X-Men no me pertenece.
ADVERTENCIA: Clichés, cursilerías que pueden dar cringe, gente dañada… este… noporcito (no es noporzote, quiero que quede claro).
Notaba algo diferente en Erik.
Su aroma le permitía percibir felicidad y mucha; sí, Raven tenía que admitir que conforme su alfa líder fue conviviendo más y más con el telépata, su aroma fue adquiriendo un mayor toque de serenidad y felicidad, pero ahora era diferente.
Algo había pasado.
Erik no había lucido como si quisiera huir en cuanto algún mutante quiso conversar con él, tampoco hubo ningún comentario mordaz intercambiado entre él y Logan, simplemente parecía estar cómodo.
A Raven le gustaría pensar que una conversación sobre lo que sentían por el otro, (con Charles), había ocurrido, pero conocía al imbécil de su alfa líder y la única forma en que eso ocurriría sería que Charles iniciara la conversación; no conocía tan bien al omega como para afirmar que así sería, así que tal vez algo más había pasado, una forma simple en que la familia de Erik le había demostrado lo apreciado que era, porque así era el hombre, siempre apreciando las muestras de afecto, fueran grandes o pequeñas.
Mientras caminaba al encuentro con su pequeño Kurt, recibiendo permiso de un alfa líder ocupado, notó a Alex y Sean hablar justo en donde terminaban los cultivos, probablemente Alex estaba a punto de ir al encuentro con su hermano menor, pero había terminado conversando un momento con el relajado beta.
—No te creo— Dijo Alex a lo que Sean respondió con una sonrisa floja, sin rastro de que se sintiera ofendido por la clara y honesta falta de confianza de parte del rubio.
—Es la verdad, yo los vi y Hank también los vio— Ante tal respuesta, Summers pareció incapaz de decir algo más, incluso si lo intentó, ella decidió que necesitaba saber qué era lo que Alex no podía creer.
—¿De qué hablan?, ¿es algún chisme jugoso? — Ambos lucieron sorprendidos, pero ninguno pareció molesto con su presencia. Sean sonrió, parecía muy feliz de poder contarle a alguien más aquello que Alex se rehusaba a creer.
—Vi al jefe y a Charles besarse— Siempre creyó que esas escenas de película en las que alguien estaba tomando alguna bebida y de repente recibían una noticia impactante y se ahogaban y comenzaban a toser era una exageración, una escena simplemente creada por el dramatismo que Hollywood tanto amaba, pues no, Raven acababa de atragantarse con su propia saliva.
—¿¡Qué!? — Exclamó en medio de la tos con la que su cuerpo trataba de evitar una muerte por ahogarse con su propia saliva.
—Sean, no creo que debieras estar contando algo que no tiene nada que ver contigo— Riñó Alex en ese tono que había desarrollado para mantener a Scott disciplinado, funcionaba con el niño, pero el encogimiento de hombros de Sean y su claro desinterés eran pruebas fehacientes de que, con él, no funcionaría.
—Se estaban besando ahí en medio del laboratorio, no creo que lo vean como un secreto o que tenga algo de malo que yo hable de ello— Alex parecía querer agregar algo más, pero ella, finalmente recuperada, exteriorizó sus caóticos pensamientos.
—¡Qué mierda! — Sí, gritar aquello se había sentido bien. —¡Necesito hablar con Erik! — Y regresó sobre sus pasos, sabiendo que a Kurt no le molestaría estar un poco más de tiempo con sus amigos y al cuidado de Charles… el compañero destinado de Erik y con el que al parecer se había besado en el laboratorio.
—Raven— La llamó Alex, tal vez pudo percibir un ligero toque de preocupación, pero no le dio mucha importancia.
No fue difícil encontrar a Erik, seguía en el mismo lugar en el que se habían separado y ella era una corredora rápida.
—… hablaré con Darwin para que busquemos una forma de resolver tu problema, pero tienes que saber que… ¿Raven? — Erik la miró con el ceño fruncido, liberando un aroma amenazante, no hacia ella, sabía que iba dirigido hacia la supuesta amenaza que tenía a Raven corriendo.
Logan respondió de manera apropiada ante la que él consideraba una amenaza desconocida.
—¡Lo besaste! — Exclamó, atrayendo la atención de algunos presentes y calmando a Logan, que pasó de lucir alerta a notarse contrariado para finalmente soltar una carcajada al ver el nerviosismo de Erik.
