LA SUBASTA
gracias a eri mond licht y a piruru-chan por sus reviews, ya ves el mundo del salsh es un pañuelo :p bs
pensamientos entre " "
Cap VIII: De novios, recuerdos y reportajes
Así que allí se encontraban en el sofá del apartamento, 2 ex-compañeros de colegio, y también 2 ex-enemigos, queriendo saber más el uno del otro.
- ¿Por dónde empezamos?- comenzó el ojigris, tras un breve momento de tensión.
- Bien¿por qué no lo hacemos por el principio? La otra vez que estuve aquí... - hubo una breve pausa- me, me dijiste que te gustaba desde la época del colegio
- La verdad es que en aquel tiempo no sabía lo que en realidad me ocurría. En primer año, me rechazaste y me sentí fatal, para qué negarlo- sonrió con melancolía,- y a partir de entonces em dediqué a observarte por orden de mi padre para así derrotarte, más nunca me sirvió de nada, saliste siempre inmune a todo y todos. La verdad es que de tanto espiarte, sentía como si te conociese mejor, cada vez que te veía sonriendo feliz con tus amigos, cada vez que me acercaba para meterme con vosotros, me decía: sí claro pero ellos no saben que algunas noches sale a pasear alrededor del lago, y en quinto año, se intentó...ya sabes.
Harry se había quedado totalmente pálido:- ¿pero cómo¿Cómo sabes?
- ¿Que te intentaste suicidar?- Draco tenía en ese momento un semblante duro- ese día también fui detrás tuyo, y te vi. Si supieras, cómo me sentí al verte con esa navaja en las manos, debajo de aquel haya...y cuando la sangre brotó de tus venas, y te desmayaste te llevé inmediatamente a enfermería. Pensaba que te habías muerto y una parte de mí dijo: un problema menos, ya lo has vencido, has conseguido seguir viviendo y él no...pero el resto de mi mente se horrorizó, no quería que te ocurriese nada y no sabía por qué. La verdad es que hasta hace poco no lo supe.
Ninguno de los dos se atrevía a mirarse, dirigiendo su mirada hacia la otra parte de la sala. Harry, recordó ese día, el día en que intentó librarse de todas las responsabilidades, de todas las muertes, de todo...ahora se arrepentía de siquiera haber pensado en ello.
Por su parte Draco se preguntaba el por qué, pero suponía que el mismo Harry se lo diría cuando estuviese preparado.
- Y...¿de novios qué?- preguntó subitamente el rubio cambiando de tema.
- ¿De novios qué?- repitió Harry poniéndose a la defensiva, aunque había enrojecido un poco.
- Bueno, el chico dorado, el favorito de Albus, tendría que tener a medio colegio a sus pies, porque, para qué negarlo, tenías un cuerpazo de miedo, aunque ahora estás mejor...- le dirigió una mirada significativa que tornó a Harry aún más avergonzado.
- Seguro que no más que tú- consiguió decir.
- A ver, estaban...- Draco apoyó al barbilla sobre un dedo pareciéndole a Harry muy mono, pero sabía que si se lo decía correría grandes riesgos de resultar malherido :p - Pansy, Zabini, Nott, Flint, Padma Patil, y Bones.
- Pues los rumores decían que por lo menos habías tenido diez rollos.
- ¿Rollos?
- Sí ya sabes, líos de una noche.
- Ah, pues no, esos fueron con los que más tiempo duré, excepto Zabini, que era intermitente. Los líos de una noche fueron alrededor de...no me acuerdo, pero bueno bastantes Sly, algún Ravenclaw y uno o dos Hufflepuff.
- Hum, vale.
- ¿Estás celoso?
- ¡Sí, digo...sí. ¿Los efectos de la maldita poción todavía me duran?
- Sí, -le sonrió condescendiente.- Así que ahora te toca a tí ponerme celoso.
Harry sonrió levemente- La primera fue Ginevra Weasley, estuve con ella un año o así, en sexto- aclaró- pero luego me di cuenta de que no me atraían las chicas. Ese mismo verano me encontré con Oliver pos casualidad, y una cosa llevó a otra...estuvimos todo el verano y luego se fue a Estados Unidos, con otro equipo de Quidditch.- Draco quien había fruncido el ceño al oír el nombre del ex-capitán de Harry, sonrió aliviado. Harry continuó como si no se hubiese enterado.- Y en séptimo tuve algo con Terry...
- ¿Terry¡Boot¿Te refieres al auror Boot! Ese, Hufflepuff o...
- Ravenclaw- le corrigió Harry ligeramente enfadado.
- Vi cómo te miraba el otro día¿tuvisteis un buen final?
- A qué te refieres- murmuró el otro evasivo.
- El día de la investigación no te quitaba ojo de encima, creo que se enfadó por no estar en tu equipo, y cuando el malnacido de Zabini te echó esa maldición se veía como si le hubiesen roto su juguete preferido o algo así.
- Ah, te fijas mucho en él¿no?- intentó que su voz sonase enfadada, incluso celosa, pero en lugar de ello le tembló como una hoja.
- ¿Te ocurre algo¿Hay algo malo en él? Sabes que puedes confiar en mí...- añadió en voz baja acunándolo.
- No, no es nada- sonrió con timidez- creo que la poción ya ha acabado.
- Es decir que me estás mintiendo.
- No, sólo que estoy un poco cansado, mejor me voy a casa.
- ¿A casa¿A estas horas? La comadreja y Granger te matarían, mejor quédate aquí.
- Draco no, ya te dije...
