Hola a todos!
Jeje, aquí estoy molestando nuevamente con otro capi de mi fic (lo prometido es deuda) que espero que les agrade. Bueno, puedo decir que ya l fan fic entero está dedicado a todos los que lo han leido y a los que me han dejado sus reviews. Muchas gracias! Eso es en verdad lo más inspirador. Bueno, ya sin nada que decir, les dejo el capi. Nos vemos pronto! (Espero reviews eh?)
Disfruten de la vida y que tengan un buen día!
KaTmAi
Capítulo 4: "Una verdad"
La chica despertó sobresaltada. ¿Acaso todo había sido sólo un sueño? Fijó su vista en una mancha negra que caminaba sobre la pared azul de su habitación. Abrió mucho los ojos y sus pupilas se dilataron como para dejar paso completamente a la imagen, que le parecía una simple ilusión. Después de un momento de permanecer paralizada, se levantó de un brinco.
-"¡La usaron¡Realmente lo hicieron¡Aprendieron a usarla!"- pensó casi con odio. Se vistió lo más rápido que pudo y salió corriendo del cuarto.
Jeremie, Ulrich y Odd, éste con cara de pocos amigos y los brazos cruzados, se encontraban de pie en el salón de clases, hablando en voz baja. Nada especial en realidad, no querían soltar nada de Xana ahí. Eini apareció tras la puerta y paró en seco cuando los vio. Los cuatro se quedaron tan helados como su propia mirada. Sin decir palabra y mirándolos gélidamente, la chica se dirigió al lugar donde Sissi, quien aún no había llegado, se sentaba habitualmente. Jeremie se dirigió a sus amigos ya sin peligro de ser escuchado.
-¿De verdad creen que esté del lado de Xana?- sus amigos voltearon hacia la pelirroja, la cual seguía sin despegarles la vista de encima.
-La verdad no lo sé, Jeremie. Cuesta creer que una chica como ella…- comenzó a decir Ulrich observando cómo Sissi entraba al salón y fruncía el ceño al ver a la pelirroja, volteaba hacia ellos y luego de nuevo a la pelirroja, y finalmente se dirigía hacia Eini con expresión de resignación.
-Nos atacó en Lyoko, Ulrich- le dijo Odd entre dientes- ¿Quién más sino Xana va a querer hacer eso?- Jeremie pareció reflexionar.
-Pero… no atacó a Aelita… me pregunto por qué…- dijo el chico genio más para sí que para sus amigos.
-¿Te parece extraño eso? Bien¿qué puedes decirme de la ausencia de monstruos?- le dijo Odd. Ulrich asintió. Jeremie se acomodó los anteojos.
-Pudo ser por cualquier cosa… cualquier trampa creada por Xana…- fue interrumpido por la llegada de la señorita Hertz. Los muchachos no tuvieron más remedio que sentarse en sus respectivos lugares.
-Buenos días, alumnos- dijo la maestra no muy alegre- espero que hayan tenido una buena noche, porque yo definitivamente no.
-¿Fue por culpa de unas arañas?- le pregunto Odd con ironía. Jeremie, Ulrich y Eini lo voltearon a ver con los ojos muy abiertos.
-P-pues sí. ¿Cómo lo sabe?- le contestó la maestra confundida. El chico se encogió de hombros.
-Simplemente porque también invadieron mi cuarto. Pero no se preocupe, ya nos… se harán cargo de ellas.
-Ah, sí claro- la maestra volteó hacia el pizarrón.
-¿Hoy vamos a ver las leyes de Newton, profesora?- volvió a preguntar mirando de reojo a Eini. Jeremie y Ulrich cruzaron miradas un tanto preocupados. La mujer lo volteó a ver con una ceja levantada.
-Bien, señor Della Robbia. Al parecer tiene deseos de interrumpir la clase hoy porque sabe mucho. ¿Me podría decir por favor qué es…?
-Sí, sí sé qué es interacción- la cortó sin contemplación. Jeremie dio un respingo y se apresuró a ponerle una mano en el hombro a su amigo.
-¡Odd, ya es suficiente!- le suplicó en voz baja que parara.
-Y también sé qué es el esternocleidomastoideo- dijo Odd con amargura. Eini se levantó como impulsada por un resorte y se le quedó viendo con rabia. Así que el problema era con ella…
-Profesora¿me permite ir a la enfermería?- preguntó la chica sin mirarla. Odd también se levantó.
-Yo la acompaño. Así tal vez no se pierda y no se meta donde…- dijo el rubio resentidamente.
-¡No necesito compañía!- respondió la pelirroja de inmediato. Todos los presentes en el salón miraban a uno y a otro muchacho alternadamente.
