Capítulo 5: "Aclaraciones"
Eini intentó abrir los ojos. No lo logró. Sentía los párpados tan pesados que por un momento pensó que tenía plomo en ellos. Se tapó la cabeza con la cobija porque los rayos del sol ya le daban de lleno en la cara.
- "Un momento… un momento… sólo cinco minutos…"
No tuvo más remedio que salir de la cama antes de que se quedara dormida de nuevo.
-¡Es que no es justo!- se quejó el chico amargamente- ¡La misma clase tres veces!
-Vamos, Odd, velo por el lado bueno- dijo Ulrich encogiéndose de hombros pero con el ceño fruncido al igual que su amigo- Por lo menos ya sabes todo lo que la maestra va a decir, así que no tendrás que prestarle atención. Puedes tomarte una buena siesta.
-Sí, y si te hace alguna pregunta, ya sabes qué contestar- dijo Jeremie uniéndose a la conversación. Odd puso cara de sope.
-Sí claro, como si eso fuera tan… ¡Hola, Bella Durmiente!- dijo recuperando la alegría.
-Hola, pequeño- saludó la pelirroja- Espero que no se te haga costumbre lo de la Bella durmiente. Hola Ulrich, hola Jeremie.
-Hola, Eini- saludaron Ulrich y Jeremie al unísono. Notaron que su amiga iba caminando con los ojos cerrados.
-¿Y ahora qué te pasa? Pareces zombi- dijo Ulrich mirándola con extrañeza.
-Tú también lo parecerías si además de haberte golpeado en la cabeza, una máquina te hubiera acortado la noche.
-¡Hey, tengo una idea!- dijo Odd de pronto tronando los dedos- ¿Qué tal si después de clases vamos al parque? A todos nos hace falta un buen descanso, y ya estamos casi seguros de que Xana no nos va a atacar tres veces en un solo día.
-Emmm… no lo sé, Odd, Xana no es nada predecible. Y además…- comenzó a decir Jeremie algo inseguro.
-¿Y además qué, Einstein? A Xana por ahora se le debe haber secado el cerebro, tardará bastante en idear otro ingenioso plan- dijo Eini poniendo sus manos sobre los hombros del chico, le había encantado la idea del parque- ¿A qué le temes, Jeremie? Las torres, como puedo ver que bien ya has aprendido, sirven para controlar Lyoko. Aelita está segura dentro de ellas. Es ella la que te preocupa¿no?- le dijo muy cerca de su oído. Jeremie no pudo evitar sonrojarse.
-Es… que… no… es… Xana… ella…- intentó explicar con voz ronca. Sus amigos sonrieron con picardía.
-No hay nada qué temer. Y de todos modos si algo sucede, Aelita nos avisará¿no?- terminó la pelirroja separándose del chico- Ahora vamos a clases, le avisaremos a Yumi en la clase de Deportes- La chica entró al salón dejando a sus amigos tras de sí. Odd y Ulrich cruzaron miradas y luego voltearon hacia Jeremie con una sonrisa.
-…………¿Qué?- el muchacho se sonrojó aún más.
-Nada, nada- dijo Odd encogiéndose de hombros y entrando al salón tras a Eini. Ulrich lo siguió reprimiendo la risa. Sin más remedio, Jeremie fue tras ellos sabiendo que se iban a burlar de él por lo menos durante todas las clases.
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Aelita se encontraba en una de las torres de Lyoko, acostada hecha un ovillo. Estaba tarareando una canción que, según ella, jamás había escuchado, pero que de alguna manera sabía. ¿Por qué? No tenía ni idea. Últimamente nada le quedaba claro. Tenía la sensación de haber visto a Eini en alguna parte. Era imposible buscar en su mente, pues en realidad no había nada qué buscar, no había ningún recuerdo de antes de conocer a sus actuales amigos. ¿En verdad la conocía? Quizás en otra vida. Quizás en otro tiempo. Tal vez… y sólo tal vez. Siguió cantando para sus adentros esa canción que lograba alejar cualquier preocupación, duda o temor de su mente.