—¿Qué estás…? — Intentó decir el alfa líder para luego exclamar entre dientes. —Sean—
—¡Es verdad! — Aunque confiaba en la palabra del hombre beta, no pudo evitar soltar un nuevo grito ante tal confirmación indirecta. —No puedo creer que lo hicieras, no tenía nada de fe en ti…— Erik lucía avergonzado, pero ocultándolo con un ceño fruncido y dientes apretados. Iluso, el sonrojo no podía ocultarse detrás de ese ceño. —De hecho, no puedo creer que…—
Raven había tenido una relación con Erik, lo conocía. No hubo una declaración. Raven le sugirió que tuvieran sexo, Erik aceptó, ella le dijo que deberían se exclusivos y Erik comenzó a llamarla "su novia" ante terceros, a ella no le había molestado aquello, por lo que respondió explicándole a cualquiera que preguntara que sí, "ella y Erik estaban en una relación".
Sonrió.
—Charles fue el primero en decir algo— Exclamó, sin preguntar, el sonrojo de Erik aumentó, dejando de fingirse enojado, Logan soltó una nueva carcajada.
—¡Tú cállate! — Ordenó el oh, todopoderoso y elocuente alfa líder.
—¡Ay Dios, lo amo! — Explayó feliz, dirigiendo sus sentimientos hacia el compañero destinado de Erik. —Necesito verlo— Aclaró comenzando el camino hacia donde se encontraba el omega, su hijo, Scott, Jean y Ororo.
—Raven— Advirtió, pero ella continuó caminando a paso rápido. —¡Raven! — Insistió Lensherr tomándola del antebrazo, logrando detenerla. —No le he dicho que somos…— Cerró los ojos e inspiró profundo. Claro, típico Erik, se liberó del agarre con facilidad.
Una vez cerca del lugar habitual en el que Charles cuidaba de los niños, con su voz animada conversando con sus pequeños estudiantes, en compañía también de Alex y Sean, el primero siempre se mantenía haciéndole compañía a Charles hasta que Erik apareciera y el segundo seguramente se había quedado porque quería ver lo que pasaría cuando Raven hablara con Lensherr.
Raven (sabiendo que Erik estaba detrás de ella) sonrió con un toquecillo de malicia, corriendo para abrazarse al omega.
—Raven— Exclamó el hombre entre confundido y claramente dudoso en si debía incomodarse o no.
Los niños rieron.
—¡Abrazo! — Exclamó su hijo para que ella sintiera a los cuatro menores unirse al enlace.
Charles notó la llegada de Erik y, aunque aún confundido, pareció descartar la posibilidad de incomodarse con el abrazo; Raven notó que el alfa líder quería alejarla lo más rápido posible del omega que amaba, pero se contuvo.
Decidió que era suficiente de sonreírle con malicia a Erik y se concentró en aflojar levemente el abrazo con Xavier para poder verlo a los ojos.
—Me hace muy feliz que tú no seas…— No le importaba que Kurt escuchara las palabras "idiota" y "estúpido", también dudaba que a Alex o a Charles les importara, pero no creía que Ellie y Yukio estuvieran de acuerdo con que su hija escuchara tales palabras, así que se censuró. —Tonto, como este alfa que…— No sabía realmente si se habían dicho que se amaban, todo lo que sabía era que se habían besado, por lo que no usó la palabra "Amor". —Besaste— El rostro de Charles adquirió color, pero mientras Erik trataba de esconderse detrás de ceños fruncidos, el omega no parecía avergonzado o amedrentado, de hecho, solo lució un poco nervioso (solo el instante que le tomó procesar que Raven estaba muy lejos de sentirse "enojada"), mirando a Erik como si buscara seguridad, para luego estirar un poco más el cuello con un deje de orgullo, sin dejar de reír levemente.
—¿Charles y el señor Erik se besan? — Escuchó a Scott cuestionar.
—Mhm, Scott…— Alex intentó silenciar a su hermano menor, el pequeño Summers lució confundido.
Decidió que era momento de romper el abrazo, disfrutando del hecho de que Erik actuaba como si estuviera recibiendo una enorme humillación pública.
Dramático.
—Claro que se besan, los papis se besan, ellos son los papás de Jean, así que tienen que besarse— Explicó su hijo, convencido de lo que decía.