-Pu-pues si se siente mal, señorita Withnam…
-Gracias, señorita Hertz- la chica salió del salón dando un portazo. Odd se apresuró a seguirla.
-Nunca se sabe, podría desmayarse en el camino…- dijo Odd con los dientes apretados saliendo también del salón. Todavía alcanzó a ver que Eini daba vuelta en una esquina. Casi corrió para alcanzarla y se dio cuenta de que la chica había salido del edificio. Abrió de par en par las puertas que daban hacia el patio. Tuvo que parpadear un par de veces para asegurarse de que no estaba soñando. ¿A dónde se había ido? Se talló los ojos con el dorso de las manos. Nada- "¡Desapareció¿Desapareció¿Dónde diablos se metió!"- pensó confundido tratando de divisar algo entre los árboles, sin éxito. Aunque sin intención de volver a su salón de clases, regresó sobre sus pasos refunfuñando.
Eini suspiró aliviada. Era como la décima vez en su vida que agradecía su habilidad para subir a los árboles. Bajó con cuidado y asegurándose de que no hubiera nadie en los alrededores. Vacío. Se dirigió hacia la dirección escolar. No le apetecía volver a tomar la aburrida clase de Física, y mucho menos soportar las miraditas de Odd. Ya se encargaría de él más tarde. Al llegar a su destino, tocó un par de veces la puerta sin obtener respuesta. La abrió y entró al pequeño despacho. Se sentó en una silla dispuesta a esperar al director de la escuela. Jim entró y se extrañó al ver a la chica ahí sin que él la hubiera llevado.
-¿Eini?- la pelirroja volteó a verlo.
-Hola, Jim- le dijo sonriendo.
-¿Qué haces aquí?
-¿Pues qué más? Esperando al señor Delmas.
-Vuelve al salón antes de que inicie mi hora de clase- le dijo el hombre saliendo nuevamente, pues él también quería decirle algo al director. La chica suspiró.
-"No tengo ganas…"- pensó poniendo cara de sope.
-No creo que esto sea bueno, Jeremie. ¿Dónde diablos se metió Odd?- le dijo Ulrich a su amigo ceñudamente.
-Él está convencido de que Eini es aliada de Xana. ¿Qué tal si…?- le contestó Jeremie alarmándose repentinamente.
-¿Estás sugiriendo que…¿En verdad lo crees?- dijo el castaño levantándose de su asiento y mirándolo fijamente.
-La verdad, Ulrich, es que no- ambos chicos ya estaban dispuestos a salir en busca de su amigo, cuando fueron detenidos por Jim, quien entró al salón seguido de Odd.
-¡Oddie!- dijo Ulrich fingiendo alegría al verlo- Eres un tonto.
-¿Y ahora por qué?- le dijo el chico de morado acercándose a ellos.
-¿Dónde te metiste?- lo interrumpió Jeremie.
-Pues por ahí. No tenía ganas de tomar dos veces la misma horrible clase- contestó Odd poniendo sus brazos detrás de su cabeza.
-Quiero que todos estén en el patio en cinco minutos- dijo Jim y salió del salón.
-Chicos, tengo una idea para averiguar si en verdad Eini está del lado de Xana y qué es lo que quiere- les dijo Odd.
-¡Ay, no¡Otra de tus ideas no!- se quejó Ulrich. Sin decir palabra, Odd salió del salón y sus dos amigos no tuvieron más remedio que seguirlo. El chico se aproximó al corpulento profesor de Deportes.
-Jim¿has visto a Eini?
-Ustedes deberían saber a dónde fue. Está en la dirección- les contestó y se alejó.
-¡Perfecto! Y ahora, sin temor a que nos descubran…- dijo felizmente. Sus amigos cruzaron miradas sin entender nada. Unos minutos después se encontraban en el cuarto de Eini.
-¿Exactamente qué diablos es lo que estamos buscando aquí?- dijo Ulrich francamente molesto revisando bajo la cama de la chica.
-Alguna pista, un indicio, algo sospechoso o fuera de lo común… lo que sea que nos pueda ayudar a saber lo que estaba haciendo ella en Lyoko- le contestó Odd observando el dibujo de un desierto en donde se veía un árbol solitario sin hojas- Al parecer dibuja bien…- comentó observándolo detenidamente.
-¿Quieres una clave, Odd? Dudo mucho que la encuentres aquí- le dijo Jeremie pasando el dedo por los títulos de algunos libros acomodados en un pequeño estante- "Atlas del cuerpo humano. Esternocleidomastoideo"- pensó divertido al ver el enorme libro.