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-Esa idea es fantástica, Odd. Por lo menos usas tu cabeza para algo más que para peinarte- dijo Yumi sonriendo.
-Ja ja ja, muy graciosa, amiguita- Odd le enseñó la lengua.
-Hola, Ulrich querido- al igual que la vez anterior, Sissi apareció de la nada y se puso frente a Ulrich con la nariz a escasos centímetros de su cara. El chico sólo la miró un instante antes de rodearla y pasar de largo como si no la hubiera visto- ¡He-hey!- la chica se apresuró a ponerse de nuevo frente a él. Ulrich suspiró fastidiado.
-¿Ahora qué quieres?- le preguntó sin una pizca de amabilidad.
-¿Qué quiero? Pues vengo a hacerte la mejor de las ofertas que…
-Sissi… ¿Hasta cuándo vas a entender que…?- Eini se apresuró a darle un caderazo a su amigo y ocupar su lugar frente a la chica.
-Mira Sissi, antes de que él te mande a volar, quizá yo lo haga menos doloroso. Si me contestas algo, quizá, y sólo quizá, Ulrich salga contigo- Sissi abrió mucho los ojos- Dime¿por dónde pasa el río Congo?- Jeremie alzó una ceja.
-Por… por… ¡por España!- contestó rápidamente la hija del director. Yumi soltó una carcajada.
-No.
-¡Por China!
-No.
-¡Por Estados Unidos!
-No.
-¡Por Alaska!
-No.
-¡Por México!
-Ni remotamente cerca.
-¡Por Francia!- Odd le dio un codazo a Jeremie.
-Jeremie¿por dónde pasa el río Congo?- le dijo en voz baja a su amigo.
-Pues… por Congo.
-¡Jajajajajajajajaja!- Yumi tuvo que recargarse en Jeremie para no caer al piso- ¡Pero si ésa hasta yo me la sé!
-¡Por Egipto!
-No.
-¡Por Rusia!
-No.
-¡Me rindo!- dijo Sissi resignada y ya con los ojos rojos de furia.
-¡Qué lástima!- dijo por fin la pelirroja y dio media vuelta.
-¡Me las van a pagar!- después de ver con rabia a Yumi y a Eini, Sissi hizo lo mismo y se alejó de ahí. Yumi aún seguía carcajeándose cuando fue a abrazar a su amiga.
-¡Jajajajajaja! Eini¡ésa estuvo genial!- dijo aún sin poder contener la risa.
-Cuando quieras- contestó la pelirroja. Los cinco chicos comenzaron a caminar planeando todo lo que harían cuando sonara la campana anunciando el fin de clases.
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Mirando las estrellas
Imagino que en una de ellas
Debes estar tu alma
Acunándome en mi soledad.
-"¿Qué son las estrellas?"- se preguntó Aelita- "¿Qué es alma? Ya no estoy sola, tengo a Jeremie y a los demás."
Siguió cantando.
Nadie me mira,
Nadie me escucha
Sólo tú estás junto a mí.
-"¿Pero quién eres tú?" "¿Eres un sueño¿O… una ilusión?"
Porque sé que estás junto a mí
Siempre acompañándome
Nada tengo que temer.
Yo sé que nada tengo que temer…
-"Sé que estás junto a mí… seas quien seas. Y te encontraré."
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-A lo lejos se veía el tan ansiado parque, con unos cuatro niños en los columpios jugando a ver quién arrojaba su zapato más lejos.
-Veamos quién llega más rápido¿vale?- les dijo Odd a sus amigos entusiasmado.
-En realidad no me gusta mucho el deporte- dijo Jeremie inseguro.
-Bien, entonces: en sus marcas…- comenzó a decir Yumi. Todos se prepararon para salir corriendo.