—Pero nunca los he visto, ¿tú los has visto Jean? — La pelirroja asintió sonriente. —¿Por qué yo no los he visto? — Cuestionó Scott, para distraerse viendo a Ororo. —¿Tus mamis también se besan? — La peliblanca sonrió.
—Sí— Afirmó con muchos sentimientos felices.
—Nunca las he visto tampoco—
—Scott, hay gente que es muy privada con respecto a sus demostraciones de afecto— Explicó Alex, dándose por vencido con el intento de hacer que su hermano menor dejara aquello por la paz.
—Y hay otras personas que se besan en laboratorios donde cualquiera puede verlos— Agregó.
¿Confundió a los niños? Sí.
¿La cara avergonzada y que prometía torturarla mientras él claramente se torturaba a sí mismo, visible en el rostro de Erik hizo que valiera la maldita pena? Obvio.
Charles no dejó de sonreír, tomándose aquello de muy buena manera.
Ya. Era definitivo, lo convertiría en su mejor amigo.
…
Se estaba estresando, quería una respuesta sencilla, "sí o no", pero con Hank nunca era así de sencillo.
—Yo no puedo ser el que tome la decisión, jefe—
—¿Por qué no?, solo dime, ¿crees que debo decirle o no? — No estaba preguntando algo imposible, pero Hank actuaba como si cualquiera que fuera su respuesta cambiaría el destino de una guerra inexistente.
—Jefe, no puedo asegurarte que Charles lo tome bien, pero tampoco puedo recomendarte no decirle, es algo que le concierne, merece saber— Erik mentiría si dijera que esperaba que le dijeran que lo mejor era no decirle a Charles que ellos eran compañeros destinados. —Además la verdad tiende a ser algo que siempre sale a la luz, uno lo quiera o no, esté listo o no, no considero que "no decirle" debiera ser una opción, por tanto, ¿no sería mejor decírselo bajo tus propios términos? —
Jodido Hank.
—Pero, al final, no soy yo el que debe tomar esa decisión, sin importar lo que yo te diga o deje de decir—
…
Además de Raven que le había solicitado (exigido) una confirmación verbal, nadie más lo había obligado a expresar en voz alta el nuevo estado de su relación con Charles.
Recibía sonrisillas de sus amigos más cercanos y el resto de habitantes de Genosha ni siquiera parecían notar que algo había cambiado.
—… el hecho de no tener su mutación, claramente le hizo más fácil conseguir un trabajo, también encontró un lugar donde vivir, así que tiene cubiertas sus necesidades básicas— Erik asintió al escuchar el informe de Angel con respecto al estado de Warren.
—¿Aceptó la comida? — La mujer omega tensó la mandíbula y negó con la cabeza.
—Igualmente la dejé con él, aunque imagino que la va a tirar— Sí, Erik podía ver eso pasando.
—¿Habló contigo? —
—Solo un poco— Podía ver la tristeza en el rostro de Angel, su preocupación por el hombre alfa. Esa clase de aprecio por otra persona, podía llevar a alguien a traicionar.
—Angel, no puedo permitir más ayuda de la que le ofrezco a través de ti y más que ayuda, lo hago porque no quiero que muera fácil— Tenía que sufrir el bastardo. —Y porque no quiero darle oportunidad a que cause problemas— La omega alzó las cejas casi imperceptiblemente, dejándole ver que se sentía sorprendida.
—Erik…— Salvadore negó con la cabeza, aunque Lensherr no creía que aquello fuera dirigido a él, parecía ser dirigido a sí misma. —Jefe— Volvió a nombrar, últimamente Erik sentía que ya no debía corregir a nadie que lo llamara por ese título. —Tú eres mi alfa líder, mi lealtad está contigo, con Genosha— Remarcó con voz firme. —Con Darwin— Agregó inmediatamente después en un susurro. —Sé que lo que haces por Warren no es porque creas que lo merece, lo entiendo y no espero que hagas más por él que lo que ya permites— No percibía ni un ligero toque de mentira en lo que la morena decía. —Pero Warren es mi amigo y sufro por él, tal vez siga haciéndolo, pero eso no debe ser un motivo de preocupación para ti, te aseguró que mi sentir no te traerá problemas— Angel no podía hacer tales afirmaciones, las emociones y sentimientos de las personas no se mantenían rígidas, eran cambiantes y flexibles y por esa misma razón, podían traer situaciones problemáticas.