-¿Una clave? Bueno¿qué tal un diario?- dijo el castaño triunfalmente sentándose sobre la cama. Sus amigos se aproximaron y se sentaron a su lado. Ulrich le pasó el cuadernillo a Odd- Vamos, hazlo tú, luego me voy a sentir mal por ser un espía.
-En ese caso los tres lo somos- dijo Jeremie.
-¡Vamos, Ulrich! No seas quisquilloso, algo podemos averiguar- le dijo Odd poniéndole el diario en las manos nuevamente.
-De acuerdo…- Ulrich abrió el cuadernillo- "Mi debut en el periódico escolar! Al parecer esas pequeñas se salieron con la suya y finalmente lograron tomarme una foto. Tuve que mandar a volar a muchos, muchísimos chicos. La verdad no sé qué es lo que me ven. Mi cabello se está quemando. Es eso lo que les llama la atención?"- el castaño se detuvo en el dibujo de una carita feliz y una llama de fuego- Pues, obviamente está hablando de cuando salió en el periódico escolar.
-Eso no nos dice nada¿qué hay en la otra página?- dijo rápidamente Odd pasando la hoja ligeramente sonrojado. Ulrich regresó la vista al cuaderno.
-"Composición? Para hoy? Debí haber parecido una boba. Hombre, maestra, nadie hace tarea cuando va en cuarto grado. A quién se le ocurre dejar una aburridísima composición sobre biomoléculas?" Estoy de acuerdo contigo- dijeron Ulrich y Odd al unísono. Jeremie sonrió. El castaño cambió la página- "Jim. Ése es su nombre. El profesor de Educación Física y prefecto de la escuela. Por un momento me recordó al molesto de Jaime, el prefecto de mi anterior escuela. Pero él sí que era frustrante. No se podía pasar ni un momento de paz porque te llevaba a la dirección sólo respirar…"- los tres chicos observaron el dibujillo de una jaula- Vaya, y yo que me quejaba de Jim…- comentó Ulrich- Aquí no hay nada, Odd. Hasta ahora sólo comenta lo que le ha pasado desde que llegó a la escuela.
-Pues para tu información, aún hay más- le contestó el rubio pasando la página al cuaderno. Su amigo bufó, pero continuó leyendo.
-Aquí aparecemos en escena nosotros "El día de hoy hice nuevos amigos…" Emmm…
-¿Qué sucede?- inquirió Odd.
-Esa palabra… sabes lo que significa¿verdad Odd?- Jeremie señaló la hoja.
-¡Pues claro que sí!- le contestó cruzando los brazos.
-¡Exacto¿Crees que alguien atacaría a sus propios amigos?- Odd se quedó callado.
-Sigo- dijo Ulrich- "Son geniales, me recibieron con una sonrisa; creo que la pasaré bien de ahora en adelante. Sus nombres son Ulrich, Yumi, Jeremie y Odd. Además, hay otra buena noticia, pues no sé por qué me tardé tanto, pero en esta semana al fin encontré lo que buscaba. Mañana mismo comenzaré con lo que debo hacer. Buenas noches!"- los tres chicos cruzaron miradas.
-¿Creen que estaba hablando de Xana?- preguntó Ulrich.
-Es lo más obvio¿no?- dijo Odd volteando hacia la ventana.
-No hay manera de saberlo, ya no hay nada más escrito. Sólo… un dibujo rarito… dijo confundido.
-Al parecer le gusta…- Odd reconoció en el cuaderno el mismo dibujo que había visto antes.
-¿Soledad?- se preguntó Jeremie observando también el dibujo- Un solo árbol en un desierto, eso representa soledad en todos los sentidos ¿Por qué le gustará tanto?
-Bueno, generalmente nos gustan las cosas a las que estamos acostumbrados¿no crees?- los tres chicos dieron un respingo, y de no ser porque había una pared tras ellos, se hubiesen ido de espaldas cayéndose de la cama al escuchar aquella voz tan familiar. Voltearon y vieron a Eini recargada en el marco de la puerta con los brazos cruzados. Ninguno se había percatado de su presencia- ¿Qué tal¿Encontraron lo que buscaban?- dijo sarcásticamente. Los chicos se pusieron de pie de un brinco.
-En- en realidad ya nos íbamos- dijo Jeremie con una sonrisa nerviosa. La chica alzó una ceja.
-No, no. Pregunté si habían encontrado lo que buscaban.
-¿Lo hiciste tú en Lyoko?- le contestó Odd aproximándose a ella y quedando a escasos centímetros de su cara, mirándola fijamente. La pelirroja simplemente hizo lo mismo sin moverse de su lugar y sin inmutarse en lo más mínimo.
