer que el otro lo sabe y que tú sabes lo que sienten por ti, porque decirlo en voz alta es algo que queda bien en un niño, no en un adulto. Al menos eso creía el antiguo Erik, por desgracia, la guerra es una maestra cruel.

Erik se siente avergonzado de lo que le dijo a Charles, pero no se arrepiente. No quiere esconder lo que siente por otras personas, tampoco quiere guardar secretos. Por un momento creyó que lo diría, que podría decirle a Charles "Eres mi compañero destinado", porque quería que el telépata entendiera cuán importante era para él, pero no lo hizo por la misma razón que no lo dijo antes, porque todo este tiempo ha sentido que no es lo que Charles necesita escuchar.

Charles, quien ni siquiera está usando un suero que puede ayudarle a volver a caminar para sí mismo, sino que para que sea seguro para Jean el usarlo en el futuro. Ese último pensamiento le generaba sentimientos agridulces. Ya había notado lo especial que se había vuelto Jean para Charles, ¡Le cantaba una canción que decía "te amo" !, sabía que esto lo hacía porque la amaba y quería que fuera feliz, pero Erik no podía dejar de pensar en Charles pidiéndole que lo matara, en Charles diciendo que debió suicidarse.

Charles quería morir y no era que Erik no hubiera experimentado ese tipo de deseo nunca. Era horrible y no quería que su compañero destinado se sintiera así.

Quería a Charles vivo, feliz, a salvo… pero más importante, quería que Charles quisiera eso también.

¿Era aquello egoísta de su parte?

Constantemente estaba tratando de respetar los deseos de Charles, pero su deseo de morir no es algo que pueda respetar, ¿es eso algo egoísta de su parte?

¿Qué se supone que Erik debe hacer?

¿Cómo debe ayudar a Charles?

Habían pasado toda la noche en el laboratorio de Hank. Recién había amanecido, pero como Jean siempre había sido una niña madrugadora, ya estaba despierta, muy alerta, llena de energía y aferrada a Charles como si temiera que este fuera a quedarse nuevamente dormido sin decir nada más.

Pese a que podía suponer que tal vez Charles debería estar cansado con la situación de la menor aferrada a su cuello, en realidad el telépata parecía muy feliz con la situación.

Erik supuso que debía aprovechar el hecho de que ni Hank, ni Alex, ni Scott parecían haber despertado (durmiendo en otra de las habitaciones del laboratorio) para hablar de algo que solo les concernía a ellos tres.

—Jean— Nombró, logrando obtener la atención de la pelirroja. Le sonrió. —Tengo que decirte algo muy importante, por eso me gustaría que te sentaras bien— Jean miró a Charles, quien asintió sonriéndole a la menor, finalmente su hija soltó a Charles y se sentó encarando correctamente a Erik, incluso si se mantuvo en el regazo del omega, dirigiendo las manos del adulto hasta obligarlo a abrazarla.

Charles se dejó hacer y él trató de tragarse su risa. Le encantaba ver como Jean se había vuelto tan apegada al telépata y como esté siempre lucía tan alegre al respecto.

—Gracias— Ofreció primero. Miró a Charles un momento, seguro de que el otro sabía perfectamente de lo que quería hablar con la menor, Charles le sonrió de forma discreta y Erik finalmente logró hablar. —¿Recuerdas lo que Kurt dijo ayer?, sobre que Charles es…—

Jean asintió sonriendo, para mirar a Charles. El rostro de Charles lució levemente sonrojado.

—Lo recuerda— Comentó Charles en voz baja y sin conectar su mirada con la de Erik.

—Quería que habláramos de eso— Continuó. Charles alejó una de las manos que abrazaba a Jean para pasar sus dedos índice y medio por el centro de su frente con una curiosa sonrisa pensativa.

—Dice que ella siempre ha sabido que ustedes son familia y que está muy feliz de que yo me uní a su familia, pero que no sabía que éramos sus papás— Erik estaba feliz y triste al mismo tiempo.

Feliz hasta casi llorar por el hecho de Jean nunca parecía tener dudas sobre quién era Erik en su vida, su familia que la amaba.