Eso era lo que le transmitía la parte racional de su cerebro, pero la parte instintiva en él, la parte que sentía que Charles era su compañero destinado, la parte que no le permitió matar al omega que ahora amaba, le decía que la lealtad de la mujer omega era real, que no había ni un rastro de duda, la omega olía a verdad.
—Entiendo, Angel— Salvadore era una persona fuerte, claramente independiente, no estaba muy interesada en exigir aprobación o atención, pero era una omega y Erik era su alfa líder, percibir como su aroma adquiría un toque de "felicidad", era algo esperado, pues eran la clase de cosas que ocurrían en una manada. —Confío en ti, si no fuera así, no te permitiría a ti específicamente supervisar a Warren— Una sonrisa discreta se posó en el rostro contrario. —Si no hay nada más que decir— Erik miró el cielo despejado. —Puedes regresar a tus actividades habituales— Aunque la mujer asintió, no dio ni un paso para alejarse de él. —¿Necesitas informarme de algo más? — La sonrisa discreta se volvió ligeramente más amplia.
—Según lo que me dijeron, creo que "felicidades" es algo que debería decir— Erik desearía tener la capacidad de detener su rostro de adquirir una tonalidad rojiza.
Malditos miembros de la manada chismosos, no lo respetaban ni un poco.
—Felicidades, jefe— Remarcó la mujer para finalmente dar media vuelta, comenzando con los pasos para alejarse de él.
Inspiró profundo, para centrar su atención en Logan, que lo miraba desde un punto cercano, recargado en un árbol, con cigarro en mano, ceja alzada y una jodida sonrisilla altanera.
Mostrarle su dedo medio fue bastante placentero.
…
Parecía un día bastante habitual.
Aunque recientemente se había agregado algo diferente a su rutinaria (y hermosa) vida en Genosha.
Alex estaba abrazando a su hermano en son de saludo, Kurt y Ororo hablaban con Jean, pues sus respectivas mamás aun no llegaban.
No estaba seguro de qué era lo que lo había hecho voltear, porque no se había sentido observado, era solo que había percibido un extraño toque cálido en su mente que no se permitió sobre pensar, simplemente giró su rostro, encontrándose a Erik en su camino hacia Jean y él.
Le sonrió al alfa, quien primero se enfocó en alzar a Jean en brazos, pues no existía otra forma de responder a la de la pequeña pelirroja que había corrido al encuentro con su papá; para que luego, cuidando que la menor estuviera cómoda en sus brazos y sin dejar de abrazarla, se inclinara hacia Charles, iniciando un corto beso de "bienvenida".
No pudo evitar que sus labios se curvaran hacia arriba ante el toque, que pese a ser casto y hasta extrañamente inocente, se sentía como si recorriera todo su cuerpo.
—Sucios, enfrente de los niños— Exclamó Raven, de forma claramente bromista y juguetona, cargando a Kurt, Yukio sonreía feliz mientras abrazaba a Ororo y Charles no podía no ver la forma en que Alex trataba de ocultar su sonrisa.
Erik tenía un gesto de irritación y en el pasado Xavier se habría preocupado al creer que aquello realmente afectaba al alfa, porque su interacción con Charles solo le podía traer problemas y sentimientos negativos.
Pero ahora solo podía verlo claramente como lo que era, Erik fingiéndose molesto porque estaba avergonzado. El alfa apartó su mirada de las otras personas presentes, enfocándose en él y relajando su rostro. Charles no podía fingir que no veía el amor que Erik le había dicho con palabras que sentía por él.
—Vámonos— Le dijeron, más como una solicitud de que se alejaran rápido de toda esta gente, que como una orden llena de ira.
El sonido escandaloso de un par de gargantas limpiándose, interrumpió su asentimiento de cabeza.
—En realidad…— Alex desvió la mirada muy discretamente a Raven. —Jefe, Charles, quería saber si podían dejar que Jean se quede a dormir en nuestra casa, mañana es el cumpleaños de Scott—
—¡Mi cumpleaños! — Exclamó Scott feliz con aquella parte de la información.
—Sí— Afirmó Summers, mirando a su hermano, para luego regresar su atención a él y Erik. —Así que pensé que esta sería una buena idea, Kurt también va a quedarse y Ororo— Las dos mujeres adultas sonreían complacidas, así pues, Xavier solo podía concluir que ambas eran conocedores de tal información.