-Déjala en paz, Odd. Ella es más alta que tú- dijo Ulrich poniendo el diario en su lugar- Ya vámonos- Jeremie asintió, jaló de los brazos a sus amigos y salió de la habitación. Eini los observó hasta que salieron del edificio, luego miró su cuarto. El dibujo del árbol seguía sobre su cama. Suspiró y cerró la puerta.
-¿Dónde estaban? Jim los estuvo buscando como loco toda la clase, y obviamente se ganaron un reporte- Yumi miraba duramente a sus amigos con el ceño fruncido y los brazos cruzados. Los tres tenían la vista gacha.
-Es que… estábamos…- trató de explicar Odd con inocencia. Yumi sólo suspiró.
-Ya no importa, ese reporte nadie se los va a quitar.
-Uy, gracias por los ánimos- la chica se encogió de hombros.
-Yo no fui la que se escapó.
-……………Bueno, al parecer en este momento los maestros están muy ocupados fumigando los salones. Vamos a jugar, Ulrich- Odd jaló a su amigo del brazo y se aproximó a unos chicos que jugaban fútbol en el patio. Yumi y Jeremie se sentaron en una banca a observarlos.
-Jeremie¿cuál es tu hipótesis?- preguntó Yumi viendo a los chicos que jugaban.
-¿Sobre qué?- el chico fingió no estar enterado de nada.
-Tú sabes perfectamente- le dijo mirándolo de reojo.
-Oh, de acuerdo. Pues la verdad, dudo mucho que los haya atacado sólo porque sí.
-¿Estás sugiriendo que Xana la está controlando?- le preguntó la chica sorprendida. El rubio negó con la cabeza.
-Imposible, no tiene tanto poder como para controlar a humanos. Estoy diciendo que lo hizo porque en ese momento para ella éramos unos intrusos.
-¿Intrusos?- Yumi trató de comprender.
-Sí, es obvio que ella ya había estado antes en Lyoko. ¿No recuerdas lo que le dijo a Odd?- la chica entrecerró los ojos buscando en su memoria.
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-¿Qué diablos haces tú aquí!
-¡Esa es la misma pregunta que yo tengo!
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-¿Que qué hacíamos ahí¿Lo dices por eso?- el chico asintió- Y por eso dices que para ella éramos intrusos. Pero…
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-¡Pues si estás tan seguro de lo que estoy haciendo aquí, dímelo tú entonces! Miren, no tengo ni idea de qué lado estén, pero será mejor que no se metan conmigo.
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-"No tengo ni idea de qué lado estén" ¿Qué me dices de eso? Puede ser que fuéramos intrusos porque ella es aliada de Xana- Jeremie se encogió de hombros- aunque en realidad no tengo ni idea… esto es tan confuso… pero creo que aunque no sea aliada suya, sí conoce su poder.
-Claro, porque no se veía ni lo más remotamente confundida por haber regresado en el tiempo, y obviamente recuerda todo lo que pasó- Yumi asintió y suspiró. Luego frunció el ceño.
-Creo que ya sé por qué no había monstruos en Lyoko… ya me imagino a Xana "Oh, los intrusos llegan, pero la otra intrusa quiere acabar con esos intrusos. Bien, no hay para qué enviar monstruos, dejemos que la intrusa se encargue de los otros intrusos…"- Jeremie abrió mucho los ojos al escuchar eso.
-¡Yumi, eso es!- exclamó levantándose de la banca. Ella lo miró confundida.
-¿Qué cosa?
-¡Eso es!- se acercó a su oído y le habló en voz baja, casi en susurro- ¡Eini no es aliada de Xana¡Te aseguro que ni siquiera tiene idea de sus ataques¡Tú misma lo has dicho, Xana sabía que ella nos atacaría y por eso no se tomó la molestia de enviar monstruos! Pero si fuera su aliada sabría lo que estábamos haciendo ahí- Yumi cruzó los brazos y frunció el ceño nuevamente. Jeremie tenía razón.
-Pero eso no explica por qué no atacó a Aelita, cómo es que conoce a Xana y qué rayos hacía en Lyoko.
-Bueno, eso sólo nos lo puede explicar alguien- la tomó de la mano y casi la arrastró para alejarse corriendo de ahí en busca de la chica pelirroja.
-¡Jeremie¡Jeremie!
-¿Qué es…?
-¡Jeremie!
-¡Aelita¿Qué sucede?- dijo el chico cuando al fin sacó su computadora portátil de su mochila.
-¡Xana despertó!
-¿Qué? Pero si apenas ayer… hoy… oh, bueno, lo que sea, apenas la enfrentamos- dijo Yumi.
-Sí, pero no puedo estar equivocada. Las pulsaciones son las de siempre. Y muy notorias, por cierto.