Triste porque su hija no sabía que podía considerarlo como su padre, ¿qué pensó la menor todo este tiempo? ¿Simplemente se dijo a sí misma que eran familia y eso era suficiente?

Se enojó consigo mismo y su falta de cuidado emocional todo porque constantemente extrañaba a su amada Nina.

"A pesar de todo tu dolor, eres un muy buen padre para Jean".

Lo había estado haciendo mal, pero ya no quería hacerlo.

Soltó un suspiro bajo que terminó saliendo un poco entrecortado y se sentó en el espacio que quedaba en una de las orillas de la camilla, tomó una de las manos de Jean quien de inmediato se aferró a la suya.

Jean aún era tan pequeña, que cuando Erik cerraba su puño, la mano de la pelirroja quedaba oculta por completo. Quería poder quedarse con Jean hasta el momento en que creciera lo suficiente como para que Erik ya no pudiera ocultar su mano en la de él.

Notó la mirada preocupada de Charles, porque probablemente Erik se quedó en silencio más tiempo del necesario. Buscó sonreírles.

—Charles y yo somos tu familia, tienes razón y me haría muy feliz si quieres que sea tu papá— Y después supo que debía agregar. —Porque yo ya te veo como mi hija— Jean sonrió, Charles alejó sus brazos de Jean como si hubiera previsto el abrazo del que Erik fue destinatario.

Erik había querido usar "Que seamos tus papás", pero no podía hablar por Charles. Durante la madrugada el omega lucía entre complacido y perjudicado con el hecho de ser considerado "familia", pero no hablaron sobre Jean considerándolo "su otro papi", como Kurt amablemente había informado.

Pero claramente Jean no iba a dejarlo pasar como Erik trató de hacer.

Girándose a ver a Charles para decirle algo que claramente puso a Charles incómodo y entonces el omega lo miró a él como si esperara una respuesta de Erik, una respuesta a una pregunta que él solo podía suponer de qué se trataba.

—¿Qué dijo? — Le preguntó y Charles pareció recordar de golpe que Erik no podía escuchar la voz mental de Jean.

—P-preguntó que si entonces yo era su papá también— Y Charles lo miró como si esperara que Erik explicara que eso era ridículo.

Pero él se mantuvo en silencio.

—Yo no debería…— Comenzó Charles en tono bajo y devastado como si creyera que no merecía nada. Jean de inmediato lució decepcionada. Pero Erik le explicaría si esa era la decisión de Charles.

—Si tú quieres— Corrigió porque "debería" o "no debería" no era algo que tenía que influir ahora, lo importante era "querer" o… — O si no quieres, voy a estar de acuerdo— Logró decirle a su compañero destinado, quien amaba a su hija.

—Y-yo…— Charles se trabó con sus palabras, sus ojos se pusieron húmedos y la forma en que tragó saliva fue tan evidente que Erik no pudo evitar notar que aquello buscaba llevarse una presión en la garganta, muy familiar para él. —Me va a hacer muy feliz si me ves como a un papá— Finalmente logró decir, soltando unas pocas lágrimas.

Jean sonrió emocionada y Charles soltó una risa mientras se limpiaba el rostro. Erik cuestionó con la mirada sin poder dejar de sonreír.

—Dice que tenemos que abrazarnos los tres porque eso hacen las familias— El omega parecía estar de acuerdo, Erik se movió lentamente junto con su hija, esperando que Charles se negara, se tensara, se notara molesto o incómodo; lo que sí ocurrió fue que el abrazo con su amada hija y con su compañero destinado pudo ser concretado.

Erik tuvo una familia de tres miembros antes. Erik tenía una nueva familia de tres miembros ahora.

Amaba a la primera y había temido mucho perderla, pero nunca creyó realmente que eso pasaría y sin embargo pasó.

Amaba a su nueva familia y temía mucho perderla, constantemente sentía que podía pasar. No lo iba a permitir.