—¿Me voy a quedar a dormir en casa de Scott? —Cuestionó Ororo irradiando felicidad.
—¡Sí! — Afirmó Yukio.
Kurt, aun en brazos de Raven comenzó a balancear sus piernas ligeramente.
—Yo también, ¿verdad mami? —
—Sí— Confirmó Raven, alargando la "I".
"¡Quiero dormir en casa de Scott y estar con Scott y con Ororo y con Kurt!" Transmitió Jean enérgicamente, provocándole una leve punzada dolorosa que le obligó a cerrar los ojos y soltar un muy discreto quejido.
—¿Estás bien? — Cuestionó Erik de inmediato, alarmado.
—Sí, es solo que Jean, está muy emocionada de poder quedarse en casa de Scott— Ante su respuesta, la preocupación de Erik desapareció, así como la posibilidad de dar una respuesta negativa ante la petición de pijamada en la casa Summers-Summers-McCoy.
Charles no quería pensar mucho en la sonrisa efusiva de Yukio, en el guiño coqueto que Alex le ofreció y en como Raven había mantenido una mirada retadora para con Erik hasta el último minuto.
Era así que Charles y Erik habían terminado de regreso en casa, sin su pequeña hija.
Charles intentó actuar como cualquier día (noche) con Jean en casa. Jugaron ajedrez, cenaron, tomaron un baño (por separado) y ahora estaban dispuestos a ir a dormir.
Recostados en su respectivo futón, uno junto al otro, Charles sabía perfectamente lo que su yo del pasado habría hecho, teniendo tal oportunidad de estar a solas con la persona que amaba, él ciertamente estaba del lado contrario del espectro asexual, sentía todo tipo de atracción hacia Erik, sexual incluida, el alfa era, sin lugar a dudas, una visión muy… atrayente.
En el pasado, para Charles, el sexo era algo tan natural y fácil de llevar a cabo como caminar. En la actualidad caminar no era algo natural ni mucho menos sencillo, así que lo mismo ocurría con el sexo, ¿sentía deseo sexual?, por supuesto, ¿estaba dispuesto a satisfacer ese deseo?
Erik había dicho que lo amaba, lo besaba haciéndolo sentir amado y deseado, pero ¿querría intentar tener sexo con alguien que apenas podía mover levemente sus piernas?
Charles ni siquiera sabía si sería placentero… para ninguno de los dos.
Estaba asustado.
Pero también estaba cansado de dejar que el miedo quisiera controlar sus acciones y decisiones.
Y siempre que se había permitido ser valiente, había sido recompensado.
Se permitió unos cuantos segundos de solo mirar al alfa frente a él, siendo solo interrumpido por su propio parpadear.
Inspiró profundo y movió su cuerpo hasta estar lo suficientemente cerca como para comenzar a besar a Erik. Lensherr recibió su beso con bastante interés, colocando una de sus manos en el rostro de Charles y la otra pasándola sobre su cuerpo, acercándolo suavemente un poco más hacia él.
La mano que no estaba proporcionando caricias ligeras a su rostro, lentamente fue encontrando su camino hasta el borde de la camisa holgada que portaba, escabulléndose por debajo de esta, adquiriendo contacto directo con la piel de su espalda, liberó un suspiro aun en medio del beso y justo después de aquello la mano desapareció y el beso se detuvo.
—Yo, eh… no…— Erik parecía deseoso de seguir besándolo, pero también lucía indeciso. Charles necesitaba sentarse, por lo que así lo hizo. El alfa lo imitó.
—¿Sí tendrías sexo conmigo? —
—¿Qué? —
—¿Sientes atracción hacia…? — Esto.
Sabía que su cuerpo había dejado ese aspecto enfermizo de antes, tenía un peso más saludable, estaba bien alimentado e hidratado, sus músculos habían adquirido un volumen más apropiado gracias a la rehabilitación de Hank.