-Eh, Yumi, yo… no…
-Listos…
-Esperen, chicos, yo…- todos siguieron sin hacerle caso al rubio.
-¡Fuera!- Eini se encargó de jalar del brazo a Jeremie y correr lo más rápido que podía.
-¡Ahhhhh!- Jeremie no tuvo más remedio que correr si no quería tropezar.
-¡Jajaja, les voy a ganar!- gritó Ulrich.
-¡Ni lo creas, aquí no tienes tu súper velocidad!- grito también Yumi dándole alcance al castaño.
-¡El gran Odd esquiva a sus contrincantes y toma la ventaja, la meta está a sólo unos metros de él, se prepara para ganar y…!
-¡Y Yumi gana!- la japonesa extendió los brazos alegremente y luego se sentó en una banca para descansar.
-Jeje, y las estadísticas son: Yumi, primer lugar, Odd, segundo lugar, Ulrich, tercer lugar, Eini y Jeremie, cuarto lugar- dijo Odd alegremente.
-Claro, claro, eso fue culpa de Jeremie- dijo la pelirroja cruzando los brazos.
-¡Hey, yo dije que…!- protestó el chico de lentes.
-¿Quién quiere ir al pasamanos?- preguntó Ulrich sin hacerle caso a su amigo.
-¡Yo!- contestaron Eini, Odd y Yumi al unísono, y los cuatro muchachos corrieron nuevamente, hacia los juegos. Jeremie suspiró. Sus amigos estaban tan entusiasmados que sospechó que aquél sería un largo día.
Después de eso, los chicos simplemente se dedicaron a jugar y a divertirse como niños pequeños. Hicieron competencias en todos los juegos que había: los pasamanos, las resbaladillas, el sube y baja, la ruleta, etc, etc. Cuando por fin los columpios fueron desocupados, Eini se apresuró a sentarse en uno de ellos. Sus amigos la siguieron.
-Bien, Eini, creo que es hora de que empieces a contarnos todo lo que sepas de Xana y Lyoko- dijo Odd. Los demás asintieron y rodearon a la chica. Eini suspiró.
-Claro, por dónde empiezo…
-¿Cómo es que conoces Lyoko y a Xana?- preguntó Jeremie.
-Ah, eso. Pues… - tomó aire- mi papá fue el que creó a Xana- dijo la pelirroja con orgullo.
-¿Tu papá!- preguntaron al unísono los otros chicos como para confirmar lo que habían escuchado, con la boca abierta.
-Eini¡tu padre era un genio!- exclamó Jeremie. Eini inclinó la cabeza a un lado.
-Bueno, no lo hizo solo, había alguien más. El problema es que no recuerdo el nombre de su compañero.
-Bueno, sea quien fuere, tu padre y él eran brillantes- dijo Ulrich alegremente.
-Sí, lo sé- dijo la joven sonriente.
-¿Pero para qué creó Lyoko?- inquirió el muchacho de lentes.
-Bien, al principio Lyoko era simplemente eso: Lyoko. Un programa de realidad virtual donde podías entrar las veces que quisieras. Mi padre y su amigo sólo tenían la meta de crear el mejor juego de realidad virtual del mundo, donde cada detalle pareciera tan real que ni siquiera te dieras cuenta de que tú mismo te convertías en parte del programa. Comenzaron creando el mundo de Lyoko, dividido en áreas, ustedes saben: el bosque, el desierto, la zona polar… luego vinieron los monstruos: las avispas, los cangrejos, las cucarachas… etc, etc- sus amigos la escuchaban con atención. Eini tomó aire- Y luego vino Xana. Se puede decir que ELLA es el TODO de Lyoko. El amigo de mi padre la creó para controlar las funciones de Lyoko, las zonas, los monstruos… es una especie de programa central para que Lyoko esté en equilibrio. Bien, controla las funciones, pero no puede modificar nada- Jeremie pensó un instante.