…

Charles nota la atenta mirada de Jean sobre él, por lo que termina alzando la vista del libro prestado entre sus manos (perteneciente a Hank) y aunque sigue esperando que la niña le transmita algo, no lo hace, continuando la acción de mirarlo, con una enorme cantidad de concentración, al notar que él la está observando finalmente Jean sonríe.

"¡Tienes algo en la cabeza!" Transmite emocionada y Charles lleva una mano a su cabeza sin cabello, aún si no entiende muy bien y porque Erik está ocupado bañándose y no puede preguntarle a él qué es lo que ve.

Y entonces lo siente, apenas perceptible y casi como si realmente no hubiera nada, pero ahí está, lo que parece el principio de la salida de cabello.

No, no podía ser… ¿sí?

Erik sale del baño, con pijama puesto y los ve. Él con la cabeza en su mano y Jean hincada frente a él abrazando al perrito rojo, mientras el gatito está en el suelo.

—¿Qué pasa? — Preguntó Erik, un poco preocupado, pero aun así luciendo relajado. Charles bajó la mano de su cabeza sin poder decidir si debía decirle que Jean había dicho que tenía algo en la cabeza o si debía preguntar directamente si él veía cabello, mientras se decidía, el alfa frunció el ceño en son de concentración, sin dejar de mirarlo. —¿Eso es cabello? — Cuestionó para acercarse a él. —Te está comenzando a crecer el cabello— Dijo Erik con simpleza y sonrisa relajada.

"¿Cabello?" Lo cuestionó Jean y él le sonrió mientras volvía a tocar su cabeza.

—¿Quieres ver? — Preguntó Erik, para sin esperar respuesta, ir y tomar un espejo de mano, entregándoselo. Charles notó que al espejo le faltaba un pedazo, pero más importante vio su rostro, con mejor color que la última vez que había logrado verse, (a través de los ojos de Erik), ya no tenía esa palidez tan enfermiza, incluso podía notar unas cuantas pecas que creía no habían estado ahí la última vez que vio su propio reflejo en el espejo, estaba un poco ojeroso, pero eso no le importaba, acomodó el espejo para poder ver el tope de su cabeza, encontrándose con puntos oscuros que claramente eran raíces de cabello.

Volvió a sonreír, alcanzando a ver las arrugas en los ángulos externos de sus ojos y en las comisuras de sus labios que se formaban en su rostro que no había presenciado sonriendo en mucho tiempo.

Después de que Erik le cantara a Jean, en alemán (a Charles le gustaba cuando Erik cantaba en alemán y eso era algo que jamás diría en voz alta), y después de que la menor se quedara dormida abrazada a Erik, gracias a que los tres futones seguían pegados porque Lensherr seguía ligeramente paranoico por lo ocurrido con el suero y aparentemente prefería tenerlo lo más cerca posible, Charles seguía tocando su cabeza y sintiendo las raíces de su nuevo cabello.

—Creí que eras joven para no tener cabello— Dijo Erik, como si no quisiera realmente hacer la pregunta sobre por qué hasta ahora Charles no tenía cabello, pero como si no pudiera con su curiosidad.

Charles no tenía nada en contra de explicarle a… su amigo.

—Cuando me capturaron, cortaron todo mi cabello— Explicó, colocando sus manos unidas sobre su abdomen, sin animarse a mirar a Erik.

—¿Por qué? — Charles encogió los hombros, pese a saber perfectamente la respuesta, respuesta que ofreció a Erik.

—Consideraban que el cabello intervenía con el buen funcionamiento de la máquina— Respondió, girando el rostro para poder ver al alfa.

Erik lució molesto al acto. Charles apartó la mirada sabiendo que no era molestia dirigida hacia él.

—Creí que no volvería a crecer, porque no recuerdo que volvieran a cortar mi cabello, ni siquiera lo vi en las mentes de los que se encargaban de vigilarme, pensé que podía ser un efecto secundario por estar conectado a la máquina tanto tiempo o que tal vez tenía que ver con mi estado de salud—

Su pésimo estado de salud.