-Esto es serio. Dos ataques en un solo día no es lo más común en Xana- dijo Jeremie preocupado- Aelita, quiero que vayas a la torre más cercana que haya y te quedes ahí hasta que nosotros lleguemos.
-De-de acuerdo. Pero apresúrense por favor- la imagen de la chica desapareció de la pantalla y Jeremie cerró la computadora.
-Ni hablar, Yumi. Tendremos que ir con Eini.
-¿Pero, y Xana?
-Si es verdad lo que pienso y Eini no está del lado de Xana… bueno, ella conoce Lyoko y tiene armas, si acepta venir con nosotros y ayudarnos, pues…
-Estoy de acuerdo¡vamos!- la japonesa lo jaló del brazo para no seguir perdiendo más tiempo.
Un árbol cayó en medio del bosque. Luego otro… y otro…
Un topo salió a la superficie por un instante. En su frente brillaba un símbolo rojo ya muy conocido: el ojo de Xana.
-¡Eini¡Eini!- Jeremie y Yumi se aproximaron corriendo a la chica, la cual volteó a verlos sorprendida- ¡Espera!
-¿Jeremie?- la pelirroja maldijo por lo bajo que ahí no hubiera árboles; no tenía ganas de hablar con nadie, y mucho menos con ellos- ¿Qué quieres?
-Uy, a mí también me da gusto verte- le dijo el chico mirando hacia el techo. La pelirroja alzó una ceja- Bien, por dónde comenzar…
-Mira, más vale que esto sea rápido porque…
-Sabemos que no eres aliada de Xana- el chico dijo lo primero que se le ocurrió. Eini abrió mucho los ojos, y se quedó muda por un momento.
-¿Co-cómo se puede ser aliada de una máquina!- dijo también lo primero que se le vino a la mente. Yumi y Jeremie cruzaron miradas muy alegres.
-Eini, necesitamos que vengas con nosotros.
-¿Pa-para qué?- le dijo cruzando los brazos, no muy convencida y aún sin entender bien.
-¿Qué tanto sabes sobre Xana?
-Creía saberlo todo hasta… ¿hoy?- Yumi miró impacientemente su reloj y luego a la ventana. Le dio un codazo a Jeremie. Éste volteó a verla un instante, asintió y luego se dirigió nuevamente a Eini.
-¿Qué sabes sobre sus ataques?
-¿Ataques!- esta vez Eini abrió los ojos todo lo que podía y se quedó pasmada- ¿Qué ataques¿A-ataques epilépticos, o ataques de asma, o ataques al corazón…?- le dijo con inquietud.
-Mira Eini, no tenemos mucho tiempo para hablar, aún no sabemos qué planea Xana esta vez, así que mejor te lo explico rápido porque Jeremie le da muchas vueltas al asunto- dijo Yumi francamente desesperada- Esa máquina puede controlar animales, cosas, el clima, otras malditas computadoras… casi todo lo que quiera, y lo usa contra todos los humanos- Eini escuchaba atentamente sin mover un músculo- Cuando lo hace, activa una torre en Lyoko- La pelirroja recordó la torre con el aura rojiza- y sólo Aelita puede desactivarla.
-¿Aelita?
-E-es la chica a la que tú no conocías- dijo Jeremie rápidamente.
-Oh, veo que pones atención a lo que sucede- le contestó Eini mirándolo por el rabillo del ojo.
-Bueno, el caso es que nosotros la tenemos que proteger de los monstruos para que llegue sana y salva de la torre y la desactive. En ese momento se acaba el ataque de Xana- Eini sintió una punzada en el estómago al escuchar lo de los monstruos.
-¿Xa-Xana controla a los monstruos?- Yumi asintió.
-Bueno… el punto era… ¿nos ayudas?- terminó diciendo la japonesa. Eini miró a ambos chicos con recelo. Después de pensarlo seriamente por unos minutos, al fin sonrió. Después de todo… en confiar en ellos¿qué podía perder?
El celular de Odd vibró en su cintura, haciendo que el chico parara en seco.
-¿Jeremie?
-No digas nada Odd, te quiero en la fábrica en cinco minutos.
-¡Sí jefe!- le dijo y colgó- ¡Ulrich!- el castaño se acercó a él- Debemos irnos, tenemos una cita con Don Amabilidad.
-¿Una cita en…?
-Sí, pero mejor no digas nada- ambos chicos echaron a correr. Decidieron internarse en el bosque. En el camino, un enorme árbol caído les bloqueó el paso- ¿Y ahora qué…?
-No hay tiempo para ponerse a investigar, Odd. Si Jeremie nos llamó, debe ser algo importante- le dijo Ulrich escalando por el grueso tronco.