Pero, Eini, hay algo que todavía no tengo claro- dijo el chico de lentes con una mano en la barbilla- Si Xana es el centro de todo¿no deberían haberla creado antes que a Lyoko? Y además yo creía que las torres eran las que controlaban las zonas de Lyoko, por eso Xana sólo podía controlar una cada vez- los otros jóvenes asintieron.
-Cuando Lyoko estuvo completo, mi padre se dio cuenta de que sus funciones eran demasiadas para ser controladas por un solo ordenador. Xana es un súper procesador que hace que Lyoko funcione correctamente. Y ahora, las torres solamente controlan ciertas zonas, como bien ustedes ya saben. Y creo que también se han dado cuenta de que Xana las usa de vínculo con el mundo real, simplemente- sus amigos asintieron nuevamente- Las torres en un principio tenían esa simple función: controlar los monstruos de ciertas zonas. Hay muchas cosas que mi padre hizo y jamás me quedaron muy claras- dijo moviendo la cabeza negativamente- Al principio todo iba muy bien, hasta que el amigo de mi padre se dio cuenta de que Xana era tan poderosa…
-Que podía regresar en el tiempo- dijo Jeremie completando la frase.
-Así es… A partir de aquí todo es muy confuso para mí. Ya no supe muchas cosas. De hecho, mi padre jamás me habría dicho sobre el poder de Xana, yo me enteré por mi propia cuenta.
-Eso quiere decir que Aelita originalmente no fue creada con Lyoko¿no es así?- inquirió el rubio.
-Eso creo… además, Xana sólo puede controlar Lyoko, no otros programas, así que es obvio que Aelita no puede ser controlada por Xana puesto que no es parte de Lyoko. Pero no tengo idea de por qué está ahí.
-Hay otra cosa, Eini- dijo Jeremie preocupado- Xana de alguna manera sí controla a Aelita. Una vez la materializamos y…- Eini dio un respingo.
-¿Que hicieron qué!- casi gritó, estupefacta. Sus amigos dieron un brinco.
-Tranquilízate. Dije que la materializamos- Eini pareció intentar digerir sus palabras.
-Oye, había oído acerca de virtualizar personas en Lyoko, no de materializarlas- Yumi sonrió y le palmeó la espalda a su amiga.
-Vamos, aún no conoces perfectamente bien a Jeremie. Al igual que tu padre, es un genio- dijo la japonesa orgullosamente.
-¡Ahem!- el aludido se sonrojó visiblemente.
-Pues ya lo voy notando…- la pelirroja también sonrió- Bueno¿me decías?
-Sí, una vez materializamos a Aelita. Acordamos que en cuanto ella estuviera aquí, apagaríamos a Xana- dijo el chico con pena. Eini volteó hacia el suelo- El problema fue que nos dimos cuenta de que si Xana desaparecía… Aelita también se iría. Supongo que Xana ya sabía que intentaríamos sacar a Aelita de Lyoko- Eini miró a los otros muchachos confusa- Xana infectó a Aelita con un virus, tanto en Lyoko, como en el mundo real.
-Xana es un programa, no un virus. Y no puede crear virus- protestó la chica de inmediato.
-Pues de alguna manera lo hizo- concluyó Jeremie encogiéndose de hombros. Eini suspiró.
-Bueno, sí que nos aclaraste muchas cosas, Eini- dijo Odd alegremente.
-¡Qué bien! Ya que todos nos queremos y nos hablamos y… ya saben… ¡A seguir disfrutando del día!- Yumi jaló a Jeremie hacia una barandilla y lo retó a que se colgara de ella. La pelirroja se mecía suavemente en el columpio observando a sus amigos con una sonrisa.
-Gracias, Odd- le dijo Eini a su amigo.
-¿Gracias¿Por qué?- inquirió el muchacho.
