Hola chicos, me he estado pensando cambiar de horror a misterio pero mejor le dejo así, hay que honrar las fechas. Y les doy mil gracias a todos los que me dan ánimos y más aún a mi sueño de ser escritora. Gracias. Y bueno, vamos a empezar, tengo muchas historias así que no se extrañen que actualice cada tanto. Agradecimientos a Thomas Astruc y compañía y sin más que decir… COMENZAMOS!
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Capítulo 2.
Número equivocado.
Adrien miró su teléfono mientras le quitaba la memoria para instalarlo a uno nuevo.
-Listo, ya quedó todo. Que desperdicio.
-Después de todo lo más caro no es lo mejor.- le dijo Nino y Adrien sonrió.
-Ni que lo digas.- era la hora de receso y se encontraban sentados dentro del salón para evitar a Chloe y alguna que otra admiradora del rubio, Nino intentaba animar a su amigo cuando el moreno divisó pasar por la puerta a Alya hablando con Marinette.
-¡Hey chicas!- Marinette de inmediato se tensó al ver a Adrien y Alya al verla tan tiesa la arrastra dentro del salón.
-Hola Nino, Adrien. ¿Qué hacen?
-Dándole sepultura al teléfono de Adrien.
-¿Le paso algo?- preguntó con timidez Marinette a lo que el rubio contestó.
-Pues la pantalla táctil ya no funciona bien y papá me compró otro nuevo.
-Vaya trasto.- dio Alya.
-Lo sé, me parece un desperdicio.- dijo dejando el viejo teléfono a un lado de él sobre la mesa.
-Oye viejo, ¿qué tal si vamos por unos zumos para pasar el rato los cuatro?
-Buena idea Nino.- dijo con una sonrisa la morena sabiendo lo que quería Nino.- Enseguida regresamos chicas.- ambos chicos salieron y de inmediato ambas chicas se miran una a la otra.
-No lo puedo creer creo que me dará algo.
-Tranquila Marinette. Esta vez tienes apoyo, y vas a invitar a Adrien al cine hoy.
-T-Tienes razón, debo al menos intentarlo.
-¡Eso! Vamos Marinette, tu puedes.- de repente el teléfono del rubio comenzó a vibrar, Marinette y Alya miran pero se trata de un número desconocido pero el teléfono parecía negarse a enviar la llamada a buzón y la vibración era algo molesta sobre la mesa de madera.
-Voy a contestar.- dijo Marinette.
-Dice número desconocido.
-Pero podría ser importante Alya.- Marinette tomó el teléfono y contestó teniendo problemas con la pantalla táctil que parecía no querer funcionar del todo.- ¿Aló?
-Disculpe...- habló una mujer del otro lado de la línea.- ¿El señor Antoine Dupree?
-Lo siento numero equivocado.
-Oh, le pido una disculpa. Gracias.- la mujer colgó y Marinette vio a Alya.
-Solo era un número equivocado.
-Y yo pensando que podría ser una acosadora.- le guiñó el ojo y Marinette hace un mohín.
-¡Alya!
-¿Marinette?- Adrien y Nino entraban al salón con una lata de zumo en cada mano, Adrien miraba curioso a Marinette.- ¿Qué haces con mi teléfono?
-Yo... lo siento Adrien, sonó y como no dejaba de sonar contesté pero era un numero equivocado. No fue nada.
-¿Cómo?
-Sí, era una mujer preguntando por alguien llamado Antoine Dupree. Pe-Pero como dije fue numero equivocado. ¿Estás molesto?- Adrien estaba pasmado con una mirada de incredulidad.
-Vamos Adrien, no es para tanto.- le dijo Nino.- Como dijo, fue numero equivocado, no pasó la gran cosa.- Adrien parecía confundido y Marinette parecía que entraría en pánico en cualquier momento.
-Adrien lo siento mucho, te juro que de haber sa-sabido que no querías que nadie contestase tu teléfono... yo no quería, bueno, sí, pero de haber sabido que no debía... l-lo siento de verdad.- se disculpó la pobre y Adrien parece darse cuenta del estado de la misma, la toma del hombro con delicadeza.
-N-No Marinette, calma no es eso. Es solo que... lo que me dicen no puede ser.