—¿Crees que creció otra vez por el suero? — Charles lo veía también como una posibilidad, con la primera dosis ni él ni Hank esperaban que sus piernas recuperaran su movilidad, habían concluido que al menos se necesitarían tres dosis para notar realmente algún cambio y de ahí decidir realmente cuantas dosis serían necesarias para recuperar la movilidad por completo, pero lo cierto es que sí se sentía… "más saludable", era la única forma que encontraba para describirlo, la debilidad persistente previa disminuyó considerablemente, se sentía más fuerte, más alerta. Aunque lo cierto era que Charles estaba más preocupado por encontrar con Hank los cambios que debían hacerse para que no fuera doloroso y pudiera posteriormente ser usado en Jean.

—O porque ahora como todos los días— Agregó con un tono casi divertido, Erik se vio aún más molesto, para calmarse de inmediato y asentir.

Charles no pudo evitar el volver a tocar su cabeza.

Había sido un hombre vanidoso antes de la guerra, le gustaba cuidar su aspecto, su forma de vestir, su aseo personal y su cabello había sido pieza fundamental. Actualmente ni siquiera le había interesado su apariencia, cuando pudo verse después de un tiempo gracias a la mente de Erik, no le importó mucho; sin embargo, ahora no podía dejar de tocar su cabello y sentirse bien con el hecho de que estaba creciendo otra vez.

Sintiéndose un poco como su yo del pasado, concentrado en sus estudios de genética y en cuidar la riqueza de su familia mientras decidía en cómo podría ayudar a sus compañeros mutantes con ella.

—Es tonto, ¿verdad? — Dijo de repente en voz alta, preocupándose en ese momento de que tal vez Erik ya estaba dormido y él lo había despertado, Erik giró el rostro para mirarlo luciendo bastante alerta y provocándole un alivio instantáneo. —Estar feliz porque mi cabello está volviendo a crecer.

—No, no lo es— Aseguró Erik.

El alfa no uso un "creo que no", en su lugar le aseguró que no era tonto.

Y Charles recordó que el hombre frente a él le dijo que era importante para él.

Esa noche no hubo problemas para conciliar el sueño y aunque hubo pesadillas, a la mañana siguiente no las recordaba.

…

Scott vio a Charles, el otro papá de Jean y no pudo controlar que su boca se quedara abierta, porque no entendía lo que estaba viendo.

—¿Qué es eso? — Kurt lo miró mientras imitaba su boca abierta, Jean le sonrió al igual que Charles.

—¿Qué es qué? — Le preguntó el adulto con ojos muy, muy azules mientras el señor Erik lo acomodaba a la sombra del árbol de siempre, para después cargar a Jean para que pudiera saludarlos a ellos con un abrazo. Scott aceptó el abrazo, porque estar confundido no evitaba que le gustaran los abrazos de Jean.

—Eso en tu cabeza— Logró preguntar cuando Jean se volteó a abrazar a Kurt. El señor Erik sonrió en esa forma pequeñita y de lado que Scott siempre le veía hacer, excepto cuando le sonreía a Jean o a Charles.

—¡Es pelo! — Exclamó Kurt en un grito y apuntando a Charles. Su hermano le había dicho que apuntar no estaba bien, ¿debía decirle a Kurt?, pero más importante, ¿cómo que pelo?

—Pero creí que no tenías pelo— Jean se veía muy feliz.

—No tenía, pero ahora sí, porque está creciendo— Contestó Charles justo como hablaba siempre. Claro, el pelo crecía. Por eso era que Hank o Alex le cortaban el suyo.

—Ah, ok— Aceptó con calma, porque si eso era así, era así. —¿Puedo tocar? — Kurt junto sus manos haciéndolas puños, justo como hacía cuando estaba emocionado.

—Yo también quiero tocar— Scott no estaba muy seguro, pero creía haber escuchado al señor papá de Jean reírse, viendo cómo se inclinaba un poquito hacia Charles y él creyó que se besarían en sus bocas para despedirse como siempre hacían su hermano y Hank, pero en lugar de eso le dijo algo que él no alcanzó a escuchar, haciendo que Charles moviera su cabeza para hacer un sí y le sonriera como su hermano sonreía cuando Hank le decía que lo quería… no, ¡que lo amaba!