-Hacía demasiado tiempo que no me divertía tanto. Muchas gracias.
-Bue, no tienes nada qué agradecer- el rubio le guiñó un ojo. Eini asintió y se dedicó a mirar a su alrededor. Dos chicos que iban llegando al parque le llamaron la atención.
-Oigan, muchachos¿qué no ellos van en nuestro salón?- preguntó la chica sin apartarles la vista. Odd y Ulrich miraron hacia donde su amiga lo hacía. Al ver de quiénes se trataba, los dos cruzaron miradas y se apresuraron a jalar a la pelirroja lejos de la vista de los recién llegados- ¿Y-y ahora qué pasa?
-Eini, por nada del mundo se te ocurra acercarte a ellos- dijo Ulrich tomándola de los hombros.
-¿Y por qué no?- la chica alzó una ceja.
-Pues porque ellos son amigos de nuestra peor enemiga- le respondió Odd.
-Ah, son amigos de Xana- dijo Eini con burla.
-¡Oh, vamos Eini! Tú sabes a quién nos referimos.
-¿Pero por qué no me debo acercar a ellos?
-A Sissi se le puede ocurrir cualquier mala jugada. Y Herve y Nicolas son como sus títeres- contestó el castaño. Odd asintió cruzando los brazos. Eini miró a ambos y sonrió.
-Ah, no se preocupen sé defenderme sola. No me hará daño platicar un poco con ellos- Odd se quedó con la boca abierta- Con permiso- Ulrich abrió mucho los ojos. Odd se apresuró a ponerse frente a ella.
-¡No es justo, Eini! No llevas ni dos semanas siendo nuestra amiga¡y ya quieres ir a buscar otros amigos!- dijo Odd con amargura.
-Ay, eres un exagerado- la chica se mostró divertida ante la actitud de su amigo.
-¿Pero no vas a cambiarnos?- el chico puso cara de perro triste. Ulrich se rascó la cabeza y se puso a ver su muñeca como si tuviera un reloj.
-Jaja, no te preocupes, sólo será un momento.
-De acuerdo, está bien- el rubio agachó la cabeza resignado.
-¿Ya terminaste?- preguntó Ulrich al rubio. Éste asintió y ambos chicos se alejaron caminando.
-"Bien, aquí vamos"- pensó Eini cuando ya sus amigos estaban junto a Jeremie y Yumi. Se acercó a Herve y a Nicolas, los cuales estaban de espaldas a ella no se percataron de su presencia- ¡Hola!- los chicos voltearon. Casi se caen al verla.
-Eh-eh, ho-hol… yo… emmm… yo…- Herve se sonrojó de inmediato. Después de tartamudear un poco sin lograr articular una sola palabra completa, suspiró. Nicolas no se sorprendió tanto, pero se limitó a permanecer en silencio esperando a que su amigo dijera algo por los dos. Eini alzó una ceja al ver que ambos chicos se quedaban callados.
-¿Y bien¿Piensan decir algo o quieren que me vaya?- dijo cruzando los brazos.
-¡No!- dijo Herve al instante- Quiero decir… este… - el chico puso sus dedos índice punta con punta.
-Pueden empezar diciéndome cómo se llaman- sonrió Eini.
-Él es Herve, y yo soy Nicolas- dijo el otro chico señalando a su amigo y a sí mismo- Y tú eres Eini- dijo afirmando más que preguntando.
-Así es. Parece que todos me conocen y yo no conozco a nadie- dijo la chica pensativa.
-Es que no pasas desapercibida…- dijo el chico de lentes sin poder contenerse. La pelirroja se sorprendió un poco ante este cumplido, pero sonrió, al igual que Nicolas, aunque éste lo hizo con picardía. Herve bajó la mirada más sonrojado de lo que ya estaba al darse cuenta de lo que había dicho.
-¿Quieren platicar un poco?- Eini se dirigió nuevamente hacia lo columpios seguida por los dos chicos, Nicolas codeando a su amigo.