—Claro que… Charles, por supuesto que quiero tener sexo contigo, ¿cómo podría no sentir atracción por…? — Erik paseo su mirada por cada rincón del cuerpo de Charles que podía ver, le provocó un calorcillo en el vientre y en las mejillas y ciertamente se sintió deseado. —Ti— Era aterrador como una sola frase de Erik era suficiente para disipar cualquier sentimiento negativo en su corazón, pero también era increíblemente reconfortante. —Es solo que… si dejaba en claro mi deseo de tener sexo contigo, temía que tal vez eso te hiciera sentir que no estas a salvo… conmigo— Por supuesto.
Le sonrió al alfa.
—Siempre me siento a salvo contigo, Erik— Sus palabras disiparon un extraño pesar que había estado notando en el rostro de Lensherr.
—¿No te va a hacer sentir incómodo? — El alfa cuestionó en un susurro, bajando la mirada sin atreverse a mirarlo a la cara. Por supuesto que el hombre que amaba iba a estar preocupado de no incomodarlo.
Deseaba poder disipar aquello con una simple negación.
No podía.
—Erik, estoy incómodo y asustado— Erik encogió los hombros, como si quisiera esconder la cabeza. —Pero no por ti o de ti, es solo que la última vez que tuve sexo, mis piernas no…— No tenían problemas para moverse. —Y yo aún era un omega— Concluyó sonriendo, pero inevitablemente sintiendo sus ojos humedecerse.
Erik se acercó a besarlo en los labios, luego en la comisura de estos y finalmente abrazándolo contra él.
Un nuevo beso fue colocado en su cuello.
—Si quieres parar, solo dilo— Sonrió ante las palabras del alfa.
—Si quieres parar, solo dilo— El abrazo fue liberado, incluso si sus manos seguían en el cuerpo de Erik y las de él seguían en contacto con Charles. Guardó la sonrisa de Lensherr en su memoria cuando este lo escuchó repetir sus palabras.
Sus rostros se acercaron y un nuevo beso comenzó.
Lento y sin prisa, cada uno comenzó a quitarse la ropa, alejándose solo el tiempo suficiente sin atreverse a apartar la mirada del otro.
Erik terminó por ayudarlo a quitarse el pantalón cuando él ya se encontraba únicamente en ropa interior, él paseó su mano por entre el cabello de Erik satisfecho al ver como la piel del alfa se erizaba y como claramente su pene comenzaba a mostrar bastante interés en las acciones que estaban realizando su dueño y el amante de este.
Rodeó el cuerpo del alfa con sus brazos, bajando las manos lentamente por la espalda, sabiendo que su toque no sería impedido.
Erik acomodó su cabeza sobre su hombro, dejando besos por toda la cara lateral de su cuello y comenzando a bajar hasta su clavícula; su propio pene se notaba más y más interesado entre más y más besos recibían.
Él no pudo luchar con el deseo de igualmente besar toda la extensión de piel que podía alcanzar.
El roce de dientes contra su hombro que no podría llamar mordidas realmente, terminó por arrancarle gemidos reales y no solo suspiros llenos de placer.
Charles siempre se admiraba del hecho de que con la persona correcta y con la compatibilidad adecuada, hasta el jugueteo previo llegaba a ser increíblemente satisfactorio.
Bajo su mano hasta poder acariciar el miembro de Erik por encima de la ropa interior, disfrutó del gemido ronco del alfa, para verlo alejarse con presura.
Por un momento creyó que lo había incomodado, pero resultó que el otro se quitó su ropa interior quedando completamente desnudo y de pie frente a Charles, no era que nunca hubiera visto al otro desnudo, después de todo ya llevaban viviendo juntos un tiempo, era inevitable, era solo que nunca se había permitido disfrutar tal visión con lentitud y sabiendo que lo tenía permitido por el dueño de dicho cuerpo.
Erik caminó hasta el comedor, regresando con un pequeño bote blanco, lo colocó en el suelo junto a los futones, posteriormente hincándose frente a él, ayudándolo a retirar su propia ropa interior, haciendo todo de la forma más rápida que podía lograr sin ser brusco.
—¿Qué es eso? — Cuestionó en medio de todo.
—Eh— Soltó Erik. —Lo hace Sean, es lubricante—
—Oh— Pensó en preguntar si todos en Genosha sabían que esa noche Erik y Charles tendrían sexo, pero conocía la respuesta. —Interesante— Comentó para comenzar a reír, Erik lo imitó, para volver a besarlo.
Respondió el beso con demanda y urgencia, rodeando el cuello del alfa, dirigiéndolos a acostarse, dejando que el otro quedara sobre él.