—Pórtense bien— Les dijo a la vez que despeinaba a Jean con una mano y después se fue caminando hacia el lado contrario de los cultivos.

Cuando dejó de ver al señor Erik alejarse, se dio cuenta de que Charles tenía la cabeza agachada y la verdad es que le dio poquito miedo, porque recordó el otro día cuando el señor Erik tuvo que llevar a Charles con su Hank. Cosa que había asustado mucho a Kurt y había hecho llorar a Jean. No quería que algo así volviera a pasar.

—Pueden tocar— Escuchó de la voz de Charles y volvió a sentirse tranquilo, acercándose junto a sus dos amigos a tocar la cabeza de Charles que antes no tenía pelo pero que ahora sí.

—Se siente más gracioso que antes— Comentó Kurt en medio de una risa. Scott estaba de acuerdo, Jean puso sus manos sobre su boca y Scott entendió que ella estaba de acuerdo también.

—Sí se siente más chistoso—

—¿Qué le hacen a Charles? — Preguntó una voz de mujer.

Scott se concentró en la mujer, dándose cuenta de que era la señora Mariko.

—Hola señora Mariko— Saludó Kurt a la vez que Jean alzaba una de sus manos.

—Estábamos tocando su cabeza, le está creciendo pelo— Decidió explicar ya que había recibido un saludo doble. La señora Mariko los dejó de ver a ellos, para sonreírle a Charles.

—Parece que eres popular— Scott tuvo ganas de comerse una manzana al ver la cara colorada de Charles.

—Nos llevamos bien, ¿verdad? — No entendió muy bien la pregunta de Charles, pero suponía que "bien" era algo positivo, así que decidió sonreír y gritar un claro sí.

—¡Sí! — Parecía que Kurt había coincidido con él, porque igualmente gritó junto a él, y parecía que Jean había estado de acuerdo con sus respuestas porque dio un brinco muy altote.

La señora Mariko se concentró nuevamente en ellos.

—Deben estar muy felices de que alguien tan increíble y que es un héroe, pase todos los días con ustedes y además les enseñe a leer y escribir— La señora Mariko tenía razón.

—Sí, Charles es increíble— Respondió Kurt y Scott había querido decir lo mismo, pero se quedó pensando y por la forma en que las cejas de Jean se habían juntado creía que estaba pensando lo mismo.

—¿Héroe? — Cuestionó. Uno de los libros favoritos de Scott (que Hank nunca se negaba en leerle) trataba de un héroe, así que sabía que los héroes eran valientes, protegían a todos y vencían monstruos.

Suponía que Charles sí que podía ser un héroe.

—Charles es un héroe porque ayudó a que la guerra terminara—

La guerra que siempre parecía entristecer a su Hank y a su hermano.

—No soy un héroe— Dijo Charles de repente, asustándolo un poco porque habló alto y Charles normalmente nunca hablaba tan alto como hablaba su hermano. —Si yo fuera un héroe, todos lo son también, Alex, Hank, los papás de Kurt, Logan, Sean, Darwin, Angel…—

—Erik—

—Claro que Erik es…— No entendió porque Charles no lo dijo, pero Scott sabía igual que todos sabían, que el señor Erik era un héroe, su hermano y Hank se lo dijeron antes.

Lo hizo feliz escuchar a Charles decir que su hermano y su Hank eran héroes, estaba seguro de que Kurt estaba feliz de escuchar que sus papás eran héroes y por supuesto Jean también lo estaba porque su papá y su nuevo papá lo eran también.

La señora Mariko se veía tan feliz como cuando su hermano lo abrazaba.

—Por supuesto, todos son héroes— Dijo la señora Mariko. —Ustedes también— Les dijo y Scott no creía ser valiente, no creía poder proteger a todos y nunca había vencido a un monstruo, pero le gustó lo que la señora Mariko dijo.

La mujer acercó a Charles lo que tenía en manos.

—Te traje esto— Dijo y Charles tomó el rectángulo verde más grande que sus libretas, pero más pequeño que las ruedas de la silla con ruedas.