-De acuerdo…- le contestó el rubio sin mucho ánimo haciendo lo mismo. Algunos minutos después, los dos se encontraban en la sala donde Jeremie controlaba todo lo necesario para enviarlos a Lyoko- ¿Qué hay, Einstein¿Algo importante?- saludó Odd alegremente.
-Muy importante- le respondió Jeremie seriamente sin despegar la vista de la pantalla. Odd abrió mucho los ojos ante su tono de voz.
-¿Ya has descubierto la forma de materializar a Aelita?
-¿Q-qué? No, no. No es eso. Es…
-Entonces… ¡Ya te le declaraste!- dijo Odd tronado los dedos.
-¿Q-qué¡Odd!- Jeremie se pegó en la frente con una palma- Mira, mejor cállate y baja a la sala de escáners.
-Uy, qué genio, y yo todavía que espero algo bueno.
-¿Qué sucede, Jeremie?- preguntó Ulrich extrañado- ¿Para qué necesitamos ir a Lyoko?
-Xana lanzó un ataque- dijo el chico genio simplemente.
-¿Qué? Pero dos ataques en un día… eso¿no puede ser, o sí?- dijo Odd anonadado.
-Pues lo hizo. Tienen que ir a Lyoko. Las chicas están listas, sólo faltan ustedes. Los enviaré a la región polar.
-¡Señor, sí señor!- dijeron sus amigos al unísono y se metieron al elevador. El chico de lentes volvió la vista a la pantalla frente a sí.
-"Vaya sorpresa que se van a llevar cuando les presente a su amiga…"- pensó divertido.
-Escaneando a Ulrich… escaneando a Odd… ¡Virtualización!
-Vaya, ya era hora…- dijo la chica sin mirarlos, con los brazos cruzados.
-¡Aaahhhh!- casi por instinto, Odd le apuntó con su brazo. Ulrich parpadeó un par de veces- ¿Qué diablos hace ella aquí!- preguntó el chico rubio sin despegarle la vista de encima como si creyera que era visión.
-Ella, Odd, supongo que fue a ayudarte.
-¡Oye, cuando dijiste "las chicas", creí que sólo te referías a Yumi y a Aelita!- dijo Ulrich también sin poder creerlo.
-Pues lo siento, pero aquí estoy- les dijo Eini un tanto molesta- ¿Qué tiene de malo?
-N-no, nada- le dijo Ulrich mirándola de arriba a abajo.
-¡Qué tiene de…¿Tú qué crees?- le dijo Odd con el ceño fruncido.
-Ya dejen de discutir y mejor ocúpense de lo que tienen que hacer- dijo Jeremie impaciente. Ulrich y Odd voltearon a ver a Eini y dieron dos pasos atrás.
-¿Y ahora…¡Oh, rayos¡Nos les voy a hacer nada, par de cobardes!- dijo la pelirroja poniendo los ojos en blanco- En todo el tiempo que tardaron en llegar, Jeremie, Aelita y Yumi me lo explicaron todo más o menos. El por qué yo los ataqué es una larga historia que no pienso contarles aquí.
-Así es, no tenemos ni idea de cuál es el ataque que Xana lanzó. ¡Así que apúrense, no sabemos qué tan mal pueden estar las cosas ahí afuera¡Y por cierto, que en este momento ya estarían llegando a la torre si no se hubieran puesto a pelear¡Y tres avispas van hacia ustedes!
-Empieza la diversión- murmuró Eini sonriendo y sacando sus dos sables- Será mejor que ya vayan hacia la torre, yo me haré cargo de esto.
-Ay sí, no te quieras hacer la muy buenota- le dijo Ulrich mirándola de reojo- Que Odd se quede contigo.
-¿Qué?- el rubio volteó a ver molesto a su amigo- ¿Por qué todo yo?
-Porque tú eres el que se divierte aquí, tú eres al que Eini tendría que darle una buena lección, y tú eres el que se enojó con ella. Mejor cierren la boca y vámonos- dijo Yumi jalando del brazo a Ulrich para dirigirse hacia la torre. Algunos lásers rojos comenzaron a llover sobre ellos.
-¡A ellos déjenlos en paz, mugres moscas tontas!- dijo Eini lanzando uno de sus sables destruyendo a una de las avispas. Las dos restantes voltearon y comenzaron a dispararles a Eini y Odd. Ambos chicos esquivaron la ofensiva con gran agilidad y a su vez contraatacaron. Odd lanzó algunas flechas. Una de ellas dio en el blanco y acabó con el monstruo.
-Buen tino. ¿Sabes que si hubieses matado a una avispa de verdad habrías destruido un círculo ecológico?- dijo Eini.