Se conocía a sí mismo y sabía que le gustaba sentir el peso y la presión de un cuerpo contrario sobre el suyo, por desgracia, había estado disfrutando tanto del momento, envuelto en la compañía de su amado, que olvidó que debía aprender a conocerse de nuevo, olvidó que ese había sido su miedo, saber qué cosas que antes disfrutaba, ahora no lo haría más.
Tener a Erik sobre él, le provocó incomodidad y un toque de miedo.
Cortó el beso, sintiéndose un poco tembloroso.
—¿Podemos cambiar de posición? — Pidió, sin dejar de colocar caricias en el pecho de Erik.
Erik no se mostró molesto o exasperado, de inmediato se apartó y Charles sabía que estaba dispuesto a cualquier cosa que le pidiera.
—¿Cómo quieres estar? — Quería moverse y que sus acciones hablaran por él, pero actualmente era imposible… aún.
—Puedo…— Se aclaró la garganta. —Quiero estar sobre ti— Erik parecía muy dispuesto y totalmente interesado.
De inmediato fue acomodado sobre el regazo del alfa, que se mantuvo sentado, miradas conectadas y brazos enredados en el otro.
Podía sentir el contacto de la cara interna de sus muslos con las piernas de Erik, a su miembro en contacto con el de Erik.
Él fue el que usó una de sus manos para envolver ambos penes. Erik fue el que colocó suficiente lubricante.
Ambos fueron los responsables de que los besos continuaran sucediendo, entre respiraciones agitadas y suspiros.
Erik se alejó de sus labios, para acomodar su cabeza nuevamente contra su hombro, colocando una mordida más fuerte, que le arrancó un gemido y que definitivamente dejaría marca.
Sentía mucho calor, sentía como si cada parte de su cuerpo fuera una zona erógena.
Los pezones de Erik estaban muy cerca, por lo que no pudo detenerse de atrapar uno entre sus labios, fue recompensado con un gemido.
Una de las manos de Erik aprisionó sus caderas, como si estuviera usando aquello como un soporte para mover sus propias caderas contra el cuerpo de Charles. Poco a poco dicha mano fue paseando a una zona más posterior, no tenía nada en contra de que el alfa disfrutara su trasero.
Un dedo con lubricante se introdujo en él.
Antes, aquella simple acción habría sido suficiente para que él quisiera un pene dentro de sí.
Justo ahora solo era incómodo y un tanto doloroso.
—¿Me detengo? — No se había dado cuenta de que todo él se había detenido hasta que el hombre que amaba lo cuestionó, y quería decirle que no, asegurarle que continuara, porque Dios que quería continuar, quería que siguiera sintiéndose bien, pero no era así.
Tomó la mano de Erik, alejándola solo un poco, permitiéndole mantenerse descansando en sus glúteos si era lo que quería.
—Lo sient…— No pudo terminar su disculpa pues al instante fue besado.
—No te disculpes— Le dijeron sobre sus labios, para ser nuevamente besado y sentir una mano rodear la suya y por tanto sus miembros, aumentando la presión y la fricción, mientras la otra aprisionaba su trasero.
Inspiró profundo, para que su gemido se combinara con el de Erik, igual que su semen se combinaba con el del alfa.
…
Erik se había encargado de limpiarlos, y justo ahora regresaba del baño, aun totalmente desnudo.
El alfa se sentó a su lado.
—¿Quieres agua? — Sí tenía sed, pero sentía que no merecía pedirle cosas al otro. Estiró su mano solicitando la de Lensherr. Le respondieron positivamente de inmediato y agradeció infinitamente sentir la calidez de la mano contraria.
—Siento que no podamos tener sexo-sexo—
—Tuvimos sexo-sexo— Sonrió, disfrutando de su rostro sonrojado.
—Sí, pero…—
—Tuvimos sexo-sexo, no estoy decepcionado o lo que sea que estés pensando, ¿tú lo estás? —
—Puede ser, pero conmigo mismo—
—No deberías— Entendía que Erik quería ayudarlo a sentirse mejor, pero se sentía extrañamente como si debiera obligarse a estarlo y no podía y como no podía se estaba comenzando a sentir peor.
Erik se recostó a su lado y él de inmediato se acercó a abrazarse al cálido cuerpo.
—Si no se siente bien para ambos, ¿por qué hacerlo? — Erik siempre era muy bueno con él.