—¿Qué es? — Preguntó Kurt acercándose a ver, Jean y él hicieron lo mismo.

—Es un pizarrón— Les explicó Charles. —Es para escribir sobre él—

—¿Cómo una libreta grande? — Preguntó Kurt. No entendía porque alguien querría algo así, pero tal vez era como Hank le decía que algunas cosas eran difíciles de entender porque aún era un niño.

Miró a Jean y ella lo miró a él. Sintió que Jean estaba de acuerdo con lo que él pensaba, incluso si su amiga no podía hablar. Sonrió.

—Unos pizarrones más grandes se usaban en las escuelas, aunque después se empezaron a usar unos blancos en los que podías escribir con marcadores— Les explicó el nuevo papá de Jean.

La señora Mariko acercó el puño a Charles y Charles puso su palma, sobre esta Scott vio crayones de colores que se veían un poco raros.

—Gises— Comentó la señora Mariko.

Cuando Charles acercó los que al parecer no eran crayones hasta ellos y pudieron tocarlos, Scott concluyó que no se sentían como crayones.

—Estos son gises, con esto se escribe en el pizarrón— Les explicó Charles.

—Logan y yo tratamos de reparar este pizarrón para ustedes, creímos que sería más práctico… o al menos divertido de usar— Explicó la señora Mariko.

—Gracias—

—Haré una cena en mi casa— Agregó de repente para colocar una mano en el hombro de Charles. —Bueno, digo "hacer una cena", pero en realidad solo es reunirnos a cenar todos juntos— La señora Mariko parecía estar muy feliz. —Les avisaré cuando haya decidido todo— Después vio una especie de pulsera en su muñeca. —Tengo que irme, tengo cosas que hacer, nos vemos Charles, nos vemos niños—

La señora Mariko era rara, aunque le agradaba.

…

Erik empujó la silla de ruedas, sintiéndose relajado.

Lo cierto es que el día de hoy no habían aparecido reparaciones sorpresas, estructuras de casas a medio construir cediendo por materiales podridos, mutantes con quejas. Había sido un día ordinario y lo cierto era que ahora Erik apreciaba lo ordinario.

—Oh, Mariko me dijo que quiere que mañana cenemos en su casa y la de Logan— Charles tensó los hombros. Jean se removió en la silla hasta lograr hincarse para poder ver a Erik por encima de uno de los hombros del omega.

Erik detuvo su caminar, en parte por la reacción de Charles y en parte porque no le gustaba que la silla de ruedas estuviera en movimiento cuando Jean estaba cambiándose de posición.

—Jean, te he dicho que tengas cuidado cuando estamos en movimiento— Jean encogió un poco los hombros, dejando en claro que en ese momento recordó perfectamente la advertencia previamente dada.

—Lo siento— Dijo Charles y Erik se sintió incómodo. Charles giró el rostro ofreciéndole una sonrisa. —Es lo que dice Jean— Él logró relajarse de nuevo. —¿Quiere que vayamos solo nosotros tres? —

—No, planea invitar a Alex, Hank y Scott, Raven, Azazel y Kurt— Al escuchar el nombre de sus amigos, Jean actuó tan emocionada que casi parecía que no habían estado los tres juntos recién. —Sean, Angel y Darwin—

—¿Es como una fiesta?, ¿celebran algo? — Erik recordó que Mariko no hizo mención de celebración en algún momento, solo dijo que quería que cenaran todos juntos y Erik, que constantemente tenía que recordar todo lo posible de todos, no recordaba algo que hubiera que celebrar. —¿Alguien cumple años? — Volvió a cuestionar Charles.

—No que yo recuerde— Y Charles le ofreció esa sonrisa burlona que parecía gustarle hacer (a Erik le gustaba que la hiciera). —¿Crees que no soy confiable? — Cuestionó con una sonrisa de lado.

—Te creo— Dijo Charles con una risa en sus palabras que realmente no fue liberada.

Por desgracia el tono divertido desapareció cuando Charles tensó nuevamente los hombros.