- No voy a intentar nada Harry, te dije que esperaría y eso es lo que haré, no pienso estropear nada- le dio un suave beso en la comisura de los labios.- Si quieres puedes utilizar el otro cuarto.
- ¿Y encontrarme con que a la mañana siguiente me estás espiando a través de un cuadro?- rió,- no gracias, prefiero que me mires directamente.
- ¿Y quien te dijo que me gustabas lo suficiente?
- Por favor...- dijo con un tono de ¿no es evidente?. Seguidamente se levantó, y con andares exagerados se encaminó a la habitación, seguido del platinado.
Al día siguiente, Draco se despertó bastante antes que el moreno, por lo que se dedicó a observarlo tranquilamente, quitándole un suave mechón de pelo azabache, le besó en la frente, y, tras vestirse, se dirigió a la cocina para ordenar a la vaga de su elfina el desayuno. Un cuarto de hora más tarde, Harry se presentó en la cocina, vestido con la misma ropa del día anterior.
- Creo que necesito una ducha- se quejó mientras tomaba un plato de tostadas y un café.
- Pues dátela aquí, no puedes ir a casa, si no llegarás tarde.
- ¿Y la ropa?- preguntó Harry en un tono de desesperación.
- Vete desnudo- bromeó el Sly.- ¿Has pensado en que yo soy también auror? Tengo túnicas de uniforme de sobra.
- Pero¿tú te has visto? No es por ofender pero, eres Enorme.
Draco se acercó lenta y peligrosamente al pelinegro, quien tenía todavía un trozo de tostada en la mano.- Que el señor Potter sea tan enano no tengo la culpa.
- Vale, entendido- sonrió Harry, ahora si me disculpas...- salió casi corriendo a ducharse, y media hora más tarde se encontraban ambos en la sala de entrada del Ministerio de Magia.
- Sigo insistiendo en que me queda grande- se quejaba Harry.
- Ya te hice el encantamiento reductor, deja de quejarte- le insistió Draco en voz baja.
Intentando que no pareciese demasiada casualidad que hubiesen entrado juntos, entraron al ascensor, junto con varios compañeros más.
- Vaya Potter- empezó irónico O'Neal- ¿hoy has encogido o es que la túnica crece mas deprisa que tú?- Harry le dirigió una mirada fulminante que hizo a su compañero callar avergonzado, y otra a Draco quien se lo estaba pasando realmente bien.
Al llegar arriba, se dirigieron cada cual a su cubículo, dispuestos a tener un día laboral tranquilo (por lo menos más que el anterior), pero se equivocaron, pues poco después un Ron de muy mala leche, se acercó a Harry desde la entrada, llevando consigo una revista.
- ¿Me puedes explicar qué significa esto!- gritó conmocionando a Harry, y provocando un silencio generalizado.
- ¿Qué es qué Ron?- preguntó suavemente intentando tranquilizarlo.- No sé de qué me estás hablando, en serio.
- Pues lee- escupió éste, sin cambiar su actitud. Se giró levemente y vio a Draco a escasos pasos del lugar donde se encontraban,- tú también puedes leer,- parecía inconsciente del grupo que se había formado a su alrededor.
El rubio, se acercó a la mesa de Harry, y desde detrás de éste, comenzó a leer el artículo de corazón de bruja:
EL CHICO QUE VIVIÓ, nos sorprendió a todos por su escasa vida amorosa. Quién iba a decir que todo era parte de un hechizo de confusión aplicado por un mortífago. Sí señores han oido ustedes bien. Para aclararlo, debemos de retroceder en su vida.
En cuarto curso descubrimos su primer amor, Hermione Granger, hija de muggles, que también fue su primer desamor. Le siguieron una corta lista de chicas muy apreciadas por su belleza como Luna Lovegood, Cho-Chang y Ginny Weasley. Todos esperábamos su siguiente relación, y lo que descubrimos nos llenó de sorpresa. Un compañero de los jóvenes, quien prefiere enmascarar su nombre, cuenta su historia con el nada recomendable hijo de mortífago Malfoy. Más adelante, adjuntamos unas fotos tomadas po el señor T.B...
Llegado a ese punto, ambos habían dejado de leer. Draco alucinado por la desfachatez de la reportera y Harry...
- ¿Harry?- Draco le miró preocupado, el chico estaba lívido y parecía no hallarse en este mundo.
- ¿Harry?- Ron no se había recuperado de su malhumor, pero no dejaría que el estúpido Malfoy fuese el único que se preocupase de su amigo.
- " Esas fotos...esas fotos las tomaron en el archivo. Las tomó en el archivo..."- se decía Harry ajeno a todo y todos.
- Harry James Potter no te evadas en tus recuerdos- le gritó Ron sabiendo que así le haría reaccionar.
- No me evado- se defendió éste. Los compañeros alrededor, ya habían perdido el interés hacía tiempo.
- Ya claro y yo soy la reina de Saba- soltó el pelirrojo con un resoplido consiguiendo uan risita de Draco, pero Harry siguió en el mismo estado.
- ¿Harry?
- Ron¿te has fijado en... él?
- ¿A qué te refieres?- el ojiazul cogió la revista, y debió de darse cuenta de lo que el pelinegro decía pues, estrujando la revista, soltó un bramido como de toro embrabecido y atravesó el departamento a grandes zancadas, atropellando aurores a su paso.- ¡Tú!
fin del capitulo...
si teneis alguna duda sobre el fic (o queja) intentare responderla, bs
pd: algien sabe lo q psas cn amor yaoi?