Charles nunca tuvo parejas física o psicológicamente abusivas, pero tenía que admitir que se sintiera del todo bien o no, se sintiera completamente dispuesto o no, siempre terminaba haciendo lo que su pareja (o parejas) solicitaran de él durante el acto sexual.
Erik le acababa de permitir notarlo.
—Podríamos hacerlo al revés, si quieres— La voz de Lensherr lo sacó de su cabeza.
—¿Al revés? —
—Sí, claro, tú… a mí— Sonrió sin estar seguro de qué le provocaba más sentimiento, si el hecho de que Erik lo había dicho de forma tan censurada o el hecho de que el alfa líder de la única isla con la mayoría de los habitantes siendo mutantes, le hubiera ofrecido… Charles se consideraba alguien flexible, no se cerraba como las generaciones más viejas ante el hecho de que solo los omegas debían ser pasivos y los alfas debían ser siempre activos.
Sabía que cualquiera podía hacer lo que quisiera con sus preferencias en la cama, si alguien quería únicamente recibir o dar podía ser hecho así, si alguien quería ser versátil, podía hacerse, si alguien no quería tener nada que ver con el sexo también era completamente válido.
Pero aún había muchos alfas rígidos y firmes en sus posturas de superioridad para con los omegas, sí, los omegas eran siempre más poderosos, pero Charles había concluido hace mucho que era eso precisamente lo que hacía que los alfas quisieran mantenerse "superiores y en control" en todos los demás aspectos, los omegas eran más poderosos, pero más emocionales también, por eso era el trabajo de los alfas el mantenerlos siempre en control y mostrarse siempre por encima.
La verdad es que les tenían miedo.
¿Le molestaba esa forma de pensar? Pero por supuesto, ¿Erik, le había parecido a él, era ese tipo de alfa? No, y lo decía sin ninguna duda, pero tampoco había creído que le ofrecería tal… oferta.
—¿Lo has hecho antes? —
—No— Y Erik no dio más explicaciones, porque seguramente no lo consideraba necesario, Charles tampoco, pero ya que estaban en esta clase de conversación, suponía que había algo que dejar en claro.
—Pero sí has tenido sexo con hombres antes— Pese a la existencia de los géneros secundarios, había personas que solo se enfocaban en si les atraía más lo masculino o lo femenino, sin importar el género secundario y había otros que solo se enfocaban en algún género secundario en específico sin importar el primario, había los que se restringían a una combinación particular y había otros que preferían no limitarse, de ninguna forma.
¿Eran importantes las preferencias de Erik después de decirse que se amaban, besarse, masturbarse el uno al otro recién para estar actualmente abrazados completamente desnudos? No, pero igual quería saber.
—Sí—
—No solo omegas—
—No solo omegas, no—
—¿En plural? — Cuestionó sintiendo como su humor mejoraba, Erik no lo negó.
—Me gusta el sexo— Y al ver el rostro de Erik podía asegurar que no era algo que había querido decir, sino más bien un pensamiento que escapo su filtro. Charles soltó una carcajada escandalosa.
—Sí, a mí también me gusta el sexo—Se estaba divirtiendo.
—¿Tienes mucha experiencia? — Cuestionó el alfa y él no podía pretender que no había sido muy promiscuo, a mucha honra.
—Podrías decir que sí— Contestó sonriendo, Erik no sonrió, en su lugar desvió la mirada, pensativo.
Y Charles comenzó a preocuparse, de haber dicho algo incorrecto, de tal vez juzgar mal la personalidad de Lensherr.
—Entonces… juntos… con nuestra vasta experiencia, podemos encontrar muchas cosas interesantes que hacer con nuestra… eh… recién inaugurada vida sexual— Trató de tragarse la risa, por lo que primero le salió un ruido extraño con la garganta.
—¿Qué sugiere, señor alfa experimentado? —
—Podemos iniciar con algo sencillo, como… 69—
Jodido alfa sexy.
—Sí, definitivamente, puede hacerse— Confirmó.
Muchas gracias por leer.
Quería decirles que no sé qué tanta disponibilidad tendré en el futuro de escribir un capitulo por semana, en días próximos mi tiempo libre puede llegar a disminuir o también puede ser que no pase nada… lo verán junto conmigo jaja, pero no planeo abandonar la historia, eso no.