—¿Crees que sí debería ir yo? — Preguntó el omega como si deseara que la respuesta fuera no.

—¿No quieres ir? — Era verdad, lo más probable era que Charles solo iría ahí a sentirse nervioso en lugar de pasar una noche amena con amigos.

—No es que… es solo que creo que... no debería— Dijo incómodo. —Raven y Logan no confían en mí— Y después Charles alzó el rostro como si hubiera dicho la más terrible de las ofensas. —No es que me moleste, yo estoy de acuerdo en que no confíen en mí, pero no creo que les vaya a agradar que yo esté ahí—

Erik había entendido perfectamente la justificada desconfianza de Logan y de Raven, igual que entendía la razón por la cual algunos de los mutantes habitantes de la isla no estaban muy conformes con la presencia de Charles, pero ahora que conocía las circunstancias del omega, eso no le gustaba, tanto que su disgusto se volvió enojo. Era una situación parecida a las circunstancias de Azazel y Erik se sentía inútil porque era difícil cambiar la opinión de las personas, más si dichas personas se rehusaban a cambiar su opinión.

Pero no podía decir que Logan y Raven entraran en la categoría de personas que se rehúsan a cambiar su forma de pensar.

Lo cierto era que Logan era un desconfiado de primera, si ese hombre consideraba que una piedra no estaba donde la recordaba esa piedra podía ser una amenaza, así que ante su ausencia de quejas para con Charles desde la primera semana de estancia del telépata, justo después de que tuvo oportunidad de conversar con él, Erik había concluido que Logan, probablemente no confiaba en Charles, pero tampoco parecía verlo como alguien a quien mantener bien vigilado, un desastre a punto de ocurrir, dejándolos tranquilos, únicamente con una pregunta por aquí y por allá de cómo iban las cosas con el telépata, pretendiendo no estar realmente interesado.

Y su actitud de "no confío, pero tampoco desconfío" se volvió más favorable después de descubrir lo que Charles había hecho entrando a la cabeza de Sebastian Shaw.

Raven por otro lado había hecho lo que prometió, dejando de hacer comentarios a cada momento sobre por qué Erik debía tener cuidado con el telépata y de cómo no debía confiar en él, además de dejar de soltarle comentarios pasivo-agresivos (a veces olvidando la parte de "pasivos") directamente a Charles, optando por mantenerse alejada.

El resto de los invitados no le preocupaban a Erik.

—Pero la compañera de Logan es la que te está invitando, además, ahora que Logan sabe de tu papel en la guerra te respeta y Raven no va a estar en contra porque ella sabe que tú…— "Eres mi compañero destinado" fue lo que casi se le escapó, pero logró arreglarlo al final. —Eres importante para mí, además de que eres familia de Jean— Agregó mirando a su hija que parecía totalmente convencida de ir a la cena. —Pero si no quieres ir no iremos— Le dijo, no con molestia oculta entre palabras condescendientes, sino porque estaba totalmente de acuerdo.

Si su compañero destinado no quería ir, no lo obligaría a estar en una situación incómoda. Que estaba totalmente convencido de que si iban no habría ningún incidente y hasta sería bueno para que Charles entendiera un poco más la interacción entre las personas más cercanas a Erik era verdad también.

Jean se abrazó a Charles, probablemente cansada de estar hincada tanto tiempo.

Charles contestó el abrazo, acariciando el cabello pelirrojo que había estado un poco desarreglado.

—¿Tú crees que esté bien que vaya? — Volvió a preguntar Charles y aunque Erik creía que después de su explicación eso debía ser lo menos importante, al ver la mirada de Charles, decidió que no debía seguir dando respuestas difusas.

—Sí, creo que estará bien— Le dijo sonriéndole. —Tal vez Hank y Sean se emborrachen y esos dos siempre son muy graciosos ebrios, créeme que no quieres perderte eso— Charles soltó una carcajada.

—Ok— Dijo el omega con llaneza, mientras le sonreía a Jean.

Erik estaba más que satisfecho con la respuesta.

Muchas gracias por leer y comentar.