-Tranquila, aquí hay tantos bichos que te aseguro que jamás van a estar en extinción- le contestó Odd dándose cuenta de que estaban conversando como si la chica ya formara parte de su equipo desde hacía mucho tiempo, y como si nada malo hubiera ocurrido entre ellos. Eini lanzó sus sables, la avispa los esquivó. La chica murmuró una maldición y volvió a lanzar sus armas, esta vez acertando y destruyendo a la última avispa.
-Se nota que Xana no ha perdido el tiempo, esos animalejos no eran tan duros la penúltima vez que entré aquí- dijo cerciorándose de que ya no hubiera ningún monstruo cerca.
-Vaya… ¿Y piensas contarme cómo es que conoces a Xana desde hace tanto tiempo?
-Mira, yo no soy su aliada, no importa lo que pienses. Pero mejor te lo explico allá afuera, tenemos que ir a ayudar a los demás. Además, eso no importa ahora- ya iba a echar a correr, cuando se detuvo y volteó hacia el chico- Hacemos un buen equipo¿sabes?- le dijo tendiéndole la mano, con un poco de melancolía en la voz. Odd se extrañó, pero tomó su mano sonriente.
-¡Ni que lo digas! Oye, siento haberme enfadado contigo antes de haber aclarado las cosas- le dijo con timidez.
-Jeje, los dos nos comportamos muy infantiles. Sólo espero que no hayan visto más de la cuenta en mi cuarto…- dijo como recordándolo de pronto. De haber podido, Odd se habría sonrojado hasta las orejas.
-¡Auch! Lo siento…
-Jeje, no hay problema. Ya vámonos- ambos echaron a correr para auxiliar a sus amigos.
Jeremie observaba sonriente la pantalla. Al parecer ya no habría problemas con Eini. Un ruido lo hizo sobresaltarse. Volteó a ver al lugar donde había provenido. Una especie de rata sin cola de color negro salió de un agujero en el piso. Otra más le siguió. Y luego otra, y otra… cientos de topos salieron del agujero y rodearon al chico. Jeremie alzó una ceja con desconcierto.
-¿Y ahora qué se supone que pretendes, eh, Xana?- dijo en voz alta.
Eini y Odd llegaron junto a sus amigos, que al parecer no les venía mal un poco de ayuda, pues seis avispas les estaban complicando mucho las cosas.
-¡Yupiiiiiii!- Odd esquivó algunos lásers de los bichos y destruyó a uno de ellos.
-Parece que te diviertes- le dijo Eini desde lejos mientras ella hacía lo mismo con otra avispa.
-¿Y por qué no¡Es muy divertido!
-Si, claro¡mientras no te den a ti!- Ulrich se unió a la conversación, desviando los ataques que iban hacia Aelita con su espada.
-¡Odd, no seas tan confiado y ten cuidado!- le dijo Yumi conteniendo el aliento al ver que uno de los lásers le daba en un brazo a su amigo.
-¡Oh, rayos!- al chico rubio ya no le dio tiempo de esquivar otro ataque y desapareció.
-Odd tonto- murmuró Yumi. Lanzó su arma y acabó con la avispa que había desvirtualizado a su amigo. Eini por su parte, había recibido un láser en el estómago al distraerse. Aún le dio tiempo de acabar con una de las avispas antes de ser desvirtualizada también.
-¿Qué rayos pasa aquí, Einstein?- Odd observaba parpadeando los cientos de pequeños animales que Jeremie alejaba de la computadora con una escoba. El genio volteó a verlo y se limitó a encogerse de hombros- ¿To-topos¿Xana controló topos!- dijo Odd acercándose a él pisando a uno de los pequeños animales, el cual soltó un chillido e inmediatamente fue pateado estrellándose contra la pared- Definitivamente le paso que controle a moscas, ratas, gusanos, cucarachas, lo que quiera… ¿pero topos?
-No tengo la menor idea de lo que pretende Xana, pero a este paso no creo que logre gran cosa. Por cierto, qué desconsiderado eres- le contestó su amigo al ver al pobre topo que había quedado panza arriba.
-Yo no tengo la culpa.
-¡Jeremie¡Eini ya va en camino con ustedes!- se oyó la voz de Yumi en el monitor.
-Bueno pequeños, me gustaría quedarme a jugar con ustedes, pero tengo que ir por una amiga mía.
-Ya no es necesario, Odd- Eini apareció por la puerta, observando de lado a lado la habitación infestada de topos con ambas cejas levantadas- ¿Se puede saber por qué invitaste a tus hermanos, Jeremie?
-Ja ja, muy graciosa. Mejor ayúdanos a alejar a estas cosas de la computadora- le contestó el chico de lentes.