-¿A-A que te refieres?- preguntó ahora Marinette mirando fijamente a Adrien.
-B-Bueno veras, el teléfono como ya no funcionaba bien lo dejé encendido con la poca batería que tenía. Hasta hoy en la mañana que mi padre me regaló el nuevo teléfono la batería ya estaba por completo descargada y le acabo de quitar la memoria y demás para ponérselo al nuevo.- Marinette entonces pareció captar lo que quería decir.
-O sea que...
-Oh viejo...- Nino miró a las chicas mientras se quedaba igual de impresionado y algo asustado como Adrien.- Alya ¿esto es una broma verdad?
-¿Me crees capaz de bromear con algo así Nino? Ni siquiera sabíamos que ese era el viejo celular, solo lo vimos encenderse de repente.- se justificó Alya sin creerse lo que acababa de pasar. Marinette parecía haberse quedado en blanco hasta que se dio cuenta que todavía tenía el teléfono en su mano y de un grito lo dejó caer en el escritorio ante la mirada de todos. Después de clases Adrien tiró el teléfono en un lugar de reciclaje y Plagg lo estuvo molestando que un fantasma le llamaría para pedirle su autógrafo, era de más decir que aquello no le causó nada de gracia al rubio que ahora miraba su teléfono nuevo con cierta desconfianza. Mientras Marinette no paraba de pensar, ¿cómo había pasado eso? ¿Quién había sido la mujer que llamó? ¿Quién era Antoine Dupree? Tikki solo le dijo que aparte de los kwamis existían cosas en este mundo que son imposible de explicar tanto buenas como malas. Marinette no durmió mucho esa noche. Al otro día bajó las escaleras y una sorprendida Sabine le sonrió.
-Vaya, buenos días Marinette, hoy madrugaste.
-No dormí mucho, mamá. Creo que necesito un café cargado si quiero aguantar este día.- Sabine mira a su hija y luego su esposo también se acerca.
-¿Paso algo malo? ¿Qué te preocupa mi niña?- preguntó un preocupado Tom que no le gustaron las sombras bajo los ojos de su pequeña.
-Pues... pasó algo extraño ayer.- iba a contarles a sus padres su extraña experiencia mientras tomaba un vaso de zumo cuando algo capta su atención en el televisor encendido donde veía a la señora Chamack dar el reportaje matutino.
"El día de ayer cerca de medianoche, casi a las afueras de la ciudad un conductor perdió la vida al volcarse su auto, las autoridades dicen que se debió al exceso de velocidad y a la distracción del conductor, un testigo dijo que el conductor hablaba por teléfono al momento de perder el control de su automóvil. El fallecido responde al nombre de Antoine Dupree de 28 años de edad, seguiremos con la nota cuando tengamos más detalles."
Marinette tiró el vaso de jugo apenas y creyéndose lo que veía en las noticias, un auto hecho pedazos y la noticia del porqué del probable accidente. Adrien casi se ahoga con los cereales ante la mirada atónita de Natalie que tuvo que ayudarle para que no se ahogara. Nino estaba con la cuchara de los cereales a unos centímetros de su boca abierta y Alya que apenas iba de salida se quedó congelada en medio de la sala de su sala tapándoles la vista a sus hermanas. ¿Qué rayos paso? Ya preguntarían a sus kwamis pero por ahora lo único que sabían era que el teléfono de Adrien recibió una llamada imposible, Marinette habló con una posible fantasma y que ahora un tal Antoine Dupree había sufrido un horrible accidente. Y se preguntaron ¿que pudo haber hecho ese hombre para sufrir aquel fatal desenlace? Tal vez algunas cosas es mejor no saberlas, aquello será una experiencia aterradora que compartirían un gato y una mariquita esa noche y tal vez por un tiempo serian un tanto renuentes al contestar sus teléfonos celulares.
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Y… espero les haya gustado, gracias a todos por sus reviews. Y espero les siga gustando cada una de las historias que mostrará los miedos y experiencias terroríficas. Nada de tomatazos, dejen review y sin más qué decir… UN ABRAZO! UN GUSTAZO! Y HASTA LA SIGUIENTE! MUAJAJAJAJAJA!