Odd miraba a Eini y sus acompañantes con cara de que en cualquier momento iría a ahorcar al chico de lentes. Ulrich se acercó a él y le puso una mano en el hombro. Odd agradeció aquella interrupción, pues sentía que de un momento a otro no iba a resistir más y, efectivamente, iría a ahorcar a Herve por estar viendo a Eini como si de una súper estrella se tratara.
-Odd, creo que será mejor que dejes de ver a ese trío antes de que cometas un homicidio- le dijo el castaño.
-Me leíste la mente, amigo.
-¿Pero qué es lo que tanto te molesta? Herve y Nicolas son demasiado tontos, y la verdad no creo que quieran hacerle nada a Eini- dijo Ulrich observando a los tres chicos que estaban en los columpios.
-Nicolas es un estúpido. Herve es mi problema. ¡Tan sólo míralo¡No le despega la mirada a Eini!- Ulrich suspiró y volteó hacia las canchas de juego.
-Por allá están jugando fútbol¿quieres que vayamos?
-Todo con tal de no convertirme en asesino- Odd fue tras Ulrich, aunque seguía vigilando a Eini y a los dos chicos por el rabillo del ojo.
Todavía pasó un buen tiempo en el parque, con Odd y Ulrich jugando fútbol intentando que Odd no cometiera un asesinato en público, Yumi sin dejar en paz a Jeremie retándolo a cualquier cosa, y Eini platicando con Herve y Nicolas acerca de la escuela, los maestros, la familia…
-¿Y qué hay de tu familia¿No tienes hermanas o hermanos?- la chica de pronto se puso seria y bajó la mirada.
-Yo… ya debo irme, tengo algunos asuntos pendientes. Gracias por platicar conmigo- dijo sonriendo como si nada. Herve y Nicolas cruzaron miradas y se encogieron de hombros.
-Gracias a ti. Nos vemos mañana en la escuela- Eini asintió y fue corriendo junto a sus amigos.
-¡Vaya, ya era hora!- dijo Odd cruzando los brazos. Yumi le dio un codazo.
¿Nos vamos?- sin esperar respuesta, Eini dio media vuelta y comenzó a caminar. Sus amigos la siguieron. En el trayecto que siguieron del parque a la escuela, no dijo ni una sola palabra, sus amigos estaban muy animados platicando de lo bien que les había ido, Eini les respondía con una sonrisa a todo. Al llegar, la pelirroja fue directamente a encerrarse a su cuarto.
Porque sé que estás junto a mí
Siempre acompañándome
Nada tengo que temer.
Yo sé que nada tengo que temer…
"Yo sé que… no tengo nada qué temer"- pensó Eini abrazando su almohada- "Sé que estás junto a mí… sé que estás junto a mí"- abrazó con más fuerza el cojín. Una solitaria lágrima corrió por su mejilla.
"Estaremos juntas para siempre… y para siempre es mucho tiempo"
-"Pero no te quedaste conmigo para siempre…"
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Kiaaaaaaaaaa!
Ya lo sé, ya lo sé! Soy terrible con esto de las actualizaciones. Pueden aventarme jitomates, abuchearme o insultarme (no, eso no), si quieren patearme por la tardanza, pero la verdad es que estuve peleada con mi inspiración por casi un mes. Pero aquí esta! Ya no se pueden quejar de que se quedaron con el capi anterior. Bueno, aquí les dejo con mi versión de cómo fue creada Xana, respondo a eso de por qué Eini conocía Lyoko pero no a Aelita, etc, etc.
Aunque muy tarde, pero ya cumplí con mi parte de actualizar el fic, ahora les toca a ustedes con sus reviews! Prometo que no tradaré con el próximo!
Bueno, ya sin nada interesante qué decir, me despido de ustedes.
Disfruten de la vida y que tengan un buen día!
KaTmAi