-¿Para qué? Ustedes dos hacen un gran trabajo- la chica ya iba a empezar a patear a los animales como lo estaba haciendo Odd cuando una ligera sacudida de la habitación la hizo trastabillar- ¿Y ahora qué diablos…?- los topos comenzaron a introducirse en el agujero por el que habían aparecido. Los tres chicos los observaron hasta que el último topo se fue.
-Eini, seguro tú la conoces mejor que nosotros. ¿Qué crees que esté planeando Xana?- la pelirroja se puso seria.
-Se puede esperar cualquier cosa. No hace nada porque sí, esto debe ser un plan muy bien elaborado.
-¿Topos? Yo sigo pensando que son muy inút…- empezó a decir Odd, pero otro temblor lo calló. Del techo comenzaron a caer algunas rocas. Los chicos se pegaron a la pared lo más que pudieron.
-¿Me decías, amigo?- le dijo Jeremie.
-¡Diablos!
-¡A-ahora comprendo! Esos topos pueden destruir por completo la cimentación de la fábrica entera. Ya no hay que suponer nada¡Xana quiere destruir este lugar!- dijo Eini viendo hacia el techo con temor.
-¡Más bien nos quiere aplastar a nosotros¿Para qué destruirse a sí misma¿E-Eini¡Eini!- Jeremie observó con terror que una gran piedra había golpeado a la pelirroja en la cabeza y que ésta yacía inconsciente junto a él.
-Maldita Xana, malditos topos…- dijo Odd con rabia y se apresuró a cubrir con su propio cuerpo a la chica.
-¡Chicos, dense prisa!- gritó Jeremie haciendo lo mismo.
-¡Aelita, estamos perdiendo mucho tiempo, ve a la torre!- gritó Yumi desviando algunos ataques. La pelirrosada asintió y echó a correr mientras una lluvia de lásers caía sobre ella. Uno de ellos iba directo a su espalda, pero fue detenido por Ulrich, quien se interpuso entre ella y el monstruo. Aelita por fin llegó segura a la torre, Yumi y Ulrich acabaron con los dos monstruos restantes. La torre recobró su aura azul en poco tiempo.
-¡Jeremie, la torre está desactivada!
Los dos chicos rubios se exaltaron al escuchar un estridente chirrido. Voltearon al techo, el cual en realidad ya no estaba y dejaba ver el piso superior, y vieron que una enorme viga de metal se desprendía del otro techo e iba directo hacia ellos.
-¿Jeremie¡Jeremie!
-¡Ya oí, Aelita, ya oí¡Regresar al pasado ahora!- gritó Jeremie justo a tiempo. La viga se detuvo a escasos centímetros de ellos. Los dos chicos suspiraron completamente aliviados y se desplomaron al lado de Eini. Inmediatamente fueron envueltos por la luz blanca que los llevaría tiempo atrás.
Eini comenzó a cobrar conciencia. Intentó incorporarse. Apretó los dientes a causa de un fuerte dolor que le oprimió la cabeza. Abrió los ojos lentamente. Aunque en una imagen un tanto borrosa, lo primero que vio fue el sonriente rostro de Odd junto a ella.
-¡Bienvenida, Bella Durmiente!- le dijo el chico con alegría.
-¿Dó-dónde estoy?- la chica miró a su alrededor y reconoció su cuarto.
-¡De vuelta al pasado!- el que contestó fue Ulrich, también sonriendo. Eini volteó y vio a Jeremie hablando por teléfono.
-Sí, sí, ella está bien. Es más, acaba de despertar- dijo el chico viéndola felizmente- Claro, Yumi. Nos vemos luego- dijo colgando y se aproximó a la pelirroja- ¿Cómo te sientes?
-Con un terrible dolor de cabeza, pero bien. Hacía años que no regresaba en el tiempo- le dijo la chica cerrando los ojos y acomodándose en su cama- Además, las piedras pegan duro- dijo sonriendo. Los chicos rieron.
-Bueno, el dolor se te pasará pronto, sólo necesitas descansar un poco.
-Eso espero… por cierto, me tienen que decir cómo aprendieron a usar a Xana- dijo abriendo un ojo.
-Emmm, bueno, pero eso será después. Por cierto¡bienvenida al equipo!- la chica miró a los tres sorprendida.
-¿A-al equipo?- se incorporó por completo esta vez sin prestarle atención al dolor de su cabeza.
-¡Claro! Ya que no quedan malentendidos y sólo nos falta explicar algunas cosas, no hay ningún problema- dijo Odd con singular alegría. Eini sonrió con sinceridad.
-Gra-gracias.
-No hay nada qué agradecer, amiguita- le dijo Ulrich.
-Bueno, para incluirte en todo este asunto, podemos comenzar con… ¿tienes celular?- preguntó Jeremie. La chica asintió sin caber en sí de felicidad.
